Ciclo de vapor (Ciclo de Rankine y Ciclo de Carnot)
Ismael Santos González.
El ciclo de Rankine es el ciclo ideal que sirve de base al funcionamiento de
las centrales térmicas, las cuales, producen actualmente la mayor parte de la energía eléctrica que se consume en el mundo. La evolución de las centrales térmicas ha estado condicionada por la búsqueda de mejoras en el rendimiento térmico del ciclo termodinámico, ya que incluso pequeñas mejoras en el rendimiento significan grandes ahorros en los requerimientos de combustible. La idea básica detrás de todas las modificaciones para incrementar el rendimiento de un ciclo de potencia es aumentar la temperatura promedio a la cual el calor se transfiere al fluido de trabajo en la caldera, o disminuir la temperatura promedio a la cual el fluido de trabajo cede calor al condensador. Esto se consigue con una selección cuidadosa de las condiciones de operación de la caldera (presión y temperatura a la que genera el vapor), y del condensador (presión de operación), así como con la incorporación de recalentamientos entre diferentes etapas de expansión y calentamientos regenerativos del agua de alimentación. Esquema de una central térmica de vapor sencilla (Moran&Shapiro, Ed. Reverté). El ciclo ideal teórico entre 2 focos es el ciclo de Carnot (máximo rendimiento posible): dos procesos isotermos de intercambio de calor con los focos, y dos procesos adiabáticos para pasar de una a otra temperatura.
En la siguiente figura se muestran esquemáticamente las dificultades para
llevar a la práctica el ciclo ideal teórico: con un gas, es difícil realizar procesos isotermos de intercambio de calor (expansión y compresión isoterma); con un vapor esto se soluciona (los intercambios de calor isotermos se pueden realizar con evaporación o condensación isobara), pero los procesos de expansión y compresión adiabática de un fluCido bifásico tienen dificultades prácticas (procesos de cavitación).
Ciclo ideal teórico (de Carnot) con un gas o con un vapor: dificultades principales.
En la siguiente figura se muestra el ciclo ideal práctico con vapor, llamado
ciclo de Rankine. Se sustituyen los procesos isotermos de absorción o cesión de calor por procesos isobaros (que serán también isotermos en parte, por tratarse de un vapor). En un ciclo de potencia con vapor las etapas son las siguientes: 1–2: expansión adiabática en turbina. Hay un límite práctico en el título del estado 2 (por erosión de los álabes de turbina, debida a la presencia de gotas de líquido): x2 > 0,85. Aquí se produce la gran parte del trabajo del ciclo. 2–3: condensación isobara en condensador. El calor retirado se vierte al foco frío (refrigerante). Por razones prácticas, la condensación se efectúa hasta el final (líquido saturado). 3–4: compresión adiabática en bomba. El fluido comprimido es un líquido, no una mezcla bifásica. El trabajo consumido es muy pequeño, comparado con el obtenido en la turbina. 4–1: evaporación isobara en caldera. El calor se toma del foco caliente (gases de combustión de un combustible, o energía de fusión de uranio).
Ciclo ideal práctico (de Rankine) con un vapor: ciclo de potencia y ciclo frigorífico.