Prélago a la e in espaniola PODEMOS (con Hegel) EL axioma central de Menos que nada es que el materialisme dialéctico ¢s el auténtico heredero de lo que Hegel Mamabe la actitud especulativa del pensamiento frente a la abjetividad. Todas las otras formas de materialisio, incluida el «materialismo del encuentro» del siltima Althusser, el naturalismo cientifica y el smevo materialisio» neadeleuziano, fracasan en ese empefia. To que obtenemos de esta lectura de Hegel es nada menos que un Hegel maoista, un Hegel que nos esta diciendo lo misma que Mao a los javenes, al comienzo de la Revoluciéa Cultural: «;Estd bien rebelarsel En ello radiea la definieién de un auténtico Ama: un Ama, en cuanto tal, no es un agente de prohibiciém y disciplina, su mensaje no es «jNo puedes!», ni Debes...t», sino un liberador «;Puedes!». Pera puedes hacer... gqué? Hacer lo imposible, es decir, lo que parece imposible dentro de las coordenadas de Ia constelacidn snciopolitica existente. ¥ hay en dia esta significa alga muy preciso: puedes pensar mds alld del capitalismo y la demncracia liheral como el marco tedrico definitive de muestras vidas, Un Amo es un mediador evanescente que te devuelve a ti mismo, que te coloca ante el abismo de tu Hibertad: cuando escuchamos a descubrimas lo que queremos (a mas bien, In que quisimos siempre sin saberlo) Un Amu es necesario purque nn podemns acceder a nuestra libertad directamente; para obtener este acceso debemos ser empujados desde fuera, puesto que nuestro «estado natural» es el de un inerte hedonismo, propio de lo que Badiou llamé «el animal humanom. La paradoja que subyace a esto es que cuanto mas vivimos como sindividuas libres sin ningin Amo», mas somos de hecho no-libres, y seguimas atrapados dentro del marco existente de posibilidades, Debemos ser empujados/sacudidos hacia la libertad por un Ama. Esta paradoja permes completamente la forma de subjetivided que catactertza a Ja «permisivas sociedad liberal. Puesto que La permisividad y la libre eleeciéa son elevadas @ un valor supremo, el control social y la dominacién ya na pueden mostrarse como si infringleran la libertad del sujeto: debe parecer come (y ser sostenida por) la autoexperiencia de los individuos coma libres. Hay una multitud do formas de este aparecer de la no-libertad baja la forma de su apuesto: cuando somas privadas de sanidad universal, nos dicen, se nos da una nueva libertad de auténtico lider,eleccién (para elegir nuestro proveedor sanitario); cuanda ya no podemos confiar en un empleo a larga plaza y nas vemas obligadas a buscar un nuevo trabajo precario cada par de aos, nos dicen que se nos da la oportunidad de reinventarnos ¥ descubrir nuevos # inesperados potenciales creativos que se acultaban en nuestra personalidad. Cuando debemos pagar por la edueacidin de nuestros hijos, se nos dice que nos convertimos en semprendedores del yoo actuande coma un capitalista que debe elegir libremente cémo invertird los recursos que posce (0 Le han prestade) en educacian, salud, viajes. Constantemeate bormbardeadas por «libres eleceioness impuestas, forzadus a tomar decisiones para las que la mayor parte de las veces no estamos adecuadamente cualificadas (a no poseemos suticiente informacién sobre elles), cada ver vivimos mas nuestra libertad como una carga que causa una ensiedad insoportable. Samos incapaces de romper con este cireulo vicioso por nosotros mismos y nos vemos como individuos aistados, puesta que cuanto mas libremente actuames mas nos vemos esclavizadas por el sistema: necesitamos ser salespertados» de este «suelo dogméticu» de falsa libertad desde (aera, por la sucudida de una figura del Amo. Habia un rastro de esta auténtica llamada del Amo incluso en el lema de Obama en su primera campaiia presidencial: «Ves, we cant». Se abrfa asi una nueva posibilidad, Pero, podria argiirse, zno hizo Hitler algo formalmente similar? No- fue su mensaje para el pueblo alerén «Si, podemos...» -matar a los judias, aplastar la democracia, acruar de un mode racista, atacar a atras naciones-? Un analisis mas detallado nos muestra inmediatamente la diferencia: lejos de ser un auténtico Amo, Hitler fue un demagogo populista que cuidadosamente jug con lus useuros deseas del pueblo, Podria parecer que, al hacer esta, Hitler siguié el famoso lema de Steve Jobs: «Muchas veces, la gente no sabe lo que quiere, hasta que se In muestrase. Sin embargo, a pesar de toda Lo que puede criticarse en la actividad de Jobs, estaba cerca de ser un auténtica Ama, dado el moda en que entendia su lema, Cuando se le pregunta cudnta investigacidn maneja Apple sobre Jo que quieren sus clientes, replied: «Ninguna. Saber lo que quiere no es trabajo. del cliente... Nosotms averiguames lo que queremos». Naiese el giro sorprendente de esta argumentaciin: después de negav que los clientes saben la que quieren, Jobs no cantina con la esperada inversién directa «es nuestra tarea (la tarea de tos creatives capitalistas) averiguar lo que quieren Ios clientes y enluaces “musirirselo” en el mercadam, En vex de eso, conlinda con «averiguamos Jo que nosotros queremos». Este es el mocia en que funciona un auténtica Amo: nointenta adivinar lo que quiere ta gente; simplemente abecece su prapio deseo, de mode que es decisidin del pueblo decidir sile seguirin. En atras palabras, su poder surge de su fidelidad a su deseo, de no comprometerlo, Abi reside la diferencia entre un auténtica Ame y, por ejemplo, un lider fascista o estalinista que finge saber (mejor que «1 pueblo mismo) lo que el pueblo realmente quiere (lo que es realmente bueno para ellos}, y esti entonces dispuesto a impanerlo sobre el pucblo, incluso contra su yoluntad, En el documental ArtVielence de Udi Aloni, un homenaje @ Juliano Mer Khamis, ¢] fundador del Jenin Freedom Theatre, una joven actriz palestina describe In que ficé Juliano para ella y sus compafieros: les dio su libertad, es decir, les hizo conscientes de lo que pueden hacer, abrié una nueva posibilidad a aquellos nifins sin hogar en un campo de refugiados. Este es el papel de un nténtica Amo: cuando tememos algo (y el miedo a la mueite es el miedo definitive que nas esclaviza), un auténtica amigo diria algo camo: «No tengas miedo, mira, yo haré eso que tanto temes, y lo haré desinteresadamente, no porejue tenga que hacerlo, sino por mi amor hacia ti; jo tengo miedo!», Lo hace, y de este mode nos libera, demosirindonos in actu que puede hacerse, que podemos hacerlo tambign, que no somos eselavos. Y esta es también la razdn por la que el nombre de la nueva izquierda espaol, PODEMOS, es tan apropiada. Les decico este libra a ellos, con la esperanza de que continien creciendo. Movimientos coma PODEMOS son nuestra unica esperanza en estns tiempos oscuros.