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El cubo de Rubik.
Arte mexicano en los años noventa,
de Daniel Montero
Rubik’s Cube. Mexican art in the 90s by Daniel Montero
Gabriela A. Piñero
Universidad de Buenos Aires (UBA),
Universidad Nacional del Centro de la Provincia de Buenos Aires (Unicen), Argentina
pinero.gabriela@gmail.com
Resumen
¿Cómo dar cuenta de la diversidad de factores que, en el México de los años noventa, determinó
el desplazamiento de una manera de hacer arte que se llamó neomexicanismo a otra vinculada
con el arte-objeto-conceptual? ¿De qué modo se articularía esta nueva modalidad artística con el
progresivo abandono de marcos de sentido nacionales, a favor de relatos que ya no buscaban ins-
cribir las obras en el terreno de lo geográfico, sino en el horizonte de lo contemporáneo?
FIGURA 1. Portada del libro El cubo de Rubik. El cubo de Rubik. Arte mexicano en los años noventa, de Daniel Montero (2014), analiza de
Arte mexicano en los años noventa, de Daniel qué manera se concatenaron varios fenómenos ocurridos en la escena artística mexicana para
Montero, 2014, México, Fundación Jumex
Arte Contemporáneo + rm (Colección Acadé- transformar el campo local del arte a partir de la redefinición tanto de lo artístico como de las
mica, Nº. 0001). formas de producción plástica y narrativa. Los diversos frentes que analiza Montero (los múltiples
lados del cubo de Rubik) esbozan la configuración de una zona en la que lo artístico es también
política y economía.
Palabras clave
Abstract
How to present the diversity of factors that, in the Mexico of the 90s, determined the displacement
of a way to create art called neomexicanismo to another linked to object-conceptual-art? How was
this new artistic modality articulated with the progressive neglect of frameworks with a national
meaning, in favor of narratives that no longer sought to be geographically relevant, but that prio-
ritized the contemporary?
Rubik’s cube. Mexican art in the 90s by Daniel Montero (2014), analyzes the way in which
different events that took place in the Mexican art scene came together to transform the local art
field, departing from the redefinition of both art and the plastic and narrative production forms.
The different approaches analyzed by Montero (the different sides of the Rubik’s cube) present the
configuration of an area in which art is also politics and economy.
¿
la configuración de una zona en que contexto neoliberal de globalización
Cómo dar cuenta de la diversidad lo artístico es también política y eco- hace difícil pensar en una posible di-
de factores que, en el México de nomía. ferencia radical en términos de di-
la década de 1990, transformó la Con un prólogo del artista Luis sidencia militante. El cambio en las
manera de producir arte para pasar Felipe Ortega,2 El cubo de Rubik políticas económicas que regulaban
del neomexicanismo1 al arte-objeto- apuesta, mediante el ensayo, a posi- el país con el fin de ingresar en el
conceptual? ¿De qué modo esta nue- cionarse en la serie de debates que “mundo globalizado” —mediante,
va forma artística habría de indicar el acompañó la visibilidad y la co- por ejemplo, la firma del Tratado de
desplazamiento de marcos de senti- mercialización creciente de artistas Libre Comercio de América del Nor-
do nacionales a obras y relatos que como Gabriel Orozco (México), Te- te (tlcan 1994)— aparece en el re-
ya no buscaron inscribirse (tanto) en resa Margolles (México), Francis Alÿs lato de Montero como intrínseco a
el terreno de lo geográfico sino, más (Bélgica), Rubén Ortiz Torres (Mé- los desplazamientos experimentados
bien, anclarse en el horizonte de lo xico) y el propio Ortega (México), en las formas de producir y escribir
contemporáneo? ¿Cómo pensar y es- por mencionar algunos. El primer el arte local. De esta hipótesis se sir-
cribir las interrelaciones que en esta capítulo del libro, “Obelisco roto ve el autor para, asimismo, resaltar
tarea operaron desde la crítica, la cu- para mercados ambulantes”, anali- el modo en que la apertura a los ca-
raduría, la producción e incluso el za el devenir del Obelisco roto por- pitales privados (locales y foráneos)
mercado? tátil para mercados ambulantes, de cambió —o al menos hizo que se di-
Desde la historia institucional y la 1992, obra de Eduardo Abaroa (De- versificaran— los lugares tradiciona-
sociología del arte, El cubo de Rubik. broise 2006a), e informa del carácter les de promoción de dicho arte. De
Arte mexicano en los años noventa, y el proceso de institucionalización este modo, junto a aquéllos, empe-
de Daniel Montero (2014), analiza del nuevo arte. Hecho con lona co- zaron a circular en el país capitales
cómo, a partir de una redefinición lor rosa mexicano que se tensa en simbólicos inéditos.
de lo artístico y de las formas de una estructura de hierro desarmable, El análisis emprendido en el se-
producción plástica y narrativa, una Obelisco roto es una “versión chapa- gundo capítulo, “Capitales culturales
serie de fenómenos ocurridos en la rra” del Broken obelisk (1963-1969) -capitales económicos”, borda sobre
escena artística mexicana de los años de Barnett Newman (MoMA 2016). esta estrecha vinculación entre eco-
noventa se articuló de modo tal que Exhibido por primera vez en Temísto- nomía y cultura en un contexto glo-
transformó el campo local- del arte. cles 44 —uno de los tantos espacios balizado, y revela cómo el “éxito”
El estudio de los procesos de institu- alternativos que proliferaron a fines económico relativamente alcanzado
cionalización de un conjunto de pro- de los años ochenta en México—, por este conjunto de producciones
ducciones que, durante el periodo así como junto al tianguis de Santo de los noventa se dio luego del inten-
analizado por Montero: 1988-2007, Domingo, al sur de la Ciudad de Mé- to frustrado por comercializar en el
se corrieron de la alternatividad al te- xico, y posteriormente en Guadala- exterior el neomexicanismo, y a cau-
rreno del arte contemporáneo (la ins- jara (México), Nueva York (eua) y el sa del giro hacia obras más “concep-
titucionalidad) enfatiza el valor mó- Palacio de Bellas Artes (pba, Ciudad tuales” que, principalmente por la
vil de las obras y de sus horizontes de México) del Instituto Nacional de recesión económica de 1990-1991,
de sentido (Montero 2014:151, 24). Bellas Artes (inba), la obra refleja una estaba experimentando el merca-
Los conceptos de capital cultural y alternatividad que, ya a inicios del do del arte internacional (Montero
capital simbólico, tomados de Pie- año 2000, se erigía como nuevo ca- 2014:58-59). En la escena local, esta
non del arte hecho en el país (Mon- nueva dirección resulta evidente en
1
El término nuevos mexicanismos fue acuña- tero 2014:29, 43, 153-154). el “ajuste” que hicieron a su plan-
do por la crítica e historiadora del arte mexi- ta de artistas galerías como la omr
2
cana Teresa del Conde en 1987. Con éste se Luis Felipe Ortega (Ciudad de México, (1983) y Arena México (mediados
refería a un grupo de pintores cuya obra ad- 1966), egresado de la Facultad de Filosofía y de los años noventa), que de promo-
quirió gran visibilidad en la década de 1980: Letras de la Universidad Nacional Autónoma
cionar obras “neomexicanistas” se
Enrique Guzmán, Adolfo Patiño, Carla Rippey, de México (ffyl-unam), es parte del grupo de
decantaron por otro tipo de piezas
Javier de la Garza, Eloy Tarcisio, Nahum B. artistas que renovó la práctica artística en la
Zenil, entre otros: en sus producciones apare- década de 1990. Su obra se despliega en di-
más “conceptuales”. La argumenta-
cían, por medio de la recuperación de códigos versos soportes, incluido el dibujo, el video, la ción de Montero se construye, así,
e imágenes persistentes propias de la cultural fotografía, la escultura y la instalación. Partici- con base en el diálogo entre una es-
local, “ciertas constantes de identidad disper- pó en numerosas exposiciones en México y el cena artística mexicana que conoce
sas” (Conde 1987: s. p.; Debroise 2006b:276- extranjero; en el 2015 representó a México en muy bien y una serie de reflexiones
278). la 56 Bienal de Venecia (Ortega 2014). más generales sobre la naturaleza y
Gabriela A. Piñero
Universidad de Buenos Aires (UBA),
Universidad del Centro de la Provincia de Buenos Aires (Unicen)
pinero.gabriela@gmail.com
Doctora en historia del arte (Universidad Nacional Autó- del Centro de la Provincia de Buenos Aires ([Unicen] Ar-
noma de México [unam], México), magíster en historia gentina), y en la Escuela de Bellas Artes Luciano Fortabat
del arte en la misma institución (unam) y licenciada en de la Ciudad de Azul, Buenos Aires (Argentina). Especia-
Artes (Universidad de Buenos Aires [uba], Argentina). Fue lista en teoría y crítica de arte contemporáneo en Amé-
becaria posdoctoral del Consejo Nacional de Investiga- rica Latina. Ha publicado su investigación y participado
ciones Científicas y Técnicas [Conicet], Argentina, y do- en congresos nacionales e internacionales en Argentina,
cente en la Facultad de Artes de la Universidad Nacional México, Colombia, Canadá y los Estados Unidos.
Postulado/Submitted 10.03.2016
Aceptado/Accepted 01.12.2016
Publicado/Published 31.01.2016