Entre los parámetros de identificación son los más significativos la granulometría (distribución
de los tamaños de grano que constituyen el agregado) y la plasticidad (la variación de
consistencia del agregado en función del contenido en agua). El tamaño de las partículas va desde los tamaños granulares conocidos como gravas y arenas, hasta los finos como la arcilla y el limo. Las variaciones en la consistencia del suelo en función del contenido en agua diferencian también las mencionadas clases granulométricas principales.