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Ago.13.

2018
#40diasdemilicia 🛡 //Devocional Día #36/

** EL PODER DE LA DECLARACIÓN HABLADA **

La muerte y la vida están en poder de la lengua, y el que la ama comerá de sus frutos
(Proverbios 18.21).

PRINCIPIOS
1- Barak es una expresión de alabanza, declarar con frases inteligentes palabras de “bien
decir”. Es una forma de declarar el bien de Dios sobre algo o alguien. Dios bendijo a Adán y
Eva: ‡Y los bendijo Dios,‡‡ y les dijo: Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra, y sojuzgadla, y
señoread en los peces del mar, en las aves de los cielos, y en todas las bestias que se
mueven sobre la tierra (Génesis 1.28). Bendecir se entiende como dar permiso para realizar
algo. Dios les dio permiso a Adán y Eva administrar su creación. Ya que Dios nos hizo a su
imagen y semejanza, el mismo poder que estuvo en la creación está en nuestro interior,
tenemos un poder creativo dentro de nosotros que nos permite usar nuestra boca para
declarar buenas cosas.
2- El apóstol Pablo dijo: Hablando entre vosotros con salmos, con himnos y cánticos
espirituales, cantando y alabando al Señor en vuestros corazones; dando siempre gracias por
todo al Dios y Padre, en el nombre de nuestro Señor Jesucristo (Efesios 5.19-20). Hablando
en salmos, declarando palabras que exaltan a Dios. Con himnos y cánticos espirituales,
usando nuestra boca para mantenernos durante el día expresando a Dios nuestra adoración.
¡Somos seres adoradores! Cantando y alabando al Señor en vuestros corazones, de la
abundancia de corazón habla la boca. Dando siempre gracias por todo al Dios y Padre,
sabiendo que todo lo que nos sucede es para nuestro bien. En el nombre de nuestro Señor
Jesucristo, expresamos nuestra dependencia total en Jesús.
3- Nosotros podemos usar nuestra boca para bendecir o maldecir, y debemos ser sabios en
como usamos nuestra boca. De una misma boca proceden bendición y maldición (Santiago
3.10). Dios nos llama a operar el poder del reino en la Tierra, a manifestar el poder que actúa
en nosotros: Y a Aquel que es poderoso para hacer todas las cosas mucho más
abundantemente de lo que pedimos o entendemos, según el poder que actúa en nosotros
(Efesios 3.20). En Daniel 4.34 expresa una declaración de exaltación a Dios cuando
experimenta el poder transformados de Dios en su vida. Dios nos ha hecho seres adoradores,
pero usamos nuestra boca para dar gloria a Dios cuando hemos pasado por ese proceso de
cambio. En el salmo 40.1-3 se usa el término Barak como una expresión de alabanza, como
un medio de bien-decir de las maravillas de Dios.
4- En Génesis 1.1-2 vemos la condición de la creación y aunque dice que el Espíritu se movía
mientras Dios no habló nada sucedía. En el versículo tres leemos: ¡Y dijo Dios: Sea la luz; y
fue la luz! ¿En qué momento empezamos a ver una transformación de la Tierra? ¡En el
momento que Dios habló! Se usa el término hebreo Pneuma para “Dios dijo”. Pneuma es el
aliento (aire) que sale de la boca cuando hablamos. Es el aliento de Dios que trae poder
creativo. Así será mi palabra que sale de mi boca; no volverá a mí vacía, sino que hará lo que
yo quiero, y será prosperada en aquello para que la envié (Isaías 55.11). Ese mismo poder
creativo de Dios está en nosotros. La escena de Josafat es muy clara; cuando va a la guerra
detiene al pueblo y declara: Oídme, Judá y moradores de Jerusalén. Creed en Jehová vuestro
Dios, y estaréis seguros; creed a sus profetas, y seréis prosperados (2Crónicas 20.20). ¡La
palabra prosperar se refiere al poder creativo de Dios para producir sobrenaturalmente!
5- La mayoría de nosotros nacimos en una cultura donde la educación se desarrolló basada
en las maldiciones. ¡Eres un tonto!; ¡No sirves para nada!; ¡Eres una basura! Pero ahora
entendemos que de nuestra boca sale poder creativo. ÁLa muerte y la vida están en poder de
la lengua, y el que la ama comerá de sus frutos (Proverbios 18.21). ¡El que la ama comerá de
sus frutos! ¿Qué frutos quieres comer? ¡Pneuma sala de nuestra boca! Este poder creativo
que sale de nuestra boca crea una atmósfera positiva para el cumplimiento de los propósitos
divinos o negativa para tener un retroceso en lo que sabemos que Dios puede traer. En
Génesis 49 observamos a Jacob bendecir a sus hijos. Podemos hacer un buen hábito diario al
bendecir todo lo que hacemos. La congoja en el corazón del hombre lo abate; Mas la buena
palabra lo alegra (Proverbios 12.25). Panal de miel son los dichos suaves; Suavidad al alma y
medicina para los huesos (Proverbios 16.24).

💬APLICACIÓN
Jesús nos demostró el poder de la declaración hablada. Sus oraciones fueron cortas,
enfocadas y con autoridad. Jesús no oró por los enfermos, los sanó. No oró por los
endemoniados, los hizo libres. Jesús no oró pidiendo ayuda al Padre para que parase la
tormenta, aplicó la autoridad sobre ella. Una y otra vez podemos ver la expresión hablada con
autoridad y viendo los resultados inmediatos. La operación del poder del Reino es
impresionante cuando articulamos frases de fe llenas de autoridad sobre objetivos específicos.
Veamos algunos ejemplos:
1. Jesús detiene la tormenta (Marcos 4.39). ¡Calla, enmudece!
2. El paralítico de Betesda (Juan 5.8). Levántate, toma tu lecho, y anda.
3. Josué detiene la rotación de la tierra (Josué 10.12). Sol, detente en Gabaón; Y tú, luna, en
el valle de Ajalón.
4. Pedro y Juan en la curación de un cojo (Hechos 3.6). ¡Levántate y anda!
5. Liberación de un endemoniado (Marcos 5.8). Sal de este hombre, espíritu inmundo.
6. Curación de un paralítico (Hechos 9.34). Eneas, Jesucristo te sana; levántate, y haz tu
cama.
7. Resurrección de una muerta (Hechos 9.40). ¡Tabita, levántate!

💬DESAFÍOS
Dios nos ha dado la autoridad para declarar con nuestra boca, el mismo poder de Jesús en la
declaración hablada está en nuestra boca. Un ejemplo claro lo tenemos en el profeta Elías.
Vive Jehová Dios de Israel, en cuya presencia estoy, que no habrá lluvia ni rocío en estos
años, sino por mi palabra (1Reyes 17.1). ¡Parece que tenemos delante de nosotros a un
profeta presuntuoso! Pero en realidad no es así. Veamos lo que testifica el apóstol Santiago
muchos años después: Elías era hombre sujeto a pasiones semejantes a las nuestras, y oró
fervientemente para que no lloviese, y no llovió sobre la tierra por tres años y seis meses. Y
otra vez oró, y el cielo dio lluvia, y la tierra produjo su fruto (Santiago 5.17–18). ¡Un hombre
sujeto a pasiones! Es decir, una persona de carne y hueso como tú y como yo. Con
debilidades y situaciones que resolver, pero que podemos hacer cosas gloriosas con el poder
pneuma que sale de nuestra boca.
¡Muy bien! Vayamos a nuestros desafíos. No vamos hacer declaraciones sin ton ni son, vamos
a usar la autoridad divina enfocada y bajo la voluntad perfecta de Dios. El Espíritu Santo es
nuestro maestro y guía. En primer lugar, haz una oración pidiendo dirección al Espíritu de
Dios. En segundo lugar, define donde vas a poner en práctica el conocimiento. Desarrolla una
lista de situaciones a las cuales vas a enfrentar con autoridad mediante la declaración
hablada. Aprende de las frases usadas por Jesús, los profetas y los discípulos.
Autoridad sobre:
Demonios – ¡Sal fuera! ¡Sé libre!
Tempestades de la vida - ¡Calla, enmudece!
Enfermos - ¡Sé sano! ¡Levántate y anda!
Opresiones demoniacas - ¡Opresión, vete!
Espíritus que producen pobreza y miseria – Espíritu inmundo que produce pobreza y miseria,
vete ahora mismo de mi vida, por el poder de la sangre de Jesús.
Recuerda que el poder que ejecutamos es por Jesús, así que agrégalo en tu declaración: ¡En
el poderoso nombre de Jesús!
👐OREMOS
Amado Padre de gloria, muchas gracias por permitirme conocer estas verdades tan poderosas
y especiales donde puede operar en el poder del reino. Me comprometo usar mi boca para
“bien-decir” y no para “mal-decir”, determino por mi propia voluntad operar el poder del reino
de mi Padre con responsabilidad usando la declaración hablada con inteligencia. Sé que la
atmósfera espiritual donde me muevo va a cambiar por el mover del Espíritu Santo cuando
abra mi boca. También sé que el timbre de mi voz está registrado en el cielo y los ejércitos
celestiales se mueven a mi favor por medio de lo que yo declaro. Por favor, Dios mío, dame
sabiduría para hacer todas las cosas de acuerdo a tu perfecta voluntad, actuaré guiado por mi
maestro el glorioso Espíritu Santo para asegurar que todas mis acciones tengan los resultados
correctos y agradables para ti. ¡Amen!
¡Con amor... Dr. José Félix!

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