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GUÍA 1: LA SÍNTESIS EUROPEA EN LA EDAD MEDIA

NOMBRE: CURSO: 7º FECHA:

¿CÓMO SE LOGRA ENTENDER LA SÍNTESIS CULTURAL


EUROPEA?
En las últimas décadas del siglo V, el panorama que ofrecía el
mundo romano difería mucho de su época de esplendor: como ya vimos,
el invencible Imperio había sufrido la invasión de distintos pueblos
germanos y su territorio se había desmembrado. El emperador era una
figura más bien decorativa, que carecía del poder y la gloria de sus
antecesores, y el pueblo romano vivía un cambio religioso que
terminaría transformando su cultura. En este contexto, el colapso del
Imperio de Occidente abrió el escenario para que Europa occidental
experimentara nuevos y profundos cambios.
En el territorio romano se desarrollaron nuevos reinos que
adoptaron diversos aspectos de la cultura grecorromana y del
cristianismo y los fusionaron con la tradición cultural germana. Al mismo
tiempo, el mundo occidental entró en contacto con otras culturas, como
la musulmana, que influyó especialmente en ámbitos como la ciencia, el
arte o la actividad comercial. De la fusión de todas estas matrices
culturales nació la cultura europea occidental,
que se difundió a América y a gran parte del
mundo en los siglos posteriores.
ELEMENTOS GERMANOS
Los pueblos germanos, a los que Roma
consideraba “bárbaros”, estaban llamados a
heredar gran parte de la grandeza del mundo
romano. Dentro de sus características
principales, varias de las cuales van a ser parte
de la síntesis cultural europea de la Edad Media,
encontramos:
 Religión politeísta, naturalista y/o arriana.
 Propiedad comunitaria.
 Monarquía electiva y reinos patrimoniales.
 Nobleza militar.
 Administraban el Ban: justicia en el reparto
del botín.
 Economía agraria y sistema de trueque.
 Hablaban lenguas y dialectos locales.
 Leyes orales (Derecho consuetudinario).

ELEMENTOS GRECORROMANOS
Los nuevos reinos germanos se van a instalar sobre territorios que
durante muchos siglos habían sido parte del Imperio Romano, y es por
ello que van a recoger muchos de sus elementos y los van a mezclar a la
cultura que tenían. Dentro de los principales elementos grecorromanos
que van a sobrevivir en la Edad Media encontramos:
 La lengua: el latín.
 El derecho romano, la literatura y la filosofía.
 La ciencia clásica.
 La organización administrativa del Imperio Romano.
 La arquitectura romana.
¿Y QUÉ ROL JUGÓ LA TRADICIÓN JUDEOCRISTIANA EN
ESTA SÍNTESIS CULTURAL?
Uno de los rasgos que más dio unidad a la Europa medieval fue el
cristianismo. Desde que el cristianismo se adoptó como religión oficial
de Roma, comenzó un largo proceso de difusión de su doctrina y de
creación de una institucionalidad –la Iglesia católica– que desempeñó un
rol fundamental en los más diversos ámbitos de la vida medieval. La
cultura en esta época estuvo profundamente vinculada al mundo
cristiano y la creación artística e intelectual buscó armonizar la fe y la
razón, recogiendo la tradición de la filosofía clásica. Al mismo tiempo, la
Iglesia tuvo un rol fundamental en la vida política de los reinos
cristianos. De hecho, los reyes medievales debieron gobernar con el
contrapeso de la Iglesia y de poderosos señores que controlaban
importantes extensiones de tierras, y solo a fines de la Edad Media los
monarcas lograron fortalecer su autoridad.
En los siguientes elementos podemos ver la importancia que tuvo
la tradición judeo-cristiana en la síntesis cultural europea:
 Preservación de la cultura clásica.
 Importante poder político, tras convertir a los reyes germanos.
 Unificación religiosa por medio de la conversión de los pueblos
germanos.
 Introducción del matrimonio monógamo entre los germanos,
quienes (sobre todo los reyes) mantuvieron el concubinato. Al
permitirse las uniones entre germanos y romanos, se profundizó
en el mestizaje europeo.
 Al igual que el Imperio Romano, el cristianismo descansaba en la
idea de universalidad.

¡ANALIZA LA SÍNTESIS CULTURAL EUROPEA!

La coronación de
Carlomagno

...el día de la festividad del


Nacimiento de Nuestro Señor
Jesucristo, se reunieron todos de
nuevo en la dicha basílica de
San Pedro apóstol. Entonces el
venerable y benévolo Papa
(León III) le coronó con sus
propias manos con una
magnífica corona. Entonces
todos los fieles, viendo la
protección tan grande y el amor
que tenía a la Santa Iglesia
Romana y a su vicario,
unánimemente gritaron en alta
voz, con el beneplácito de Dios y
del bienaventurado San Pedro,
portero del Reino Celestial: ¡A
Carlomagno, piadoso augusto,
por Dios coronado, grande y
pacífico emperador, vida y
victoria! Por tres veces fue Alberto Durero, Carlomagno, 1512.
pronunciado este grito, y fue Representa a Carlomagno con la
proclamado por todos corona, el orbe y la espada. A ambos
emperador de los romanos. lados de su cabeza aparecen dos
Inmediatamente después el escudos: el águila imperial y la flor de
santísimo prelado y pontífice lis, insignia de los reyes franceses.
ungió con los santos óleos al rey
Carlos, su excelentísimo hijo, en
el día ya señalado de la
Natividad de Nuestro Señor
Jesucristo.

“Liber pontificalis”, XCVIII, 23-24,


Artola, M., Textos fundamentales
para la Historia, Alianza, Madrid,
1992
GUÍA 2: ¿CUÁNTO CAMBIÓ GEOGRÁFICAMENTE EUROPA DESDE EL IMPERIO ROMANO HASTA
LA EDAD MEDIA?

NOMBRE: CURSO: 7º FECHA:

Si el escenario del mundo grecorromano fue la cuenca del


Mediterráneo, durante la Edad Media este se desplazó a Europa
occidental. Si bien en el medioevo no existió una unidad territorial y
política que aglutinara al mundo occidental, como lo fue el Imperio
Romano, la idea de imperio man- tuvo su fuerza, existiendo distintos
intentos por revivir el antiguo poderío de Roma. Destacaron entre ellos
el Imperio Bizantino, heredero directo del Imperio Romano de Oriente, el
Imperio Carolingio, que unificó a gran parte de Europa occidental a
comienzos del siglo IX, y el Sacro Imperio Romano Germánico, que
alcanzó su máximo esplendor en el siglo X.
Si bien el poder político estaba fragmentado en diferentes reinos,
algunos enemigos entre sí, durante la Edad Media hubo un elemento que
dio unidad cultural y espacial a Europa Occidental: la religión católica.
Los reinos de Europa occidental integraban la cristiandad y sus límites
territoriales se distinguían claramente de los reinos cristianos ortodoxos
de Bizancio y Europa oriental y de los dominios musulmanes del norte de
África y la península Ibérica.
El mundo europeo comenzó a adquirir en la Edad Media algunas de
sus principales características actuales. Estados como Francia o
Inglaterra, surgieron de los reinos medievales; otros como España
definieron en la etapa medieval muchos de los rasgos de su identidad
cultural.

MAPA 1: El mundo mediterráneo hacia el siglo IV. Para mejorar la


administración del Imperio, el emperador Teodosio dividió el Imperio
entre sus dos hijos. Sin embargo esta división administrativa no significó
una división cultural.
MAPA 2: Europa en la Alta Edad Media (Siglo VIII). En este mapa se
pueden observar los diferentes reinos germanos que se formaron en el
territorio del antiguo Imperio de Occidente. Se puede apreciar también
que el Imperio de Oriente (Imperio Bizantino) ha perdido territorios a
manos del naciente poder musulmán.
MAPA 3: Europa a comienzos del siglo IX. El Imperio Carolingio se
constituyó en el primero intento por reconstruir la antigua gloria de
Roma.
MAPA 4: Europa en el año 1000. Existen distintos reinos en los que se
pueden reconocer las raíces de los Estados actuales. La idea imperial
persiste en el Sacro Imperio, que también se consideró heredero de la
antigua Roma
MAPA 5: Europa en la actualidad. 27 países europeos integran la Unión Europea (UE). Esta
unidad territorial ocupa unos 4 millones de km2, algo más de la tercera parte del
continente; su población bordea los 500 millones de personas.
1. Responde las siguientes preguntas:

¿Qué cambios observas en el escenario histórico medieval, si lo comparas con los espacios en los
que se desarrollaron las civilizaciones fluviales (Medio Oriente) y las culturas clásicas (sur de
Europa)?

¿Qué transformaciones reconoces en el espacio europeo desde la caída del Imperio Romano
hasta la actualidad? Señálalas.
3. ¿Qué hechos van a permitir que la unidad existente durante el Imperio Romano se fragmente
durante la Edad Media?
GUÍA 3: EL CLERO

NOMBRE: CURSO: 7º FECHA:


1. Ubica cada uno de los siguientes conceptos en cada cuadro, según corresponda:

Sacerdote – Papa – Monje – Obispo – Abad – Monja – Arzobispo – Párroco

CLERO SECULAR CLERO REGULAR

2. ¿A qué se dedican el clero secular y el clero regular?

CLERO SECULAR CLERO REGULAR

3. Justifica la siguiente afirmación: El clero secular convirtió al cristianismo a los líderes


germanos, pero el clero regular convirtió al pueblo germano

GUÍA 4: LA IDEA DE UNIDAD EN EL OCCIDENTE CRISTIANO

NOMBRE: CURSO: 7º FECHA:


Durante los primeros siglos medievales, Occidente fue un mosaico de reinos
germanos, sin atisbos de lograr una unidad política, como tampoco un sistema legal o una
lengua común. Sin embargo, el Cristianismo permitió crear una comunidad de fieles en
torno a la Iglesia Católica y Carlomagno, uno de los reyes francos, llevó a la práctica el ideal
imperial que no había muerto.

LA CRISTIANDAD: LA UNIDAD EN TORNO A LA FE


Con la conversión de los pueblos germanos al
catolicismo, la religión cristiana se convirtió en la gran
fuerza espiritual y el factor de unidad del Occidente
medieval. Las personas sentían que, antes que nada,
pertenecían a la Cristiandad, una comunidad de creyentes
que no reconocía límites territoriales, cuyo vínculo era la fe
en Cristo y a la cual se incorporaban por el bautismo. Este
sentimiento de pertenencia se reafirmó más aún en el siglo
VIII ante la amenaza del Islam.
La Iglesia Católica se erigió como la gran autoridad
espiritual de la época. Acogía a los creyentes y fijaba las
normas de comportamiento moral y social. Estar al margen
de la Iglesia significaba, en cierto modo, estar al margen de
la sociedad. Todos los acontecimientos esenciales de la
existencia, tales como el nacimiento, el matrimonio y la
muerte, eran regulados por la Iglesia y en las parroquias se
llevaba su registro. La Iglesia fijaba en el calendario las
fiestas que eran todas religiosas y las campanas de los
templos marcaban los tiempos de trabajo.
La sociedad medieval se caracterizó por ser profundamente religiosa. Una de las
preocupaciones fundamentales de los hombres y mujeres de la Edad Media era la
salvación de las almas. Parecía indiscutible la idea de que la verdadera vida venía después
de la muerte y que la salvación solo era posible al interior de la Iglesia Católica y siguiendo
sus preceptos. El temor al infierno era un sentimiento muy arraigado.
Es fácil entender, entonces, la importancia que tenían en la sociedad aquellos
miembros de la Iglesia Católica que optaban por una vida exclusivamente religiosa,
dedicados a ayudar a los fieles a encaminarse a la vida eterna y a orar por la salvación del
mundo. Constituían el orden eclesiástico. Era el caso de los sacerdotes que cumplían el
papel fundamental de administrar los sacramentos y encargarse de la “cura de las almas”.
Se les dio la denominación de clero secular a aquellos que, como el Papa, los obispos y los
párrocos, vivían entre los fieles y realizaban sus tareas pastorales insertos en el mundo o
siglo (saeculum).
Otra opción de vida consagrada a Dios era la de
los monjes. Eran religiosos, no necesariamente
sacerdotes, que practicaban el “retiro del mundo” para
vivir con mayor pureza los valores cristianos. Los monjes
vivían en monasterios, sometidos a una Regla, de donde
proviene la denominación de clero regular. El origen de
la vida monástica en Occidente se remonta a Benito de
Nursia, quien en el año 529 fundó un mo- nasterio en
Monte Casino, al norte de Nápoles, y redactó una serie
de regulaciones, conocida como Regla de San Benito,
que fue la base de todas las comunidades monásticas de
Occidente.
Las órdenes monásticas, a pesar de su retiro,
fueron centros de una importante actividad económica y
cultural. Cumplieron también, al igual que el clero secular, labores de asistencia a los
pobres, hospitalidad y enseñanza.
A partir de la siguiente lámina, señala en qué lugares del monasterio realizaban los
monjes las siguientes tareas:
GUÍA 5: EL CONFLICTO ENTRE EL IMPERIO Y EL PAPADO

NOMBRE: CURSO: 7º FECHA:

CARTA DEL PAPA GELASIO AL EMPERADOR


ANASTASIO I
“Hay dos poderes, augustísimo emperador, por
los que está regido el mundo: la sagrada
autoridad pontifícia y el poder regio. De ellos, el
primero es mucho más importante, ya que ha
de rendir cuentas incluso de los reyes y de los
hombres ante el tribunal Divino. Pues ya sabes,
clemente hijo nuestro, que aunque ocupas el
lugar de más alta dignidad sobre la raza
humana, así y todo debes someterte fielmente
a aquellos que tienen a su cargo las cosas
divinas y defenderlos con objeto de lograr tu
salvación. Sabes que en lo que concierne a la
recepción y reverente administración de los
sacramentos, debes obedecer a la autoridad
eclesiástica. [...] Así pues, en tales materias,
has de someterte al juicio eclesiástico, en lugar
de tratar de someterlo a tu propia voluntad."
Migne, J. P., Patrología latina, t. LIX, col. 42

Explica con tus palabras las razones que le da el Papa al


Emperador para dejar claro que el mundo espiritual estaba por
sobre el poder del rey:

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GUÍA 6: CARLOMAGNO Y EL IDEAL IMPERIAL EN OCCIDENTE

NOMBRE: CURSO: 7º FECHA:

Entre los reinos germanos que se conformaron en Europa, el de los francos fue
adquiriendo una mayor importancia, la cual se vio corroborada, en el siglo VIII, a propósito
de la invasión musulmana. En el año 711 los musulmanes derrotaron al rey visigodo
Rodrigo, dominaron la península Ibérica y comenzaron a avanzar por el interior del
continente. Fueron los francos quienes, bajo el mando de Carlos Martel, detuvieron este
avance el año 732 en la batalla de Poitiers. Carlos Martel era el mayordomo de palacio del
rey y de hecho era quien controlaba el reino. Su hijo Pipino el Breve lo sucedió en el cargo
y ejerció tal poder que, en el 751, apoyado por el Papa, se proclamó rey de los francos. Se
iniciaba así la dinastía carolingia, en reemplazo de la dinastía merovingia.
Desde entonces, se forjó una especie de alianza entre el Papado y el reino franco:
este contaba con el apoyo de la Iglesia Católica a la vez que le prestaba ayuda militar. Esta
alianza fue consolidada por el rey Carlos, hijo de Pipino. Carlos gobernó durante 46 años
(768-814) y, mediante una eficiente política de conquistas, logró dominar extensos
territorios de Europa, haciendo realidad el ideal de restablecer en Occidente un imperio
cristiano. Así lo entendió el Papa León III, quien lo coronó como emperador de los
cristianos el 25 de diciembre del año 800 en Roma. En adelante sería llamado Carlomagno
(Carlos “el Grande”).
Carlomagno se esmeró en gobernar su imperio en forma eficaz y con un sentido de
unidad. Estimuló el uso de la escritura y del latín como idioma oficial, se preocupó de
contar con funcionarios letrados y con una legislación común basada en las capitulares.
Dividió el imperio en más de 200 condados, cada uno de ellos a cargo de un conde,
guerrero de su confianza que percibía los impuestos, comandaba el ejército y administraba
justicia en su nombre. Las marcas, territorios fronterizos con una función militar defensiva,
quedaron a cargo de los marqueses. Funcionarios especiales fueron los missi dominici
(enviados del señor), quienes recorrían el imperio inspeccionando la labor de condes,
duques, marqueses, obispos, etc. Todos ellos, al menos una vez al año, se reunían en una
asamblea con Carlomagno, en la cual le renovaban su juramento de fidelidad personal.
Junto con organizar el imperio, Carlomagno puso especial énfasis en promover la
cultura, dando lugar al llamado renacimiento carolingio. Carlomagno fundó escuelas y se
rodeó de sabios como el teólogo Alcuino, nacido en Inglaterra, el lombardo Diácono y el
germano Eginardo. En su propio palacio de Aquisgrán funcionó una academia donde se
estudiaban las artes liberales (el trivium: gramática, retórica y dialéctica y el quadrivium:
geometría, aritmética, astrología y música), con el método de leer y comentar textos. Allí
también funcionaba una escuela para niños, que visitaba con frecuencia.
La unidad y la seguridad que Carlomagno logró establecer después de tantos siglos de
división, no perduró. Después de su muerte el imperio comenzó a fragmentarse, y en los siglos IX y
X, Europa fue sacudida por violentas invasiones. Los reyes no pudieron contenerlos y fueron
perdiendo poder. El ideal del imperio, sin embargo, no estaba muerto y volvería a hacerse realidad
en la Germania, a fines del siglo X, con el reino de los francos orientales. En el año 962 el rey Otón I
fue coronado emperador del Sacro Imperio Romano Germánico por el Papa.

MONEDA CON LA CARA DE AUGUSTO, MONEDA CON LA CARA DE CARLOMAGNO,


IMPERIO ROMANO IMPERIO CAROLINGIO

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