Este es el mes de los padres y por ello voy a hablar de esta figura tan importante en la vida de todo

ser humano.

Primero que todo. El padre es quien es, y es suficientemente grande, aun cuando no se haya
quedado con nosotros.

Era ese y no otro el que correspondía a nuestro ser. Ese hombre ha dejado algo inmenso en el
vientre de nuestra madre que ha necesitado nueve meses para gestarse. Algo que nos hace únicos
e irrepetibles.

Segundo, la madre es la que le da el padre a los hijos. No importa como sea ese hombre. Ni bajo
que circunstancias haya sido concebido el niño. La madre debe decirle al hijo que puede mirar a su
padre. Porque aunque este esté ausente el existe y lo ama.

Un niño no tiene por que cargar las culpas de los adultos y mucho menos con asuntos que no
entiende.

Por eso mi invitación ahora es que cada madre ponga a su hijo en paz con su padre. Que acepte
que fue suficiente lo que le dio y que cualquier cosa de la que ella se arrepienta es su asunto y no
de los niños. Que acepte que sus hijos tomen de sus padres sin sentirse traicionada

Sin duda estará aportando todo para un mundo mejor

Invito a las madres a dejar de utilizar los niños como armas de sus guerras y a los padres los invito
a dejar de aprovechar estas situaciones para evadir sus responsabilidades

Todos tenemos la intención de mejorar el mundo. Empecemos por lo primero. Nuestra casa