“Repoblación de bosques” en El imparcial.

diario ilustrado de la
mañana, 6 de agosto de 1906, p. 1.

REPOBLACIÓN DE BOSQUES.
Tala inmoderada.-Sus desastrosos resultados-La Junta Central de Bosques.-
Sus trabajos.-Un Vivero en Panzacola.-Como se explotan los bosques.
La tala inmoderada de los bosques en todo el país, y especialmente
en buena parte del Distrito Federal, ha dado lugar a la pérdida completa de
muchos montes, y a que el Gobierno tome en sus manos a un asunto
nacional.
Desde que las vías férreas dieron facil salida a sus productos, entro la
fiebre de la tala, y cuantas que fueron impenetrables selvas, son hoy
peladas y áridas lomas, cuya escasa capa vegetal, desamparada de toda
protección, corre, arrastrada por las aguas, al fondo de los barrancos.
La intervención del Gobierno ha puesto punto final a este abuso y la
repoblación de los bosques es ya un hecho.

Desde hace tiempo que los montes del Distrito Federal dependen de la
Dirección General de Obras Públicas, y están dotados del personal de
guardabosques que reclama su cuidado, comprendiendo esta zona los
bosques que se extienden desde el Monte de las Cruces, hasta el Ajusco;
pero ahora, con la Junta Central de Bosques, la repoblación ha entrado en
un periodo de vida práctica muy satisfactorio.
La Junta está organizada de la siguiente manera: Presidente, Ingeniero
Manuel Vera; y Vocales, Don Jacinto Pimentel y Fagoaga, Ingeniero Don
José de la Macorra, Lic. Indalecio Sánchez Gavito, hijo, y D. Iñigo Noriega. Su
acción benéfica se extiende a toda la República, por medio de las Juntas
locales de bosques de los Estados.

COMO SE EXPLOTAN LOS BOSQUES.

Para la destrucción de los bosques ha contribuido todos, pobres y
ricos; los primeros han acabado en su mayor parte con los bosques
comunales, y los segundos con los de su propiedad, impulsados, unos y otros,
por una lamentable ignorancia que los hace ver un buen negocio en la
destrucción de sus predios. El error no puede ser más craso. Un bosque
explotado con arreglo a las prácticas forestales, se conserva y produce
siempre. Arrasando, se acaba de una vez y trae la ruina del terreno en que
florecía, y aun la de los interiores.
Los datos que estamos mencionando, y los que a continuación siguen,
nos han sido ministrados galantemente por el señor ing. Quevedo, que tiene
gran empeño en llevar lo mejor y lo más pronto posible a cabo su comisión.
 En los montes de esencias resinosas, bastaría, para su conservación
que los cortaran a claros intermedios.
Los macizos que quedan en pie, sirven de protección a los claros que
se cortan, y les suministran semillas para repoblarse, y cuando estos claros
están suficientemente poblados y capaces, a su vez, para servir de
protectores, puede procederse a cortar los macizos que quedaron en pie en
la primera extracción de maderas. Esto es bien sencillo, y ninguna dificultad
ofrece su ejecución; en cambio, se explota el monte, sacándole todo el
producto que es susceptible de vender, y se conserva indefinidamente.
En los montes altos, como los de encino, la explotación debe limitarse
a entregar los ejemplares adultos, enfermos o mal formados, o en completo
desarrollo, dejando la población joven de mejor configuración, para
proteger la cría; y en el monte bajo o chaparrero, hay que proceder
también por rodales intermedios, para que los brotes de los cortado, tengan
protección contra las inclemencias atmosféricas.
Con estos solo, y evitar que no entren ganados que destruyan la cría y
los brotes, está asegurada la conservación de los bosques, siempre que se
tomen las medidas necesarias para evitar incendios, como es la formacion
de fajas contra fuegos, convenientemente dispuestas, despues de la época
de las aguas. Ninguna explotación agrícola demanda menos gastos y
cuidados.

FORMACIÓN DE UN VIVERO
Después de lo dicho anteriormente, hay que agregar las funciones
higiénicas de los bosques, sus condiciones climatológicas, purificando la
atmósfera, aumentando, o por lo menos conservando en el suelo la
precipitación pluvial y templando los ardores solares.
La Junta Central ha sido aumentada, recientemente, con el ingeniero
de Montes, señor D. José de la Macorra. Periódicamente celebra sus juntas
en la casa del señor Ing. Quevedo. En la actualidad, se está formando un
vivero en Panzacola, Municipalidad de Coyoacán, y los trabajos preliminares
están concluidos, y se empieza a cultivar plantas apropiadas para las
necesidades de repoblación del Valle de México y serranías que lo
circundan. Este vivero tiene muy buenas condiciones en general para el
objeto a que se destina, y además hay gran facilidad para visitarlo, por
pasar muy cerca los trenes de Coyoacán a San Ángel, condición muy
apreciable, pues, sin molestia, podrán ir a visitarle, cuantos deseen tomar
datos sobre la práctica en el cultivo de los árboles.