Finanzas extranjeras durante la década de 1930

Leguía fue capaz de retener cierta influencia en el Estado en cuanto a políticas financiera, pesar
de la crisis financiera de 1929-1932. El programa financiero establecido por el gobierno de
emergencia a inicios de la década de 1930 permitió sobrevivir a muchos agroexportadores.

Un factor de principal importancia en la recuperación económica del Perú fue la rápida adaptación
del algodón, en vez de la producción azucarera con el apoyo estatal. So abandono del patrón oro,
la introducción de control al tipo de cambio y la oferta de créditos “controlados” a los
productores e anti-inflamatorio ayudo a la tendencia en sustitución de cultivo.

El Segundo factor en importancia fue la suspensión de servicios y pago de los créditos extranjeros
en 1931 y el reemplazo de Lao mecanismos de créditos externo por los de crédito interno. Esta
reestructuración del crédito público fue ayudada por los bancos nacionales y por el Banco Italiano,
que tenia depósitos en exceso para colocar en el mercado.

La estrategia que siguieron los grupos de poder financiero extranjeros en el Perú durante los años
de crisis fue triple:

1° Los prestamistas extranjeros fueron cautos en los pagos de préstamos, esperando hasta que la
economía peruana se vea recuperada.

2° Hubo una consolidación y expansión de monopolios y oligopolios existentes y los Buenos

introducidos.

3° Los grupos financiera extranjeros trataron de estimular la importancia de maquinaria crear

incipiente pero costosa industrialización por sustitución de importaciones.

En 1930 la empresa multinacional petrolera canadiense International Petroleum Company (IPC)

deseaba asegurar un monopolio para la venta de crudo en el Perú, sin éxito en su primer intento;
sin embargo, debido a la falta de fondos para los pagos, el presidente Luis Sánchez Cerro aceptó el
préstamo de la IPC y con esto las concesiones de monopolio le fueron prontas otorgadas.

La insistencia de los grupos de poder extranjeros en la estabilidad políticas contribuyo a la

consolidación del régimen autoritario de Sánchez Cerro y su sucesor, el general Oscar R.
Benavides.

Algunos grupos oligopólicos extranjeros, como la Cerro de Pasco Corporation, el Banco del Perú y
Londres y la casa mercantil de Liverpool Graham Rowe, siendo esta ultima liquidada en octubre de
1931, experimentaron tiempos difíciles en el Perú durante los años de la d presión.

Se consideraba que un recomienzo del pago del principal y los intereses de los prestamos
extranjeros no era posible hasta que los precios de mercado de las materias primas peruanas
mejoraran y hasta que la estabilidad políticas permita una revisión en los gastos del gobierno.

Según fuentes, del total de la deuda externa de 105 millones de dólares a 6% de interés, los
peruanos debían aproximadamente 18 dólares por persona en 1933 entre una opinión estimada
de seis millones d personas. Adicionalmente, la deuda interna ascendió a 44 millones de dólares y
continuó aumentando luego.
En enero de 1935, J. Rafael Oreamuno, representante de los tenedores estadounidenses de bonos
peruanos, creyó que el tiempo para una discusión seria sobre el pago de la deuda no había
llegado aún. Mientras tanto el gobierno peruano se las había arreglado para colocar dos millones
de soles para el servicio de la deuda y dos millones más para el cumplimiento de la deuda pública.
Oreamuno fue de la opinión de que si le dejaba tranquilo en los siguientes dos años, el Perú iba a
estar en una mejor situación económica para ofrecer un mejor acuerdo sobre la deuda.

En 1937 Oreamuno creyó que el tiempo ya había llegado para que el Perú pague íntegramente
aquello que debía. El gobierno peruano, sin embargo, continuó colocando únicamente los 4
millones de soles, siguiendo el ejemplo de chile.

De acuerdo con los diplomáticos británicos en el Perú el Perú tenia dos obstáculos más
importantes en la formación de un superávit en las finanzas fiscales del Perú que pueda ser
asignado al pago de la deuda externa:

1. El extenso programa de desarrollo lanzado por el gobierno de Benavides para revitalizar la

economía
2. Las demandas de los diputados del Congreso peruano para desviar fondos a sus provincias
para propósitos incluso banales y decorativos.

Las dificultades para retomar el pago de la deuda externa continuaron hasta 1951 con
aproximadamente las mismas características.

El Banco Italiano, a diferencia del Banco del Perú y Londres, había orientado su política de
créditos a la expansión urbana y los servicios de mercado de Lima que estaban necesitados de
crédito en la década de 1920. El sector productivo que abastecía al mercado interno retomó
el crecimiento durante los años de recuperación de la década de 1930. El banco italiano se
volvió la and sólida institución en el sistema bancario peruano. Los ahorros y depósitos locales
fueron captados por el Banco Italiano, que también persiguió una política conservadora de
préstamos.

Además, el Banco Italiano cambió su nombre a Banco de Crédito en 1939 para evitar la
persecución política en tiempos de guerra, y es así que fue capaz de continuar siendo exitoso
en el negocio.