Las rocas contienen la historia de la Tierra porque en ellas han quedado
registrados los distintos procesos geológicos que han ocurrido durante la existencia del planeta. En el siglo XIX, aunque ya se reconocía el proceso de formación de las rocas, no se sabía exactamente el tiempo que se habían llevado esos procesos y, por eso mismo, se ignoraba qué edad tenían los fósiles.
Las dataciones dependían de métodos relativos, que permitían
interpretar la historia geológica y elaborar una escala relativa del tiempo geológico, hasta el desarrollo de las técnicas de fechamiento radiométrico. Por esto, se pueden distinguir dos tipos de dataciones de técnicas diferentes: datación relativa ydatación absoluta. Datación relativa
Cuando las rocas se colocan en una secuencia de formación adecuada,
no se establece una fecha precisa pero sí se puede obtener información sobre lo que sucedió antes o después de un acontecimiento; además, sitúa los acontecimientos sólo en orden secuencial y no en el tiempo en que tuvieron lugar. Ésta técnica se basa en los principios geológicos fundamentales: Ley de la Superposición, Horizontalidad Original, Principio de Intersección, Inclusiones o Incrustaciones, Discontinuidades Estratigráficas y Correlación de Capas Rocosas.
Datación absoluta
Mediante este tipo de datación es posible obtener fechas absolutas, es
decir fiables, para los acontecimientos del pasado geológico; estos métodos proporcionan edades numéricas.
Al comienzo del siglo XX se hizo un descubrimiento revolucionario: si
bien la mayor parte de los isótopos de los 92 elementos naturales son estables, algunos son inestables y se desintegran espontáneamente de los elementos despidiendo partículas subatómicas y transformándose de un elemento a otro para convertirse en otros isótopos más estables liberando energía en el proceso; a estos átomos inestables se les conoce como isótopos radioactivos. Datación radiométrica
La datación radiométrica es una técnica empleada en la estimación de
la edad absoluta (numérica) de materiales geológicos tales como rocas, minerales o materia orgánica, que se logra a partir de isótopos radiactivos; los cuales se fundamentan en las series de desintegración de isótopos con tasas constantes de decaimiento radioactivo.