InformeFSS Nº 30 · JULIO 2018

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Dos nuevos casos autóctonos de sarampión

Se conocieron dos nuevos casos de sarampión en niños sin antecedente de viaje a zonas de riesgo.
Se suman a un primer caso notificado en CABA en abril de este año. Fueron diagnosticados en el
Hospital Gutiérrez y en el Hospital Elizalde. Los casos tienen nexo epidemiológico.

Se conocieron dos nuevos casos de sarampión en Se transmite principalmente a través de secrecio-

niños sin antecedente de viaje a zonas de riesgo.
Estos dos nuevos casos autóctonos se suman a
un primer caso notificado en la Ciudad Au-
tónoma de Buenos Aires (CABA) en abril
de este año. Los niños fueron diagnosticados en
hospitales pediátricos porteños, uno en el Hospital
Gutiérrez y otro en el Hospital Elizalde. Se trataría
de casos autóctonos, ya que no registran antece-
dentes de viaje, y con nexo epidemiológico, es decir
que los casos están vinculados entre sí.
¿Qué es el sarampión y cómo se contagia?
Es una enfermedad viral aguda, que puede ser
muy grave y altamente transmisible. Tiene un
período de incubación de entre 7 a 21 días (pro-
medio 14).
nes nasales o faríngeas, por vía respiratoria (tos o
estornudos). El período de mayor transmisibilidad
se da entre los cuatro días previos y los cuatro días
posteriores al inicio del exantema. No tiene un tra-
tamiento específico.
¿Cuáles son sus complicaciones?
Un 30% de los afectados puede presentar
complicaciones. Los grupos de riesgo para pa-
decer complicaciones son los lactantes, niños con
bajo peso, pacientes con enfermedad de base,
especialmente en menores de 5 años o mayores
de 20. Las complicaciones son producidas por el
mismo virus o por una sobreinfección bacteriana:
diarrea, otitis media, neumonía (es la causa más
común de muerte) y meningoencefalitis.

Luego de la incubación del virus, los primeros 2 a ¿Qué es un caso sospechoso?

4 días (período prodrómico) se evidencia la apari-
ción de fiebre alta, secreción nasal, conjuntival y
tos (triple catarro), manchas blanquecinas en boca
y cara interna de las mejillas (manchas de Koplik).
Posteriormente aparece un exantema cutáneo, ma-
culopapular, confluente (erupción que no se eleva
por encima de la superficie de la piel de color roji-
zo) que se inicia en cara y cuello y desciende a tron-
co y extremidades.
Un caso sospechoso es un paciente de cualquier edad
que presente fiebre de 38ºC o más, antes o durante
un exantema generalizado más cualquiera de los si-
guientes síntomas: catarro nasal, bronquial u ocular.
Un caso confirmado es el caso sospechoso con con-
firmación de laboratorio o nexo epidemiológico
con otro caso confirmado por laboratorio.

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Frente un caso sospechoso de sarampión, se debe
realizar sin demora la notificación a la dirección de
epidemiología correspondiente, el aislamiento del
paciente por 7 días y vacunar a los contactos que
tengan el esquema incompleto.
¿Cómo lo prevenimos?
La forma de prevenir la enfermedad es mediante la
vacunación adecuada, la vacuna triple viral (SRP:
Sarampión, Rubéola, Paperas), incluida en el ca-
lendario nacional gratuito y obligatorio y debe ser
aplicada a los 12 meses de vida y al ingreso esco-
lar (5 o 6 años). Deben recibir esta vacuna también
el personal de salud, viajeros, contactos de niños
y adultos inmunosuprimidos y de menores de un
año que aún no pueden ser vacunados.
Al ser una vacuna a virus vivo atenuado no la podrán
recibir menores de 6 meses, embarazadas, pacientes
trasplantados o con alteraciones en la inmunidad.
La forma de prevenir la enfermedad es
mediante la vacunación adecuada, la vacuna
triple viral, que debe ser aplicada a los 12
meses de vida y al ingreso escolar.
Los niños entre 12 meses y 5 años de vida deben
acreditar al menos una dosis de esta vacuna y las
personas entre 5 y 50 años (adultos nacidos a partir
de 1965) deben acreditar al menos dos dosis.
La vacuna antisarampionosa se ha utilizado duran-
te más de 50 años y ha probado su seguridad y efi-
cacia; para garantizar la inmunidad y prevenir posi-
bles brotes, se recomiendan dos dosis de la vacuna,
puesto que aproximadamente un 15% de los niños
no adquieren inmunidad con la primera dosis.
En nuestro país, a partir del año 1972, se incluyó
la vacuna SRP en forma obligatoria al año de edad
y, en el año 1998, al ingreso escolar. A partir del
2000, se incluyó la vacuna triple viral para iniciar
o completar esquema de vacunación a los 11 años
de edad y en el 2003, a mujeres en el posparto o
posaborto inmediato.
¿Cuál es la situación actual en el mundo?
A pesar de la existencia de una vacuna segura y efi-
caz, el sarampión sigue siendo una de las princi-
pales causas de muerte en niños pequeños a nivel
mundial. Según registros de la OMS en el 2016 mu-
rieron 89.780 personas por esta causa, la mayoría
de ellas menores de 5 años.
La vacunación es la más eficaz y segura forma de
prevención. Su implementación como estrategia
mundial ha marcado una fuerte reducción de las
muertes por sarampión.
Se estima que entre 2000 y 2016 la vacunación con-
tra el sarampión obligatoria, sumada a las campañas
periódicas con vacuna Doble o Triple viral (SR/SRP)
evitó 20.4 millones de muertes. A nivel mun-
dial, las defunciones por sarampión han descendi-
do un 84%, pasando de 550.100 en 2001 a 89.780
en 2016 (OMS). Sin embargo, el sarampión todavía
es endémico en algunos países de Europa, África,
Asia y el Pacifico. En 2013 fallecieron por sarampión
145.700 personas. En Europa, en el período enero
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2014 /marzo 2015, se registraron 23.000 nuevos ca-
sos, el 71% de ellos en no vacunados.
Los datos de 2017 evidencian que en la región eu-
ropea se cuadruplicó el número de casos respecto a
2016. Se registraron 21.315 casos y 35 defunciones.
El 72% de los casos se concentra en Rumania, Italia
y Ucrania. Países de otros continentes (China, Etio-
pía, India, Indonesia, República Democrática Po-
pular Lao, Mongolia, Filipinas, Nigeria, Sri Lanka,
Sudán, Tailandia, y Vietnam, entre otros) también
notificaron brotes de sarampión entre 2016 y 2017.
En América, hay ausencia de transmisión endémica
desde el año 2002 y fue la primera región del mun-
do en ser declarada libre de los virus de la rubéola
en 2015 y del sarampión en 2016, por un Comité
Internacional de Expertos (CIE). A pesar de esto,
la recirculación del virus en otras zonas del
mundo nos pone frente al riesgo de casos
importados por viajes y nuevos brotes.
En Estados Unidos, Brasil, Canadá y Mexico se regis-
traron nuevos brotes de sarampión, a partir de casos
importados, lo que estaría en relación con la baja co-
bertura de vacunación, en determinadas áreas.
En 2017, cuatro países notificaron casos confirma-
dos de sarampión: Argentina (3 casos), Canadá (45
casos), los Estados Unidos de América (120 casos) y
la República Bolivariana de Venezuela (727 casos).
Las consecuencias sanitarias de la
ausencia de políticas de inmunización
En el año 1972 se introdujo la vacuna antisaram-
pionosa en Argentina. Se han logrado y mantenido
buenas tasas de cobertura de vacunación desde el
año 1990 lo que, junto a la vigilancia intensificada,
ha evitado la ocurrencia de casos auctóctonos desde
el año 2000. Luego de ese año, se han reportado ca-
sos importados relacionados a viajes a zonas endé-
micas. Sin embargo, en lo que va de este año y luego
de 18 años sin casos autóctonos, se han registrado
en nuestro país tres casos de sarampión sin antece-
dentes de viaje.
En abril, una alarmante carta firmada por
los Jefes de Inmunizaciones de 23 de las 24
jurisdicciones del país (la única que no firmó
es la representante de la Provincia de Buenos
Aires) denunciaba la situación crítica por el
faltante de algunas vacunas, como la Triple
Viral (para Sarampión, Paperas y Rubéola).
Esta situación no puede desligarse de la ausencia de
políticas de inmunización que se convirtió en una
constante en los últimos dos años. En abril de este
año se conoció una alarmante carta firmada por los
Jefes de Inmunizaciones de 23 de las 24 jurisdiccio-
nes del país (la única que no firmó es la representan-
te de la Provincia de Buenos Aires) en la que se de-
nunciaba la situación crítica que se vive desde el año
pasado por el faltante de algunas vacunas entre las
que se encuentra la Triple Viral (para Sarampión,
Paperas y Rubéola).
Asimismo, según consta en el acta de reunión de la
Comisión Nacional de Inmunizaciones, que debe
asesorar y elevar recomendaciones al Ministerio de
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Salud en este tema, publicada en agosto de 2017, se
informó que la cobertura de vacunación para la pri-
mera y segunda dosis de vacuna triple viral estaba
por debajo del 95% en los años 2015 y 2016.
Teniendo en cuenta este dato y el estimado para la
falla primaria de la vacuna, se calcula a partir de la
última campaña de seguimiento del año 2014 una
acumulación de individuos susceptibles entre 1 y 4
años de edad de más de 690.000. Como este núme-
ro se aproxima al de una cohorte de recién nacidos
vivos en el país, se justificaba la realización de
una nueva campaña de vacunación nacional de
seguimiento contra sarampión y rubéola para evitar
la reintroducción de ambos virus al país y la región.
Mientras el Ministerio de Salud
continúa evaluando estrategias a seguir,
a pesar de las claras recomendaciones que
existen para estas situaciones, aparecen
nuevos casos posiblemente autóctonos de
sarampión, después de 18 años sin
circulación endémica del virus.
La campaña había sido anunciada por la cartera
nacional para septiembre de este año, a pesar de la
confirmación en abril de un caso autóctono de sa-
rampión, que ameritaba adelantar esa estrategia sa-
nitaria. A casi un mes del comienzo de esa campaña,
habría sido pospuesta para octubre del año en curso.
Mientras el Ministerio de Salud de la Nación con-
tinúa evaluando las estrategias a seguir, a pesar de
las claras recomendaciones que existen para estas
situaciones, aparecen nuevos casos posiblemente
autóctonos de sarampión, después de 18 años sin
circulación endémica del virus.
Conclusión
La vacunación es una de las principales políticas
sanitarias para prevenir enfermedades y muertes.
Es una de las estrategias sanitarias que producen
mayor beneficio en términos globales y reducen las
brechas de inequidad social. Además del efecto in-
munogénico sobre cada persona vacunada, existe
un efecto social que es aún más significativo, ya que
reduce la circulación de los agentes que producen
las enfermedades. Los niños que contrajeron
sarampión, por su edad, no podían vacu-
narse, pero podrían haber estado protegi-
dos si la toda la población estuviera vacuna-
da, porque no habría circulación del virus.
Argentina es ejemplo mundial por el amplio Ca-
lendario Nacional de Vacunación con que cuenta
y la alta tasa de cobertura, con un sistema de vas-
to desarrollo territorial. Ha pasado de contener 6
vacunas en 2003 a 16 vacunas en 2015, lo que da
cuenta del interés y la responsabilidad asumidas
por el Estado Nacional para mejorar la salud de
la población. En los últimos dos años, la po-
lítica de inmunizaciones parece haber de-
jado de ser una prioridad para el Estado.
Se trata de diversas medidas en el marco
de un proceso de desfinanciamiento de la
salud pública en general y de la política de
vacunas en particular .