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MERCADOS INTERNACIONALES

COLOMBIA FRENTE A LA GLOBALIZACIÓN

ALUMNOS:
SERGIO NICOLÁS ROA ALFONSO
ZAIDA RUTH PALACIOS TORRES
OSCAR JAVIER OCHOA LÓPEZ

DOCENTE:
SANDRA PATRICIA RODRIGUEZ REAL

CORPORACIÓN UNIFICADA NACIONAL DE EDUCACIÓN SUPERIOR


CIENCIAS ADMINISTRATIVAS
CONTADURIA PÚBLICA
BOGOTA
2018
COLOMBIA FRENTE A LA GLOBALIZACIÓN

Sabemos que la globalización ha tenido un impulso significativo para todos los


países, entre ellos para el colombiano. Con las exportaciones de sus mercados como el
café, la caña de azúcar, la minería con la esmeralda: los principales productos de
exportación, y así también la importación de otros productos para un surtido de bienes a
los pobladores del país. Hay que reconocer que Colombia tuvo problemas para ingresar
en la globalización en sus inicios. Una de las razones fue la puja política entre los
liberales que querían entrar a la globalización y los conservadores que procuraban
conservar su identidad colonial y a quienes la riqueza les parecía un valor bajo. Otra
dificultad fue el problema del transporte producidos por la difícil topografía del país que
no permitía el traslado de mercancías y materias primas con agilidad y además los
precios del mercado mundial que hacían que la producción nacional fuera marginal. Por
último, la incapacidad del estado para organizar sus intereses, y así crear caminos
propicios para transacciones productivas, se manifestó sobre todo en los frecuentes
conflictos internos que afectaron el país.

Si lo reconocemos, la verdad, es que fue sólo hasta el siglo XX que Colombia logró
entrar con firmeza en el mundo comercial exportando su café como producto estrella. El
desarrollo de la economía colombiana en el ámbito global, anduvo bajo un temor
proteccionista con cincuenta años de defensa industrial y agrícola. En este siglo
disminuyó la capacidad tecnológica de sus industrias y gracias al alto arancel defensivo,
podían utilizar bienes de capital de segunda mano, no tener en cuenta la calidad de sus
productos y despreocuparse por exportar. Además, la protección a la agricultura significó
precios más altos de las subsistencias, salarios más caros para los empresarios, pero
con menos poder adquisitivo para los trabajadores.

Realmente fue en la década de los sesenta que, al implantar el modelo de


industrialización por sustitución de importaciones, se produjeron algunos cambios como
la concepción en el tipo de cambio, donde se empezó a devaluar la moneda frente a al
dólar, creando la necesidad de competencia en los mercados a los productos
exportables, la iniciativa de procesos de integración económica, como el pacto andino, y
la liberación y desregulación de lo económico. Para la década de los setenta y ochenta,
se implementó reformas en el manejo económico, con profundas aperturas legales y
liberaciones con iniciativa económica; y se inició el proceso de la denominada
descentralización que exponencialmente junto con el desarrollo tecnológico llevaron al
país a la globalización. En medio de estas transformaciones generales, la economía
colombiana ha logrado sostener un ritmo anual de crecimiento modesto a nivel mundial
pero muy aceptable en comparación con el resto de América Latina.

Como lo vimos en el video, “La Globalización: Su Entorno Social y Empresarial";


la globalización es una moneda de dos caras. Por un lado, está el beneficio de la apertura
de los mercados y la unión de las naciones, por lo menos mercantilmente y, por otro lado,
está la cara de la ambición, la avaricia y la codicia. Ya que ésta ha estado
estratégicamente planeada regulada y elaborada por los emporios económicos más
grandes del país, quienes han podido manipular al estado para alcanzar lo único que
pretenden: aumentar su lucro para así fortalecer sus capitales económicos, vendiendo la
idea buena y beneficiosa de la globalización para que de manera incauta las personas se
involucren directa o indirectamente en favor de sus presunciones.

Actualmente en Colombia, las alianzas se han convertido en una fuerte oferta para
el mantenimiento de las empresas. Aunque muchas de ellas no han prosperado debido
a que sus gerentes han confundido las mismas como la solución total de sus problemas
y constantemente son éstas quienes los empeoran al no ser parte de la solución. El
problema está en que muchas veces las empresas han visto en las alianzas la solución
a todos sus problemas y no consideran si existen otras alternativas más adecuadas. Aun
así, ha habido una fuerte propuesta internacional que ha sido bien recibida por las
empresas nacionales y se han construido negocios nuevos nacientes de fusiones
empresariales, join venture, franquicias y un sin número de posibilidades que acrecientan
el portafolio de producción del país.

Concluimos afirmando, que nuestra nación, aunque tardó en entrar en la


globalización, en los mercados internacionales y en hacer alianzas comerciales, hoy se
ha convertido en un socio estratégico para muchos países que quieren invertir en
nuestras empresas. Se observa para el futuro un panorama de crecimiento económico.

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