en ajedrez
Mark Dvoretsky
EDICIONES MERÁN
ID 2003. Mark Dvorel!.ky
<D 2003. Antonio Gude de la traducdón
O De cs1a edición:
Ediciones Merán
Apartado de Correos 13
02630 La Roda (Albaccle)
Tel¿fono: 902 403432
info@l~dicionesmeran.com
1mpresi1í11: Mi leg.raf
Impreso en E'>pafü1 - Pri111cd in Spain
JSBN:84-932593-3·0
Dcp6sito 1cga1: M-8752-2003
Nin~111l:1 r•nlt' Je l'.Ma publkm:i{ln. i11duido el di,eño de la .:11l>11!rta. puede ser rcprndudJa. ¡¡lmace-
naJ3 o tran~mitida e11 manern :ill!una. ni J>lll" ninsún m~dio. yi\ •ca el(ctrko. quimirn, mecanh:n.
1\p;icn. ;k graba.:it}n o de fotncopm. sin permi\ll prc\'it>. ~ pur ~·s.: rilo. del L'di111r.
La mfrncci6n de'º" derecho.• mcni:ionad<l!o puede ~cr con,ticutha lfe un d<'lito .:11111rn la propi<'diid
in1l·kc1ual 1m1~. ::!70 ~- ,.¡g.tiii:nr.-~ del Ciidij!o Penal l.
ÍNDICE
PRÓLOGO ................................................... 9
escribir dos libros más, que se ocuparán de investigar los problemas del
juego posicional y la preparación de aperturas, y también de analizar
algunas de las más interesantes y valiosas partidas que reflejan ideas ya
estudiadas. Pero todo esto es el futuro. Pasemos ahora al estudio de la
táctica.
l. Colllbinaciones y
cálculo de variantes
Dvoretsky - Zilberstein
VISIÓN COMBINATIVA Moscú 1966
7. cxd4
8. ~)xd4 ~xa3
9. q-¡xc6!?
5 Considerando la peculiaridad de
las partidas de blitz, sería ridículo
reprocharse a uno mismo haber
tomado esa decisión. Pero jugar a
la brillantez de esta forma, hubiera
sido totalmente inaceptable en una
partida seria de torneo, porque en
tal caso hay que optar siempre por
el camino más sencillo.
14. ... b4
21 gae1!?
21. ~)Xf4
22. ~hf 4 '&xf4
23. wh1 :lhf8
24. ~f1 :!!f6
15. a6 25. ~ea !1h6
26. ~d7
Más preciso era 15 ... \t·b8. sin
conceder nada que justifique una
ofensiva de. peones en el ala de
dama, pero Dolmatov quiere mejo- 9
rar su posición en el final (tras un
doble cambio en c6, podría jugar de
inmediato su rey a d7) y se arriesga
en el medio juego.
16. i(.d3?!
31. c6
32. Z.e2 ~f4
33. ªU1 ·~c1
34. ·t·g2 g5
35. ·~g1 Wib1!
36. a3 \ic1
37. f3 ~f4
38. ~f2 h5
39. >t'g2 h4
40. ';lif2 'i'g3+
41. ,t;. e3 ~f4+
42. ~f2 ~c1
43. ~g2 .J..b6
Visicín comhillatim 25
Juegan negras
28. i.e2!
29. .i.b1 !!
29. b3!!
30. axb3 :Sd1
Dvoretsky - Schüssler
Tbílisi 1980
1. e4 es
2. tllf3 lLJf6 (P) 1.12 ¿Qué debería
3. !LJxe5 d6 seguir, en respuesta a
4. li.Jf3 c.!~xe4 12 .•. tle8?
s. d4 d5
6. ii..d3 i.e7 Es malo jugar 12 ... lle8. debido
7. O·O l!.~d6?! a 13 .ixh7 +! '-t•xh 7 14 lLJg5+ :ilxg5
15 'io!Vxh5+ J.h6 16 lixe8 lLJxe8 17
Las negras impiden el avance ii.xh6 gxh6 18 ~xf7 + lDg7 19 lle 1,
c2-c4, pero a cambio de mover o incluso 19 'i'xb7.
este caballo por tercera vez. No es
bueno gastar tantos tiempos en la (P) 1.13 ¿Cómo se refu-
apertura, de modo que no debe ta 12 ..• lLJc8?
sorprender que las blancas puedan
conseguir una mejor posición de No sirve a la causa negra jugar
varias formas. No es malo, por 12 ... !.Llc8. Después de 13 ii.xb8
ejemplo, 8 tl:ic3 c6 9 .!LJe2 ..t.f5 1O ~xf3 (13 ... ~xb8 14 'iºe5!) 14
ibg3. ~e51! i.f6 15 'fif4 Ji.g5 (15 ....ti.h5
16 .i.c7 ~d7 17 ~f5) 16 °i'f5! g6 17
8 . .tf4 ~es ..tf6 18 'i·c7!, el alfil de f3 sólo
puede retirarse a e4.
Ahora las negras no pueden
jugar 8 ... .US, en vista de Finalmente, a 12 i.f6.
9 i.xd6. Makarychev indica la siguiente varian-
40 Combi11adm1t•.\· .'" <"<ílculo tle \'<iriumes
te: 13 'i·e3! :es (13 ... .i.xt3 14 ~xf3 Un ataque doble extremada-
il.xd4 15 tiJxd5!!) 14 .i.e5 q¡d7 15 g4 mente molesto. Si las negras cam-
j_g6 16'i\l'f4, con ventaja blanca. bian en f3 y luego juegan c7-c6
(pues parece que no hay otro modo
9. ... 0-0 de defender el peón), entonces las
10. lte1 l!Jd7 blancas pueden sacrificar su alfil
en h7. Después de la partida mi
Esta posición ya se había produ- oponente me mostró la jugada que
cido en una de mis partidas, siete había estado estudiando "por des-
años atrás, contra Andrei Jachaturov esperación'': 14 ... g5?!, pero una
(Moscú 1973). En aquella ocasión jugada así no puede tomarse real-
yo había jugado superficialmente, mente en serio.
con 11 c3, y las negras lograron
igualar con 11 ... ,ges 12 'iY.b3 !';:'\b6 Schüssler se sumió en profunda
13 'i'c2 g614 ~e5 ~.f515 l:e2 ~g5! reflexión. Su respuesta se produjo,
16 .i.xg5 'ifxg5 17 gae1 f6. finalmente, ¡una hora y media des-
pués! Para entonces yo estaba
Esta vez elegí un plan más lógi- encantado con sus apuros, dialo-
co. Ahora no serla útil jugar 11 h3 gando con él para mis adentros:
.ih5, ya que las negras tendrían la ··Como puedes ver, todas las juga-
posibilidad de cambiar alfiles de casi- das son malas. Ya puedes buscar
llas blancas con ~g6. Pero si tas todo lo que quieras, que tu posición
blancas trasladan su caballo a g3, y no tiene remedio ...
sólo entonces juegan h2-h3, las
negras tendrán que cambiar en f3, 14. ~.xf3
después de lo cual las piezas blan- 15. ~xf3 c6
cas ejercerán una desagradable pre-
sión sobre el flanco de rey contrario. 26
(P) 1.15 ¿Qué deben jugar otro principio señalado por Kotov:
ahora las blancas? ··Al calcular variantes complicadas,
cada una de las numerosas ramifi-
No dudaba de que el sacrificio caciones del árbol debe ser exami-
de alfil en h7 fuese correcto. Por nada en su totalidad de una sola
tanto, tenía la intención de jugar 16 vez''.
.ixh7+ wxh7 17 :hs+ 'itga 1a
'iih3, donde puede seguir 1a ... f6 Tras haber pensado durante
(6 1a ... f5), y sólo ahora calcular una hora más o menos, me senti
variantes. Pero, afortunadamente, más y más cansado, y casi deses-
no cometí ese error y me dispuse a perado al no ver una linea ventajo-
examinar el sacrificio, lo que me sa. De repente, percibí una posibi-
permitió ver que las cosas no eran lidad que no había considerado
tan fáciles como parecían. antes. La examiné rápidamente y,
por fin, realicé mi jugada.
La variante 1a ... f6 19 Il.e1 lt\f7
20 'i'f5 me gustaba,· a causa de la 16. tlg31
posibilidad que surgía tras 20 .. .
lüg5 (20 ... tt:lha 21 ~e6+; 20 .. . La amenaza es 17 btxe7. En caso
lüd6 21 'fre6+ lU7 22 'i'h3) 21 de 16 ... .if6, seguiría 17 .ixh7+
i.xg5 fxg5 22 'fi'e6+ ~f7 23 ~h3 'it'xh7 18 ~h5+ wg8 19 .txd6 :tea 20
:.ta, de jugar 24 Il'.h7!, con la .i.e5, y las negras no tienen compen-
tremenda amenaza 25 ~h5. Pero, sación por el peón perdido.
ay, había omitido por completo ta
mejor y. por lo visto, totalmente Es significativo, sin embargo, que
precisa defensa 20 ... nea! yo no hubiese visto la mejor defensa,
16 ... t.Lle8! Si mi oponente hubiera
Sin embargo, no consegui encon- jugado así, no estoy seguro de que
trar nada en respuesta a 18 ... f5 19 me quedasen energías suficientes
lte1 (19 I1h7 lüf7; 19 ltha+ ~ 20 para encontrar la forma correcta de
'ifh5+ ~e6) 19 ... tl)e4! 20 :ha+ <tJf7 continuar el ataque: 17 l:ae1 .if6
21 'i'xf5+ Af6, o 21 ... lLJf6 (pero no 18 ~h5 g6 19 'iWh3! .txd4 20 :xh7.
21 ... ~e8? 22 .:xfa+ ~xf8 23 f3}. Objetivamente, esta posición es
favorable a las blancas. Por ejemplo:
Dos o tres veces me distraje del 20 ... ..Wf6 21 g3 ~xb2 22 'i!Vh6 (ame-
sacrificio de alfil y comencé a nazando 23 .ig5) 22 ... .id4 23 g,e2,
sopesar otras jugadas naturales. o quizá 23 c3.
Por ejemplo, 16 l%ae1. Pero no
pude encontrar ninguna ventaja en Pero tuve suerte, porque
estas posibilidades. de modo que Schüssler no estaba menos can-
volví a examinar las consecuencias sado que yo y me facilitó las
de 16 .ixh7+, contraviniendo así cosas.
Co111hí1wcimu.'s \' ctílcufo de rnria111':s
19. g5
20. g3 Yusupov • Nogueiras
Torneo de Candidatos
También era fuerte 20 íe5, pero la Montreal 1985
jugada de la partida es más sencilla.
20. ~ca 1. d4 d5
21. '&xc8 ~!Jxc8 2. c4 e6
22. l.d2 ·:!le7 3. ~\c3 c6
23. gxh4 gxh4 4. [:!Jf3 .?1f6
24. ·J.'h1 ! 5, w~.g5 ..'¿)bd7
6. cxd5 exd5
Y las negras se rindieron. ya 7. e3 ...:..d6
que si 24 ... 2!\g6. 25 .H.g1! ~fe8 26 8. i.:.d3 :.:.)f8
f4 resulta decisivo.
Las negras desean realizar la
No me juzgo por no haber des- misma maniobra que yo utilicé con
cartado inmediatamente el sacrifi- éxito en la partida anterior: ~'\g6,
cio de alfil, puesto que parecía seguido de h7-h6. En función de
demasiado tentador. Pero tan ello realizan, como hizo Schüssler.
pronto como quedó claro que el varias jugadas en la apertura con la
sacrificio no conducía a una victo- misma pieza. Este dudoso plan ya
ria forzosa, era obligado hacer habla sido adoptado previamente
una pausa y recopilar todas las por Nogueiras, de modo que Artur y
jugadas candidatas. Si me hubie· yo tuvimos la ocasión de preparar-
se concentrado en esta tarea, es nos contra ella y prever el curso sub~
casi seguro que habría visto rápi- siguiente de los acontecimientos.
damente16 'iig3 y, tras un breve
examen, me habria dado cuenta 9. ~',eS!? 'ifb6
de que era la jugada que buscaba.
En consecuencia. habría podido En caso de 9 ... ·"1:196, las blan-
ahorrar mucho tiempo y esfuerzo. cas refuerzan su caballo en el cen-
E 1 gran maestro Yusupov le tro con 10 f4. Después de 11 ...O·O,
Jugacla.'i <w1dillatm
0
4J
--------------,·····-··--··--------------
puede seguir 11 O-O (la partida .~xg6 hxg6 14 h3 tDh6 15 e4! Pero
Chernin - Cvetkovic, Belgrado normalmente Yusupov verifica cual-
1988, continuó con 11 'fVc2!? 'We8 quier análisis previo ante el tablero,
12 0-0) 11 ... h6 12 ,txf6 y¡qxf6 13 sobre todo si el análisis ha sido apre-
'i'h5 liJe7 14 g4 (o bien 14 e4). surado. Llegó a la conclusión de que
en la variante planeada en casa, las
1o. O·O .txe5 negras podían defenderse con 15 ...
~xb2 16 :.c1 0-0! Así que comenzó
Para las negras seria peligroso a preguntéf"se si no habría mejores
10 ... 'i!r'xb2 11 ~c1. posibilidades que 12 ~f4. y pudo ver
una idea verdaderamente tentadora,
11. dxe5 lllg4? y se decidió por esta continuación
durante la partida.
Mejor era 11 .. . !tl6d7, después
de lo cual Yusupov tenía in mente la 12. 't'Ja4! 'tifxb2?!
variante 12 ~f4 ·wxb2 13 :t.c1 .!bg6
14 .lxg6! hxg6 15 e4, que le hubie- Ahora la ventaja blanca en des-
ra asegurado ventaja. En lugar de arrollo resulta abrumadora, pero es
capturar el peón, es mejor para las difícil recomendarle nada mejor a las
negras 12 ... '2ic5, como se jugó negras. En caso de la evidente 12 ...
en la partida Gulko-Smagin, •~d7, las blancas podrían elegir
Campeonato de Moscú 1984. entre 13 ·~a3!? f6 14 exf6 gxf6 15
i..h4, y 13 e6!? J:.xe6 14 'Llxd5 .:itxdS
27 15 'i7xg4, en ambos casos con una
clara ventaja de las blancas.
14. f6
15. exf 6 gxf6
16. .lixf6 :gs
16 l!:lxf6 17 1!Vxf6 !tg8 18
·'tlxd5!
dar a inclinarnos por la jugada 19 ... (25 ... ·ítig8 26 .i. fG ~g4 27 lDf4 <M8
lbc7!, es que creaba la amenaza del 28 ll.h4, con ataque aniquilador) 26
cambio de caballos, obligando a las ~f4 l1g8 27 ~d4! li)e8 28 ih3 ~f8
blancas a forzar acontecimientos, 29 'ilif2 ~ 30 i.xc8 ~xg5 31 ~e6.
excluyendo jugadas tranquilas del Si 24 ... tbxg6, 25 .ixd8 11xd8, y la
tipo 20 g4. Pero ésta es sólo una dama blanca se interna en campo
peculiaridad, porque en otros casos enemigo, con 26 ~f6.
similares no será posible apoyarse
en conceptos, sin un cuidadoso y 25 ~xd8 !!xd8. También aquí se
concreto análisis de las variantes. ponen de manifiesto las excepcionales
dificultades de esta posición, que oons-
Con la publicación de uno de sus tituye un ejemplo incomparable. El
libros posteriores (1997), Nunn quiso prestigioso Nunn, probablemente con-
probar la corrección de su ataque. dicionado por la actividad de la dama
Después de 19 ... ~ 7! 20 fxg6 hxg6, blanca, redujo en cierto modo las
las blancas optan por saclificar esta inmensas posibilidades del ajedrez.
vez el caballo: 21 l?lxf6+1 exf6 22 nxf6
lvanchuk • Dolmatov
32 Torneo lnterzonal
Manila 1990
1. e4 e6
2. d4 d5
3. (.\d2 c5
4. exd5 exd5
s. ~b5+ lDc6
6. ;¡:igf3 cxd4
7. ~e2+ ~e7
33 ATENCIÓN A LAS
POSIBILIDADES DEL
RIVAL
Nuestro oponente también tiene
derecho a existir.
Savlely Tartakower
1. d4 e6
2. !lif3 ibf6
3. .i.gS es
4. e3 b6?
.........- - - - - - - - - - - - - - -...........- - - - - - - -
,,
7. ~bS+ ~bd7 35
B. ·Y)C3 a6
34
28. :txd3
Dolmatov - Lugovoi 29. ~xd3 .txd3
Campeonato de Rusia 30. cxd3
Elistá 1996
No servía 30 .il.xf7?. a causa de
30 ... gd2! En primer lugar. las
52 Combinaármt•s y c1í/c11lo ti<' rnrfrmll!.\
36. ~'f8!
37. 'itxb2
(P) 4.22 Evalúe 35 l2Jf5
Si la dama blanca estuviese en
Parece bastante buena 35 e6, las negras no dispondrían del
lWe6!? Sin embargo, Sergei consi- siguiente ataque doble salvador.
deró que después de 35 ... ~xe3
36 W/xe3, la posición no tiene 37. ... t!Je5
A rendcín ll las ¡10sibilidmlcs det rfrt1I 53
Ahora descubrió Dolmatov la Planteando una pequeña trampa:
idea de su oponente, viéndose obli- si 33 i.xc6?, entonces 33 ... :.h4+! 34
gado a resignarse. ·t=g3 :tg4+ 35 '~h3 bxc6, pero se le
escapó el contragolpe que sigue.
38 'ii'xh6+ 'i°xh6 39 l2,)xh6
lbxc4+ 40 cJib3 l0e5 41 !Df5 ~h7 33. g41 wc71
42 ~b4 a6 43 l?ld6 b5. Tablas.
Si 33 ... fxg4, 34 ~xc6.
El siguiente ejemplo, en el que
la evaluación de la posición 34. gxf5 lbxc5
cambia más de una vez. demues-
tra de forma convincente las Lo correcto, como señaló
fatales consecuencias de no pres- Kovacevic, era 34 ... gxa4 35 tf.2b3
tarle atención al contrajuego de l1b4 36 fxe6 lDxe6 37 l:te3 ~dxc5
nuestro rival. 38 tilxc5 ~xc5 39 Wg3 h6, con
ventaja de las negras.
Sax • Kovacevic
Sarajevo 1982 35. .!tc2!
38
36. Wxb7?
37. axc6 íi:f4
38. fxe6! tl'lxe6
39. l.g2 l::xf2
Atendá11 a las po5ihiliclades dd riml 55
····----··-----------------
(P) 1.25 ¿Ha llegado la (E) 1.10
hora de tomar el peón h7? 41
57. ·~g7
58. ,;:.gs+ ·.t'hs
Juegan blancas
56 Combi11adm1<'S ~- nílndo <lt• 1'tll"ia111e.~
En et tercer capítulo de
Secretos del entrenamiento en
Evalúe 26 ... ~d6 ajedrez, en la sección dedicada a
la reproducción de estudios,
subrayaba la excepcional impor·
tancia del método de exclusión
para ahorrar tiempo y esfuerzo en
la toma de decisiones. Como
regla general. nos resulta dificil
calcular las consecuencias de la
jugada más fuerte. Más fácil es
convencernos de que todas las
demás jugadas son malas o con-
siderablemente más flojas. Como
resultado de tal examen, pode·
mos llegar a una conclusión defi-
nitiva acerca de la jugada que
hay que efectuar.
45
(E) 1.14
EL ATAQUE DOBLE
Más vale pájaro en mano
que ciento volando.
Refrán no ajedrecístico
Juegan blancas
(E) 1.16
51
47. c6 53
48. c5!
Kirpíchnikov - Dvoretsky
Campeonato de la URSS
por equipos
Moscú 1966 (P) 1.31 ¿Cómo pueden
las negras simplificar el
1. e4 e6 juego?
2. d4 d5
3. ~c3 ~b4 Temía que después de 10 ...
4. .1d3 dxe4 'f1c7 11 ~·e2, seguido de enroque
5. ~xe4 {¿)f6 en cualquier ala y a2-a3, los dos
6. ,i,d3 c5 alfiles le asegurasen a las blancas
7. dxc5 tl:ibd7 mejores posibilidades. Así que, tras
8. i.d2 haber captado un tema relacionado
con el ataque doble, me dispuse a
La partida Shejtman - Dvoretsky jugarlo, porque me permitía cam·
(partidas de 30 minutos, Moscú biar varias piezas.
1984) continuó de fonna curiosa: 8
c6 !i~1c5!? 9 cxb7 i:.xb7 101Lb5+ ..t:e7 10. lLJce4!
11 't!bd8+ ~hxd8 12 ~f3 .::[ice4 13 0- 11. li'\xe4 ~xe4
0 lDxc3 14 bxc3 .i.c5 15 l!.~e5 ~ac8 12. J.xb4 ~b6
16 ~b1 'be4 17 j;,d3 ~-a8 18 c4 f6, 13. 0-0
con excelente juego para las negras
óJ
13.
14. 'it'd4
30 ... b4 31 llxc3.
34. .ixh3
35. i'fd6+ ~g8
36. 'i!fxd5 ~e6
37. 't!Vd6?!
27. ~xg61 .i.xd4
6ó Combi1111citm''·' y ,·cílnllo di! 1·,1ri11111t•s
Taimanov - Borkovsky
Wroclaw 1979
1. l!:lf3 d5
2. b3 i.g4
3. e3 es
4. h3 ~xf3
5. 'Wxf3 tllf6
68 Co111bi1wcio11e.\· ,. nílc11lo clt· 1•arim1I''·'
11. g611
12. ~xd7+
12. Wf81
13. ¡vg5 h6
Las negras optaron por 7 .•. e4, y 14. ~'h4 g5
después de 8 \'Wd1 l!ic5?1 (más fuerte
era 8 ... dxc4) 9 b4! t;)d3+ 10 ~.xd3
exd311 cxd51!'.xd512 a3, se encon- Una soberbia combinación
traron en una posición un tanto infeñor. sobre el tema del encierro de la
dama.
¿No era posible reforzar el cen-
tro. jugando 7 ... c6? En sus notas a Es muy importante no caer
la partida, Mark Taimanov contesta bajo el hechizo de nuestros pro-
negativamente a esta cuestión, pios descubrimientos. Tras haber
citando la variante que sigue: considerado de forma soberbia la
posición, Artur concluyó que des-
7. c6? pués de 7 ... c6 8 cxd5 cxd5 las
8. cxd5 cxd5 blancas pueden esperar conse-
9. i.b5! .1l.d6 guir ventaja con 9 ~c3, en lugar
10. 0.c3 e4 de 9 j_b5?!
11. ~·f5
Naturalmente, un enfoque crítico
Taimanov, cuyos signos de califi- es necesario no sólo cuando se
cación se incluyen en las jugadas enjuicia la labor de los demás, sino
anteriores, evalúa esta posición como también la propia. He aquí una
claramente mejor para las blancas. experiencia de mis propias partidas,
en la que permití a mi imaginación
(P) 1.36 Encuentre el volar. con resultados previsibles.
error en el análisis del gran
maestro. Alterman • Dvoretsky
Campeonato de la URSS
Yusupov vio que la posición (Semifinal)
final de esta variante -en la que, Yorone.zh 1973
69
30. .C:xh4?
31. J:xh4 ·tij'xh4
32. 'tixh4 ~¡f3+
33. ·.tf2 ttJxh4
34. ~g3 gS
35. es dxe5
36. d6 ~6
70 Combi1wdont'.\ y ('fílc11/o de 1·arim111•,,·
Lamentablemente, ésta no ha
sido la única ocasión en que
Dolmatov no se ha dado cuenta
de que podfa atrapar una pieza
enemiga. El lector encontrará Juegan negras
dos ejemplos más en los
ejercicios. (E)1.19
65
Juegan blancas
(E) 1.20
66
Juegan negras
72 Combi1wdont'.\ y ('fílc11lo de 1·arim111•,,·
34. !!e4
35. 'Wd3 f5
36 . .ic6 ;!e7
68
37. ~xc7
38. d6 !:f7
39. Wd4
39. i.d7
40. ·.t>d5 ·~e8
41. ~xd7+ l:xd7
42. :ca+ li:.d8
43. gc7 (P) 1.40 ¿Qué deben jugar
las negras?
La posición que se ha produci·
do es una excelente ilustración de Las blancas han lanzado un des-
la tesis de Nimzovich (aunque por esperado ataque al rey. A 17 ...
entonces yo no podía leer sus ~xh5? pensaban seguir con 18
libros, porque rara vez podían jLxf7+~ Jlxfl (si 18 ... ®h8, 19 1'.xh5
encontrarse en las bibliotecas): "La ;!e5 20 cxd4 f.;)xd4 21 .lb2) 19
POses;ón absoluta de la séptima ·ifxhS+ ia'g8 (19 ... '$.iffi 20 ~xh6!) 20
74 Combi11ewim1es y cúlculo ele rnrim11t·s
4. ~d4!1
5. h7+ ;t-17
6. g8'fk+ -J..·e1
7. h8~ ~d61
72
No sirve 1 'i!i'f5? {con la amena-
za 2 'i'xf7+), debido a 1 ...
j¿a6(b7)! Con dos piezas menos,
Teichmann está obligado a buscar
algo de envergadura.
1. l:txh6t ¿¡¡xh6
Yusupov • Magerramov
Clasificatorio para el
Mundial Juvenil
Leningrado 1977
ú.1 .fuer:.a tlel peo11 ¡w.mdo 77
¡Sorprendente negligencia!
Magerramov ni siquiera se molesta
en averiguar la idea de las blancas,
sino que avanza tranquilamente
sus peones. Considerando este
Los peones pasados de las episodio, podemos suponer, con
blancas en el centro están sólida- un alto grado de probabilidad, que
mente bloqueados, mientras que las negras estaban subestimando
los negros del flanco de dama seriamente los recursos contrarios.
están libres para avanzar. Es pro- Era preciso parar las amenazas
bable que las blancas pudiesen mediante 31 ... h6 (evacuando h7
aprovechar la ocasión para forzar para el caballo) o bien 31 ... llJd7.
tablas con 30 ll:le3!? ilxe3 (dudoso
es 30 ... lbb4, al menos debido a 32. lbxf6! gxf6
31 'l'h5) 31 li:if7+ wg8 32 ll:lh6+. 33. 'i'g4 lbg6
Pero Yusupov buscaba la victoria y
decidió jugársela en un ataque al En caso de 33 ... l!Jd7, las negras
fla neo de rey. pierden en el acto después de 34 ::le1 !
36. Iixf7
37. gxf7 ·~xf7
38. h5
5. g6
6. ~d4 ~xf2
7. ~xg6+! \t.'h6
8. '@'f4+ .itg7
9. ~c7+1
El mate es inevitable.
Superficialmente considerado,
todo lo que ocurre en esta partida
parece sencillo y sin interés. Pero la
belleza en ajedrez está determinada
no tanto por las propias jugadas,
como por las ideas que en ella sub-
yacen. Jugadas que a primera vista
16. ~\b4 parecen tranquilas pueden ocultar
17. a3 exd4 ideas sutiles y profundas. Tratemos
18. axb4 de entender por qué losif Dorf man,
al comentar esta partida para
18 ~xd4 es malo. a causa de lnformator, le asignó a la jugada 16
18 ... C·:c2. ...<~~.b4 dos signos de admiración.
Juegan negras
(E) 1.25
83
Juegan blancas
X6 ComlJim1t'Ít1JU1 .\· r r·r:ílr-11/o dt• 1·w·ic1111,•s
15. tbg4!
24. ~f8!
25. exf7
25 e7+ J.ie8.
1. .ig7f ~f2+
2. ~1!
17. ... b5
14. dxc3
15. fxg7 cxb2+
100
17. Jl.xd3
Juegan blancas
Peor es 17'§'xd3 0-0-0 18 ...
bxa1'ii; ¿Qué jugaría usted?
17. bxa1't!N
18. gxh81W 111xh8
,: 1iene el pmhln11a .wlodtí11? 105
- - - - - - - - - - - · · · · · ·..-·-..· · - · - - - - - - - - - - -
Cukiermann - Aficionado
Una vez calculadas
Ber1ín 1934
todas las variantes, proce-
104
da a una evaluación posi-
·cional.
(E) 1.30
103
1. ... 'i'xb21
sus otras dos piezas y ayuda a Una vez familiarizado con este
rechazar las inmediatas amenazas final, comencé a pensar en ejerci-
sobre la última fila y las· debilitadas cios creados a partir de esa posi-
casillas negras del flanco de rey. Por ción. Uno de ellos -relacionado con
ejemplo: la directa 2 ~xe5? gxe5 3 el desarrollo de la imaginación. y la
'@ff6 no consigue nada, pues con 3 ... necesaria atención a las posibilida-
°t!Nb 1+ 4 ~g2 'l1Ye4+ es jaque perpe- des de conlrajuego- lo tendrá que
tuo (tras la forzada 5 ~g1). En caso resolver usted. La cuestión intro-
de 2 c4?, el alfil queda defendido por ductoria a este ejercicio es la bús-
la dama: de modo que las negras queda de los recursos defensivos
pueden responder 2 ... ~d8 (amena- de las negras, algo que aliviará su
zando 3 ... ..ig7) 3 ~e4{e3) f6, cuan- tarea.
do la posición negra está en orden.
De modo que, si tuviéramos que
(P) 1.58 ¿Gana la jugada conseguir encontrar (tras 1 ... ·§!xb2)
2 °i'f6? un claro (¡y único!) camino hacia la
victoria para las blancas, posible-
105 mente pudiera hacerse sin la cues-
tión esencial, y simplemente sugeri-
ríamos que el lector tomase una
decisión para las blancas. En tal
caso, surgiría un problema muy difi·
cil sobre el lema de tener en cuenta
los recursos del adversario. Lo cier·
to es que descubrir la refutación
efectiva de la jugada 2 ºfY"f6?!, sin
ningún consejo especial,. y elegir
otra jugada más fuerte, es una tarea
que no todos los grandes maestros
Esa fue la tentadora continuación serían capaces de resolver.
elegida por las blancas en la partida.
Después de 2 liff6 ~xc3? 3 ~g7+1 (P) 1.59 Encuentre la
.lxg7 4 .f!e8+, seguido de mate. continuación más fuerte
para las blancas.
Pero más tarde se encontró una
brillante defensa: Este ejercicio no es para resolver-
lo mentalmente, sino que requiere un
2. 'S'f6 Wc1!1 serio análisis. Por lo tanto, le reCl)·
3. -W.xe5l '{qxh61 miendo que mueva las piezas sobre
el tablero. Concentre su atención en
Con posibilidades aproximada- identificar las jugadas candidatas
mente igualadas. para ambos bandos.
107
Recordando la sección ·•¡Su rey, Las blancas crean tres amena-
fuera de la ·combinación!", iniciare- zas: 3 f4, 3 c4 y 3 lll'xa7. Después
mos la búsqueda con la jugada 2 de 2 ... f6, sería un error 3 f 4?, por
~g2, que renueva las amenazas 'e#f6 3 ... lld2! 4 fxe5 1ixh2 5 lf'f3 ~xh6,
y ~xe5. Malo es 2 ... f6? 3 J:r.xe5. La pero la sencilla 3 'iY/xa7! mantiene
única defensa es 2 ... f5! Entonces la ventaja para las blancas, . des-
son posibles las siguientes defensas: pués de, por ejemplo, 3 ... ;;da 4
'fka5 ;;ea 5 'it-g2!?
a) 3 c4 ~a5! (Más flojo es 3 ...
.Ud?, o 3 ... :ds, debido a 4 ·~e3) 4 Durante al menos un año; pensé
.l:td1 (4 'i'd3 ~d4; 4 j.f4 'i1fd4, pero que había encontrado una solución,
no 4 ... ~f7? 5 'fie3 ~6 6 es, y empleé repetidamente este ejerci-
ganando) 4 ... 'ii'c2!, con la amena- cio en mis lecciones de entrena-
za ... 'ffe4. Si las negras fueran muy miento. Pero un día, uno de los estu-
codiciosas, con 4 ... :Xa2, perderí- diantes de ajedrez en el Instituto de
an: 5 ~d2 \Wb1 6 :lxa2 'ff'xa2 7 ~·d3. Cultura Flsica (donde yo enseñaba),
que había resuelto el ejercicio, llamó
b) 3 ..ilf4 .i.xf4! (3 ... ~xc3? 4 mi atención hacia la sutil defensa 2
~xe5; a 3 ... Axc3 ó 3 ... .i>.f6 es ... ~a3!!. que para todas las amena-
decisivo 4 .Ue8+ .:t.lf7 5 ~e3) 4 'fj'xf4 zas inmediatas de las blancas: 3 f4
'i'd2! 5 1:.e8+ (5 ~e3 ~d8, seguido ~g7 4 Wlea+ 't!iffa, o bien 3 c4 ·~xe3
de 'i'd7) 5 ... \t·f7 6 ~b8 :d7!, y si 4 llxe3 ~a5 5 f4? ~.d4.
7 :ha, entonces 7 ... <&>t6 ó 7 ...
'iid5+ 8 ~h3 'Stf6. Más peligrosa es la jugada pre-
paratoria 3 'it'g2!, teniendo in mente
Para ser honestos, la conclusión las variantes 3 ... b5? 4 c4! "i'xe3 5
de que ta jugada 2 ~g2?! es insufi- ~xe3 bxc4 6 f4, ganando, o 3 ...
ciente para ganar sólo me satisfizo ~g7? 4 ~·xa7! '®°fa 5 .ixg7 <.!Jxg7 6
porque había visto otra posibilidad 'ii'xb7, con un peón extra para las
que parecía muy fuerte: 2 ~e3. blancas. Pero después de 3 ... f6!
las negras pueden defenderse con
106 éxito, sacrificando un peón: 4 f4 ~f7
(también vale ta pena considerar la
inmediata 4 ... 'fWxa2+) 5 fxeS .:':Ixe5
6 ~·d2 f!xe1 7 'it'xe1 'Wxa2+. La
situación empezaba a recordarme
algunos viejos libros de matemáti-
cas cuando, tras haber agonizado
en busca de la solución y haberla
encontrado finalmente, el alumno
lee, con asombro e indignación:
.. este problema no tiene solución''.
108 Combí11acim1cs y c·á/culo tle 1•arim11es
¿Para qué calcular una combina- Un error sería 38 ... 'l!'e3?, por
ción, si hay un camino más simple 39 :1d8+ :!f8 40 :xf8+ \txf8 41
hacia nuestro objetivo? Enmanuel "*Yb8+ wf7 42 'YWc7+ y 43 ~xc4.
Lasker escribió: ·•No deberíamos
exigirnos excesivos esfuerzos 39. '@i"xf2 ~xe4+
cuando la posición no los requie- 40. ~·92
re ... Debería ser posible conseguir
el resultado con una sola jugada, 40 \i;g1 ·~fg4+ y 41 ,.. -~'fxd1+.
porque asl no tendría rivales y no
habría discusión posible'". 40. 'Vlixg2+
41. ·itixg2 fi)e3+
Polugaievsky - Torre 42. <;t;f3 l2.xd1
Torneo lnterzonal
Toluca 1982 Si ahora 43 ~e2, 43 ... b5. La
combinación ha conducido a un
108 final de caballos ganado. A conti-
nuación Torre transformó su venta-
ja material en victoria.
(E) 1.32
111
Juegan blancas
(E) 1.33
112
Juegan blancas
/Jifícil de énsdim; f,idl de hacer 113
34. ~d8
35. ~e2 1!d71
19. ~e1
124
...
i.g7 24 ~d6 ~e2 (24 ... 't\fe2 25 parecía también a mi, hasta que
'ib1) 25 t;_)g5 'ffc2 26 'Wf3, o aun 23 jugué esta posición con Yusupov.
... !le7 24 tlJxd6 ~e2 25 ~b1. Volveré sobre esto.
La desesperada tentativa de
Polugaievsky por crear contrajue;,,
go, con 23 f5?, no le reportó nin-
gún éxito. Siguió: 23 ... dxc3 24
(P) 1.67 ¿Cuál cree usted ~xc3 (24 ~h6+ we7 25 ~xc3 ~98:
que es aqui la mejor juga- o bien 25 ... .txg2+ 26 llxg2 'i9f1 +
da? 27 l:tgt 'ii)tf3+ 28 I\g2 'ii'xc3) 24 •..
~xe4 25 gxh3 (25 'i'xh3 ~e1; 25
Nunn jugó la tentadora 21 ... 'Af 8, ~h8+ @e7 26 \lt'f6+ :.J.·ea 27 ~h8+
en prevención de 22 gxh3+ y plante- Wd7 28 1Wxa8 ~xg2+) 25 ... ~e8!
ando la amenaza 22 .. . .lixg2+ 23 (Naturalmente, las negras paran la
l:lxg2 'ii'xf3. Dolmatov realizó precisa- transparente amenaza 26 fig8+!)
mente la misma jugada. También 26 ~d3 Iie1 27 .:xe1 (27 '&b5+
consideró seriamente 21 ... ~h8, con· ~f8 28 ..tg7+ ~98!) 27 ... 'fi'xe1+
Idea de responder a 22 ti:ixd4 con 22 28 @g2 :ca 29 f6 wd7 30 ~xh7
... f!g8 23 'ii'c2 (23 gxh3 cxd4) 23 ... ~d2+ 31 'lt>g3 'iYxd5 32 ~h4 li:.e8.
hg2+ 24 ~g2 'i!Vf1+, ganando, pero Las blancas abandonaron.
la descartó a causa de 22 !Lig5!
Wxg1 + 23 'i!i'xg1 il.xg1 24 Wxg1. Sin embargo, la posición de las
blancas no es desesperada en
La tranquila continuación 21 modo alguno .
.tg4 no le ofrece nada positivo a
las negras, según Nunn. Asi me lo 23. .'ta311
un Co111M11e1dom•x ·" ctilculo dt• n1rfr111lf'.~
29. ~f4
Mestel - D. Gurevlch
Hastings 1982-1983
132
La prcÍl'lica en Jugar dC' m1ero 135
16. 'i!lf4+
17. @d3 'i'xh4
18. nxa7
33. 'i'f6+
36. li)c61
33 Wle5+? lbe6. 37. 'i'ixd5
42 a3!?
42. gxa2
43. Ilb8+ ~g7
44. g5
Ya hemos visto esta posición
(pero con un peón negro en h6). El ataque · al rey continúa, a
Plachetka considera que las blancas pesar de los numerosos cambios.
no pueden ganar aqui, en vista de la Las negras tendrán que luchar
variante 35 ~f6 ~b5!! (35 ... ila4? duro por las tablas. ·
36 lDxd5 nxc4 37 lixc4 'nxc4 38
'tixd8) 36 t?'\xd5 (36 .:xb5 gxc4!) . 36 "El pez pequeño, también es
... J1xc4 37 1i'e5+ Wh7! (37 ... ~'g8? pez. .. Por lo visto, los peones tam-
38 0.e7+ ~h7 39 0xc8) 38 lf.)f6+ bién merecen que nos ocupemos de
'lt>h6 39 t!lg8+, con jaque perpetuo. ellos". (V. Hort, V. Jansa).
Sin embargO, el ataque puede con-
ducirse con mayor precisión: Cuando las blancas decidieron
capturar el peón h6, difícilmente
35. ..,e5+1 Wf8 podía pensarse que este factor iba
36. "8f61 a resultar decisivo en el final. A
igualdad de todo lo demás, senci-
La amenaza es 37 ~xc8+, ya 36 llamente tiene que explotar cual-
... .ib5, 37 ~xd5 resulta decisivo. quier oportunidad que se le presen-
Lu pníctirn ni j11J.:ar dt· 1mern 141
te de mejorar su posición, aunque
sea un poco, o empeorar fa de su
oponente, sin preguntarse a si
mismo en qué variantes concretas
resultará útil lo que está haciendo.
142 Co111bi1wdmu·.~ y cúln1/o tic• 1·ariatlll'S
EJERCICIOS
(E) 1.35
(E) 1.37
139
141
142
Juegan negras
para d tmtilisi.,·
·----- · - -Ejt'rddm· 143
- - - - - - - - - - - - - - - ··---
(E) 1.43
147
Juegan negras
2. Ataque y defensa
15. ~d2?
Dvoretsky - Tretlakov
Moscú 1968
1. e4 c5
2. lLif3 ti)c6 (P) 2.2 ¿Qué le aconse-
3. ~b5 g6 jaría usted a las blancas?
4. 0-0 ~g7
5. Iáe1 l/.Jf6 Hay una fuerte tentación por
6. e5 8d5 la jugada de desarrollo 11 .~e3.
1. ll2c3 0.c7 Por supuesto, a 11 ... J;.xb2 las
8. _¡¡xc6 bxc6?1 blancas tienen una agradable
elección entre 12 4:lxc5 tLJxcS 13
Más correcto es 8 ... dxc6 .txc5 ~·as 14 d4. y 12 \Wc1
Ilb7(b8) 13 l.i\xc5, con idea de 14
9. d3 i1Ya3.
ataque?
Una linea interesante es 17 ...
La siguiente jugada tenia que 'flc7+ 18 'itg1 ~b5 19 lbg5 eLJxg5
haberse previsto de antemano, 20 .ltxg5 (amenazando tanto 21
pues de otro modo el sacrificio de i.f6 como 21 .:e4)20 ... ~es 21
peón de las blancas, en su jugada ~f4 .:xe1 + 22 laxe 1 d6 23 ~g5,
12, hubiera sido incorrecto. renovando ambas amenazas. ¡De
qué forma tan directa y agradable
15. liJxh711 ~es puede llevarse a cabo un ataque,
cuando los alfiles son de distinto
Ahora las blancas tienen un color!
fuerte ataque, en una posición de 18. g4 "i'c7+
equilibrio material. Pero su opo· 19. \tg2 .ib7
nente no habla visto ninguna 20. :h1 'i'e5
defensa satisfactoria tras 15 ... 21. tilf6+! ~xf6
~xh7 16 'ikh3+ ~98 17 ~h1! (Con 22. 'Wh7+ '.t.>f8
la amenaza 18 i,!>g1 ). 23. i.h6+
4. g6
DIEZ AÑOS DESPUÉS 5. ll!c3 ~g7
Los sacrificios son una clara evi- La variante 5 ... tild4 6 ~)xd4
dencia de que la parlida se ha cxd4 7 e5 dxc3 8 exf6 es favorable
jugado de forma incorrecta. a las blancas.
Savlely Tartakower
6. e5 tDg4
En el duelo siguiente los acon-
tecimientos se desarrollaron dentro El caballo no podía ir a d5. pero
de unas lineas similares. La única si pudiese llegar a f5, via h6, enton-
diferencia fue que esta vez no tuve ces el juego de las negras estaría
que buscar la forma correcta de perfectamente en orden.
desplegar la iniciativa blanca,
.durante el análisis subsiguiente. Lo 7. ~xc6 dxc6
vi ante el tablero, aunque jugué 8. h3 !i~h6
otra cosa. Algo que tuve que 9. g4!
lamentar tras apenas unas juga-
das. Me vi obligado a corregir el ¡No puede!
error cometido y, como resultado,
aunque la partida perdió un cierto 9. ... 0-0
valor. por otra parte ganó como 10. d3 f5
espectáculo.
1o ... f6 11 ~f4 (Llf7 12 0-0·0.
Dvoretsky - Simic con ventaja blanca.
Match URSS - Yugoslavia
Tallinn 1977 11. g5 :iJf7
12. Jr.f4
1. e4 c5
2. ~~f3 ll:lc6 Esta posición era la que busca-
3. }(b5 ~/)f6 ban las blancas. Su ventaja de
4. ~e2 espacio, el alfil negro de g7. desco-
nectado del juego, la posibilidad de
Habia trabajado en el plan ini· un ataque en el flanco de rey, con
ciado con esta jugada durante mi el avance h3-h4·h5, todos estos
preparación para la presente parti- factores le garantizan mejores
da. A pesar de que las blancas perspectivas a las blancas en la
ganaron aquí la batalla de la aper- lucha que va a seguir.
tura. más tarde se puso de moda la
continuación 4 t::'ic3 q:id4 5 e5 12. °iWa5
~jXb5 6 8xb5 ·:l."1d5 7 tf:\g5!? 13. tlie3!
(Zaitsev).
Die:. mios desp11é.s 157
DESPUÉS
En caso de 7 cxd5, las negras
Yo he sido prisionero de las pueden contestar 7 ... lüxd5 8
jugadas combinatívas, que, 0.xd5 °t1Vxd5!? Yusupov espera que
aunque a veces me dieron realicen 7 ... j;~b7, ya que enton-
buenos resultados. no me ces, tras 8 cxd5, retomar de caba·
ayudaron a construir sólidamente llo sería malo para las negras.
el éxito ... El ajedrez estratégico
no aspira a deslumbrar con brillan- 7. es
tes combinaciones, sino que. por 8. dxcsr
el contrario, propone una dura
lucha preventiva, con calma ¡Una novedad teórica! Yusupov
y medios imperceptibles. planea el asedio a los peones col-
Wilhelm Steinitz gantes negros, que resultan ser
sorprendentemente vulnerables.
Transcurrió otra década. Una En esta posición las blancas cam-
partida disputada por Artur Yusupov. biaban antes peones en d5, sin
que comenté para la revista conseguir nada especial.
Shajmaty v URSS.. me recordó vívi-
damente a las dos partidas antes Tales novedades en la apertura
incluidas. De nuevo, me gustaría son normalmente el fruto de un
citar a Tarrasch: "Si realizas siempre duro trabajo analítico por parte del
las mejores jugadas, la necesidad jugador que las introduce, o incluso
del sacrificio apenas se plantea··. de toda una brigada de entrenado-
res. Pero en este caso no hubo
Yusupov - Ljubojevic preparación inicial. La mejora del
Tilburg 1987 juego blanco se planteó durante el
transcurso de la partida. La gran
capacidad estratégica de Yusupov
le ayudó a elegir el plan más efecti-
1. d4 ~f6
2. c4 e6 vo, en plena acción ante el tablero.
3. !'i\f3 d5
4. ~.Jc3 .i.e7 8. ... bxc5
5. .it.f4 O·O 9. .lte2 ~b7
como mal menor para las negras. ... :ca, a lo que Yusupov pensaba
Pero en la apertura es fácil, como responder 15 .:tc2 y 16 :id2. incre-
dijo Alekhine, "Señalar los defectos mentando la presión.
del juego ajeno··.
15. lQb5!
12. lLJe5
Las blancas paran la amenaza
A la jugada siguiente el alfil ocu- contraria y plantean una propia: 16
.pará la casilla f3 y entonces ¿cómo ~xf71 'i;xf7 17 ~c7 y 18 .1l.xb6. En
podrán las negras defender su peón caso de 15 ... nea, entonces 16 lLla7!
de d5? Serla deseable para las es muy fuerte. La artificial respuesta
negras aliviar la defensa mediante de Ljubojevic (aunque es posible que
el cambio de piezas, pero después sea única} es una clara evidencia de
de 12 ... lbxe5 13 ..txeS ~)d7 14 que su posición es mala.
i.g3, seguido de 15 ~~.f3, la posición
negra no sería muy agradable. 15. ... .:ta6
12. ~b6
13. a4! 156
16. ·~d3?! c4
17. ~c7
7. lllc6
8. ~d3 dxeS
9. dxeS W/c7
U 11 pecm por el e11 roque 165
al oponente y, al final, a una traba-
.158 jada y bien merecida derrota .
Alekhine - Junge
Praga 1942
1. d4 d5
2. e4 e6
3. ~f 3 •'Llf6
4. g3 dxe4
5. ~·a4+ lDbd7
6. $..g2 a6
7. 'fixe4 bS
8. ·~e6 l:b8
9. O·O
16H
15. l/Jd2 es
esa intención: 18 ... 0-0 19 Jt.a5 Por otra parte, el alfil dama
Wfd6. Las blancas pueden impedir blanco aún no ha entrado en juego,
el enroque sacrificando un segun- Un cálculo exacto, ante el tablero.
do peón: 18 b4 ?! .ixb4 19 ~.c6+, de las consecuencias del sacrifici•
pero después de 19 ... ~·e7, segui- era totalmente imposible, así que la
do de ~hc8, las negras completarí- decisión de Alekhine implicaba una
an con éxito el desarrollo y las cierta dosis de riesgo. Creo que
blancas no tendrian una compen- tanto 18 Jtg5!? Como 18 ::;a6!?
sación real por el material entrega- son buenas respuestas· a la pre-
do. gunta planteada, y elegir entre
ambas es una cuestión de gusto y
Es tentador 18 ,~g5!?, con la de estilo de juego. Pero, en cual-
amenaza posicional 19 ..ixf6. Las quier caso, es necesario ver ambas
negras pierden pieza después de posibilidades y ser plenamente
18 ... .f!c8? 19 b4. En caso de 18 ... consciente de la diferencia entre
,:;;_e7 19 ~c6+, o 18 ... ~~d7 19 las dos. Al elegir la primera, las
..tg4. la iniciativa blanca se vuelve blancas no incurren en riesgos: en
muy peligrosa. Esto significa que el caso de la segunda, tendrán
las negras tienen que responder 18 mayores perspectivas de éxito .
... 0-0 19 .:bf6 gxf6. La compensa- pero a cambio de incurrir en el ries-
ción por el peón es ahora indiscuti- go de perder. puesto que el ataque
ble, pero no está claro que las puede llegar a punto muerto.
blancas disfruten de ninguna ven-
taja tangible. 19. ... 'í{/e61
de/juego pueden ocurrir tocio tipo de dama blanca del flanco de rey y
acontecimientos y debemos estar evacua la casilla b6 para la dama
dispuestos a ejecutar las tareas más negra, sin duda fue previsto por
diversas, de modo que nuestra pre- Tirriman. Habría perdido tras 19 ...
paración también debe ser variada. ~c7? 20 llxf8+ ·iifxf8 21 ~e8+ ~>·g7
a fin de que tales tareas puedan 22 ·~d1 ·i.th6 23 '&'f3.
cumplirse con éxito.
20. 'i?ixb5 'i"b6
Veamos ahora lo que sucedió 21. ;;.xf8+ ~'xf8
en la partida. 22. ~e8+
25. J'..f1
29. a6
30. bxa6 ~d7
Tal - Portisch
¡FANTASÍA! Match de Candidatos (2)
Bled 1965
El beneficio o pérdida resultante
de cualquier actividad depende de 1. e4 c6
la combinación de una serie de 2. l2ic3 d5
circunstancias. 3. ·~f3 dxe4
Kozma Prutkov 4. (!)xe4 &g4
5. h3 .1.xf3
10. i.e7
11. c3 ©f6
12. 'i!:Vh4
Más sencillo era 12 ~e2, con Las blancas tienen una buena
mejor posición para las blancas. posición. Pueden elegir entre 15 ~e2,
Pero a partir de aquí, Tal plantea 15 a3 (preparando c3-c4) y 15 '&h5
deliberadamente todo un conjunto g6 16 ·eve2 o-o 17 ~h6. De modo que
de complicaciones, tratando de con- ¿dígame qué jugador ··normal'" consi:-
fundir a su oponente, A costa de uno deraria seriamente el sacrificio de
o dos tiempos, desvía el caballo torre 15 c4 c.',;jb4 16 .=txe6+? Para
negro de la casilla f6, desde donde hacer esto se necesita la brillante ima-
defiende el flanco de rey y puede, en ginación de Tal y su increíble coraje.
algunos casos, ser trasladado. a la
casilla más segura de f8. ··Como vemos, el rey negro está
retenido en el centro del tablero,
12. lt.)d5 tras haber transcurrido catorce
13. '&'g4 ~f6 jugadas, ¡y no puede ser que
quede sin castigo! ¿No es posible
13 ... o-o? 14 .i.h6 Ji.f6 15 ~e4. explotar ese factor y, al mismo
tiempo. cambiar por completo el
14. !Ie1 rumbo de la partida? Así fue como
se me ocurrió la idea de sacrificar
Más flojo era 14 ~e4 (tratando la torre en e6. Me pasó por la cabe:-
de dificultar el enroque), en vista de za una divertida variante -en abso-
14 .. , ~e7!, seguido de .. .\ifd5. luto forzada, pero si muy bien
Ahora, en caso de 14 ... 0-0, las camuflada- y sentí un cierto placer
blancas despliegan sus piezas estético. Mi· conclusión fue que
cómodamente, jugando 15 j:.h6 incluso si el sacrificio no conducía
(amenazando 16 ~e4) 15 ... Ii.e816 más que a tablas. era correcto, por-
:ad1 ~b6 17 i:.c1. Portisch no que un cambio en la naturaleza del
quiere permitir esto y trata de obsta- juego no seria ciertamente agrada-
culizar el desarrollo de su oponente. ble para Portisch .. (Tal).
184 1\wq11e y defensa
Yusupov • Portisch
Torneo lnterzonal Seis meses antes de!
Túnez 1985 lnterzonal, las blancas pasaron a
un final igualado en la partida
Ftacnik • Spraggett, Wijk aan Zee
1. d4 d5 1985: 11 ~xd4 li~xd4 12 ~a3 e6
2. c4 dxc4 13 .Jle3 1'.b4+ 14 Wf1 j_e7!
3. e4 l;)f6 Yusupov prefirió un camino distin-
4. e5 ¿¿,d5 to: sacrificó un peón, en un
5. ~-XC4 "1)b6 esfuerzo por hacer que Porlisch
6. JLb3 se viese enfrentado a la máxima
tensión.
También es posible 6 Ad3.
11. 'l'We2!
¡ Fama.~íCI! 189
16. 1.tfe1
Al ver el diagrama nos enfrenta-
Más prometedor, en opinión de mos a una ilusión óptica. La ventaja
Yusupov, era 16 .l:tac1 ó 16 ~b5. negra parece indiscutible, pero no
Parece que· estas continuaciones nos olvidemos de que han perdido el
aún no se han jugado en la prác- derecho a enrocar. De modo que
tica. Yusupov tiene buena compensación
por et peón sacrificado. No obstante,
16. ile7 después de 18 ... ild6, la posición
17. :.Llb5 de las negras se habría mantenido
muy sólida. Pero aquí Portisch se
Las blancás se preparan no desvía del camino correcto e inicia
sólo para ocupar la casilla d4, sino una combinación incorrecta.
también, en algunas líneas, a jugar
:tac1, seguido de Jáxc6. Un plan 18. a6?
diferente se adoptó ·en la partida 19. c/..Jxc7+ ~d7
lYO ¡\/al/lle' ,\" c/t'ft'llSd
23. b5 :.ta3
24. bxc6
8. ... l,;)b4?!
Tal - Larsen
Match de Candidatos (6)
Bled 1965 Creo que, a pesar de todo, era
mejor para las negras 8 ... l!Jxc3.
1. e4 l/\16
l!_)d5 9. ..&.b5+ c6
2. e5
3. d4 d6 1 O. ii.a4 lbd7
4. GDf 3 dxe5
5. lZ:lxe5 e6 176
6. 'fí"f31
siderado, un poco antes. jugar 22 ... En caso de 23 ... e5. Tal quería
J:.dS!? Todo esto es muy confuso. sacrificar pieza, con 24 "8"xg7! ~e6
(ó 24 ... 'tWxa4) 25 ~xh6. Y después
18. . .• ~xeS? de 23 ... ~d8, las blancas hubiera
atacado de la misma forma: 24
"Larsen sigue la senda de la "i!Vxg7! ~xa4 25 Ji.xh6.
menor resistencia. Pese a que
devuelve la pieza, la posición de 24. ~c4 'i"cS
su rey en el centro le concede a 25. 'ik'd3 ~d5
las blancas la posibilidad de lan- 26. 'if c3! ~e5
zar fácilmente un ataque decisivo.
sin ninguna pérdida significativa 26 ... io·es 27 .ii.f4.
de material" {Tal). Es curioso
observar la influencia psicológica 27. ~e1 lifoS
del sacrificio: el danés perdió fe en 28 . .id2 ~f6
su posición hasta tal punto que ni 29. ~ac1
siquiera más tarde podía ver de
qué modo se hubiera defendido Las blancas, finalmente, han
con éxito. Escribió: ·•... después de puesto en juego todas sus piezas,
14 ... Jl..d7 mi posición hubiera y la defensa negra es superada.
sido satisfactoria. La continuación
14 ... 1i.e7? permitió la brillante 29. Wib6
jugada 16 lllb5!, después de la 30 . .ie3 ~·as
cual era difícil para las negras sal- 31. 'Wb4.
var la partida".
Amenazando 32 .*.bS.
19. cxdS i.d6
20. g3 ~xdS 31. b5
21. 'i!'ie2 32. .:ixb5 'i!ib7
33. f 4 J~bB
Para ser del todo felices, a las 34. i.c6
blancas sólo les falta conectar sus
torres. La parte final de esta partida Las negras se rindieron.
es un ejemplo convincente de ata-
que decisivo a un rey confinado en Así pues, el sacrificio de la pieza
el centro del tablero. no era, objetivamente hablando, la
mejor continuación. Pero ¿qué sig-
21. <l;e7 nifica la mejor continuación? Tal
22. ~d1 'i!f aS jugó totalmente de acuerdo a su
23. ~g4 ~f5 estilo, un estilo que le reportó crea-
tivas hazañas y sobresalientes éxi-
tos deportivos. Por otra parte. todas
196 Awque .r 1/eje11.w
Knaak • A. Petroslan
Leipzig 1977
1. d4 d5
2. c4 e6
3. ~c3 Jl.e7
4. cxd5 exd5
5. Af4 c6
6. e3 ..ld6
7. .i.xd6
7. 'iiJ'xd6
8. ~d3 ~e7
9. 'iVc2 ttJd7
10. l;~f3 4Jf6
11. l!:le5
lüe8+!) 24 .!De8+ @f8 (24 ... ~g8 25 ;ixh5? lbf6). En todos los casos
Ilh8+!) 25 1lh8+ we7 26 1!Va3+ :es las negras tendrían todos los moti:
27 'i!Vxa7+, ganando. vos para esperar un buen juego.
19. ... h5
28. '~h8
29. ~h4+ .;t,g8
30. \\Wg3+ Wh8
31. ~h3+ \&g7
32. 't\Vg3+ 1;h8
33. 'Wh3+ 'i.t;g7
34. .i.xe6 ~xe6
Obligado._
29 i'.d2!1 (Sería inútil jugar 2H
_35. ·~xe6 ~.d8 h4, debido a 29 ... Yl:í'e8, y a 29 .~ f4
l..t1 p11r1ide1 dedsirn 211
seguiría 29 .. ; ~e7) 29 ... ~c4 (29 ~e5+, ni tampoco 26 ... ;tfa?, por
ri;e7 30 i.b4+ \tda 31 'f!Yd6+) 30 27 .:be6) 27 ilxe6 'S'ga 2a ¡yxf7
h3. Se amenazan tanto 31 a3 ~xf7 29 !J..xf7 .txd2 30 .Qxd5, pero
como 31 ~f4. A pesar de tener un después de 30 ... ~c1 31 b3 .ib2,
torre de ventaja, las negras están lo más probable es que el final sea
indefensas. ¡Asombroso! tablas.
11. e4
12. l.Og5 e3
13. f4?
13. lL)fS
14. b4 i.f5
15. Wb3 h6
16. ll)f3 t.!)g4
25. •t.;h8
26. ;!\xf5 Wt°h2+
27. \Í;·f1
28. ~96!!
29. "i'xa8+ \t'h7
(P) 2.26 ¿Qué deben jugar
Las negras tienen una torre y las negras?
dos piezas menores de desventa-
ja, y aun así están planeando un Incluso tras la captura del caba-
espectacular sacrificio de dama: llo en g7, las blancas conservan
30 ... °i'h1+!! 31 jj,xh1 l/Jh2+ 32 ventaja material, pero esto no es
~e1 ~g1 ++. Sobre este tema. importante, porque está claro que
Seirawan recordó más tarde el el factor decisivo para evaluar esta
sabio consejo de su primer maes- posición es la desesperada situa-
tro de ajedrez, Jeffrey Parsons: ción en que se encuentra el rey
"¡Piensa sobre lo que queda en et blanco. Las negras tienen una
tablero, no sobre to que ya no amplia elección: después de 33 ...
queda!". ~~xg7 34 ~db1. es posible 34 ... h5
(preparando h4-h3), o bien 34 ... g5
30. 'afg8+! (con idea de guarecer al rey en h5
y, caso necesario, llevarlo hasta
La única forma de prolongar la g3). También valía la pena conside-
resistencia. En caso de 30 l?\xe3 rar la inmediata 33 ... h5 y la inter-
lLJxe3+ 31 ~e1; las negras ganan media 33 ~-· ~g3(h4) 34 s·g 1.
fácilmente, tanto con 31 ... llxg2, Todas estas posibilidades fueron
como con 31 ... ll:ixc4. activamente debatidas en la sala
de prensa, pero Yusupov jugó de
forma diferente.
28. ltd7
Las negras preparan 24 ... l!Jd3, 29. ~h2 a6
seguido de 25 ... c4, donde este 30. a4 :es?
poderoso caballo dificultará las
maniobras de las blancas y sentará la La torre quedaba mejor situada
base para un eventual contraataque, en c8. Yusupov podía ahora iniciar
o bien la transición a un final favora- una combinación: 31 I!exd3! cxd3
ble. Las blancas pueden impedir este 32 l'IeS ~·xeS 33 i..xe5 g 6 (33 ... d2
plan retirando sencillamente la dama 34 ~f 4) 34 'f.S'g4, ganando. Claro
a e2. Pero, de nuevo, eso no encaja que lvanchuk pocila responder 31
en el estilo de ArtLr. De modo que ... g61? (En lugar de 31 ... cxd3) 32
elige la continuación más apremian- 'i'xh6 cxd3, y si ahora 33 :es?.
te, después de la cual la posición de entonces 33 ... 'iixe5 34 .txeS
repente se complica. l:xeS, con superioridad de las
negras. Pero es posible seguir con
24. ~f5f ~d3 33 !'td4!, con la amenaza de un ata-
25. :Eie3 c4 que de mate, a base de 34 es y 35
26; d6 'fl'e6 ~h4.
27. ~d5
31. td4
32. cxd3
33. exf5 ~·e2
198 LA HORl\ilA DE SU
ZAPATO
El principal recurso del bando
defensor -la presencia de animo.
fue plenamente explotado por
mi rival. En un momento dado
tuve que interrumpir el
cálculo de variantes para
preguntarme quién
atacaba a quién.
El final de damas es, por supues- David Bronstein
to, tablas. Pero a lvanchuk sólo le
quedaban un par de segundos en su
reloj (y 15 jugadas para superar el Casi todos los ataques que
control).Artur propuso tablas, pero en hemos analizado en esta parte. aun-
respuesta su oponente se rindió e que extremadamente peligrosos. no
inmediatamente salió de la sala de conducían a una victoria forzosa y
juego. Los árbitros estaban confusos. podian haber sido rechazados, El
hecho de que tuvieran eventualmen-
;.~Cómo finalizó la partida?·· •.le
te éxito no atestigua la superioridad
preguntó el árbitro a Yusupov. de la espada sobre la coraza del
;·Tablas··.
general, sino sencillamente que ese
··¡Pero, yo le oí rendirse!". fue el caso en las partidas .concretas
··No importa. Ofrecí tablas. y la examinadas. No seria difícil selec-
posición es, de hecho, tablas", res- cionar ejemplos en los que el desen-
pondió el gran maestro. lace es exactamente el contrario.
-;;¡;;las piezas enemigas del ataque libre) 12 ~d2 wxe7 13 0-0-0 :td8!
pOf medio de contra-amenazas. 14 'ii'xh 7 ~f6 15 'Wxg7 .a'.xd4 16
'i'g5 iJ.d71. con excelente juego
oorfman • Oolmatov para las negras.
Rostov sobre el Don 1980
11. t\Yh4 cxd4
1. c4 c6 12. 0-0-01
2. d4 d5
3. lllf3 lüf6 En caso de 12 'iWxd4 ~b4+, el
4. ©c3 e6 juego estaría equilibrado. Dorfman,
5. e3 lübd7 que no quiere permitirlo, sacrifica un
6. 'ilc2 .id6 peón. Su oponente acepta el desafío.
7. e4 dxe4
8. lllxe4 lüxe4 12. e51
9. 'ibe4 c5 13 . .td3
10. .ig5
Hubiera sido inocuo· 13 lLJxe5
10. i.d2!? .ixe5 14 ~e1 'i'a5 (la torre está
atacada) 15 f4 li~g4.
10. tlJf6?!
13. ... h6?1
La práctica subsiguiente ha
demostrado que hay caminos más Las negras se preparan para
seguros para jugar esta posición: enrocar, pero ahora su posición se
vuelve realmente peligrosa. En opi-
a) Seirawan-Yusupov; lnterzonal nión de Dolmatov, deberían haber
de Toluca 1982. 10 ... 'ti'as+ 11 .ti.d2 iniciado un urgente contrajuego
'flc7 12 .ic3 {en caso de 12 't'í'g4, con 13 ... J:.e6 14 ~he1 b5!?, o
Artur planeaba un sacrificio posicio- incluso 13 ... b5!? de inmediato. En
nal de calidad: 12 ... 0-0!? 13 .:.ih6 g6 caso necesario, el rey puede ocul-
14 .txfa 'i'a5+ 15 li)d2 Jl.xf8) 12 ... tarse en ta.
lllf6 131i'h4 cxd4 14 'i'xd4 (o bien
14 lhxd4 a6, con posibilidades para 199
ambos bandos) 14 ... O-O 15 n.d1
J:td8 16 i.d3 e5! 17 ~h4 (17 ~xe5?
:es) 17 ... h6 1s O-O ~g4, y tas
negras igualaron.
7. dxc5 ~e6
s. l!c1 o-o 203
9. .txf6 i.xf6
10. e3 'iras
11. a3?1
11. ~c6
25. Ibcf1+ 1. e4 c5
26. 'it>xf1 'i'f3+ 2. /bf3 e6
27. 'i!?g1 3. c3 l.Wf6
4. e5 l"l)d5
También es desesperado 27 5. d4 cxd4
~e1 'ii'h1+ 28 <J?d2 lDc4+ 29 ·it·c2 6. cxd4 'tlc6
'ife4+. 7. a3
El toque final. Las negras captu- Las blancas tienen una buena
ran uno de los peones del flanco de posición. Aquí deberían elegir uno
dama y, con dos peones de venia- de estos planes, igualmente
ja, ganarán sin especial dificultad. atractivos: 1) 11 1Ld2 y 12 ll3c3; 2)
11 S.e1 0-0 12 'ii'e2. con idea de
La conclusión es clara: al ini- 13 ~e4 g6 14 Ji..h6 l:te8 15 ~g4.
ciar una operación forzada para Sin embargo, las blancas optaron
salir de una posición inferior; debe por una jugada negligente, omi-
examinar las variantes minuciosa- tiendo la sencilla respuesta con-
mente. El riesgo estratégico en traria.
tales casos es totalmente permisi-
ble, pero es importante evitar 11. ~e2? tl:ia51
"agujeros" tácticos. Entonces es
muy posible que su oponente no
236 Atac¡11e y defensa
Imaginemos un número de
situaciones estándar en las que un
jugador puede salvarse gracias a
su sentido del peligro.
15. lLife51
15.
16. ~xe5
17. ~d21
238 Atac¡11e y defensa
18. llxa6
19. :.xa6 ~xa6
20. ·~a1 ·~b6
21. l2ixf6+ l!:ixf6
22. b4!?
30. ~xg4+
31. ~xg4 <1.Je3+
15. ~c2 b6
16. c5J b5
17. ~L:ib6 ~b8
18. ll:\xc81
22 .... bxa61?
En situaciones desesperadas
cualquier remedio es bueno. Tiene
usted razón incluso si se mete en
una continuación incorrecta, siem-
pre y cuando le ofrezca al menos
algunas posibilidades prácticas.
(E)2.4
212
26. ·itg7
27. l'tf1 ~e3+
19. .•. b6
37. .1b1
38. lfa1?
38. a2
39: f4 'We8!
40. 'ffe2 'i'a4
41. 'i'e1 gb7
42. i.d2 tLlxd2 Juegan negras
43. 'l'xd2 llxb4
44 . .:d3 J.xd3 (E) 2.7
45. 'Wxd3 llb3
227
Si ahora 46 ~d1, entonces 46
... 'ifb4;
Juegan negras
Da.\· finales frafu·eses
------------~~~~~~~~~~~~~~~~____:::261
14.... lL'if6? 15 .tgS.
DOS FINALES
1S. lL:ixcS
FRANCESES
La necesidad es fa madre 15 l:fe 1 lL:ie6.
de la Invención.
Jonathan Swlft 1S. Axes
16. tüa4
Bakulln • Dvoretsky
Moscú 1974 16 .:tfe1 ~b4!
1. e4 e6 16. ii.d6
2. d4 dS 17. .ixd6 :txd6
3. lbd2 es 18. l::fe1
4. exdS exd5
s. .i.b5+ i..d7 228
6. 'ii'e2+ 'We7
7. i..xd7+ !Dxd7
8. dxcs ~xe2+
9. lLlxe2 ~xcs
Parece que esta jugada fue una Considerando que 18 ... Ite6 19
novedad. Antes, el caballo se des- .!LicS es molesto para las negras,
arrollaba por f6. quería jugar 18 ... l!Jc6. Pero mi
sentido del peligro estaba despier-
12. ~f4 O·O to, y comencé a dudar de la posi-
13. Ifad1 %tad8 ción resultante de 19 c4 d4 20 li.)cS
14. <t.'ic3 b6 21 ~.)d3. Las blancas consiguen
una mayorfa de peones en el flan-
14 i..d6llfe815 i.x.e7 ~e716 ~f4 co de dama, bloquean sólidamente
ll:if6 no es peligroso para las negras. el peón d4, y dominan la columna
e. Tendrían, por tanto, ventaja.
14. .•. ~es Quizá no muy sustancial, pero por
otra parte, sería duradera.
262 A tac¡ tu• y defi.'11.m
14. ~.c6!
15. f4 t;i)d7
16. f5 0-0-0!
264 A laque y dc:fi.•1m1
--------
..
Peor era 16 ... q¡e7 17 li..)h3!, que responder 19 ... ll)b6! 20 -<•,f3
con la amenaza 18 fxe6 fxe6 19 (20 4.ige2 ~.d7. seguido de 21 ...
tLlf4. A 17 ... ng4, hubiera sido des- .tg7 ó 21 ... ~g6) 20 ... ~g7 21
agradable 18 fxe6 fxe6 19 g3! ..'De2?! (21 liJe5 .i.xeS 22 dxe5 d4,
o bien 22 Itexe5 llxd4, con igual-
17. fxe6 fxe6 dad) 21 ... li:f8!, y las negras tie-
18. Jaxe6 :g4! nen compensación más que sufi ..
ciente por el peón sacrificado. en
231 vista de que las piezas enemigas
están atadas.
20. :.txd8
21. t.i:ld1
31. <j;c7
32. .i.d1 •':!Je4!?
33. -itd4
9. fxe5! .!'.;jxe5
10. ~.)xe5 fxe5
T:s mejor t'lllregar 1111 pt•011 •.• 267
26. lL:lxe4
;-
27. ~xe4 .kxg5
, 28. ..ixg5 b6
z." 29. @d3 l:hB
·, ·~ 30. ~f4 es
~-
~~ El final. aparentemente, es de
Esta es la posición que las tablas.
negras buscaban. A pesar de
haber perdido un peón, mantie- 31. a3 ~h3+
nen buenas posibilidades de sal- 32~ l.e3 .:h1
Es mejor elllre¡.:ar tm pemr... 269
Dvoretsky - Kupreichlk
Más preciso era 32 ... a5. Campeonato de la URSS
(Primera Liga)
33. lbc3 a5 Minsk 1976
34. ~dS
235
La partida sería tablas después
de 34 b4 axb4 35 axb4 cxb4 36
©d5 J:td1+ 37 'lt•e4 (37 ..t'c2 ~xd5)
37 ... b5 (peor es 37 ... b3 38
lbxb6+ <kc6 39 ll:la4) 38 cxb5 b3
39 J.d4 (39 li:lc3 b2) 39 ... b2! 40
.ixb2 .Ub1 41 lüb6+ wc7 42 lLlc4
J:xb2+ 43 IL!xb2 ~b6.
34. ~c6
35. llie7+ Las blancas tienen una diflcil
tarea defensiva, puesto que su
Aquf merecía seria considera- estructura de peones es desorde-
ción 35 b4. Las blancas han deci- nada y su oponente tiene una noto-
dido no emprender ninguna ria ventaja de espacio,
acción decisiva antes del aplaza-
miento. 22. wg2
27. d4! f6
28. ii..c7 ~lxf3+
29. ·J;xf3 Uxd4
30. füd1
237
Posicionalmente, un cambio
como éste es deseable, pero aquí
se basa en cálculos concretos. Las
negras tienen que tomar ahora una
difícil decisión.
32. .t.,e6
33. Iib5 ~h8?1
34. ii>g2 -:;d7
35. nxb71 '~C6
36. 1'ía7 ~.;;.es
37. ::xa5 .:Xc8?1
Juegan blancas
Las negras podían haber con-
seguido tablas jugando 37 ... ..txf2!
38 ~xf2 ?:ixc7 39 !:a7+ .¿¡-d6! 40
l:txg7 g5 41 Wg3 fta8.
42. f3 ~&d5
43. J:.f2 .txf2
44. wxf2 g5
45. •;!;>g3
18. f4
dida hasta este momento, pero aquí, junto homogéneo, con un solo plan
lamentablemente, cometió dos erro- a lo largo de cada lucha. Normal-
res que cambiaron por completo el mente, comentaba las partidas tle
curso lógico de la partida. otros grandes maestros en la misma
vena que las suyas. Aun sin negar
24. c5 la importancia educativa de tal
25. ~b5? método de anotación de partidas, es
imposible no ver, al mismo tiempo,
Tarrasch continúa la combina- sus defectos, a los que, por cierto. el
ción errónea, iniciada en su jugada propio Lasker se refirió en su
anterior. Entretanto, como observó Manual de ajedrez: "El plan de toda
correctamente Teichmann, jugando una partida no debería estar cond1·
25 bxc5! !lxc5 (malo es 25 ... dxc5? cionado a un motivo único. como
26 es ó 26 ~!:ibS) 26 !lb1 t:Jc4 27 preconiza Réti. Tal motivo es dema-
~d3, seguido de t.!\d4-c2-e3, las siado flaco para este propósito. Las
blancas no quedarían peor en consideraciones de Réti son correc-
modo alguno. tas y válidas en tanto son respalda.
das con análisis. Pero cuando abar.·
25. cxb4 dona el fundamento de los análisis
26. ~xd6 Itxd6 para extraer una conclusión audaz y
27. e5 ~xf4! generalizada, entonces sus argu-
mentos son erróneos"'.
Tarrasch había omitido, por
supuesto, este contragolpe. Pero Lo que más me interesa en aje-
su combinación hubiera sido inco- drez es el problema de la búsqu~
rrecta, aunque las negras no hubie- da de la mejor jugada y de la loma
sen dispuesto de esta réplica. Muy de decisiones. La partida Tarrasch
fuerte era. por cierto, 27 ... ~d1 +!? - Lasker contiene algunos epis.o-
28 ~·xd1 ~'c6. dios instructivos de esta naturalr__..
za. Por ejemplo:
Aqui concluiremos nuestro exa-
men de la partida y considerare- 1. El audaz y nada convencio-
mos por qué el cuadro pintado por nal traslado de la torre negra a la
un sutil connoisseur como Richard quinta fila. con el propósito de carn ·
Réti estaba tan equivocado. biar la situación del tablero y r.l!s-
traer a las blancas del ataque al wy
Es característico de todo jugador contrario.
ver en cada material que esté estu-
diando precisamente aquello. que 2. La conexión entre el er1·0·
está buscando. En su propio juego cometido por Lasker. en su jugadt:1
de torneo; Réti siempre trató de pro- 19, y su estilo de juego. La cornpa·
ducir partidas que formasen un con- ración lógica de las diversas po!:i1ti1
Formese .m pro¡Jia opi11M11 281
(E) 2.10
246
¿Qué le recomendaría
usted a tas negras?
(E) 2.11
¿Deben las negras apresu-
rarse a contraatacar con 18 ...
b4 o es mejor optar por la
jugada defensiva 18 ... A.es?
(E) 2.12
248
13. ...
--
~·es1
'ife6 11 ~e11'..e7. las blancas conti-
núan con 12 t?,b3 (también es posi· Otra sutil jugada defensiva;
ble 12 'ii'f1 de inmediato) 12 ... c5 13 Hubiera sido prematuro jugar 13
'Wí1, con peligrosas amenazas. ... c;i;c7?, en vista de 14 'Wa6,
pero ahora las negras están listas
¿Hemos tenido en cuenta todas para jugar 14 ... ~c7 15 ~a6
las jugadas? No, hay otra, que se Wc8! Lamentablemente, aqui la
le escapó a lvanchuk, y que partida llegó a su punto final. por-
Dolmatov encontró ante el tablero. que los jugadores acordaron
tablas. Dudo de que las blancas
10. ... wd8!1 tengan suficiente compensación
por la pieza.
Las negras plantean la amenaza
11 ... f6. Puesto que el final resul- Mi impresión se vio confirmada
tante de 11 !!e1 f 6 le ofrece a las después de la partida Svidler •
blancas escasas perspectivas (el Dolmatov (Haifa 1995}, cuando le
peón extra será defendido con ... c6- propuse al joven talento y gran
c5), lvanchuk tuvo que decidirse maestro de San Petersburgo. con-
por un discutible sacrificio de pieza. tinuar la partida lvanchuk -
Dolmatov como una forma de ejer-
11. ..'!'.b3 f6 cicio analítico.
12. .Ag5
14 b.f.fe1 Wc7 15 ~f3. En la
Era digna de considerar la reco- variante 15 'CYa6 ~cB! 16 'i'xc8+
mendación de Anand, 12 f4!? llxc8 17 lt)f7 t!Jh6! 18 <!JxhB .;;;.b4.
las negras conservan la pieza de
12. ••• fxg5 ventaja. 15 ... j:,b4!? 16 ·fí'g3
13. i?.ia5 j_d6 17 c4 ~f6 18 tbaxc6. En
caso de 18 c5, después de 18 ...
xxeS 19 .)1xe5 ~.::ShS! 20 l:xeB (20
~xgS h6! 21 'i7ixh5 ~xh5 22 .tl'.xh5
249 g5) 20 ... fi:lxg3 21 llxh8 =:xh8 22
hxg3 ñbB, y las negras ganan el
final.
... a6, cayendo así dentro de las nente: 31 c4? dxc4 32 bxc4 ,:~fS 33
intenciones contrarias. ..ie2 li)f7? (33 ... .1g4! hubiera sido
confuso) 34 g4! ~~xgs 35 gxf5 :: "e4
(E) 1.18 36 f6! .Akd7 37 ~f2 Itd2 38 ::.:ae1
Jodos • Mikenas lL!xf6 39 ~f3 ~h5 (más tenaz era 39
(Campeonato de la URSS, ... ~fd7) 40 ..ixh5 gxh5 41 f 5 .:.-~xc4,
Erevan 1962) y las negras se rindieron.
Las negras podían haber logra- Las piezas negras están dis-
do tablas. sacrificando el alfil: puestas para abalanzarse sobrela
dama enemiga, extraviada en su
25 :xe5! territorio. Pero la caza no es tan
sencilla. En la partida siguió 26 ...
Por ejemplo: 26 !t~xb7 l:d5 27 ~a8? 2 7 ~'b7 ~c6 (27 ... :l.cbB? 28
g3 !t.d7, o bien 26 f 3 ftd5! 27 4Jxf7 ·'bf5!: 27 ... .:ii.g6? 28 Wixb5) 28 ~b6
~;·xf7 28 1J.c7+ 'f'~"f6 29 l'!xb7 :.d1+ ~xa2 29 !ía1, con una posición
30 ·Jif2 ~d2+ 31 'ltg3 .rtxb2. confusa.
30. na2
31. ~g2 ~a6
32. H.d7 :a4
33. 'lt>f3 l::tb4?
256
(E) 1.40
Kuzmin - Yusupov
{Rostov sobre el Don 1980)
Si 27 :'.e7, 27 ... 'Wc5! (no 27 ... ~ab1. Por ejemplo: 29 ... :S.c2 30
4Jxb1 28 .ic4+ ~h8 29 'ii'xd7, con li.Jg5 ~dd2 31 ltlf3 ;;,r2 32 ::es!
las amenazas 30 :Ixg7 y 30 Il'.e8+) :l.xf3 33 f7 :ff2 34 :xcS+ '~b6 35
28 i.c4+ Wh7 29 'i'xd7 "i'xf2+, y la !lh5, o bien 29 . . . llf2 30 .;;_¿e5
partida finaliza con jaque perpetuo. !ldd2 31 ltJg4. Sin embargo, 29
... ~d4! 30 0e5 .txb2 31 f7 ~de
27. .•. Wh7l lleva a una posición confusa.
(11)
25. ;;xd5!1
26. exd5 ·~xd5 Una variante forzada de doce
27. 'íiif1 jugadas ha desembocado en un final
muy interesante, en el que las
27 ~-e4? ('. 'xe4 28 ·-wxe4 W.fxe4 negras tienen dos peones por ei
29 ~xe4 ..ixe4 30 lixd4 c2. y el caballo, pero en su jugada siguiente
peón se convierte en dama. ganarán un tercer peón y luego -s:
fuera preciso- un cuarto (en b3). Ei
27 .•.. .:~)f3+! amenazador peón pasado de c3 y lñ
desafortunada posición del rey blan~
- Soluciom•.\ u los eJad cios a11alí1icos
18. e41
(E) 2.5
Kupreichik - Yusupov
(Campeonato de la URSS,
Vilnius 1980/81)
4. l:fe1
263
Puesto que las blancas no pue-
den jugar 6 ~f6?? (6 ... ~g6++), ni
6 ·~rts?? (6 ... i.g4++), parece que
están obligadas a continuar con
6 ~d4, con una posición extrema-
damente complicada. Tal desarrollo
de los acontecimientos le habría
convenido perfectamente a las
negras, pero su combinación fue
refutada por el inesperado contra-
golpe 6 J.xh7+11, y después de 6 ... 4. ~f8!
wxh7 (6 ... ~xh7 7 ~xg5+ ..ig6+ 8
~h4) 7 1*'f5+ ·~96+ 8 ~h3 IthB 9 El punto vulnerable en la defen-
e6 d4 10 Itfd1 ~98 11 I!xd4! 'tlUfB sa blanca es la casilla f3. Si lo con-
12 ~xh8+ :,i,•xhB 13 :th4+. Las solidan, con 5 ~e2, las negras
negras se rindieron. pueden reforzar tranquilamente su
posición. con 5 ... ::f4,
Sin embargo, había otra posibi-
lidad a considerar, que en mi opi· 5. 1.>f1 ~xe5
nión es la más fuerte: 6. dxe5 ~xf31
7. 9xf3 'i'h2f
1. ... lb93!!
Sollldó11<'.'i a los ejercidos "'i"lítico.\· 321
Indice de preguntas
• • •
y eJerc1c1os
Cambios Iniciativa
Preguntas: 1.28, 1.31, 1.32, Preguntas: 1.15, 1.16, 1.20.
1.50, 1.60, 2.1. 1.27, 1.31, 1.32. 1.33, 1.39, 1.40,
Ejercicios: 1.18, 1.22, 1.23, 2.2, 1.51, 1.56. 1.63, 1.66, 1.68, 1.70,
2.3. 2.1, 2.2. 2.6, 2.8, 2.10, 2.12, 2.14,
2.16, 2.17, 2.18, 2:19, 2.22, 2.34.
Comparación 2.37, 2.38, 2.41, 2.46, 2.47, 2.59,
Preguntas: 1.19, 1.47, 1.73, 2.52.
2.11. Ejercicios: 1.22, 1.36, 1.43, 2.2,
Ejercicios: 1.16, 1.23, 1.24. 2.4, 2.5, 2.8, 2.10, 2.11.
Profilaxis
Preguntas: 1.38, 1.59, 2.5, 2.7,
2.12, 2.13, 2.23, 2.43.
Sacrificio posicional
Preguntas: 1.6, 1.20, 1.46. 1.63,
2.1, 2.6, 2.10, 2.12, 2.14. 2.18,
2.19. 2.20, 2.22, 2.34, 2.46, 2.50,
2.51.
Ejercicios: 1.10, 1.42, 2.1, 2.5,
2.6. 2.7. 2.8, 2.10, 2.11, 2.12.
Técnica de realización de la
ventaja
Preguntas: 1.10, 1.22. 1.23,
1.25, 1.32.
Ejercicios: 1.13, 1.23, 1.24,
1.35.
Trampas
Preguntas: 1.48, 1.49, 1.50,
2.29.
Ejercicios: 1.26, 1.27.