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UNIVERSIDAD ABIERTA PARA ADULTOS

Asignatura

Negocio, gobierno y sociedad

Tarea

Trabajo Final

Sustentado por

Yasser Melisa Tejada Marizan


16-10926

Facilitador

Marlon Ancelotti

Fecha

18, 08, 2018


San Foco. De Macorís, Republica Dominicana.

Carrera
Escuela de negocios, Administración de empresas
Contenido

INTRODUCCIÓN ............................................................................................... 3

DESARROLLO .................................................................................................. 4

UNA SOCIEDAD POCO EDUCADA Y POCO PREPARADA PARA EL

PORVENIR......................................................................................................... 5

UNA INDUSTRIA NACIONAL QUE NO RESPONDE A LA DEMANDA

INTERNA ........................................................................................................... 6

LA ELECTRICIDAD SE HA TRANSFORMADO EN UN FRENO A LA

COMPETITIVIDAD Y A LA INICIATIVA PRIVADA ........................................... 6

UN SISTEMA DE SALUD INEFICAZ E INSUFICIENTE ................................... 7

UNA PRESIÓN FISCAL MUY BAJA Y UN PRESUPUESTO SIN MARGEN DE

MANIOBRA........................................................................................................ 7

LA INSEGURIDAD Y EL TRÁFICO DE DROGA HAN CRECIDO

BRUTALMENTE ................................................................................................ 7

CONCLUSION ................................................................................................. 11
INTRODUCCIÓN
A solicitud del Estado Dominicano y bajo contrato de consultoría el economista
francés Jacques Attali, y un grupo de asesores en distintas áreas, junto a
conocidos especialistas dominicanos, prepararon un interesante y valioso
informe sobre el país y su futuro. Este estudio de la Comisión Internacional
para el Desarrollo Estratégico de la República Dominicana, es insumo para el
ministro de Economía, Planificación y Desarrollo, ingeniero Temístocles
Montás y su equipo de colaboradores. Fue entregado al Gobierno en
noviembre del 2010. El Informe Attali ha tenido muy buena acogida, por su
profundidad, independencia de criterios y seriedad intelectual.

El Informe intenta presentar un plan de desarrollo a diez años 2010-2020 en


apoyo a la Estrategia Nacional de desarrollo a 20 años, en diversas áreas de la
nación, políticas económicas, políticas sociales, reformas e institucionalización
de la Justicia, reformas políticas, el candente tema de reformas y mejor salud y
educación, el control de la delincuencia, el control del medio ambiente, mejoría
indispensable del caos eléctrico, como lo definen, el freno a la corrupción
pública e insiste en mayor transparencia. Se abarcan muchos temas centrales
de preocupación nacional.
DESARROLLO
En efecto, el Informe no brinda ninguna iniciativa nueva o toca temas que no
hayan sido discutidos y propuestos por entidades y economistas dominicanos.
El valor del Informe quizás es que viene de una Comisión de expertos
internacionales, que durante varios meses estudiaron y recabaron muchas
opiniones en el país y que fueron contratados por el Gobierno del Dr. Leonel
Fernández. El Gobierno ha hecho muy bien en buscar esta asesoría externa de
alto nivel.

En el Informe se presentan 7 llamadas Iniciativas y 77 Propuestas concretas de


acción pública y privada y reformas estructurales en todos los ámbitos del
estado y la vida empresarial y social privada. Sugiere un conjunto de medidas a
tomar en los próximos 5 años. Su enfoque es amplio y el alcance de las
propuestas es muy atinado y representan los grandes reclamos de
economistas, políticos, sindicatos obreros, profesionales y empresarios
dominicanos. Se señalan las 7 iniciativas y dentro de cada una de ellas una
serie de buenas propuestas concretas.

Recomiendo la lectura de este informe, que me imagino que publicarán en un


libro, para que así tenga mayor difusión en todo el país. En el Resumen del
Informe el mismo Jacques Attali, señala,

Con un estado endeudado y sin gran margen de maniobra fiscal, una sociedad
poco educada y preparada para el futuro, el país se arriesga, si no hace nada,
a no tener una segunda oportunidad.

Idea muy clara y real. La inercia y el conformismo sería nuestra peor traición a
los principios que cada cual tiene. Sería una fatalidad para las futuras
generaciones.

Igualmente, Attali es de opinión que la República Dominicana ha crecido muy


bien en los últimos 40 años, al 5.5 % promedio del PIB, por encina de la región,
pero se sorprende de la falta de disminución de la pobreza y el desempleo y de
la alta concentración de riquezas en pocas manos y del 37 % de pobreza con
11 % de indigencia. Dice que la sociedad se ha volcado a un individualismo
social, que no confía ni el estado y las instituciones. Palabras conocidas, pero
fuertes viniendo de un experto internacional. Califica la crisis eléctrica de
catastrófica.

En el 2010, el consultor internacional Jacques Attali dio a conocer el Informe


de la Comisión Internacional para el desarrollo estratégico de la República
Dominicana (2010-2020). Además de Attali que figura como autor general, se
incluye a una comisión consultiva que reunió a cinco dominicanos y a cinco
expertos extranjeros. Rafael (Pepe) Abreu, Rosa Rita Álvarez, Cyrille Arnould,
Carlos Asilis, José Luis Corripio, Mathilde Lemoine, Jeffrey Owens, Mario
Pezzini, Eduardo Jorge Prats, Marc Stubbe y Ian Whitman Consta el informe
de marras de dos grandes porciones. Primero, un diagnóstico y,
segundo, un manojo de recomendaciones extraídas del Proyecto de
Estrategia Nacional de Desarrollo.

 En el diagnóstico se presentan como en la lectura del santo rosario las


debilidades de la economía dominicana. A saber:
 un desempleo endémico, que introduce 100 mil jóvenes anualmente
al mercado de trabajo. La tasa de desempleo en el país se mantiene
desde hace décadas en 14%. El 56% del empleo corresponde al sector
informal, el 65% de los cuales carece de seguridad social. Sólo un 30%
de los trabajadores se beneficia de un empleo asalariado e
independiente.

2) una sociedad poco educada y poco preparada para el porvenir


En todas las evaluaciones internacionales nuestro país se mantiene a la
zaga del resto del continente. La escuela no enseña a leer ni a escribir ni a
contar ni a pensar, tampoco forma al ciudadano que ame a su patria y conozca
su historia. Para los autores del informe, el único modo de rectificar esa
circunstancia es gastando más dinero. De este modo, se llegó a la conclusión
que, cuando el Presupuesto alcanzara el 4% del PIB, podríamos enmendar los
fracasos del sistema, sin penetrar en el meollo de los problemas que traban la
calidad de la enseñanza. A saber, la formación de los maestros, la
organización de las escuelas y de las comunidades y la reformulación de las
metas.
3) Una industria nacional que no responde a la demanda interna
La mayor parte de los enclaves turísticos se hallan desconectados de la
economía; importan más del 40% de sus insumos. Durante mucho tiempo, la
plataforma de la economía se apoyó en las zonas francas, en el turismo y en
las exportaciones agrícolas. Todos esos cálculos han comenzado a
desvanecerse. En el 2005, concluyeron los acuerdos multifibras que permitían
el acceso al mercado de textiles estadounidenses a otras regiones del mundo.
De este modo, China desplegó su gran artillería. De un plumazo, las
exportaciones textiles dominicanas se redujeron en un 24%; el déficit de la
balanza comercial de bienes y servicios cayó en un 13%. La industria
dominicana no se halla preparada para la apertura del DR-CAFTA que, a partir
del 2015, comienza a anular las barreras aduaneras, sin que las simulaciones y
proyecciones imaginadas por los expertos hayan desvanecido los pronósticos
catastróficos

4) La electricidad se ha transformado en un freno a la competitividad y a


la iniciativa privada
La calidad y la fiabilidad del servicio eléctrico son desastrosas; las tarifas
eléctricas son dos veces superiores a la observada en los Estados de la región
(25 centavos de dólar kw/h contra 10 de dólar kw/h en América Latina). . El
sistema se compone de siete empresas generadoras privadas, que incluye,
además, la generación de las hidroeléctricas, que sigue siendo una porción
esencialísima del sistema estatal. A esta plataforma se añaden las tres
empresas distribuidoras, y la burocracia de un organismo rector, representado
por la CEDEE. Las pérdidas por fraudes y en las líneas oscilan entre 20 ó
25%; las propiamente técnicas, alcanzan un 12%. Para compensar el desastre
el Gobierno subsidia el sistema con el 2% del PIB que asciende a unos 700
millones de dólares por año. Y, sin embargo, las tarifas son demasiado altas,
aun cuando bajen los costos de los combustibles. El sistema debe incorporar
al pago a unos 800 mil usuarios. El informe queda naufragado en soluciones de
muy poca monta.
5) Un sistema de salud ineficaz e insuficiente
Aun cuando el país cuenta con una importantísima red de hospitales, los
centros se hallan mal equipados; el personal sanitario se halla desmotivado; los
gastos individuales de la población en estos servicios superan a otros países
de la región, y en medio de esa borrasca, se revela que el agua de las
cisternas de los hospitales está contaminada; la mortalidad infantil supera a los
países que, en el continente tienen un desarrollo semejante al dominicano y la
tuberculosis duplica en prevalencia el resto de la región del Caribe.

6) una presión fiscal muy baja y un presupuesto sin margen de maniobra


La presión tributaria se sitúa entre un 13 y 15% del PIB. El 60% corresponde a
impuestos indirectos. El 55% de la población trabaja en el sector informal, y no
contribuye al fisco. El presupuesto se ha transformado en una camisa de
fuerza. Cerca del 50% del presupuesto se halla capturado por leyes y por las
subvenciones al sector eléctrico. En el 2009, el 25% de los ingresos del
Gobierno se hallaban destinados a pagar el servicio de la deuda del Estado.
Hacia el 2010, la deuda exterior se elevó a 27,9% del PIB. Todos estos
cálculos van por muy mal camino. En el 2016, el 40 % del presupuesto queda
devorado en el pago del servicio de la deuda exterior, cuyo monto supera ya el
41% del producto Bruto Interno (PIB) que ronda un poco más d 47 billones de
dólares. Toda esta circunstancia ha lanzado al Gobierno a una carrera
desenfrenada de préstamos, que, durante la presente administración del
Presidente Danilo Medina alcanzara los 12 mil millones de dólares, sin
contar los montos de la deuda interna.

6) La inseguridad y el tráfico de droga han crecido brutalmente

Entre el 2001 y 2005, la tasa de homicidios se ha duplicado—de 13 por


100.000 al 26 por 100.000. La inseguridad se halla conectada con el
crecimiento sin precedentes del tráfico de drogas. De los puertos dominicanos,
en los últimos años, han salido los mayores alijos de droga.

En el informe se insiste en la enorme cantidad de instituciones que duplican


funciones en el Ministerio de Obras Públicas y transporte, en la promoción de
las exportaciones, en las delegaciones diplomáticas en el exterior, en el
Ministerio de Agricultura. Una administración rocambolesca, que vuelve lentas
e ineficaces todas las operaciones del Estado.

Desde la publicación del Informe Attali en el 2011, hemos entrado en


barrena. En el 2010, el Estado dominicano empleaba a 450.000 empleados,
equivalente al 12% de la población en edad de trabajar. En la actualidad la
nómina del Estado alcanza a unos 750 mil servidores públicos, más del 24% de
la población en edad de trabajar. Son las obligaciones de un país que ha
desnacionalizado los yacimientos de empleos. En los últimos años, la
financiación del presupuesto depende de la emisión de bonos soberanos. La
impunidad campa por sus respetos. No hemos alcanzado progresos
apreciables en el campo de la justicia. Según la Comisión Económica de
América Latina (CEPAL), de un total de 200 casos imputados, sólo hubo una
condena. Esas circunstancias han crecido brutalmente, a pesar de
los piquetes y de las protestas delante de las oficinas públicas.

Los hallazgos del informe y sus recomendaciones resultaban bastante


modestos, si se los compara con los desafíos. Hay, sin embargo, unas lagunas
que los expertos nacionales e internacionales prefirieron omitir. Es como el
médico que le descubre al paciente un tumor cancerígeno y prefiere mirar para
otro lado.

El informe omite el peso demográfico que ejerce en nuestro país la ocupación


haitiana.

 Los autores reconocen que “hay cerca de un millón de haitianos en


República Dominicana. Estos inmigrantes, indocumentados en su
inmensa mayoría trabajan principalmente en la agricultura, la
construcción y la hotelería” (Attali: pág. 41).
 Attali pasa de puntillas, sin ahondar en las consecuencias que tienen
esos datos insuficientes para explicar la pobreza en el país. E introduce
la acusación velada al Gobierno dominicano de apatridia, con lo cual el
informe se convierte en instrumento de propaganda contra la soberanía
dominicana. Con semejante población no será posible mecanizar la
agricultura ni producir un aumento considerable de los salarios.
Calcula el autor del informe, que de no producirse una
recuperación con apoyo internacional de Haití, tras el devastador
terremoto del 2010, el colapso de ese país tendría fatales consecuencias
para el porvenir de la República Dominicana. Dicho esto, el informe
naufraga en vaguedades y en respuestas evasivas.

Ha dejado en penumbras la principal amenaza al desarrollo de la Republica


Dominicana.

A ninguno de los expertos le importa la suplantación demográfica del pueblo


dominicano en la agricultura, en las grandes obras de infraestructuras del
Gobierno y en el turismo por parte de las marejadas de haitianos que han
penetrado en el país. Todos saben, sin embargo, que al privar al
dominicano de esos yacimientos de empleos los están llevando a un callejón
sin salida, cuya válvula de escape será la delincuencia, la desesperanza, el
narcotráfico. Tiene Jacques Attali una fama muy bien ganada de promover un
Gobierno mundial. Una nación no puede salvarse siguiendo el modelo de los
partidarios de la eutanasia. La mudanza del pueblo haitiano a nuestro territorio
nos plantea varios desafíos: ¿cómo promover el empleo de calidad y
mecanizar la agricultura? ¿Cómo enfrentar la importación de enfermedades
que amenazan a nuestra población y al turismo? ¿Cómo contrarrestar las
maniobras de los grupos que junto al propio Gobierno han hecho todo lo
posible para debilitar al Estado dominicano y adjudicarnos la responsabilidad
sanitaria, social y política con la población haitiana?

La misma ceguera se observa en el “Proyecto de estrategia nacional de


desarrollo” ( ME y PD, 2010). De ahí que el compendio de soluciones sean, en
verdad, irrisorias; quedan reducida a un corpus de siete iniciativas, tan poco
amenas y originales como éstas:

Iniciativa n° 1. Devolver la confianza en las instituciones. Iniciativa n° 2.


Desarrollar servicios públicos de calidad. Iniciativa n° 3. Formar a las
futuras generaciones. Iniciativa 4. Preparar el país para la competencia
internacional. Iniciativa n° 5. Organizar el financiamiento de la Estrategia
Nacional de Desarrollo. Iniciativa n° 6. Proteger el medio ambiente y
ordenar el territorio. Iniciativa n° 7. Integrar al país en la región y en la
competencia internacional.

Para llevar a cabo estas iniciativas, se han lanzado al ruedo 77 propuestas,


extraídas del vademécum contenido en el Proyecto de Estrategia. Se trata del
reciclaje de las recomendaciones de los organismos internacionales; y de los
enfoques histéricos de los que combaten el modelo de nación, dotada de
soberanía e independencia. Attali, que anda de profeta famoso, reiterando en
cada informe las mismas recetas y el mismo batiburrillo de ideas liberales, sin
tomar en cuenta sus estruendosos fracasos. El informe que ha dado a la
estampa sobre la República Dominicana ni siquiera figura en su bibliografía, a
pesar de que costó la friolera de un millón de dólares.

El informe se lee, con entusiasmo y curiosidad, como suelen leerse las novelas
de aventuras. Según esto, durante los últimos cuarenta años– desde 1970 al
2008– el país creció de manera sostenida a un ritmo de un 5,5% anual lo que
se considera excepcional, en comparación con las economías del hemisferio
que, en igual período crecieron apenas a un ritmo de 3,5%. De
pronto, descubrimos que todo el armazón de esa prosperidad descansaba
sobre unos cimientos de barro: un endeudamiento improductivo capaz de
desmantelar todos los progresos y unas soluciones ficticias, fundadas en
premisas falsas.
CONCLUSION

Este trabajo es una gran contribución a todo el país. Merece el elogio de todos
y el estudio serio y sin sectarismo de todos los partidos políticos. Con la
propuesta de Estrategia Nacional de Desarrollo 2010-2030 consensuado con el
país y con ese Informe de Attali, la nación tiene dos documentos vitales, para
aglutinar esfuerzos e ideas.

Ahora hay que asumirlo e implementarlo de verdad. Se tienen las bases para
un Pacto Social y Económico Nacional, firmado por todos los partidos, como en
España fue el famoso Pacto de Moncloa. Las naciones se desarrollan a largo
plazo con políticas también a largo plazos. Enhorabuena por el Informe.

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