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RESUMEN: El Análisis
Teológico de la Realidad
(ATR) que proponemos, se
inscribe dentro de un proyecto
de actualización del pensamien-
to crítico que tuvo su expresión
pujante en las décadas del 60 y
del 70 en América Latina y en
África. En tanto pensamiento
that had an important expres-
trascendental plantea otro mun-
sion during the 70s and 80s in
do posible, otro modo de ser,
both Latin America and Africa.
otra manera de vivir. Trasciende
As a transcendental thought,
lo inmediato y el presente tal y
the theological analysis of
como existen. Pero lo sugiere
reality poses another possible
desde y dentro de la misma
world, another way of being,
historia, a partir del análisis con-
and another way of living. It
creto de las relaciones sociales
transcends the immediate pres-
existentes, y busca a su interior
ents as they exist. But it also
otras posibilidades que están
includes the immediate pres-
(ausentes) en la misma historia.
ent inside the history, through
Ninguna forma de pensamien-
the concrete analysis of the
to, específicamente las ciencias
existing social relations and
sociales y humanas, la filosofía
searches inside them other
y la teología, puede renunciar a
possibilities that are (absent)
este telos: la vida humana en su
the same history. There is no
radicalidad histórica.
way of thought, specifically so-
ABSTRACT: The theological cial and human sciences,
analysis of reality that we pro- which can renounce to
pose is a part of an actualisation this telos: human life in
project of the critical thought its historic radicality.
E
l ATR que planteamos se ins- desarrollismo en la política econó-
cribe dentro de un proyecto de mica capitalista de sustitución de
actualización del pensamiento importaciones. Desde su perspectiva
crítico que tuvo su expresión pujan- crítica, la TD develaba los efectos
te en las décadas del 60 y del 70, perversos del mercado mundial tan-
en América Latina y en África1. En to en la estructura productiva como
ciencias sociales se conoció como en la cultura de las sociedades peri-
la teoría de la dependencia (TD)2. féricas. De su concepción se infería
Era una concreción de pensamiento la demanda de construir un pensa-
contrahegemónico, en contextos miento propio. En este marco de
neocolonialistas, y se inspiraba en referencia nació, se nutrió, creció y
el marxismo europeo que se venía maduró la teología de la liberación.
reproduciendo principalmente a No obstante, la TD fue neutra-
través de las orientaciones ideológi- lizada como teoría explicativa de
cas de los partidos comunistas y, en la realidad social por la imposición
menor medida, en ámbitos acadé- del pensamiento único representado
micos. Pero también era respuesta en la teoría neoliberal, desde la dé-
a la teoría del desarrollo, devenida cada de los 80, con la cual se justi-
E
s necesario fundamentar de análisis desde la teoría fetichista, lo
qué manera podemos hablar cual implica un cambio de punto
de una teología histórica y de vista. Con todo, aunque hay un
trascendental, al mismo tiempo. En nuevo enfoque, del primer estudio
recientes reflexiones, Franz Hinke- no se podría deducir la llamada
lammert (2007), retomando el exa- determinación, sino apenas un
men riguroso de la teoría fetichista condicionamiento; así lo puntualiza
de Marx, viene incorporando estos este autor: “La palabra en alemán
dos aspectos como parte constituti- es bedingen, lo que no significa
va del pensamiento crítico global. determinar, sino condicionar. Con-
De modo que el conocimiento dición en alemán es Bedingung, de
teológico —en particular el de la lo cual se deriva el verbo bedingen.
liberación— bien se podría inscribir Otra palabra es entsprechen, que
dentro del mismo, tal y como lo significa corresponder. La palabra
hemos venido sosteniendo. ‘determinar’, Marx no la usa para
Para recuperar el sentido ma- estas relaciones. Por eso, Marx no
terialista histórico del análisis de tiene una teoría de la causación
Marx —y desde éste postular la de la superestructura por la base”
perspectiva trascendental al interior (Hinkelammert 2008: 2, nota a pie
de la historia— Hinkelammert co- de página). De otra parte, la segun-
mienza con dos glosas a las inter- da consideración tiene que ver con
pretaciones que se han hecho del la posición que ocupa este nuevo
pensamiento del filósofo de Tréveris. análisis de El Capital, en el conjunto
Por una parte, revisa la procedencia del pensamiento de Marx. Hinkela-
del análisis de la relación entre mmert cree que allí Marx vuelve a
base económica de la sociedad y la su pensamiento juvenil donde ya
superestructura ideológica, desde la había hablado del “imperativo cate-
cual la tradición marxista ha inferi- górico de echar por tierra todas las
do la pretendida determinación de relaciones en que el hombre sea un
aquella sobre ésta. Hinkelammert ser humillado, sojuzgado, abando-
precisa que dicho análisis aparece nado y despreciable”. Al hacer esa
en 1859 en el libro Contribución a vuelta a su pensamiento primigenio,
la crítica de la economía política, y sus intérpretes no pueden postular
no en El Capital cuya primera pu- una supuesta ruptura epistemoló-
blicación fue en 1867, ocho años gica que necesariamente llevaría
después. En El Capital, más que el al enfoque con el que buena parte
estudio objetivo que pretendió en del marxismo ha leído a Marx: el
el anterior texto, Marx desarrolla un de un estructuralismo pretendida-
Así, pues, lo evidente son las 2008: 9). La posibilidad que se abre
relaciones materiales —como si fue- es la de los juicios críticos basados
ran cosas— entre personas, y las re- en una realidad que está más allá
laciones entre las cosas como si fue- de lo evidente, donde el sujeto no
ran verdaderas relaciones sociales. Y es, o de otro modo, es como au-
lo que no es evidente son las rela- sencia que grita. La ciencia debe
ciones directamente sociales de las hablar de esta realidad y desde allí
personas en sus trabajos (otra forma juzgar críticamente a la teoría que
de decir que “el ser humano es ser no habla de ello; la ciencia, enton-
supremo para el ser humano”). Las ces, debe mostrar lo que es y lo que
últimas relaciones, aunque no son no es: esto es pensamiento crítico, y
evidentes, existen, están presentes, esto es trascendencia en la historia.
así sea como ausencia, de modo
Hinkelammert observa cierta
que son parte de la realidad. Al res-
ambivalencia en el pensamiento de
pecto, afirma Hinkelammert: “Pero
Marx en lo que tiene que ver con el
esta dimensión humana presente
paso de este mundo o este orden de
por ausencia es objetiva y por tanto
cosas, a las relaciones directamente
su reconocimiento es necesario. No
sociales de las personas, es decir,
puede haber ciencia más allá de la
al orden donde se viva el reconoci-
ciencia ideologizada sin este reco-
miento subjetivo o ese otro mundo
nocimiento”. Entonces, se abre otra
posible. En general, considera que
posibilidad para el pensar: “Se trata
Marx vislumbra dicho paso como
de una dialéctica de la presencia de
realmente posible, descontando los
una ausencia, que no es hegeliana.
límites de la conditio humana y el
De hecho se trata de una dialéctica
escenario de su imposibilidad:
trascendental…” (Hinkelammert
L
a visión del mundo capitalista min con otras fuentes, particularmen-
efectuada por Marx desde la te la teológica. Por esto, podemos
teoría del fetichismo —entendi- encontrar en su visión, de forma más
da como teoría del espejo— la llevó explícita, la perspectiva trascendental
a cabo y la extendió Walter Benja- del materialismo histórico.
E
l pensamiento crítico necesita sujeto humano. Absorbido, el sujeto
un sujeto que lo produzca y lo con su “su naturaleza” libre terminó
repiense. Si no, sería metafísi- siendo aplastado. Los miles de mi-
ca. El carácter histórico se lo otorga llones de empobrecidos, excluidos
el sujeto humano que lo discierne. y asesinados en el siglo XX y en
Quiere esto decir, también, que el recién iniciado siglo XXI son el
el pensamiento crítico tiene como testimonio mudo de esta debacle.
criterio de verdad al sujeto humano
¿Vale la pena seguir pensando
concreto. Lo uno no se da sin el
al ser humano como sujeto? Los
otro, ni el uno sin lo otro. Sin pen-
fundamentalistas de hoy, de cual-
samiento crítico el sujeto humano
quier índole, responden que no.
es abstraído y ve amenazada su
Los posmodernos también lo re-
existencia; sin sujeto humano no
chazan. Los modernos tradicionales
hay pensamiento crítico, ni siquiera
lo siguen afirmando por principio,
pensamiento. De aquí la ineludible
aunque no como principio de reali-
reflexión sobre el sujeto para funda-
dad. Muchas de las víctimas de toda
mentar el pensamiento crítico.
esta catástrofe gritan también que sí,
La modernidad fundó una nue- pero lo hacen desde sus necesida-
va visión sobre el ser humano, y la des concretas, y están dispuestas a
concretó caracterizándolo como alcanzarlo. En la perspectiva de un
sujeto. En cuanto tal, afirmó su au- pensamiento crítico, ya lo dijimos,
tonomía y su libertad. En principio, es un imperativo que emerge des-
estos fundamentos dejaban sin piso de la misma realidad. Y para una
la visión heterónoma del ser hu- teología que se reclama como parte
mano con respecto a Dios, la cual del anterior, no puede ser menos. El
prevaleció durante todo el medioe- hombre y el colectivo social de los
vo. Mucho más allá, la nueva pers- que hablaba Walter Benjamin son el
pectiva moderna se radicalizó hasta retorno de ese sujeto.
el punto de que, mediante procesos En los desarrollos de su pensa-
de abstracción extremos, se perdió miento crítico, Franz Hinkelammert
la noción de límite alguno para el nos ha ofrecido durante las últimas
sujeto. El resultado fue el divor- décadas reflexiones de carácter
cio de este sujeto con la historia teológico referidas al ser humano
y su asimilación a la racionalidad como sujeto. En su pensamiento,
del continuum del progreso y del nuevamente regresa el sujeto. Bien
tiempo teleológico: todo dependía lo podemos entender como elabo-
del devenir de fuerzas externas al raciones que colocan en diálogo la
El texto del Paraíso se ha leído Dios (en tal sentido, el Dios que
tradicionalmente en clave de peca- aparece allí no es perfecto, sino
do, así: Dios prohibió a Adán comer que se equivoca y se arrepiente de
del fruto del árbol de la ciencia su mal actuar (Hinkelammert 2003:
del bien y del mal (Gn. 2,17); sin 82). De otro lado, al violar Eva y
embargo, al ser violada esta norma luego Adán la prohibición, ponen
por la mujer y por el hombre (Gn. en entredicho la validez de la ley,
3,12), según la tradición, entró el y con ello se revela que hay leyes
pecado (original) al mundo. Hinke- injustas (aunque también las pue-
lammert hace otra interpretación, de haber justas). De modo que el
estableciendo una relación entre pecado no está en haber violado la
libertad, defensa y reivindicación ley injusta, pues Dios maldice a la
de la dignidad humana y concien- serpiente (Gn. 3, 14) y al suelo (Gn.
cia de la muerte e infinitud en la 3, 17), pero no a los transgresores
historia. de la ley. En cambio, el pecado
vendrá luego, cuando Caín asesine
Las críticas principales que
a su hermano (allí Dios sí maldice
Hinkelammert le formula a la inter-
a Caín).
pretación clásica se pueden resumir
de este modo: por una parte, la En la lectura positiva que pro-
prohibición, de la que se habla en pone Hinkelammert del relato del
el texto, es injusta, así provenga de Paraíso, destaca que la prohibi-
5. Para concluir