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¡Oh! Sariputra, los fenómenos no son diferentes al vacio, el vacio no es diferente de los
fenómenos. El fenómeno es vacio. El Vacio es fenómeno. El cuerpo, la percepción, el
pensamiento, la actividad y la conciencia son igualmente vacio. ¡Oh Sariputra! Todas las
existencias son vacio. No hay nacimiento ni muerte. No hay pureza ni impureza. No hay
crecimiento ni disminución.
Esta es la razón por la que en el espíritu del Bodhisattva, gracias a esta Gran Sabiduría, no existen
redes ni obstáculos, ni causas de obstáculos. No existe miedo ni temor, ni causa de miedo y
temor. De esta manera, el Bodhisattva se libera de las ilusiones, de las perturbaciones y de los
apegos y llega a la etapa última de la vida, el Nirvana. Todos los budas del pasado, presente y
futuro han obtenido la Suprema Liberación gracias a esta Gran Sabiduría. Por tanto, la Gran
Sabiduría es el mantra universal, el Gran Mantra resplandeciente, el mantra supremo, el mantra
incomparable, aquel que extingue todo tipo de sufrimiento. Es la verdad autentica sin error. Este
mantra proclamado por la Gran Sabiduría dice así:
GATE, GATE, PARAGATE Vamos, vamos, todos juntos, más GYATE, GYATE,
PARASAMGATE BODHI allá del más allá, a la orilla del HARAHYATEI, HARA SO
SVAHA Despertar. GYATE BOJI SO WAKA.
mismo le sucede a la percepción, al pensamiento, a la acción, a la conciencia. Sariputra, todas las
existencias son vacías. Son no nacidas, no extinguidas, no manchadas, no puras, y no aumentan ni
disminuyen.
Así en el vacio, no hay cinco compuestos, ni seis órganos de la percepción, ni seis objetos de la
percepción, ni seis conciencias, ni ignorancia, ni extinción de la ignorancia, ni vejez, ni fin de la
vejez, ni muerte, ni fin de la muerte, ni cuatro nobles verdades, ni sabiduría, ni provecho,
solamente nada que obtener.