Está en la página 1de 3

En física el

término elasticidad designa la


propiedad mecánica de ciertos
materiales de
sufrir deformaciones reversibles
cuando se encuentran sujetos a la
acción de fuerzas exteriores y de
recuperar la forma original si estas
fuerzas exteriores se eliminan.
La elasticidad es estudiada por
la teoría de la elasticidad, que a su
vez es parte de la mecánica de sólidos
deformables. La teoría de la
elasticidad (TE) como la mecánica de sólidos (MS) deformables describe cómo un sólido
(o fluido totalmente confinado) se mueve y deforma como respuesta a fuerzas exteriores.
La propiedad elástica de los materiales está relacionada, como se ha mencionado, con la
capacidad de un sólido de sufrir transformaciones termodinámicas reversibles e
independencia de la velocidad de deformación (los sólidos visco elásticos y los fluidos, por
ejemplo, presentan tensiones dependientes de la velocidad de deformación). Cuando
sobre un sólido deformable actúan fuerzas exteriores y éste se deforma se produce un
trabajo de estas fuerzas que se almacena en el cuerpo en forma de energía potencial
elástica y por tanto se producirá un aumento de la energía interna. El sólido se
comportará elásticamente si este incremento de energía puede realizarse de forma
reversible, en este caso se dice que el sólido es elástico.

La plasticidad es un comportamiento mecánico


característico de ciertos materiales anelásticos consistente
en la aparición de deformarse permanente e
irreversiblemente cuando se encuentra sometido
a tensiones por encima de su rango elástico, es decir, por
encima de su límite elástico.
En los metales, la plasticidad se explica en términos de
desplazamientos irreversibles de dislocaciones.
En los materiales elásticos, en particular en muchos metales
dúctiles, un esfuerzo uniaxial de tracción pequeño lleva
aparejado un comportamiento elástico. Eso significa que
pequeños incrementos en la tensión de tracción comporta
pequeños incrementos en la deformación, si la carga se vuelve cero de nuevo el cuerpo
recupera exactamente su forma original, es decir, se tiene una deformación
completamente reversible. Sin embargo, se ha comprobado experimentalmente que existe
un límite, llamado límite elástico, tal que si cierta función homogénea de las tensiones
supera dicho límite entonces al desaparecer la carga quedan deformaciones remanentes y
el cuerpo no vuelve exactamente a su forma. Es decir, aparecen deformaciones no
reversibles.

NOMBRE: JONATHAN PACALLA CURSO: 1 ELECTRO A


En ciencia de materiales, la tenacidad es la energía de
deformación total que es capaz de absorber o acumular
un material antes de alcanzar la rotura en condiciones
de impacto, por acumulación de dislocaciones. Se debe
principalmente al grado de cohesión entre moléculas.
En mineralogía la tenacidad es la resistencia que
opone un mineral u otro material a ser roto, molido,
doblado, desgarrado o suprimido.
Nótese que para un material viscoelástico dicha energía
dependería de la evolución de velocidad deformación,
mientras que en materiales elastoplásticos es
independiente de ellos.

La resiliencia es la propiedad de un material que


permite que recupere su forma o posición original
después de ser sometido a una fuerza de doblado,
estiramiento o compresión.

Lógicamente esto debe darse antes de que comience


su deformación plástica (deformación permanente o
irreversible), ya que en caso contrario no volvería a su
forma original, y quedaría deformado
permanentemente. Un material muy conocido por
tener una gran resiliencia es la goma. La deformación
elástica es la deformación mientras no rompa o se
deforme permanentemente el material. La resiliencia
se mide siempre dentro de la deformación elástica del material.

Se llama límite elástico de un material, a la fuerza máxima que se le puede aplicar sin sufrir
deformaciones permanentes. Por lo tanto, la energía que absorbe un material antes de
llegar a su límite elástico es la resiliencia.

La ductilidad es una propiedad que presentan


algunos materiales, como las aleaciones metálicas o
materiales asfálticos, los cuales bajo la acción de una
fuerza, pueden deformarse plásticamente de manera
sostenible sin romperse,1 permitiendo
obtener alambres o hilos de dicho material. A los
materiales que presentan esta propiedad se les
denomina dúctiles. Los materiales no dúctiles se
califican como frágiles. Aunque los materiales
dúctiles también pueden llegar a romperse bajo el
esfuerzo adecuado, esta rotura sólo sucede tras
producirse grandes deformaciones.

NOMBRE: JONATHAN PACALLA CURSO: 1 ELECTRO A


En otros términos, un material es dúctil cuando la relación entre el alargamiento
longitudinal producido por una tracción y la disminución de la sección transversal es muy
elevada.

La fragilidad es la capacidad de un material de


fracturarse con escasa deformación. Por el
contrario, los materiales dúctiles o tenaces se
rompen tras sufrir acusadas deformaciones,
generalmente de tipo plásticas. La fragilidad es lo
contrario de la tenacidad y tiene la peculiaridad de
absorber relativamente poca energía, a diferencia
de la rotura dúctil.
La fragilidad de un material además se relaciona
con la velocidad de propagación o crecimiento de grietas a través de su seno. Esto
significa un alto riesgo de fractura súbita de los materiales con estas características una
vez sometidos a esfuerzos.1 Por el contrario los materiales tenaces son aquellos que son
capaces de frenar el avance de grietas.

La maleabilidad es la propiedad de adquirir una


deformación mediante
una compresión sin romperse. A diferencia de
la ductilidad, que permite la obtención de hilos,
la maleabilidad favorece la obtención de
delgadas láminas de material, también es
considerada como una propiedad cualitativa.1
El elemento conocido más maleable es el oro.
También presentan esta característica otros
metales como el platino, la plata, el cobre y
el hierro.2

Se denomina tensión de rotura a la máxima tensión que


un material puede soportar bajo tensión antes de que
su sección transversal se contraiga de manera
significativa.12
La tensión de rotura se obtiene por lo general realizando
un ensayo de tracción y registrando la tensión en función
de la deformación (o alargamiento); el punto más elevado
de la curva tensión-deformación es la tensión de rotura. Es
una propiedad intensiva; por lo tanto su valor no depende
del tamaño de la muestra, sino de factores, tales como la
preparación, la presencia o no de defectos superficiales, y
la temperatura del medioambiente y del material.
Las tensiones de rotura rara vez son consideradas en el diseño de elementos dúctiles, pero sin
embargo son muy importantes en el diseño de elementos frágiles. Las mismas se encuentran
tabuladas para los materiales más comunes tales como aleaciones, materiales
compuestos, cerámicos, plásticos, y madera.

NOMBRE: JONATHAN PACALLA CURSO: 1 ELECTRO A

También podría gustarte