1.- Lograr un mejor conocimiento de estos factores mediante la centralización y
el mejoramiento de la información relativa a consumos y a los mercados internos y externos (realizar encuestas permanentes). La centralización y el mejoramiento de la información sobre la producción (normalizar las estadísticas; mejorar y actualizar permanentemente los datos relevados).
2.- Convertir al consumidor en el protagonista ante la importancia del etiquetado
para el consumidor, las empresas deben preguntar a sus propios consumidores si entienden la información que contienen las etiquetas de sus productos. Identificar en etapas tempranas del proceso de etiquetado lo que el consumidor entiende, valora y espera de la información contenida en la etiqueta adquiere cada vez una mayor importancia para la diferenciación de sus productos.
3.- Deberíamos considerar la adopción de medidas que, cuando menos,
mantengan el nivel de satisfacción del cliente, si no bien tratar de elevarlo constantemente. Un cliente satisfecho es un cliente fiel, y un cliente fiel se convierte en un vocero de tu marca o negocio, promoviéndolo hacia otros ambientes y, directa o indirectamente, recomendándolo a otros.