LA ADORACIÓN

La adoración es una conexión de espíritu a Espíritu.

La adoración es el ambiente en el cual se disfruta la presencia de Dios.

Conocemos íntimamente a Dios por medio de la adoración.

La unión sexual es una relación que trae intimidad entre el hombre y la mujer. La Biblia
le llama a esto “conocer”, lo que indica que por medio de la unión sexual las almas del
hombre y la mujer se ligan (y ya no son dos, mas serán una sola carne).

“Por tanto, dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y serán

una sola carne”. Gen 2:24

“Así que no son ya más dos, sino una sola carne; por tanto, lo que Dios juntó, no lo
separe el hombre”. Mat 19:6

La adoración es el vínculo que conecta nuestro espíritu con el de Dios para ser uno con
él y parecernos más a él. De ahí el término “conocer” o “comunión íntima”.

En la adoración nuestro espíritu se somete al Espíritu de Dios y sintonizamos nuestra

vida, metas, planes, recursos y dones a Dios.

La adoración es una rendición total.

La adoración es un servicio a Dios incondicional.

La adoración es un nivel de oración de grado mayor, donde la expresión es más que

verbal, corporal y sentimental.

La adoración es una comunicación espiritual.

La idolatría es la manera en que el diablo pretende robar la adoración; por eso es tan
abominable este pecado para Dios.
El diablo anda buscando la adoración de los jóvenes a través de la música,
enrolándolos en el satanismo y distintas prácticas ocultistas, el sexo y la vida
desenfrenada.

El Padre anda buscando verdaderos adoradores que le adoren en espíritu y verdad.

¿Tienes tú la estampa de adorador? Comienza a fluir en el espíritu de adoración.

“Mas la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos adoradores adorarán al
Padre en espíritu y en verdad; porque también el Padre tales adoradores busca
que le adoren. Dios es Espíritu; y los que le adoran, en espíritu y en verdad es
necesario que adoren”. Juan 4:23, 24