Una dama oscura, solitaria entre los mortales siempre hablaba con un árbol, de sus desventuras y amores, limpio era el corazón de esta dama, con lo que el árbol se enamoró de ella. Todos los días se veían, fuera noche o día el árbol siempre la escuchaba instante en las conversaciones, deseaba abrazarla cuando lloraba o reír junto a ella cuando se alegraba pero solo era un maldito árbol, sin movimiento, solo alma. Pidió mil y una vez a la noche que dejase expresar su amor para poder saber si su amada, le amaría de verdad o no. Y con un rayo del cielo, en el árbol escribió dos nombres: "Sauce love Enia" puesto tenia, rodeado de un gran corazón. Cuando a la mañana siguiente la dama apareció y sus ojos se clavaron en la llamada de amor, corrió lejos del árbol, a quien no volvió a ver jamás. ¿Cómo un humano iba a amar un árbol, si solo es madera y savia? Lágrimas y más lágrimas cayeron de sus ramas formando largas y caídas redes de hojas en forma de gota, y así el gran sauce se le llamó el sauce llorón... #1 Lilith, 1 de Junio de 2005