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Una pulsión que va y viene

Por Villavicencio V.
071850
Universidad de Londres
Mayo 2011
Teorías de la Personalidad I
Prof. Gerardo Miranda
Una pulsión que va y viene.

¿Cómo explicar un fenómeno que solo muestra sus huellas y no se puede ver?

Un niño en edad escolar, con un trastorno aparentemente autista. Sale de una clínica sin
mejoras, sin cambios, sin nada nuevo que reportar.

En casa, la dinámica cambia radicalmente. Una película, un despertar o solo una


descarga.

¿Sufrimiento o placer?

Abel, un niño que sale de un aparente encierro psíquico, ¿cómo lo logra y con qué
objetivo?

5 sujetos viven una dinámica interesante cuando ciertos factores se colapsan en una serie
de eventos analíticamente predecibles y explicables.

Un autista, una adolescente, un pre-edipico, un padre ausente y una madre castrada.

Según parece, Abel era un niño normal, en su desarrollo y en su maduración, hasta que
sucede un evento que transformará la vida de Abel y su familia en su dinámica psíquica,
incluso en una estática psíquica.

Cuando Abel, tendría la edad latente. Sufre el abandono de la figura paterna. En vías de
solucionar el Edipo y la castración, pierde aquello que le diría como resolver la falta, o
mejor dicho, bajo que medios. La ley del padre.

Este acontecimiento lo lleva a generar mecanismos represivos excesivamente fuertes,


que impiden la descarga de todo material psíquico, sus relaciones interpersonales,
maduración socio-afectiva e incluso el habla.

Dentro de sí mismo el aparato psíquico buscara la descarga de la pulsión, aun cuando los
mecanismos represivos busquen frenarla. Es bajo esta premisa que Abel ha de hacerse
aún por un periodo corto de tiempo, un sujeto deseante.

Por dos años en ausencia de Anselmo, Abel careció de figuras masculinas, pues recluido
en el hospital solo era atendido por enfermeras, las cuales descargarían pulsiones
derivadas de su propia castración, buscando hallar el complemento de su falta en Abel,
solución Edipica mediante obtener un falo por un tercero sea hijo o enfermo a cuidar. Lo
que puede indicar que para Abel, las enfermeras eran la función de la mamá, nuevamente
no hay la figura paterna.

Una vez en casa, con el ejemplo de una figura paterna visto en la película, el deseo
incestuoso de Abel lo lleva a romper esa barrera represiva y a encontrar una forma de
descarga pulsional. Introyectando el rol del padre según la película.

Es ahí cuando se hace transferencia con Cecilia, ella ve el resultado de la construcción


inconsciente que hizo en Abel. Un falo que pudiera tener consigo, siempre.
Hay muchos casos de hijos de madres solteras, divorciadas, abandonadas, viudas, etc.
Que sabemos han resuelto satisfactoriamente su Edipo y su castración. ¿Por qué Abel no
lo logra?

Sería interesante indagar en el contenido inconsciente que Abel tiene acerca de Anselmo.
Cual fue la imagen que Cecilia le inculco a su hijo segundo, para que le fuera tan fácil
reprimir el apego a su padre.

Si un psicótico permanece alienado a la madre y la madre en el sujeto, la figura paterna


no existiría ni como función ni como deseo, sin embargo Abel deseaba la función paterna
hasta llegar a cumplirla.

El resto de la familia de Abel, lidia con su falta cuando dejan que Abel tenga en sí, las
funciones del rol paterno, Paul lo llamaba papa, al igual que Selene cuando se enfrenta a
Anselmo, Cecilia lo llamaba “mi amor” y a su vez Abel los refería por hijo, hija, Cecilia.

Abel utilizó la falta de la familia para hacerse de un síntoma con el cual pudiera hacer
descargas de su pulsión.

Anselmo al no querer participar de la misma manera, posiblemente lidiando de nuevo con


su propia castración, es decir, Anselmo sentía competencia con Abel. Pudo pensar en su
inconsciente “Él tiene uno grande” lo cual lo lleva a utilizar sus mecanismos agresivos
para solucionar nuevamente su propia castración.

Recordemos que cuando hace este acto en el baño con el espejo, es después de
enterarse que Cecilia había tenido relaciones sexuales con el de la cremería. Anselmo
con esto habrá recordado que no está completo, y que de alguna forma Cecilia lo hacia
así, suponiéndola perdida, un indicador más de su propia castración.

Cuando el inconsciente de Abel se percata del peligro, por la agresión de Anselmo,


buscará protegerlo inhibiéndolo. Comenzará a utilizar esta fijación de híper estimularse la
palma de la mano izquierda.

¿Será acaso que el inconsciente de Abel utilizara una función de interdicción y por ello
buscara entonces, situarse en contextos de peligro de muerte?

Después de este suceso y la reclusión de Abel en el psiquiátrico, Cecilia, lidiara ahora


nuevamente con su castración, pues perdió el objeto de amor en su propia solución del
complejo de castración, y ahora nuevamente con la perdida de Abel.

Pienso que cuando el aparato psíquico de Abel se sintió amenazado por la ahora
expresada ley del padre, cuando Anselmo ejerce su autoridad frente al espejo, se
desestabilizo. En esa inestabilidad, el inconsciente de Abel veía dos posibles soluciones.
Reprimirse a sí mismo nuevamente o la descarga total de la pulsión ergo la visita al
balneario donde arrastrando a Paul, prefirió la descarga total. Al no poder ser tramitada,
vuelve al estado previo de represión de la pulsión de muerte.

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