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Adrián Velasco

Paralelo 1

Estructura cristalina de los metales


Cuando los materiales solidifican al ser enfriados, el movimiento atómico cesa. En estado sólido los
átomos pueden adquirir un ordenamiento definido tridimensional, en tal caso se dice que tienen
estructura cristalina.

En un metal sólido, estos átomos se agrupan en el espacio en arreglos ordenados, repetitivos y


periódicos, formando estructuras tridimensionales. Salvo ciertas excepciones, los metales cristalizan
en solo tres estructuras: la estructura cúbica centrada en el cuerpo (BCC), la estructura cúbica
centrada en las caras (FCC) y la estructura hexagonal completa compacta (HCP). Estas estructuras
tienen la característica de ser muy compactas, es decir, permiten aprovechar eficientemente el
espacio dejando pocos huecos

El arreglo estos materiales cristalinos no es perfecto y tienen defectos, en un lugar que debería estar
ocupado por un átomo a veces está vacío, este defecto recibe el nombre de vacancia; cuando un
metal contiene elementos aleantes, en un lugar que normalmente lo ocupa el metal huésped,
pueden alojarse en los huecos o intersticios de la red cristalina, este defecto se llama átomo de
impureza intersticial, de manera que se estaría hablando de una solución sólida. Se tiene el caso del
acero como una solución sólida intersticial, ya que este es una aleación de hierro y carbono.

Las dislocaciones tienen gran importancia en las propiedades de los metales son los defectos
llamados dislocaciones, ya que son responsables su ductilidad y existen en gran número en los
metales, generándose desde su proceso de solidificación. Cuando un metal es recocido, es suave y
de baja resistencia mecánica, esto se debe a la moderada cantidad de dislocaciones que contiene y
que son relativamente libres de moverse mediante esfuerzos bajos, por el contrario, cuando se
deforma un metal en frio, su dureza y resistencia aumentan porque las dislocaciones experimentan
dificultad para desplazarse.

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