Está en la página 1de 2

Resumen del texto “Conflictos obreros durante el régimen peronista” de Louise Doyon

Introducción
En este trabajo, el autor se propone justificar la hipótesis de que la existencia de consenso
político puede ser compatible con la existencia de conflictos obreros, haciendo énfasis en el rol
activo que tuvieron las huelgas de los trabajadores durante el primer gobierno peronista.

I - (1943 - 1945)
La política autoritario-populista del régimen militar de junio de 1943 (basada en medidas
represivas y una integración social gradual y limitada) fue expandida por Perón en octubre de
1943 mediante medidas directas tales como la modernización del aparato estatal, la
ampliación de la política de bienestar, la redistribución de ingresos, la humanización de
condiciones de trabajo, y la asistencia del Estado para la organización de los trabajadores
industriales (no comunistas). En 1945, ante el deseo de varios sectores por la separación de
Perón de la Secretaria de Trabajo y Previsión Social, los trabajadores comenzaron a movilizarse
en protesta, y siendo el mismo Perón destituido el 9 de octubre de 1945, una masa
espontánea de trabajadores pidió el 17 de octubre su vuelta, lográndolo, y modificando así la
relación entre la clase trabajadora y el Estado.

II - (1945 - 1948)
Un análisis detallado nos mostrará que las huelgas que ocurrieron durante los tres años
después de 1945, pese a estar encabezadas (no todas) por grupos a favor del régimen,
tuvieron dificultades para resolver sus asuntos, tanto como cuando intervenía el Estado como
cuando eran activamente combatidos.

A. Industria alimentaria
Este sector tiene el número más elevado de huelgas importantes. Los factores responsables
generales de estas huelgas fueron: a) dificultades económicas de este sector ante las políticas
de industrialización, b) una larga tradición de oposición entre trabajadores y empresarios, c)
restricciones político económicas que pesaban sobre el Estado.
B. Industria extractivas y de transformación
Fueron un sector de bajos conflictos debido al favorecimiento económico que les brindaba la
política de industrialización. Su experiencia en organización era reciente y estaba a su alcance
obtener por medios pacíficos los mismos beneficios ganados por obreros de otros sectores de
la economía.
C. Sectores de transporte y servicios
Aquí se encuentra la menor cantidad de conflictos importantes.

Del análisis de todos los conflictos que se produjeron en estos tres sectores, podemos sacar las
siguientes conclusiones generales: 1) además del rol importante que jugó el Estado en la
redefinición de los parámetros legales que regulaban las relaciones entre empleados y
empleadores, las clases trabajadoras tuvieron una participación activa en procura de
asegurarse la implementación completa de dichas reformas. 2) Las demandas de los
trabajadores comprendían el reconocimiento del trabajador como productor y su participación
en los procesos de decisión a nivel de empresa, además de implicar una sustancial
redistribución económica y así, el reordenamiento de la estructura social global. 3) Aquellos
que más se beneficiaron con la protección de la Secretaria de Trabajo fueron quienes se
mostraron más insistentes en ver cumplidas sus demandas. 4) La capacidad del Estado estaba
condicionada por su propio plan de rápida industrialización del país, no por la orientación
política de los dirigentes sindicales. 5) La reducción de las huelgas luego de 1948 se produce
por la satisfacción de las principales demandas, el desplazamiento de los dirigentes más

www.unsam66.com
combativos, la mayor capacidad del Estado para resolver conflictos laborales, y la mayor
represión en las huelgas.

III - (1948 - 1951)


Luego de 1948, la carga financiera del Estado ante los onerosos compromisos con los
trabajadores se agravó por la disminución en su reserva de divisas, lo que llevaría a terminar
con los costosos subsidios a la industria de alimentos. La política comenzó a virar hacia el
establecimiento de un control sobre las demandas de los obreros, con vista a acelerar la
industrialización del país. El gobierno no deseaba ya tolerar el desborde de los conflictos
obreros, y ahora disponía del poder para imponer su nueva política. Los dos sectores que
debieron soportar el impacto fueron la industria azucarera y los frigoríficos. En 1951 el Estado
estableció su control sobre el movimiento obrero mediante la destrucción de aquellos
sindicatos que se oponían a su línea económica y política. Pero las disparidades salariales que
motivaron los conflictos crecerían luego de esta fecha.

IV - (1951 - 1955)
Los salarios de los trabajadores bajaron drásticamente por la inflación, y aunque el régimen
estuvo capacitado para mantener el control sobre el movimiento obrero durante los tres
primeros años de la década del cincuenta, cuando la economía comenzó a recuperarse a partir
de 1954, la presión de los trabajadores volvió. El gobierno percibió este descontento, pero hizo
la vista gorda a los conflictos laborales que siguieron. Una nueva avalancha de conflictos marcó
el desmoronamiento de la alianza establecida en 1946. Sin embargo, la mayoría de los
trabajadores acudía a canales muy moderados para demostrar su insatisfacción y no dirigía su
protesta contra el gobierno, ya que la clase obrera seguía creyendo (como afirmó en las
elecciones de diputados de 1954) que el peronismo era la única alternativa política.

Conclusiones
Como contraposición a la hipótesis de Germani de que los sindicatos peronistas sólo eran
dóciles instrumentos creados y manipulados por el Estado (ya que los verdaderos beneficios
obtenidos por los trabajadores con Perón se lograron entre 1944 y 1955), podemos concluir en
que, aquellos beneficios de los que habla fueron conseguidos justamente por los sectores que
ya estaban organizados y que los acuerdos firmados después de la elección de Perón como
presidente representan una de las más importantes conquistas del período peronista,
beneficiando a la totalidad de la mano de obra urbana. Dichas conquistas fueron en grandes
proporciones, producto de los conflictos laborales ocurridos entre 1946 y 1948, en los cuales
participaron activamente grandes contingentes de la clase obrera. Por ende, estas luchas no
constituyeron meros símbolos de protesta cuya victoria ya estaba asegurada de antemano.

www.unsam66.com

También podría gustarte