Está en la página 1de 13

o incluso más (10

a 10

12

veces).Como todo verdadero catalizador, las enzimas muestran las siguientes propiedades:

1.Están presentes en pequeñas cantidades.

2.No sufren alteraciones irreversibles en el curso de la reacción y por lo tanto, cada molécula
deenzima puede participar en muchas reacciones individuales.

3.No tienen efecto sobre la termodinámica de la reacción.

4.Tiene gran poder catalítico.

5.Son catalizadores en las reacciones químicas de los sistemas biológicos.

6.Poseen un elevado grado de especifidad de sustrato.

7.Funcionan en soluciones acuosas en condiciones suaves de pH y temperatura.

8.La mayoría de las enzimas son proteínas ;

•La función depende de la integridad de la conformación proteica nativa

•Existen enzimas que son proteínas simples y otras que requieren componentesquímicos
adicionales:

Cofactores:

•Holoenzima/ Apoenzima-iones inorgánicos-complejos orgánicos coenzimas gruposprostéticos

9.Las enzimas se clasifican según la reacción

Las enzimas son proteínas catalizadoras que aumentan la velocidad


de una reacción química y no se consumen durante la reacción que
catalizan. Nota: algunos tipos de ácido ribonucleico (ARN) pueden
actuar como enzimas, normalmente catalizando la escisión y síntesis
de enlaces fosfodiéster.
PROPIEDADES GENERALES
•AUMENTAN LA VELOCIDAD DE REACCIÓN
-De 106 a 1012 veces vs sin enzima.
-Aún más rápido que los catalizadores químicos.
•CONDICIONES DE REACCIÓN
-Temperatura 25-40 ºC (algunas hasta 75 ºC)
–pH neutro, la mayoría 6.5 – 7.5
-Presión atmosférica normal. 23
CAPACIDAD DE REGULACIÓN
-Por concentración de sustrato.
-Por concentración de enzima.
-Por inhibidores competitivos (semejantes al sustrato).
-Por inhibidores no competitivos (modificación covalente de la
enzima).
-Por regulación alostérica.
ALTA ESPECIFICIDAD DE REACCIÓN
-Interacción estereoespecífica con el sustrato.
-No hay productos colaterales.
ENZIMAS
PROPIEDADES GENERALES
Una enzima es una proteína que actúa como catalizador biológico,
llevando a cabo reacciones bioquímicas a muy altas velocidades, no
se consume durante la reacción y en general presenta un elevado
grado de especificidad. Las enzimas así como cualquier otra
estructura presentan propiedades generales que las logran
caracterizar en su totalidad.
1) Son los catalizadores de las reacciones químicas de los
sistemas biológicos.
Los catalizadores son sustancias que modulan o influyen en la
velocidad de las reacciones sin alterar su punto de equilibrio. Los
únicos catalizadores del mundo son las enzimas, estas aceleran las
reacciones químicas de los sistemas biológicos, participan en una
reacción y experimentan cambios físicos durante ella, pero regresan a
su estado original cuando la reacción termina. Las enzimas hacen
posible la vida en la tierra; en ausencia de estas, la mayoría de las
transformaciones químicas requeridas para mantener activas las
células tardarían mucho tiempo en efectuarse o simplemente no
procederían.
2) Las enzimas aceleran las reacciones químicas de los sistemas
biológicos.
Las moléculas en enzimas son catalizadores extraordinarios, muy
eficientes para acelerar la transformación de sustratos en productos
finales. Una sola molécula de enzima puede efectuar el cambio de 10
000 a 1 millón de moléculas de sustrato por minuto.
3) No cambian la constante de equilibrio de las reacciones que
catalizan.
La concentración de la enzima no tiene efecto sobre la constante de
equilibrio. Dicho de otra manera, puesto que las enzimas afectan a las
velocidades y no a las constantes de velocidad, ellas no pueden
afectar a Keq (constante de equilibrio), que es una relación de
constantes de velocidad. De aquí que la Keq de una reacción sea la
misma independientemente de que se alcance el equilibrio con
catálisis enzimática o sin ella.
4) Poseen un elevado grado de especificidad de sustrato
La gran mayoría de las enzimas tiene la capacidad de catalizar
reacciones más o menos específicas; es decir, su intervalo de acción
se limita a un determinado tipo de compuesto que debe reunir ciertas
características para que pueda ser utilizado como sustrato. En
concreto esto significa que las células generalmente producen
diferentes enzimas para cada compuesto que metabolizan. Además,
cada enzima interviene en un solo paso o cambio del sustrato.

5) La mayoría de las enzimas son proteínas.


Todas las enzimas se presentan como proteínas, tienen una estructura
tridimensional globular, están formadas generalmente por una sola
cadena
polipeptídica, y sólo logran ser activas cuando los polímeros
desarrollan una conformación que permite establecer su centro activo.
La mayoría de las enzimas están constituidas por más de 100
aminoácidos, los cuales confieren a la molécula una masa mayor de
10kDa y un diámetro de 25Å.
6) No se consumen ni se alteran durante el proceso químico que
están catalizando, pudiendo actuar una y otra vez.
Las enzimas no se consumen ni se alteran durante la reacción, por lo
que pueden actuar en pequeñas cantidades ya que una misma enzima
puede catalizar varias reacciones.
7) Aceleran la velocidad de la reacción al disminuir la energía de
activación.

Las enzimas son moléculas que están para disminuir la energía de


activación solo de las reacciones necesarias para la supervivencia
celular.
MI BIOLOGIA
Jueves 10 de diciembre 2015

FACTORES QUE INFLUYEN EN EL TRABAJO ENZIMÁTICO

Debido a su naturaleza química, a las enzimas les afectan los mismos


factores que alteran a las proteínas; por esta razón, cada una de ellas
requiere de ciertas condiciones para trabajar óptimamente como la
temperatura, el pH, la fuerza iónica, etcétera. Otros factores que
influyen en el trabajo enzimático son: concentración de la enzima y
concentración del sustrato.
1. Efecto de la temperatura.

Como sucede en la mayoría de las reacciones químicas, la velocidad


de las enzimas aumenta con la temperatura, debido al incremento en
la energía cinética de las moléculas reactantes (en general, por cada
10ºC de incremento, duplica e incluso triplica la velocidad de reacción),
pero esto ocurre sólo en el intervalo de temperatura en el que la
enzima es estable y retiene su capacidad catalítica; en casos
extremos, cuando se incremente mucho la temperatura, se favorece la
desnaturalización y consecuentemente esta proteína pierde su
capacidad catalizadora. Por esta razón, cada enzima tiene un intervalo
óptimo de temperatura en el cual se logra la mayor actividad; la
mayoría tiene su temperatura óptima entre 30oC y 40oC, y se inactiva
a más de 55oC. La desnaturalización puede ser reversible o
irreversible, por lo que la enzima en ciertas condiciones, llega a
recuperar su función después de un tratamiento térmico.

Habitualmente cuando el efecto de la temperatura no es muy intenso,


se puede regenerar nuevamente su actividad al adquirir otra vez su
estructura tridimensional de origen. Pero, a medida que esta es mayor,
se favorece la inactivación irreversible y el sitio activo se pierde sin
tener la oportunidad de regenerarse al enfriarse el sistema.

Habitualmente la desnaturalización a alta temperatura es irreversible,


debido a que se rompen las fuerzas débiles de enlace al aumentar la
vibración térmica de los átomos componentes, fenómeno que daña la
estructura tridimensional.
Temperaturas extremadamente bajas, detienen la actividad enzimática
pero no las destruyen. Muchas enzimas se pueden conservar
metiéndolas a 0ºC o temperaturas más bajas, logrando recuperar su
actividad después de descongelarse, según la intensidad y la forma en
la que se efectuó el congelamiento.
2. Efecto del pH.

La actividad de las enzimas depende mucho de la concentración de


iones de hidrógeno del medio, ya que esto afecta el grado de
ionización de los aminoácidos del sitio activo, del sustrato, o del
complejo enzima-sustrato; todo eso llega a influir en la afinidad que
tenga la enzima por el sustrato.

Las enzimas poseen grupos químicos ionizables (carboxilos -COOH;


amino -NH2; tiol -SH; imidazol, etc.) en las cadenas laterales de sus
aminoácidos. Según el pH del medio, estos grupos pueden tener carga
eléctrica positiva, negativa o neutra. Como la conformación de las
proteínas depende, en parte, de sus cargas eléctricas, habrá un pH en
el cual la conformación será las más adecuada para la actividad
catalítica.

En los casos en el que los sustratos son no ionizables (la mayoría de


los hidratos de carbono y lípidos), los grupos iónicos de las enzimas
son los únicos afectados por el pH.
Por esta razón, todas las enzimas presentan una máxima actividad
catalítica a un cierto valor óptimo de pH, en un intervalo de 5 a 8 (El
pH óptimo de la mayoría de los enzimas es próximo a 7), aun cuando
existen excepciones muy importantes, como enel caso de la pepsina
del estómago, que tiene un pH óptimo de 1.8, u otros como la tripsina
tienen un pH óptimo algo alcalino (pH óptimo = 7,8).

La mayoría de los enzimas son muy sensibles a los cambios de pH.


Desviaciones de pocas décimas por encima o por debajo del pH
óptimo pueden afectar drásticamente su actividad. Así, la pepsina
gástrica tiene un pH óptimo de 2, la ureasa lo tiene a pH 7 y la
arginasa lo tiene a pH 10 (Figura de la izquierda). Como ligeros
cambios del pH pueden provocar la desnaturalización de la proteína,
los seres vivos han desarrollado sistemas más o menos complejos
para mantener estable el pH intracelular: Los amortiguadores
fisiológicos

Las enzimas además pueden experimentar cambios de conformación


con las variaciones del pH. Podría ser necesario un grupo cargado
distal a la región del sustrato donde se ha fijado, para conservar una
estructura activa terciaria o cuaternaria. Conforme cambia la carga en
este grupo, la proteína puede desenrollarse, volverse más compacta o
disociarse en protómeros, todo lo cual conduce a la perdida de la
actividad. Dependiendo de la gravedad de estos cambios, la actividad
puede ser restablecida o no cuando la enzima regresa a su pH óptimo.

3. Concentración del sustrato

A mayor concentración del sustrato, a una concentración fija de la


enzima se obtiene la velocidad máxima. Después de que se alcanza
esta velocidad, un aumento en la concentración del sustrato no tiene
efecto en la velocidad de la reacción. Algunas enzimas permanecen
libres en concentraciones bajas de sustrato y no se alcanza la máxima
velocidad. Cuando el sustrato se encuentra en exceso, toda la enzima
se transforma en ES y la reacción se realiza a su máxima velocidad.

4. Concentración de la enzima

Siempre y cuando haya sustrato disponible, un aumento en la


concentración de la enzima aumenta la velocidad enzimática hacia
cierto límite.

5. Efectos de otros agentes


Las enzimas se ven afectadas también por otros factores como son la
actividad de agua, pues la mayoría de los biopolímeros requieren de
agua para desarrollar su conformación estable con características de
agentes biológicamente activo; sin embargo, algunas enzimas llegan a
actuar con un mínimo de agua, como ocurre con las lipasas que
contienen los aceites puros. En este caso la amplia disponibilidad del
sustrato hace que las reacciones se logren aun en condiciones de
sequedad.
Por otra parte, los metales pesados, como mercurio, plata y plomo,
inhiben la acción enzimática, mientras que el calcio, el magnesio, el
sodio, el potasio, el manganeso, el hierro y el zinc, actúan como
agentes activadores de muchas otras. Estos activadores se
denominan Cofactores. Este efecto activador se debe probablemente
a que forman parte del sitio activo, que se requieren para la creación
del complejo enzima-sustrato, o que ayudan a mantener la
conformación tridimensional. Casi un tercio de los enzimas conocidos
requieren cofactores. Cuando el cofactor es una molécula orgánica se
llama coenzima.
COFACTORES ENZIMÁTICOS
Existen enzimas que son proteínas simples y otras que requieren para
su función la presencia de sustancias no proteicas que colaboran en la
catálisis: los cofactores. Los Cofactores son sustancias que se
combinan con el enzima potenciando su acción catalítica.
Minerales y su función como cofactores
Estos cofactores suelen ser iones metálicos como hierro (Fe++), cobre
(Cu++),magnesio (Mg++), manganeso (Mn++) y zinc (Zn++), a estos
cofactores se los conoce como coenzimas inorgánicas

a. Magnesio
· Cofactor de enzimas que transfieren grupos fosfatos desde el
ATP.
· Cofactor de la enzima acetilcolinesterasa.

b. Cobre

· Cofactor de enzimas Cu-dependientes que intervienen en la


formación de: hemoglobina, colágeno, lecitina, mielina.

c. Zinc

· Cofactor de metalo-enzimas (anhidrasa carbónica, fosfatasa


alcalina, carboxipeptidasa, ARN polimerasa, ADN polimerasa, etc.).

d. Hierro

· Constitución como cofactor de enzimas oxidasas (peroxidasa,


catalasas, citocromo C, etc.)

e. Manganeso

· Cofactor de enzimas como la arginasa y la


ribonucleotidoreductasa
Cuando el cofactor es una molécula de naturaleza orgánica se le llama
coenzima.

NOMENCLATURA Y CLASIFICACIÓN

Desde sus inicios la nomenclatura enzimática ha sido poco


sistemática, y carece de los lineamientos necesarios para darles
nombres adecuados. Existen muchas enzimas cuyos nombres no
ofrecen ninguna información sobre su actividad o sus propiedades,
como es el caso de la tripsina, la quimotripsina, la pepsina y algunas
otras. Unas se han designado con el nombre del descubridor, otras,
como la papaína, de acuerdo con su procedencia (papaya), y en otros
casos, como la lactasa, según el sustrato que utilizan, que en este
caso es la lactosa.
Debido a esta falta de homogeneidad en la nomenclatura, se integró la
Comisión de enzimas de la Unión Internacional de Bioquímica (UIB),
que desarrolló un método que identifica cada una con cuatro dígitos
separados por puntos encabezado por las letras EC (enzyme
commission), que caracteriza al tipo de reacción según la clase (primer
dígito), subclase (segundo dígito), sub-subclase (tercer dígito), y un
cuarto dígito que es para la enzima específica.

El primer dígito de la nomenclatura, representa el grupo al que


pertenecen:
1) Oxido-reductasas
Catalizan reacciones de oxido-reducción, es decir, transferencia de
hidrógeno (H) o electrones (e-) de un sustrato a otro. Entre estos
tenemos la succinato deshidrogenasa o la citocromo c oxidasa
2) Transferasas:
Catalizan la transferencia de un grupo químico (distinto del hidrógeno)
de un sustrato a otro. Por ejemplo la glucoquinasa, que cataliza la
reacción de transferencia de un grupo fosfórico del ATP al carbono 6
de la glucosa para formar glucosa-6-fosfato y ADP.

3) Hidrolasas:
Llevan a cabo la ruptura de enlaces químicos con la introducción de
una molécula de agua. Un ejemplo es la lactasa, que cataliza la
reacción de rompimiento de la molécula de lactosa mediante la adición
de una molécula de agua, para formar glucosa y galactosa.

4) Liasas:
Catalizan reacciones de ruptura o soldadura de sustratos sin la
participación del agua. Un ejemplo es la acetacetato descarboxilasa,
que cataliza la reacción:

5) Isomerasas:
Catalizan las isomerizaciones de distintos compuestos. Entre ellas
tenemos la fosfotriosaisomerasa y la fosfoglucosaisomerasa, que
catalizan las reacciones representadas en la tabla inferior:

MECANISMOS DE REACCIÓN
Por las notables propiedades catalíticas de las enzimas y el papel que
juegan en el proceso de la vida, muchos investigadores han dado
preferencia a investigar sus mecanismos de reacción.
La activación de la molécula de sustrato se produce debido a la gran
afinidad química (electrónica) del sustrato por ciertas áreas de la
superficie de la enzima, sitios activos. Este sitio activo corresponde a
una depresión o hendidura relativamente pequeña que posee la
geometría y distribución de cargas (positivas y negativas) para unirse
específicamente y en forma complementaria a un determinado
sustrato.

El sustrato se une al sitio activo de la enzima por medio interacciones


hidrofóbicas y electrostáticas, puentes de hidrógeno y fuerzas de van
der Waals. Los residuos de aminoácidos de la enzima que participan
en la interacción con el sustrato, se encuentran alejados unos de otros
en la secuencia lineal de aminoácidos de la proteína: pero como
resultado del plegamiento de ésta, se agrupan para formar el sitio
activo de la enzima. Algunos de estos residuos participan solamente
en la unión de sustrato y definen una región del sitio activo que se
llama sitio de fijación o de unión del sustrato. Otros residuos del sitio
activo, los catalíticos, se encargan directamente de la transformación
del sustrato en producto y forman el sitio catalítico. Normalmente el
número de residuos que intervienen en la unión del sustrato es mayor
que el de los residuos catalíticos. Este sitio activo es el lugar donde a
través del reconocimiento molecular ocurren reacciones de ruptura y
formación de enlaces, formándose así un complejo enzima-sustrato en
el que las moléculas de las sustancias reactantes (sustratos) quedan
muy próximas entre si, condición indispensable para que se lleve a
cabo la reacción química de ellas. Se produce una deformación o
distorsión en alguna unión de la molécula de sustrato, se hace lábil y
sufre un cambio por la enzima en particular. Las moléculas alteradas
pierden su afinidad por los sitios activos y por ello son puestas en
libertad. Entonces las enzimas quedan libres e intactas para
combinarse con más sustrato y la biosíntesis de nuevos productos
iguales a los anteriores.
Se debe agregar que la activación hace que caiga o disminuya la
barrera energética que el sustrato debe vencer antes de que se
transforme en producto. Así, una reacción catalizada por enzimas
necesita baja energía de activación para que pueda efectuarse.

Este análisis se aplica a los sustratos que han sido degradados o


también se han utilizado en la biosíntesis. Aunque se puede aplicar el
mismo tipo de explicación para describir la síntesis, o la construcción
de compuestos complejos, a partir de otros simples. En esta forma,
dos moléculas diferentes de sustrato se pueden pegar a los sitios
adyacentes en la superficie de la enzima. Una sola activación del
sustrato por la enzima permite el establecimiento de una unión entre
las dos moléculas, de tal modo que se crea un compuesto nuevo a
partir de los dos sustratos originales. Este producto tiene poca afinidad
por el sitio activo y se desprende. En realidad el sitio activo y se
desprende.
En realidad, el sitio activo de la superficie de una enzima es un área
muy pequeña, lo que significa que las grandes porciones de la
proteína no contribuyen a la especificidad enzimática o a la acción de
las enzimas. Por eso, solo relativamente pocos residuos de
aminoácidos están implicados directamente en el proceso catalítico
¡quizás menos de cinco! Se debe señalar también que el ajuste entre
una parte de la superficie de la enzima y el sustrato no se encuentra
estático, sino que es una interacción dinámica en la que el sustrato
induce a cambios estructurales a la molécula de la enzima, como la
mano cambia de aspecto dentro de un guante.

También podría gustarte