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 E – 26-260-A-10

Tratamiento conservador precoz


del pie zambo equinovaro
idiopático. Entre consenso
y desacuerdo
F. Bonnet-Diméglio, J. Cottalorda, K. Patte

El tratamiento conservador del pie zambo equinovaro es reconocido por todos los equi-
pos de ortopedistas pediatras como una necesidad inmediata, urgente e ineludible.
Sin embargo, este tratamiento abarca realidades muy diversas: cada equipo tiene sus
principios, a menudo muy distintos, incluso contradictorios, sobre todo en materia de
contenciones. El método funcional, el método con yesos sucesivos, el método mixto con
manipulaciones y férulas tienen, sin embargo, los mismos objetivos fundamentales: ope-
rar la menor cantidad posible de pies zambos y, si la cirugía es necesaria, tratar de que sea
limitada. En los equipos integrados por kinesiterapeutas especializados, las manipulacio-
nes y las contenciones se consideran desde el nacimiento como una urgencia. En cambio,
para la nueva generación de ortopedistas pediatras, confrontada a la conformación de
un equipo con profesionales poco experimentados y a la falta de resultados satisfacto-
rios, la tendencia es empujar hacia una vía muerta un método funcional plenamente
reconocido pero que consume mucho tiempo para adoptar por completo un método
reproducible con más facilidad, menos costoso y ampliamente sometido a consideración
de los ortopedistas por Ponseti y sus adeptos: el método mediante yesos sucesivos. En
este artículo se intentarán apaciguar los debates, tediosos o apasionados, que subsisten
entre los equipos implicados en el tratamiento del pie zambo, demostrando la utilidad
de obtener más consenso que desacuerdo en cuanto al uso de todas estas técnicas.
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Palabras clave: Pie zambo equinovaro; Tratamiento conservador; Movilizaciones;


Contenciones; Estudios comparativos; Clasificación; Ponseti

Plan ■ Consenso en el tratamiento conservador 4


Del diagnóstico prenatal a la consulta ortopédica prenatal 5
■ Introducción 2 Exploración física del recién nacido 5
Clasificación inicial 5
■ Reseña fisiopatológica 2 Etapas principales del tratamiento conservador 5
Factores extrínsecos 2 Reducción de las deformaciones 5
Factores intrínsecos 2 Contenciones 8
Factores genéticos 3 Minicirugía 9
■ Aspectos anatómicos 3 ■ Desacuerdos en el tratamiento conservador 9
Interrelación calcáneo-astrágalo-cuboides-escafoides 3 Tiempo de movilización. Tipos de contenciones 9
Constitución del pie en dos columnas 3 Observancia por parte de las familias 13
Astrágalo: un hueso singular sin fijación tendinosa 3
■ Conclusión 14
Bloqueo de la posición anormal por la retracción
de los tejidos blandos 3
Anomalías vasculares 4
Crecimiento restante 4

EMC - Kinesiterapia - Medicina física 1


Volume 36 > n◦ 1 > febrero 2015
http://dx.doi.org/10.1016/S1293-2965(14)69734-6
E – 26-260-A-10  Tratamiento conservador precoz del pie zambo equinovaro idiopático. Entre consenso y desacuerdo

 Introducción excelente indicación sobre el miembro inferior. Este


período suele caracterizarse por modificaciones de la
Hipócrates, considerado el padre de la medicina, fue orientación espacial. A partir de la cuarta semana (apa-
el primero en rebatir las supersticiones y creencias que rición de los esbozos de los miembros inferiores), el pie
atribuían la causa de las enfermedades a fuerzas sobrena- pasa de forma obligatoria por una posición fisiológica en
turales o divinas. En su tratado De las articulaciones señala: equinovaro, con las superficies plantares enfrentándose
«en cualquier luxación, el desplazamiento es más o menos con- a la octava semana para extenderse de forma progre-
siderable y, por consiguiente, mayor o menor la dificultad de siva y recobrar una posición normal a la 11.a semana de
reducción». Agrega «que algunas luxaciones congénitas o de la la vida intrauterina [19] . El desarrollo incorrecto de este
infancia pueden ser reducidas si el desplazamiento es menor». período fija el pie en equinovaro. El pie zambo equi-
Esto lo condujo al pie zambo. Lo comparó a una luxación novaro es, por tanto, una posición normal durante el
congénita moderada. Expuso en detalle el modo de reduc- período embrionario y anormal durante el período fetal.
ción, «modelar el pie como se modela la cera, lentamente, sin Por su multiplicidad, las teorías etiológicas y patogéni-
forzar...», fiel a su principio de no actuar de forma brusca cas son motivo de numerosos debates. A continuación se
con la naturaleza, recomendando «devolver los pies a su describen los diversos factores que podrían explicar esta
dirección natural de forma gradual». Describió la aplicación patología [7, 20–22] .
del vendaje y los cuidados que hay que prodigar cuando el
niño comienza a caminar. Pretendía así «que el pie zambo
es curable es la mayoría de los casos y que lo mejor era tratar
Factores extrínsecos
esta lesión lo más precozmente posible, antes de la constitución La compresión intrauterina postural, una teoría muy
de una atrofia marcada» [1] . antigua, era defendida por Hipócrates. Hoy en día, la
Sin embargo, dos milenios y medio más tarde, el ecografía prenatal demuestra que un pie zambo ya está
tratamiento del pie zambo equinovaro sigue siendo constituido a las 16 semanas del desarrollo, aunque toda-
controvertido [2–15] . La rehabilitación del pie zambo equi- vía no ha sufrido ninguna compresión. Sin embargo, no
novaro es diversamente apreciada según las escuelas. hay que ignorar las presiones que al final del embarazo
Algunos equipos la aplican con obstinación y convicción, acrecientan la deformación y agravan la rigidez de un pie
otros son realmente escépticos en cuanto a su utilidad zambo.
y, por último, otros la consideran difícilmente aplicable
en la mayoría de los países [16, 17] . No todos los kinesite-
rapeutas son expertos en la técnica de manipulación del Factores intrínsecos
pie zambo neonatal. Hasta hoy, relativamente pocos estu-
dios prospectivos en los que se han comparado de manera Teoría vascular
imparcial estos distintos métodos han sido capaces de Pareciera que la magnitud de la hipoplasia de la arteria
pronunciarse a favor de uno u otro procedimiento. Así, tibial anterior y de la arteria pedia correlacionaría con la
ninguna de estas conductas ha dado pruebas de superio- gravedad de la deformación.
ridad. Cada una de ellas produce resultados funcionales
absolutamente satisfactorios [18] . Sea cual sea el protocolo
escogido, el tratamiento del pie zambo debe basarse en el Fibrosis retráctil posteromedial
análisis de la deformación y en la anatomía funcional del Grandes cantidades de colágeno harían que los tejidos
pie. Los tratamientos se inician en los primeros días de blandos de esta región se volvieran muy fibrosos. Estos
vida para aprovechar el mayor grado de reducibilidad del tejidos se retraerían por el aumento de la actividad de los
pie. miofibroblastos (asimilable a una enfermedad de Dupuy-
tren).

“ Punto importante Asimetría de crecimiento óseo


El peroné crece más rápido que la tibia en torno a la sép-
tima semana del desarrollo. Esto deforma el pie en varo.
• El diagnóstico es prenatal en alrededor del 70% Después, la tibia recupera su retraso y el pie se corrige.
de los casos. Un proceso patológico en este período podría impedir la
• Afecta a los varones en el 70% de los casos. corrección del pie y la deformación se volvería perma-
• Casi el 50% de los recién nacidos afectados pre- nente.
senta una forma bilateral.
• La frecuencia del pie zambo es de Teoría malformativa
1/1.000 nacimientos. La deformación del astrágalo impediría que éste se inte-
• En 2005, según datos del Institut National de grase de forma correcta en la pinza bimaleolar. Según
la Statistique et des Études Économiques de Fran- Scarpa, la deformación ocasionaría una «subluxación del
cia obtenidos a comienzos de 2008, en este país complejo articular formado por el astrágalo, el calcáneo y
había alrededor de 800 niños afectados, a partir el escafoides» [9] .
de 800.000 nacimientos, lo que representaba un
total de 1.200 pies zambos. Teoría neuromuscular con interrupción
• El tratamiento conservador prequirúrgico es ine- del desarrollo
ludible. Es sostenida, entre otros, por Ponseti. En este caso, un
proceso patológico afectaría a la inervación de los múscu-
los. Habría un retraso de la inervación del nervio peroneo
común respecto a la del nervio tibial posterior. El resultado
sería un defecto temporal de la inervación de los músculos
 Reseña fisiopatológica elevadores y eversores (nervio peroneo común). El dese-
quilibrio muscular fijaría el pie en equinovaro y aducción.
La patogenia y los mecanismos íntimos del pie zambo La gravedad de las retracciones sería producto del grado de
equinovaro no se conocen realmente. Sin embargo, retraso de la inervación dependiente del nervio peroneo
la parte inicial del período embrionario brinda una común comparado con la del nervio tibial [7, 20–22] .

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A B
Figura 1. Deformación tridimensional del pie zambo equinovaro a los 2 días de vida (A, B). Interrelación calcáneo-astrágalo-cuboides-
escafoides: la deformación es producto de ella y repercute hasta la punta de los dedos. El pie zambo recibe denominaciones especialmente
gráficas en diversas lenguas: en francés, pied bot; bot deriva de una antigua palabra germánica: butta, que significa debilitado. En inglés,
club foot; club se refiere al palo de golf, cuya morfología es semejante a la del pie zambo. En alemán, Klump fuss; la palabra klump significa
debilitado, «de mantequilla». En castellano, pie zambo; la palabra zambo describe el mestizaje entre un africano de raza negra y un nativo
americano. En griego, hypo podia; el pie zambo es semejante a la pata del caballo.

A B
Figura 2. Es imperativo restablecer lo antes posible la divergencia astragalocalcánea.
A. La divergencia astragalocalcánea es nula o incluso está invertida (flechas).
B. La divergencia astragalocalcánea forma un ángulo de 35◦ en el pie normal (flechas).

Factores genéticos Constitución del pie en dos columnas


Hay diversos argumentos a favor de un origen genético: Se trata de la columna dependiente del astrágalo
• la frecuencia guarda relación con la etnia: es más ele- y de la dependiente del calcáneo. El restablecimiento
vada en los polinesios (6,9/1.000); rápido de una divergencia correcta entre el astrágalo y el
• el 70-75% de los niños afectados son varones; calcáneo permite recobrar el equilibrio de ambas colum-
• desde hace mucho se conocen familias afectadas por pie nas y evitar una deformación del pie en «habichuela»
zambo. En ellas, la frecuencia es 30 veces mayor que en (Fig. 2).
el resto de la población;
• el estudio de los pies zambos en gemelos permite pen-
sar que esta patología sería transmisible de un modo Astrágalo: un hueso singular sin fijación
poligénico con penetrancia incompleta. Al respecto, si
uno de los gemelos está afectado, el otro tiene un pie
tendinosa
zambo en el 32,5% de los casos si se trata de geme- El bloque calcaneopedio es una entidad anatómica que
los monocigóticos y en el 2,9% si se trata de gemelos comprende todos los huesos del pie, desde el calcáneo
dicigóticos [18, 23] . hasta las últimas falanges. Este bloque se moviliza por
debajo del astrágalo por medio del ligamento interóseo
 Aspectos anatómicos astragalocalcáneo, que desempeña un papel de pivote
semejante al de los ligamentos cruzados de la rodilla.
El pie zambo equinovaro es una deformación tridimen-
sional en inversión. Está compuesto por aducción de la
articulación del mediotarso, aducción de la subastraga- Bloqueo de la posición anormal
lina, varo del retropié y deformación en equino [18] . Se por la retracción de los tejidos blandos
asocian varios aspectos anatómicos.
Están afectadas todas las estructuras: capsuloliga-
mentosas, musculares y tendinosas. La mayoría está
Interrelación representada por las inserciones de los grupos muscula-
calcáneo-astrágalo-cuboides-escafoides res responsables de la deformación en equinovaro (Fig. 3,
Cuadro 1) [24] . Los cerrojos de la deformación son los
La posición en pie zambo se origina a este nivel. Las nódulos fibrosos o agrupamientos localizados de fascias,
deformaciones se encadenan entre sí y son indisociables vainas tendinosas y de ligamentos adosados y retraídos.
(Fig. 1). Se han descrito tres variedades [7, 25] .

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Figura 3. Obsérvese el desequilibrio en


el número de las inserciones musculares
sobre las caras dorsal y plantar del pie. En
la cara plantar, salvo el peroneo largo, lo
demás parece disponerse para provocar
1
una deformación del pie en equinovaro
y aducción. El principal, con sus siete
inserciones, es el tibial posterior. Además,
2 el tibial anterior, inervado por el nervio
peroneo, ejerce un efecto agravante de
3 la inversión debido a sus inserciones por
debajo del primer cuneiforme y del pri-
1 mer metatarsiano.
4
2 A. Cara dorsal. Músculos eversores.
1. Peroneo corto; 2. tercer peroneo.
B. Cara plantar. Músculo inversores.
1. Tríceps; 2. tibial posterior, responsable
principal de la deformación; 3. tibial ante-
rior; 4. peroneo largo.

A B

Cuadro 1.
Acciones de los músculos de la pierna.
Acciones musculares que fijan la deformación 16
Acciones musculares que corrigen la deformación 12
Plano sagital Plano horizontal Plano frontal 3D puro
± Hipertónico Tríceps sural Flexión plantar Supinación
± Hipertónico Tibial posterior Flexión plantar Aducción Supinación Inversor puro
± Hipertónico Flexor largo del primer dedo Flexión plantar Aducción Supinación Inversor puro
± Hipertónico Flexor largo de los dedos Flexión plantar Aducción Supinación Inversor puro
± Hipertónico Tibial anterior Flexión dorsal Aducción Supinación
± Hipotonía Extensor largo del primer dedo Flexión dorsal Aducción Supinación
± Hipotonía Extensor largo de los dedos del pie Flexión dorsal Abducción Pronación Eversor puro
± Hipotonía Tercer peroneo Flexión dorsal Abducción Pronación Eversor puro
± Hipotonía Peroneo corto Abducción Pronación
± Hipotonía Peroneo largo Flexión plantar Abducción Pronación

En este cuadro se observa la preponderancia de los movimientos inducidos por los músculos que favorecen la deformación. La relación es de 16/12.

Nódulo fibroso anteromedial el compartimento posterior en tensión deben velar sobre


Está constituido por el tendón del tibial posterior y su todo por la arteria tibial posterior, cuya brevedad puede
vaina, la vaina del flexor largo de los dedos y del flexor ser más o menos marcada.
largo del primer dedo, un tejido fibroso que los apoya
contra el astrágalo y el escafoides, el ligamento glenoi-
deo y la parte medial de la cápsula astragaloescafoidea. Crecimiento restante
A este nódulo pueden asociarse las estructuras plantares Es el parámetro capaz de invalidar una buena evolu-
mediales. El nódulo bloquea esencialmente la aducción ción. Para comprender la evolución de una deformación,
mediotarsiana y la aducción del bloque calcaneopedio. hay que conocer las leyes del crecimiento restante. Estos
datos permiten comprender el valor del tratamiento de
Nódulo fibroso posterolateral una deformación en el niño, sobre todo durante los pri-
Está constituido por los tendones de los peroneos meros 2 años de la vida (Fig. 4) [26] . El crecimiento del pie
y su vaina, el retináculo de los músculos peroneos, se caracteriza por una relación de fuerza entre elementos
el ligamento astragaloperoneo posterior y el ligamento blandos y duros, es decir, entre las estructuras frágiles o
peroneocalcáneo. Bloquea la deformidad en equino y la cartílagos de crecimiento y las estructuras más o menos
aducción del bloque calcaneopedio (mantiene la tubero- resistentes, que son la parte osificada de huesos, tendo-
sidad posterior del calcáneo contra el maléolo lateral). nes, ligamentos, cápsulas articulares y aponeurosis. Cada
músculo tiene un potencial elástico propio. La capacidad
Nódulo fibroso anterolateral de estiramiento de un músculo no es infinita, y hay que
Menos importante. Está formado por el fascículo infe- desconfiar de las seudocorrecciones obtenidas mediante
rior del retináculo de los músculos extensores y por la manipulaciones forzadas.
parte anterolateral de la cápsula astragalocalcánea. Blo-
quea la aducción del bloque calcaneopedio (aproxima la
cara anterior del calcáneo a la cabeza del astrágalo).  Consenso en el tratamiento
Anomalías vasculares
conservador
La arteria tibial anterior y la arteria dorsal del pie pueden El valor de la consulta prenatal y de la exploración
ser hipoplásicas. Las maniobras de corrección que colocan física del recién nacido es reconocido por todos los

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• otra posibilidad es que tras el alta del niño, éste sea reci-
1 2
bido de urgencia en una consulta interdisciplinar en el
Nacimiento servicio de ortopedia pediátrica del centro especializado
10
más cercano. En ausencia de una consulta prenatal, hay
que informar a la familia sin alterarla demasiado, pero
8
tampoco minimizando la situación. Lo ideal es proce-
der a efectuar una evaluación clínica con pruebas de
Estatura (cm)

6 imagen y asentarla en una historia clínica [4] . Esto ha de


50 cm permitirle a cualquier observador juzgar la gravedad de
4 las retracciones y validar el grado de lesión establecido.
Cada pie se fotografiará en una posición espontánea
2 y de reducibilidad, lo que también permite verificar
25 cm
los factores más desfavorables. Esta evaluación ha de
0 repetirse a lo largo del tratamiento con la frecuencia
0 3 mes 6 mes
9 meses
3 mes 6 mes 9 mes 1 año siguiente: 1 mes, 3 meses, 6 meses, 9 meses y 12 meses,
de la vida intrauterina y luego una vez al año.
Figura 4. Velocidad de crecimiento y estatura en bipedes-
tación. El crecimiento intrauterino es el más rápido de todos. Clasificación inicial
Período intrauterino: 5,5 cm al mes; primer año de vida: 2,1 cm
al mes; segundo año de vida: 1 cm al mes. Es fácil recordar los Nada es posible sin una evaluación previa del pie. La
datos siguientes (con diferencia de 1-2 cm): para conocer el cre- inspección es una etapa fundamental. La deformación del
cimiento adquirido durante el primer año de vida, se divide por 2 pie no permite establecer un juicio sobre su reducibilidad.
la cantidad de crecimiento adquirido durante el embarazo. Tam- Para orientar las discusiones y evaluar los resultados con
bién se divide por 2 para conocer el adquirido durante el segundo objetividad, hoy en día los pies zambos se clasifican por
año y lo mismo para conocer el adquirido entre los 2 años y el orden de gravedad creciente, desde lo más benigno a lo
comienzo de la pubertad, momento en que se multiplica por más grave. En las publicaciones figuran varios métodos de
2 para conocer el adquirido hasta el final de crecimiento. clasificación (Seringe, Pirani, etc.) [27] . Para el pie zambo
equinovaro, el grupo de trabajo de la Haute Autorité de
Santé recomienda basar los seguimientos de cohorte en
equipos. La clasificación y los protocolos de tratamiento
criterios de evaluación clínica comunes, según la clasifica-
se ajustan al pensamiento colectivo. Aunque las técnicas
ción de Diméglio-Bensahel, con el fin de poder comparar
de movilización están bien codificadas, las contenciones
los tratamientos a partir de grupos con deformaciones de
son extremadamente variables y por eso se incluyen entre
gravedad inicial homogénea [18, 28] . Es una valoración de
los desacuerdos.
0-20 puntos que permite identificar con facilidad, a partir
de una escala, el pie que ha de tratarse. Esta evaluación es
Del diagnóstico prenatal a la consulta muy valiosa y permite distinguir cuatro categorías de pies:
benignos, moderados, graves y muy graves. También per-
ortopédica prenatal mite seguir la evolución de la reducibilidad del pie durante
El estudio del pie in utero por ecografía es posible a todo el tratamiento. Ha sido ampliamente descrita en una
partir de las 16 semanas de amenorrea. El número de publicación prínceps [29] (Fig. 5).
deformaciones diagnosticadas con ecografía prenatal ha
aumentado de forma considerable en los últimos años. Etapas principales del tratamiento
Así pues, las familias están informadas de la situación en
casi el 70% de los casos (el 60-80% según los equipos). conservador
Incluso con la ecografía tridimensional, no es posible esta-
Desde el nacimiento y sea cual sea el tratamiento con-
blecer la gravedad de la deformación, pero sí optimizar los
servador escogido, por lo general el tratamiento del pie
pasos que hay que seguir. La gran inquietud que genera un
zambo equinovaro se divide en cuatro etapas principales.
anuncio de esta índole justifica una consulta rápida, pro-
La vigilancia es más o menos regular, en consultas multi-
fesional y coherente con los futuros padres, a los que en
disciplinares más o menos frecuentes, en las que pueden
la entrevista se les explicará en qué consiste la anomalía
participar médicos, cirujanos, kinesiterapeutas, ortopro-
y el modo de tratarla (cada equipo tiene sus preferen-
tesistas y podólogos. Las etapas son las siguientes:
cias al respecto). La primera reunión se lleva a cabo en el
• desde el primer día hasta los 3 meses;
servicio especializado en esta patología para generar más
• desde los 3 meses hasta la verticalización;
confianza y tranquilidad. Esta ocasión sería propicia para
• desde la verticalización hasta el inicio de la marcha;
entregar a los padres un resumen escrito de la información
• desde el inicio de la marcha hasta el final del creci-
recibida verbalmente. Por desgracia, nadie puede impe-
miento del pie.
dir que la familia obtenga diversas informaciones de otras
fuentes, como Internet, y de este modo accedan a blogs o
foros que a veces pueden ser muy desestabilizantes, sobre Reducción de las deformaciones
todo cuando en ellos participan equipos asistenciales de
reconocida experiencia. Ya sea con manipulaciones breves (en el método con
yesos de Ponseti) o con manipulaciones más o menos
prolongadas (en el método funcional o mixto), todas las
Exploración física del recién nacido técnicas se basan en los mismos principios. Sólo difiere la
duración de la movilización.
Debe efectuarse lo antes posible, durante la primera
semana de vida, mediante algunas de las modalidades
siguientes:
Biomecánica del pie
• un miembro del equipo se dirige a la maternidad para El pie se divide en tres partes: retropié, mediopié y
hacer una evaluación y decidir las primeras medidas si antepié. La corrección del mediopié en relación con el
los profesionales locales no lo han hecho aún. La for- retropié basta para alinear un pie zambo. Cualquier movi-
mación del personal médico y sanitario en relación con lización del antepié puede conducir a grandes errores.
la atención del recién nacido debe ser continua en el Las manipulaciones eficaces necesitan una perfecta visua-
ámbito de las maternidades; lización mental de las disposiciones anatómicas del pie

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0° 20° 0°

0° 0°
45°

20°

45° 90° 90°


4 puntos 90° 3 puntos
90°
4 puntos 3 puntos

-20° 0° 0° -20°

0° 0°

90° 90°
2 puntos 1 punto

90° 90°
2 puntos 1 puntos
A B

0° 20° 0°
45°

90° 90°


45° 90° 90°

4 puntos 3 puntos 4 puntos 3 puntos


20° 0°

0° 0° -20°

90° 90°

90° 90°

2 puntos 1 punto
0° 0° -20°
2 puntos 1 punto
C D

E
Figura 5. Evaluación de la gravedad del pie zambo equinovaro según la clasificación de Diméglio-Bensahel. Valoración sobre 20 puntos.
A. Equino.
B. Varo.
C. Rotación interna del bloque calcaneopedio.
D. Aducción del mediopié.
E. Cuatro puntos desfavorables: un punto para el surco posterior, un punto para el surco interno, un punto para el cavo (surco plantar) y
un punto para la hipertonía global del recién nacido.
Pies benignos: inferior a 5; pies moderados: superior o igual a 5 pero inferior a 10; pies graves: superior o igual a 10 pero inferior a 15; pies
muy graves: superior o igual a 15 puntos.

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A B C
Figura 6. Se reduce la aducción del mediotarso decoaptando el escafoides del maléolo medial y se reduce la aducción de la subastragalina
añadiendo a la maniobra precedente la decoaptación del calcáneo del maléolo lateral, aumentando a la vez la postura en varo y en equino.
Si no se respeta el varo, aumenta el riesgo de deslizamiento del cuboides por debajo del escafoides. Las flechas representan el apoyo
subescafoideo efectuado con el pulgar, con el que se intenta reducir la deformación del pie aumentando el varo del mediopié.

zambo equinovaro. El riesgo de seudocorrección es ele- la articulación subastragalina añadiendo a la maniobra


vado. No existe un solo eje de movilidad en rotación precedente la descoaptación del calcáneo del maléolo late-
alrededor del cual pueda movilizarse el tarso, ya sea en ral sin influir sobre la deformación en varo y en equino.
un pie normal o en un pie zambo. Desde el punto de Durante las primeras prácticas, esta manipulación se efec-
vista funcional, las articulaciones del tarso son inter- túa incluso aumentando la deformación inicial en varo.
dependientes. El movimiento de cada hueso del tarso Sobre la parte lateral de la cabeza del astrágalo se aplica
ocasiona modificaciones simultáneas en los huesos adya- una fuerza contraria para prevenir la rotación en la pinza
centes. Las movilidades articulares dependen de la forma tibiotarsiana. Al hacer esta maniobra, hay que sentir que
de las superficies articulares, así como de la orientación el escafoides se desplaza por delante de la cabeza del astrá-
y estructura de los ligamentos. Cada articulación tiene galo, separándose del maléolo medial. Al mismo tiempo,
su propio modelo de movilidad. El pie neonatal es frágil: el calcáneo se desplaza en sentido lateral por debajo de la
sólo el 35% del pie está osificado. La parte mediotarsiana, cabeza astragalina y se despega de la parte posterior del
cartilaginosa, es la primera en ceder a las manipulacio- maléolo lateral (Fig. 6).
nes inadecuadas. El astrágalo queda muy expuesto por
Segunda etapa, encadenada a la primera
la deformación en equino; el aplastamiento primario de
la cúpula astragalina, invisible en una radiografía simple, Reducir el varo del retropié. De forma paradójica, esta
puede agravarse de forma secundaria por manipulaciones etapa no requiere una manipulación específica. Todos
incorrectas [24, 27, 30] . los componentes de la deformación del pie zambo, con
excepción de la posición en equino del tobillo, se corri-
Palpación gen de manera simultánea. La corrección del varo está
implícita en la primera etapa. La corrección del mar-
Es una etapa fundamental que permite localizar con cado desplazamiento medial y del varo de los huesos
precisión la cabeza del astrágalo. Hay que palpar los del tarso en el pie zambo necesita una traslación lateral
maléolos y luego descender para palpar la cabeza del astrá- gradual y simultánea de los huesos escafoides, cuboi-
galo por delante de la pinza bimaleolar. Puesto que el des y calcáneo para colocarlos en posición neutra. La
escafoides está desplazado en sentido medial y su tubero- colocación del calcáneo en su posición fisiológica res-
sidad está casi en contacto con el maléolo medial, puede pecto al astrágalo corrige la deformación en varo del pie
sentirse la parte lateral prominente de la cabeza del astrá- zambo. En la progresión de la manipulación de la pri-
galo, apenas recubierta por la piel por delante del maléolo mera etapa hay que respetar la deformación en equino
lateral. La parte anterior del calcáneo se palpa por debajo y en varo. En la segunda etapa se termina la desrota-
de la cabeza del astrágalo y su parte posterior se aprecia ción del bloque calcaneopedio alrededor del astrágalo.
en contacto con la cara posterior del maléolo lateral [7] En el estiramiento de los nódulos fibrosos posterolate-
(Fig. 1). ral y anteromedial no hay que escatimar esfuerzos. La
aplicación de una fuerza contraria debajo de la parte
Reorientación anterior del calcáneo permitirá colocar el retropié en
El ortopedista pediatra, el médico o el kinesiterapeuta una posición más plantígrada, pero hay que evitar un
efectúan un movimiento suave, armónico y disolvente movimiento de pronación en la articulación medio-
que sólo se adquiere con experiencia y muchos años tarsiana. Esta manipulación consiste en aumentar la
de trabajo. Las movilizaciones equivalen a posturas de abducción del bloque calcaneopedio por debajo de la
estiramiento. Estas traslaciones son posibles porque los cabeza del astrágalo, previamente localizada y estabili-
ligamentos retraídos del tarso pueden ser estirados de zada.
forma progresiva, con cuidado de no hacerlo más allá de Tercera etapa, encadenada a la primera y a la segunda
su elasticidad natural. Se efectúan a modo de decoapta-
Reducir la posición en equino. Esta acción se inicia
ción articular para disminuir las cargas impuestas por los
sólo después de haber obtenido la corrección perfecta de
tejidos blandos sobre las estructuras cartilaginosas. Las
la desrotación del bloque calcaneopedio y del varo, es
amplitudes de corrección máxima deben obtenerse con
decir, con el pie bien alineado y plantígrado. La mani-
el niño tranquilo o, mejor, dormido, sin generar reac-
pulación consiste en estirar con suavidad el tendón de
ciones nociceptivas. Al igual que las deformaciones, las
Aquiles (para sujetar mejor el calcáneo puede usarse una
movilizaciones se encadenan unas a otras como un todo,
compresa). La aplicación de una fuerza contraria en la arti-
es decir, son indisociables. Sin embargo, para una mejor
culación mediotarsiana, por debajo de la parte anterior del
comprensión de la rehabilitación, aquí se considerarán
calcáneo, permite empujar en el sentido de la flexión dor-
por separado las maniobras de reducción ampliamente
sal. No debe efectuarse ninguna maniobra de empuje por
descritas por Ponseti [7] . Esta descripción en tres etapas es
delante de los metatarsianos o por debajo de los dedos,
muy valiosa y debe respetarse en su cronología.
debido al riesgo considerable de «flexionar» el pie en la
Primera etapa mediotarsiana [30] . En esta posición, es posible reducir los
Reducir la aducción del mediotarso descoaptando el dedos en garra y actuar en particular sobre la articulación
escafoides del maléolo medial y reducir la aducción de metatarsofalángica del primer dedo, en el que un defecto

EMC - Kinesiterapia - Medicina física 7


E – 26-260-A-10  Tratamiento conservador precoz del pie zambo equinovaro idiopático. Entre consenso y desacuerdo

A 2 B
Figura 7. Reducción de la deformación en equino (1), que se obtiene sólo al final de la desrotación perfecta de todo el bloque
calcaneopedio (A, B). 2. Aplicación de una fuerza contraria submediotarsiana; 3. descenso del calcáneo.

A B

C D
Figura 8. Lo que no debe hacerse.
A, B. No tratar de corregir el varo del mediopié. El descenso (flecha) del primer metatarso aumenta el cavo y no corrige nada el varo del
retropié.
C, D. No forzar el pie más allá (flecha) del mediotarso para obtener a cualquier precio la flexión dorsal (puntas de flecha).

de flexión dorsal afecta al desarrollo del paso. No debe el cavo y hacen pasar el cuboides por debajo del
soslayarse la manipulación del pie hacia la flexión plan- escafoides;
tar. Las estimulaciones musculares son complementarias • no pretender obtener la flexión dorsal a cualquier pre-
de la movilización (Fig. 7). cio.
Algunas acciones deben evitarse (Fig. 8) [3, 4, 7] :
• no forzar el pie;
• no hacer pronación ni pronación-desrotación en la
Contenciones
mediotarsiana para corregir la supinación con el des- Lograr un consenso respecto al tipo de contención es
censo del primer radio. Estas maniobras agravan todavía ilusorio. El único punto común entre los equipos

8 EMC - Kinesiterapia - Medicina física


Tratamiento conservador precoz del pie zambo equinovaro idiopático. Entre consenso y desacuerdo  E – 26-260-A-10

Figura 9. Contenciones: a más métodos, más contenciones más o menos bien elaboradas.

es admitir que los resultados alcanzados deben preser-


varse mediante contenciones. En el método funcional
 Desacuerdos
puro, las contenciones son flexibles y no inmovilizan la en el tratamiento
articulación femorotibial ni la tibiotarsiana. En el
de yesos sucesivos, son rígidas e inmovilizan todo conservador
el miembro inferior. Entre ambos, todo es posible,
todo es factible. Todos los medios de contención
Tiempo de movilización. Tipos
deben así mismo modificarse según la edad del niño de contenciones
(Fig. 9). Método funcional
Al principio: mucha kinesiterapia, contenciones
flexibles, sin contención rígida
Minicirugía
El método funcional se desarrolló en Francia en 1950,
En torno a la edad de 3 meses y de todos modos cuando estas deformaciones sólo se reducían mediante
antes de los 6 meses, cuando la flexión dorsal no existe, cirugía. Se originó gracias al impulso de Laurence, jefe
con frecuencia todos los equipos plantean hoy en día del servicio de cirugía infantil del Hospital Bretonneau
una aponeurotomía de los músculos gemelos (técnica de París. Su intención era confiar los pies zambos equi-
de Vulpius) [28] , una tenotomía percutánea del tendón novaros a los kinesiterapeutas, con el fin de flexibilizar
de Aquiles (incisión del tendón en dos niveles) o una los pies antes de la cirugía. Los resultados superaron sus
sección completa (método de Ponseti). Esta interven- expectativas y desarrolló este método. Bensahel retomó
ción mínima, con anestesia local o general, es eficaz los trabajos de su antecesor y perfeccionó el método en el
en el 20-100% de los casos según el tipo de trata- Hospital Robert-Debré de París [2] . Este tratamiento fun-
miento conservador. Las complicaciones derivadas de cional se basa en movilizaciones manuales aplicadas a
esta conducta son infrecuentes y poco descritas en las diario por los kinesiterapeutas, asociadas a estimulaciones
publicaciones [31] . Esta tenotomía, si es necesaria, con- activas de los músculos débiles, así como a la colocación
tribuye a disminuir de forma considerable el número de contenciones flexibles confeccionadas con tiras adhe-
de intervenciones quirúrgicas en el momento de la sivas. El tratamiento de los niños afectados por un pie
verticalización. zambo equinovaro consta de tres fases:

EMC - Kinesiterapia - Medicina física 9


E – 26-260-A-10  Tratamiento conservador precoz del pie zambo equinovaro idiopático. Entre consenso y desacuerdo

• fase de reducción, desde el nacimiento hasta las escala mundial con un éxito innegable, sobre todo en los
6 semanas de vida (siete sesiones por semana); países en vías de desarrollo [7, 15, 36, 37] .
• fase de ajuste, desde las 6 semanas hasta los 8 meses
Evolución: hacia resinas cruropedias, yesos (resinas)
(cinco sesiones por semana);
suropedias, un poco de kinesiterapia, etcétera
• fase de preapoyo y de apoyo, a partir de los 8 meses (tres
o cuatro sesiones por semana). En la actualidad, los tipos y el número de yesos en los
El objetivo del método es recuperar una función tibio- primeros 3 meses del tratamiento y la sección o no del
tarsiana normal, obtener un pie alineado y recuperar un tendón de Aquiles tras la sucesión de los yesos necesa-
esquema motor equilibrado [2, 31] . rios para obtener la corrección son muy variables de un
equipo a otro. Jowett et al [38] publicaron, en 2011, un
Evolución: menos kinesiterapia y contenciones más artículo muy bien documentado sobre la evaluación del
rígidas método Ponseti, los efectos de algunas modificaciones al
Seringe introdujo este método en el Hospital Saint método original y sus consecuencias sobre los resultados
Vincent de Paul de París, añadiendo placas y férulas cru- obtenidos. Concluyen que el mejor de todos es el método
ropedias [10, 25, 32] . original. En lo que se refiere a la kinesiterapia, se efectúa
El método se desarrolla en tres fases sucesivas: de manera excepcional y nunca antes de la adquisición de
• fase de reducción, desde el nacimiento hasta los 2 meses la marcha.
(cinco sesiones de rehabilitación por semana);
• fase de mantenimiento, desde los 2 meses hasta la mar- Método mixto
cha (tres sesiones de rehabilitación por semana); Un abanico de posibilidades
• fase de adquisición de la marcha (dos sesiones de reha-
Se trata de kinesiterapia, artromotor, contenciones
bilitación por semana).
flexibles, yesos (resinas) cruropedios, yesos (resinas) suro-
Según Chotel y Bérard (que después se pasaron al
pedios, férulas con ajustes, férulas posteriores, etc.
método Ponseti), este tipo de tratamiento rehabilita-
El método mixto se basa en los dos métodos preceden-
dor tiene la ventaja de favorecer la obtención de una
tes. Hay tal cantidad de versiones que es casi imposible
buena función cinética, así como un esquema motor equi-
registrarlas todas y menos aún describirlas en su totali-
librado, todo ello sin afectar al desarrollo psicomotor
dad. Cada equipo tiene su receta (todos los ingredientes
del niño. Además, permite combatir la amiotrofia local
son incorporados en cantidad y calidad más o menos
del compartimento anterolateral de la pierna al facilitar
acertada) y, por tanto, los resultados son diversos y varia-
el desarrollo de la actividad muscular de ésta. La ven-
dos [12, 13, 18, 37, 39, 40] .
taja de las movilizaciones manuales es poder trabajar
de forma específica sobre los huesos del pie y efectuar Método mixto aquí descrito
tracciones articulares para preservar las estructuras carti- Es el que los autores de este artículo practican en el
laginosas [14, 15] . Instituto Saint Pierre de Palavas. El tratamiento del pie
zambo se basa, por una parte, en el sistema de Bensa-
Método con yesos sucesivos o de Ponseti [7] hel [1] y, por otra, debido a la descripción precisa de las
maniobras de reducción del pie zambo, en el de Pon-
Al principio: yesos cruropedios, férulas con ajustes, seti [7] . Éste visitó el servicio de los autores de este artículo
sin kinesiterapia en tres ocasiones para tratar de convencerlos de adoptar
El método Ponseti se originó en 1948 en Estados Uni- su propio método. La misión que se había propuesto no
dos. Ponseti desarrolló este método ortopédico original podía sufrir ninguna desviación. Los resultados obteni-
basándolo en el uso de yesos cruropedios sucesivos con la dos por los autores lo perturbaron, aunque no lograron
rodilla a 90◦ y respetando un protocolo, una cronología y desestabilizarlo, de modo que cada cual siguió su camino
principios de reducción bien precisos. conservando un gran respeto mutuo. La originalidad del
El método se desarrolla en siete fases sucesivas: método utilizado en el Instituto Saint Pierre de Palavas
• fase de reducción, desde el nacimiento hasta 1,5- desde 1989 reside en asociar, durante los primeros 3 meses
2 meses (un cruropedio por semana); de vida, manipulaciones específicas para la movilización
• a los 2 meses, una tenotomía del tendón de Aquiles (con pasiva con artromotor, de forma alternada con la colo-
anestesia local); cación de un vendaje rígido gracias a la confección de
• de los 2 meses a los 3 meses: un yeso cruropedio; una bota suropedia de resina [3, 4] . Es un tratamiento inten-
• de los 3 meses a los 6 meses: férula con ajustes durante sivo en el que se tiene en cuenta la opinión del equipo
23 horas diarias;
• de los 6 meses a los 9 meses: férula con ajustes durante
20 horas diarias;
• de los 9 meses hasta la marcha: férula con ajustes
durante 16 horas diarias; zapato ortopédico sin barra
(8 horas);
• de la fase de adquisición de la marcha hasta los 4 años:
férula con ajustes durante 16 horas diarias.
A la edad de 4 años, si la corrección del pie se man-
tiene, se da por finalizado el tratamiento. En dos estudios
realizados en la década de 1980 se tendía a atribuir la
calidad de los resultados a una disminución de la can-
tidad de colágeno en los tejidos vivos tras un período de
inmovilización [33–35] . Sin embargo, esto va en contra de
diversos estudios, según los cuales se ha demostrado que
la movilización mejora la flexibilidad de las articulacio-
nes y que inmovilización las vuelve más rígidas [36] . La
enorme ventaja de esta técnica es que se efectúa de forma
ambulatoria y no dura más de 30 minutos. El tratamiento
completo consiste en 20 visitas durante 4 años. Esto inco- Figura 10. Artromotor. No puede corregir por sí solo un pie
moda poco a las familias y es especialmente útil en caso de zambo equinovaro. Forma parte de una estrategia en la que el
contexto socioeconómico desfavorable o de lejanía geo- método funcional y un vendaje, el cual se hace más rígido con
gráfica. Estos elementos permiten el uso de la técnica a una bota de resina, desempeñan un papel principal.

10 EMC - Kinesiterapia - Medicina física


Tratamiento conservador precoz del pie zambo equinovaro idiopático. Entre consenso y desacuerdo  E – 26-260-A-10

A B C

D E F

G H
Figura 11. El vendaje debe ser perfecto. No hay que vacilar en rehacerlo si no corrige el bloque calcaneopedio con la mejor desrotación
posible (A, H). Es evidente que toda la evolución depende de ello.

quirúrgico escogido por la familia, la disponibilidad de Contenciones.


los padres y la situación geográfica de su domicilio en Vendaje. El objetivo es preservar la reducción obtenida
relación con el centro. Después de los 3 meses de edad, se evitando la hipercorrección. Hay que rehacerlo después
sigue un tratamiento a domicilio mediante manipulacio- de cada manipulación y cuando se estima que la correc-
nes, vendajes y férula posterior con la rodilla libre, hasta ción no es suficiente. El vendaje se confecciona con una
la verticalización del niño. En este momento, la frecuen- venda para prevendaje, un apósito más grueso de fijación
cia de las movilizaciones disminuye y el niño usa la férula elástica y dos tiras de venda adhesiva. Igual que las mani-
posterior sólo cuando duerme y hasta los 2 años. pulaciones, reduce la aducción del mediopié con relación
Máquina de movilización pasiva o artromotor. Si al retropié y la aducción del bloque calcaneopedio, sin
es posible utilizarla, hay que empezar los primeros días afectar a los arcos del pie (Fig. 11).
de la vida o dentro de los 3 meses. En un artículo del Bota fina de resina. La resina suropedia aplicada por
Journal de Pédiatrie Orthopédique se describe ampliamente encima del vendaje permite hacer más rígida la conten-
su uso (Fig. 10) [3] . Los autores de este artículo prefie- ción. La libertad de la rodilla no se consigue en detrimento
ren recurrir a ella 1-2 semanas después de haber iniciado de la corrección del pie. En este sentido, el vendaje pre-
el tratamiento con manipulaciones, vendajes y botas de corrector permite una desrotación perfecta del bloqueo
resina. A veces se excluye a algunos recién nacidos que en calcaneopedio y evita el deslizamiento del pie en la férula.
poco tiempo desarrollan buenas amplitudes articulares o La resina hace más rígida la contención flexible, y el hecho
que no tienen las características adecuadas para tolerar el de que sea fina posibilita moldearla sobre los relieves óseos
artromotor. y adaptarla a la morfología del niño. Otra ventaja reside

EMC - Kinesiterapia - Medicina física 11


E – 26-260-A-10  Tratamiento conservador precoz del pie zambo equinovaro idiopático. Entre consenso y desacuerdo

A B C

Figura 12. Bota de resina para dar


rigidez a un vendaje precorrector. Con-
fección sobre la contención elástica con
la rodilla libre. Se trata de desrotación y
no de pronación.
A, B. Hay que crear una «cámara» (fle-
chas) en el borde lateral del quinto dedo.
C. De la precisión de los apoyos (flechas)
en desrotación del retropié dependerá la
calidad de la contención de las deforma-
ciones.
D, E. No hay que permitir que se forme
una nueva malposición.
D E

en dejar libre el pie sano de un niño afectado por una necesario) y hasta la verticalización, se programa una eva-
lesión unilateral. Tras recortarla de forma bivalva, la parte luación mediante vigilancia clínica y renovación de la
anterior puede dejarse colocada o no en función de la férula, si es posible en presencia del equipo quirúrgico.
corrección obtenida. Este tipo de férulas no conlleva nin- En el momento de la adquisición de la marcha. Este método
guna dificultad en particular ni problemas de adaptación permite corregir de forma armoniosa las deformaciones.
(Fig. 12). Quizá permita aplazar la cirugía en el momento de la ver-
Detalle de las tres etapas del tratamiento. ticalización o, al menos, limitar al máximo su extensión.
Entre 0-3 meses. La rehabilitación debe ser intensiva: Dado que el análisis de la marcha no puede efectuarse
manipulaciones, vendajes asociados o no al artromotor sino a partir de los 3-4 años de edad [41] , la vigilancia
3-4 días por semana y bota de resina sobre el vendaje pre- clínica con regularidad permite distinguir dos tipos de
corrector los 3-4 días restantes. En el 98% de los casos, evolución:
más o menos al cabo de 1 mes se reintegra el astrá- • la corrección de los pequeños defectos residuales y la
galo a la pinza tibiotarsiana (Fig. 13). A continuación, obtención de una amplitud articular suficiente para
la atención se dirige a la corrección de la posición en lograr una marcha plantígrada en desrotación e indo-
equino, con cuidado de no inducir falsas mejorías, conso- lora; cabe señalar que, de forma paradójica, un ligero
lidando el resultado alcanzado. Si a los 3 meses no se ha varo del retropié es preferible a un valgo;
obtenido ninguna flexión dorsal, puede proponerse una • bien una mejoría insuficiente: marcha más o menos
intervención mínima a modo de tenotomía del tendón digitígrada, asociada o no a un varo y una rotación
de Aquiles [6] o la técnica de Vulpius (que depende del medial del bloque calcaneopedio. En este caso, se plan-
cirujano) [28] . Durante este período, el tratamiento en el tea lo antes posible una intervención quirúrgica. Al
ámbito de la práctica liberal es posible pero difícil. Pasar contrario de lo señalado en las publicaciones, conside-
entre 1-1,5 horas con cada niño de dos a cuatro veces por rar esta situación como una «recidiva» es inadecuado:
semana (según la gravedad de la deformación) no suele ser es un «estado», una «observación» que permite captar
factible y la confección de la contención no es tan simple. los límites del tratamiento conservador. A lo largo del
Si ésta no corrige el pie lo suficiente, puede comprometer tratamiento se les recuerda a los padres la posibilidad de
incluso una evolución favorable. un acto quirúrgico y hay que recurrir al cirujano en el
Entre 3 meses y la verticalización. El tratamiento continúa momento correcto, ni demasiado pronto ni demasiado
en el domicilio con un kinesiterapeuta (manipulaciones, tarde. En Palavas, esto sucede en relación con el 15%
vendajes y colocación de la férula posterior suropedia) de los pies. Gracias al escaso defecto residual, y en caso
con el objetivo de preservar las amplitudes alcanzadas de plantearse la cirugía, ésta consiste (en el 90% de los
en los primeros 3 meses. Una vez al mes (o más si es casos) en un tiempo posterior amplio asociado a una

12 EMC - Kinesiterapia - Medicina física


Tratamiento conservador precoz del pie zambo equinovaro idiopático. Entre consenso y desacuerdo  E – 26-260-A-10

A B C

D E F
Figura 13. Evolución de las amplitudes articulares durante el primer mes de vida (A, F). El método permite obtener estos resultados en
el 98% de los casos.

hemitransferencia del tibial anterior. Desde hace más confeccionar contenciones en hipercorrección, en ocasio-
de 15 años no hay ninguna indicación para la cirugía nes inaplicables y a menudo voluminosas, para que sean
extensa. eficaces. La contribución de la familia, en términos de
La vigilancia trimestral durante el año siguiente a la aceptación de las cargas impuestas, es ineludible. Es ver-
adquisición de la marcha, y luego anual, se efectúa en dad que las consultas de seguimiento son numerosas, pero
una consulta multidisciplinar (médico, cirujano, kinesi- en ellas reside la clave del éxito. Permiten apoyar y ayudar
terapeuta, ortoprotesista). Excepto en casos concretos, la a estas familias a tomar conciencia del valor de su partici-
interrupción del uso de las férulas y de la rehabilitación pación en el tratamiento del niño. En Palavas, el número
se autoriza más o menos a los 2 años de edad, cuando el de intervenciones después de la verticalización ha dismi-
crecimiento anual tiene una velocidad menor, de modo nuido gracias a un rigor creciente en la precisión de las
que se reducen los riesgos de agravación [26] . Estas consul- movilizaciones y la preservación de la corrección obte-
tas de seguimiento son ineludibles: cuanto más pronto nida. El índice de intervenciones (cf supra) es de alrededor
se detecte una recidiva, más fácil será remediar la situa- del 15%. No depende de la aceptación de las familias, sino
ción [11, 31, 40, 42–46] . de un conjunto de factores, a veces independientes de la
A este tratamiento precoz se añade una organización propia deformación, como problemas cutáneos, a modo
dirigida a la formación de los kinesiterapeutas dedicados de eccema por contacto, que impiden cualquier tipo de
al tratamiento del pie zambo equinovaro [41] . Además, en contención durante períodos cruciales [41] . Es el equipo
el caso de Francia, con el fin de facilitar la búsqueda de asistencial, y no las familias, el que debe adaptarse a los
profesionales para las familias o para el cuerpo médico, problemas que puedan presentarse.
el Conseil de l’Ordre des Masseurs-kinésithérapeutes de
l’Hérault ha puesto a disposición del público en general Yesos cruropedios y férulas cruropedias
una aplicación para smartphones que registra los kine- Para Ponseti, el hecho de no incluir la rodilla en la
siterapeutas inscritos (más de 18.000) por nombre y contención es un error fundamental. Considera que el
especialidad (www.cdomk34.fr). yeso que no abarca la rodilla no puede conducir a una
abducción eficaz del bloque calcaneopedio por debajo del
astrágalo [7] . Hasta hoy, los profesionales no han logrado
Observancia por parte de las familias ponerse de acuerdo con relación a la inmovilización o no
de la rodilla [18] . Al igual que una buena resina suropedia,
Vendajes, botas de resina y férulas la eficacia de un yeso cruropedio depende de la pericia de
suropedias quien lo confeccione.
Con la condición de que se elaboren de forma minu-
ciosa y estén perfectamente adaptadas, estas contenciones
Férulas con ajustes (férulas de Denis-Brown,
no crean problemas especiales de aceptación. La bota de de Ponseti-Mitchell, Horton Click, de Dobbs)
resina o férula posterior, creada en Palavas, es la conten- Los adeptos de la férula de desrotación con ajustes jus-
ción más simple en el mercado de las férulas. Si los padres tifican su uso basándose en el principio del kicking: la
tienen la posibilidad de escoger, suelen preferirla por ser triple extensión del miembro sano induce la abducción y
la más discreta. Algunos dirán que no es la función del la flexión dorsal del lado afectado [47] . Es preferible no usar
médico tomar medidas de acuerdo con la complacencia plantillas y sobre éstas vendar los pies, pues producen el
de las familias, aunque lo cierto es que no es necesario efecto de achatar sus arcos fisiológicos (Fig. 14).

EMC - Kinesiterapia - Medicina física 13


E – 26-260-A-10  Tratamiento conservador precoz del pie zambo equinovaro idiopático. Entre consenso y desacuerdo

A B C
Figura 14. Nunca debe colocarse un pie sobre una placa. Así, en estas imágenes (A-C) se comprueba que dicho procedimiento no
brinda la posibilidad de que la parte posterior del calcáneo descienda más que la parte anterior. Un vendaje adecuado permite tomar las
precauciones necesarias para preservar los arcos plantares. En este sentido, es imperativo que el calcáneo pueda apoyarse en el suelo de
forma correcta (como en aeronáutica) y formar el ángulo fisiológico del pie normal.

Cuadro 2.
Tratamiento estadístico de los resultados.
Criterios de exclusión Método funcional y mixto Método con yesos sucesivos, Ponseti
Pies zambos no idiopáticos X X
Pies zambos < 5/20 X X
Comienzo del tratamiento después del primer mes de vida X X
Seguimiento < 3 años X X
Problema de aceptación Poco o ninguno Hasta el 51%

En este cuadro se observa que el problema de aceptación puede ser especialmente consecuente en el método Ponseti. El método funcional se ve poco
o nada afectado por la falta de aceptación. El método con yesos sucesivos elimina de las estadísticas hasta el 51% de los pies zambos. En este sentido,
los niños que no siguen el protocolo establecido no forman parte de la recogida de datos de las publicaciones sobre los resultados de este tratamiento.
Respecto a las familias no conformes, en las publicaciones se señala un 80% de recidiva y de reintervenciones extensas.

 Conclusión
“ Observación Comparar los distintos tratamientos según su perti-
nencia biomecánica, su inocuidad, su influencia en la
Desde el punto de vista biomecánico, la realiza- calidad de vida de los lactantes y de las familias, así como
ción de un yeso cruropedio para asegurar una según su coste, permitiría proponer criterios objetivos y
abducción eficaz del bloque calcaneopedio puede razonados para la elección de los métodos. Sin embargo,
ser discutible cuando dicho yeso comienza blo- demostrar que un método es superior a otro es una tarea
queando el pie con un suropedio y luego progresa peligrosa [12, 13, 46, 50, 52–56] . El tratamiento de esta patología
desde los primeros días de vida plantea el problema de la
hasta la raíz del muslo desrotando la bota surope-
formación de los profesionales intervinientes, sean éstos
dia: ¿dónde se localiza la desrotación? ¿En la pinza médicos, cirujanos o kinesiterapeutas. La formación ini-
tibiotarsiana o en la rodilla? Hay que tener cui- cial difícilmente puede brindar a los estudiantes ámbitos
dado con las desrotaciones falsas: confeccionar un de estudio que les permitan observar este tipo de pato-
cruropedio requiere una vigilancia extrema; enye- logía para practicar las movilizaciones y los vendajes o,
sar primero la rodilla en flexión a 90◦ respetando incluso, confeccionar yesos o resinas cruro o suropedias
los ejes fisiológicos y, en un segundo tiempo, en lactantes. La teoría se transmite fácilmente, pero otra
confeccionar el suropedio sería claramente menos cosa es la práctica y la experiencia. La mayoría de los
discutible. fracasos del tratamiento del pie zambo depende del pro-
fesional actuante, y el número de familias consideradas
«no conformes» quizá tenga que ver con el método y/o la
adaptabilidad de los equipos. Cuando un índice de falta
de conformidad supera el 25%, quizá sea el momento de
hacerse las preguntas correctas sobre la eficiencia de la
La contención es la única dificultad que reconocen los propia práctica.
incondicionales del método de Ponseti original. Hasta Cada civilización ha legado sus conocimientos sobre
el 51% de las familias se resiste a aceptar los yesos el arte de curar. La terapéutica pasó de ser mágica a
cruropedios y más aún las férulas con ajustes [38] . Cho- religiosa, después empírica y por último científica. Las téc-
tel y Parot registran un 33% de resistencias [48] . Este nicas se han sucedido a través de los siglos, despertando
problema capital impulsa a los equipos a rivalizar en entusiasmo o desconfianza, nunca indiferencia y siempre
ingenio para resolver la cuestión con algunas modifi- esperanza.
caciones [49] . En las publicaciones se señala que en un El objetivo común a todas estas formas de tratamientos
programa de inmovilización con férula que no sea minu- sería recuperar un estado de salud compatible con la fun-
cioso, el índice de recidiva supera el 80%. Esto debe ción normal del pie respetando criterios estéticos. Cuando
compararse con el índice de recidiva de tan sólo el 6% los objetivos terapéuticos se alcanzan en su mayoría, la
en los niños de las familias que están conformes, que última etapa consiste en consolidar los logros terapéu-
son las únicas que es posible tener en cuenta en las ticos. Su preservación a largo plazo es una exigencia
publicaciones de los resultados de los equipos implicados legítima y esencial, pero depende en gran medida del
(Cuadro 2) [37, 38, 50, 51] . compromiso de las familias y, sobre todo, del seguimiento

14 EMC - Kinesiterapia - Medicina física


Tratamiento conservador precoz del pie zambo equinovaro idiopático. Entre consenso y desacuerdo  E – 26-260-A-10

regular, el único en permitir la prescripción correcta y los [21] Isaacs H, Handelsman JE, Badenhorst M, Pickering A.
ajustes necesarios para dar estabilidad a los resultados. Lo The muscles in clubfoot: a histological, histochemical,
ideal sería proponer un conjunto de medidas que ayuda- and electron microscopic study. J Bone Joint Surg Br
rían a prevenir las recidivas, a evitar las reintervenciones 1977;59:465–72.
quirúrgicas múltiples y a preservar la función y la estética [22] Sano H, Uhthoff HK, Jarvis JG, Mansingh A, Wenckebach
de los pies. GF. Pathogenis of soft-tissue contracture in club foot. J Bone
Se dirá entonces que, cualquiera que sea el método Joint Surg Br 1998;80:641–4.
[23] Dietz FR, Cole WG, Tosi LL, Carroll NC, Wemer RD,
aplicado, tanto si se trata de deformaciones terribles
Comstock D, et al. A search for the gene(s) predisposing to
o de pequeñas malposiciones, los tratamientos no son
idiopathic clubfoot. Clin Genet 2005;67:361–2.
pequeños sino grandes, siempre que resulten eficaces. [24] Dufour M, Pillu M. Biomécanique fonctionnelle. Issy-les-
Moulineaux: Masson Elsevier; 2006. p. 242–3.
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nouvelle). Avec le texte grec en regard, collectionné sur les mois de la vie. Montpellier: Sauramps Médical; 1999.
manuscrits et toutes les éditions ; accompagné d’une intro- [27] Herd F, MacNicol M, Abboud RJ. The need for biomechanical
duction, de commentaires médicaux, de variantes et de notes evaluation in the assessment of clubfoot. Foot 2004;14:72–6.
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F. Bonnet-Diméglio, Masseur-kinésithérapeute (frederiquebonnet@hotmail.com).


Unité des déformations du pied du nouveau-né, Service de rééducation, Institut Saint-Pierre, 34250 Palavas, France.
J. Cottalorda, Chirurgien orthopédiste pédiatre, chef de service.
Service d’orthopédie pédiatrique, CHRU Lapeyronie, 34295 Montpellier cedex 5, France.
K. Patte, Médecin de médecine physique et réadaptation, chef de service.
Institut Saint-Pierre, 34250 Palavas, France.

Cualquier referencia a este artículo debe incluir la mención del artículo: Bonnet-Diméglio F, Cottalorda J, Patte K. Tratamiento conservador
precoz del pie zambo equinovaro idiopático. Entre consenso y desacuerdo. EMC - Kinesiterapia - Medicina física 2015;36(1):1-16 [Artículo
E – 26-260-A-10].

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