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CAMPUS ALTAMIRA
INTEGRANTES:
5º SEMESTRE
MAESTRO ASESOR:
Introducción……………………………………………………………………………………………...……3
Justificación…………………………………………………………………………………...………………4
Hipótesis…………………………………………………………………………………………..…………..4
Objetivo………………………………………………………………………………………………………..4
Marco teórico………………………………………………………………………………………………….6
Material y método…………………………………………………………………………………………….7
Variable independiente………………………………………………………………………………………7
Variable dependiente………………………………………………………………………………...………8
Grupo control………………………………………………………………………………………………….8
Grupo experimental……………………………………………………………………………...…..………8
Desarrollo experimental…………………………………………..…………………………………………8
Resultados…………………………………………………………………………………………………….9
Análisis…………………………………………………………………….…………………………………17
Conclusión…………………………………………………………………...………………………………18
Bibliografía…………………………………………………………………..………………………………19
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Introducción
En este trabajo se busca evaluar los efectos de placebo que produciría en una bebida energizante.
Pero para empezar, ¿Qué es una bebida energética? Son bebidas analcohólicas (es decir, sin
alcohol) mayormente gasificadas, compuestas por cafeína e hidratos de carbono, azúcares
diversos más otros ingredientes.
La cafeína es uno de los alcaloides más consumido en el mundo en forma de café, té o refrescos,
y en altas dosis puede causar estimulación anormal del sistema nervioso así como efectos
adversos en los sistemas cardiovascular, hematológico y gastrointestinal. Con las bebidas
energéticas al ser un fenómeno mundial, los efectos a corto y largo plazo deben ser evaluados
más de cerca para comprender el impacto psicológico de estos productos.
Su consumo a veces puede darse ya sea por su nivel de estimulación en la práctica de algún
deporte o simplemente por el beneficio de su sabor, es aquí donde entra nuestra investigación
sobre el efecto placebo. Se puede decir que el efecto placebo ocurre cuando una sustancia o
tratamiento que no tiene ningún poder o principio activo, produce que la persona sienta los efectos
de la sustancia que cree que le han dado y se vea afectado por ésta a la hora de ejercer una
actividad física o mental.
En el año 1955, el anestesista Henry K. Beecher por medio de un estudio observó que un tercio de
los pacientes mejoraron cuando se les suministraba un placebo, es decir se le suministraba una
pastilla similar a un medicamento, con todas sus características, excepto el efecto farmacológico.
Realmente se tiene en cuenta que el placebo no es imaginario o falso puesto que en base a
estudios se ha comprobado efectividad ya sea psicológicamente o físicamente.
Planteamiento
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En nuestra vida diaria recibimos todo tipo de información y gran parte de ella es meramente
publicidad. En este experimento, se tratará de “desenmascarar” alguna verdad sobre las muy
conocidas bebidas energizantes que son frecuentemente anunciadas para mantener una
proactividad ante una situación de cansancio o fatiga. Más que descartar o afirmar la capacidad
que dichas bebidas en realidad generen energía en el individuo, buscaremos sobre el efecto que
la publicidad y marketing a través de medios de comunicación tienen sobre la mente del
consumidor.
Hipótesis
Si las personas seleccionadas acceden a probar nuestra bebida preparada para simular una
bebida energética real sin el conocimiento de ser una imitación, entonces la mayoría de los
individuos afirmarán haber experimentado una mejoría en su rendimiento físico y/o mental debido
a la sugestión provocada por la publicidad comercial.
Justificación
Nuestros resultados pretenden servir para exponer y concientizar a la sociedad tanto adulta como
joven sobre uno de los tantos efectos que la publicidad masiva tiene en nuestra psicología
subconscientemente como lo es la relación entre expectativa (la idea que las compañías nos
proyectan) y la realidad (el producto final).
Objetivo
En este experimento se busca evaluar la reacción que una bebida no energética producirá en una
estudiante de bachillerato previo a iniciar su jornada escolar diaria mientras éste cree que la
bebida ingerida le proporcionará un beneficio en su rendimiento mental y/o físico.
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Relación con el programa de estudio
En el libro “Pharmacokinetics” del autor Phillip Rowe del año 2012. Se encuentran referencias de
este tema. En el bloque 1 se explica el proceso en el que una sustancia es absorbida, distribuida y
eliminada del organismo. También define los cómo los efectos secundarios se definen en cierto
organismo. Incluyendo factores desde la concentración en la sangre e incluso efectividad o
inefectividad del medicamento. En el bloque 2 del mismo libro se deja claro la diferencia de los
efectos, secundarios y primarios, de una sustancia administrada vía intravenosa o ingerida. En el
caso de este tema, la vía intravenosa no es necesaria describir. Por otra parte, la sustancia
ingerida usa el mismo trayecto que un alimento, solo que en el estómago se absorben los
nutrientes, incluyendo los agentes malignos y benignos.
En el libro “Concepts of Biology” de los autores Charles Molnar y Jane Gair primera edición del
año 2013 en el bloque 1 del ya antes mencionado libro se especifica que en el caso que una
sustancia, ya introducida al organismo, si es liposoluble. Se transporta fácilmente en el cuerpo ya
que entra a una célula sin dificultad e incluso viaja de órgano en órgano, de sistema a sistema o
de tejido a tejido. Lo que puede llegar a ser perjudicial si un agente maligno liposoluble entra al
cuerpo. Así podría transportarse con total libertad por el cuerpo y dañar varios sistemas. Tomando
en cuenta que la difusión no necesita energía para llevarse a cabo, entonces sería difícil que la
sustancia maligna contenida en cualquier bebida energética sea neutralizada. En el bloque 4
menciona que incluso puede afectar a gente con diabetes mellitus ya que como contienen una
cantidad significativa de azúcar. Puede crear más efectos alternos que en una persona que no
padece de diabetes. Afectando el páncreas, principalmente, de un diabético sin olvidar que la
glucosa en la sangre aumenta.
En el libro “Biología 2° bachillerato” del autor Jesús Aldaba y Arantxa Huerto del año 1998 en el
bloque 1 se deja en claro que el agua es importante para la existencia y sobrevivencia de un
organismo ya que se usa en la mayoría de los procesos dentro del mismo. Se usa como
disolvente, para mantener las moléculas de varios compuestos, regulador de temperatura y ayuda
a distribuir correctamente el calor. Las bebidas energéticas no hidratan realmente, gracias a su
gran cantidad de azúcar y sustancias energizantes que dichas bebidas contienen. Ya sean taurina,
cafeína, ginseng o extractos de diferentes plantas.
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Marco teórico
Fabricantes de bebidas energéticas afirman que: “el consumo de estas puede aumentar su
energía y mejorar su rendimiento deportivo”. Fabricantes de bebidas energéticas garantizan: “una
mente más clara con un mejor pensamiento y habilidades de análisis. Todos estos beneficios de
las bebidas energéticas parecen muy atractivos para los adolescentes que quieren sobresalir en el
mundo académico, los deportes y otras actividades extracurriculares. Un aumento en el consumo
de estas bebidas energéticas lleva a la depresión entre los adolescentes que tienden a buscar
experiencias de riesgo, alcoholismo y abuso de drogas”. Según los padres de los consumidores de
estas bebidas: “estas bebidas son inofensivas y por lo tanto dejan que sus hijos se vuelvan adictos
a estas bebidas”.
La librería nacional de la salud en E.U.A. concluyó: “Muchos estudios han mostrado un incremento
en el ritmo cardiaco y en la presión arterial después de cada bebida consumida. Estos
descubrimientos fueron atribuidos a los efectos ergogénicos del contenido de cafeína de cada
bebida energética. Además, se han documentado manifestaciones cardíacas significativas como
arritmias ventriculares, elevación del segmento ST y prolongación del intervalo QT después del
consumo excesivo de bebidas energéticas. Además, la fibrilación auricular se ha informado
después de la ingestión de bebidas de alta energía en dos niños sanos, 14 y 16 años de edad.
Recientemente, el consumo de bebidas energéticas se ha relacionado con el infarto de miocardio
en niños sanos de 17 y 19 años de edad”.
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Material
● Formato de encuestas
● Bitácora
Metodología
● Se realizará una pequeña encuesta sobre las bebidas energéticas (si las han consumido, si
saben los efectos alternos, etc.) a un grupo de personas para mentalizarnos sobre sus
ideas respecto a dichas bebidas.
● Se les dará a probar las imitaciones en una cantidad generosa, influenciándolos a creer que
son auténticas.
● Al final de la jornada escolar, se les preguntará si percibieron algún efecto producido por la
bebida ingerida.
Variable independiente
Un grupo de adolescentes con características actitudinales similares del bachillerato del Instituto
de Estudios Superiores de Tamaulipas y las bebidas etiquetadas como energizantes.
Variable dependiente
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El efecto que las bebidas etiquetadas como energizantes tienen en la psicología del grupo
específico de jóvenes.
Grupo control
El grupo secundario seleccionado que conjuguen con similares características actitudinales con
los que se contrastará a posteriori los efectos experimentados por los voluntarios experimentales
contra la ausencia de un supuesto estimulante en sus organismos en el grupo secundario.
Grupo experimental
El grupo selecto de jóvenes que serán invitados a ingerir bebidas disfrazadas como estimulantes
energéticos antes de iniciar su jornada escolar diaria.
Desarrollo experimental
Se espera preparar una bebida con características cualitativas que simule una bebida energética
lo suficientemente cercana para que las personas con las que se experimentará realmente crean
en la idea que es un energizante auténtico y, entonces, esto provoque una reacción meramente
psicológica que tenga efectos aparentemente reales en su metabolismo.
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Resultados
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Encuesta
18 Activo Sí - -
17 Activo Sí - -
Análisis
Se realizó la encuesta a 8 alumnos de entre 16 y 18 años de edad, todos del sexo masculino.
Cuando se preguntó sobre su estilo de vida la mayoría contestó que son activos.
¿Alguna vez han sentido algún efecto negativo producto de estas bebidas?
Todos los alumnos contestaron que nunca han tenido un efecto adverso porque consideran que
no toman lo suficiente.
Después de tomar la bebida experimental los individuos se sintieron más activos (acelerados del
ritmo cardíaco) por mínimo 10 minutos y después sintieron cansancio.
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Conclusión
Al organizar y analizar los resultados arrojados por los sujetos de experimentación fácilmente se
puede establecer una directa relación entre los efectos reales de las bebidas energéticas y la
sugestión que éstas suponen en la mente de los consumidores. En el experimento se pudo
percatar el gran efecto placebo que la idea de consumir algo que se cree debe producir un efecto
fuerte que afecte al metabolismo de un individuo hace que los individuos crean que sí existió un
efecto verdadero que ellos mismos pudieron sentir y afirmar. Nuestra hipótesis fue acertada,
puesto que nuestros voluntarios afirmaron un mejoramiento en su condición física y/o mental bajo
la suposición de haber ingerido una bebida energizante auténtica.
Todo esto nos lleva hacia la conclusión que probablemente el efecto que pueden tener estos
productos no sea realmente verídico, más bien sea el resultado de una gran cantidad de
publicidad y marketing hacia un público específico susceptible a aceptar ciertas ideas como
verdaderas porque las grandes compañías lo hacen creer. Y esto puede que no sólo se reduzca a
bebidas energéticas; este tipo de “truco” mental puede abarcar otros tipos de productos como
bebidas alcohólicas, fármacos, productos tecnológicos, comida, entre muchos otros.
Finalmente nos conduce a reflexionar sobre el impacto que tiene la información que se difunde a
través de los medios de comunicación masivos. En nuestra vida cotidiana estamos expuestos a
casi todos estos medios todo el tiempo, ya sea éste la radio, televisión, anuncios publicitarios,
internet, revistas que finalmente terminan por transmitirnos estas ideas, muchas veces falsas, que
mediante argumentos ad nauseam crean en nuestra mente conceptos falsos sobre la realidad.
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Bibliografía
García, G. (1994). Historia de los fármacos, un ensayo (1st ed., pp. 25-26). Monterrey, Nuevo
León: CONALEP.
Trimmer, P., Marshall, J., Fromhage, L., McNamara, J., & Houston, A. (2013). Understanding the
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