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En este prólogo Archetti realiza algunos comentarios que permiten justificar al campo del deporte como campo de investigación, especialmente cuando se refiere al deporte como una arena social a partir de la cual se pueden estudiar diversas problemáticas sociales.
Título original
Prólogo de Eduardo Archetti al libro DEPORTE Y SOCIEDAD de Alabarces y Fridenberg
En este prólogo Archetti realiza algunos comentarios que permiten justificar al campo del deporte como campo de investigación, especialmente cuando se refiere al deporte como una arena social a partir de la cual se pueden estudiar diversas problemáticas sociales.
En este prólogo Archetti realiza algunos comentarios que permiten justificar al campo del deporte como campo de investigación, especialmente cuando se refiere al deporte como una arena social a partir de la cual se pueden estudiar diversas problemáticas sociales.
PROLOGO
Epuaroo ArcHeTn"
Los intelectuales de izquierda, los historiadores profesionales y los cienti-
Iicos'iSciolas han sido sorilo General tnairelecién prablemstica con ef
deporte, y no sélo en la Argentina. Si el deporte debia ser estudiado y
analizado era para desmifificar su uso por parte del Estado y de las clases
dominantes en el proceso de adoctrinamiento de las masas masculinas y la
juventud con el objetivo explicito de despolitizarlas y adecuarlas al trabajo
alienado, a la competencia,.al fanatismo, al nacionalismo, al sexismo, a la
violencia irracional, a la sumisién a las jerarquias sociales existentes yal ”
autoritarismo, al culto desmedido de los idolos, y a la aceptacién sin critica:
de los-valores capitalistas dominantes. Los andlisis de Vinnai (1970), Brohm
(1976) y Bourdieu (1984 {1978}) se inscriben claramente en esta perspec
va, Bourdieu (1984: 185) va incluso més alla y sostiene que uno de los
efectos principales del deporte es el de transformar_a los espectadores, a los
consumidores del espectaculo deportivo, en caricaturas de militantes en tanto
su participacién es imaginaria” jiento ha sido apropiado por los
“expel 3 lores tecnicos, entrenadores,
directivos y periodistas-. El traba-
5 femprano de Sebreli (1981) sobre la relacién entre futbol y masas en la
Argentina forma parte de esta tradicién critica de la sociologia europea.
Hasta no hace mucho tiempo el deporte ha sido un “tema menor” en la
investigacién sociolégica e historica. Ello explica, hasta cierto punto, la superficia-
lidad con la que fue tratado y la ausencia de investigaci6n sistematica. Los cientistas
sociales e historiadores que trabajaban sobre el deporte lo hacian, en la mayoria
de los casos, en el contexto institucional de las escuelas de Educacién Fisica y
* Antropdlogo. Department and Museum of Anthropology, University of Oslo.j
Ebuaroo ArcHern
v deportes. Su reciente valorizacién tedrica y empirica esti estrechamente vin-
culada ol redescubrimiento de la obra de Elias, en primer lugar, y de los
esfuerzos de Dunning, su colaborador privilegiado. En la macro-sociologia
historica de.Elias el deporte pasa a ser un elemento importante en el andlisis.
del proceso civilizatorio de las sociedades europeas a partir del siglo XVI.
Este proceso se caracteriza por el paulatino control del Estado del uso legiti-
mo de la fuerza, por el atenuamiento de los conflictos abiertos entre las
clases sociales y por la elaboracién de cédigos de comportamiento social
orientados hacia el autocontrol (Elias y Dunning, 1986: 13-4). El deporte
Pasa a ser una actividad de tiempo libre que historicamente cumple esas
funciones. De esa manera, el desarrollo del deporte moderno no es visto
como algo negativo. Las propiedades del deporte modemo establecen re-
glas claras de igualdad entre los competidores, permiten. la maximizacion
del placer, el relajamiento de las tensiones a nivel individual y la limitacion de
la violencia fisica en general. Un “tema menor” como el deporte se transfor
ma-en un “tema mayor” de una teoria sobre el desarrollo histérico yenun
€ampo) privilegiado de andlisis, de las tensiones-sociales.e individvales no
resveltas en las'sociedades modernas. Asi esta escuela de pensamiento dara
suma importancia a la investigacién-de la violencia en el futbol y, especial
mente, al hooliganismo briténico (Dunning, Murphy y Williams, 1988). Mu-
chas de las tesis y los hallazgos empiricos de Dunning y asociados han sido
puestos en duda. Los resultados recientes de las investigaciones sobre la
violencia demuestran que ésta es un fendmeno complejo y su verdadera
comprension requiere de un andlisis mas sofisticado (Giulianoti, Bonney y
_ Williams, 1994).
Es importante recalcar que la tradicion critica y la sociologia de Elias
tienen algo en comin: la centralidad-del deporte para entender et funcio-
namiento perverso 0 apropiado de las sociedades modernas capitalistas.
~ Anilisis antropologicos y sociolégicos mas recientes se caracterizan por un
cvestionamiento parcial de estas perspectivas. Nadie puede negar que los
elementos de manipulacién ideolégica y de disciplinamiento son concomi-
lantes a la practica deportiva. Pero esto implica reducir el campo social y
simbélico de las practicas deportivas y del deporte. Me limitaré a enunciar
algunos de los temas nuevos de investigacién, muchos de los cuales estan
representados en la presente coleccién de articulos.
El imaginario deportivo es amplio, diverso y heterogéneo. Los deportes
pueden evocar lo futil, lo initil, lo accesorio Y, por dltimo, lo lédico. El juego,
en dltima instancia una dimension crucial de la Practica deportiva, aparece
también en la fascinacién espectacular por las perfomances inolvidablesPROLOGO
de atletas y de equipos. El juego es un espacio de libertad y creatividad
individual y colectiva que posibilita, como en un cuarto de espejos, la distor-
sién de las ilusiones y el efecto sorpresa de las revelaciones inesperadas, En
esa direccién, una teoria del imaginario cultural que incluya las perfomances
poblicas, y cada vez mas poblicas por el impacto de la television, es impen-
sable sin la inclusion del deporte en el campo de analisis.
La lectura del deporte que hacen los espectadores no puede reducirse a una
laceptacién pasiva de las ideologias-dominantes en el seno sa peli
{| deporte es a veces visto como u campo privilegiado en el que ar
conjunto de valores morales y sociales: El confiicto, Por ejemplo, entre la elegan-
cia barroca y la fuerza directa y brutal puede verse en un Partido de fotbol o en
un juego de ajedrez. Las contradicciones entre individualismo anarquico y disci-
plina colectiva puede vivirse en un Partido de basquet o en uno de waterpolo.
Los limites del control humano sobre los animales pueden experimentarse en un
Partido de polo o en una competencia de equitacion. Estas tensiones excedenlos | |
limites estrechos del capitalismo y movilizan mundos de significacién mas genera. | |
les, El deporte, de esa manera, fiene una caracteristica importante ya que puede
revelar y no solamente ocultar contradicciones no resueltas enla vida social.
EI deporte encierra un conjunto de practicas corporales y de reglas muy
variadas. Bourdieu insistié tempranamente en la importancia de estudiar las
propiaciones socicimenie diferenciados de as practicas (1984). les depor
tes "viriles” como el ciclismo, el rugby y el futbol, son definidos como popula-
res en Francia mientras que deportes como el tenis, la equitacién y la vela son
claramente burgueses y, por ende, minoritarios, de elite. Pienso.quo ol anéli- |
sis de las- apropiaciones es central porque. contiene contradicciones, parade | / 4’
i98, ¥ permite un andlisis comparativo més fino que el propuesto por Bourdieu.
‘Lo que hay que explicar es cémo cierlos deportes son populares en un lugar
“y aristocraticos en otro. El caso del rugby es flagrante: popular en Francia y
aristocrdtico en la Argentina. Las estrategias de localizacién, la ecologia
cultural de las apropiaciones de las practicas cuando se controla
sistematicamente clase social, nacién o grupo éinico, son una importante
fuente de estudio. Esos estudios, asimismo, deben ser claramente histéricos.
Por ejamplo, entender la desaparicisn del cricket en la Argentina y su mante- << »
nimiento como deporte popular en Sri Lanka, la India o en el Caribe requiere ”
de un cuidadoso examen histérico. Las crisis de practicas asi como su fortale-
cimiento son puertas de entradas privilegiadas para una mejor comprensién
de las apropiaciones deportivas y de la reproduccién cultural en general.
Finalmente, quisiera mencionar uno de los temas mas ambiciosos: el.
estudio de los procesos de creacién de identidades. Los deportes en tantoEouarvo ArcHem
son apropiados diferencialmente son vehiculos de la construccién de “unos”
y de los “otros”. En algunos casos, ciertos deportes reafirman identidades
colectivas de un modo claro: la lucha en Turquia, el cricket en Jamaica, el
béisbol en Cuba o el fitbol en la Argentina. En otros casos, permiten la
construccién de nuevas identidades. Los hinchas comprometidos con sus clu-
bes construyen con sus pasiones, sus ilusiones, sus historias y sus frustraciones
una arena social que hace posible la reflexidn socioldgica sobre mecanis-
mos basicos de adherencia y participacién.__
Pliers 6 sdlaireyela’ aspattos cniciclax dlailolhumondhat -dlatrells-
ja algunas de las estructuras de poder existentes en determinada institucion,
‘sino que es, fundamentalmente, una parte integral de la sociedad. El deporte
permite reflexionar sobre lo social y los mecanismos bésico:
identidades. Los estudios incluidos en este volumen marcan el
una nueva época en el estudio del deporte en la Argentina. La critica ideolé-
gica del deporte no tiene sentido sin que haya un esfuerzo teérico mas sofis-
ticado y una pasién por los andlisis empiricos. Es importante establecer empi-
ricamente si el hincha se siente 0 no un alienado antes de pensarlo, desde un
cémodo escritorio, como perdido para siempre en el mundo de la manipula-
cién del capitalism. Es crucial ver. como la problematica de género adquiere
nuevo sentido.cuando se la enfoca desde-el-deporte. Es urgente problematizar
la _masculinidad y no definirla como algo dado que se expresa
automdticamente en las practicas deportivas. Es, por ultimo, promisorio que
estos arficulos vean la luz y que un nuevo campo de estudio, multidisciplinario,
se consolide en la Argentina.
BisuioGraria
Brohm, J. M.: Critiques du sport, Paris, Christian Bourgeois Editeur, 1976.
Dunning, E; Murphy, P., y Williams, J.: The roots of Football Hooliganism,
Londres, Routledge, 1988.
Elias, N., y Dunning, E.: Quest for Excitement. Sport and leisure in the
Civilising Process, Oxford, Blackwell, 1986. [Hay trad. cast.: Deporte
yocio en el proceso de la civilizacién, México, Fondo de Cultura Econé-
mica, 1992.]
Giulianotti, R.; Bonney, N., y Hepworth, M.: Football, Violence and Social
Identity, Londres, Routledge, 1994.
Sebreli, J. J.: Futbol y masas, Buenos Aires, Galerna, 1981.
Vinnai, G.: El fitbol como ideologia, Buenos Aires, Siglo XI, 1974.