Luis Almagro demuestra una vez más el nefasto papel de la OEA, al sugerir que todas las

opciones deben ser utilizadas contra Venezuela, entre ellas la intervención militar.

El papel de la OEA fue ominoso a lo largo de los años, agrediendo a los pueblos y convalidando
a regímenes opresivos, entre ellas las dictaduras militares que sufrió el sur del Continente.

Hoy Almagro, apoyándose en gobiernos que oprimen a su pueblo, que son responsables de
asesinatos y desapariciones, como el colombiano –que incumple el acuerdo de paz con las
FARC-EP- lanza ataques contra Cuba y Venezuela.

Hace años que los pueblos dieron la espalda a la OEA, pero hoy llamamos la atención frente a
las amenazas de intervención militar contra cualquier pueblo.

El pueblo venezolano tiene el pleno derecho a elegir su camino sin intromisión alguna, ni de los
EEUU, ni de la putrefacta OEA.

¡Proletarios de todos los países, uníos!

Sección de Relaciones Internacionales del Partido Comunista de México