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PROYECTO FINAL-G6 - Microbiologia
PROYECTO FINAL-G6 - Microbiologia
MAESTRÍA EN AGRONOMIA
MENCIÓN EN MANEJO DE SUELOS PARA LA PRODUCCIÓN AGRÍCOLA
Autores
ÍNDICE GENERAL
I. INTRODUCCIÓN .......................................................................................................................... 4
1.1. Planteamiento del problema ............................................................... 4
vegetal 8
banano 11
ÍNDICE DE TABLAS
I. INTRODUCCIÓN
Las plantaciones de banano se pueden divisar por todo el territorio ecuatoriano, gracias a las favorables
condisiones climanicas que el Ecuador presenta para el cultivo de plátano, banano y otras frutas exóticas
(PROECUADOR, 2015) . El banano se encuentra dentro de los cuatro productos más cultivados a nivel
mundial. En nuestro país la producción nacional del 2014, incrementó en 27.36% con respecto al año
2013, con una tendencia creciente de la producción alcanzando en el año 2014, 769,442 t. (MAGAP,
2014), generando más de 1.250 millones de dólares al año en divisas (Chávez-Velazco & Araya-Vargas,
2009).
La producción bananera tiene lugar en un complejo sistema agrícola que requiere de minerales que
interancionan dinamicamente entre si, esenciales para los cultivos entre ellos el fosforo. Debido a que el
P se mueve muy poco, en casi todos los suelos agrícolas, las pérdidas por lixiviación al manto freático, la
escorrentia superficial, la erosión y la fijación en formas no disponibles influyen en el balance del P
disponible. De acuerdo con lo anterior, el P se considera nutriente limitante en estos suelos y, dados los
altos requerimientos de las plantas para su desarrollo y crecimiento, se hace necesario el uso de fertilizantes
de síntesis químico para obtener mejores rendimientos (Fixen, 2014).
La magnitud de respuesta del banano a la fertilización, no es uniforme en todos los suelos, sino que
depende del contenido o potencial nutricional de cada suelo, de las características de las arcillas
dominantes en el perfil, tambien a los elevados costos y los efectos ambientales negativos causados por
la aplicación de fertilizantes; obligan a buscar alternativas para satisfacer los requerimientos de P de los
cultivos, a través del uso de materias primas menos costosas y ambientalmente amigables (Espinosa,
2008).
La compactación del suelo es un problema muy importante en agricultura moderna. Afecta la condición
física del suelo, en la aireación, la resistencia mecánica, y la disponibilidad de agua además y tiene
efectos adversos sobre el crecimiento de la planta. La compactación reduce el espacio poroso, e
incrementa la densidad aparente. Por lo tanto, la densidad aparente y porosidad total son los indicadores
de más uso frecuente para describir el estado de la compactación del suelo (Kaufmann, Tobias, &
Schulin, 2010).
5
El manejo de este problema requiere aplicaciones de nutrientes en forma más eficiente y económica,
utilizando los resultados de análisis de suelos y los niveles óptimos de los elementos importantes para los
rendimientos del Banano. La alternativa mas viable en estos últimos años ha sido el uso de
microorganismos solubilizadores de fosfato (MSF), los cuales emplean varias estrategias para solubilizar
el P no disponible en el suelo (Cisneros & Prager, 2015). Entre los MSF se encuentran las bacterias y los
hongos solubilizadores de fosfato (BSF y HSF), los cuales convierten los fosfatos insolubles en formas
solubles, a través de procesos de acidificación, quelatación, reacciones de intercambio y producción de
ácidos orgánicos de bajo peso molecular: ácidos cítrico, glucónico, 2-cetoglucónico, succínico, glicólico,
láctico, fumárico, fórmico, acético, butírico, isobutírico, valérico e isovalérico (Vélez & Orellana, 2010).
1.2 Justificación
El banano es un fruta que por sus propiedades nutricionales excepcionales, ha ganado en los últimos años
importancia mundial por ser considerada el alimento idóneo que contribuye a la seguridad alimentaria
del planeta (FAO, 2011). A pesar de la aplicación de técnicas e insumos de alto costo, el uso de
variedades mejoradas y resistentes a enfermedades, en las plantaciones comerciales de banano se ha
registrado una reducción considerable en la productividad, debido al cambio y deterioro acelerado de las
propiedades físicas, químicas y biológicas del suelo (Villarreal-Núñez, Pla-Sentis, Villaláz-Perez,
Rosales, & Pocasangre, 2013).
El plátano es un producto que generalmente se encuentra asociado al cultivo de café y/o caña, por ende
tiene una tradición que lo hace de gran acogida por la población, además que contribuye a la seguridad
alimentaria de la misma. La ubicación de este cultivo en suelos con buenas condiciones biofísicas, hacen
que se perfile con un gran potencial para su producción y comercialización en mercados que superan el
nivel local (MAGAP, 2014).
1.3 Alcance
El clima y el suelo determinan el éxito de la producción en las fincas bananeras (Castañeda, Jaramillo,
& Cotes, 2014). La compactación del suelo es un proceso de densificación en el que se reducen la
porosidad y la permeabilidad, aumenta la resistencia y se induce muchos cambios en el tejido del suelo
y en diversas características de comportamiento, ignorar las condiciones óptimas para las raíces de las
plantas de banano ha dado lugar a pérdidas económicas sustanciales, ya sea de forma abrupta o
progresiva, dependiendo del grado de impacto (Soane & Van Ouwerkerk, 1994; Gauggel, Sierra, &
Arévalo, 2005).
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1.4.2 Hipótesis
Se planteó la hipótesis de que las características físico-químicas del suelo y biométricas del banano en
relación a las áreas de alto y bajo rendimiento, si se ven afectados por el uso microorganismos
solubilizadores de fosforo. Al menos unas de las variables se correlacionaran entre sí.
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II REVISIÓN DE LITERATURA
2.1 Antecedentes
Las plantaciones de plátano se pueden divisar por todo el territorio ecuatoriano, gracias a que el clima
de Ecuador es beneficioso para el cultivo de plátano, banano y otras frutas exóticas. En el Ecuador, el
plátano forma parte de la canasta básica familiar, al ser la materia prima de deliciosos platos tradicionales
sobre todo de la región costa (PROECUADOR, 2015). Los resultados obtenidos en el estudio de
Cisneros y Sanchez de Prager (2015) menciona que Varios estudios han evidenciado la capacidad
solubilizadora de fosfatos por diferentes especies microbianas. La variación de los datos puede depender
del género o especie del microorganismo, ya que existen microorganismos que poseen una mayor
actividad solubilizadora que otros.
La plantación de esta fruta ha ganado acogida en los últimos años, según datos de la ESPAC, en 2013 se
recuperó el área cultivada luego de una caída en 2012 (PROECUADOR, 2015). Anualmente en Ecuador
se cultivan cerca de 6 millones de toneladas de Banano, la mayor parte de las cuales para exportación.
Eso coloca Ecuador en el primer puesto en el mundo como exportador, ya que otros países, como China
e India, son mayores productores en términos absolutos, pero por otra parte tienen un enorme consumo
interno. El Ecuador es el primer exportador de Banano para la Unión Europea (Jerroll, 2014). A
continuación se presenta:
El Banano es una planta herbácea, perteneciente a la familia de las Musáceas, que consta de un tallo
subterráneo ( Cormo ó Rizoma ) del cual brota un Pseudotallo aéreo; el Cormo emite el Cormo emite
raíces y yemas laterales que formaran los hijos o retoños (AGROCALIDAD & MAGAP, 2016).
Morfológicamente, comprende tres fases: Vegetativa, de Plátano comprende tres fases: Vegetativa,
Floral y de Fructificación (AGROCALIDAD & MAGAP, 2016).
Entre los factores ambientales que intervienen en la producción del Banano se hallan: Temperatura,
Agua, Luz, Viento y Suelo.
2.1.1. Efecto de las caracteristicas fisicas y quimicas del suelo en el crecimiento vegetal
El sistema agrícola se define como un continuo donde todos los procesos están interrelacionados y el
estado hídrico de las plantas dentro del mismo está condicionado por la demanda climática, las
características del cultivo y las propiedades hidráulicas del suelo que definen el flujo del agua, en
particular por su conductividad hidráulica (Rodríguez & López, 2014).
Por lo tanto, el suelo con cada uno de los componentes que lo forman ya sea en su función química, física
o biológica, es un recurso natural fundamental para la agricultura como soporte de los ecosistemas
naturales, así como del ciclo del agua y de los elementos químicos, incluyendo carbón, nitrógeno, y
fósforo. Por ello, para que un suelo produzca bien debe contener todos estos componentes en una
proporción bien balanceada tanto en cantidad como calidad (Rosales, et al., 2006).
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Las propiedades físicas humedad gravimétrica, densidad aparente, resistencia a la penetración, materia
orgánica y textura determinan el movimiento y retención de agua; así mismo, mantienen disponibles los
elementos nutritivos para un adecuado desarrollo de la vida en el suelo. Este último es un cuerpo natural
formado por mezclas de partículas orgánicas e inorgánicas, que como recurso natural ha sido objeto de
estudio durante muchos años, el cual es susceptible a los continuos procesos de labranza, sobrepastoreo
y obras de infraestructura inadecuadas, que pueden deteriorarlo y erosionarlo (Becerra, Madero, Herrera,
& Amézquita, 2005).
Los factores que afectan directamente en crecimiento vegetal son el contenido de agua, tasa de difusión
de oxigeno, temperatura y resistencia mecánica del suelo que influye con la emergencia de las plántulas
y el crecimiento radicular, esta última directamente relacionada con el grado de compactación del suelo.
Entre los factores que alteran indirectamente el crecimiento radicular se puede listar, la densidad del
suelo, la textura, la estructura, la estabilidad de los agregados y la distribución de los tamaños de poros
(Carolino & Gomes, 2005).
Las raíces respiran, consumiendo oxígeno y emitiendo dióxido de carbono. Para que el metabolismo
vegetal sea adecuado, es necesario el intercambio gaseoso entre las raíces y la atmosfera, fenómeno
denominado aeración del suelo, está asociado a la porosidad la continuidad de los poros (Carolino &
Gomes, 2005). La longitud de la raíz es la variable de crecimiento de las plantas más sensible a la
compactación del suelo, no obstante el comportamiento es variable entre las especies de plantas (De
Oliveira, Keisuke, Veras de Lima, Rodrigues, & Pires, 2016).
La fertilidad del suelo, la textura y la estructura son importantes para la agricultura porque determina la
mayor o menor facilidad en el trabajo de la tierra, la resistencia del suelo, la erosión, la capacidad de
infiltración del agua, las condiciones de desarrollo de las raíces, la temperatura del suelo, la actividad de
los organismos (bacteria, hongos, lombrices, etc.), la circulación del aire y del agua y muchas otras
cualidades (Rosales, et al., 2006).
La compactación del suelo afecta las condiciones físicas del suelo, la aireación, la resistencia, y la
disponibilidad del agua y tiene efectos adversos sobre el crecimiento de planta. La densidad aparente es
el indicador de uso más frecuente para describir el estado de la compactación del suelo. Sin embargo,
este parámetro carece de una relación funcional directa con el crecimiento de planta (Kaufmann, Tobias,
& Schulin, 2010).
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La mayor actividad de los microorganismos se realiza desde la superficie del suelo hasta unos 20
centímetros de profundidad, las colonias de microorganismos Permanecen adheridas a las partículas de
arcilla y humus (fracción coloidal) y a las raíces de las plantas que les suministran sustancias orgánicas
que les sirven de alimento y estimulan su reproducción. Estas exudaciones dependen del buen estado
nutricional de la planta y así favorecen el crecimiento de los microorganismos que son importantes para
ella. Su actividad y desarrollo están asociados a la disponibilidad de substratos a transformar.
La colonización de algunos grupos microbianos sobre las fracciones orgánicas e inorgánicas, dependen
de la función que se esté cumpliendo en la transformación (degradación de carbohidratos o de proteínas,
amonificación, nitrificación, oxidación, reducción, mineralización, solubilización). Por lo tanto, mientras
algunos microorganismos (Cisneros & Prager, 2015)
Según Cisneros y Prager (2015) se demostró inicialmente que la actividad microbiológica en la rizosfera
podía disolver P poco soluble e incrementar el crecimiento de las plantas. Posteriormente se demostró
que muchas especies bacterianas y fungosas tienen actividad solubilizadora de P. En forma consistente,
se ha señalado incrementos en la biodisponibilidad de P cuando existen aumentos paralelos en la
actividad microbiana del suelo. Varios estudios han puesto en evidencia la capacidad solubilizadora de
fosfatos por diferentes especies microbianas (Khan et al., 2007; Khan et al., 2010, Zaidi et al., 2009).
Entre las bacterias destacan los géneros: Pseudomonas, Bacillus, Rhizobium, Burkholderia,
Achromobacter, Agrobacterium, Microccocus, Aereobacter, Flavobacterium, Enterobacter, Pantotea,
Klebsiella, Rhodobacter, Arthrobacter, Serratia y Erwinia; mientras en los hongos se mencionan
principalmente, Aspergillus, Penicillium, Trichoderma, Fusarium y levaduras.
Además, en comparación con las bacterias, se ha registrado que los hongos poseen, en general, mayor
capacidad de solubilización de P, sin embargo, la concurrencia de diferentes actividades metabólicas
bacterianas que redundan en beneficio de las plantas, ha incrementado el interés en su estudio. Entre los
mecanismos ampliamente aceptados como responsables de la solubilización del P mineral se tienen la
producción de ácidos orgánicos y la producción fisiológica de protones, y la producción y excreción de
fosfatasas ácidas para la mineralización del P o. Xanthomonas campestris fue registrada hace poco y por
primera vez como solubilizador de fosfatos (Cisneros & Prager, 2015).
2.1.3. Efectos de las caracteristicas quimicas y fisicas del suelo en el cultivo de banano
Se puede afirmar sin duda que el clima y los suelos determinan el éxito de las empresas productoras de
banano. En la mayoría de los casos, los factores climáticos son más fáciles de determinar; Sin embargo,
el componente del suelo es mucho más difícil de caracterizar debido a la variación de las propiedades
morfológicas, físicas y químicas del suelo dentro de un área dada (grande o pequeña) bajo el mismo
clima (Gauggel, Sierra, & Arévalo, 2005). Para suelos bananeros se considera que valores de densidad
aparente (Da) mayores a 1,30 g cm -3 indican un grado de compactación moderada, siendo optimo que
este valor se encuentre inferior a 1.5 g cm -3 (Arias, Mata, Alvarado, Serrano, & Laguna, 2010; Gauggel
& Gauggel, 2010).
Actualmente los esfuerzos para tratar de comprender los procesos que ocurren en el suelo, han sido
enfocados principalmente en las propiedades físicas y químicas y de sus relaciones con algunas
características especiales como la topografía y las condiciones climáticas predominantes, no obstante,
las propiedades biológicas y el desarrollo radical de la planta juegan un papel determinante en la
expresión del potencial productivo del cultivo de banano y son elementos claves para explicar las
complejas interacciones del suelo y su rizosfera (Pattison, et al., 2004.)
Similar a lo demostrado por (Villarreal-Núñez, Pla-Sentis, Villaláz-Perez, Rosales, & Pocasangre, 2013),
en suelos bananeros de Panamá, también donde también encontraron que la materia orgánica fue uno de
los indicadores más sensibles al manejo que ha recibido el suelo a través del sistema tradicional de
producción, influenciando directamente otras propiedades.
Se ha sugerido un efecto de las características físicas y químicas del suelo y la presencia de nematodos
en banano, donde las características físicas (contenidos de arena, limo y arcilla) en un 50 %
correlacionaron ya fuera con el peso de raíces o número de nematodos, mientras de las químicas
solamente se encontró correlación en 15 % de las relaciones estudiadas. Donde se deduce que las
características físicas tienen mayor afinidad con el desarrollo radical y la invasión y daño inducido por
los nematodos. Al aumentar el contenido de arena disminuyó el peso de raíces y aumentó el número de
nematodos (Chávez-Velazco & Araya-Vargas, 2009).
Para la medición de la calidad de suelos bananeros (Rosales, et al., 2006), indican como indicadores del
componente químico del suelo; pH, Al, acidez intercambiable, Ca, Mg, K, suma cationes, Ca/Mg, Ca/K,
Mg/K, %sat K, %sat Ca, P, Fe, Cu, Zn, Mn, % M.O., % AlFe, % fosfatos, % sat bases; en los indicadores
del componente físico del suelo: Profundidad efectiva, textura, %arena, % limo, %arcilla, resistencia
tangencial, resistencia a la penetración, densidad aparente, densidad de partículas, infiltración, porosidad
y en los indicadores de producción Circunferencia planta madre, numero de manos/racimo y altura del
hijo.
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En resumen las técnicas y procedimientos para la evaluación de las variables se muestran en el Cuadro
6.
Capacidad de intercambio
catiónico
Características biométricas del banano
Circunferencia de la madre Medición de la circunferencia del
(seudotallo) seudotallo a 1 m del suelo (Serrano, 2003)
Altura del hijo Medición del tamaño del hijo de sucesión (Serrano, 2003)
Para el presente estudio se empleará un diseño de bloques completamente al azar con seis tratamientos
(T1= Aplicación de Paecilomyces; T2= Aplicación de Trichoderma; T3=Aplicación de Paecilomyces +
Trichoderma; T4 Aplicación de Bacillus; T5= Aplicación de Químico; T6= Control) con 4 repeticiones
o bloques, como se muestra en el Cuadro 7. El modelo estadístico del diseño experimental que se
utilizará es el siguiente:
Dónde:
μ = Media poblacional. ( )ij
= Efecto de la interacción de los factores
i = Efecto del factor A. AxB
El análisis de datos se realizará mediante el análisis de la variancia (ADEVA) y las medias se separaran
mediante la prueba de Tukey (P≤0,05), con la utilización del paquete estadístico INFOSTAT. Se
emplearán métodos estadísticos adicionales como el análisis en componentes principales, el análisis
factorial discriminante, la clasificación automática o análisis de conglomerados (clustering),
correlaciones y regresión lineal conforme lo realizado por (Salamanca & Sadeghian, 2005; Villarreal-
Núñez, Pla-Sentis, Villaláz-Perez, Rosales, & Pocasangre, 2013).
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exploratorio de suelos tomando muestras con un barreno, para seleccionar los 1000 m2 que presenten la
menor variación de suelos posible en cada área de estudio, en estas parcelas se seleccionarán 20 plantas
con racimos prontos a cosechar (12-13 semanas) para determinar la circunferencia de la planta madre,
altura del hijo y numero de manos en el racimo, en cada parcela se realizará una calicata (60 x 60 x 60
cm) frente al hijo de una planta con racimo de 0 a 1 semanas de edad (30 cm de distancia del hijo, en la
zona de fertilización) donde se recolectara muestras a intervalos de profundidad de 0-15; 15-30; 30-45 y
45-60 cm para determinación de las características físicas y químicas además se determinará la
profundidad efectiva barrenando hasta 1,50 m y se determinará el peso fresco total de las raíces para lo
cual se excavará una planta, y se colectaran y pesaran todas sus raíces. En concordancia a lo descrito por
(Villarreal-Núñez, Pla-Sentis, Villaláz-Perez, Rosales, & Pocasangre, 2013).
Parámetros Cantidades
Número de parcelas experimentales 24
Área de parcela experimental (m2) 1000
Área total (m2) 24000
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IV MARCO ADMINISTRATIVO
4.1 Presupuesto
Considerando los rubros de operatividad del trabajo de campo el presupuesto para la presente
investigación es de $ 2.510,77. El detalle de los rubros se muestra en el Cuadro 10.
Actividades
Análisis de áreas Inicio de la toma
Presentación de
de baja y alta Preparación de de datos
Mes Semana Delimitación de Análisis de Elaboración de informe final para
productividad materiales y experimentales y
las parcelas resultados informe final inicio de tramites
para definir áreas equipos envío a
de legalización
experimentales laboratorio
1
2
Ene
3
4
5
6
Feb
7
8
9
10
Mar 11
12
13
14
15
Abr
16
17
18
19
May 20
21
22
23
24
Jun
25
26
27
28
Jul
29
30
31
32
Ago 33
34
35
36
37
Sep.
38
39
40
41
Oct
42
43
44
45
Nov 46
47
48
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V. BIBLIOGRAFÍA
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