Está en la página 1de 174
FRANCO BASAGLIA INSTITUCION NEGADA RME DE UN HOSPITAL Psi LA NFO! QUIATRICO unis Torrent prétogo 4& paméa Garcia, Ana Serés ¥ vonage 8e7F 4.07.02 B2371 Basaglia. Franco institueton mead Titulo de le edicion : : icion original Listicwtione negara - Reporte da un oxpedale psichiatrice Traguccion de Editore - Turin, 1968, © de tos derechos on lengua cast ¥ de Ia traduccion espafi BARRAL EDITORES, S, A. - BARCELONA, 1970 © Para Ia presente edieidn EDICIONES-CORREGIDOR-§. 8, por sutovizaciéa de BARRAL EDITORES, S. A, Hecho el depésito de ley Impreso en ta Argentina NOTA A LA EDICION ESPANOLA Exte fibro, come subrayan en el prélogo de Ia edicién ¢f gatila los dootores Garcs, Sexds y Torrent, 0s 0 teat Be una experiencia concrete de la préctica priau al, Serfa absohitamente contrario ¢ Ie més esta experiencis ipo de consideraciones ja y s6lo un, né- tun mimero ei i ser el punto de partida de una consider analégica. De todos dexde alin puato de viss, Is expetien ja del equipo de wun valor més & ion def presente en favor jorizon- raci6n,’ Ia gusen vaca aunenci, el fers Precisamente exte libro cial de la peicca de ws ator be side duratente ‘No estamos bablando en vane. Le nos impone desde dentro le fastante soberano y grito— $6 tal de Ie inclusi6n-ae- Jones de une siuaciom quiere constivuise he valores dominentes- nos Jiegado # Uo <3 Scién. ls realidad d€ y se ignor cias extranjeras vdas—— las mismas Com Fredicciones y 18 misma capeciad, La nice alter file ——tanto para NOsOHTOS COTE gar eo: arse en ob mateo | one fe un movitniento ye de up fender mestra 20660 BSA va iets 7 tar entender meee a mpuesto al emer, gciuar desde oh Mel exchido al excuyente? ‘gcbmo actus no pa en be 12 tient? sores eiscosioncs, las polemic yolunen, tienen sélo este SEM! ge y Tas notes recogidas € CSE nics Yor el andlisis de une SO 20 eign que intent campo especifico contradicciones soci es mis evidente que otrat en. con ls fagrante condicion de es una llamada a la engendsa y gue los Je ver como endtquica, puesto que se niege « auto puesto que niege cusla 1 En todo cass, nos incina a tener de vactas y de usadas en reza de la realidad Tencia y nos sugiete e impone el uso de estos térmi ién de que Gionatia». Esta obra no tiene otro objeto que set el a serie de problemas, que n0 son tinicamente problemas ps sucesivamente uns superacién saliendo de su sobre Jas tiene el propésito de sa, en la realided que medida que el conta lencia, de opresion jencia en contra del permite: y frente a este ice 0 ectvis ica en relacién con ier definic) », a pesar de lo qu fen le que acwuamos nos transmite no estamos haciendo «li fricos, para demostrar de qué modo es positl —baj una iin de el peso de todas sus contradicciones— piolencia, y, por otra parte, de g tema que I de abuso, para su destruccion. lo que la iquetarse, ay cual: far palabras ie puedan jgnificacién. La misma du- a vir nos, en la fatara revels a sccién rior de yné modo ‘cata accién nos remite a la violencia generalizada de nuestro sistema social Resulta demasiado ffeil para el establishment definir nuestro tral lidad cientifica. Est afin de cuentas como falto de setiedad y de io s6lo puede halagamos, pu luidos. espetabi- fo que con toda le falta de seriedad y de ida desde siempre al enfermo meatal, asi Franco BAsacuih. LA INSTITUCION NEGADA “IVINANNOOT NOIOOAGOWLNI NODSYA, ONIN 4. Porgue antes de aguello, estaban encerrados agui rogaban rirse pronto. Cuendo alguien ‘pre sonaba una campans, costa ya no se usa. Al sonar la cantpane, todos decian: “Ob Dios, ojalé fuese yo el muer- to", decian, “yo que estoy tan cansado de evar esta vide aqui dentro”. Muchos de ellos merieron, muchos que bubiesen po- ido vivir y sanar. Envilecidos porque "0 tentan ninguna posibiidad de salir, se ne- geben a comer. Y les introductan la i: da por la naria con le ayuda de une sonds, pero de nada seroia porque alll dentro se ‘encontraban sin la menor esperanza de Si- Tir. Como una planta que se he secado por- que no lueve, con las hojas marchitas, ast era la gente aqui. Esta breve narracién es de un hombre ciego, el que llama fea, interno desde hace muchos afios en el Hospital ico de Gorizia. Era el Iider de un pequefio erupo de ‘pasé Ia mayor parte de su vide en el recinto del salir nunca de un pabellén. Aquel grupo de los Habsburgo. Hace cinenei récratas del «gobierno imperial y real» Jes relegé @ golpes de a tampén, pélize y firms, al més remoto éngulo de la sociedad: se reserva a, los excluidos. Andree es jo y ciego que en su juventud trabsjé de intemos més antiguos de Gotizis y goza de! denis ¢ incluso de'una cers autocden san talla, siempre camina con la cabeza ¥ tos hombros atrés, con las manos y los braze tendides be elante: orgulloso, nunes vencido. Es un testimonio super Viente de un pasado remoto, cuyo recuerdo munca le sbendo, pa Ente los demds ex-combatientes convierte su profundo dolor ex un titulo de gloria. son completamente esponténeas, ya que no aba su convetsacin, Es ciego y nunca ha visto ta parte, es viejo y no tos, y al ignorar su fun- alguns. Su relato puede e legftimamente de pre- inaacién psiquidtrica como oe eet temas, un momento en que yo mi sensibilizado por le narracién de los experiencias profesion nales de Franco Besagli. Desde entonces, he seguide inters. séodome’por el tema sungue de una mancra alterna y dis. jos y desde una duelided de atracciénte. (1) Radio Televisione Tlians 28 | tipo particular de enfermos que se espera hallar , Debo con el enfermo men- cuando no es de miedo o desagrado, puede revelarse bené: vola a través de alganas hipStesis tradicionales y sugestives: hay un gramo de locura en el genio, la locura es genial, etc. Es tos eran para ml, sustancialmente, los primeros motivos de atraccién hacia el manicomio, Pero también alimentaba lav de descubrir, entre los enfer fa experimentado, sin anslizarlos, semejantes sent ts al edmirar las pintures de enfermos mentales expuestas en una galerfa de arte y en el taller de un manicomio. Las interp sonios de insondables movimi como emocionzntes 10s vagamente inguietantes u obsesives, pero, agradables: Sélo después de mi encuentro con Gori ia be podido comprobar hasta qué punto estos mecenisimos no distintos de los que emplea el blanco cuando al negro del pa's donde la coesistencia racial nunca ha existido, Ante esta to de culpabilidad —sufro por la con- dicién del negro, y tal vez macho més que é— atenuando este imiento mediante la aceptacién, el conocimiento y la ad. miracién de la poesta negra, del canto negro, en defnitiva de Ja Gite negra. A nivel burgués, el poeta, el misico o el eseri tor negro, es —como dirfa Fanon— menos negto que el mozo 1 vendedor de tapices o el campesino afticano mento en que el blanco intenta una apertura no se.da cuente de que crea una nueva exclusién, Este fue el sistema que permitié atrancar de las garras de Jos nazis « gren miimero de misicos y cientificos hebreos, salvéndoles antes que 29 # otros, puesto que eran mis representatives, mic importantes que ef vendedor de condones 0 el ropavejero de! ghet En definitive, estas actitades se seducen a una serie de equivoces montados para disimular un sentimiento de culpabi- lided, y una elegante escapatorie para ocultar el miedo y el de- sagrado; una forma de evitar la solidarizacién de las posiciones idealégicas de Is sociedad en relecién con el excluido, 0 sea de ‘evitar la toma de posicién frente al problems. De hecho, Ja si- tuscién del enfermo mental en Italia es escandelosa: es el “inico enfermo que no tiene derecho 2 ser enfermo, puesto que cesté calficado como «peligroso para sf mismo y pera los demé objeto de escdndalo.piblico». Luego lo ponemos en 3, pete olvidar su problema, lo transformamos —segis sién dé una enferma de Gorizia— en un simple «paquete>. tard el estigma en su partida ¥ Si no Jo tiene, terminsré en el ghetto de los excluidos. Nadie ignora hasta qué panto puede ser desastrado y mo- oso el tonto del pueblo, tratado més como una bestia que elementos del ps ce fa enfermedad mental en un pais que se precia de a galerfa Uffizi, Portofino, la Cémara de los Esposos, Cepti, Venecia y Roma. Alguaos testimonios de antiguos intemados fue Ia siruacién de Gorizia hace algu vvdlidos respecto a numerosos hospital En 30 Is cohesiéa del grupo, el ‘timo refugio, indaso imero de Jos antiguos internados que entrevistamos fue precisamente Andres. VASCON: Dice usted que actualmente fa situacién aqui no es te misme... z ANDREA: Hay vna gran diferencia, Antes nos encerraban e:0 no era todo, sino. que sma sala, y no tenlamos 5 siguiera podiamos ir a los lavabos. Luego habia a las cinco de la tarde nos hacfan cenar y nos hacian, debiamos sentarnos boca lena. Si yo me atrevia a salir un momento para tomar tun poco el aire, inmediatamente venta alguien a buscerme. VASCON: Pero ede qué modo han cambiado las cosas? ANDREA: Tanto como de Ia noche al dis. Al principio, cuando empezamos estas asambleas, yo fui presidente durante vn mes y luego volui « setlo, Entonces nadie se atrevia a Slavich, que cuando vino ince enfermos que va equeiio paseo por dores...» VASCON: ra ver. que salfan? ANDREA: Si, era la primera vez que salfamos con el doc- Le instieléa meas, 3 SCON: Es desir, que used considera que este séyinen much{simo, muchfsimo, porque antes de an en fuese yo el muerton; decfan, eyo que ode llevar esta vida aqui dentro». Muchos de » much hrubiesen podido por Ja nariz con Peto de nade servia porque alli dentro Ja menor esperanza, de salir. Como una chitas, asi cta la gente aqui», TASCON: -Y para la enfermedad, ztarbién ha sido bueno? ‘Naturalmentel Actualmente hay muchos en: fermos que no quieren represar a sus casas, Se encvenen ben, Souk Antes, pasaba el doctor, y todos: «Doctor, doctor, mine deme de nuevo a casal» Suplicaban como condenadon Bene dctor pasiba de largo sin presales atencién Otto testimonio que me impresions fue el de Margherita VASCON: Digame, por favor, gcSmo eta antes el hos MARGHERITA: Antes el hospital era triste novotaes VASCON: ¢Hable MARGHERITA: guitar las redes en nuestro pabe luego nos quitaron las camises de fuerzs y nadie se he por VASCON: ¢Y Hevaben estas camisas todo el die? MARGHERITA: St, tado e! die, desde Ie matiana # le no- che, ¥ muchas veces incluso en la came nos etaban los pies, Jor hombros, todo, como Cristo en Ie cruz. VASCON: <¥ dolfa? MARGHERITA: ¢OSmo que si dolfa? Por estrafalario que uno sea, no creo que le hage bien tener que-estar de aguel modo. VASCON: No selfen nunca? MARGHERITA: No, nunca saliamos. En aquel tiempo yo ni siquiers ibs s trabajar porque tenfan miedo de que lo rom- piese todo. din. Me han atado tentas veces al banco, al érbol gue hy alll. Siempre me ataben alll VASCON: 2Y por qué les atsban? MARGHERITA: Porque se ve que no habia un tratamien- to como ahora. Es posible que existiesc, pero se ve que el an- terior director no lo usaba, Desde que ha lle con el tratamiento de ahora, he mejorado el hos por cient. VASCON: Ahora todo’ esté abierto, ustedes pueden ir y venir cuando quieren, no? MARGHERIT: $f, abora si, pero antes yo no podta, no nos dejaban, VASCON: 2¥ eémo lo impedian? MARGHERITA: Con la camisa de fuerza. Luego me ate: ban los pies con tiras de cueto. VASCON: @Por qué? MARGHERITA: Poraue yo saltaba, era discola, seltsha porque, en definitive, me gustaba. ¥ ellos me crefan enferma ¥ por ello me ataban. En aquella época nadie podia decile a un médico: ¢Aquella enfermera me maltratan, porgue en se- 33 ‘guide te stsban. No habla més remedic que dejarse tater como ellos querfan y callarse. Ahora, al contratio, todo es muy distinto, ASCON: Es decit, habs tomedo forma en ustedes un sentimiento de sebelién que no podis expresarse IARCHERITA: St. Porque tenfamos micdo de que nos ataran, y ademés también nos haclan méscaras VASCON: ¢Cémo ¢s eso de les méscaras? MARGHERITA: Nos envolvian el rostro con una tela mojada y luego apretaban con fuetes, y nos tireben agua al rostro. jEra pars morirse! VASCON: ¢Tambiéa # usted se Io hicieron? MARGHERITA: También a mi, sf, desgraciadamente tem: bién a mi. Y por la noche me bacfan dotmir encerrade en une joule VASCON: ¢Una jaula? MARGHERITA: Nuestras camas estaban rodeadas de rejas ¥ con cadenas a cada lado, y yo... a mi me encerraban dentro VASCON: Como un péjero 0 un leda. MARGHERITA: Entonce: Porque estaba harta de estar encerrada, y como que me las odes, me destiaba yo misma para salvarme, puesto que ‘no querian sbrir.., VASCON: Y gewinto tiempo permanecfa usted en esa jaula que recubria la cama? ‘oda la noche. Nos acostibamos « Jes seis de Ja tarde y hasta le matiana siguiente, VASCON: ¢Qué impresin le hacta estar en es MARGHERITA: M mis estaban libres y yo tn VASCON: Y entonces, equé ‘cuanto més se agitaba usted, mas enferms refan los otros, eno? i 34 MARGHERITA: Exacto, y Iuego nos ataban. Si hacfamos cualquier cosa que no debfamos, noe ateban y no podfamos movernos... VASCON: Y despaés que Inubo deseparecido Ie jena... MARGHERITA: Pensébemos que era extrafio, después de tantos afios, cncontratnos de aque! modo, que les quitaran de repente. Nos sentfamos aliviados VASCON: ¢Contentos? MARGHERITA: Muy contentes, ys puede suponerto, VASCON: Les habré patecido muy extratio poder salir fuera, MARGHERITA: Si, también extrafio, porque después de ‘pasar tanto tiempo encerrados, encerrados, siempre encerrados, Juego poder anda VASCON: Y actualmente equé hace Ia comunidad? MARGHERITA: Voy s cantar dos veces por semans. Por + 07 la escucle y trabajo, en electrocncefalogramas en la di hacer nada, me pongo nerviosa. ~~ VASCON: Y en el encefalograma, gtrabaja usted conto empleada, como asistenta? como distraccién duran- dedica a la misica, eno? MARGHERITA: S{, me dedico a le mndsica y dos veces por ego el sdbado tenemos cine, el domin- alguna salida... qué creen ustedes que antes Jes ataban? MARGHERITA: Antes nos ataban potque no existie el 35 mismo procedimientp de curacin que te sigue shots. © exis- tia, pero 20 lo utilizeban. VASCON: Abore que se practica este procedi se ets x nadie. Entonces, ¢son lo mismo para usted sas de fuerza que las piidoras? MARGHERITA: Yo creo que sf porque uno se queda Si no basta une pildora, te dan dos, tres, y mientras ona se calma. SCON: O sea que sin estos comprimides, esto seria semejante a lo de antes... MARGHERITA: Si, serfa como antes. Basta con ver que baste una palabra pare heceries eater... WASCON: Digame, ¢n0 toms usted comprimidos scrual- mente? atin peor que eso, nos hactan VASCON: Pero ¢no cree usted que el hecho de set libre, de poder trabajar, de que no la aten ni la repriman es Jo que Je ha hecho bien? MARGHERITA: Creo que st. VASCON: £0 son los medicamentos? MARGHERITA: No, no se trata de tomo medicementos, y sin embargo... me si VASCON: En timiento de bert 5 MARGHERITA: Si, el sentimiento de’ libertad, porque tia persona que se encuesitra encerreda se enerva, incluso sin Se nerviosa, s6lo por el hecho de estar encerrada, ver que no puede haccr una cosa u otra que desearfa hacer... VASCON: ¢Hebfa otras enfermas, aquf, qué estaban ence. tradas como usted? MARGHERITA: Si, varies. ¥ ahora van 4 trabajes, al bar, al cine. Porque yo no Y he aguf Is entreviste con Carla, una de las enfermas més conocidas ¥ més. escuchedss del hospital WASOON: Usted ha tenido una vide muy complicada y dificil... Ha estado en un campo’ de concentraciéa... Dos 0 tres respuestes de Ia entrevista no quedaron regis trades por defecto téenico del megnetéfono. : CARLA: ...en el campo de concentracién donde yo estabs, también estaba la pobre princesa Mafalda (1). VASCON: gQué campo de concentracién era? CARLA: Auschwitz. VASCON: Luege permenecié usted aguf durante algin tiempo, cuando los métodos eran distintos... : luy diferentes, porque a todos nos eprisionsban “= de fuerza. Algunos en los éeboles, otros en Jos ban cos, y hasta la noche no nos desetaban, Ya puede imaginarse en qué condiciones viviamos. fbamos hechos un asco. Al Hegar la noche, nos desataban y.nos metfan en Ja came con los pies y las mufieces atados. VASCON: ¢Realize usted algiin trabajo en Is comunidad? cal 10 secretaria, Llevo la cuenta de las asis- ones. Cuando hay reuniones de comité, debo Ievar también ta telacién de los médicos para dar cuenta... VASCON: En in boletin... CARLA: Sf, precisamente en un bole: debo hacer relacidn measual para I! Pi catzevistar @ todos los médicos, y el Yinico que no me ha res- pondido —yo quedé un poco humillads—, es un médico cuya sombre prefiero callar que me dijo no comment, rio, y ademés (1) Mafalda de Seboye, blja del rey Victor Manuel TIT, deportada por Jos alemanes. Musi6 en’ Buchenwald. (2) Revista mensual de Ia comunidad. La comunidad de Gorisis ocups un vasto espacio sombreado de arboles seculares, donde hay nueve pabellon ‘0s cada uno, con dependencias, Ja iglesia y une gre lianos. Cada uno, pues, es medios y sus preferencias biéa es penoso tecordar que, hace sélo . herbs, estos drboles, estas flores y los cantos de los pé& jaros, sélo servian para hacer atin més triste Ia vida de los em. fermos. sbierto todos. En Prohibido entrar, et- con numerosas persones, ‘que estén sentados ante los pabellones, que juegen « las bo. chas 0 que hacen punto de media. Al llegar al bar, se encon- los en torno a las meses lena de humo y fraré con varios consumidores de la inmensa terraza cubierta 0 de J & : paracién y preguntard inevitablemente: <2Dénde estén los pe- | ligresos?= 4 Se encontraté con que n0 lor aquellos que gritan, que se agitan, dico, el enfermero o el visitante. Y al no haber rejas, pero llevan ‘Blosas segundos y Tstgas y profesonales, o cortas con una cierta coque {erla, para los primeros. De este moda, resulta mucho més {4 Gil distinguit Tas tres clases, Como en el cartel, en le prisién o t0s Jos oficisles de. / Jos alumnos y, worfas, y por io para iniciar Ia acompaiia, com¢ deseata conservar id entre persi lcgadas del exterior, lad_com asamblea general de Ja comu das diez, 39 dics, enfermerot que de hecho yudan « los enfermeros 2 dispo- indoles de nuevo en so sitio reonién, La ssambles es un acto espon- ve ninguna obligaciéa dé asistencia, cnando se quiere, que no se pasa pretentes. Al menos en apariencia, 20 formal o sustancial, entre log miembros s, enfermos y enfetmeros, ocupan sus sala, mezclindose unos con otros, Estas eircont- yoreces. unas reacciones earacteristicas de todas las Teuniones pablicas: los mas desenvueltos y extrovertidos se ins. talen en primers fil. Los leaders, dando prueba de una cierta intuicién estrarégica, ocupan los puestos clave del semicl Y en el otro éngulo, protegidos por un muto sin epertur otros muros tienen ventanas y puertas, una de ellas muy de y con cristalcs), se sivian los enfermos més retrégrados cién testimonia ain una actitud polémi con la asamblea. Dos 0 tres enfermos « ‘ocupan por turno, la mesa de la presidencia: ellos son lor res. ponsables de Ia conducta de la asamblea, revelando de este modo sus dotes de prestigio y sus grandes recursos dialécticos en la distribucién y desarrollo de los temas de discusién, No 3 extrafio que un enfermo en plena crisis quiera sentarse en esta mesa, estorbendo el tra és y provocando con sti actitud, una fuerte tensiOn en el interior del grupo. En tal caso, sus provocaciones 0 sus desvatios son soportados 0 desviados por los demas enfermos con una delicadeze extreme En efecto, sc le reprocha su comportamiento, no en el do- de la enfermedad, sino en el de las rela de la sensibilidad recfproca, etc. En este sentido, es curioso notar que la ‘con aumerosos obreros y campesinos: con el tiempo, su len guaje se ha depurado y su comportamiento a lo largo de la discusién —con relacién a Jo que sucede en Tealia en institu. 40 mejorsr y a ro. Por lo demés, la ssamblea del de Gorizia desmiente un fenémeno muy casi imposibilidad de que una reunién piblica, a cualquier nivel, puede desarrollarse de una forma coherente y positive. Como hecho negativo, sefialaremos una cierta tendencia al mimetismo por parte de algunos sujetos; sin embargo, el intento de centrar fs discusién en algunos pan- tos concretos, realza la importancia de ciertos temas exenciales desde el panto de vista comunitario y terapéutico: les pages > y las salidas | Estas pagas son modestfsimas retribuciones, concedidas por I administracién, que los enfermos reciben cada semané bio de sus servicios. Tienden a dar ol trabajo un sen ico, tituciones, como en situaciones andlogas tales priquiftricos, son Snicamente wi hospital, un cierto valor econdmico y es justo que fas p: aumentos,-etc., sean objeto frecuente de discusién. Por lo gue atafie a las salidas, son deseadas como ocasiéa de distracci6n y alteracién de Ia monétona vida del hos des de contacto con el exterior. La vida interior del hospital est4 regulada por Jas reanio- nes. Ls a se desarrolla de acuerdo con el programa tra dicional (visitas de los médicos a los pabellones, desayuno, pero también seyin el ritmo de las seu. Incluso disfa que ante las exigencias com as "dades tradicionales quedan relegedas a un segundo plano. y como posibilida- » Hay més de cincuenta reuniones semanales. No int das por igual a las mismas petsonas, pero hacen que los miem- bros de Ia comunidad vivan en un continuo esteda de recipro- a disponibilidad. Una mafiana normal, empieza a las ocho y 41 cién secfprocas, Que un enfermo patticipe en significa que su nivel de espontancidad es sufi la comparacién con los otros. asimados poi nt nédi se rednen de manera que fe vida de Ja comunida les. A la una y media esié regulada a la semana y por turmo—, los enfermeros sultado de de cada or le tar siempre en todas las reunio: ticipan ¢ menudo en lmpiden otras actividades saniterias, pero también es posible que quietan evitar expresar en estas reuniones un estado tensién personal 0 de agr i ‘entermeros. Estos ejemplos ausencia de los esta sltima actividad. Antes de empezar registrar Ja asamblea, he querido inte- al ditector del hospital sobre elgunos problemes gene: VASCON: Dado que la vida del hospital esté regulada asamableas, podemos deducir de ello que éstas i tante de la comuni uestida deben poder tomar sus decisiones at das Tacia un En detetininads. Fs importante que dicks cos de todo Ts taneidad de cleccién nance’ de sticipacin de _t que | status del en. ningiin derecho. Bone: | | mos entre paréatesis et hecho de gue no se le cons mo | i tuna «persona», del mismo modo que ponemos entre Ia enfermedad. a 42 a3 VASCON: De cualquier modo, tes reuniones dan nided, 7 estda ustedes prescindiendo de Ie enfermedad, como si ésta’ ni In impresién de Ge Prescindamos de Ja enfermedad, « un individeo considers. Ten cuenta Is etiqueta que Je define entro en relaciéa con é nombre que leva. B. esquizofrénicos (con les, sis, poraus Ia deincign del = ba alcanzado ya el Peso Siti ibis de valor, de una etiquan ‘que sobrepase | i ficscién real de la safermedad en sf mis el juego 2 Ia clase dominante, Sob, foe el nivel de reciprocidad que permite la eo fron. todo to Asiupizk Grvenat Det 17 De mayo pe 1967 fo que puede dar + sues: A partir del momento Nota: numerosos asistentes, tensién y ansiedad difundides Renato, en estado de ersis, te muestea agresivo y provoaie: Giovanna preside. GIOVANNA; ¢Se han informado ustedes del procedimiento frau! Bara obtener este subsidio? Me parece que este asunto enfermos, y no era posible que noso- nos ‘convirtiésemos en 0, 'y est abandonado por to- petions# sin derechos, ex conira de le cual Por ello, nosotros [ly complices de | sobre todo porgus dos. Porque es una Todo es mana, tienen una casa, un 8. Por ello dicen que no © es un menor para vivir « expensas de incomprens ellos. 9 de recciobs inprerk sex tASO: St, pero sein ellos Io que es justo nunca he sido | la muerte civil, cierto. + ANDREA: Cuando trabajes, tus padres te dan un plato de a SeP#, en caso contrario, te dicen: «Arréplatclas como’ pusdes, 4% ELDA: Yo digo que es sbsurdo pensar que nosotros seamos como nifios que det roregidos cuando f eto nosotros somos personas mayotes y a nuestre exlad tone’ tos nuestros derechos, que no son los derechos de los nifoe de esilo. RENATO: Bueno, os diré une coss, que nosottes no po: Renato, creo que no es este el momento més indi- demos tenet nuestros derechos: cuendo uno de nosotros ‘he ipo de discusiones. estado en un hospital, cuando ha estado ‘ANNA: He escuchado todo Jo que he dicho el sefior qvidtrico durante cinco afi, nt les. ido perlectamente; sin embargo, quisiera BASAGLIA: Precisatnente por ello Ja secre Giovanna de. - dice au a pedido esta pensibn, que ut | fa que coando una pemene ee Gok hospital psiquidtrico es ¥ que podsian ocupatse de él. Peto se en- como un paquet. . spi decir, que no es libre. Aqui tenemos GIOVANNA: 81, of, es como un paquete. Yo lo sé, porque vuna ley, no 8 eto creo que no, y esta ley dice cuando viene mi hijo buscarme debe firmar, En casa no toe ave al sali de aqui debemos ser confiados « alguien que debe tretard asf por diversas razones: entre ottas porque, gracias a walaenos con su firma, La razén es que munce estén segur0s Dict, s¢ de cuenta de que yo razono. Pero en slgnos aspectos, de nosotros. Somos como un pagucie, este paguete debe ser pata mf esté claro, somos como un paquete. | gustodiado,.pero jay!, si ef paquete llega sbierto, si alguien UNA VOZ: No todos somos igules, por favor. Hay dos : Jo mueve 0 si Y lo mismo sucede cone! enfermo familias: Jos hermanos de Rome y los obreros, q que regiesa a su casa: sus padres se encargan de todo pensar SLAVICH: El ser Maso salié del hospital. ¢Tembién do en @. Peto entonces, yo mie digo: es instil que alga Si alguien ime hace una sefial y yo rescciono, si empiezo a reat Par ante esto o aquello, mis padres, encargados de mi cust se siente como un paquete? 4 7 1 MASO: Yo empecé Je escuela en 1946, Todas las j miBanas iba 2 Trieste, vivia pricticamente en Trieste y voluia Pronto dirén: «Nos da demesiadss molestias, que la encietren a las nueve o a las diez de la noche, a veces incluso ¢ mesa de nuevo. noche, con dos paradas: Auisina y Monfaleone. Al termine: MASO: Es un razonamiento mezquino, dejad que lo haga mii época escolar, empect el servicio militar, y de nuevo estuve ¥0 mismo, He ofdo decir una cosa: tanto en la sociedad como fuera de casa. Luego trabajé en. los ferrocatiles, y de munca fn los ministerios y les grandes oficinas, précticamente reina la fuera de cate, en Venecis. ¥ siempre me las he arzeplato' yo ley del mal: Jos peces grandes te comen a ls peces chicos, 9 solo, nunca he tenido necsided de mi made, 10 de tos peces chicos no tienen mis remedio que dejarse comer 2s. Siempre he sbi sepu adelante por iis GIOVANNA: Esto es en el exterior, furs, entre Ion sbre- For ello no me afecta demasiado estat sole 08, los pobres, y los ricos que se aprovechan de ellos y que GIOVANNA: Usted tal ver no se siente afectado por ello, Jes explotan. En esto estoy de acuerdo, Pero nosotros, nocooee pero los otos, cuando usted est fete, no ereo que ee cg i fomos enfermos, admitamas que somos enfermos; pot Jo tanto, )edemos ser proteidos-con rigor durante un cierto tempo, "Tnego es distinto, como sucede con fos nidos al pri » Porque siempre hay una cierta tensién, porque : «eDénde estaré ahora? Qu sabe si volverd, ; quia sabe si bebe?...> t 48 PIETRO: Estoy de acuetdo con todo esto, Es necesatio. una familia. Cuando no se tiene le posibil tando se niega incluso esta pequefia ayuda, este peque- wo, gcémo podria electricidad, los i ustedes que no estaba bien? Yo vivia he estado mejor que entonces y nunca Creo, aunque gansra el premio gordo fa ANNA: Escuche, sefior Pietto, no tengo Ja intencidn de vejarle, lo que voy a decir no debe husmillal dejado el hospital, y ahora, de nuevo esté por aqul de impedirle que gan f estar aqui, porque se s (Se siente bien? ANGELA: Yo encuentro aqui Ja ps me siento amparada. Ayer era mi anive teria, me traen agul por estar segura de no hacer sefiora Angela, que el dia en el hospital, gno? tl devolver a Ja gente a sus aqui. vuelven aqui en un momento de uinee afios que no he estado en mi casa. El ipre me dice: «A mediados de agosto, por ‘munca llega. ron tres sefioras a verme en mi casa, ya pesar de todo yo vine aquf RENATO: ¢¥ qué viniste « hacer? Quédate fuera. Le lie bertad e+ hermoss. Ellos te meten en une celds. ALDO: Hs venido porque fuers podria beber, y tiene mic. doa la bebida... ANGELA: Temo la bebida porque me hace dafio, sélo un oquito ya basta pare hecerme dafio. No sopotto el alcohol. BASAGLIA: Sefora Giovanna, digame, por favor: por qué uns persona viene a refugiarse en el hospital? RENATO: Porque los otros se tien de nosotros. ¢Cudntos siios hace que estés aqul, ti? ANDREA: No Io recuerdo. RENATO: Yo llevo ya ocho afios dando vueltas por este asilo, no se trata de un mes 0 dos. Abora, dltimamente, se rien de mi y ys es hora de ponerle fin «cso. Siempre hay un enfer. mero que me acompafia, gacaso he matado a alguien? ANGELA: Cuatro afios seguidos sin ver el sol... , necesitarfas diez pars luego ver- te de nuevo dentro, No irés lejos y seré yo quien veng a bus- catte. estar ten ocupado que no pudiese ver a las buenas personas, y también 1 los enfermos, me siento feliz cuando vuelvo a verles . RENATO: Lo que yo tengo enfermo:es el.cotaz6n, y no a cabeza. Recordadlo bien, y que también lo tenga presente el sefior director: ef corazdn y no la cabeza. BASAGLIA: ¢Qué entiende usted por enfermo del corazén? RENATO: Yer 2 estos pobres desgraciados que esth usted echando @ perder y nada més. ¢Cudndo volveré a casa? Mafiana, por Pascus, por Navided, a mediados de:agosto: no me gusta ‘estar aqut dentro, més serieded aqui dentro, més setiedad y més severided! UNA VOZ: En if opintén, si tuvieses el corazén enfermo, fn este momento estarfas en el hospital civil, en un, servicio de medicing generel, y no en un hospital psiquidtrico. RENATO: Son ellos quienes han quetido envierme aqut ¢Tal vez estoy loco? jNo! Yo tengo el corazén enfermo, loro todos los diss, at 2: De wodos modes, fa seriedad implice, ademés a, muchas otzas coses. También cuenta le severidad, y més coses. Y entonces no nos encontrariamos en las condicio. es en que not encontrames hoy. No hay que considerer la dad simplemente en tanto que serieded... PrActicemente, sserios», coimo dices ri mismo, précticw jen Jo que nosotros tenemos. ‘ATO: Hace dos meses que estay aguf dentro, en el Cy el Montepfo no me paga pare comer como los cerdos del C. Con esto baste. ANGELA: Ya que usted habla de que tiene el corazén en- fermo, le dizé que yo sufzo del hfgado, y me he pesado custro sfios en el pabellén C, Debfa permanccer allf porque alli esté fermeria. No pretenderd usted que le pongan en otro pe- estando enfermo del corazén, Largo silencio, ELDA: He observado que los enfermeros tienen un sueldo considerable, ya que reciben mucho dinero... GIOVANNA: Los enfermeros no tienen un sueldo consi- erable. Un padte de familia tiene pote... ANGELA: Y adeinds tienen ‘grandes responsabilidades. Si uno barre y da un golpe a otro con Ia escoba, la enfermere es Ja responsable. UNA VOZ; Entonces que barra ella misma! Esta mafiana he barrido las escaletas y no he podido tomarme ef desayano compan y todo, para ayudar & Ia enfermera, Yo no estoy loco, Estoy sano de i id nunca es de una sola per- del mismo modo que Ia falta nunca es de uno solo, sino de todos. GIOVANNA: Si uno se este enfermo no se fun enfermd con buenos contra uno. € el cinturén hasta medio- inque tenga hambre, Mientras trabajo, yo tengo la cos- de tomar una meriends. d, sefor, que exté obligedo a apre- a. Si deses comer a UNA VOZ: ;Tembién « mi, pero debo pedirla! {Yo no ne- cesitaba pedis, porque siempre habia tenido cuanto descaba para comer! ¥ el otro dla me robaron la merienda, Si lego 8 adivinar quién es, enfermero © enfermo, ese pasaré un mel rato ANGELA: No hace falta ponerse ssf, vamos, serd alguien que Jo ha hecho sin mala intencién. Por mi parte, yo doy las 4gracias a los doctores, enfermeros y enfermos que me han ays. dado, Pero si yo tuviese que ir otta vez a un hospital pata mi enfermedad, como deberé hacerlo, prefiero venir aqul. Los médicos y el director saben cudnto me cueste venir agut. Una noche vine ¢ las nueve, a suplicarles que me admitiesen por- ‘que ya no podia mds. Cadntas veces he suplicado: ajAyiidenme, re puedo mis!» Se lo he pedide todo el mundo por le le —y el sefior Antonio puede decitlo—, cudntes veces he suplicado: <;Ayddenme, no puedo més!» El Moateplo no ha werido hacerme los papeles ni nada. No podfa: més que dejar de veintidés afios en la cams, con 39° de fiebre, y venir aga, En cata oraba, y gritaba, Mi hijo vino a casa cstaba cumpliendo el servicio militar, vino a casé y estaba en. fermo. Yo, aquf, siempre me he sentido bien, no puedo quer jorme ni aqusar a los médicos, Sélo pido una cosa, por favor, ‘os necesito: en ver de datme estos comprimidos que no estén hechos para mi estémago, dénme otra cosa. ¥ atin tengo algo més que decir: sefior director, el cltimo domingo me robs. ton mil trescientas liras, Naturalmente yo no acuso a nadie. Pero esto no sélo me ha pasado a ml, sé de otra enferma. No scuso 4 nadie, ni a las enfermezas ni a la madze superiora, Porque Ja pobre no puede tomar sobre sf esta responsabilidad, Yo estoy sana mentalment OTRA VOZ: Estas cuestiones deben resolverse en el inte ior del servicio, ANGELA: Yo quisiera decitle, sefior director, que incluso 53 en el pabellén A-Mujeres, lo mismo que en el pabelién A-Hom- bres, hacen falte armaarios pars poder guards: nuestras cosas, De otre modo no te pueden guardar.No venemoe ni siquiers tna silla jumto 4 la came ni en pequetio armario para guarder en €l nuestras cosas, Yo no acuso a nadie, ni siquiers # los hrospitalizedos, son enfermos, no lo hacen deliberadamente, 1o hacen por olvido, no seben codles ton sus cosas. Me sucedié el otto dfs que, cuando iba e salir con Irma, ella cogié mi yes tide y dijo gue era ef suye, y no quiso devolvérmelo. RENATO: (mucho més calmado): :Qué tienen que ver esas ias con Je asambles? ANGELA: Algo ticnen que ver. Se estd bien aquf, se come, se bebe, se duerme, y si yo no tuviese hijos Srmaria inmedis, famente para quedarme siempre aqui. Me siento bien aqui, me siento como jamds me habfa sentida, y todo se lo debo al Sefior director y al doctor Slevich, al cual conoc! primero. BASAGLIA: Cuando mandamos fuera a un enfermo, que- da bajo el cuidado de un pariente. Y muchas yeces le acogen como si ce tratara de un paquete, GIOVANNA: Yo no retiro lo que he dicho, BASAGLIA: Haris falta saber si los demés estén de acuet- do‘con usted sobre este punto, GIOVANNA: Si, todos excepto Jos que vienen para un meé o dot, que siguen una cura. Los que estén aqui desde hace varios aiios son otra cosa. Usted mismo, antes de internar al enfermo, le da consejos: intenta hacer esto y aquello, porque sila cosa no es segura se precisa la firma, UNA VOZ: Y sin embargo, bay muchos que viven fuera ¥ que no vienen aqui. Viven fuera y estén muy contentos. GIOVANNA: Esto quiere decir que han triunfado, que se tado bien y que todo va bien, Pero no se trata de la ad, deben set el 10%, Debe haber un 10 % que se adapta y que se conduce bien, RENATO: Habria que mandatles a trabsjar fuera en vee de tenerles encerrados dndoles de comer. Habsla que coger ‘otros enfermos en su lugar, hay miés enfermos fuere que den. tro, Aqui se enmohecen, necesitan trabajar. hist he 34 GIOVANNA: Pero fibrice, No hay que olvidar que ve trata de den un trabajo es un trabajo para pasar el ganas alga dinero re de distraccisn durant. que es latga, sobre todo para los hombres. Y tenet le sa cién de ganar quinientas, achocientas © mi gue pata uno es como un vidtico, ayuda. Yo, que ya ten sesenta afios; trabajo de la mafana a la noche y toy RENATO: Y mientras tanto han aumentado la cetvera, el café, ete. GIOVANNA: Han tenido que aumentatlos RENATO: cA dénde va a parar este dinero? GIOVANNA: Es pare lo de Bled, UNA VOZ; Para hacer una excursién « Bled no hay dine. to. Usted dijo ayer que no habie dinero. GIOVANNA: 2Cémo que no hay dineto? Nadie ha dicho que no hubiese dinero. TOMASSO: Ayer estuve presente y casi me dio la impze. sign de que el sefior Furio se estaba burlando de nosotios: no guiso decimos unto bebia en la caja del club para las excur siones y para lo demés. GIOVANNA: Esto no es cierto. El no sabe nade, LETIZIA JERVIS: No es que no quiere; Tomasso. Yo tampoco sé nada. 1 FURIO: Yo sélo podtfa dar una cifta aproximada, Debe #6, alrededor de custrocientas mil lites, Pero puedo lo que se gast6 para ir al circo: se gastaron cuatenta mil liras. Puedo decit esto porque me lo han comm ANDREA: e¥ Je parece 4 usted bien gastar cusrenta y siete mil litas para ir al circo? GIOVANNA: A mi modo de ver fue un ertor. Yo ya dije que no desde el print BASAGLIA: Entonc GUIDO: Para las epara qué sirve el dinero? fas. Salir de una jeula pare entrar en ttt 08 pe: rece que es una salida? BASAGLIA: Yo creo que sf. Es una distraccién ANDREA: Eno seré para usted, que es libte, pero pata Jos que estamos aquf como perros, como caclaeos, es otra cosa: juns cervera vale ciento cincuenta lives, una Coce-Cole, ciento cincuenta Tiras! ¢Cémo pueden hacerlo estas pobres gentes? Esto les parece bien? ¢Por qué no se organiza una excursién @ Castelmonte o Barbana? BASAGLIA: Si ellos han querido ir al citco, no compren- do por qué se han opuesto ustedes. Ellos han quetido hacerlo. No les hemos obligado nosotros. CASAGRANDE: Habfe ciento v alll. Los que no quisieron ir, no i ANDREA: Si llegan a tener que pager no hubiesen que- tido ir ai siguiera veinte. RENATO: Creo que ahora se podrla someter a discusién Ie posibilidad de hacer una salida ANDREA: Ahore, hacemos un mons: el cfrealo pags y nadie lea uno puede cenat, beber cualquier cosa durante el paseo, pero gpagar ciento cincuents liras por un helado o por una botella de Coca-Cola? En cambio si van de paseo tienen una ce tienen por Jo menos un bisteck, sefior director, sin pagar, Jos quinientos, todos hh pero si Iega a set necesatio pagar no hubiesen i ._ RENATO: Y con la salida ocurre Jo mismo, Si fuese nece. Sitio pagar nadie ANDREA: Una come. RENATO: Pero si uno quiere comer bien tiene que pagar. VITTORIA: Y, sia embargo, hebéis ido alli, os habéis di- vertido, y ahora prote BASAGLIA: ¢Qué dice usted, Vittoria? VITTORIA: Primero fueron allf, hicieron cualquier cosa ata ir, y shore estén arrepentidos, FERRUCCIO: No estamos atrepentidos, lo pesamos bien. inco que querfan ir a aruinarse, Al menos es siempre una salida: al salir, uno 56 “* TFURIO: Opiao que 4 problems de lt slat debe plan- tearse de tal modo que se puede elegir el modo de hacerlas en grandes grupos, en pequefios grupos, dénde ir, estudiar los itinersrios RENATO: Pero cpor qué no dejamos de habla? Todos los dias hablamos Jes mismas cosas, gqué tienes que decir ti, c2- beza de chorlito? : ANDREA: Si vamos a hacer una salida podslamos ir « Cormons 0 # Capriva. No demasiado lejos RENATO: ¢Cuénto tiempo creéis que voy « quedarme aqut ain, dos afios? Large pauss, Discusiones en grupitos. ELDA: Dado que el profesor Besaglia y yo hece varios afios que nos conocemos quisiera pedicle un favor: que me destine al pabelién A, puesto que no quiero dormir con las mujeres de alli, gentendido? Yo no duermo con las demés en- fermas: me desagradsn ede acuerdo? Que me destinen de nue- lién A donde tiene que haber un sitio para mi. durante ocho afios y todas las enfermeras me'adore- ban. Que yo sepa, nunca he armado escéndalos ni nada de eso, Entonces, gpodré ir allt? (OMBRE: Vamos a ver, Giovanna, gcuéndo ba- temos esta salide? GIOVANNA: Atin falta discutir amo, ewindo y dénde ha- cetle, No basta con decir selimos. MASO: Poneos de acuerdo y haced una hermosa excarsiGn a Venecia. 7 ANDREA: No, no « Venecia, es demasido lejos. Venecia un lugar para ir a baferse y nosotros no vamos « bafernos. GIOVANNA: Para hacer una salida hey que preparer las cosas @ la perfeccién, diseutirlo antes y no asf. MASO: A ti modo de ver, después de lo que he ofdo por radio, con le aueva organizacién de los hospitales psiquiéeri os habe una cierta mejorfa. Yo creo, estoy casi seguro de tlio, que Jos servicios mejoranin: Ia remuneracién de los en- fermeros se aumentard, con el consiguiente sumento de gastos a alguacs miles de millones o quinientos millones, de los cuales podrén beneficiarse igualmente los pobtes enfermos. Es- toy casi convencido de ello, puesto que cuando algo cambia siempre entrafia un bienestar en todas las ramas, Entonces podrlamos emprender distintas cosas, y también para los ex fermos. BASAGLIA: gPor qué estos enfermos son diferentes de los otros? ¢Por qué son Jos dltimos en ser tomados en conside- racin? MASO: ¢Son diferentes a los demés? RENATO: Porque aqu{ somos exclavos y no enfermos ‘MASO: Entre los que be conocido aqu{, muchos han tenido los primeros sintomas durante 12 guerra, muchos hen quedado invélidos, como yo que petdf la cabeza a rafz de un accidente de carretera. Algunos, en cambio, ys nacieron asf, pero son ['pocos. Digamos que‘el malestar que reina en la sociedad obli- j 68 8 Ja gente a convestirse en enfermos y a venit a estos hos. .) Porque esté claro que cuando se tiene bienestar es cil que uno se ponga,a beber 0 a hacer extravagan- ++ das, La miseria es la causa de todo esto. BASAGLIA: Los ricos, sabe usted, también egan « estos, extremos... MASO: Muy pocos de ellos, Son otras Ins razones que los conducen agut. ANGELA: biéa es por una enfermedad, porque yo conozco 2 algunos que viven bien, que tienen todo el contort, todo lo que necesi in embargo, beben, MASO: Sf, sélo fos ricos, lot millonatios. Se les puede 58 meter en una clinics y no pierden ninguno de sus derechos clvicos, 20 quedan sefalades, ANGELA: Yo creo simplemente que son las miseras hu) manes las que nos traen aquf. a RENATO: Hace ye ocho aos que doy wueltas por exe hospital para curarme. ¢Por qué no me envien a otra cit ica? GIOVANNA: Abora, en el hospital, se encuentren codes UNO: Si, seguro, pero por lo que be visto, po ‘he podido pereibir mirando « mi alrededor, somos unos entos en este h Y¥ en Ios otros. hospitales e: podré habet cincuenta que estén o1zos son sélo pobres gentes a quient aqui, Yo veo que cuando un pobre que cien litas en el boll bocadillo con estas cien litas, si no hacer? Va y se paga un cuarto de vino talmente: y a fuerza de darle, acaba aqui de comer fo ie RENATO: Cuando uno sabe que ia vida de fuera es como es, no sale sin tener un apoyo, ANDREA: A usted le guste mucho quedarse porque aguf Je comide es suficiente, usted puede comer cuanto quiets. Peto fuere hay que teabsjar, MASO; Incluso para los que beben, si lo hacen ‘normal- mente y también comen, el vino sé conviette en una especie de medicina. BASAGLIA: ¢Cufles son los problemas de os enfetmos gue no son enfermos mentsles? MASO: No sé nada de ml, No soy psiquiatra, usted es quien debe saberlo. Estoy casi seguro de que es posible modi. Ja liberalizacién del hospital tuvo durante mucho tiémpo su avanzada en cl pabellén B-Hombres, que fue el primero en regirse de un modo , y que por Jo tanto «esté bien», sienten mbs al es y la obligacién de hacer salir a este persona, que tienen tapiemente ante sus ojos, que al paciente que tcabe) mente en cualquier otto sitio del horpitel. A mi modo estd menos en cuestisn el trabajo que el mecanismo ten poner realmente en contacto al paciente con el exteri por supuesto, no sélo en el sentido de ire « paseat ciudad. JERVIS: En cuanto a si esto es cierto 0 no, creo que es un problems a discutir. podrin hacer de ellos pe y set peén hoy por hoy no es una cualificacién, no sirve ads. to si son hombres como mut yeres, son lo que son. JERVIS: Lo que quiero decir es que existe una diferencia a real en comparscién con Jo que sucedia hace velote © treinte ‘sis. Hace veinte alos, se podis pensar: «Este enfctmo teabaje trate de una cues- irige les actividades mas de trabajo. més arte tendrfan un valor pedegSeico, s fresas, por ejemplo, cayo , pero cuya técnica hay que conocer); tsbajo tendsion més posibilidades de le, peto ya algo espe- concebida al modo conversiones que, ademés, setfan terapéu- ién agricole y terapia parece A mi modo de ver, del sinlo. pasado: como desde el punto enfrenténdonos con dos po- porque de este modo adquie- ién, porque de este modo se no me p BASAGLL cuanto a este pu ustedes el a m SLAVICH: Perdén, probleme que ya hemos a “JERVIS: ‘qué no hacer amba fas no dependen de vs AO de las necesidades del hospital De cualquier modo, yO cio que dcho bores es 1 demasiado tiempo. No veo por qué raxén hays que trabajar Gatante ocho horas. Envejecer con semejante progiama de ta, bajo eotidiano, impide sezuramente mimerosoe contactoe inter VASCON: Sin dads se trata de una pregunta que ustedes nteado, una pregunte desde sei exterior»: gen los que trabajaban extaban disponibles en relacién iades de la comunidad? ¢Encontraban su ica ra. en el trabejo, y por tanto, se desligaban de ls comm. DIZORZ: No, también tenian intereses comunitatios. To- aban la palabra y asistian gustosos a lar reuniones, Tanbicn Giscitian entre ellos. VASCON: ¢Entonces piensa usted que el trabajo les hacla de aletin modo més disponibles ea relacién con la comunidad? DIZORZ: No sabria aclardrselo. La gente comprendia, se decian: «Hay que trebajar. Incluso de aqui, habré que trabajar». Entonces trabsjaban y participaban. imagen de la antigua i al equipo médico, ansioso por quemar etapas hacia uns liseon 2scién total, indispontan a los enfermos libres», que pase. ban con disgusto por el pasillo donde se encontraban fos pubs. lonesjaula, Es cierto que la comunidad ya habla aportalo o estos vociferantes, dispuest 6 desde hacta afios, petrifcedos, y en los iento de mano o de labios revelaba ain a rado por todos con la mayor impaciencia. Le entrevista fe ee responseble del pabellén C- hombres, poco antes de que este servicio se abriese VASCON: ¢Podria usted darme un ejemplo de lo que s- cede en un pabelén cerrado, un ejemplo que ilusrare, por su dramatismo, Jo que es el pabellén C en relacién con los demés servicios de la comunidad? 7 gue se lo dé, 0 que se lo encuentra, Tuego, un tercer tipo de paciente, al cual reclaman la colilla; 2 08. jerarquta de Ia colilla, por ejemplo, ecosres- ermedad de los pacientes? PIRELLA: A mi modo de ver, es en gran medida indepen. 5 dicate de le enfermedad. Més bien entratia eb relaciSo, por une Parte, con le Pereonalidad vulnerable de alguncs pacientes gue, parr on total pasivided, esta ‘modo increible en contre- hospital, de le comunidad, y toma un resultados de modificar sufcientemente, y en pro- en lesiones edad ee manifests en ellos de fortna aa un com ac embargo, esto no resulta vélido. Pensamos que, efectivamente, 16 son el resultado de on fallo terapéutico, es Io que nosotros umames

También podría gustarte