Vanguardia del Pueblo

Miércoles 1 de julio de 1998

Año 23, No. 1185.-

A los 89 cumplidos

Cuando a primeras horas de la mañana de!

martes cerraba esta edición de Vanguardia del
Pueblo, su fundador, el profesor Juan Bosch, se
extendía por toda la geografía nacional en el es-
pacio de los editoriales de los periódicos Hoy y
El Nuevo Diario, cuyas plumas describían el
paradigma a los 89 años cumplidos mientras en
la Biblioteca Nacional uno de los alumnos más
aventajados del maestro, el doctor Leonel
Fernández, inauguraba la lectura de la obra La
Guerra de la Restauración, que sería leída,
durante todo el día del 30 de junio, por figuras
señeras de la vida política, empresarial,
eclesiástica y artística de la República
Dominicana.

En la noche del lunes, la Universidad Pedro

Henríquez Ureña reconoció los méritos del
maestro. En la entrega del Honoris Causa
otorgado por la UNPHU, el doctor José Joaquín Bidó Medina dijo: Ya Don Juan
no es un contradictor, ya no es un polemista y las universidades como centros
de cultura, de ciencias, promotoras del desarrollo del intelecto y de la
inteligencia conocen profundamente sus obras, y es tiempo ya de que
comiencen a valorarlas, a promoverlas y premiarlas como lo hace hoy la
Universidad Nacional Pedro Henríquez Ureña, al conferirle el título de Doctor
Honoris Causa.

Yo, en nombre del Partido de la Liberación Dominicana y de la familia del

profesor Juan Bosch, agradezco el gesto y el valor de la dirección de esta
academia de reconocer su obra, que es reconocer a cada hombre dominicano o
latinoamericano que ha consagrado su vida a luchar por la moral y la justicia de
nuestro pueblo.
 Esos conceptos de Bidó Medina fueron también plasmados en el editorial de
El Nuevo Diario, cuando dice: Nadie como Bosch simboliza a quienes por
vocación han dedicado su vida a la enseñanza. El maestro forma en el aula como
con el ejemplo. El profesor Juan Bosch, sin embargo, hizo del país un aula
grande, y con sus prédicas educó a los dominicanos, los formó políticamente.
Insistió en que para servir la política tiene una ética.

Dice El Nuevo Diario que la vocación de Bosch por la enseñanza fue más
fuerte que su amor por el poder, consciente de que el ejercicio del poder sin la
observación de la ética acaba dañando al país y a quienes lo ejercen.

Mientras el editorial del periódico Hoy dice de Bosch: ...hay que honrarlo
como una de las plumas más destacadas que ha tenido nuestra literatura. Pasarán
los años, pasarán las décadas y pasarán los siglos y la obra literaria de Juan
Bosch permanecerá como una de las más importantes de la República
Dominicana, al menos en lo que respecta al género de la cuentística.

Vanguardia y el PLD se sienten representados en este editorial cuando deja

plasmado el mensaje: Juan Bosch nos honra a todos nosotros por su condición
de dominicano.

Juan Bosch nos honra como uno de los grandes cultores de la literatura de
lengua española.

Juan Bosch nos honra como una persona de bien.

Juan Bosch es dominicano ilustre, cuyas ejecutorias y cuyos ejemplos son
dignos de .presentarse ante las nuevas generaciones dominicanas.

¡Que viva el Maestro!