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  • 2.2 - A-Anguiano - La Diplomacia en Torno Al Desarme

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    anguiano, la dimplomacia en torno al desarme, sem

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    3 MEXICO: LA DIPLOMACIA EN TORNO AL DESARME Eugenio Anguiano* CONTENIDO Invoduecion 90 sfuerzos internacionales de desarme. 2 Segunda Guerra Mundial y surgimiento de un nuevo ‘aden internacional 4 COptimnismo en la ONY en materia de desarmne, 1946-1948, 102 La Guerra Fa y el surgimiento de estructuras de seguridad al margen de Ta ox, 1940-1960 lot El inicio de los foros internacionales de desarme mas eficaces y Ia participacién de México, 1961-1978 108 Hiacia el fin de la Guerra Fria, 1979-1989 13 El resurgimiento del desarme ett 1990-2000 y la crisis, de la diplomacia multilateral, 2001-2008, 14 El gobierno de Batack Obama despierte optimismo en materia de desarme 15 EL fatuto 129 Referencias 3 * Profescrinvesigador ascend del Cento de Investigacion y Docencla Beonomncs, - Este acuerdo fue sobre sce temas Ensre los seis diferente l de lx eveacin de Fa ‘cea estaban las ttatadas de ps2 con Kala, Rumania, Bulgaria, Hungra y Finlandia: la cxeacin de la Comision det Lejano Oriente y de un Consejo Aliado para Japén; la disi- ‘sin temporal de Corea y la euestisn china (Keesing 1946-1948: 7629-7631). EL COLEGIO PE {MEXICO 48% MEXICO LADILOMACIA EN TORNO AL DESIRE 99, cconseeutivos que residié en la Casa Blanca, habla proclamado la politica del ‘buen vecino cuyo propésito era reparar los datos cll abanclonio de América Latina por pate de Estados Unidos, acompariado de tensiones diplomati- ‘cas causadas por las intervenciones recurrentes de Washington en los astm- tos internos de los demas paises del hemisferio occidental, la mayoria de las ‘veces pata defender los intereses privados estadounidenses en la region. sa politica fue uma peqnetia excepcién a la posicion clara de aisla- miento general de Estados Unidos slimentada por urta mayorfa en el Con- greso y por una opinién publica opuesta a la participacién de su pais en los conflicts y crisis internacionales de la época. Roosevelt abandonatia sgradualmente tal aislamienté en su segundo periodo presidencial (1937. 1941), ante el avance de las ambiciones geopoliticas de Alemania en Euro- pay de Japon en Asia-Pactfico y frente al estallida de la guerra en el viejo continente en septiembre de 1939. En respuesta a la atrolladora ofensiva alemana en Europa continental, en el verana de 1941 el presidente estado- uniclense suscribiria con Winston Churchill Ia Iarnada Carta del Attantico para otorgar ayuda economica y material a Gran Bretarta, asediada por las fuerza alemanas. Fue precisamente al final de este periodo cuando termina la politica de aislaniento internacional, previo al ataque japonés a Peat! Harbor y ala consecuente entrada de Estados Unidos a la guerra mundial, que Ezequiel Padilla, secrevario de Relaciones Exteriores durante el periodo 1940-1945, ‘puso en prictica la politica exterior de Avila Camacho, denominada Docti- tna Panamericana, de alineamiento de México y dle casi todas los paises lat- noamericanos al bloque politico-miltat encabezado por Estados Unidas, ‘Gran Bretafia y la Union Soviétiea para enirentat a las potencias del Eje. Padilla articulé dicha doctrina reviviendo la Doctrina Monroe —encar- naa, segin él, en la politica del buen veeino— como respuesta a los retos ‘que el continente americano enfrentaria desde el exterior y la optiso al idea vio del Partido Accién Nacional, creacio por Manuel Gomez Morin y ottos ‘en septiembre de 1939, y a posiciones afin mas extremas coma la de José ‘Vasconcelos, quien buscaba los elementos de una alianza tegional en la he= rencia cultural de la hispanidad en contra de la influencta cultutal proces- tante y anglosajona, El secretario de Relaciones Exteriores —califcado por muchos como anticomunista, entregado a los estadounidenses y alos inte- reses del capital privado, nacional y extranjero— (Emrfquez Perea, 1992: 301-311) contribuy6 significativamente a la consolidacion del panamerica- rnismo con Ia Confetencia Interamericana de la Guerra y de la Paz (Conle- EL COLEGIO F7#® | DE MEXICO 2% 100 RELACIONES TERNACIONALES rencia de Chapultepec) de marzo de 1045, y la vez aseguré la partcipacion ‘de México en la construccién de la owt y de los fandamtentes de un nuevo ‘orden politico mundial desde un plano, na de potencia bélica, sino de pats con tradicion pacifisa y defensor de principios de convivencia internacio- nal, como los de la libte-autodererminacion de los estados y la no interven ‘én, mantenimiento de la paz y seguridad internacionales, eteétera, Ein la Conferencia de San Francisco la delegacién mexicana estuvo en- ‘cabezada por el propio secretario Padilla, con la participacion adicional de ‘experimentados diplomaticos ¢ internacionalistas como Luis Padilla Nervo, Rafael de la Colina, Luis Quintanilla del Valle y otros. Durante los trabajos dle la confetencia, aparte de las cuatto comisiones y subcomisiones que se formaron para conducir debates y negociaciones en las que participaron varios paises latinoamericanos, se establecié un comité ejecutivo pata lidiar con los temas de mayor controversia formado por 14 patses: los cinco gran- des y ulteriores miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ‘ONU, mas otros nueve paises entre los qute estaban Brasil, Chile y México. Fstas representaciones latinoamericanas y las llamadas potencias medias ‘como Suecia y ottas dieron la pelea en el comité ejecutivo a favor de lt democtatizacion del venidero Consejo de Seguridad, 0 cuando menos para limita el ejercicio del veto por parte de los cinco miembros no permanen- tes del mismo, solamente a los casos donde se discutiera la aplicacion de ssanciones econémicas 0 militares, pero no para la solucién pacifca de dis- putas ventiladas en el consejo, lo que obligé a los “cinco grandes” a redactar una posicién conjunta, en la que reiteraron la necesidad de mantener sin ‘cambio el proyecto del consejo surgido de Dumbarton Oaks y ratificada en Yalta; la Asamblea General adopt6 dicho proyecto por 30 votos a favor, uno) ‘en contra {de Cuba) y 15 abstenciones, entre ellas Ia dle México, El activismo diplomatico mexicano en San Francisco puede sintetizar- ‘se en tes instancias, que reflejan la adecuacién de la Doctrina Panamerica- naa principios de politica exterior derivados de la Doctrina Carranza, que podria considerarse como antiteics al revisionismo del gobierno de Avila ‘Camacho, Dichas instancias son: la defensa del ingreso de Argentina a la Cony, al que se oponfan la Unidn Soviética y otios pafses, sobre Ta base de los acuerdos regionales de Chapultepec y de que, casi al final de la confla- gracion mundial, ese pats le habia finalmente declarado la guerra a as po- tencias del Eje, no obstante las obvias simpatias del régimen peronista por <1 fascism italiano y el nazismo aleman; la declaracion de México, hecha por Quintanilla al final de la Conferencia cle Son Francisco, de ratificar el ul EL COLEGIO P7a® BEDE MEXICO 288 NENICO.LADPLONACIA ENTORNO ALDESARME 10] concepto de que el ingreso a Ia owt deberia quedar abierto a los “Estados amantes de la paz que acepten las obligaciones de In Carta constitutiva, excepto a los gobiernos derrotades del Eje ya todos aquellos impuestas por ‘medios militares por dicho Eje, como la Espavia falangista” (Keesing’s 1943- 1045: 7417), y la ya relatada sobre votos diferenciadlos en el Consejo de Seguridad. Durante la primera parte de In primera Asamblea General en Londres (enero-febrero de 1946, Westminster), México estuvo representade por el “eibajador especial” (en realidad lo era ante el Reino Unido) Alfonso de Rosenzweig Diaz, de relativamente bajo perfil politico en la delegacién ‘mexicana en comparacién con la nutrida dlelegacién que habria de participar cen la segunda parte de la acon en Flushing Meadow, Nueva York, del 23 de octubre al 16 de diciembre de 1946. Padilla, que habia tomado parte en 1a formalizacién de la ONU, ya no intervino en Ia primera AGONU porque se pteparaba para la contienda presidencial mexicana y, en octubre de 1945, habia dejado Ia titularidd de la Secretaria de Relaciones Exteriores; en su lugar se designaria a Francisco Castillo Najera, diplomatieo veterano mas afin com las posiciones de la era carrancista, En las primeras seis semanas de trabajos de la Asamblea General se aprobaron resoluciones importantes, en particular la ya mencionada relati- vaala cteactén de la Comisiin de Energia Atomica. También se eligi a los Iintegrantes del primer Consejo de Seguridad de la historia de la ONt, en su componente de miembros no permanenies, con la siguiente votacién (se requerfa un minimo de dos tercios de los participantes a la asamblea par ‘que tn pats fuera electo: 34 votos): Brasil 47, Fgipto 45, México 45, Polonia 39, Holanda 37 y Australia logré quedatse después de que dectinara Cana- 4, luego de tes votaciones en las que ninigano de esos paises alcanzabs el rminimo requerido. De acuerdo con lo establecido, los miembros del consejo pasaban a formar parte de la ces, por lo que México se encontré involucrado en el inicio de las negoctaciones de desarme, dominadas y orientadas por Esta- dos Unidos y la Unién Soviétiea, con cierto activismo de los atros tres ‘miembros permanentes del consejo. El gobierno de Avila Camacho designé ‘Luis Padilla Nervo como st representante perrianente ante la o8U, quien, también actus en las actividades del Consejo de Seguridad apoyado por Rafael de la Colina, Castillo Najera aparece en los anales de la onu como representante mexicana ante el Consejo de Seguridad. durante la segunda patte de Ia primera sesion de Ia AcowU, celebrada justo cuando en Mexico EL COLEGIO FIER DE MEXICO 4... j 102. AELACIONES INTERNACIONALES se producia el eambio de gobierno de Avila Camacho a Miguel Aleman Valdés, cuyo secretarlo de Relaciones Exteriores ser‘a Jaime Torres Bodet, quien en 1948 dejaria el cargo para ocupar la Secretatia General de la vunesco. En la historiogralia diplomatica mexicana se resalta la labor de Fran- isco Castillo Najera, Luis Padilla Nervo, Rafael de la Colina y Luis Quin tanilla como los fundadores de una corriente rmultilateralista, que le trae ria muchos blasones a la politica exterior nacional en cuestiones relativas al desariollo de la cooperacién intemnacional para el mantenimniento de la paz y la estabilidad politica, y por ende del desarme, sin menoseabo del libre ejercicio de la soberanta nacional, En rigor, esos internacionalistas se apegaron a una diplomacia de caricter defensivo que, entre cosas, en la Secretaria de Relaciones lxteriores produjo una aversion a que México participara de nueva cuenta en el Consejo de Seguridad por los siguien- tes 34 aos el pais ni siquiera presentaria su candidatura a ese érgano internacional. COPmIMISMO EN LA GNU EN MATERIA DE DESARME, 1946-1948 En cuanto al desarme, el afio en que México partcips en la Comision de Energia Atémica tuvo como delegado acreditado al destacado cienttfico Manuel Sandoval Vallatta® Los miembros permanentes del Consejo de Se- guvidad designaron representantes de alto nivel politico en la Comision. Por Estados Unidos actu Bernard M. Baruch, financiero de ascendencia alema- na, estadista y asesor de seis presidentes estadounidenses, quien haba he- cho su fortuna como especulador en Wall Street; Andrei Gromyko, emba- jacor en Washingion y participante en las principales conferencias de la segumda Guerra Mundial, que posteriormente fungitia como ministro de Relaciones Exteriores de su pais y presidente del Soviet Supreme, etc, Brasil «stuvo representado en la comision por un capitan de corbeta © 1909-1977, plonero dela fisiea mexicana ylatinozmetieana hizo mumerasts eon tnbuctones ala fisca teorieay de los rayos cosmices. Se gradue en ingeniertaelectiea ‘ena uxaM.y en el mtr en este tlkime tambien obuvo el doctorado en eteneas con es- pecialdal en isco-matematicas. En 1927 obtuvo la beca Guggenheim para estudiar en Ja Universidad de Berlin, donde tuvo profesores nobles, ente otvos Albert Einstein y Max Planck. LMEXICO:LA DILOMACIA EN TORNO AL DESABNE 103 Como se determiné al momento de su establecimiento en diciembre de 1945, las funciones de la cra exam las de hacer propuestas conctetas sobre cuatro reas especificas: el intercambio entre todas las naciones de informa cién cientifica fandamental sobre los usos pacificas de la energta atomica; el control de la energia atémica, hasta donde fuera necesatio, para garant av su empleo tinicamente para fines pacificos; la eliminacién de las arimas _gtémicas, as{ como las demas armas capaces dle catsat la destruccién ent masa, y salvaguardias efectivas mediante inspecciones y otros recursos, pata proteger eficszmente a los estadas que respeten sus compromisos con- tra peligros de violaciones y evasiones.” Estaclos Unidos present6 un plan (Baruch) en la CEA para crear una antoridad internacional que se encargata del desanvollo de la energia atomi- capara fines pactficos, asi como de la verificacion de las actividades en este campo en todos los paises y el establecimiento de un sistema internacional de control y verificacion que, de operar efieazmente, llevaria a Washington a dejar de producir armas atémicas (Estados Unidos tenta entonces e mo- nopolio) y a desttuir ls ya existentes. La Union Sovietica no se oponta ala internacionalizacién de los usos pactticos de la energa atémica, pero pro- pponfa que hubiera primero un tratado para kt liminacion total de las armas atémicas. EL 14 de diciembre de 1946 la Asamblea General aprobo por unanimi- dad Ia Resolucion 41(\) sobre los “principios que tegiran la regulacién y reduccién de armamentos” y, para complementar los trabajos de la Comni- sign de Energia Atotnica, aprob6 el 13 de febrero de 1947 en su segundo periodo de sesiones, la cteacién de una Comision pata Atmamentas Con- vencionales" (Resolucion 18-10, integrada tambien por los miembros del Consejo: de Seguridad y cuyo manclato era preparar, en um plazo de tres ‘meses, propuestas para la regulacion y reducci6n de armmamentos de tipo corriente y fueraus artuadas de los miembros permanentes del consejo, ast como pata la adopcién de salvaguatdias que asegurasen esa regulacion y reduccisn, Con estas acciones y las desplegadas en la primera comision de la Asamiblea General dedicada a cemas politicos, incluidos los elatvos al des- ‘arme y a la seguridad, se despert6 un gran optitnisiao en cuanto a las posi- 7 Resahuign 3 ( de 24 de enero de 1946 con el tema: Fseablecimfento de una co imision para tat Ios problemas planteados po el descubyimiento de a enexgi atic " Canacida también como Comision ce Attramentas de Tipo Corriente EL COLEGIO F#4% RYDE MEXICO &. 104 RELACIONES rTERNACIONALES| bilidades de un entendimiento politico internacional pleno en materia ce desarme en el seno de la ONU, en un futuro mAs o menos cercano. Lamen- tablemente la ruptura entre los aliados —que resultaron ser solamente de ccasidn—, la Unién Soviética por un lado y Estados Unidos y el Bloque de paises capitalistas por el otro, echo por tierra el optimismo inicia LU GYERRA FRIA Y EL SURGIMIENTO DE ESTRUCTURAS. ‘DE SEGURIDAD AL MARGEN DE LA ONU, 1943-1960 ‘Aunque algunos historiadores ubican el inicio cle ka Guerra Fria en la Con- ferencia de Potsdam de julio-agosto de 1945, los hechos palpables que desataron la polatizacién de dos sistemas politicos antagdnicos fueron la Namada Doctrina Truman, de ayuda econdmica y politica a Grecia y a Tur- quia a fin de evitar alt et triunfo de los partidos comunistas, el Plan Mars- hall para la reconstruceién de Europa occidental, arnbos en 1947, y el apo: yo de la URSS a comunistas locales de Checoslovaquia para que tomaran el poder, ast como el bloqueo a Berlin occidental, mismo que romperia Esta- dos Unidos en 1948 con un puente aéreo En abril de 1949 se funda la Organizacién det Tratado del Atlantico del Norte (014), sistema regional de defensa colectiva encabezada por Wash- ington, y en agosto la URSS detona su primer artefacto experimental rm clear, acabando ast con ef monopolio estadounidense en esa materia, En octubre del mismo aito Mao Zedong funda la Repiiblica Popular China ante Ja aninadlversion de Washington y en febrero de 1950 suscribe con Statin un pacto de amistad, seguridad y asistencia mutua, Estos hechas tuvieron tun impacto negativo sobre los esfuerzos de desarme en la ONU: no fnubo ‘mis acuerdos de fondo en el Consejo de Seguridad entre soviéticos y esta donnidenses, de tal suerte que el maximo érgano en materia de seguridad y desarme dejé de funcionar para negociaciones de desarme y volverta a hacerlo apenas en 1989, cuando cay6 el muro de Berlin Las comisiones de Energia Atomica y las de Anmmamentos Convenciona les dlejaton de avanzar en sus trabajos de recomendar sohuciones al Consejo dde Segmnidad, a pesar de los esfuerzos de la Asamblea General por reactivar eltema de desarme aprobando en noviembre de 1948 la Resolucion 191 (U) en la que lamentabsa la falta de acuerdo en el seno de la CEA y pedia a los ‘miembros permanentes del consejo que llegaran a consensos sobre los usos pacificos de la energia atémica y sobre. la eliminacion de armas atémicas, y EL COLEGIO Fas MDE MEXICO AS MEXICO LADIPLOMACIA EN TORNG AL DESABME 105 adoptando la Resolicién 192 (IID el 18 del mismo tes, para que se avan 2ara en la eliminacién de un tercio de los arsenales convencioneles y de las uerzas armadas de los miembros permanentes del Consejo de Seguridad Se enfrentaban dos posiciones irreductibles a “occidental, porla que se buscaban acuerdos “confiables” en materia de seguridad colectiva, entre ellos el de contabilizar tos arsenales —convencionales y de armas de des- truccién en masa (Aoi)—, antes de ta eliminacién de las armas de ambos tipos, y Ia sovistica, que consideraba “militarsta” la tests de Estados Unidos ysusaiados de que la seguridad precediera al desarme; por su parte Moscti ppostulaba el desarme como forma de fortalecer la seguridad, No obstante que estas posiciones encontradas alentaban la catcera at- mamentista, la Asimblea General prosigui la biisqueds de medias para hacer avanzat las negociaciones en materia de desarme nuclear y conven ional, mismas que deberian desarrollarse en el Consejo de Seguridad, y el 1B de diciembre de 1950 cxe6 la Comision de los Doce, compuesta, nteva- mente, por las 11 miembros del Consejo més Canada, con el objetivo de estudiar la posible fusion de las dos comisiones en una sola, que se ocupara de Ios temas de Ia enerpfa atémica y del desarmme convencional (Resolucién 496-V). Fue apenas ¢l 11 de enero de 1952 que se concrets, con oposicion de la Union Sovietica, el establecimiento cle la Comision de Desarme me- diante la Resolucién 502-Vi de la asamblea, aprobada como “regulacién, limitacion y reduecion equilbrada de todas las fverzas armadas y todos los armamentos; control internacional de la energia atémica”. Cabe hacer notar que estos esfuerzos por encontrar acuerdos multiaterales en la cuestion del desarme se dieron en plena guetta de Corea (1950-1953) y de una crecien- {e polarizacion entre Los emergentes bloques capitalista y comunista, De origen, la Comisin de Desarme adolecia del mismo defecto de sus dos predecesoras: ura paticipacidh Himitada a los miembros permanentes y no permanentes del Consejo de Seguridad, mas Canadlé, Cierto que el esfuerzo por negociar la Timitacion y reduecién cle armaments iinicaren- te podria darse a pattir de acuerdos entre la potencias, es decir, los miem- ‘nas permanentes del consejo, pero Ia presencia de otras voces procedlentes de patses industralizados y en desarrollo se hacia cada vez mis nevesarit, almargen del grada de alineacién politica que cada pats ruviera respecto 4 ‘uno de los dos polos de poder mundial ‘Asi, el 19 de noviembre de 1957, ato de inicio de un cielo de disten- sion entre Washington y Mosci, la ao aument6 4:25 miernbros la com: ‘posicign lela Comision de Desarme (Resolucién 1150-XID; los 11 del com- EL COLEGIO PA DE MEXICO 4.8 106 RELACIONES INTERNACIONAEES sejoy 14 nuevos panticipantes: Argentina, Austria, Belgica, Birmania, Brasil, Checoslovaquia, Fgipto, India, alia, México, Noruega, Polonia, Tunez y Yugoslavia, Esta comisién ampliada tampoco results suficiente, por lo que en 1959 se abris la participacion en ella a todos los miembros de la Onu. “En ese momento —dice un especialista en desarme y diplomatico mexica- rno— [la Comisi6n de Desarme] dejé de ser un drgatio de negociacién para convertitse en un foro deliberativo de la Asemblea.” (Marin, 2005: 21). ‘Afos antes, en 1953, en un discutso denominado “Atomos para le paz", el presidente Fisenhower habia propuesto ante la Asamblea General {de Ia oNU le creacion de un 6rgano internacional pata el control y desarto- Ilo de la energia atémica para usos pacificos, Tavieron que transcutrir mis dle tres aftos para que esta iniciativa recibiera el apoyo de los principales paises del mundo y, finalmente, el 29 de julio de 1957 se establecerta el (Organismo Internacional de Energia Atbmica (O14), como una organiza- ign intergubernamental autonoma, con sede principal en Viena, Austria con el propésito de fomentar el uso pacifico de la energia nuclear e inhubir ‘4 utilizacion para propésicos militares, No obstante su cardcter autonomo la otc reporta tanto a la Asamblea General como al Consejo de Seguridad de la ON trabaja estrechamente con ellos. Sin embargo, dacio que en el petiodo de 1949 a 1960 apatecieron estruc- turas de seguridad al margen de la ont —la or4w ya mencionada y el Pacto dle Varsovia suscito el I cle mayo de 1955 como respuesta del bloque socia- lista—. os érganos subsidiarios de In AGONU y del Consejo de Seguridad —la Primera Comisién y la Comisién de Desarme-— se convertirian en foros de debate rutinario, sin posibilidades reales de proponer soluciones al problema de Is proliferacion de armarentos convencionales y de destruccion en masa. La patticipacién de México en las tareas de deserme fue escasa durante Jos anos cincuenta, luego de que participara, como ya se menciond, en el Consejo de Seguridad por un atio (1946) y, como derivacién de ello, en la ‘reacion de la Comision de Energia Atomica, Nuestro pats se retraeria de la diplomacia multilateral relacionada con temas de seguridad y desarme a principios de los cincuenta, Seria apenas durante el pertotlo 1959-1963 ‘cuando el eminente diplomatico e internacionalisia Padilla Nervo actuara ‘con mayor intensidad en este tema, tanto en la Primera Comision de la AGONU como en Ia Comision de Desarme, de la que México fue miembro desde 1957. Fue justamente Padilla Nervo quien, desde su posicién como secretatio de Relaciones Exteriores (1952-1958), aboge ent la AGioNu pata que se abrieta la membresfa de dicha comision alos integrantes de la Asam- 1. COLEGIO. | DL MEXICO MERCOLA TIPLOMAGIAENTORNO ALDESABME 107 blea General, lo cual ocurri6, como tambien ya se setal6, en noviembre de 1957 (Rebolledo, 1992: 367). La panticipacion de nuestro pas, lo mismo que la de Argentina y Brasil cen los foros internacionales dedicados al desarme curante este periodo de 1949 a 1960 estuvo regida por consideraciones politcas internas diversas, ‘mas allé de la busqueda de prestigio diplomético internacional y, conse- ‘cuentemente, dfirieron, Mientras en México, de los patses citados, no exis tia-un proyecto nacional de importancia para el desarrollo de una capacidad nuclear propia, en los ottos dos se habia despertado una amplia ambicién rmucleat, por lo que no se descartabs la eventual posesién de armas nucler- tes, por razones de rivalidad geopolitica, en el Cono Sur. Desde muy tem= pprano, autoridades argentinas y braslenas practicaron una estrategia de integracion de su capacidad nuclear nacional: desde la formacion de cienti- ficos y técnicos hasta la eventual construecion de plantas nucleoelécricas y el enriquecimiento de uranio para obtener el combustible que alimentara esas plantas, pasando por acuerdos internacionales de cooperacién para In investigacion cienttfica nucleae, No fue casual que desde la primera Junta de Gobernadores dela Orga nizacién Internacional de Energia Atomica quedaran en ella Brasil y Argen- tina por parte de Latinoamérica, y que, con el andar del tiempo, ambos ‘paises idearan une formnuls por la cual podian ocuparininterrampidamen- te un asiento en la mencionada junta: un afto Brasil ocupatia el sitio por ser el mis avanzado" en la industria nuclear para fines pactficos de Ia vegién, imientras Argentina amarraria la candidatura para estar por dos aos, sin derecho a reeleccién inmediata, y al sigulente ciclo se invertirfan las pape- Jes. Fit Jos attos noventa México ya tenfa wna capacidad de generacion nu-

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