NEIL FAULKNER DE LOS NEANDERTALES A LOS NEOLIBERALES Una historia marxista del mundo Traducci6n castellana de JUANMARI MADARIAGA © PASADO O/ PRESENTE BARCELONAPREFACIO PARA LA EDICION EN CASTELLANO Espatia se halla en primera linea en la crisis global. Mds de una cuarta parte de los espafioles en edad de trabajar estén desempleados, proporcién que sube a mds de la mitad entre los jévenes. En Europa no se habia visto nada parecido desde la Gran Depresién de la década de 1930. Treinta aftos de neoliberalismo han redistribuido la riqueza desde los trabajadores hacia los ricos y la clase media. Cinco afios de austeridad han acelerado el proceso y han creado una sociedad polarizada con obscenas desigualdades, La misma realidad lacera la vida de cientos de millones de latinoame- ricanos. Brasil se ha convertido en uno de los motores de la era neoliberal. Su tasa de crecimiento anual estaba en 2010 en torno al 7,5 por 100 ¥ 70 brasilefios aparectan en la lista de los milmillonarios del mundo; pero de los 200 millones de brasilefios una quinta parte vive con menos de dos délares al dia, y una décima parte con menos de un délar al dia. Ese es el auséntico significado del neoliberalismo y la austeridad en Espaitay en Latinoamérica. La economta mundial tiene una capacidad sin precedentes para satisfacer las necesidades humanas bdsicas, pero la rigue- za. que genera sigue estando controlada por una diminuta minoria akita y al mismo tiempo ansiosa de beneficios. El mundo es més rico que nunca, pero también esté mds empobrecido que nunca. Si eso fuera todo, seria espantoso; pero hey otra historia que contar: la de la protestay la resistencia. El pueblo espariol ya encaberé una vex la lu- cha de clases por un cambio radical en 1936, cuando Ia insurreccién arma- da de la clase obrera en Madrid, Barcelona y otras muchas ciudades espa~ fiolas contribuyé a frenar el avance del fascismo en toda Europa. También en Gran Bretafia conocemos la importancia global de la revo- lucién espattola, que inspiré a toda una generacién de socialistas brisdnicos, algunos de los cuales fueron a combatir en Espatia y otros muchos contribu- yeron a elevar aun nuevo nivel la lucha en este pais. Cuando los obreros del| apd 8 DE LOS NEANDERTALES A LOS NEOLIBERALES este de Londres se enfrentaron a una marcha de camisas negras y rompieron el espinazo de la Unién Briténica de Fascistas en 2936, en las calles se ofa alos cien mil manifestantes gritar lo mismo que en Madrid: «jNo pasarénls Madrid volvié a lamar la atenciin del mundo entero en mayo de £ Después de de la plaza Syntagma, gn Atenas y la de Tahrir en El Cairo, Puerta del Sol se convirtié en la linea del frense en la batalla globa elt ‘iéoliberalismo ¥ 4 austeridad al movilizarse k qué en aguella olédida dé protestas participaron hasta 8 millones de perso- nas en distintas manifestaciones, huelgas y ocupaciones. La indignacién contra los bancos, los ricos y una elite politica arrogante se intensificd ante la violencia policial contra las protestas democréticas. Dos gitos después la antorcha ha pasado a Rio de Janeiro, Séo Paulo-y otras ciudades brastlefias. La movilizacién comenzé con protestas locales ‘ontra el aumento de precio del transporte, pero la violencia policial desen- cadend una explosion de célera que se extendié a todo el pats, con millones de brasilehos en las calles. La corrupcién y la complacencia de las altas es- feras se han visto sacudidas por la marea desde abajo contra el desempleo, el aumento de precios, el deterioro de los servicios piblicos, los elevados impuestos y el escandaloso gasto de miles de millones de délares en estadios deportivos. Hay variaciones de un pats @ otro, pero en todo el | planeta se evidencia una nugya paurade.la hucha de mn la ‘to de los sindicatos y otras organizaciones pop vulé da presién y las redes de seguridad del orden social, y an la base de la sociedad se palpa amargura, crece [a alienaciin con respecto al sistema», y cuando estalla cobra dimensiones explosivas, La ciudad moderna, con su clase obrera heterogénea, precaria y en mudanga continua, se ha convertido en un terreno de batalla primordial. Los medios de comunicacién han facilitado la creacién de redes laxas y la rdpida movilizacién de individuos antes atomizados; y cuando se unen, los diversos radicales de la contracultura descubren que son un movimiento de masas, que se han converiide én lao} del pueblo, Ly que pueden arrastrar a Ja accién a millones de personas empobrecidas por los recortes de la auste- ridad y privadas de derechos por ef consenso neoliberal. Ha comenjado una nueva era de protestas. El mundo nunca volverd a ser el mismo. Pero para avanzar, cada movilizacién de masas aftonta tres mitra jados, Se estime.. PREFACIO PARA LA EDIGION EN CASTELLANO. 9 rareas basi ue se pueden resumir en tre. idad, democracia a labs sr vy claridad. La unidad se logra ensamblando en la lucha al mayor numero posible de fuerzas sociales. La democracia requiere la creacién de formas de organizacién popular que puedan expresar directamente la voluntad de las masas. ¥ se necesita claridad de propésito y direccién para orientar el movi- miento, maximizar su apoyo y encaminarlo hacia un cambio radical. 9 El periodista y economista de inquierdas Paul Mason ha comparado Jos nuevos levantamientos urbanos a la Comuna de Paris de 1871. La Co- muna fue dertotada al cabo de cincuenta dias de lucha, pero una de las ra- zones de aquella derrota fue la cortedad de sus ambiciones. No incorporé a Jas mujeres a la toma de decisiones y no realiz6 ningtin intento serio de ex- tender la revolucion mds alld de la capital. El gobierno de Versalles pudo ast utilizar su ejéreito de soldados-campesinos para aplastar el Paris revo-~ Lucionario. Para vencer, un movimiento de masas popular no se puede permitir lar- gas pausas ni vacilaciones. Debe extenderse, ampliar su base, arrastrar nue- vas fuerzas a la lucha, y para hacerlo debe unir la lucha por la democracia urbana con la lucha por reformas sociales para la gran masa de trabajadores, campesinos pobres marginados. El mds claro ejemplo histérico al respecto sigue siendo el del partido bolchevique en Rusia en 1917. El lema «Paz, Pan y Tierra» condensé los objetivos del momento revolucionario y unié a millones de obreros, soldados y campesinos tras el liderazgo de la vanguardia revolucionaria, y el de «j Todo el poder para los soviets!» convirtié lo que todavta no era mds que una gran red de democracia directa en una alternative al viejo aparato es- tatal. La Revolucién de Octubre fue la materializacién prdctica de esas dos divisas, Observando los acontecimientos desde Gran Bretaiia —~en dtenas, Madrid, Tinex, El Cairo, Estambul, Rio y otros cientos de ciudades en todo el mundo se puede sentir el poder de la rebelion que se manafiesta en todo el sistema global. En un pais tras otro los desposeidos e indefensos se alzan de su letargo y vuelven a ocupar el primer plano de la historia. Ahi estdé una vex mds «la mayorta del 99 por 100» combatiendo contra «la mi- aoria del 2 por 100», y aki se desvanecen de nuevo en flujo y movimiento las viejas certezas, ahi se estd haciendo historia, Me complace enormemente pues presentar ahora una edicién en caste~ Hano de De los neandertales a los neoliberales. Historia marxista del mundo. Espero que su publicacién pueda contribuir, por poco que sea, a persuadir a mds gente de lengua castellana a ponerse en movimiento, por-fe F to DE LOS NEANDERTALES A LOS NEOLIBERALES que ese es su propésito. Pretendo con ella mostrar que la historia es un proce~ so abierto, sin resultados predeterminados; que la configuran y reconfigu- Tan nuestros actos; que es un proceso contingente y gue la gran crisis del orden neoliberal gue nos ha caido encima no tiene por qué acabar como otras crisis capitalistas anteriores, con el fascismo.y la guerra, sino que puede por el contrario culminar en una gran transformacién social. La leccién de la historia, en resumen, es que importa enormemente lo que hacemos. Si muchos de nosotros actuamos unidos durante los préximos atios y décadas, podemos hacer la revolucién necesaria para poner fin al dominio del capital financiero y para liberar al mundo de la pobreza y la violencia, sustituir la prepotencia policial por la democracia y salvar al planeta de la catdstrofe medioambiental que lo amenaya. El futuro es nues- tro si ast lo decidimos. Net FAULKNER Octubre de 2013 INTRODUCCION: POR QUE TIENE TANTA IMPORTANCIA LA HISTORIA La historia es un arma. Nuestra comprensi6n del pasado afecta a nues- tras acciones en el presente. Debido a esto, la historia es politica y c Ob- jéto de disputa, OT ~ a ~ "Fedo conocimiento del presente —de sus crisis, guerras y revolu- clones-""6s tiecesariamente ico, No podemos entéiidér nitestro propio imundd ain teferencias al pasado, del mismo modo que no pode- mos confeccionar un ordenador sin tener en cuenta conocimientos acu- miulados durante décadas o siglos. Nuestros gobernantes y explotadores lo saben, y como estin muy interesados en defender sus propiedades y su poder, utilizan su control de la ensefianza y de los medios de comunica- cin para presentar una visién mutilada y distorsionada de la historia. Insisten en la continuidad y la tradicién, la obediencia y la conformidad, lanacién y el imperio. Disimulan deliberadamente la explotacidn, la vio- lencia de la clase domninante y Jas luchas de los oprimidos. Su version de la historia ha cobrado mayor relieve durante los dlti- mos treinta afios. Los imperios del pasado, como el romano y el brita- nico, son presentados como modelos de civilizacién por los fanaticos partidarios «neoconservadores» de las actuales guerras imperialistas. La Europa medieval ha sido reinterpretada como ejemplo de la «nueva economia clasica» promovida por banqueros milmillonarios. Los in- tentos de construir grandes narraciones histéricas —esto es, de expli- car el pasado de forma que podamos entender el presente y actuar para cambiar el faturo— han sido denostados por tedricos postmodernos -mds o menos de moda que argumentan que la historia no tiene estruc- tura, pautas ni significado. El efecto de esas ideas es desarmarnos inte- lectualmente y desactivarnos politicamente. No hay por qué hacer nada, se nos dice, ya que la guerra promueve la democracia, no hay alternativa al mercado y la historia no puede ser configurada por la accién humana consciente.12 DB LOS NEANDERTALES A LOS NEOLIBERALES Este libro se inscribe en otra tradicién, acorde con lo que escribié el pensador y activista revolucionario Karl Marx en un anilisis de la revolucién francesa de 1848 publicado en 1852 (EV 28 Brumario de Luis Bonaparte): «Los seres humanos hacen su propia historia, pero no a su libre arbitrio, en circunstancias elegidas por ellos mismos, sino en las que los rodean y les han sido legadas por el pasado». El curso de la his- toria, con otras palabras, no estd predeterminado; las cosas pueden evolucionar en una direccién u otra segtin lo que hagamos. La historia tampoco la hacen tinicamente los politicos y los generales; la conclu- sidn es que si la gente corriente nos organizamos y actuamos colectiva- mente, también nosotros podemos configurar la historia. Este libro proviene de una serie publicada inicialmente con perio- dicidad semanal en el sitio web www.counterfire.org. Ha sido cuida- dosamente revisado para su publicacién como libro, afiadiéndole esta introduccién y una conclusién bastante larga. He reagrupado los cor- tos capitulos semanales en secciones de capitulos mas largos del libro, iniciando cada uno de ellos con una corta introduccién. También he afiadido una biblografia para que los lectores puedan contrastar mis fuentes y buscar nuevas lecturas. La reorganizacion y edicién de la serie original deberfa hacer que este libro se pudieta leer de principio a fin de forma coherente, pero no hay por qué hacerlo asi; también se puede entender como una colec- cién de cortos ensayos analiticos sobre temas historicos clave a los que se puede recurrir cuando se necesite, En cualquier caso es, en primer lugar y ante todo, un libro para activistas, para gente que quiere enten- der el pasado como guia para la accidn en el presente. He introducido muchos cambios gracias a las siguientes personas, que se tomaron el tiempo y la paciencia para leer el texto, completo o en parte, y me oftecieron valiosos comentarios criticos: William Al- derson, Dominic Alexander, David Castle, Lindsey German, Elaine Graham-Leigh, Jackie Mulhallen, john Rees, Alex Snowdon, Alastair Stephens, Fran Trafford y Vernon Trafford. No hay ni que decir que a veces vencidé mi tozudez y rechacé su consejo, por lo que la responsabi- lidad del resultado final es solo mia. Una critica muy repetida ha sido la de que he omitido muchos lu- gares y sucesos, cuando no periodos enteros, y de que el libro peca de eurocentrismo e incluso de anglocentrismo. Esa critica esta justificada y he hecho cuanto he podido por corregir los desequilibrios, pero solo lo he conseguido en parte, por una razon muy simple y obvia: soy un INTRODUCCION: POR QUE TIENE TANTA IMPORTANCIA LA HISTORIA 13 uedloge e historiador britanico con una experiencia may desigual; “como todos los generalistas, nunca puedo escapar del todo a las restric- ciones de mi formacién, mi experiencia y mis lecturas, ¥ por eso debo pedir indulgencia y paciencia a los lectores no briténicos ni europeos. Incluso en el terreno que he cubierto, sospecho que habra un mon- ton de errores y malentendidos que seran denunciados por diversos especialistas, lo que constituye también el destino inevitable del autor generalista, y lo dnico que me cabe Preguntar es: dinvalidan e508 erro- res y malentendidos mi argumento principal? En tal caso, mi proyecto es invalido; pero si no, esto es, si el planteamiento marxista ofrece una explicacién convincente de los principales acontecimientos y desarro- Ilos de la historia humana, sean cuales sean los detalles que haya podido presentar equivocadamente, entonces mi proyecto es valido. / Espero pues, a pesar de todo, conseguir algo mas: persuadir a algu- nos de que, ya que los seres humanos hacemos nuestra propia historia y el futuro esti determinado por lo que hacemos cada uno de nosotros, tenemos que actuar més intensamente, ya que como dijo el propio Marx, «los filésofos se han limitado a interpretar el mundo, pero lo que importa es cambiarlon. NEIL FAULKNER Diciembre de 2022I - CAZADORES-RECOLECTORES . Y AGRICULTORES-PASTORES Entre 2,5 millones y 5000 ap 1 | : La tecnologia més avanzada durante dos millones de aos: i ; un hacha de mano bifa; del periodo achelense (Paleolitico inferior).Comenzaremos con un rapido repaso de un largo periodo, desde hace dos millones y medio de afios hasta hace 5.099 affos, poco més o me- nos. Durante ese largo periodé tivieron lugar cuatro grandes trans- formaciones como consecuencia de la evolucién biolégica, cultural y social’ Primero, en Africa oriental, Hace dos millones ¥ medio 08, cierios “primates “evolicionaron ‘hasta converti _Jos_primeros hominidos, animales que caminaban erectos y.que.tenian la capacidad de“ténfeccionar-insthtiiiienios con sus manos, Segundo, hace unos 8 y taribién en Africa, algunos Hominidos evolucionaron hasta convertirse en los actuales humanos, criataras con un cerebro mas voluminoso y mayor capacidad para la confeccién de instrumen- tos, el trabajo colectivo, la organizacién social y la adaptacién cultural adistintos entornos. Tercero, hace unos 12.000 afios y bajo el impacto del cambio climético y la escasez de alimentos, algunas comunidades humanas pasaron de Ja caza y la recoleccién al cultivo y la cria de ani- males. Por dltimo, hace unos 6.000 afios las nuevas técnicas de drenaje ¢ irrigacién y la agricultura intensiva permitieron a determinadas co- munidades aumentar sustancialmente su excedente, pasando del culti- vo en pequefios huertos utilizando la azada ala agricultura basada en el arado. Llamo revoluciones a esas transiciones para subrayar el hecho de que fueron relativamente répidas: momentos de la historia en los que fa lenta evolucién cuantitativa dio paso bruscamente a un cambio cua- litativo: de moverse a cuatro patas a caminar sobre dos piernas; de un hominido de limitado intelecto a otro con una capacidad extraordina- tia; de un modo de vida basado en Ja recoleccién de alimentos 0 la caza a otro basado en la produccién; y del cultivo con azadas ala utilizacion del arado. Al final, y desde hace tan solo cinco o seis mil afios, la agri- cultura y la ganaderfa proporcionaban a las sociedades humanas exce- CAZADORES-RECOLECTORES ¥ AGRICULTORES-PASTORES 17 . igid os de es- dentes suficientes para mantener la religion, eo guerra yeu eee pecialistas. De estos Ailtimos, que usurparon el control del exce: > iban'a nacer las primeras clases explotadoras. LA REVOLUCION DEL GENERO «HOMO» Hace 3,2 millones de afios deambulaba por la depresion de Afar de Etiopia un nuevo tipo de simio: el Australopithecus afarensis («mono austral de Afar»). En 1974 unos antropélogos encontraron 47 huesos fosiles de uno de esos «australopitecos», alrededor del 40 por 100 deun esqueleto completo. Estudiando su apariencia y sus formas graciles dedujeron que era hembra y la lamaron «Lucy», pero también puede era un macho. ai tenia 1,1 m de altura, pesaba alrededor de 29 Kilos vy tenia probablemente unos veinte afios cuando murid. Con sus piernas cor- tas, brazos largos y una pequefia caja craneal, probablemente se pare- ceria a un chimpancé actual, pero habia una diferencia crucial: era bi- peda y caminaba bastante erguida. El aspecto de su pelvis y de sus piernas y la rodilla de otro miembro de la especie hallada a poca dis- tancia lo demostraban més alld de toda duda razonable. Lucy formaba parte probablemente de un pequefio grupo que se desplazaba de un lado a otro recogiendo frutos, nueces, semillas, hue- vos y otros alimentos. La reduccién de los bosques y la creacién de las sabanas debidas al cambio climético habian favorecido a una especie capaz de recorrer grandes distancias en busca de alimento. Pero la bi- pedacién de Lucy tuvo consecuencias revolucionarias. Liberd las ma- nos y los brazos para confeccionar instrumentos y para otro tipo de trabajos, lo que a su vez impulsé la seleccién natural en favor de una mayor capacidad craneal. Se habia puesto en marcha una poderosa di- n&mica evolutiva: mano y cerebro, trabajo e intelecto, habilidad y pen- samiento iniciaron una interaccién explosiva que culminé en los seres humanos actuales. No sabemos si Lucy confeccionaba instrumentos, ya que no se ha encontrado ninguno cerca de sus restos 0 los de sus compafieros; pero hace dos millones y medio de afios sus descendientes ciertamente lo hacian. Las hachuelas fabricadas con cantos de pedernal crudamente tallados ‘representan la impronta arqueolégica de un nuevo género13 DE LOS NEANDERTALES A LOS NEOLIBERALES (Home) dentro de la familia de los hominidos, definido por la fabrica- cién de instrumentos liticos, cuya utilizacion supone pensamiento con- ceptual, planificacién y destreza manual. Revela el uso del intelecto y la habilidad para modificar la naturaleza a fin de explotar mas eficien- temente sus recursos. Otros animales simplemente aprovechan lo que encuentran a su alcance. Los hominidos del género Homo, al igual que los australopitecos ya mencionados, vivieron y evolucionaron en Africa durante un mi- lién y medio de afios. Aunque se han encontrado en Georgia, cerca del mar Negro, restos fésiles de hominidos con 1,8 millones de aiios de antigiiedad, parecen representar tinicamente una breve incutsién en Asia occidental. Hasta hace alrededor de un mill6n de afios no emi- gré desde Africa la primera especie humana, Homo erectus, para colo- nizar gran parte del sur y el este de Asia. Mas tarde un hominido mas desarrollado, Homo heidelbergensis, se asent6 en gran parte de Asia occidental y Europa, pero aquellas poblaciones eran escasas e ines- fables. 7 ; Las distintas especies del género Homo evolucionaron durante la / Edad del Hielo iniciada hace dos millones y medio de afios (Pleistoce- no), cuyo clima oscila entre periodos glaciales frios e interglaciales re- lativamente cdlidos. Actualmente nos hallamos en un periodo inter- glacial, pero hace 20.000 afios gran parte de Europa y Norteamérica estaban cubiertas por capas de hielo de hasta 4 km de espesor, los in- viernos duraban nueve meses y durante semanas la temperatura se si- tuaba por debajo de -20° C. Las primeras especies del género Homo no estaban adaptadas al frio, por lo que migraban hacia el norte en pério- dos calidos y de nuevo hacia el sur cuando avanzahan los glaciares, Llegaron por primera vez a Gran Bretafia, por ejemplo, hace mas de 700.000 aiios, pero luego se retiraron y volvieron al menos ocho veces, Gran Bretafia estuvo probablemente ocupada tan solo durante un 20 por roo de su Paleolitico (entre hace 700.000 y 10.000 aiios). Homo heidelbergensis habitaba al parecer en regiones costeras 0 en estuarios donde los recursos animales eran ricos y variados. Los ins- trumentos més utilizados eran la hachuela de mano «achelense» yla lamina «clactoniense» en sus distintas variedades, utilizadas pata cor- tar, despiezar, raspar y otros multiples usos y que eran producidas en masa a medida que se necesitaban. Las excavaciones en Boxgrove (In- glaterra) han permitido recuperar 300 hachas de mano y muchos dese- chos de la talla de cantos de pedernal de hace alrededor de 500.000 afios. CAZADORES-RECOLECTORES Y AGRICULTORES-PASTORES 19 Se utilizaban para trocear caballos, venados y rinocerontes en lo que era entonces una llanura costera con caracteristicas de sabana. ; Durante la tiltima glaciacién, en cambio, no se produjo una ree da general. La especie Homo, neanderchalensis se habia adapiado al frfo évolicionando a partir del Homo Aeidelbergensis en Europa y no necesariamente bienvenida. La agricultura es un trabajo duro: su-26 DE LOS NEANDERTALES A LOS NEOLIBERALES pone tareas largas, repetitivas y fatigosas: despejar el terreno, abrir el suelo, cavar, esparcir las semillas, combatir las plagas, regar o drenar los campos, recoger la cosecha...; y eso sin contar el peligro siempre presente de sequias, inundaciones o plagas. Y luego lo mismo afio tras afi y tras afio. La agricultura no es precisamente una opcidn ideal; ca~ zar y pescar, recolectar y escarbar son mucho més faciles. La revolucién neolitica, como la llamé Vere Gordon Childe, es por tanto un ejemplo de cémo los seres humanos hacen su propia historia, pero no en circunstancias elegidas por ellos. Pueden verse impulsados a la sedentarizacién y al duro trabajo de la agricultura y la ganaderia por la necesidad, en un entorno cada vez mds seco desprovisto de re- cursos alimenticios naturales, El-Beidha, cerca de Petra, en la actual Jordania, por ejemplo, alojé una comunidad de cultivadores a princi- pios del Neolitico (Edad de Piedra nueva) hace unos 8.500 afios. Vi- vian en casas de «corredor» comunales hechas de piedra, madera y ba- rro, cosechaban grano para hacer harina en molinos de silla (cuya piedra de moler parece una silla de montar), y fabricaban muchos y variados instrumentos de pedernal, como puntas de flecha, cuchillos y raspadores, que ahora se pulimentaban en lugar de tallarse simplemen- teagolpes. La geografia y el clima interactuaban con el ingenio humano para producir diferentes economfas en distintos lugares. La agricultura se desarrollé en Asia occidental y central, en parte porque el terreno era més seco y la presién sobre los recursos alimenticios era mayor, y en parte porque se disponia de variedades salvajes de especies clave: ce- reales como la cebada y la escanda, asi como vacas, ovejas, cabras y cerdos. Pero el cambio climitico era global y Ia agricultura se invent independientemente en distintos momentos y en lugares muy alejados. En las tierras altas de Paptia-Nueva Guinea, por ejemplo, se desarrollé hace unos 9.000 afios una economia neolitica basada en la caiia de azti- car, bananas, flame, gram{neas, tubérculos y hortalizas, que permane- ci6 practicamente inalterada hasta el siglo xx. Los primeros agricultores sedentarios europeos eran pioneros asid- ticos que cruzaron el Egeo hacia el este de Grecia hace unos 9.000 afios, levando consigo el «equipaje neoliticon: semillas para cultivar y anima- les domésticos; asentamientos permanentes y casas cuadradas; hilado y tejido; azadas, hoces y hachas pulidas; vasijas de barro y piedras de mo- lino... Todo ello aparece repentinamente en el registro arqueolégico en los enterramientos de personas con un claro ADN «asiatico». -ADORES-RECOLECTORES ¥ AGRICULTORES-PASTORES 27 GAZ. ifasion de la agricultura y la ganaderia lleva miles de afios, y ab iversal. Desde hace unos 9.500 afios han coexis- aisiquere atom vleeciSn, el pastoreo y el cultivo. Muchas comunida- isle ie A ios “sel neoltico disponian de una economia mixta con e . Peementos de unos y otros. Otras se resistieron a la agricultu- ae nade fa ermanente. Hasta hace 7.500 afiossio se difundieron ray aon leanes atravesando la llanura hingara, hacia Europa sep- in rn secidental donde se detuvieron de nuevo. Durante otros ea oe : zadores mesoliticos del Baltico, las costas del mar del a ee bere atlantica y las Islas Briténicas conservaron su modo de Nowe, iuego, hace unos 6.000 afios, se incorporaron también al neoli- te Ot ‘0s, como los aborigenes de Australia o los bosquimanos del Kcalahet, mantuvieron una economia de caza y recoleccién hasta tiem- dentes. . e tleabsoen el campo puede haber sido siempre una opcion tomes da a disgusto, pero una vez iniciado no tenia vue ta ates. Como la agricultura y la ganaderia explotaban el suelo mas intensivars © * Pe ° dian mantener poblaciones mucho mayores que Ja cena yla rece cidn, pero eso también significaba que si los agricul vores ga eros abandonaban su trabajo su comunidad pereceria de ha re mi rq ahora habia demasiada gente para alimentarse simplemente de lo ane estaba disponible. La humanidad habia quedado atrapada por su pro io exit tipo de tareas. . . ace unos dae mil afios los agricultores-ganaderos del neowtco (Conocidos por los arquedlogos como la Culeura de fa cerdice oe das) se habian asentado en gran parte de Europa. Vivian on al cas ¢ dos o tres docenas de casas de madera, de entre 30 y go mde longi ay 5 m de anchura, cuya construccién requeria un esfuerzo colectivo. in cada una de ellas se acomodaba un grupo familiar extenso. Ni las ve viendas ni los enterramientos ofrecen ninguna sefial de desigualda social; cabe suponer que todos contribufan y todos consumian. le una forma igualitaria segan su habilidad. Asi pues, enla socieday ‘ Prin cipios del neolitico no habia divisiones de clase ni faritas nucle: ress cosas en las que no hay nada de «natural», Como los caz oresre ; lectores némadas, los primeros agricultores-ganaderos sedentarios eran lo que Karl Marx y Friedrich Engels llamaban «comunistas primi- Paco se trataba de un comunismo de la escasez. La agricultura con- llevaba al principio mucho despilfarro: se desbrozaba y roruraba la tie-_ dé fésiles pe tos, | © | son de décenas de miles. Pero ahi habia un problema. La técnica era 28 DE LOS NEANDERTALES A LOS NEOLIBERALES tra y Inego se cultivaba hasta que se agotaba y habia que abandonarla. El barbecho y el abono para mantener Ia tierra aproductivamente salu- dable» no eran todavia practicas comunes; y a medida que crecia la po- blacién, la tierra disponible comenzaha a escasear. Esas contradicciones de la economia del neolitico acabaron estallando en conflictos bélicos, Los ORIGENES DE LA GUERRA V LA RELIGION Los cuerpos de 34 personas, la mitad de ellos nifios, habfan sido arroja- dos aun pozo de 3 m de anchura. Dos de los adultos habian sido alcan- zados en la cabeza con flechas. Otros 20, incluidos nifios, habian sido muertos a garrotazos, I.os arquedlogos no dudan de que fue una ma- tanza. El Pozo de la Muerte de Taiheim, en el suroeste de Alemania, revela una verdad cruel sobre el mundo del neolitico de hace 7.000 afios: los humanos habian comenzado a guetrear entre si. Antes no habia habido guerras. Durante dos millones y medio de afios, a lo largo del paleolitico, pequefias bandas de humanos habfan recorrido la tierra en busca de alimentos practicando la caza yla recoleccién. Los encuentros eran escasos y los enfrentamientos de cualquier tipo atin mds escasos. Solo mas tarde, cuando aumenté la cantidad de gente, comenzé a haber conflictos ocasionales sobre los recursos. El arte de las cavernas muestra cazadores con arcos dispa- rando no solo contra animales sino a veces contra otros hombres, pero eso no era la guerra como tal. La guerra es una violencia a gran escala, prolongada y organizada, entre grupos opuesios. No hay pruebas de que eso sucediera antes de la revolucién agricola que co- menzé hace unos 9.500 afios. La agricultura-ganaderia era un modo mucho mis eficiente de ob- tener alimentos que la caza-recolec: sccién, por.lo .que-la-poblacién au- metitéeno¥iiemente durante el neolitico. Mientras que los yacimientos Olfticos albergan.cientos de esqueletos, los del neolftico : primitiva, la prodi dad baja y el excedente > pequefio, La gente vivia al borde del peligro, expuesta a desastres naturales como las plagas en 16s “Giltivos, ef ias en los animales o calamidades climaticas. Las comunidades de principios del neolitice Se sénitian"amenazadas porlos espéctros del hambre y.la muerte. CAZADORES-RECOLECTORES Y AGRICULTORES-PASTORES 29 El problema tenia sus raices en el propio éxito de la seonomia del Jitico, ya que la poblacién seguia creciendo pero elterreno isponi- He limitado. A medida que se extraian nutrientes del suelo sin re- anata, habia que roturar nuevas tierras ca lo que antes era territerio virgen. Al crecer la poblacién, los asentamientos existentes no podian alimentar a todos y grupos de exploradores se ponian en camino para encontrar nuevos lugares de asentamiento. A medida que se desbroza- panlas dltimas zonas salvajes cercanas a los anteriores asentamientos, {a economia derrochadora del neolitico iba aleanzando sus limites. El anhelo de tierra y de alimentos podia hacer entrar en conflicto enton- OS VECINos, “ ‘Ls propiedad entre los primeros agricultores y ganaderos ~~ campos, animales, almacenes, hogares permanentes— era comunal, para arrostrar las dificultades. Aquella combinacién de pobreza y pro- piedad, escasez y excedente, fue la causa primordial de las primeras guerras. Los hambrientos podian comer apoderdndose del grano y las ‘ovejas de sus vecinos. El Pozo de la Muerte en Talheim parece atesti- guar aquellas luchas primitivas. ; ; 4 Pero para hacer la guerra se necesitan guerreros, aliados y obras de defensa. Los grupos que cuenten con ellas derrotarén a los que no jas tengan; los que inviertan parte del excedente en la preparaci6n para la guerra dominarén a los que no lo hagan. Los arquedlogos creen ahora, por ejemplo, que fue en torno a 5500 ap cuando se produjeron jas pri- meras guerras en Gran Bretafia, pocos siglos después del comienzo de Ja revolucién neolitica all. En distintos lugares de la Europa norocci- dental se constryeron grandes recintos «calzados», esto es, con unas éalzadas elevadas entre fosos, en lo alto de colinas relativamente aisla- das. Windmill Hill, en Wiltshire, cercado por tres anillos concéntricos de calzada y foso, tiene el tamafio de 15 campos de fiitbol, esto es, unas io hectareas. Se utilizaban probablemente para grandes asambleas po- liticas, rituales religiosos y como fortificaciones defensivas. Simboliza- ban un nuevo orden que una a gente de distintas aldeas en una tinica entidad tribal. Hacia la misma época comenzaron a practicarse los en- terramientos comunales en tumbas cubiertas con grandes losas 0 mon- ticulos de tierra. El timulo megalitico de West Kennet en Wiltshire, que estuvo en uso entre 5 500 y 4500 ap, tiene 100 m de longitud y2om de anchura. Construido evidentemente con la intencién de impresio- nar, era una asercién directa de control territorial, pero su propia exis- tencia demuestra que ese control era impugnado.30 DE LOS NEANDERTALES A LOS NEOLIBERALES Los recintos «calzados» como el de Windmill Hill eran lugares de culto; los timulos megaliticos eran mausoleos, Las grandes entidades sociopoliticas de principios del neolitico se cimentaban mediante las creencias y rituales colectivos. La magia yla religién estaban asumien- do nuevas funciones, convirtiéndose en mecanismos para crear grupos sociales mas fuertes, mas capaces de competir con otros grupos por el control del territorio y los escasos recursos. La magia (un intento de obtener lo que se desea mediante la imita- cidn) y la religién (un intento de hacerlo suplicando a grandes poderes invisibles) tienen una larga historia. Los cazadores del paleolitico su- perior pintaban grandes bestias sobre las paredes en las oscuras pro- fundidades de sus cavernas. En la mente prehistérica el simbolo, la imagen pintada, pretendia servir como conjuro para la futura expe- dicién de caza; pero la magia se practicaba no solo mediante el arte pictérico, sino también mediante la danza, la misica y los ornamentos personales. La danza grupal, los sonidos ritmicos y la vestimenta en- carnaban los deseos y esperanzas colectivas. Los cazadores, psiquica- mente motivados por el ritual, reanudaban entonces la busqueda de presas con confianza renovada. El grupo humano —su cohesién, fertilidad y supervivencia— era también materia de culto. El totemismo es una amalgama primitiva de magia y religion: vincula al grupo humano con un animal, al que se venera para asegurar el bienestar del grupo. El culto de los antepasa- dos es igualmente antiguo: concibe a los Parientes muertos como espi- ritus benevolentes que se ciernen protectoramente sobre la progenie viva. Pero la religién plenamente desarrollada incorpora la adoracién de deidades supraterrenales: el sol, la luna, la Gran Madee tierra. La alienacién —falta de control sobre la naturaleza— adquiere entonces su expresién mas elaborada. Los seres humanos tratan de protegerse frente a fuerzas que no pueden controlar mediante stplicas (plegarias) y sobornos (sacrificios y ofertas) a quienes imaginan que las dominan. Esas formas primitivas de religién —totemismo, culto de los ante- pasados, del sol, de la hina, de la Gran Madre tierta— sobreviven «fo- silizados» en cultos posteriores, Mucho de lo que conocemos proviene de ahi. Artemisa, diosa griega de la naturaleza salvaje, era adorada en la antigua Atenas por jovencitas que danzaban disfrazadas de osas. En la antigua Roma las /upercalia festejaban anualmente del 13 al 15 de fe- brero a Fauno Luperco, divinidad con atributos de lobo y de cabra que segan la tradicién habia amamantado, en forma de loba (Luperca, en TADORES-RECOLECTORES ¥ AGRICULTORES-PASTORES 3L Cal 5 lescen- : itolit los gemelos Rémulo y Remo; los ado! italiano lupe cepioling) 8 nelee familias mds ilustres de la ciudad, tras i if ‘dos anualmente ent as t a oe oe con sangre de cabras sacrificadas, salian desde una gruta in . aoe s . a al monte Palatino cubiertos Unicamente con unos jirones de piel cercan: Jpeaban con unas tiras de cuero a quienes encontraban asu dele via ujeres, ser azotada por los /uperci equivalia a una purifi- ee rian ada raat que supuestamente aumentaba su fertilidad. _ ie jon cobr6 asi mayor importancia en las aldeas del neolitico aw tn . on entidades tribales. La rivalidad y la guerra por el territo- oo eb igeb a los pequefios grupos a buscar seguridad en unidades neo La adoracién comin de tétems, antepasados y deidades vrelba nuevas identidades sociales. Las creencias y viuales compar tidos fomentaban la solidaridad; pero: el resultado po fan oer . frenitamientos mortiferos entre grupos rivales. El rece “ iden de Crickley Hill en Gloucestershire fue atacado e ineen ied % cntomne 4 su perimetro se encontraron més de 4oo puntas de: ect le p Serna Muchos de los restos mortales hallados en los tamul los meg cos pritanicos mostraban huellas de violencia, habiendo caido victima: dardos, flechas, garrotes, hachas o piedras. ; im Una combinacién de investigaciones con radiocatbono (basa Bs en la proporcién de carbono 14 en los restos orgénicos) y cota ‘ssc bayesiana ha proporcionado nuevas fechas pata esos acontecions ns Laconstraccién de recintos «calzados» y los asesinatos en mat ne }astante simultaneos. Entre hace 5.700 y 5-400 afios se cerabiesie en Gran Bretafia un nuevo orden basado en el control territorial, los or pos tribales, rituales a gran escala y preparacion para la aura, que fe el poder a una nueva capa social de jefes guerreros y ran ° sacerdo tes que con el tiempo iba a consolidarse como una clase domi _ EL ASCENSO DE LOS EXPERTOS ¥ LA DIFUSION DE NUEVAS RELACIONES FAMILIARES Y SOCIALES “La economia de principios del neolitico, plagada de conteadcciones insolubles, estaba condenada. La técnica era primitiva y dispendiosa. Lasociedad carecia de-resexvas para afrontar los desastres anaes y ‘Tos periodos. rigurosos. La tierra virgen se agotaba mientras que los vigjos campos quedaban exhaustos y la poblacién crecia.32 DE LOS NEANDERTALES A LOS NEOLIBERALES La guerra era una expresién de esas contradigciones. Ofrecia a ciertos Grupos una salida pobreza aprovechdndose de los bienes almacenados por otros. Pero no era una solucién, ya que no aumenta- ba la productividad, sino que simplemente redistribufa las reservas existentes de riqueza en tierra, animales y grano almacenado. Una caracteristica definitoria de Homo sapiens es su inventiva. Los seres humanos actuales responden a los desafios que se les presentan de- sarrollando nuevos instrumenios y técnicas. Estén adaptados para adap- tarse. Prosperaron mediante la innovacién cultural. Del estancamiento econémico de principios del neolitico se salié mediante avances revolu- cionarios en fa agricultura, el transporte y la elaboracién de instrumentos. fo La «agricultura» basada en el arado de los campos sustituy6 a la shorticultura» basada en el trabajo con la azada de pequefias parcelas. Un arado arrastrado por bueyes permitia a los agricultores labrar gran- des campos, abriendo el suelo para extraer de él reservas de nutrientes. Los animales de tiro también producen abono para fertilizar el suelo. «Los planes de irrigacién llevaron agua a tierras dridas. Cuando las comunidades de agricultores se organizaron para cavar, mantener y poner en funcionamiento redes de diques, canales y esclusas, compen- saron asi el riesgo de lluvias irregulares y pudieron cultivar permanen- temente tierras fértiles. Los planes de drenaje, por otro lado, convirtie- ron ciénagas en campos, permitiendo el cultivo de tierras ricas en nutrientes alli donde antes no existia nada. También ahi era necésario el trabajo en comin, tanto para excavar los canales como para mante- nerlos limpios. El transporte por tierra se transformé con la invencién de la rueda y la eria de animales de tiro (bueyes, asnos, caballos y camellos). El cargamento ya no se limitaba a lo que un ser humano podia transportar sobre su espalda. El transporte fluvial y maritimo se transformé con la utilizacién de las velas, que permitian aprovechar la energia edlica para sustituir (o complementar) la potencia muscular de los remeros. Los instrumentos hechos de piedra, huesos y madera tienen un li- mite: solo se pueden moldear tallandolos, y una vez que se rompen hay que prescindir de ellos. Los metales parecian mAgicos en comparacién con esos materiales. Se podian fundir, mezclar y moldear en formas muy diversas, Al enfriarse se hacian sdlidos, duros y duraderos, y no habia desperdicio: el metal sobrante se podia reciclar indefinidamente. El primer metal con el que se trabajé fue el cobre, y mas tarde sé mezclé con otros para obtener aleaciones mas duras. Hace 5.000 afios CAZADORES-RECOLECTORES Y AGRICULTORES-PASTORES 33 se mezclaba con estafio para obtener bronce; durante los dos milenios siguientes, este fue el material preferido para fabricar armas, orna- mentos y articulos de lujo. La tecnologia metalirgica era totalmente nueva. La ceraémica era ya antigua, pero ahora se desarroll6 mas rapidamente con la introduc- cién del torno de alfareria, con el que se podia obtener una vasija itil —y, si se deseaba, de mayor calidad y helleza— en una fraccién del tiempo que llevaba hacerla moldeando el barro a mano. : inco mil afios una serie de innova- de. ‘los. agricultores . ¥. y,ganaderos en ciones transformaron al trabajo Asia occidental. Se obtuvieron nuevas tierras mediante el riego y el j fabraba mas Facilmente el atado y Ta tierra mejoraba Sanos metaltingicos ampliaron la etaees '¥y los alfareros utilizaban tornos para fabri- car més y mejores recipientes. Animales de tiro, vehiculos con ruedas y veleros permitfan transportar pesadas cargas y comerciar con distintos Bienes. Aunque muchas de las nuevas ideas se originaron en Asia occiden- tal; algunas se importaron de otros lugares. Los némadas de la estepa de Asia central pudieron ser los primeros en domesticar el caballo y en construir carros de dos rnedas. Los metaliirgicos europeos estuvieron ala cabeza de su artesania. Las buenas ideas arraigan pronto. Los mé- todos agricolas mejorados de finales del neolitico se difundieron rapi- daimente de Asia occidental a Europa. En regiones més alejadas se pro- dujo un desarrollo independiente en fecha mas tarda, Los chinos, por ejemplo, inventaron la carretilla, los cultivos en terraza y el trasplante de plantulas de arroz. Las nuevas técnicas trajeron consigo cambios sociales. La econo- tnia poco tecnificada de principios del neolitico no requeria apenas tra- bajo especializado: todo el mundo participaba en las tareas habituales. Pero el mundo més tecnificado de finales del neolitico, el calcolitico (Edad del Cobre) y la Edad del Bronce dependia de miltiples especia~ listas. Se necesitaban artesanos expertos para fabricar arados, carros y barcos. Los alfareros producian incesantemente vasijas con sus tornos acambio de una participacién en la produccién agricola. Los metaltir- gicds tenian que pasar por un largo aprendizaje para conocet los miste~ tios de la fusion, la forja y el moldeado. La especializaci6n separé el trabajo del hogar. Los comerciantes recorrian largas distancias con valiosos cargamentos de cobre, obsi-