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Este conflicto bélico se sitúa en el contexto de principios de los años 80, en medio de la Guerra
Fría. Es decir, acontece en una época caracterizada por la polarización ideológica del mundo.
Estados Unidos y la URSS se disputaban la hegemonía mundial.
En Gran Bretaña estaba al frente del gobierno Margaret Thatchet (del partido conservador), y
en el estado argentino los jefes del ejército (en ese momento era Fortunato Galtieri), estaban
al frente del país. Era una dictadura.
Las islas fueron probablemente avistadas por primera vez por la flota de San Antonio en 1520.
Más adelante fueron localizadas por un capitán británico, John Davis1, en 1592. Fueron
pobladas por primera vez por franceses e ingleses en 1764. Pero en 1770 España compra la
parte francesa y en 1774 expulsa a los ingleses haciendo valer el Tratado de Tordesillas. Desde
entonces, son plena posesión de España. Pero en 1810 Argentina se independiza de la
metrópoli de España y algo más tarde (1820), proclama soberanía sobre las islas.
Sin embargo, Gran Bretaña, en el año 1833 recupera el control de las islas y más tarde las
declara colonias en 1892. Por supuesto, inmediatamente se dieron protestas por parte del
gobierno argentino, que reclamaba desde entonces constantemente las islas.
Tras la Segunda Guerra Mundial, el papel de Gran Bretaña en el mundo se vio deteriorado
debido a la pérdida del peso que tenía a nivel mundial.
Finalmente, en 1982, y tras la no solución de la disputa, Argentina invade las islas, iniciándose
la guerra.
Sin embargo, Gran Bretaña decidió recuperar el territorio que antes de los españoles les había
pertenecido. Como los españoles ya no poseían las islas2, se dispusieron a tomar las islas. Las
islas pasaron a ser posesión británica en 1833. Esta causa a largo plazo es el origen del
conflicto entre ambas partes.
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Expedición española que se separó del grupo dirigido por el capitán Magallanes y que tenía como fin
explorar esa zona del mar Atlántico.
2
A partir del Tratado de Tordesillas, eran los españoles los que tenían derecho a poseer la isla, no los
británicos. Mientras los españoles estuviesen en la isla, no era contemplado un ataque por parte de los
británicos a las Malvinas.
Los argentinos alegan que las islas les pertenecían porque ellos las habían hecho suyas tras
independizarse de los españoles. Los británicos argumentaban que como fueron los españoles
los que les echaron, al no tener los mismos el control sobre la isla, tenían derecho a su
ocupación, ya que en su día las islas fueron suyas.
Se abre una etapa de disputas entre estos dos países, Argentina reclamaba las islas
inmediatamente después de que le fuesen arrebatadas.
Sin embargo, en 1960, en el seno de la ONU, la disputa empezó a ser tratada, y en 1965 la ONU
invitaba a ambos países a discutir sobre la soberanía del territorio3.
Pero la cuestión fue abandonada y el conflicto seguía patente. Esto supone una causa a corto
plazo para que Argentina, impotente al ver que la ONU no hace nada para solucionar su causa,
excepto invitar a ambas naciones a discutir sobre el asunto, se decida posteriormente a atacar
la isla.
Finalmente, en 1982, bajo la dictadura militar de Fortunato Galtieri, en una etapa de recesión,
endeudamiento público interno y externo, secuestros, asesinatos, torturas… se planeó el
ataque de las islas. Probablemente lo que pretendía el gobierno argentino era desviar la
atención sobre la catastrófica situación que asolaba a su estado internamente.
Así conseguía aunar el nacionalismo de los argentinos en una causa común aprovechando el
problema de las Malvinas y hacer que la población no se fijase tanto en los problemas
internos.
Asimismo, hechos como la lejanía de Gran Bretaña a las islas y las reformas británicas, que
reducían la flota que defendía las islas favorecieron que el gobierno argentino se decidiera a
atacar.
El 2 de abril, Argentina, una tropa argentina desembarca en las Malvinas, dando inicio a la
guerra. Esta es la causa inmediata del inicio de la guerra.
3
La solución prácticamente se logró en 1968 cuando, Gran Bretaña llegó a un acuerdo interno
en el que aceptaba la cesión del territorio a favor de Argentina. Sin embargo, el peso de la
prensa y la opinión pública de la población isleña favoreció enormemente para que la
resolución no se llevase a cabo. Todo esto favoreció que el partido laborista finalmente
abandonase el memorándum que significaba la cesión del territorio ante el miedo ser
destituidos al frente del gobierno.
DESARROLLO BÉLICO. TIPO DE GUERRA. ESTRATEGIA
Fue una guerra localizada en un lugar concreto: el archipiélago de las Malvinas, las Geórgicas
del Sur y las Sándwich. Fue una guerra corta y limitada: ni Argentina ni Gran Bretaña
emplearon todo su potencial bélico
La bandera argentina se izó en las islas Georgias del Sur y en las Sandwich del Sur el 3 de abril.
Así se completaba la ocupación del territorio. La toma de las Malvinas en su conjunto fue
inmediata, debido a que la isla no estaba preparada para defenderse de un ataque.
Tanto el secretario general de la ONU, Javier Pérez Cuéllar como el secretario de Estado de
asuntos exteriores norteamericano, Alexander Haig, intentaron actuar como mediadores para
evitar el conflicto. Pero todo ello fue en vano.
Las fuerzas británicas se lanzaron al ataque de las islas y el 25 de abril tomaron las Georgias del
Sur, mediante el empleo de las primeras fuerzas navales y sin producirse combates.
En esta situación, Estados Unidos, ante el inminente conflicto, declara su apoyo a Gran
Bretaña. A su vez la URSS apoyó a Argentina5.
Los primeros enfrentamientos se desarrollaron por mar, en los cuales se enfrentaron buques
de guerra de ambos bandos, con clara superioridad británica. Gran Bretaña se dispuso a
4
Chile era un tradicional enemigo de Argentina por conflictos fronterizos en el sur.
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Por esta causa, este conflicto puede también verse desde el contexto desde la guerra fría, por los
apoyos que recibieron ambos contendientes.
realizar un bloqueo naval con sus barcos para que no pudiesen llegar alimentos, pertrechos o
refuerzos a la isla.
También las tropas argentinas atacaban a los portaviones británicos mediante incursiones de
la aviación.
Asimismo, bombardeó desde el aire los hangares argentinos en las islas. Un hecho importante
fue el hundimiento del buque insignia argentino, el ARA Belgrano por parte de los británicos.
Los combates aeronavales eran frecuentes, por ejemplo el protagonizado entre el británico
Forrest y el argentino GC82 Islas Malvinas o el hundimiento de los barcos británicos HMS
Antilope, HMS Coventry por parte de la aviación argentina.
Como consecuencia de los enfrentamientos por aire y mar, Argentina pierde numerosas
unidades y vidas. Gran Bretaña intentará desembarcar soldados en la isla para hacer efectiva la
ocupación.
El 13 de junio, tras varios desembarcos fallidos, los británicos se hacen con el control de las
alturas que rodean Port Stanley, la capital de las Malvinas. A partir de entonces los británicos
combinan los ataques aéreos con los terrestres con el fin de conquistar la capital.
El 14 de junio y tras duros combates, los mandos argentinos en Puerto Argentino firman el alto
el fuego, rindiendo así la ciudad.
Argentina
Argentina contaba con un potente armamento. Principalmente contaba con una gran cantidad
de aviones sofisticados (como los Mirage), lo que era su principal baza. También contaban con
cañones pesados y buques de guerra. Pero su principal desventaja fue la condición
desentrenada de su ejército, formado casi en su totalidad por miembros que cumplían el
servicio obligatorio impuesto por la dictadura.
Por tanto, a pesar del avanzado armamento, la condición de baja profesionalidad en las filas
argentinas fue decisiva para la derrota de los sudamericanos.
Además, la estrategia argentina fue totalmente errónea. Pretendía tomar las islas y esperar
que Reino Unido no las reclamase, y centrarse en la defensa de un posible ataque por parte de
Chile. Creían que la invasión de las islas abriría un proceso de negociación por el archipiélago.
Esto se refleja en las tácticas que se llevaron a cabo: la rápida toma de Port Stanley con unos
cinco mil hombres (entre los que no se encontraban las mejores tropas, destinadas a la
frontera con Chile). Además, retiraron rápidamente a los marines de élite porque no
esperaban una respuesta armada británica.
Gran Bretaña
La lejanía de Gran Bretaña era una desventaja clara, pero fue compensada por el poderío de la
flota británica, que permitió el traslado de tropas al lugar del conflicto.
Es un número bastante escaso, a pesar de los bombardeos realizados y a las batallas que
tuvieron lugar en la isla. La población civil salió prácticamente ilesa del conflicto.
Por parte de los soldados la cifra de muertos rondó las novecientas personas: unos 650
argentinos y unos 250 británicos.
Al final del conflicto, Gran Bretaña recuperó los territorios que Argentina tomó en abril de
1982 (los archipiélagos de las islas Malvinas, las Georgias del Sur y las Sandwich del Sur). Las
Sandwich y las Georgias pasaron en 1985 a ser un protectorado argentino.
Un acuerdo dio final a la guerra (tras la rendición argentina), pero no al conflicto en sí.
De hecho, Argentina sigue manteniendo que la soberanía de las islas le pertenece. De hecho
en su Constitución de 1994 establece como uno de los objetivos del estado argentino la
recuperación del archipiélago.
En el lado opuesto, Thatcher consiguió que su popularidad aumentase, y ganó las siguientes
elecciones.
No se llegó a ningún acuerdo entre las ambas partes. Simplemente, las Malvinas iban a seguir
siendo británicas.
Para Argentina, la deuda externa aumentó de forma considerable. Tuvo una crisis económica
que provocó la devaluación de la moneda, el cierre de empresas y fábricas…