Partidas del Torneo Mayor 1928

Portela - Cristiá
El ajedrez americano Año 2 tuación de la dama en oportunidad.
Nº 16 enero, 1929 6.Cf3 g6
Con buen criterio, las negras prevén
Blancas: Portela un papel importante a su alfil rey en la
Negras: Cristiá gran diagonal, concordando por lo de-
Defensa Alekhine más con su jugada anterior.
7.Ac4 Cd7
1.e4 Cf6 8.O-O Ag7
Jugada constitutiva de la defensa lla- 9.a4 O-O
mada Alekhine. De casi siempre una 10.Aa3 c5
partida inferior a las negras, si bien de 11.De2 b6
las complicaciones que resultan, pueden 12.Tfe1 …
estas obtener contraofensivas peligro- La situación, aún en pleno desarrollo
sas. inicial, tiene ya interesantes complica-
2.e5 … ciones. Las negras sabrán proceder con
Una de las tantas maneras de prose- grande exactitud por cuanto hay en su
guir, que comparte con Cc3 las prefe- juego diferentes puntos explotables.
rencias de los maestros.
2. … Cd5
3.Cc3 …
Poco usual, y jugada precisamente
con el propósito de apartarse de los ca-
minos trillados de la práctica, basados,
en c4 y d4.
3. … Cxc3
4.bxc3 …
Puede también considerarse la toma
con el peón de dama.
4. … d6 12. … Te8
5.exd6 Dxd6 13.Cg5 …
No parece mejor exd6, ni cxd6 que No es fácil, a pesar de todo, la línea a
adelantaría mucho el desarrollo blanco. seguir. Malo resultaría el engañoso sa-
Sin embargo, puede éste explotar la si- crificio 13. Axf7+ y tampoco resulta cla-
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ra la variante que deriva de 13. d4, y en
cuanto a 13. Tad1, también prometedo-
ra, envuelve un plan distinto. El blanco
desea explotar el flanco de dama y para
ello necesita que permanezca la torre en
su sitio. Contra la jugada del texto, las
negras deben forzosamente contestar,
como lo hicieron, para no perder en se-
guida.
13. …. Ce5
14.d4 …
Tampoco sirve ahora el sacrificio an-
tes aludido, porque después de 14. Axf7+
o Cxf7, Cxc4 o 14. Axf7+ Cxf7 15. Cxf7,
Rxf7; 16. Df3+, Af5; no queda al blanco
más que 17. g4, para recuperar. Por otra
parte, la continuación adoptadla por las
blancas parece más que suficiente para
triunfar. Sin embargo ... Veamos.
14. … Cxc4
Única
15.Dxc4 …
Amenazado el peón f7 y al mismo
tiempo dxc5.
15. … Df4!
De nuevo hay parada para todo.
16.Dd5 …
Y también esta fuerte jugada tiene su
contra, aunque sea forzada; suficiente.
16. … Ab7
17.Dxb7 …
No daba nada 17. Te4, a causa de
Axd5 (no 17. Dxe4?, por 18. Dxf7+, se-
guido de Cxe4); 18. Txf4, Ah6; etc.
17. … Dxg5
18.a5 …
Y las blancas parecería que han obte-
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nido su propósito de destrucción del ala
de dama enemiga con este avance que
encierra la amenaza de Ac1; atacando la
dama, seguido de axb6, ganando.
18. … Dd2!
La jugada salvadora, contra la cual
pueden ensayarse las variantes que se
quieran y tiene siempre la virtud de pa-
rar a tiempo el golpe decisivo. Es real-
mente curioso cómo, en cambio con
este golpe de dama aislada, las blancas
se ven en figurillas para proseguir sin
desventaja. Cualquier otro movimien-
to de las negras hubiera sido desastroso
para ellas inmediatamente.
19.De4 Dxc3
20.axb6 Dxd4
De nuevo el único golpe. Si en cam-
bio hubiera proseguido con 20..., axb6?,
después de 21. Ab2!, las negras estarían
perdidas. La dificultad continúa de la
partida, le da un constante interés y mé-
rito, como para considerarla una de las
mejores producciones del torneo.
21.Dxd4 Axd4
22.b7 Tab8
 23.Tab1 … sación.
Las blancas han quedado con un 28.Rf1 f5
peón de menos, pero la desventaja está 29.Ad6 Tb5
ampliamente compensada por la situa- 30.f4 e4
ción y nuevos peligros que se ciernen 31.Ac5 …
sobre el campo negro. Gana un peón, pero los dos pasados
23. … e5 de que dispone el negro son todavía un
Necesario. Si 23...Ted8; 24. Ted1, se- más que suficiente y peligroso contrape-
guido de c3. Si 23...e6; 24. Ted1! (ame- so, que exige sumo cuidado.
nazando, si Te7; 25. Txd4), seguido de 31. … d3
25. c3, etc. 32.Axa7 Tb2
24.Tec1 … 33.Ad4 Te2
Ganando por lo menos el alfil por 34.Td1 Rf7
dos peones. Aquí era tentador 24.c3, 35.Ac3 Re6
pero el blanco supuso que su adversario 36.Td2 …
respondería así: 24. c3, Axc3; 25. Tec1, Probablemente debieron las negras
Ad4; 26. Axc5, Ted8!; (siguiendo si 27. evitar este cambio de torres.
Axd4, exd4). Y amenazando Axc5, ¡que 36. … Txd2
no puede ser retomado con la torre Txc5 37.Axd2 Rd5
por Txb7!, por la posición de ahogo del 38.Rf2 Rd4
rey blanco. Y entonces, después de 27 39.Ae3+ Rc3
27. Rf1, las negras quedarían bien con 40.Re1 Rc4
Rg7. 41.Ac1 Rd4
24. … Te7 42.Ab2+ 1/2-1/2
Lo mejor, pues tratar de librar el al fil
con el avance de uno de los peones que
le quitan la salida, hubiera sido eviden-
temente fatal.
25.c3 Texb7
26.Txb7 Txb7
27.cxd4 cxd4
Aquí el reglamento, obliga a las blan-
cas a efectuar las trece jugadas que fal-
tan para las cuarenta en cuatro minutos.
Probablemente hay mejor forma de se-
guir, aunque ya se advierte que los tres La última jugada de las blancas fue
peones por la pieza son buena compen- dejada bajo sobre al suspenderse el jue-
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go. El análisis de la posición evidenció
momentos después la imposibilidad de
forzarla; por lo que ambos convinimos
en declarar las tablas.
Si Re3, 43. Ac1+, etc.
El blanco no puede alejar su rey ni
romper en el flanco de sus peones, por
cuanto el rey negro llega a apoyar el
avance del peón libre y gana.
Notas de Carlos Portela

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