Se refiere a la aceptación del contrato matrimonial por parte de las jóvenes
educadas en la obediencia y el acatamiento a la voluntad de sus padres, no tienen posibilidad de elegir marido libremente, y muchas veces son llevadas a aceptar situaciones contrarias a sus sentimientos. Este "sí" por lo tanto, adquiere un matiz irónico, pues en lugar de ser sincero y espontáneo, es falso, hipócrita y expresión de una imposición.