Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Los basureros pueden ser manejados de distintas formas: en primer lugar, tenemos
los “tiraderos a cielo abierto”, los cuales, son zonas donde simplemente se
acumulan los desechos, sin recibir ningún tipo de tratamiento.
problema de la basura, conduce a prejuzgar que éste se debe a que, en esencia, la
población es sucia y desaseada, ya que desperdiga los desechos, cuando en realidad
en el momento que usted “pone la basura en su lugar”, se originan una serie de
procesos que involucran problemas diversos y complejos, de difícil resolución, que
van, desde las formas de organización gubernamental para prestar este servicio,
pasando por la corrupción en su manejo a muy diversos niveles, por la explotación
y manipulación de un grupo de la comunidad que se dedica a estos menesteres,
hasta llegar a los problemas ambientales que la acumulación de estos desechos
provoca. Además del aspecto del desperdicio real que representa el abandonar
materiales que podrían ser reutilizados, lo cual repercute en una mayor y más
irracional explotación de los recursos naturales, tanto renovables como no
renovables.
El manejo de los desechos sólidos, se resume en un ciclo, que comienza con su
generación y acumulación temporal, continuando con su recolección, transporte y
transferencia, y culmina en el destino final de los mismos, que puede ser el reciclaje
de los subproductos útiles y su reutilización industrial, que con los sistemas
utilizados actualmente, no llega ni al 15%, o su disposición final en sitios destinados
para este propósito. Es a partir de esta acumulación cuando comienzan los
verdaderos problemas ambientales, ya que los basureros se convierten en focos
permanentes de contaminación.
Los impactos ecológicos, tales como polución del agua y el aire, también han sido
atribuidos a manejo impropio de los desechos sólidos. Por ejemplo, líquido de botaderos y
rellenos pobremente diseñados y operados han contaminado aguas superficiales y
subterráneas. En áreas mineras el líquido lixiviado de los botaderos de desechos puede
contener elementos tóxicos, tales como cobre, arsénico y uranio, o pueden contaminar
abastecimientos de agua con sales indeseadas de calcio y magnesio. Mientras la capacidad
de la naturaleza para diluir, dispersar, degradar, absorber, o disponer de otra manera de
sus residuos indeseados en la atmósfera, en los cursos de agua, y sobre el suelo es bien
conocida, los seres humanos no pueden exceder esta capacidad natural para la disposición
de sus desechos indeseables o se impondrá un desequilibrio ecológico sobre la biosfera.
Recuperación: se basa en la utilización del residuo generado en otros procesos distintos del que lo
produjo, este se puede introducir directamente o puede sufrir algún tipo de manipulación o
tratamiento. Tiene su fundamento en tres puntos:
El poder calorífico de los residuos que puedan usarse como fuentes de energía mediante
la combustión.
La recuperación de los componentes que pueden ser separados y usados por otras
industrias con fines diferentes el aprovechamiento directo de los residuos por otras
industrias. Estas técnicas pueden eliminar los costos de disposición.
Reducir los costos de materias primas y proporcionar ingresos por la venta de residuos. La
eficacia de estas técnicas dependerán de la capacidad de segregación de los residuos
recuperables asegurando una máxima recuperación del material recuperable.
Reciclado del amoníaco contenido en el gas procedente de la producción del ácido nítrico.
Reciclado de disolventes.
Utilización de los aceites de engrase usados como combustible para los hornos de cemento.
Tratamiento de las lejías bisulfíticas procedentes del blanqueo de la pasta de papel para su
posterior comercialización como materia prima.
Las sustancias capaces de producir la muerte de los gérmenes actuando sobre superficies
vivas o inanimadas se denominan desinfectantes.
Inmersión.
Loción y humedecimiento.
Pulverización.
Fumigación y vaporización.