El nuevo gobierno, denominado Consejo de Comisarios del Pueblo, promulgó los primeros decretos. El decreto sobre la paz por el que se invitó a las naciones beligerantes a una paz inmediata sin anexiones y sin indemnizaciones; el decreto sobre la tierra por el que se expropiaron los grandes latifundios en favor de los sóviets campesinos; el decreto relativo a las empresas industriales que confió el control de las fábricas a los comités de trabajadores; y el decreto sobre las nacionalidades, donde se afirmaba el derecho a la autodeterminación de los pueblos de Rusia. Con dichos decretos se esperaba satisfacer las reivindicaciones de soldados, campesinos, obreros y de las nacionalidades, aunque en principio se renunciase a objetivos esenciales del programa bolchevique. Para consolidarse en el poder, Lenin creó una política represiva (la cheka), el ejército rojo, ideado y organizado por Trotski. Una de las prioridades del nuevo régimen fue la firma de la paz. En diciembre de 1917 se concluyó un armisticio por separado con los imperios centrales. El 3 de marzo de 1918 se firmó la paz de Brest-Litovsk, que imponía durísimas condiciones a Rusia, ya que ésta renunció a los países bálticos (Estonia, Letonia y Lituania), reconocía la independencia de Polonia, Finlandia, Ucrania y los países caucásicos y cedía Besarabia a Rumania y Armenia a Turquía. La creación del estado socialista soviético El gobierno bolchevique convocó, el 25 de noviembre de 1917, elecciones para la Asamblea Constituyente. Los resultados fueron desfavorables para los bolcheviques (sólo obtuvieron el 25% de los votos frente al 45% de los socialrevolucionarios). Pero la apertura de la Asamblea, el 5 de enero de 1918, fue meramente simbólica y al día siguiente era disuelta. La Constitución otorgaba el poder al Congreso de los Sóviets de todas las Rusias y al Consejo de Comisarios del Pueblo. Éste último era el encargado de implantar a dictadura del proletariado, en la que el Partido Comunista Bolchevique pasó a ejercer el control centralizado del gobierno y, desplazó al Congreso de los Sóviets de todas las Rusias y al resto de los Sóviets; es decir, el partido comunista, integrado entre otros por Trotski, Zinoviev y Kamenev, presidido por Lenin y con Stalin como Secretario General, ejercerá el control del poder en la nueva Rusia. Comenzó una campaña de alfabetización. La Guerra Civil Desde el verano de 1918 el régimen bolchevique tuvo que afrontar una guerra civil que duraría dos años y una desastrosa situación económica. La disolución de la Asamblea Constituyente le enfrentó a los socialrevolucionarios y a los mencheviques. Mientras, la paz de Brest-Litovsk produjo la desbandada del ejército ruso, al desmovilizarse unos siete millones de soldados sin tomar ninguna medida en su favor. Los oficiales- con fuertes convicciones antibolcheviques, entre los que destacaron Denikin, Koltchak y Wrangel, reorganizaron los ejércitos “blancos” (llamados así por el color del uniforme militar de tiempos de los zares), apoyados por la intervención de las potencias extranjeras: británicos, franceses, japoneses y norteamericanos. Los motivos de la intervención fueron diversos: revolucionario y la negativa bolchevique a reconocer la deuda exterior e indemnizar a los propietarios de capitales de las industrias nacionalizadas. Los bolcheviques asesinaron a Nicolás II y a su familia. Hasta 1919 la mayor parte del país estuvo bajo el control de los ejércitos “blancos” y de sus aliados. Para hacer frente a sus ofensivas, Trotski organizó el Ejército Rojo (denominación dada por el color del uniforme militar) y restablecía una rigurosa disciplina, mientras que Lenin acentúa la dictadura política. La presencia de tropas extranjeras hizo que la mayor parte del pueblo ruso se decantase en favor de los bolcheviques. Por otra parte, el fracaso de las ofensivas de los “blancos” y los problemas internos de las potencias extranjeras influyeron decisivamente en la retirada de sus tropas. Ello favorecería el triunfo del Ejército rojo en 1920. En 1919, los bolcheviques promovieron la fundación en Moscú de una III Internacional o Internacional Comunista. La creación de la Internacional Comunista o Komintern dividió definitivamente el movimiento obrero socialista en partidos socialistas, por lo general de tendencia socialdemócrata o reformista y en partidos comunistas europeos, que se fundaron entre 1920 y 1921.
ECONOMÍA: DEL COMUNISMO DE GUERRA A LA NEP
Guerra Civil y comunismo de guerra
La Guerra civil (1918-1920) y la consiguiente desorganización económica impulsaron a los bolcheviques a tomar una serie de medidas de reorganización de la economía conocidas como el comunismo de guerra. El comunismo de guerra supuso la adopción de un sistema socialista motivado por la necesidad de controlar rígidamente todos los recursos humanos y económicos para ganar la guerra civil. A tal efecto, se anularon las medidas anteriores y se nacionalizaron las grandes industrias, se socializó la tierra, se militarizó el trabajo y se suprimió la libertad de comerciar el dinero, pagando a los obreros en especie. Se impusieron las requisas obligatorias de cereales a los campesinos y se estableció un estrecho control sobre los precios y los mercados. Los efectos fueron desastrosos: un mínimo de cinco millones de personas murieron de hambre y frío. La evidencia del fracaso fue tal que Lenin promovió el fin de la política de “comunismo de guerra” en 1921 y su sustitución por la NEP (Nueva Política Económica) que permitía al campesinado retomar el control de sus granjas y comercializar su cosecha. La Nueva Política Económica NEP (1921-1927) se concentró en dos aspectos: 1. La liberalización de la agricultura —que estuvo motivada por la ruina económica del país que impedía continuar con las colectivizaciones en el campo—, de modo que se impusieron tres formas de asociación: la asociación de campesinos que ponían en común los instrumentos de cultivo, la asociación que ponía en común los instrumentos y la tierra, y la asociación donde la colectivización era total. Estas medidas consiguieron aumentar la producción y favorecieron a los kulaks.
2. La desnacionalización de la industria y del comercio por la que en 1921 se restituyó a
sus antiguos propietarios las industrias con menos de veinte trabajadores, mientras que en el comercio al por menor la participación privada era mucho mayor y se podía encontrar un verdadero mercado.
LA URSS: UN SISTEMA ECONÓMICO DE PLANIFICACIÓN
CENTRALIZADA En líneas generales, la NEP se saldó con un éxito relativo, pero la llegada de Stalin al poder supuso el fin de la NEP. En el terreno de la economía Stalin impulsó los planes quinquenales que tuvieron como directrices el control de la industria y la colectivización forzosa de la agricultura; mientras que en las fábricas triunfaron las campañas productivistas, en el campo la colectivización sistemática de las explotaciones impuso la desaparición de los kulaks, y el fomento de los koljoses (cooperativas populares) y los sovjoses (granjas estatales); el campesino conservaba la casa y un pedazo de tierra, y también podía criar ganado. Cuando el Tercer Plan Quinquenal hubo de interrumpirse por la invasión nazi, la URSS ya era la segunda potencia económica europea tras Alemania y la tercera del mundo tras los Estados Unidos.