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SOCAVACION LOCAL EN PILAS Arturo M. Monforte Ocampo. ADVERTENCIA Este trabajo fué desarrollado por el ingeniero civil ARTURO M. MONFORTE OCAMPO quien lo presenté en la Divisién de Estudios Superiores de la Facultad de Ingenieria de la U.N.A.M. para obtener el grado de Maestrfa en Ingenieria. La Direccién General de Servicios Técnicos, estimé que la informacion técnica contenida en la presente publicacién es de gran utilidad como complemento a los conocimientos que por medio de ella puede adquirir el personal técnico de la Secetaria de Comunicaciones y Transportes y es por esto que se ha hecho esta cuarta edici6n. La Secretaria mencionada, no obstante que considera aprovechable la aportacién técnica de este trabajo, no se hace responsable de su contenido. México, D.F., mayo de 1980, INDICE CAPITULO 1 Pag. Introducci6n eee Ame 2Usws eOImE EwEEE az 4 CAPITULO 2 Generalidades .......... ofl ati todd ashlee ald 7 CAPITULO 3 Recopilacién de algunos métodos desarrollados para el cdloulo de la socavacion localenpilas .... 2... 13 CAPITULO 4 Comentarios acerca de los diversos métodos expuestos. ......... 48 CAPITULO 5 Comparacién de los ME&OdOS «sve eee eee eee CAPITULO 6 Obras de proteccién contra la socavaci6n en pilas, . see 7 CAPITULO 7 Conclusiones y Recomendaciones ...... « ‘tat ata REFERENCIAS ..... 6.066660 0 02 eee Sle ted dest : CAPITULO 1 INTRODUCCION En el campo de la Ingenieria Civil es muy importante poder predecir la magnitud de la erosién que un flujo dado puede provocar al pie de las diferentes obras. hidrdulicas tales como puentes, vertedores, bordos, espigones, muelles, etc. En particular, en este trabajo se pretende analizar los diferentes métodos que se han desarrollado desde hace algunas décadas por diferentes investigadores para estimar la profundidad de la socavacién local al pie de pilas de puentes. Esto es con el fin de poder abordar los problemas practicos relativos a este fenémeno y tratar de que los cAlculos para el disefio estén mejor fundamentados. Puede afirmarse, en base a muchas experiencias, que la mayorfa de las fallas de puentes son provocadas por la socavacién en las pilas, de la cual una parte importante la constituye la socavacién local (ver ref. 5 y 6). Dicha socavacién ocasiona que las pilas queden sin apoyo, se asienten y provoquen Ia falla de la superestructura. Asi, se vislumbra la importancia que este tema tiene en la Ingenieria de Caminos ya que si se logra tener cada vez menos incertidumbre acerca de la magnitud de la socavacion en pilas, se estara en posibilidad de construir puentes més estables y que a la larga resulten mas econémicos. Como se sabe, la socavaci6n en cauces naturales puede clasificarse en varios tipos (ref. 6): 1.- Socavacién general.- Es la que ocurre en condiciones naturales del cauce cuando, al presentarse una creciente del rio, aumenta la capacidad de la corriente de arrastrar material de fondo, produciéndose una cierta profundidad de socavacién @ lo largo de todo el cauce. Durante el periodo de recesién de la corriente, ol material de arrastre es depositado nuevamente, quedando el fondo del cauce con una elevacién media aproximadamente igual a la existente antes de que ocurra este tipo de socavacién 2. Socavacién transversal. Al suftir cierto estrechamiento un cauce por la construccién de un puente, se provoca un aumento en la velocidad del flujo debido a la reduccién del area hidréulica original. Esto provoca que la corriente arrastre mayor cantidad de material de fondo, y ocurra la socavaci6n transversal. 3.- Socavacién local.- Ocurre cuando existe un obstaculo en la trayectoria del flujo, el cual induce la formacién de vértices que provocan la disminucion de la elevacion del fondo unicamente en la zona alrededor del obstéculo. Socavaci6n en curvas. Con la presencia de una curva de un cauce, la corriente ataca el lado exterior de la misma y se forma un flujo helicoidal que tiende a arrastrar el material del fondo hacia la parte interior de la curva. Socavacién aguas abajo de obras de almacenamiento. Cuando existe una obra de almacenamiento que libera volumenes considerables de agua sin material sélido, la corriente liberada produce una socavacién que no se recupera por no haber aportacién de sélidos que se depositen. Esto os importante particularmente en puentes construidos aguas abajo de grandes embalses. En el capitulo 2 se presentan algunos aspectos interesantes relacionados con el fenémeno de la socavacién local en pilas de puentes, y se mencionan las variables que deben influir en forma determinante en dicho fenémeno. En el capitulo 3 se presentan los diferentes métodos desarrollados para estimar la profundidad de socavacién local en pilas apoyadas sobre material no cohesive. Conviene aclarar que no se ha podido encontrar una forma de determinar la escala de la profundidad de la socavacién, o sea, la relacién entre la profundidad de socavacién en prototipo y en modelo. Asi, los diferentes investigadores han considerado que la profundidad de la socavacién en los modelos es funcién Unicamente de la geometria de la pila y del flujo para una relacién tirante entre ancho de la pila = constante, por lo que puede manejarse dicha profundidad como cualquier longitud al comparar modelo y prototipo. También se argumenta que si la dimensién de la pila y el tirante se establecen con la misma escala es de esperarse que la profundidad de socavacién corresponda a la misma escala. En el capitulo 4 se presenta una discusién acerca de los diferentes métodos expuestos, haciendo ver las ventajas o limitaciones de los mismos en cuanto a su aplicacién a problemas reales. En el capitulo 5 se comparan los métodos desde el punto de vista del arrastre de sedimentos y de la forma de las pilas para las que fueron desarrollados. También se comparan los resultados arrojados por dichos métodos para algunos datos de ‘campo reportados por Melville (ref. 7), y se presentan algunos ensayes realizados en el laboratorio de modelos hidréulicos de la Secretaria de Comunicaciones y Transportes. En el capitulo 6 se presentan los métodos que se consideran mas eficientes para proteger las pilas contra ia socavacién local. Finalmente, en el capitulo 7 se presentan las conclusiones y recomendaciones. CAPITULO 2 GENERALIDADES 2.1, Socavacién Local. Como ya se mencioné, la socavacién local ocurre debido a la presencia de algun ‘obstéculo al flujo, y provoca una disminucién de la elevacién de! fondo dnicamente en la zona alrededor de! obstaculo. La rapidez de la socavacién local puede expresarse como la diferencia entre la capacidad del flujo de extraer el material que se encuentra en la hoya de socavacién y la aportacién de sedimentos a ésta. Asi, 0) Qa Oy = qiy ac tiiee eas donde 2” 181 %e2 = rapidez de la socavacién, en volumen por unidad de tiempo. Qs: = capacidad del flujo de extraer material de la hoya de socavacién, en volumen por unidad de tiempo. qx2_= _aportacién de sedimentos por el flujo a la hoya de socavacién, en volumen por unidad de tiempo. De acuerdo con la ecuacién (1), pueden considerarse 3 casos: a) socavacién nula, que ocurre cuando gsi = qs2. En este caso la socavacion es fluctuante ya que ocutre erosién momenténeamente, para recuperarse enseguida con la aportacién qs2. b) socavacién en aguas claras, es decir, sin arrastre de sedimentos. En este caso sz = 0, por lo que la ecuacién (1) se convierte en qs = ast, y la socavacién es maxima c) socavacién con movimiento continuo de sedimentos, en que gst > qs2 > 0. Cuando ocurre la socavacién en aguas claras la profundidad maxima de socavacién se alcanza en forma asintética respecto al tiempo, mientras que cuando hay arrastre de sedimentos la socavacién oscila alrededor de un valor al que se llama profundidad de socavacion de equilibrio (dse). En la fig. 1 se ilustra lo anterior. 2.2, Campo de flujo alrededor de una pila. La existencia de la pila como obstéculo al flujo provoca la formacién de sistemas de vortices a su alrededor, los cuales son responsables de la socavacién local, de acuerdo con muchos investigadores (ref. 11). Profundidad ae socavecién Yocal (a,) a, TMeapo Tieapo Fig. 1, Profundidad de socavacién de equilibrio en a) aguas claras y b) con arrastre de sedimentos. Dependiendo del tipo de la pila y de las condiciones del flujo de llegada (ref. 10), los vértices pueden ser de los siguientes tipos: vértice de herradura, vértice de estela y vortice de surco. Los sistemas de vortices afectan la componente vertical de la velocidad en las cercanias de la pila. EI vortice de herradura se concentra por la presencia de la pila, ya que ésta induce un cierto campo de presiones; cuando este campo es lo suficientemente fuerte provoca la separacién de las capas limite, las cuales se enrollan adelante de la pila para formar el sistema de herradura. Una pila de nariz obtusa es aquella que Provoca un gradiente de presiones suficientemente grande para iniciar el proceso mencionado. Las otras pilas se conocen como de nariz aguda. La pila de ni obtusa concentra la vorticidad ya existente en el flujo de llegada. En la fig. 2 puede verse un esquema del vértice de herradura. Tirante de Hegada (do) PH Vértice de herradura Linea de separacién Velocidad ae Wegada (V) Fig. 2. Esquema del vortice de herradura. Segiin Maza y S&nchez (tef. 6), en el caso de pilas circulares y de nariz redondeada alineadas con el flujo, la erosi6n se inicia en 2 zonas localizadas aproximadamente a 65° del eje de la pila paralelo a la direccién del flujo, y se desarrollan ahi sendos vértices de eje vertical. Los conos asi formados se van desarrollando durante el avance del proceso hasta que se juntan y se obtiene la misma profundidad en todo el ancho de la cara anterior. En el caso de pilas rectangulares alineadas con la corriente, la socavacién se inicia en las 2 esquinas de la cara de aguas arriba, y continua el proceso hasta que se observa la misma profundidad en todo el ancho de la cara de aguas arriba. El vértice de estela es producido por fa presencia misma de la pila, a diferencia del caso del vértice de herradura, y se forma al enrollarse las capas limite inestables generadas en la superficie de la pila. La intensidad de este tipo de vortices depende de la forma de la pila y de la velocidad de llegada; una pila de forma aerodinamica crearé una estela relativamente débil, pero una pila obtusa produciré una muy fuerte. Este tipo de vértice provoca socavacién local aguas abajo de la pila. El vértice de surco ocurre solamente en pilas completamente sumergidas, y es similar al que ocurre en los extremos de las superficies de las alas de avién. 10 Melville (ret. 7) observé que la magnitud de la circulacién del vértice de herradura disminuye con la profundidad det agua, por lo que el ritmo de erosién decrece cuando la hoya socavada alcanza ciertas dimensiones, hasta alcanzar el estado de equilibrio. Este estado presenta la condicién para la cual la profundidad de socavacién enfrente de la pila es suficiente para que el flujo hacia abajo ya no pueda levantar més material del fondo. Esto sugiere que la protundidad de socavacién de equilibrio para aguas claras debe ser funcién de la magnitud del flujo hacia abajo entrente de fa pila, magnitud que es funcién principalmente del diametro de la misma y de la velocidad de llegada. A pesar de que se alcanza una profundidad de socavacién de equilibrio entrente de la pila, la erosién continda en la fegién de las dunas de aguas abajo. El monticulo que se forma atrés de la pila es arrastrado y aplanado continuamente. Ademés, de acuerdo con Maza (ref. 6), una vez estabilizado e! proceso de la socavacién se observa que cuando la cresta de una duna se acerca a la zona erosionada aumenta la profundidad de socavacién, la cual llega a un maximo cuando la cresta est sobre el borde de la zona socavada. La profundidad se conserva hasta que se desplaza hacia aguas abajo la mitad de la duna, y después decrece hasta que llega la siguiente duna, Segun Shen y otros (ref. 11), el aumento © disminucién de la profundidad de socavacién es menor que un medio de la altura de la duna, por lo que propone sumar ese medio de la altura de la duna a la profundidad de socavacién estimada previamente. 2.3. Variables que influyen en la socavacién. Las variables que influyen en forma més considerable en el fendmeno de la socavacién local en una pila aislada bajo condiciones de flujo permanente y uniforme son; ~ Propiedades del flujo tales como la velocidad media de llegada, v, el tirante del tlujo de llegada, do, la pendiente hidraulica, Sy, y la rugosidad del flujo de llegada, k ~ Propiedades del fluido como la viscosidad cinematica, V, y el peso especitico, By, ~ Propiedades de! sedimento tales como el peso especifico, Bs, didmetro de los granos, D, distribucién granulométrica, forma de las particulas, cohesion del material, y velocidad de caida. — Propiedades de la pila, como su ancho, b, su forma, y la rugosidad de su superficie. Como seria muy complicado manejar todos los parémetros citados para hacer el anlisis del fendmeno, aparte de las dificultades para cuantificar algunos de ellos como la forma de las particulas y su cohesién, los investigadores que han estudiado este problema se han concretado a considerar Unicamente las siguientes variables: "1 = De las propiedades del flujo, la velocidad media de llegada, v, y el tirante, do, considerando un canal suficientemente ancho para que la pila no obstruya el flujo, ya que silo obstruyera, la socavacién seria la suma de la socavacién local y la provocada por la obstruccién. = De las propiedades del tluido, su peso especifico, Sw , y su viscosidad cinematic). = Del material del fondo, el diametro del sedimento, D, y su peso especttico, considera que el sedimento es puramente friccionante y que tiene un diémetro uniforme. Ademés, se supone que el fondo del canal es plano, sin dunas ni rizos de modo que la rugosidad k depende sélo de D. = Dela pila, su ancho b y que es completamente lisa. Se considera ademés la aceleracién de la gravedad, g, por tratarse de flujo en canales. Con la simplificacién anterior se llega a la suposicién de que la profundidad de socavacién local, ds, depende sélo de los siguientes parametros: am flv, dor S yen » De Sgr De Bde +e erent & Esta relacién puede cambiarse por la siguiente: y= tly, AA rs Dy By By)-0 eee @) donde A. Beutw = be peso espectiico relative sumergido de los granos. vw Por anélisis dimensional pueden obtenerse los siguientes parametros adimensionales ya expresados en forma de ecuacién: 4 2 a as et (ds At, Bye @ » sy e D >? El primer pardmetro, ds/b, se justifica porque se ha comprobado experimentalmente que puede relacionarse la profundidad de socavacién local con el ancho de la pila. El segundo parametro, vD/\) , es el numero de Reynolds relativo a los granos del sedimento, del cual es funcién la fuerza del arrastre del sedimento por el flujo. 12 El tercer parémetro adimensional, v7/AgD, se obtiene de la relacién que permite estimar la velocidad critica de arrastre en funcién del diametro del grano y demas variables. El cuarto pardmetro, A, es el peso especifico relative sumergido de los granos. Los ultimos 2 parametros relacionan el ancho de la pila con el tirante y con el diametro del sedimento. Los resultados de los estudios de Chabert y Engeldinger (1956), y de Nicollet y Ramette (1971, ref. 9) permiten concluir que para una pila dada de diémetro b y un sedimento de didmetro D, la profundidad de socavacién es igual a dee cuando el esfuerzo cortante del fondo es igual al valor critico del mismo (% = %c). Para un esfuerzo cortante mayor que 7 , la socavacién varia en funcién de la entrada de las particulas a la hoya de socavacién y fluctua debido a las formas que va adquiriendo | fondo. Chabert y Engeldinger (ref. 1) encontraron que la profundidad de socavacién para 7 > Te es algo menor que dse, siendo la diferencia aproximadamente igual a 0.1 dse seguin Shen. También concluyeron que la socavacién comienza en pilas circulares cuando la velocidad esta entre 0.42 y 0.53 de la velocidad capaz de comenzar a arrastrar el material del fondo; en pilas de nariz redondeada la relacién de dichas velocidades varié entre 0.5 y 0.65. Maza encontré en arenas, que la socavacién comienza cuando la velocidad es 0.4 veces o algo mas la que inicia el arrastre de fondo generalizado; también observé que para gravas la relacién de estas velocidades fue de 1.0 (ref. 6). No reporta la forma de las pilas para estos casos, CAPITULO 3 RECOPILACION DE ALGUNOS METODOS DESARROLLADOS PARA EL CALCULO DE LA SOCAVACION LOCAL EN PILAS. A continuacién se presentan en orden cronolégico de su aparicién algunos métodos desarrollados empiricamente para estimar la profundidad de socavacién local en pilas. En lo que sigue, denominaremos a las pilas de acuerdo con su forma como sigue: Pila de nariz triangular Pila de nariz redondeada (semicircular) <> -_ Co Cc > a, Pila rectangular Pila rectangular achaflanada Pila eliptica lenticular 32 Para tomar en cuenta la forma de la pila y el 4ngulo de ataque se propusieron los datos presentados por Laursen (tabla 1 y fig. 4). No se reporta en el ref. (7) el tipo de material utilizado en laboratorio por Liu. 3.1.17. Bonasoundas (Ref. 7). Realizé amplios estudios teéricos y experimentales acerca de la socavacién local en pilas circulares. En la fig. 10 se muestra el resultado de estos estudios, la cual consta de una combinacién de gréficas para obtener la profundidad final de la socavacién. También incluye la figura un método para estimar las caracteristicas de los pedraplenes para proteger contra la socavacién local a las pilas. En sus ‘ensayes, Bonasoundas abarcé los siguientes rangos: Numero de Froude del flujo, 0.2, 0.3, 0.4 y 0.6. Ancho de la pila, de 5, 10, 12 y 15 om. Dso del sedimento, de 0.63, 1.15, y 3.3 mm. 3.2. Métodos basados en datos de campo. Los datos de campo son muy importantes para compararlos con los datos de laboratorio, y asi poder evaluar los métodos desarrollados con ensayes a pequefia escala. Infortunadamente, son pocos los datos de campo obtenidos hasta la fecha, por Io que se ve la necesidad de instrumentar los cauces en que se tengan consttuidas pilas de puente, y obtener las caracteristicas de los materiales del fondo, tales como la granulometria, compacidad relativa, coeficiente de uniformidad y contenido de finos, a fin de intentar correlacionar estos parémetros con la socavacién local en las pilas, ademas de todos los demas parametros ya tratados. Una forma muy econémica de instrumentacién podria consistir en colocar cerca de las pilas hileras verticales de pelotas pequefias de hule unidas por un hilo delgado. La capa socavada haria perder verticalidad a las pelotas, o arrastrarias hacia aguas abajo sino se anudan, por lo que podria conocerse la profundidad de socavacién m&xima provocada por un determinado flujo, cuyas caracteristicas podrlan estimarse muy aproximadamente si se hicieran visitas periédicas a los sitios en cuestién. A continuacién se presentan algunos datos de campo. 3.2.1, Inglis-Lacey. Se hicieron observaciones en 17 puentes de 1924 a 1942 sobre rios con gastos entre 850 y 63,000 m/s. Se midié el tirante de socavacién, es decir, la profundidad desde el espejo de! agua hasta el fondo de la hoya de socavacién. Este tirante debe ser la suma del tirante normal y la socavacién general, la debida a la contraccién de la corriente, y la local en las pilas. Los tirantes de socavacién fueron comparados con el tirante de régimen de Lacey: PES Ft | Te Fig. 10 34 Gracey * 0-473 (vs) ea telat ato 6) donde Lacey = tirante de régimen de Lacey, en m Q = gasto de la corriente, en m°/s { = factor de sedimento = 1.76 {D~ D = mediana de los granos, en mm, Las relaciones variaron entre 1.73 y 2.62 con un valor medio de 2.09. Para propésitos de disefio se toma generalmente un valor de 2.0 por lo que: a, #4, = 0.95 (3) pene Spektor eee en 3.2.2, Laursen y Toch, Obtuvieron los datos de socavacién en la nariz de una pila de nariz redondeada con un ancho de 1.2 m. Dicha pila estaba en el centro de un tramo recto con fondo arenoso. Con un aparato de resistividad eléctrica determinaron un valor maximo de ds de 2.0 m para un tirante de 3.7 m. No reportaron las velocidades ni los diémetros del material del fondo, pero los modelos probados con escalas 1:12 y 1:24 con arena de 0.58 mm y velocidad de 0.53 m/s tuvieron correspondencia aceptable con los datos de prototipo. 3.2.3, Larras. Presenté 2 tablas con profundidades de socavacién alrededor de pilas de puentes. Una mostraba las profundidades de socavacién que se observaron después de que pasaron las avenidas, por lo que seguramente eran menores que las maximas. Los anchos de las pilas variaban de 0.5 a 6.5 m y las profundidades de socavacién de 0.6 a 4.3 m, con relaciones de/b de 0.4 a 1.2. La otra tabla mostraba profundidades estimadas de socavacién, incluyendo la socavaci6n general, basindose en fallas de las pilas, cuyos anchos variaron de 0.7 a 4.2m, y los valores estimados de ds/b de 1.3 a 2.0. 3.2.4. Yaroslaviziev (Ret. 6). Segin Maza, Yaroslaviziev propone Ia siguiente ecuacién baséndose en observaciones directas de varios puentes de la Unién Soviética: 2 a, = Kp XK, (e+ Ky) F - 30 Dey (28) donde Los demas Kr métricas. 35 8 un Coeficiente que depende de la forma de la nariz de la pila y del Angulo de ataque. Se encuentra en la fig. 11 a, b, c. es un coeficiente dado por la relacién log Ky 28 8/vélgbs,y puede encontrarse en la fig. 12. 0.6 para pilas en el cauce principal. 1.0 para pilas fuera del cauce principal 8 un Coeficiente que depende del tirante del flujo de llegada y del ancho de la pila, y puede encontrarse en la fig. 13. velocidad del fiujo de llegada, en m/s. es el diémetro tal que el 85% del material del fondo es menor, en m. Yaroslaviziev recomienda que cuando este valor sea menor que 0.5 em, se desprecie el segundo término del miembro derecho de la ecuacién, términos aparecen definidos en las figuras, y estén en unidades Yaroslaviziev advierte que su f6rmula puede conducir a errores cuando la felacién do/b1 sea menor que 2.0. Maza propone que se utilice el resultado menor de los que arrojen los métodos de Yaroslaviziev y Laursen |, baséndose en datos de laboratorio y en el hecho de que existe un valor limite para la velocidad, més all del cual la socavacién no progresa mientras no varie el tirante. (wei Q als ~| wd (89) P| ath vas( £006 |28 20€].02 [601 TM Odi Wid 36 T Odit Wid poem SiHy+ ayy 4425 WWy3N39 NOISZUdX3 ABIZLAVISOUVA 30 OCOLIW 1 Odid Wid FORMA Y DIMENSIONES DE PILAS ESTUDIADAS Las cantidades entre paréntesis estan en cm y corresponden a las dimensiones de Fig. 11a Valores de Kt y by para diferentes pilas y distintos angulos de incidencia. las pilas probadas. 0p 79 (9-74) +92%q apuop va gp s00°q +g vas }2'q b2isty ayuaioya0g A Odll Wid S*poe-Fi4+a)wh="S WYINED NOISSUax3 ABIZLAVISOUVA 3d OGOLAW 9979 (9-Fa)+4="q, apuop us £°0.<09/9 010d G 809° +p uas | aq £0 59/9 o10d “a+ pues (°q-1)='9 eae ee a peter weif eer Ty SIN31D1S 309 Al Odll Vid Fig. 11b Valores de Ki y Bt Fy B1N31915309 WA Odili Wild 38 9+ pues (q-1)s'9 [ez Too TeayT a Los [o6 | oz | og IA Odil Wid S8poc- 5 (My 4a)*whn=°5 IWYINRD NOISZHdX3 ABIZLAVISONVA 30 OGOL3W Fig. 11¢ Valores de Kt y by 39 2086 Oh, O1 20 leo "0 0 a0 0 ABZIZLAVISOYVA 30 OGOL3aN aro lero ont ” Fig. 12 Coeficiente Ky 40 ABIZLAVISONVA 30 OGOL3W Fig. 13 Coeficiente Kn a 3.2.5. Neill Neill reporté varios casos de socavacién, de los cuales algunos provocaron falas de puentes. Menciona un caso en que las pilas fueron apoyadas en un cajén de concreto que se desplanté a 10.6 m abajo del fondo y que sobresalia 1.5 m de éste; el fondo era arenoso y el Angulo de ataque era de 40°. Durante una avenida el cajén, que era de nariz triangular de 90° se asent6 e incliné hacia aguas arriba. La profundidad maxima de socavacién se estimé en 9.4 m, incluyendo la socavacién general, y el tirante de llegada fue de 5.8 m. Utilizando el método Laursen | se predijo una profundidad de socavacién casi igual a la observada. Reporta otro caso de una pila de 6 m de ancho alineada con la corriente, en un cauce estable con fondo de gravas. Se observé un tirante de socavacién (do + ds) de 15.9 m, y Se obtuvo uno de 15.3 m utilizando el método de Blench con un factor igual a 2.0. 3.2.6. Ministerio de Ferrocarriles, india. a) Reporte de 1967. Se realiz6 una campafia de mediciones de profundidades de socavacién en los puentes de ferrocarril. Sélo se utilizaron los datos de 8 puentes, ya que los demds estaban protegidos con enrocamientos o las mediciones en ellos no fueron suficientes. Los puentes tenian claros de 9 a 23 m, el material del fondo fue de arena gruesa 0 grava con factores de,sedimento de 1.83. a 2.9 (D = 1 a3 mm), y los gastos variaron entre 35 y 600 m’/s. Los tirantes de Lacey calculados oscilaron entre 1.35 y 3m y los tirantes de socavacién observados (do + ds) variaron de 2.3 a 5. m; las dimensiones de las pilas no fueron reportadas (en un caso b = 2.44 m), Para el flujo paralelo a las pilas, la profundidad maxima de socavacién ocurrié en la nariz y se encontré una relacién media de (do + ds) al tirante de Lacey de 1.71. Para esviajamientos de hasta 35°, la socavacién maxima ‘ccurrié en el costado de Ia pila expuesto al flujo y la relacién al tirante de Lacey fue en promedio de 1.99, En forma global la relacién media fue de 1.93. b) Reporte de 1968, Se mencionan 18 observaciones para varias avenidas monzénicas en un puente con 14 claros de 133 m cada uno, y pilas de 9.75 m de ancho; los gastos variaron de 5,000 a 34,000 m/s. Los tirantes de régimen de Lacey fueron de 7.5 a 14.5 m utilizando un factor de sedimento de 1.15 (no se da el diémetro del sedimento). La profundidad media de socavacién en la nariz de las pilas dié una relacién (do + ds)/dLacey = 1.75, mientras que para un ataque esviajado la socavacién a lo largo de los costados dié un promedio de 2.15 diacey. Se observé que durante avenidas no monzénicas el valor de (do + ds)/JLacey fue mayor, posiblemente debido a un menor contenido de sedimentos, segun el autor. Para 13 observaciones los valores medios fueron 2.94 dLacey en la nariz y 2.7 dLacey 42 a lo largo de los costados. Sin embargo, durante las m&s grandes avenidas monz6nicas las profundidades de socavacién fueron ligeramente mayores que durante las no monzénicas. ¢) Reporte de 1972. Se reportan 50 observaciones mas en 4 de los 8 puentes del Feporte de 1967, con gastos de 60 a 500 m/s; la dLacey varié de 1.5 a3 my los valores de (do + ds) de 2.1 a 6.8 m. Generalmente se encontraron en los costados de las pilas las maximas socavaciones. Al ajustar a una linea recta las 93 observaciones reportadas, se obtuvo que (do + ds) = 1.82 diacey con un coeficiente de correlacién = 0.79, La correlacién con el tirante bidimensional de Lacey dio como resultado: (a, + 44) = 1646 €2 tacey = 1646 [r.36 (7), con un coeficiente de corretacién = 0.80, donde q es el gasto por unidad de ancho cerca de las pilas, Finalmente, considerando que el factor de depésito era en apariencia poco significante, se dieron las siguientes relaciones: 0.33 (a, + 4,) = 0.72 Q + (29) (a, + a) = 2.32 9037 eee (0) Nos referiremos a las ecuaciones 29 y 30 como Métodos del Mi India ly Il, respectivamente. isterio de F.C., Ambas expresiones valen para el sistema métrico; el coeficiente de correlacién fue de 0.74 en ambos casos. 3.2.7. Neill (Ref. 8). Neill propone la ecuacién siguiente para ser utilizada en el célculo de la socavacién local en pilas alineadas con el flujo: = Kb (1) K 1.5 para pilas de nariz redondeada. 1.5 para pilas circulares. 2.0 para pilas rectangulares. 1.2 para pilas lenticulares. 43, Los valores anteriores de K valen para los casos en que la nariz sea vertical. Para el caso en que la nariz sea inclinada, si ésta es redondeada los valores de K propuestos por Neill son como se indica en la fig. 14. FIG. 14 Tambien advierte este investigador que si el tirante del flujo de llegada es mayor que 5b, los valores de la socavacién obtenidos con la ecuacién (31) deben aumentarse en un 50%, aunque no explica la razn de esta recomendacion, Por ultimo, para tomar en cuenta el 4ngulo de ataque de la corriente, propone utilizar los siguientes coeficientes, basado aproximadamente en la curva de Laursen y Toch (fig. 4), con la aclaracion de que existen grandes discrepancias entre ésta y los resultados de diferentes investigadores, 44 Tabla 3 Coeficientes de correccién para pilas eeviajadas Tague [anna ipa as | Relacién largo/ancho de 1a pile a ee | oe 1.0 ase 30° 45° 3.2.8, Melville (Ref. 7). Melville presenta los datos de 6 puentes de Nueva Zelandia en lo que se midié la profundidad de socavacién. Compara los resultados arrojados por diversos métodos con los datos reales; cuando hubo esviajamiento aplicé el criterio de Laursen y Toch (fig. 4), y cuando aplicé ecuaciones validas sélo para pilas circulares (Breusers, Carstens y Coleman) utilizé el coeficiente de forma de Arunachalam. En el Cap. 5 se trata con detalle el estudio de Melville. 3.2.9. Norman (Ref. 1). Analizé las profundidades de socavacién medidas alrededor de las pilas de 11 puentes, y encontré que todos los datos quedaron abajo de la curva ds = 3b°°. En dicha referencia no se dan las caracteristicas del flujo ni de pilas. 3.2.10. Shen y otros. Sugieren (ref. 1), en base a todos los datos disponibles en la bibliografia, utilizar para el disefio la siguiente ecuacién que llamaremos Método Shen I: sh (%)fe-0 to (2) Jesltmni shee 4) 00 =(2 2-1) para 0.5¢. c <1.0 45 1 para vive > 1.0 1.0 para pilas circulares y de nariz redondeada. 0.75 para toma aerodinamicas. 1.3 para pilas rectangulares {2 (forma) Para ts (<, Yb), propone utilizar la curva de Laursen y Toch (ig. 4) 3.3. Influencia en la socavaci6n de algunos parametros adimensionales y otros factores. 3.3.1 Influencia de la relacién entre la velocidad media del flujo de llegada y la velocidad critica de arrastre de material del fondo (v/vc). Considerando lo ya discutido en lineas anteriores, se pueden considerar los 3 casos siguientes, a) Siv/ve < 0.4, no ocurre socavacién o ésta es pequenia. ») 810.4 < vive < 1.0 existe socavacién con aguas claras, es decir, sin arrastre de sedimentos. Algunos investigadores como Chabert y Engeldinger, Hanco, y Maza encontraron que en este rango la profundidad de socavacién aumenta casi en forma lineal con la velocidad media v. ©) Si Vive > 1.0 se presenta socavacién con movimiento de sedimentos, Para estas condiciones la socavacién varia con la velocidad, hasta que ya no progresa, aunque ésta aumente, debido quiza al equilibrio entre la expulsién de material de la hoya de socavacién y el aporte de sedimentos a la misma; sin embargo, se presentan fluctuaciones de la socavacién a través del tiempo como se indica en (2.1. ¢), debido a la influencia de las dunas. 3.3.2. Influencia del diametro del material, D. Los estudios de Nicollet (ref. 9) muestran que el diametro del material del fondo si influye en la profundidad de socavacién: probé arenas de 0.94, 1.93 y 3 mm y ‘obtuvo que la socavacién maxima ocurrié para D = 2 mm. Laursen y Toch no observaron ninguna influencia para D entre 0.5 y 5 mm. Bonasoundas observé aumentos en la profundidad de socavacién al aumentar los diametros de los granos de 0.6 a 3.3 mm. 46 Maza observé que la profundidad de socavacién en arenas de 0.17 y 0.56 mm result6 mayor que aquélla en arenas de 1.3 mm. Sin embargo, para FF > 0.1 yano noté la influencia del didmetro. Ettema encontré que ds aumenta algo con D hasta un valor de éste det orden de 4 mm, como puede verse en la siguiente tabla (en sus ensayes, vive fue aproximadamente igual a 1.0): Puede concluirse que la influencia del didmetro del sedimento para material uniforme es poco importante en el rango de las arenas (ref. 6, pag. 64). 3.3.3. Influencia de do/b. Muchos autores afirman que la influencia del tirante puede despreciarse para do/b > 1 6 2. Shen (fef. 1) concluye que para do/b > 3 la influencia de este parémetro puede despreciarse. El mismo investigador da una relacién empirica entre la profundidad de socavaci6n y do/b: a,/b = 1.5 tanh (d,/b) .. spent (33) 3.3.4. Influencia de la forma de la pila. Laursen y Toch observaron que la relacién entre la profundidad de socavacién para una cierta forma de pila y la de una forma rectangular varia con la forma de {a pila de acuerdo con la tabla 1 Larras también encontré relaciones como la anterior, como puede verse en 3.1.7. En la tabla 2 pueden verse las relaciones obtenidas por diferentes investigadores. Puede concluirse que tas pilas circulares, las de, nariz redondeada, y las rectangulares achaflanadas producen practicamente la misma socavacién para condiciones iguales de flujo; tomando estas pilas como referencia, pueden tenerse reducciones hasta del orden del 30% de la profundidad de socavacién con: pilas lenticulares, triangulares, o élipticas. Por otro lado, pueden tenerse aumentos hasta de un 40% con pilas rectangulares. 47 3.3.5, Influencia del angulo de ataque de la corriente. La influencia del 4ngulo de ataque fue analizada por varios investigadores, habiendo coincidide en que provoca un aumento importante en la profundidad de socavaci6n. Asi mismo, ha habido una aceptacién general de los coeficientes que proponen Laursen y Toch en funcién del 4ngulo de ataque y de la relacién largo/ancho de la pila (fig. 4) Maza (ref. 6) encontré que para pilas osviajadas respecto a la direccién de la cortiente, la socavacién era mayor en la esquina de aguas abajo expuesta al flujo que en el frente de la nariz de la misma cuando ésta se alineaba con la corriente. Para pilas circulares miltiples con un espaciamiento libre de mas de 3b (Dietz, 1973) no se considera la influencia del éngulo de ataque. 3.3.6. Influencia de la graduacién del material del fondo. Nicollet encontré que este factor es importante en el fendmeno de la socavacién, como se menciona en 3.1.15. Probé también 3 tipos de arenas con diémetros medios de 0.94, 1.93 y 2.97 mm y los mezcl6 en partes iguales obteniendo una curva granulométrica entre 0.8 y 3.2 mm. De sus resultados se observa que la socavacién méxima para la mezcla es del orden del 25% menor que aquella obtenida para cada una de las componentes tomadas en forma aisiada. 3.3.7, Influencia de la densidad de! material del fondo. Aunque Nicollet encontré (ref. 9) que no habia una diferencia importante entre los resultados obtenidos con arenas y con baquelitas cuyo % = 1.320 kg/m’, considera que no se puede generalizar la constatacién anterior dado el numero limitado de sus ensayes. 3.3.8. Influencia de la duracién del gasto de diseno, La méxima profundidad de socavacién ocurriré en el protoupo cuando las caracteristicas de disefio del flujo duren to suficiente para producirla. Se supondra por tanto que se cumpliré esa condicién, ya que por otro lado, para avenidas muy cortas la socavacién maxima ocurrira durante el receso de la avenida, después que el fondo del cauce haya sido bajado a su minimo nivel; al disminuir el gasto liquido, también lo hard el gasto sdlido, por lo que se presentarén condiciones de socavacién en aguas claras. 48 CAPITULO 4 COMENTARIOS ACERCA DE LOS DIVERSOS METODOS EXPUESTOS 4.1. Inglis Poona, La ecuacién que constituye este método e: a +4, 22 pion Pee 6) b > Esta ecuacién se obtuvo para valores de q'"/b entre 3 y 15, y la relacién maxima obtenida en los ensayes entre ds y b fue de 1.3. La formula dada pertenece al grupo de los métodos desarroliados en base a la teoria de “régimen", teoria que fue desarrollada empiricamente con base en mediciones realizadas en la India, para representar las condiciones bajo las cuales los canales son estables para caracteristicas dadas del flujo y de arrastre de sediments. Se demuestra en esta teoria que el tirante de régimen es proporcional aq?” Transformando la ecuacién (5), se obtiene la siguiente: anode a 2.32 go Geer oal bd Este método presenta la desventaja de que, para velocidades altas, la relacién ds/b obtenida puede ser muy grande en comparacién con la que arrojan muchos de los métodos ya descritos, y con mediciones de campo que se reportan adelante. En efecto, como se verd adelante, para un angulo nulo de ataque de la corriente, la relacién maxima entre ds y b es menor que 3.0. Este método puede arrojar resultados de la relacién mencionada, del orden de 6.0 6 mas, amén de que no considera que hay un limite de la velocidad més alla del cual la profundidad de socavacién ya no progresa (ret. 6) Por ejemplo, si se suponen los siguientes parémetros: ve4.0m/s, 6,-4.0m, beta entonces q = 16 m*/s, y aplicando la ecuacién (34): a, + 4, = 2.32 (169? ay? soar a a, = 5.81, por lo que 4s _ ap = 5-82 49 ‘Ademés, si se obtione una relacién ds/b > 1.3, no debe utilizarse este método ya que la relacién maxima entre ds y b obtenida por inglis fue de 1.3. 4.2. Laursen, Los métodos que llamamos Laursen | y Laursen il toman en cuenta el tirante de llegada y el ancho de la pila, sin considerar la velocidad de llegada. De acuerdo con los ensayes que reportan en la ref. (6), se encontré que éstos métodos dan buenos resultados sélo para condiciones extremas de velocidad, y ‘obviamente conducirén a socavaciones muy grandes en el caso de rios en planicies ‘en que las velocidades no son muy fuertes. El método Laursen Ill ya toma en cuenta la velocidad del flujo de llegada, y fue desarrollado bajo condiciones de aguas olaras. 4.3. Chitale, Este método presenta el inconveniente de que no toma en cuenta el ancho de la pila, el cual, como se ha venido discutiendo, es muy importante ya que influye directamente en la profundidad de socavacién local. 44, Bata. La ecuaci6n dada por Bata, ecuacién (11), tampoco toma en cuenta el ancho de la pila, por lo que se le puede hacer la misma observacién que a la ecuacién de Chitale. 4.5. Blench. Este método pertenece al grupo de los que se basan en las férmulas de régimen: a, +4, ae ears = 1.(2) phe aidaet sect (12) 4, 4, Manipulando algebraicamente la ecuacién (12) se llega a: a,+a 0.5 os. 2.05 9 Fae Haeleh (35) p02 ci por led Si se supone D = 0.37 mm, se llega a que a, + 4, 0.5, -2 ’ ag 282 que es una ecuacién practicamente igual a la ecuacién (34) propuesta por Inglis, Por lo que al método de Blench se le pueden hacer las mismas observaciones que al de Inglis para valores pequefios de D. 4.6. Lartas. De acuerdo con la ecuacién (13), para pilas con anchos mayores que 1.0 m, como se encuentran muchas veces en la préctica, y un 4ngulo nulo de 50 ataque, la relacién dfe/b varia de 1.0 a valores menores que la unidad, siendo que en los diversos ensayes y mediciones de campo realizados por diversos investigadores, dicha relacion puede ser mucho mayor que la unidad (ver 4.11). 4,7. Breusers. Propone la ecuacién ig TURD cece cere eee eee eee (14 por lo que a este método se le puede hacer la misma observacién que al de Larras, tanto para velocidades altas como para velocidades bajas. Sin embargo, presenta la ventaja de que permite estimar el orden de la magnitud de la profundidad de ‘socavacién en forma muy simple y répida. 4.8. Arunachalam. Este método pertenece al grupo de las formulas de régimen, y parece dar buenos resultados para velocidades mayores 0 algo menores que la que nicia el arrastre de sedimentos; sin embargo, sobreestima la socavacién para velocidades por debajo de 0.5 vo. En efecto, sin = 0.030, Ys = 2650 kg/m®, do = 4my D = 1mm, entonces ve = 0.45 m/s. Asi, si hacemos v = 0.15 m/s y b = 1.5m, se obtiene que ds = 0.92 m. Con estos mismos datos, el método de Maza, por ejemplo, arroja un valor nulo de la profundidad de socavacion. 4.9. Hincu. Este investigador propone la siguiente relacién: a 0.2 da 0-13 ‘se D 2 hee eee eee MY = - 3.3(2) a Para el rango de las arenas, este método proporciona resultados muy escasos de la profundidad de socavacién, ya que da valores méximos del orden de 1.5 para la relacién dge/b. Asi, este método resulta objetable por las razones que se mencionaron al comentar los métodos de Larras y Breusers. Ademés, al no tomar en cuenta la velocidad media de la corriente, arroja resultados sobrados de la profundidad de socavacién para velocidades bajas 4.10. Carstens. De acuerdo con la ecuacién (20), dse/b depende de un parametro adimensional “VE sje» Este método no puede aplicarse para valores de N3 comprendidos entre 1.64 y 5,02 ya que se obtendria una profundidad de socavacién negativa. 51 Para valores Ng = 5.02 la ecyacién (20) arroja una profundidad de socavacién infinita, Si se tienen valores de Ng menores que 1.64 los, resultados que, se obtionen son contradictorios ya que, por ejemplo, si N3 = 1.54 (3's = 2650 kg/m’, v = 1 mys, D = 1 om), se obtiene que dse = 0.02 b, mientras que si N3 = 1 (33 = 2650 kg/m®, v = 0.4 m/s, D = 1 cm), de = 0.12b, 0 sea, se obtendria una profundidad de socavacién mayor para velocidades menores, conservando los demas pardmetros constantes. Asi, aunque Carstens no advierte acerca de esto (ref. 7), parece ser que | método s6io es aplicable para los casos en que N3 > 5.02. Aun en este caso, los resultados son contradictorios ya que para valores de Ng mucho mayores que 5.02 (v = 4 m/s, D = 1 mm, y N§ = 990), se obtione dse/b = 0.55, mientras que si se disminuye N2 disminuyendo la velocidad o aumentando el didmetro del material, se obtienen valores mayores para dselb. 4.11, Maza y Sanchez. Estos investigadores realizaron sus ensayes para condiciones de aguas claras y con arrastre de sedimentos. Su método toma en cuenta el tirante de aguas arriba, el ancho de la pila y la velocidad media del flujo de llegada. De acuerdo con las fig. 5, 6 y 7, para una pila rectangular sin esviajamiento se obtienen relaciones ds/b hasta de 2.7, mientras que en una circular o de nariz redondeada se obtienen valores de ds/b hasta 2.6. En las figuras mencionadas se observa que para un tirante y una velocidad dados, la profundidad de socavacién ya no aumenta aunque silo haga la velocidad. Ademés, para valores de la velocidad menores que 0.4 ve, el método conduce a profundidades précticamente nulas de la hoya de socavacién, lo cual concuerda con lo observado por diferentes Investigadores (Shen, Nicollet, Hincu, Chabert y Engeldinger). Por otra parte, se observa que al mantener constante la velocidad y el ancho de {a pila, a) para velocidades altas (del orden de 4 m/s), al aumentar la relacién do/b de 2a 4.5, el cociente ds/b varia entre 1.7 y 2.25, es decir, hay un aumento del orden del 33% en la profundidad de socavacién, lo cual coincide con lo observado por diversos investigadores respecto a que el tirante influye poco para relaciones mayores que 2a 3 entre do y b. b) para velocidades bajas (1 m/s 0 menos), al aumentar la relacién do/b los valores de ds/b se mantienen constantes practicamente. Asi, en base a los comentarios anteriores, este método parece ser mas general que los discutides anteriormente. 52 4.12. Shen y otros, Proponen la ecuaci6n (21) para ser utilizada bajo condiciones de socavacién en aguas claras, la cual fue obtenida trazando una envolvente de los resultados obtenidos por muchos investigadores. La ecuacién citada expresa que la profundidad de socavacién es funcién del némero de Reynolds de la pila. Aunque dicho nimero puede obtenerse multiplicando entre si los paraémetros vD/) y b/D obtenidos en el andlisis dimensional presentado en el capitulo 2, es posible, de acuerdo con Neill (ref. 14), que la correlacién obtenida por Shen sea espuria y que la relacién esencial sea entre ds y b. Suponiendo que la relacién no fuera espuria, el hecho de que esta ecuacién sea envolvente de los datos indica que en la mayoria de los casos el método sobreestimara la profundidad de socavacién. Para calcular la profundidad de socavacién bajo condiciones de arrastre de sedimentos proponen las siguientes formulas : : 4 2 Shen I1-4: Tee aq ge bocce cess (22) 4, 0.6" Shen II-2: 22 = 3.4 & ee eee . 0.215 4 2rd (ea) ib: oe b . Shon 11-3: 78. 2 [E esl Como puede observarse, la ecuacién (22) es similar a la ecuacién (28) de Yaroslaviziev, y posiblemente sobreestime la profundidad de socavacién para velocidades altas, ya que ds se presenta como funcién directa de la velocidad elevado al cuadrado, siendo que es sabido que la socavacién no progresa cuando la velocidad sobrepasa un cierto valor. La ecuacién (23) es similar a la ecuacién (21), ya que la primera expresa que : 0.67 0.665 4g, = 1-58 v' v' mientras que la ecuacién (21) es equivalente a que a, = 1417 vOr62 90-62 Asi, el método Shen II-2 dard resultados mayores que el Shen |. 53 La ecuacién (24), que llamamos método Shen II-3 puede transformarse a la relacion: Sse_ 0 > r a 0.43 /d5 )0.355 Ce que es similar a la ecuacién (6) de Laursen y Toch. Posteriormente Shen propuso la ecuacién (32), la cual fue desarrollada en base a sus trabajos y a los de diversos investigadores. De acuerdo con esta ecuacién, la relacién do/b deja de influir para un valor do/b > 2. Este método considera que la profundidad de socavacién va en aumento conforme la velocidad crece, hasta que ésta es igual a la quo inicia el movimiento del material del fondo (v = vc). Esto es refutable cuando se tienen valores bajos de Ia velocidad que inicia el arrastre de fondo ya que para velocidades iguales 0 algo mayores que la de arrastre, se tendran valores sobreestimados de la socavacién. Por ejemplo, para D = 1 mm, n = 0.035 y X= 0°, se obtiene que vc = 0.28 m/s. Si se aplica la ecuaci6n (32) para v = 0.30 m/s, b = 1.5 m, do = 4.5 m, se obtiene que ds/b = 2, mientras que por el método de Maza se obtiene una profundidad muy pequefia de la socavacién. Haciendo variar inicamente la velocidad, si v = 1 m/s, la ecuacién (32) ya no varia en sus resultados, mientras que el método de Maza arroja un valor de ds/b = 0.4, y asi sucesivamente hasta que para v = 4 mis, el método de Maza coincide con el resultado ds/b = 2. 4.13, Coleman. De acuerdo con lo expuesto acerca de este método en el parrafo 3.1.14, la ecuaci6n (25) es: 9/10 v y = 0.6 te Ved, vee siel exponente fuera igual a 1.0, se tendria que a, = 1.4. Por consiguiente, a este método pueden hacerse las mismas observaciones que al de Larras y Breusers. 4. Field. Propone las gréficas dadas en la fig. 9, en funcién de ve [Pe cess 7a)" 54 donde, M = BYB; B’ es el ancho de la abertura del puente, medido a una profundidad igual a 0.5 do; B es el ancho de la superficie del agua en el flujo de llegada; a es el ancho de la pila, Ademés, propone utilizar los coeficientes de correcién por forma de la pila y por Angulo de ataque propuestos por Laursen. La inclusién del factor M no parece légica ya que dicho factor debe influir en la socavacién transversal, y quiz su influencia en la socavacién local sea despreciable. 4.15. Bonasoundas. Este investigador propone utilizar las curvas dadas en la fig. 10 (ref. 7) para obtener la profundidad de la socavacién local en pilas circulares, tomando en cuenta los pardmetros. ds/do, b/do, velv, y dse/dst, donde dst es la socavacién después de 2 horas de estar expuesta la pila al flujo de diseno, y dse es la profundidad de socavacién de equilibrio. En sus ensayes obtuvo que dso/dst = 1 Para vclv < 1; para el rango comprendido entre 1 < vclv < 1.3 obtuvo una variacién lineal de dse/dst entre 1 y 2. Para valores mayores de vcly, la relacin dse/dst 9¢ mantuvo constante ¢ igual a 2. Este método tiene la desventaja de que para cualquier relacién velv menor que 05, la profundidad de socavacién calculada sera constante, salvo el caso en que ft = dse/dst sea mayor que 1.0. Aun asi, este factor considera el tiempo de exposicin de fa pila al flujo, y no la velocidad de éste. 4.16. Yaroslaviziev. Propone la ecuacién (28), en la cual se toma en cuenta la forma y ancho de la pila, el 4ngulo de esviajamiento, la velocidad media y el tirante del flujo de llegada, y el diémotro Des del material del fondo. Este método sobreestima la profundidad de socavacién cuando las velocidades son altas, ya que ds se presenta como una funcién directa de la velocidad elevada al cuadrado, siendo que ya es un hecho conocido que la profundidad de socavacién no aumenta mas cuando la velocidad rebasa un cierto limite. 4.17. Ministerio de Ferrocarriles de la India. Las expresiones propuestas (ecuacién 29 y 30) no consideran el ancho de la pila, por lo que este método presenta las mismas desventajas que los métodos de Chitale y Bata. 4.18. Neill. Propone la ecuacién (31) para fines de disefio, misma que carece de generalidad por expresar la profundidad de socavacién sélo en funcién del ancho de Ia pila, Asi, puede arrojar resultados muy grandes para velocidades bajas, y resultados escasos para altas velocidades, Sin embargo, es muy util para efectuar cAlculos preliminares debido a su sencillez y facilidad de aplicacién. 55 En base a los comentarios realizados en este capitulo, se puede concluir que aparentemente, el Unico método de aplicacién general es el de Maza, y que hasta que no se tenga un numero suficiente de datos de prototipo, no ser posible evaluar en forma adecuada los diferentes métodos expuestos en este trabajo. Sin embargo, en base a algunos datos de prototipo reportados por Melville (ref. 7), en el capitulo 5 se hace una evaluacién de los métodos y se presentan algunas sugerencias en cuanto a su aplicacién. También se presentan los resultados de los ensayes realizados en el laboratorio de modelos hidréulicos de la Secretaria de ‘Comunicaciones y Transportes, los cuales se comparan con los valores arrojados por los métodos que dieron los resultados més aproximados a los datos de campo de Melville. CAPITULO 5 COMPARACION DE LOS METODOS Los métodos presentados antes pueden dividirse en 3 grupos, desde el punto de vista de las condiciones de arrastre de sedimentos para las cuales se realizaron los estudios que condujeron a ellos: Grupo A. Aquellos que se desarrollaron para un arrastre nulo de sedimentos (aguas claras). Grupo B.- Los correspondientes a movimiento continuo de sedimentos, Grupo C.- Aquellos para los cuales no se especifica si hubo arrastre 0 no. EI método de Bonasoundas, el de Maza, el de Shen (Ill) y el de Hincu valen tanto para el grupo A como para el B, Las ecuaciones de Larras y Breusers estiman die, es decir, la profundidad de equilibrio de la socavacién para una velocidad igual a la del movimiento incipiente del material del fondo, por lo que pueden clasiticarse dentro del grupo B. De acuerdo con lo anterior, puede hacerse la siguiente tabla: Tabla 4 Métodos aplicabdies aa Grup 4 Grupo B Grupo Socavacién en Socavaciéa con aguas claras transporte de sedimentos No 8¢ especifica Bleach onitale Bonasoundas Inglis Poona Breusers inelis tacey Carstens en I~ ee Colesen Shen 11-2 Shen I Piola Shen 11-3 Bonasoundas Hincu Weiss Bincu Larras Yaroslavtziev Waza Taursen I ‘Shen IIT Taursen IT Maza Ministerio F.c- India Ty If Shean IIT 87 iguiendo a Melville, en este capitulo se aplican los métodos vistos a los puentes de Nueva Zelandia cuyas caracteristicas geométricas, hidrdulicas y de socavacién él reporta. En este trabajo se agregan los métodos Shen Ill, Neill, Hincu, y Ministerio de F.C. India ly Il. Muchas de las ecuaciones propuestas valen para pilas alineadas con el flujo, por lo que cuando se tiene un angulo de ataque diferente de cero se utiliza el criterio de Laursen y Toch. Ademés, los métodos de Breusers, Carstens y Coleman valen para pilas circulares, por lo que se corrigen con los coeficientes de forma de la tabla 2. a.- Puente Tuakau - rio Waikato. Este puente es de concreto reforzado, de § claros, de 34 m c/u y esta ubicado a 25 km de la desembocadura al mar del rio mencionado. Los datos hidraulicos son los siguientes: Qa 410 m/s A 470 m® v= 087 m/s = velocidad media de tlegada. do = 30m q 2.61 m/s, S = 0.00016 F, 0.16 = numero de Froude del flujo de llegada. 0.030 = coeficiente de rugosidad de Manning. Las caracteristicas del material del fondo son: Dis = 038mm =tamano de particulas. Dso = 078mm Des = 209mm Predio ~ 3 %, = 25250 xg/n> La profundidad maxima de socavacién local en las pilas fue de 2.75 m; éstas son de nariz rectangular achaflanada, y tienen un ancho de 2.44 m por una longitud de 8.85 m; estén construidas con un esviajamiento de 10° respecto a la direccién del flujo. 58 Suponiendo que el fondo se mantiene plano, podemos estimar la velocidad media critica para el movimiento incipiente de las particulas del fondo, utilizando el rio de Shields y la ecuacién de Manning: ademas v* =\/ens ==> s'/?_ ae & R yooro y «tv sl? ate ae we sate .) ye Ve = 0.36 m/s Puesto que la velocidad media del flujo fue de 0.87 m/s, es de suponerse que existid arrastre de material del fondo, por fo que la socavacién ocurrié bajo condiciones de arrastre continuo de sedimentos. Sin embargo, aplicando todos los métodos vistos con fines de comparacién, se tienen los resultados siguientes: Tabla 5 cro wits Gy(a)_chaervacionen 59 *Kex es el coeficiente de correccién por Angulo de ataque dado por Laursen y Toch (Fig. 4) *#Kg es el factor de forma de la pila. Si consideramos como resultados aceptables aquellos que sean un 40% mayores © un 15% menores que la profundidad de socavacién obtenida en el campo, tendremos que el rango aceptable sera: 2.34 a 3.85 m. Observando la tabla 5, vemos que los métodos que arrojan resultados aceptables son: Del grupo B, los métodos de Coleman, Field, Hincu, Larras, Laursen Il. Dei grupo C, el método de Inglis-Lacey y el Shen Il-3. b,- Puente Waitangi, rio Tutaekuri Este puente estreché considerablemente el cauce, por lo que la socavacién medida representé la suma de la socavacin general y la socavacién local. Melville hizo ciertas consideraciones y lego a los siguientes parametros ‘aulicos responsables de la socavacién local inicamente: 2550 m/s 636 m? amis 329m 13.2m%s 0.00305 o7 0.0375

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