La palabra “mandala” proviene de la India del sánscrito. Es u diagrama simbólico en
el budismo que representa la evolución del universo respecto a un punto central. Traducida significa círculo. Para los hindús, las mandalas tienen un significado espiritual, y cada uno de los colores que lleva también.
¿Para qué sirve una mandala?
Para meditar y encontrar el lado espiritual de cada persona, el verdadero yo.
¿En tu persona, qué beneficios tiene una mandala?
De relajación y meditación.
¿Qué significado tienen los colores de una mandala?
Rojo: Primer Chakra. Es el color del amor, de la pasión, la fuerza, resistencia, independencia, conquista impulsividad, ira y odio. Naranja: Segundo Chakra: Energía, optimismo, ambición, actividad, valor, confianza en sí mismo, afán de prestigio y frivolidad. Amarillo: Tercer Chakra: Es la luz, el sol, alegría, entendimiento, liberación crecimiento, sabiduría, fantasía anhelo de libertad, envidia y superficialidad. Verde: Cuarto Chakra: Equilibrio, crecimiento, esperanza, perseverancia, voluntad curación, integridad, bienestar, tenacidad y prestigio. Azul: Quinto Chakra: Es el color de la calma, paz, serenidad, seguridad, aburrimiento, paralización, ingenuidad o vacío. Índigo: Sexto Chakra: Ayuda a comunicarse con el ser interno, abriendo la intuición. Permite aprender a dejar fluir los mensajes del cerebro, conectando directamente a la inteligencia de la conciencia cósmica. Violeta: Séptimo Chakra: Es el color de la mística, magia, espiritualidad, transformación, pena, inspiración, renuncia y melancolía. Rosa: Significa amistad, sociabilidad, comunicación, imaginación, humor, encanto, egoísmo, necesidad de reconocimiento. Blanco: Representa la pureza la perfección y la sinceridad. Puede expresar luz, amistad, paz y felicidad. Negro: Se asocia con el misterio, oscuridad, tristeza o miedo. Puede representar lo opuesto al blanco. Gris: Significa la inseguridad, indecisión, ausencia de energía, y suele expresar duda. Marrón: Es el color de la tierra, de la naturaleza, y del mundo natural. Dorado: Simboliza la sabiduría, claridad, lucidez, vitalidad y grado máximo de perfección espiritual. Plateado: Es el color de las capacidades psíquicas y emociones fluctuantes. Morado: Simboliza la contemplación, amor al prójimo, idealismo y sabiduría.