La generación de residuos sólidos o basura en las principales
ciudades de Colombia está en un promedio de 0.63
kg/habitante/día de los cuales una gran proporción (de hasta el 60%) corresponde a la fracción orgánica cuyo destino final son botaderos o rellenos sanitarios como lo es el relleno sanitario Doña Juana ubicado al sur de la capital. El problema es mayor en las zonas rurales del país donde se enfrentan serias dificultades para resolver la problemática del manejo y disposición final, con el gran riesgo de convertirlos en focos de contaminación ambiental que pueden llegar amenazar la salud pública. La situación descrita anteriormente obliga a buscar soluciones técnicas entre las cuales existen algunas de gran complejidad y elevado costo. Como alternativa, surgen los sistemas biológicos de tratamiento como el vermicompostaje (compostaje con lombrices) los cuales promueven la reducción de los volúmenes, mitigación de la toxicidad de los sólidos generados. La técnica del vermicompostaje, se basa en el hábito de alimentación de algunas especies de lombrices cuyos organismos son capaces de procesar una gran variedad de desechos orgánicos. Esta acción promueve una efectiva degradación del desecho orgánico contenido en los residuos sólidos domésticos, estabilizándolos y transformándolos en un producto denominado humus.