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LEER PARA ESCRIBIR 180 Lengua y lenguaje: un acercamiento al estudio del conocimiento humano HILTON ALERS VALENTIN Otmos: de cuando en cuando hasta escuchamos. Hablamos, a veces de mas, a veces de menos; ocasionalmente decimos algo que vale la pena. Leemos —si, lo mismo que estd haciendo en estos instantes—, unos por vocacién, otros porque no queda més remedio. Escribimos (listas de compras, poemas de amor, mensajes de texto, pastiches para la clase en la que seguramente esperamos sacar buena nota...) Si alguna de estas actividades le suena familiar, no se asuste: bienvenido a la especie humana. Es usted una de los mas de seis billones de primates que habitan el tercer pefias- co que gira alrededor del Sol y que —ademas de la locomocién bipeda y del terror a las arafias— comparten lo que podemos llamar el instinto irrefrenable del lenguaje. Antes de proseguis, conviene aclarar algunos términos que, aunque forman parte de nuestro vocabulario cotidiano, también se usan técnicamente para referimnos a conceptos muy precisos. Lengua y lenguaje no son la misma cosa. Por lengua se entiende el sistema de conocimiento que pose cada hablante y que le permite a este generar y entender estructuras producidas por otra persona que posea més 0 menos el sistema de conoci- miento. Cuando decimos que tii y yo sabemos espafiol, estamos diciendo que en la mente de cada uno de nosotros existe un conocimiento similar —distinto al que tiene un hablan- te del inglés, del japonés o del swahili— que hace que lo que decimos sea mutuamente comprensible, Lenguaje es, por otra parte, la facultad que poseemos todos los seres huma- nos para adquirir una lengua. El conocimiento de una lengua se representa en nuestra mente como una gramética (mental) de esa lengua. Para el lingitista (el estudioso cientifico del lenguaje) la gramética no es un manual de reglas —como las de poner el acento ortografico o el uso de los sig- nos de puntuacién— sino el conocimiento que todo hablante tiene de su lengua. Pero ese conocimiento, como se verd més adelante, es diferente de otros conocimientos aprendidos. Por ejemplo, como hablantes nativos del espafiol, sabemos que frondoso drbol y rbol fron- doso son expresiones mas 0 menos sinénimas, mientras que viejo amigo y amigo viejo no lo son: si el flamboyén que esté sembrado en mi calle es frondoso, puedo referirme a este como un drbol frondoso 0 como un frondoso drbol. Sin embargo, el compafiero de clase que es tu amigo desde la escuela elemental es muy probablemente un viejo amigo, pero no necesariamente un antigo viejo. Esto lo sabemos intuitivamente, hasta nos parece obvio, pero gpodrfas explicar por qué el primer par de expresiones es equivalente y el segundo no? Lo més probable es que no, pero eso es perfectamente comprensible: es claro que sabe- ‘mos nuestra lengua, pero no podemos explicar eso que sabemos. A este tipo de conoci- miento se Ie llama tcito. La gramética no es el nico conocimiento técito que tenemos: sabemos caminar, digerimos los alimentos que consumimos, pero ciertamente no pode- mos explicar con exactitud cémo Io hacemos. La LINGUISTICA Elestudio del lenguaje es una de las ramas més antiguas de indagacién sistematica, que se remonta a la Grecia e India clasicas, con un rico y fructifero historial de logros. Desde un punto de vista diferente, sin embargo, es una disciplina bastante joven. Sus principales empresas de investigaciOn en la actualidad apenas tomaron forma hace 40 afios, cuando algunas importantes ideas de la tradici6n fueron restablecidas y reconstruidas, abriendo ast el camino para lo que ha demostrado ser una indagacién harto productiva. ‘Que el lenguaje haya ejercido tal fascinacisn a través de los afios no debe ser motivo de sorpresa. La facultad humana del lenguaje parece ser una verdadera “propiedad de la espe- cie”, que varia poco entre los seres humanos y que no presenta un anélogo significativo en ‘ninguna otra parte, Probablemente, los andlogos més préximos se encuentren entre los insec- tos, a una distancia evolutiva de un billén de afios. [..] Ademés, la facultad del lenguaje penetra crucialmente en todos los aspectos de la vida, pensamiento e interaccién humanos. Es en gran medida responsable de que en el mundo bio- Isgico, sélo los seres humanos tengan una historia, una evolucién cultural y una diversidad de alguna complejidad y riqueza, incluso éxito bioldgico, en el sentido téenico de su enorme cantidad. Un cientifico marciano que observara los extrafios acontecimientos en la Tierra ape- nas podria dejar de impresionarse por la emergencia e importancia de esta aparentemente ‘inica forma de organizacién intelectual. Es incluso mas natural que este tema, con sus muchos misterios, haya estimulado la curiosidad de aquellos que buscan entender su propia naturaleza y su lugar en el mundo exterior. Esta cita de Noam Chomsky, tomada de su obra Nuevos horizontes en el estudio del len- guaje y la mente (2000), presenta algunas de las ideas fundamentales sobre el lenguaje que postula la lingiifstica contempordnea. En la segunda mitad del siglo XX, esta ciencia a su vez antigua y nueva ha asumido un cariz més universalista. La investigacin lingitistica anterior a ese momento se centraba en la descripcién de los fenémenos gramaticales de las Ienguas individuales, ya fuera desde un enfoque diacrénico, sincrénico o normativo. Sin embargo, desde el advenimiento de la gramética generativa, surgida en el contexto de la revolucién cognitiva de la década de los cincuenta, el objetivo principal de a lingiiistica dejé de ser meramente descriptivo para devenir en la btisqueda de una teoria sobre la facultad del lenguaje. Esta capacidad de adquirir una lengua articulada es una caracteris- tica especifica de nuestra especie, innata (es decir, parte de nuestro acervo genético), que nos distingue de cualquiera otra especie conocida. EL PROBLEMA LOGICO DE LA ADQUISICION DE LENGUA Es para muchos una verdad clara y distinta que los niffios aprenden la lengua que les ensefian sus padres. Esta creencia ha sido sustentada por la psicologia conductista, una escuela de pensamiento popularizada por los psicdlogos John Watson y B. F. Skinner, que dominé el panorama de las ciencias sociales durante los afios cincuenta. Para los conductis- tas, nociones como ‘mente’, ‘conocer’ y ‘pensar’ no eran objetos de estudio cientifico. S6lo la conducta era observable y por tanto explicable, como sefala Steven Pinker, “mediante unas cuantas leyes de aprendizaje por estimulo y respuesta que podfan estudiarse con ratas que oprimian botones y pertos que salivaban al son de campanas.” NOIOVINAINNONY / NOIDISOdX3 181 LEER PARA ESCRIBIR 182 Pero Chomsky se fijé en dos hechos fundamentales sobre el lenguaje. En primer lugar, virtualmente cada oracién enunciada o entendida por un hablante es una combinacién novel de palabras, es decir, que aparece por primera vez en la historia del universo. Luego una lengua no puede ser un repertorio de respuestas: el cerebro debe contener una receta © programa que sea capaz de construir un conjunto ilimitado de oraciones usando una lista finita de palabras. A este programa se le puede llamar una ‘gramética mental’, y cons- tituye el conocimiento que todo hablante tiene de su lengua. La gramética mental, como recuerda Pinker, no debe confundirse con las ‘gramaticas’ pedagdgicas o estilisticas, que sélo son gufas para la etiqueta de la prosa escrita, El segundo hecho fundamental es que Jos nifios desarrollan estas gramaticas complejas répidamente y sin necesidad de instruc- cién formal y crecen interpretando consistentemente construcciones oracionales noveles, es decir, que nunca antes se habfan encontrado. De aqui Chomsky arguye que los nifios deben estar equipados al nacer con un plan comin para las graméticas de todas las len- guas, una facultad de lenguaje que contiene una Gramética Universal que les permite des- tilar los patrones sintécticos del habla de sus padres (Pinker 1994), Los nifios, pues, no ‘aprenden’ una lengua, propiamente hablando, sino que utilizan esta facultad innata junto a la evidencia lingilistica que reciben de sus padres para cons- truir una gramética mental de la lengua adquirida. Notese que es imprescindible que el nifio reciba estimulo lingtifstico, pero este no es suficiente por sf solo para formar tn sis- tema tan complejo. Pinker sefiala que “el conocimiento técito de la gramatica que tiene un parvulo es més sofisticado que el manual de estilo més grueso 0 que el més avanzado sis- tema computarizado de lenguaje. Lo mismo aplica a todo ser humano saludable, tanto al atleta profesional notorio por sus deficiencias sintacticas como al este, tii sabes, tipico ado- lescente desarticulado.” LENGuaS Y DIALECTOS Seguin los iiltimos célculos, existen aproximadamente 6,000 lenguas distintas en el mundo. Esta gran diversidad esté garantizada por dos razones. En primer lugar, la arbi- trariedad del signo lingiifstico permite que cada lengua posea un acervo léxico diferente; en segundo lugar, las graméticas de las lenguas muestran cierto grado de variacién. Un estudio més profundo de las diversas lenguas muestra que, detras de las aparentes dife- tencias, las gramaticas de todas las lenguas poseen unas similaridades estructurales fun- damentales. Esto se debe a que la GU esta compuesta por una serie de principios invaria- bles que determinan las estructuras comunes en las lenguas, asi como de un conjunto de pardmetros que delimitan las posibles variaciones en las graméticas de las lenguas. No obstante, existen ligeras diferencias en el léxico y la gramatica mental de cada hablante de una misma lengua. Estas diferencias, aunque no impiden ni dificultan en extremo la comunicacién entre dos hablantes de una misma lengua, constituyen un ver- dadero ejemplo de variacién dentro de una lengua. Decimos pues que cada hablante posee un idiolecto de su lengua. La suma de los idiolectos de una determinada regién geo- gréfica constituye un dialecto de esa lengua. Asf mismo podemos definir lengua como la suma de todos los dialectos mutuamente inteligibles. De este modo, el espaol es la suma de todos los dialectos que se entienden mutuamente, como el puertorriquefo, el madrile- fo, el argentino, el andaluz y muchos otros. Cada hablante, por tanto, no habla sino un dialecto de una lengua; de aqui que podamos argitir que nadie habla el espafiol: cada hablante de espaitol habla simplemente un dialecto del espaftol Huelga decir que ningun dialecto de una lengua es gramaticalmente superior a otro dialecto de la misma lengua: los dialectos dominicano, boliviano, canario y salmantino son igualmente validos y legitimos en términos lingiiisticos. Tampoco es cierto que el gallego y el catalan sean dialectos del espaftol: el gallego, el catalan y el espafiol son len- guas distintas, ya que no son mutuamente inteligibles. La arcaica concepcién de que len- gua era la forma culta y literaria de un idioma, toda vez que los dialectos eran modalida- des vulgares y subesténdares de una lengua, se fundamenta tinicamente en el prejuicio de los hablantes de una regién politica, social y econémicamente dominante que pretende imponer sus esquemas de poder mediante una declaracién de su supuesta supremacfa lin- gilistica. Basta saber que estos alegatos de la superioridad lingiiistica de un dialecto sobre otro son absolutamente inadmisibles, ya que se basan en factores extralingiifsticos, son enteramente subjetivos y carecen de valor cientifico. Ya bien ha dicho Max Weinreich que “una lengua no es més que un dialecto con un ejército y una marina”. LENGUAIE Y COGNICION Otro mito extendido sobre el Jenguaje es la idea de que la manera de pensar de una comunidad est condicionada por su lengua. Esta se conoce como la hipétesis de deter- minismo lingtiistico de Sapir-Whorf. Esta hipétesis, que equipara lengua y pensamiento, se sustentaba en estudios sobre lenguas amerindias que hoy sabemos que fueron cientifi- camente muy inexactos. La evidencia psicolingiifstica actual ha desprobado esta hipstesis, mis alld de toda duda, Sin embargo, todavia pueden verse remanentes de esta hipétesis en las aseveraciones que hacen algunos psicélogos y educadores sobre la relacién entre la supuesta pobreza lingiifstica y la falta de aprovechamiento académico. Dice D’Introno, Guitart y Zamora,! que “esta creencia parecié tener una explicacién cientifica a rafz de las investigaciones del educador social inglés Bertil Bernstein, quien propuso dividir el habla en dos ‘cédigos’: uno restringido y otro elaborado. El primero se caracteriza por no contener ideas muy complicadas o abstractas, por tener un vocabulario reducido y predecible y una sintaxis simple. El c6digo elaborado es, por el contrario, rico en vocabulario y sintaxis, se usa para expresar ideas complejas y abstractas y no es predecible. Segtin Bernstein, los niftos provenientes de los niveles socioeconémicos mas bajos no pueden acceder al e6di- go claborado en su vida familiar. Al llegar a la escuela no tienen el entrenamiento verbal necesario para tener éxito y no progresan de la misma manera que los nifios provenientes de niveles mas altos, donde se aprende a usar el cédigo elaborado. William Labov (1972) critica fuertemente la posicién de Bernstein y muestra, a través de sus estudios sobre los negros de Nueva York que (1) la pobreza expresiva de algunos j6venes negros en las escuelas de Nueva York se debe al hecho de que hay incompatibili- dad e incomprension entre el dialecto del maestro y el del nifto... (2) la légica subyacente a una conversacién entre jévenes negros puede seguir patrones de silogismo, implicacién y raciocinio muy fuertes y convincentes, y (3) el lenguaje de los hablantes del ‘cédigo ela- {EL resto de esta seccién esté adaptado de D’introno, Guitart y Zamora (1988). NOIOVINAINNONY / NOIDISOdX3 183 LEER PARA ESCRIBIR 184 borado’ es muchas veces rimbombante, ostentoso, vacfo y Ileno de recursos verbales inne- cesarios. Un andlisis légico de este lenguaje revela fécilmente que el contenido semédntico es muy pobre, aunque la forma sea muy compleja, Labov muestra que las bases te6ricas del cddigo elaborado no se sostienen y que, a pesar de que existan diferencias lingitisticas sociales y regionales, estas no pueden atri- buirse a diferencias fundamentales en los modelos gramato-légicos de los hablantes. Los estudios de Labov revelan que con una educacién adecuada (educacion en la que el maes tro no s6lo entiende la variedad hablada por el nifto o joven, sino que ademés la aprecia y respeta) se pueden lograr resultados mucho mejores. ADQUISICION DE SEGUNDAS LENGUAS Y BILINGUISMO La adopcién de expresiones fordneas es un fenémeno comin en la historia de las len- guas. En el caso del espafiol, basta observar el caudal léxico proveniente del contacto cul- tural con visigodos, arabes, italianos, franceses, ingleses y las civilizaciones amerindias encontradas por los colonizadores. Como ya sabemos, en Ia actualidad, la mayoria de los. neologismos del espafiol y de muchas otras lenguas proviene del inglés, debido al predo- minio econémico y tecnolégico de los Estados Unidos. La situacién politica de Puerto Rico y esta ex-colonia inglesa ha propiciado la aparicién de varias generaciones de hablantes bilingiies que, en mayor © menor grado, siguen en contacto con la poblacién insular, mayoritariamente monolingiie Es notable la firmeza con la que muchos, sobre todo académicos, atacan cualquier posible influencia del inglés en el espanol. Como consecuencia, atacan con frecuencia la incorporacién de anglicismos y el uso de expresiones inglesas en la comunicacién como signos evidentes de la decadencia del espafiol en Puerto Rico. La alternancia de cddigo 0 el uso de una o mas lenguas en una conversacin 0 acto de habla ha sido considerada por muchos como el resultado de un conocimiento deficiente de las lenguas involucradas en la alternancia. Se sostenfa erréneamente que cuando una persona cambiaba de un cédigo al otro, no hacia sino demostrar su insuficiencia en ambas Jenguas. Los hablantes monolingiies, en su mayorfa, consideran este como uno de los fenémenos lingiifsticos mas estigmatizados (zestigmatizables?), al punto que Grosjean indica que incluso los mismos alternantes han adoptado esta estigmatizacién, conside- rando la alternancia como una incorreccién que ha de evitarse a toda costa. Lejos de ser un hecho fortuito, los estudios han demostrado que la alternancia res- ponde a regulaciones concretas tanto sintécticas como sociolingiiisticas. También se ha comprobado que la alternancia es un recurso verbal que se utiliza con propésitos comu- nicativos 0 estilisticos. Se afirma incluso que en la alternancia intraoracional (algo ast como I don’t know si pueda ir), el hablante ha de poseer un conocimiento profundo de todos Jos cédigos envueltos. Muchos bilingites han sugerido que la alternancia ocurre debido a que unas lenguas poseen un inventario léxico mayor para ciertos t6picos. Obviamente, su fin Ultimo no es otro sino Ia eficacia en la comunicacié LA CORRECCION ORTOGRAFICA La ortografia no es més que una serie de convenciones en cuanto a los grafemas 0 letras y los signos de puntuacién utilizados en la escritura. En sentido estricto, la ortogra- ffa es un conocimiento independiente de la gramatica. De hecho, puede decirse que la Real Academia Espanola reconoce la distincin entre ambas materias puesto que las publica en volimenes diferentes. A diferencia de los principios gramaticales, que son universales y fundamentales para la produccién e interpretacién de oraciones, las reglas ortogréficas son enteramente arbitrarias e irrelevantes en la comunicacién oral. Esta arbitrariedad se manifiesta en los alfabetos naturales, la que a veces genera una gran confusién a la hora de representar grdficamente muchas palabras. Por ejemplo, el alfabeto espaiiol contiene grafemas que representan mas de un sonido (g, c), varios grafe- mas que representan un mismo sonido (c, k, qu), grafemas que no representan ningtin sonido (l, w —como en guerra—), grafemas simples que representan una secuencia de dos sonidos (x) y digrafos que representan un solo segmento sonoro (ch, Il). La ortograffa dice que la k puede escribirse como ¢ 0 qu; asf por ejemplo kiosko = quiosco Esto parece bastante légico, ya que la k, la cy la qu representan el mismo sonido. Sin embargo, esta sustitucisn no es valida en sentido inverso: coloqué # koloké ‘Obviamente, no existe ninguna raz6n gramatical para esta asimetria. Esta misma arbitrariedad ocurre con la acentuacién ortografica. Por ejemplo, si todas las palabras sobresdrijulas llevan acento ortogréfico, por qué la palabra ficilmente lo leva pero lentamente no? CONCLUSIONES Las ideas principales que he querido presentar en este articulo son las siguientes: 1, Todos los seres humanos compartimos una capacidad innata para adguirir una Ien- gua. Esta facultad de lenguaje es posible debido a que poseemos un conocimiento tacito ¢ innato de la Gramética Universal que le permite al nifio analizar el habla de sus padres y formar una gramética mental de su lengua. 2. Las lenguas son sistemas complejos de signos y reglas que se dividen en cinco médulos. Los signos se ubican en el lexicén y las reglas gramaticales en los componentes morfoldgico, sintéctico, semédntico y fonolégico. El lexicdn es altamente productivo y con- tiene palabras y expresiones vélidas que no estén recogidas en los diccionarios impresos. 3. Se puede decir que cada lengua es la suma de todos los dialectos mutuamente inte- ligibles. Ningdin dialecto es més correcto 0 superior gramaticalmente que otro. Las dife- rencias entre lenguas y dialectos se deben a diferencias en el acervo léxico y al valor fija- do en los pardmetros gramaticales. 4, El pensamiento no esta condicionado por el lenguaje. La variedad lingiifstica no se debe a diferencia en las estructuras légicas de los hablantes. Un mejor entendimiento y apreciaci6n del habla del estudiante puede lograr un mejor aprovechamiento educativo. IAWNONV / NOIDISOdX3 NOIOWLN: 185, LEER PARA ESCRIBIR 186 5. Los préstamos lingiiisticos no corrompen sino que enriquecen el caudal léxico de una lengua. La alternancia de cédigo no refleja una deficiencia lingtitstica en los hablan- tes, sino que requiere un conocimiento profundo de las estructuras gramaticales de ambas Jenguas. Tanto los préstamos como la alternancia surgen de la necesidad de una mayor efi- cacia comunicativa 6. La ortografia no forma una parte intrinseca de la gramética de las lenguas. Las reglas ortograficas son arbitrarias e irrelevantes para la comunicacién oral. Los alfabetos naturales poseen redundancias e inconsistencias que dificultan la escritura. Las reglas de acentuacién ortogrética no se aplican en todos los casos. Tras esta exposicién basica sobre la naturaleza del lenguaje humano, me parece apro- piado concluir con una cita de El instinto del lenguaje de Steven Pinker: La complejidad del lenguaje, desde un punto de vista cientifico, es parte de nuestra herenicia, biolégica; no es algo que los padres puedan ensefiarle a sus hijos o algo que deba ser elabo- rado en la escuela. Como dijo Oscar Wilde: “la educacién es algo admirable, pero es bueno recordar de vez en cuando que nada que valga la pena saber se puede ensefiar”

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