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NORBERT LECHNER ‘SEnoI0 ¥. 8. DE FIERO LOS PATIOS INTERIORES DE LA DEMOCRACIA SUBJETIVIDAD Y POLITICA FONDO DE CULTURA ECONOMICA CHILE DE LA REVOLUCION & LA DEMOCRACIA LUN CAMBIO DE PERSPECTIVA, En los afos 60 el tema central del dabate politica intelectual fen América del Sur es la revolucidn, La situacin de la region, ‘arscterizada por Un ettancamiento econémica en el marco Joe une estructura social tradicional y, por otra parte, por une fereciente moviizscién popular, et interpretada como un es ado. prerrevolucionario. Contrastando los cambios rapidos }y rodicales de la Revolucién Cubana con los obsticulos que Joncuentra la modernizecién desarralista, se constata la invia lad del modelo capitalsta de desarrollo en América Lati fay. en consecuencia, la “necesided histarica” de una rupt revolucionaria. Este perspective adqulere tal fuerza que in- cluso un partido de centro como la democraciaeristiana pro pone ung ‘‘revolucién en libertad "en Chile, La revolucion aparece no s6lo como una estrategia neceseria frente aun dea- mitico "desarrollo del subdesarrollo”,” sino también como tna respuesta respaldeda por la teoria social,” El debste inte ” e DE LA REVOLUCION A LA DEMOCRACIA lectual gira en torno a las “situaciones de dependencia”, sea en una interpretacién historico-estructural del imperial mo y de las constelaciones sociopoliticas en los diversos palses," sea en una version mas doctrinaria que plantea "so: Eialismo 0 fascismo’™ come la alternativa de las sociedades 7 Si la revolucién es el ej¢ articulador de la discusion lati: Jnosmericana en la déeade del 60, en los 80 el tema ceni les la democracie. Al igual que en ei period enterior, Ia movi: Tizacion politica se nutre Tuertemente del debate involectual ‘Su inicio —al nivel regional data dala conferenia sobre “las Condiciones sociales de la democracia” que organizé el Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales {CLACSO) en 1078 en Costa Rea, Esta fur la ditima intervencion de Gino Germeni y lo primera salida internacional de Rail Alfonsin.® Detde entonces toda la atencin se cuntra en los procesos de transici6n que de manera gradu (Bresi, Uruguay), acelerada [Argentinal 0 estancads (Chile) conducen a la instauracion de Instituciones democréticas, elegando los obsticulos de |e consolidecion democraties (Pens, Bolivia) a un segundo plano. Tras la experiencia avtoritara, fa demoeracia aparece mis como esperanze que come probleme, Cabe entorces preguntarse si los sctuales vientos de democratizacién son mas” coyunturales oi inician una wanstormacin soc ‘Antes de resehar el desarrolio del debate intelectual de los dltimos aflos, quiero destacar lac dificultades del intento, Independientemente del inevitable sesgo personal y nacional 2 Sra Mw kaa Ene: Oaemtry aerate Abia at ELA REVOLUCION & LA DEMOCRACIA 1 del autor, resulta diffll reconsteuir un debate latinoamerice no. Se trata, por un lado, de la heterogeneidad extructu por asi decir. del carécter sui generis de la region, qua requie. fey a la vez refuta os concaptos elaborados en les sociedad apitaistas desarolladas, Junto con las dificultades estrict rales para conceptualizar, hay cificultades histricas para ge neralizar; un mismo fenémene (como por elempla la demo- ‘ratizacion) tiene diferente significado en Venezuela, Pert 0 Uruguay. Tanto la diversided inestabilided de los procosos sociales como las distotas experiancias hstéricas repercuten sobre la produccién intelectual, que tlende » ser disparss ¥ Volatl. ¥ si ademas consideramos ia ausencia do revisas de teoria social de circulacion regional resulta sorprendente que pueda hablarse de uns diseusion latinoamericara come Jo es, en efecto por su inciduncta sun en otros pafees— debate que se dosarrolis en Brasil y el Cona Sur sobre los rocesos de democrati2aci6n.” 2. LA EXPERIENCIA DE NUEVO AUTORITARISMO La porsnectiva de Ia democracis nace de In experiencia sutoritarla en los afios 70. A partir det goipe militar de 1973 £P Chile, los anteriores goipes en Brasil | 1964), Pert (1968) ¥ los posteriores en Uruguay (1973) y Argentine (1976) ‘dquieren una signiticacion comin. Sin jgnorar fos rasgos fespecificos en cada pais, particularmente en Pers bajo Vela: co Alvarado," al nuevo autoritariemo ae constituye como une ne RSE a Ri Mescn deSccl, Eee @ 8, ene, Henry: Erato gade apie, Le, 877 ey ELA REVOLUCION A LA DEMOCRACIA, ‘exporiencia compartida: experiencia de una violencia sstemd- tice, Ge un orden programéticamente autoritario y excluyen: El objetivo de los golpes ne es tanto el derrocemien- 10 de determinado gobierno como la fundacion de un nuevo ‘arden. Se busca imponer una nueva normatividad y normal “dad mediante procedimientos propios # une “légiea de ‘guerra: la aniguilacién del adversario y Ia abolicién de las ‘erences. De ah un primer rasgo de la discusién inteloc- ‘ual pos-73: la denunele del sutoritarismo en nombre de fos derechos humanos. Los inteleewales no luchan en detensa de lun proyecto, sino por el derecho a la vida de todos. Y esen tomo a los derechos humanos que se organiza una solidaridad internacional, proyectando @ los intelectuales mas alla de us fronteras. La erica intelectual ya_no invoca el futuro la re- volucién) contra ei patado (6! subdesarrllo). Por el contra: Flo, asume la defensa de una tradieién en contra de la ruptura violenta. Junto # la critica se inicia una autocr/tea al anterior Drotagonisme revolucionario (del cual Régis Debray fue le fencarnacién més conocida). Tiene lugar une nitide rupture con la estrategia guerrliera.® 1. La gran ensefanza de los golpes militares oF que o! {cialismo no puede (no debe) ser un goipe.*® Pero la principal preocupacion del debate intelectual de esos aflos es el andisis de los origenes y 1a netursleza del ‘nuevo régimen autarizaria. Muy temprano queda claro que no ‘m trata de un fascismo,"” nosion rolegada al trabajo part! macnn chtnouresen América tine’ Revie Maxizane de Sosilopta 1877 DE LA REVOLUCION A LA DEMOCRACIA a sista de soitecion. A pari del texto seminal de Gullarmo ‘GrDonrnll sobre ei Estado Burocritico Autoritaio, 8! Es. {ao doviene ol ee agltinador de le iwestiacion cal et {ode ln wgi6n. Tanta la Revista Mexicana do Socioogia™® omo_algunar antologias'* ofrecn un panorama de a 8x {anus producrién, varias de excelente nivel Zor qué intarrumpe, por 1981, #1 estudio del Ex tado? No existe un balance eriico del debate, to cu stra Ir esata ‘autorrefienion do low intelectals ¥, por ence, tas difcltades 9 conformar una tradiion intelectual. Post Binmnento la Gacasion sobre al Estado se spot on tanto con tev (ial que anteriormente Ios extudios sobre ta depen denci un factor de "moda" ai Estado Burocratco Autor {aro es una “nowded” oe la eunlhey Que dar cuenta, Une vez que aparece corsolidade y adeuiriondo duracon, se bus {Er toora de fn innovacion, sea, la transformacién del ert {Go de cons exrtnte Ello ox auger une razon ms proton 4: para el s0bito deaplaraiento Gel debate a rice al E+ ado Autoritario desemboca en la critica a la concepcién ‘statista de la politica, vigente hasta entonces. En efecto, ia Freocupscién por el desaroll rolls ir lar con el énfa. ene Estado como al principal agente del dearolo; frente 2a naufcincia 0 france feeedad de Ia "democraia burove $2" se atibuta al Etado la responsabilidad por soluconar los ‘ew Rete Mencan ge Soilnta VOPPIA) nn A 78 a 18 Rite Micra Solo. 197/1 2 197859 & n DE LA REVOLUCION A LA DEMOCRACIA problemas socisles. Particularmente en las izqulerdas predo- fminabs Ta ide hegeliana del avance del Estado como desplie ‘gue de ta libertad:ampliando la intervencion estatal, la gente Se emanciparta de las condiciones de miseria en que se eneon trade alianada, Este imasinario colective se ve cuestionado por ‘ia omnipotencia y omnipresencia de Ia dictaaura militar. En ‘Amirica Latina e9 el Estado Autoritario (y no un Estado de Bienestar keynesiano) el Leviatan frente al cual se invoca Htortalecimianto de. la Sociedad Civil. De este modo, precisa trente el desarrollo del Estado (avtoritario) obliga a repensar Is formas de hacer politica ‘En parte, la reflexion sobre el autoritarismo prosigue en Jos estudios sabre el pensemiento neoliberal. Al respeeto eabe fnomo de lat estructuras partidistas en cada pais. Adauirien: do mayor autonomia respecto a las organizaciones politica, {a discusién intelectual (sobre todo en las izquierdae) logra eserroliar un enfoque més universaliste (menos instrumen- tal) 60 la potitica 3). Otro aspecto particularmente relovante para los in. ‘wlectusles de inquieeda fue la apertura intelectual. Los gol ‘pes militares desmistiicen la fe revolucionarie y hacen es tallar un marxismo dogmatizado (recudrdese la infivencia de Althusser y Poulentzas en los 60). De un mado cruel Yy muchas voces traumatico acontece una “crisis de paradig sma”, con un efecto benéfico empero: la ampliacton dal hor Zante cultural y la confrontacién con obras antes desdafadas © ignoradss. Es significativo que une editorial socialista te dduzca los escritos politicas de Weber y Carl Schmitt. La ro- ‘cepcién masiva de Grameci s mediados de fos 70, de Foucautt posteriormente y el actual interés por Habermas sefalan a (unes de las principales lecweas, Frecventemente se trata de DELA REVOLUCION ALA DEMOCRACIA 2s “ecturas de moda", sin provoear una apropiacién eritiea de los enfoques. Hoy prevalece elerto eclecticismo en que pus den mezciarse elementos de Max Weber, Agnes Hellar y Norberto Bobbio. Asi y todo, me parece ser un fonomend saludable en la medida en que tignifica el sbandono de txégesis 0 la “aplicacién” de una teor‘a preconstituide y se busca dar cuenta de determinads reslidad social En este contexto habria que situar el papel det mer. xismo. Aunque influyere en el pensamiento, econdmico (ostructuralismo"’) y sociol6gico ("dependencia"), unea sleanzé a tener arraigo masivo en la region. En paises con luna estructura predominantemonte agrari, marcada por ‘mundo de la hacienda, une larga historia de caucilismo y ‘golpes de Estado y la experiencia siempre actualizeds del Iimperialismo hace més sentido al enfogue leninista, visto, sin embargo, se tata de un sentido todavia tradicional fen tanto remite a uns verdad oculte que une revolucion po- drla develar y realizar. Hoy la compleja diterenciacién social fen América del Sur ya no permite conoebir la lucha por ls libertad y ta igualdad en términos esonciaistas Desde luego, s sigue ecitando el manual de Marta Hamecker,"® pero, en general, el uso de Marx ha perdido su connotacion cuasirreli- ior... ef caso de América del Sur (a diferencia de MExi 2 y América Central) quizé sea mis correcto hablar de un osmarxismo, al manos en el debate intelectual. Las crfticas de Laclau y‘Nun'® contra el reduccionismo o los endlsis eat, AEE umes Pole «lena rami, a, 1978 co DE LA REVOLUCION ALA DEMOCARCIA historicos sobre el denominado “desencuentro entre América Latina y Marx"? los avatares de un “marxismo latinoame: Feano”"® son una expecie de ajuste de cuentas con “Ios mar ismos” y simulténeamente intentos de actualizar esa tra ign ‘come punto de partide para pensar la transformacion emocratica de la sociedad. Haste shora estos esfuerzos de Tenovecion han quedado redueidos al Smbito intelectu ‘Contrando poco eco en los partidos de izquierda “d)_ Un cusrto punto a destacar es la reciente profesio- natizacién seademnion de 105 intelectusles, sea mediante a Gmplacion y modernizacién de la universided (Brasil), sea Justamente 2 la inversa, por su desplazamiento aun mercado Informal (contros privados) sumamente competitive, Ambas Stusctones aesleran los procesos de especializacién, borrén Gow la imagen tradicional del intelectual como creador ¥ transmizor del sentido de la vide social. Vuelve a.primar el tritigo, por sobre el profeta y le vocacién politica ya no se spoya én un cameroinise de militancia partis Para resumir él cambio del ambiente intelectual quiero enfatizar la nueva densidad del debate, bssada en un mayor Contacto intrarregional (especialmente en el Cono Sur), una fmayor disciplina acackémies y una mayor responsabilidad po Tieiee, A pesot del cardcter muchos veces erritico de lainves- tigecibn, of eonocimlenta de las distintas realidades nacions- Jer et Noy mucho mis profundo y extendide. Aunque suene paradojel, aun bajo circunstancias tan adversas como las chi DE LA REVOLUCION & LA DEMOCRACIA 2 Jonas, las iencias Sociales han tenido su mayor desarrollo fens ultima década, tanto por la diversidad temndtica y 1. fuera del andlisis como en torminos de productivida, Alrededor de 1960 y epeciaimente a parts de a criss economica spudizada en 1902, le noncion se dosplaca du {ontarsme hacia te'cemocratizacion, Em ol dabete sobre lo Iitenativ deroertien sobresion dos pasos que propor tne rnoveiGn dl peneamiento politico ltinoaericene or una parte une revalorieaciin de fo potitce, Lae

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