Consumir nueces estimula la concentración, el rendimiento mental y la creatividad.
Por lo tanto, el consumo de nueces durante la infancia resulta excelente. Asimismo, se recomienda el consumo de nueces entre comidas a aquellas personas que tienen jornadas laborales superiores a 6 horas. Su ingesta diaria aumenta los niveles de serotonina. Esta hormona se relaciona a la felicidad y el placer. Las personas que padecen de depresión carecen de niveles de serotonina en su cerebro. Por lo tanto, el consumo de nueces ayuda a combatir la depresión. El consumo de nueces aumenta la sensación de saciedad. Esto hace que las personas ingieran menos porciones de alimentos. De esta manera, se estará favoreciendo la quema de calorías. El omega-3 presente en la nuez estimula la circulación sanguínea. Por lo tanto, este compuesto es capaz de prevenir enfermedades cardiovasculares. En el aspecto estético, el consumo de nueces resulta muy favorable para prevenir la aparición de varices o dilataciones venosas (que suelen aparecer en las piernas). Es recomendable el consumo de nueces para personas diabéticas. Esto debido a que dicho alimento regula los niveles de azúcar en sangre. Según los expertos, las nueces contienen propiedades anticancerígenas. Por lo tanto, su consumo ayudaría a prevenir y combatir el cáncer de mama y próstata. Las nueces también fomentan la fertilidad masculina. Es un alimento muy recomendado para hacerle frente a este tipo de problemas.