Está en la página 1de 5

RESUMEN DEL COMPORTAMIENTO DE LOS PERSONAJES BÍBLICOS

Una tarea presentada a la Facultad


De la Universidad Bautista de Louisiana

En cumplimiento parcial de los requisitos para el


Título de Maestría en Artes

Miguel Minchola
Junio 2018
Miguel Angel Minchola Ybañez
Dr. Juan Puente
Teología del Sufrimiento Humano
Tarea # 1
04/06/2018

Resumen del comportamiento de los personajes bíblicos que sufrieron y cómo

eso se aplica a nuestra realidad actual.

Aceptación Realista. Es importante este primer comportamiento al sufrimiento, la

aceptación realista elimina el ¿Por qué yo?; ante tal situación (sufrimiento) reunieron

todas la fuerza y todos los recursos y enfrentaron realistamente el sufrimiento. No solo

se quedaron perplejos, o se deprimieron, lloraron y/o rasgaron sus vestidos; si no que

también oraron, suplicaron por liberación, hicieron todo lo que estaba a su alcance

tratando de librarse, sobreponerse o triunfar sobre la aflicción. A diferencia de la

Resignación la aceptación del sufrimiento nos aleja de la victimización, y nos acerca a

buscar el ¿para qué?

No Pasiva. No dejaron que otros resuelvan sus problemas, no se limitaron a

sentarse y darse en abandono a través del sufrimiento, siguieron batallando,

esforzándose por librarse y sobreponerse del sufrimiento en base a una estricta

relación con Dios.

No Estoicismo. El asumir la realidad del sufrimiento, no me debe llevar a

soportar todo teniendo una fachada de mártir; los hombres y mujeres de Dios

necesitaron ser consolados para poder sobreabundar en gozo en el Señor.


Minchola 2

Sin amargura y sin echar la culpa a otros. Ellos no expresaron amargura, ni

buscaron culpar a otro. No hubo auto conmiseración alguna.

Aprendieron a regocijarse. Se gozaron en su tribulación, en su sufrimiento; este

testimonio aparece en el Nuevo Testamento y tiene que ver con la relación que cada

uno tiene con Jesús el Cristo. El apóstol Pablo le dice a la iglesia de Filipos que se

regocijen en el Señor. Una Iglesia sufriente como la de Filipos aprendió a hacerlo

confiando en las promesas del Señor; aún servía a los santos dando sus ofrendas para

cada necesidad. El Apóstol Pedro nos dijo que si alguno padece como cristiano, no se

avergüence sino glorifique a Dios por ello. Jesús el Cristo nos dijo que en el mundo

tendremos aflicción, pero Confiemos, porque El venció al mundo; eso nos muestra que

el sufrimiento por Cristo va hacer parte de un seguidor por Cristo.

Los apóstoles en el libro de Hechos, después de haber sido azotados, salieron de la

presencia del concilio, gozosos de haber sido tenidos por dignos de padecer

sufrimiento por causa de Cristo.

Protestas y clamores. La Palabra de Dios me dice que Jesús puso su vida

voluntariamente a favor nuestro, él fue llevado como oveja al matadero. Jesús sufrió

todo el oprobio con gozo sabiendo a quien estaba obedeciendo. Todos los santos del

Antiguo y Nuevo Testamento asumieron su sufrimiento, no lo enfrentaron como ovejas

yendo al matadero, como Jesús, sino que clamaron para ser librados, protestaron; ellos

se condujeron y se comportaron como cualquier persona normal, hicieron preguntas,

hicieron todo lo posible para aliviar su sufrimiento sin embargo todas sus quejas fueron

ante Dios y no contra Dios.

¿Cómo se aplica a nuestra realidad?


Minchola 3

Debemos entender que el sufrimiento es algo inherente al ser humano. Todos los

hombres vamos a sufrir; por tal motivo no debemos minimizar el sufrimiento del otro y

maximizar el nuestro; lo importante está en cómo debemos afrontar el sufrimiento.

El testimonio de los hombres y mujeres de Dios del Antiguo y Nuevo Testamento

debe ser digno de imitar. Debemos aceptar el sufrimiento como algo real en nosotros.

Resulta difícil aceptar lo que no percibimos como bueno, gratificante o positivo. Y es

más difícil aún cuando se trata de dificultades y sufrimientos de todo tipo. No se trata

de volverse pasivo y tragárselo todo sin pestañear.

No debemos tratar de evitar el sufrimiento haciéndonos el fuerte, tenemos que

humillarnos delante de Dios, el siempre estará con nosotros, el salmista decía Aunque

afligido yo y necesitado Jehová pensara en mi, mi ayuda y libertador eres tú, Dios mío

no te tardes (Salmos 40:17).

El sufrimiento nos revela fundamentalmente dos cosas: lo que somos ya aquí en

la tierra y lo que nos espera en el más allá. En efecto, al sufrir por causa de Cristo, el

Hijo de Dios, somos como aquellos profetas del Antiguo Testamento que sufrieron y

dieron su vida por predicar a los hombres la voluntad del Creador. Como ellos, somos

siervos del Altísimo y de la misma manera en que ellos gozan ya de la gloria divina,

también nosotros la disfrutaremos algún día no muy lejano. De esto debemos

alegrarnos, de que nuestro sufrimiento presente, que se convertirá en un triunfo eterno

como les sucedió a los profetas que fueron antes que nosotros,

Si dejamos que el sufrimiento nos frustre, eso va traer lamentos, el sufrimiento

no nos debe parar, debemos seguir cumpliendo nuestras obligaciones, seguir adelante.
Minchola 4

Hay quienes, ante el sufrimiento de la vida, se rebelan contra Dios y le echan las

culpas de todas sus desgracias. Le dicen: ¿Por qué me has hecho esto? Prefiero morir

a vivir. Quiero suicidarme, así no vale la pena vivir. Algunos le exigen la salud, como si

fuera un derecho adquirido, y dicen: Si no tuviera hijos que cuidar... Si estuviese solo,

pero tengo una familia que alimentar y tengo muchos problemas que resolver y muchos

planes que realizar. Pareciera que le dicen a Dios que ellos son seres indispensables

en el mundo.

Pero Dios no se divierte ni se lo pasa en grande viéndonos sufrir, como si tu dolor y tu

enfermedad fueran caprichos de su entretenimiento para los ratos libres. En cambio, se

siente muy contento, cuanto ve que tú te realizas a través del dolor y maduras y llegas

a ser mejor y más feliz.

También podría gustarte