Nuestro país lleva muchos años, desde que empezaron los conflictos armados, anhelando una

paz, una tranquilidad, que hasta el momento ha sido un objetivo difícil de conseguir, no
desmeritando la propuesta del gobierno, ya que cada día escuchamos noticias sobre el proceso de
la paz, el dialogo en la habana, que aparenta llevarse a cabo con plena seguridad y confianza,
pero al ver la realidad, este proceso se va al piso, viendo tantas victimas del conflicto armado, mas
aun, el pueblo, se esta viendo afectado por acciones terroristas cometidos por estos grupos
armados, que hasta se llega a pensar que el gobierno no quiere estar al tanto de estos atentados,
y que desconoce lo que el pueblo realmente quiere, no solo PAZ, también JUSTICIA, por aquellos
militares mutilados, jóvenes reclutados a la fuerza, niños huérfanos, amas de casa y campesino
destituidos de sus propias tierras haciéndolos vivir una vida sin dignidad, mientras tanto vemos que
en la Habana, se esta dialogando la Paz, como algo tan fácil de acceder o de olvidar. Se aclara, no
estoy en contra del proceso de la Paz, mi opinión esta a favor de el pueblo colombiano, como lo
estipula el autor Mauricio Garcías Villegas, del articulo Las Farc y el pueblo, las solución mas
alterna que puedo proponer, es entender que este proceso de la paz, puede ser en unos años un
objetivo cumplido, como también puede ser historia, así como tantas masacres, secuestros y
muertes, que hasta hoy quieren que sea solo historia. Pero como algo muy personal, si quiero
aportar algo que si podemos hacer como personas, es pedirle al Presidente de todos los
presidentes, que es Dios, que dirija este proceso de paz, y que mientras tanto nos de esa paz que
Él nos ofrece, esa paz individual e interior, en la cual si podemos confiar plenamente. Seamos
unidos como país, y luchemos por la paz, empezando en nuestros hogares, pero al tiempo seamos
sensatos y realistas, que no todo en esta vida y en este mundo puede ser fácil de conseguir, pero
tampoco imposible...