PROGRAMA DE FORMACION BIBLICA Y MINISTERIAL 38

AREA
TEOLOGICA

DISPENSACIONES Y PACTOS

Nota: Se deja constancia que este apunte se debe al trabajo del hno. Eduardo Cartea Millos,
(Instituto Bíblico G. Müller, Bs.As.), a quien se le agradece por su gentil disposición. Se le han
introducido modificaciones que no alteran la esencia del trabajo.

Punto 1

1.1. Concepto de Dispensación

1.1.1. Definición

Según C.I. Scofield, una dispensación es un período de tiempo durante el cual el hombre es puesto
a prueba con referencia a cierta revelación específica de la voluntad de Dios.
Otra definición: Una etapa en una revelación progresiva, expresamente adaptada a las necesidades
de una nación en particular, o de un período de tiempo. También significa la edad o período durante el
cual un sistema ha prevalecido.
L. Chafer no enfatiza en el aspecto temporal de una dispensación, ya que lo hace, en vez de una
época, en términos de una responsabilidad o mayordomía.
MacDonald hablando de las edades puestas por Dios, dice: “Lo que las distingue no es la duración de ellas, sino
la forma en que Dios trata con la humanidad.” También agrega que “técnicamente, una dispensación no significa
una edad, sino una administración, una mayordomía, un orden o una economía.”

1.1.2. Etimología

El término “dispensación” proviene del vocablo latino “dispensatio”. El verbo significa “pesar, o
dispensar (conceder, distribuir)”.
En griego, se utiliza la palabra oikonomía - de oikos: casa; y nomos: ley- (ver Ef.1.10; 3.9) y viene
de un verbo que significa dirigir, administrar, planear los asuntos pertenecientes al hogar.
El oikonomo, era un mayordomo, administrador o tesorero.
Por eso, dispensación significa dirigir o administrar los asuntos de una casa.
La palabra encierra algunas ideas principales:

 La acción de dispensar o distribuir

 La acción de administrar, ordenar o supervisar
 La acción de dispensar o distribuir con algún requisito
 La acción de otorgar responsabilidades.
 La acción de pedir cuentas.

1.1.3. El uso de la palabra en el NT.

El sustantivo “oikónomos”, sale unas 10 veces. Por ejemplo en Lc.16.1; 12.42 o en 1 Cor. 4.1,2,
como “mayordomo”, salvo en Rom.16.23, que se traduce como “tesorero”.
El sustantivo “oikonomía”, unas 9 veces. Por ejemplo en Luc. 16.2,3,4 (mayordomía o
administración); Ef.1.10; 3.2,9; Col.1.25.
El verbo “oikonomeo”, sale unas 20 veces. Por ejemplo, en Lc. 16.2, (oikonomein: administrar o
ejercer la mayordomía) indica la acción del mayordomo, es decir de administrar los bienes de otro.

1.1.4. Características de la palabra.

Siguiendo a Ryrie, decimos que la palabra presenta las siguientes características:

1. Básicamente hay 2 partes interesadas: una delega responsabilidades y la otra las ejecuta.
P.ej.Luc.16.1,2.
2. Hay responsabilidades específicas (v.1)

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3. Hay rendición de cuentas (v.2a).

4. Puede haber remoción de la responsabilidad, si el mayordomo es infiel (v.2b).

1.1.5. Concepto bíblico

Más definidamente, en cuanto a las dispensaciones en la Biblia, se aprecian las siguientes

características:
1. Dios delega la responsabilidad y el hombre es responsable ante El – 1 Cor. 4.1-2; Tito 1.7. Se
trata de un convenio.
2. Se requiere fidelidad – 1 Cor. 4.2
3. Una mayordomía puede terminar en tiempo fijo – Gál.4.2
4. Las dispensaciones se relacionan con los misterios de Dios, o sea con la revelación específica
de Dios – 1.Cor.4.1; Ef.3.2; Col.1.25.
5. Cada dispensación implica “prueba – fracaso - juicio”. Si la prueba no es superada
satisfactoriamente, deviene el fracaso y como consecuencia, el juicio.
La experiencia y la profecía bíblica dicen que todos concluyen así, lo cual da elocuente
testimonio del fracaso espiritual del hombre de todas las épocas.

Por eso, reiteramos la definición de C. I. Scofield, mencionada al principio: Una dispensación es un

período de tiempo durante el cual el hombre es puesto a prueba con referencia a cierta
revelación específica de la voluntad de Dios.

1.2. Concepto de Pacto

Es un acuerdo entre 2 personas que se comprometen sobre ciertos puntos, y que obliga a las 2
partes a cumplir ciertas obligaciones.

1.2.1. En el mundo secular

1. Era un vínculo de lealtad y comunión íntima para toda la vida sobre todas las circunstancias, por
el cual ciertas personas se unían permanentemente. (G.R.Berry – Covenant in the O.T. – Intl.
Std. Biblie Encyclopedia).
2. Un pacto celebrado entre hombres, originalmente consistía en constituirse en “hermanos de la
misma sangre”, en el cual, dos hombres se hacían hermanos carnales. Existía el rito de beber
uno la sangre del otro. Usualmente significaba que uno de ellos sería adoptado por el grupo del
otro.
3. La mezcla de sangre, parte del rito del pacto, simbolizaba una unión indisoluble o
“consanguineidad”. Esta mezcla era de sangre propia, haciéndose una herida en las manos u
otra parte del cuerpo, (Cp.Isa.62.8), o por la sangre de un sacrificio de un animal.
4. La sangre es vida. La entrega de la sangre representa la entrega de la vida. La mezcla de la
sangre es, pues, una unión entre dos vidas.
5. Ejemplo entre tribus araucanas de América del Sur (Argentina – Chile) existía rito de
“hacerse hermanos-amigos”: el “lacu”. Incluía sacrificio de un cordero y la participación de él. Lo
cortaban, lo repartían entre los 2 compañeros del pacto y luego lo comían hasta que no quedara
nada. Luego, intercambiaban regalos y hasta su propio nombre, cosa considerada sagrada y tenía
una validez de consanguineidad”.

1.2.2. En la Biblia.

Un caso muy típico es el pacto de amistad entre David y Jonatán: 1 Sam. 18.1-5.
A lo largo de la historia humana, tal como la hallamos en las SSEE, Dios concertó varios pactos con
los hombres.
J. Murray define un pacto como: Una administración soberana de gracia y clemencia, divina en
su origen, manifestación, confirmación y cumplimiento.
En hebreo, la palabra es berith (de una raíz “brh”, que significa “cortar” y “comer”).
Se refiere al rito con el que se formalizaba. Ver Gén. 15.17-21 y Jer. 34.18-19. (Es posible que la
idea era la pena que sufriría la o las partes si no cumplían el compromiso).
En Job 17.3, leemos “Nadie quiere chocar mi mano”. La RV´77 traduce “estrechar”. Significa: salir de
fiador de alguien.

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“Estrechar” viene del gr. täga, cuya raíz es “empalmar ambas manos” y también “clavar una aguja o
lanza”. Ser fiador o garante.
“Garantía” es ärab, raíz de “entrelazar” o “mezclar”, negociar, hacer tratos, dando seguridad,
comprometerse, involucrarse, empeñarse, hacer promesas, obligarse a algo. (Strong´s Exhaustive
Concordance of the Biblie). Ver Ezeq. 17.18; 1 Sam. 18.1-4; Sal.50.5.
En griego es “diatheke”. Y es notable que no contiene la idea de una relación bilateral (syntheke),
sino unilateral. Y es así: Dios es el único que lo concierta y obtiene gloria, y el hombre es el beneficiario
(Ej. Hch. 3.25). Dios se compromete bajo juramento a cumplir lo que ha prometido.
Es notable que, a pesar del incumplimiento del hombre, ninguno de los pactos divinos se altera, es
decir, las promesas (los juramentos) divinos están vigentes y se cumplen, o cumplirán.
Los pactos surgen de la voluntad libre y no condicionada de Dios, ni aún por la necesidad, y
menos, por la voluntad del hombre. Son pactos de gracia.

1.2.3. Diferencia entre dispensaciones y pactos.

Dispensaciones Pactos
En las dispensaciones, el hombre tiene En los pactos, es Dios quien se obliga, no el
responsabilidad hombre
Las dispensaciones caducan Los pactos son permanentes

1.3. Las Dispensaciones y el Dispensacionalismo

El Dispensacionalismo es un sistema de interpretación y teología expresado en las notas de la

Bíblia Anotada de Scofield. El sistema se desarrolla en la Teología Sistemática de L.S. Chafer.
Bernard Ramm en el “Diccionario de la Teología Contemporánea” – CBP, comenta que la tesis básica
del dispensacionalismo es que hay siete economías distintas de Dios, en las cuales Dios especifica
ciertas condiciones o términos y prueba al hombre en su obediencia a la medida de estos términos. Esta
tesis, a su vez, se basa en un principio de hermenéutica según el cual no se interpreta correctamente la
Biblia, a menos que se conozca la dispensación a la cual pertenece.
Puede llegarse a extremos, como por ejemplo a los que llega el “ultradispensacionalismo”, pero, la
regla general es que debe distinguirse claramente entre las Escrituras dirigidas a los judíos o a
los gentiles o a la iglesia.
Extremos son: desechar mucho del contenido de los evangelios, (por ejemplo, el Sermón del monte
para la iglesia), por estar fundamentalmente dirigido a Israel, como participante del Reino que el Señor
establecerá en la tierra.
La realidad es que, ya que Israel y la Iglesia son dos pueblos diferentes (1 Cor.10.32) la revelación
dirigida a Israel no puede interpretarse como dirigida a la Iglesia, pero, sin duda toda la revelación
bíblica contenida en el Antiguo y en el Nuevo Testamento tiene aplicación espiritual para la iglesia.
Ramm agrega que “el dispensacionalismo enseña una unidad doble de la Biblia. Paralelamente con
la herencia histórica cristiana, mantiene que la unidad de la Biblia es el tema de redención que
centraliza y alcanza su clímax en Jesucristo. A esto, agrega el principio dispensacional de interpretación
y hace esto en sus esfuerzos de armonizar la Biblia”.

1.4. Esquema de Dispensaciones y Pactos en la Biblia

La Biblia habla específicamente de 2 de ellas y sugiere una tercera.

 La gracia (Jn. 1.17; Ef. 3.2, 9).
 La plenitud de los tiempos (el Milenio, para los premilenaristas, como anticipo de la eternidad futura)
Ef.1.10.
 La ley (Jn.1.17; Colos.1.24-27), es decir, una época anterior a la gracia.

Varios escritores, estudiosos y eruditos de la Palabra, sugirieron distintos esquemas

dispensacionales:
Pierre Poiret (1646-1719)
John Edwards (1639-1716)
Isaac Watts (1674-1748)
John N. Darby (1800-1882)
J. H. Brookes (1830-1897)
James M. Gray (1851-1935)
C.I. Scofield (1843-1921), publicado en 1909.

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Este último es el más seguido por las iglesias de los Hermanos, sostenido, además por hombres
como Chafer, Pentecost, Ryrie, etc.
De acuerdo al esquema comentado por C.I. Scofield en su Biblia anotada, la revelación bíblica se
puede dividir en:

Siete dispensaciones Ocho Pactos

La Inocencia Gén. 1:28 Pacto Edénico Gén. 1:28
La Conciencia Gén. 3:23 Pacto Adámico Gén. 3:15
El Gobierno Humano Gén. 8:20 Pacto Noético Gén. 9:1
La Promesa Gén. 12:1 Pacto Abrahámico Gén. 15:18
La Ley Ex. 19:8 Pacto Mosaico Ex. 19:25
La Gracia Jn. 1:17 Pacto Palestino Dt. 30:37
El Reino Ef. 1:10 Pacto Davídico 2 Sam. 7:16
Pacto Nuevo Hbr. 8:8

Punto 2

2.1. Ultradispensacionalismo

Se entiende por “ultradispensacionalismo” la posición radicalizada o extrema (de ahí “ultra”) en

cuanto a algunos puntos del dispensacionalismo, que, interpretado en forma moderada es una magnífica
herramienta para la comprensión de las Escrituras, en base a una hermenéutica histórico-gramatical, o
literal, del texto.
Ambas posiciones, ya que basan su método de interpretación en la misma hermenéutica, distinguen
claramente entre la Iglesia e Israel.

2.2. Relación entre Dispensacionalismo y Ultradispensacionalismo

El punto en cuestión, fundamentalmente, entre ambas posiciones es el comienzo histórico de la

Iglesia. Mientras que los dispensacionalistas creen que comenzó el día de Pentecostés, los
ultradispensacionalistas consideran que coincidió con la conversión de Pablo (Hechos 9), o bien en
Hechos 13.46, o, también, al final del libro de los Hechos, mediante el ministerio del apóstol a los
gentiles (Hechos 28).
Para los ultradispensacionalistas, la Iglesia desde Pentecostés hasta su verdadero comienzo era
judía, pero no “la iglesia de Cristo”.
¿En qué incide esta “pequeña” diferencia? En realidad no es tan pequeña, ya que trae aparejada una
diferencia de concepto en cuanto a la interpretación de los Evangelios y el libro de los Hechos, y su
enseñanza para los cristianos.
El origen de esta posición reside en los escritos de Ethelbert W. Bullinger (1837-1913). Un erudito de
las Escrituras que escribió más de 70 libros, algunos de los cuales los tenemos en español (entre ellos:
Diccionario de Figuras de Dicción – Revis. por el Dr. F. Lacueva; Los fundamentos de la verdad
dispensacional; Como entender y explicar los números de la Biblia, etc.).
Entre otros asuntos que no podemos compartir con esta posición, Bullinger, notablemente niega que
el bautismo y la cena del Señor sean ordenanzas que la Iglesia deba seguir.
Algunos argumentos para rebatir esta idea:
En Hch.2.42, dice que “el Señor añadía a la iglesia...”
En Hch.8.1 se habla de una persecución contra la iglesia.
Pablo escribe en Gál.1.13 que él antes de su conversión perseguía a la iglesia de Dios.
En Hch.11.24, los que creían, una multitud, “era agregada al Señor”, es decir, al cuerpo de
Cristo. Y el cuerpo de Cristo, es la iglesia (Ef.1.23).
El hecho de que en Ef.3.1-12, Pablo haya recibido una revelación profunda y sin igual sobre
la iglesia, no significa que la iglesia hubiera comenzado al tiempo de tal revelación.

2.3. Relación entre el Dispensacionalismo y la hermenéutica gramático-histórica

Necesariamente el sistema de interpretación dispensacional de las Escrituras se debe basar en una

hermenéutica literal, que distingue entre el Viejo y el Nuevo Testamento, como revelación para Israel y
la Iglesia del Señor.

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Esa interpretación normal o llana, es consistente en todo el contenido de las Escrituras. Aun los tipos,
símbolos, y otras figuras del lenguaje son tomadas en forma literal, como normalmente son usadas en
nuestros idiomas actuales.
El dispensacionalista cree en la Revelación verbal y completa de las Escrituras. Verbal, porque el
Canon solo contiene los libros inspirados divinamente. Y completa, porque el canon está terminado,
completo y sin posibilidad de que una nueva revelación progresiva añada a lo escrito.
Uno de los puntos clave dentro de la crítica que se hace al dispensacionalismo y su interpretación
literal de la Escritura es el valor de los Evangelios para la Iglesia de Dios. Indudablemente, el hecho de
que los Evangelios hayan sido escritos antes de la aparición de la Iglesia, en un contexto
eminentemente hebreo, y que las enseñanzas de Jesús tienen en vista el Reino de Dios y su
consumación necesariamente futura, no quiere decir que la enseñanza de los Evangelios no sea
aplicable a los cristianos.
Se dice comúnmente que una cosa es la interpretación de un pasaje y otra su aplicación espiritual.
Tomemos el caso del Sermón del Monte. No podemos negar la evidencia de que el Señor está
instruyendo sobre las leyes que regirán en Su Reino Mesiánico, visible y terrenal. Pero esto no resta
valor alguno a su aplicación a la vida del cristiano de hoy y de siempre.
No hay duda que la promesa de dicha para los mansos que “heredarán la tierra” no es aplicable
directamente a los cristianos. Pero, tampoco hay duda que el Señor nos manda ser mansos aprendiendo
de él. Tampoco hay duda sobre la enseñanza siempre vigente sobre la oración, o la ética frente a la
limosna u ofrenda, o el divorcio, o los afanes de la vida, o las riquezas, etc.

2.4. Relación entre el Dispensacionalismo y la unidad de la Escritura

A pesar de que se ha criticado al dispensacionalismo por dividir la Escritura, la verdad es que si algo
enseñan los que siguen este sistema es la unidad de la Biblia, como revelación divina.
Las dispensaciones no son partes estancas dentro del Canon sagrado.
Las dispensaciones son escalones graduales en esa revelación, agregando cada una de ellas a las
anteriores nuevas facetas de la sagrada revelación, pero sin contradecirla, al contrario, enriqueciéndola
y complementándola progresivamente en el propósito final que es aún más allá del programa de
salvación para los hombres y la creación toda, y que es glorificar la Persona de Dios en Cristo.
Notar las referencias a la gloria de Dios en Ef.1.6,12 y14.
Afirma MacDonald que “Mientras que todas las Escrituras son útiles para nosotros (2 Ti. 3:16), no todas ellas
se escribieron de forma directa para nosotros.” Sigue diciendo: “Los pasajes que tratan de otras edades tienen
aplicaciones para nosotros, pero la interpretación primaria de éstos es para la edad en que fueron escritos.”

2.5. Relación entre el Dispensacionalismo y la Escatología Premilenial

Ryrie dice: “...el premilenarismo dispensacionalista no solamente incluye una descripción del futuro,
sino que también comprende el significado y la importancia de toda la Biblia. Este no es una posible
alternativa sobre escatología, sino un sistema completo de teología que afecta muchas otras partes de
la Biblia y no sólo el capítulo 20 de Apocalipsis” (Dispensacionalismo, hoy-Escatología dispensacional).
Las bases de esta posición doctrinal escatológica se fundan en los siguientes principios:
 Una hermenéutica literal, que incluye no solo el cumplimiento de las profecías del A. Testamento,
sino también las del N. Testamento.
 La creencia en el establecimiento de un Reino Mesiánico, milenial, visible y terrenal como la
consumación del propósito de Dios en su soberano gobierno sobre toda Su creación.
 Una clara distinción entre los pueblos de Israel y la Iglesia.
 El momento del arrebatamiento de la Iglesia antes de la gran tribulación (pretribulacionista) y anterior
al Reino Milenial (premilenarista).

2.6. Relación entre Dispensacionalismo y Teología del Pacto

La Teología del Pacto es un sistema teológico por el cual la Biblia se comprende basada en dos
pactos: El de obras, hecho con Adán; y el de gracia, entre Dios el Padre y Dios el Hijo. Este último entró
en vigencia después de la entrada del pecado y la consecuente caída del hombre.
Algunos teólogos de esta línea de pensamiento agregan un tercer pacto, que es el de redención.
Los pactos del A.T. son solo distintas formas de un solo pacto de gracia. Este llega a su consumación
con el Nuevo Pacto en Jesucristo, como se revela en el N.T.
Esta teología surge de la iglesia Reformada, que deja atrás las enseñanzas del luteranismo. Aunque
sus conceptos básicos no figuran en los escritos de los padres de la reforma en Alemania, ni en Suiza y
Francia, a saber, Lutero, Calvino, Zuinglio o Melanchtón.
Es una teología cuya hermenéutica es alegórica, y cuya escatología es, en general, amilenarista.

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Las iglesias Reformada y Presbiteriana son las que sostienen esta línea teológica, y dos Teologías
Sistemáticas importantes se hallan entre sus seguidores: la de L. Berkhof y la de C. Hodge.

Punto 3

 Panorámica Bíblica, de Eternidad a Eternidad

 Los grandes hitos bíblicos
 Despliegue histórico de las Dispensaciones y los Pactos

Ver Diagrama de Dispensaciones y Pactos.

Punto 4

 Análisis de las Dispensaciones

 Propósito de cada una
 Desarrollo
 Culminación
 Resultados para la Iglesia, Israel y los gentiles.

Ver Diagrama de Dispensaciones y Pactos.

Punto 5

5.1. La Escatología dispensacional

El sistema del Dispensacionalismo abarca, naturalmente, toda la revelación de las Escrituras, y por
ende este gran capítulo de la Teología Sistemática que es la Escatología, es decir, el estudio de “las
últimas cosas”.
El estudio de la profecía es, sin duda, fascinante, y puede abarcar las profecías ya cumplidas y
aquellas que aún están para cumplirse en el futuro.
Pero, no solo es atractivo para el estudiante de la Biblia, sino debería ser una responsabilidad de
cada creyente conocer en la revelación escrita el programa de Dios para la Iglesia, Israel y el mundo.
Por otra parte, el estudio de la profecía no solo da seguridad al alma, al comprobar la fidelidad de
Dios, pero, además, es una protección contra falsas doctrinas que tuercen las Escrituras, un motivo de
gozo en el servicio, de adoración ante la Majestad de Dios, de consuelo y certeza en medio de las
pruebas y la aflicción, y de santidad en la vida (1 Juan 3.3).
En el A.Testamento hay 16 libros que son eminentemente proféticos. En el N.Testamento, además
del Apocalipsis, el gran libro de profecía, prácticamente todos los libros restantes contienen menciones
proféticas para el futuro.

5.2. Nuestra escatología: premilenial, pretribulacionista, milenarista

Significado de los términos:

Todos ellos tienen que ver con el programa divino que comienza con el arrebatamiento de la Iglesia y
culmina con el Reino Milenial, antes de los juicios finales y la nueva creación.
 Premilenial: (o, premilenarista, o quiliástica o, simplemente milenarista), se refiere a la venida del
Señor por su Iglesia que tendrá lugar en los aires, como primera fase de la Segunda Venida del
Señor, y anterior al Reino milenial (o “Milenio”) que Cristo inaugurará en la tierra.
La palabra “milenio”, proveniente del latín “millennium” - “mille” (mil) y “annus” (año)- no se
encuentra en la Biblia, aunque se usa comúnmente para referirse al reino milenial. Su equivalente
griego es Cilia eth aparece unas 6 veces en Apoc.20.2-7.
Al Premilenialismo (o, Premilenarismo) se le ha diferenciado por algunos matices:
Premilenialismo histórico
Dispensacionalismo
 Pretribulacionista: Esa venida del Señor a los aires, será previa al periodo de aproximadamente
siete años llamado “la grande tribulación” en la tierra que afectará a Israel y a las naciones gentiles,
terminado el cual, y después del juicio a los gentiles y a Israel, tendrá lugar el reino de mil años.

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 Milenarista: Esta posición cree en un reino literal, visible y por mil años que el Señor Jesucristo
inaugurará en la tierra y que tendrá por habitantes a los judíos y gentiles convertidos durante la
Grande Tribulación.
Obviamente, esta postura teológica tiene que ver directa y necesariamente con la interpretación
literal de las Escrituras.
A estas posiciones en cuanto a la escatología se oponen otras líneas doctrinales.

Con referencia al Milenio:

 Postmilenialismo: Esta posición sostiene que la Segunda Venida de Cristo será posterior al
Milenio. Este punto de vista sostiene que el mundo ira mejorando mediante una paulatina
erradicación del mal y un predominio de los valores cristianos que al fin triunfarán en el mundo,
de modo que el Reino será la consecuencia de esa mejora gradual. Al fin del Milenio, Cristo
vendrá a juzgar y a consumar sus propósitos eternos.
No hace falta decir que el mundo va “de mal en peor”, y que un mundo cristianizado es una utopía
que contradice lo que sucederá: una gran apostasía mundial (2 Tim.3.13; 2 Ts.2.2-3).
 Amilenialismo: Rechaza la doctrina del milenio. Originada en la doctrina Católico- romana que
enseña que el Reino es la Iglesia, (debido a una errónea interpretación de Mat. 18.19). Surge de
una interpretación alegórica de las Escrituras.

Algunos opinan que verdaderamente existirá un periodo entre las dos Venidas de Cristo, la primera y
la segunda y que los mil años es un número simbólico, que significa plenitud o perfección.

Con referencia a la Grande Tribulación:

 Post-tribulacionista: La Segunda Venida del Señor por los suyos sería al final de la grande
tribulación, con lo que la Iglesia atravesará este periodo de juicios.
Esto contradice la Escritura que claramente dice que la Iglesia será guardada “de la hora de prueba
que vendrá sobre el mundo” (Apoc. 3.10).
 Medio-tribulacionista: La Venida del Señor se producirá a la mitad de la “semana” de la grande
tribulación.
Esta posición surge de una interpretación errónea sobre los juicios de las trompetas, asumiendo que
el toque de la última trompeta (Apoc.11.15-19) equivale a la mención que de ella se hace en 1
Tes. 4.16; 1 Cor.15.52 “la final trompeta”).

La 70ª. semana de Daniel y el “paréntesis dispensacional”

El libro de Daniel contiene una profecía clave para la interpretación de la escatología bíblica: La
profecía de las setenta semanas, cap. 9.20-27.
Se ha dicho que es “la llave de la profecía”, por la importancia de su interpretación.
El amilenarista considera que las setenta semanas ya se cumplieron en su totalidad.
El premilenarista, cree que 69 semanas se cumplieron literalmente hasta el Mesías. Luego se
produce el llamado “paréntesis dispensacional” en el cual se desarrolla la Iglesia hasta la Venida del
Señor a buscarla y a continuación se inaugurará la 70ª. Semana. Esta última semana de años (o
setenio) se cumple en la grande tribulación.

Ver cuadro sinóptico de la explicación de la profecía de las 70 semanas, extraído del libro “El
Príncipe que ha de venir” de Sir Robert Anderson (Ed.Portavoz).

Punto 6

Dentro del cuadro de Dispensaciones en el esquema tradicional de 7, la última corresponde al Reino

Milenial.
El Reino Milenial es la consumación de las promesas dadas por Dios y registradas en el Antiguo y el
Nuevo Testamento, y en especial aquellas que contienen los pactos Abrahámico y Davídico.
El Reino fundamentalmente consiste en el gobierno personal, visible, terrenal, mundial y milenial de
Jesucristo. Desde Jerusalén, capital de Israel, dirigirá los destinos de las naciones, mediante la
aplicación de Sus leyes perfectas y el absoluto acatamiento a ellas.
Satanás estará atado en ese periodo (Apoc.20.2-3) con lo cual el mundo no tendrá su tentación para
desobedecer a Dios, y, aunque el pecado existirá, pues es parte de la naturaleza caída del hombre, sus
manifestaciones no tendrán lugar, pues el gobierno mesiánico será “con vara de hierro” (Apoc.12.5;
19.15).

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Será un Reino:
Teocrático: Dios gobernará a los hombres a través de Cristo (Isa.11.3-5)
universal (Dan.2.34-35, 44-45)
terrenal (Isa.2.3; Dan.7.14; Zac.14.9)
desde Jerusalén (Luc.1.31-33; Hch.15.16-18; Miq.4.1-2)
de paz y justicia (Isa.32.16-17; Jer.33.15; Miq.4.3-5; Zac.9.10; Zac.14.9)
el orden y equilibrio de la naturaleza serán reivindicados (Isa 11.6)
Israel será bendecido especialmente (Ro.11.25-27; Ez. 39.25-29)
volverá el sistema sacerdotal con sacrificios (Is.66.21-23; Ez. cps.40-48)
de poder y grande gloria (Mat.24.27-31).

Al final de este periodo excelso, sin embargo, una rebelión se desatará, formando un gran ejército
que se sublevará contra Cristo y su gobierno (Apoc.20.7-9), y deberá ser aplastada por la acción directa
del Señor (Apoc.20.9) y los rebeldes enviados al lago de fuego (Apoc.20-15).
Pero, el Reino es mucho más que un período de mil años en el futuro. El Reino es también una
realidad presente, en esta dispensación de la gracia o de la Iglesia.

1. Qué es el Reino de Dios.

Algunas opiniones

 Para algunos es meramente una época futura, ubicada en medio de los acontecimientos
escatológicos, cuando Dios inaugure una era espiritual, durante el Milenio, reinando en este
mundo a través del Mesías. Este concepto es parcialmente correcto, pues el Reino de Dios es
más que ello.
 Para la iglesia católico apostólica romana el Reino es la iglesia. Esta doctrina amilenarista (que
no acepta el Milenio como una realidad) fue acuñada por Agustín de Hipona.
Para esta línea de pensamiento, el reino, pues, es actual y se está desarrollando a medida que
la Iglesia se extiende por el mundo. Este concepto no es bíblico. La Iglesia es parte del Reino,
un aspecto del Reino, pero no “es” el Reino.
 Para otros, será el fin de esta época en la cual el bien ha de predominar, los hombres han de
convertirse a Dios a través del mensaje transformador del Evangelio, y así derivará en un nuevo
mundo idílico.

Este concepto está en contraposición con lo que enseñan las SSEE. Es una verdadera utopía, ya que
este mundo no terminará sino en una época de horror, juicio y angustia.

2. Qué enseñan las Escrituras sobre el Reino de Dios.

 Un Reino es un estado o nación bajo el gobierno de un rey.

 Es el pueblo que pertenece a esa nación
 Es el atributo de un rey: su autoridad, dominio, soberanía, señorío.
 Aplicado a Dios, es “la esfera del gobierno divino sobre los hombres”.
Salmo 145.13: “Tu reino es reino de todos los siglos y tu señorío en todas las
generaciones”. Ver Daniel 4.34.-35.
 Es un gobierno
- eterno, no temporal: “de todos los siglos”
- permanente, no circunstancial: “tu señorío (perdura) por todas las
generaciones”.
- universal, no local: Sal 103. 19 “Jehová estableció en los cielos su trono, y
su reino domina sobre todos”.
- celestial, no sólo terrenal. Mateo 6.10: “Venga tu reino; hágase tu voluntad
(ejérzase tu señorío) como en el cielo, así también en la tierra”.

3. Los nombres que lo identifican en las Escrituras.

 Reino - 1 Ts. 2.12 .

 Reino de Dios - Ro. 14.17.

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 Reino de los Cielos - Mat.16.19 . Esta expresión se repite 31 veces en Mateo y no sale en
ningún otro lado. Es posible que siendo Mateo un evangelio dirigido especialmente a los judíos,
sustituya el nombre de Dios, por el respeto que ellos tenían al Nombre de la Deidad.
Marcos y Lucas usan “Reino de Dios” (16 y 32 veces, respectivo). Pero son expresiones
equivalentes: Ej. Mat.19.23-24. (Otras: ver Mat.19.23, Mr.10.23; Lc. 18.24).
 Reino del Padre - Mat. 26.29.
 Reino de Cristo - Efe.5.5; Col.1.13.

Son varios nombres con que se indica un mismo hecho: El Reino de Dios.

La expresión también se puede interpretar como “el dominio de la esfera celestial en la cual Dios
habita y ejerce su soberanía, sobre la tierra contaminada por el pecado y bajo el dominio
temporal de Satanás, hasta que Dos ejerza total control y gobierno, unificando a ambas”. Ahora
están en conflicto. Un día estarán en total armonía (Apoc. 11.15; 12.10).

4. El Reino de Dios en la perspectiva del Antiguo Testamento: La Teocracia.

Teocracia (Theos, Dios; kratos, poder): El gobierno de Dios sobre los hombres.

4.1. Antes de la caída del hombre. Su autoridad puso leyes al primer hombre, a quien delegó
parte de esa autoridad sobre el resto de la creación.
Dios hizo al hombre: “a su imagen (probablemente, su moral) y a su semejanza (probablemente, su
autoridad)”. Comp. Salmo 8.5-8

4.2. Después de la caída. El pecado destronó a Adán. Le hizo perder su dominio, y este fue
usurpado por Satanás. En realidad, fue Adán quién cedió el dominio a Satanás, un ángel.
Hebreos 2.5: “Porque no sujetó a los ángeles el mundo venidero...” El dominio fue dado al hombre,
no a un ángel (Satanás). Pero el hombre debió exclamar con Lamentaciones 5.16: “Cayó la corona de
nuestra cabeza.. Ay de nosotros, porque pecamos!”.
Pero “el mundo venidero” estará sujeto a un hombre: Jesucristo (Heb.25-9).

4.3. La Teocracia en Israel. Fue ejercida a través de:

 Los patriarcas (Noé, Abraham, Isaac, Jacob, José)

 Moisés y Josué
 Los jueces, hasta Samuel.

Luego el pueblo desechó la Teocracia, y eligió un rey, como las otras naciones: Saúl.
Dios, no obstante, levanta un rey “conforme a su corazón”, David, con el cual establece un pacto. (2
Sam. 7.8-16; Sal 89.3 y ss).

4.4. El Reino Davídico. El pacto con David está basado en los siguientes principios (2 Sam.
7.16):

 El reino será ejercido por un descendiente de David.

 Las Escrituras le llaman: “el hijo de David”, o “la vara del tronco de Isaí” (Isa.11.1), o “el
renuevo” (Jer.23.5).
 Será para Israel y para todas las naciones (Isa.42.1,4; 11.9).
 Será permanente (Luc.1.31-33).

Muere David, le sucede Salomón y hasta ahí el Reino unificado. Israel es una sola nación. Pero a la
muerte de Salomón, el reino se parte en dos: Israel y Judá.
Los descendientes de David son reyes en Judá.
Así pasan 400 años aprox. Reinado hasta el año 606 en que Babilonia lleva en cautiverio a los judíos
y comienzan lo que la Escritura da en llamar “los tiempos de los gentiles” (Lc. 21.24), es decir, el
dominio gentil –no judío- en el mundo.

5. La perspectiva del Reino en el Nuevo Testamento.

5.1. La promesa del reino a David y a su descendencia se comienza a cumplir en el

nacimiento del Señor Jesús. Lucas 1.31-33: (el ángel a María): “Y darás a luz un hijo y llamarás su

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nombre Jesús. Este será grande, y será llamado Hijo del Altísimo, y el Señor Dios le dará el trono de
David, su padre, y reinará sobre la casa de Israel para siempre y su reino no tendrá fin”.
Es notable que tanto María cuanto José eran de ascendencia real. (Ver Mat.1.1-17 y Luc. 3.23-38).

5.2. Juan Bautista lo anuncia: Mat. 3.2: “Arrepentíos porque el reino de los cielos se ha
acercado”.

5.3. El Señor lo inaugura: Mar. 1.15: “El tiempo se ha cumplido y el reino de Dios se ha
acercado...”

5.4. El Reino es predicado mediante “el Evangelio del Reino”: Mar.1.14: “Jesús vino de Galilea
predicando el Reino de Dios, y diciendo: El tiempo se ha cumplido y el reino de Dios se ha acercado;
arrepentios y creed en el evangelio”.

5.5. Ese reino es un “misterio”. Mar. 4.11: “A vosotros os es dado el saber el misterio del reino de
Dios, mas a los que están fuera, por parábolas todas las cosas”.
¿Qué significa esto?
Un “misterio” en el concepto bíblico del N.Testamento no es algo oscuro, esotérico, sino una verdad
oculta en otro tiempo, pero revelada finalmente por Dios. Un secreto desvelado.
El Señor lo presenta en 7 parábolas citadas en Mateo 13. Las parábolas del Reino, que aunque
está por venir con poder y gran gloria, ya está entre los hombres como un anticipo de lo que será. Estas
parábolas ilustran distintos aspectos de ese Reino: su evangelio, su aceptación, su extensión, su
consumación, su juicio.
El Reino de Dios es un misterio, además porque no se observa ni comprende físicamente, sino
que es discernido espiritualmente. P. Ej. Juan 3.3: “El que no naciere de nuevo, no puede ver el
Reino de Dios”.

5.6. El Reino estaba entre los hombres con autoridad y poder. Mat. 28.18: “Toda autoridad me
es dada en el cielo y en la tierra”. Jesucristo, el rey, tiene autoridad

 Legal: En Mateo 1 está su genealogía, y entre sus antecesores está David (v.6 y, por lo
tanto “el Hijo de David” tiene derecho legal al trono.
 Moral: Dios le da su aprobación desde el cielo y la victoria sobre la tentación y Satanás le da
esta autoridad (Mateo 3.16-17; 4.1-11).
 Judicial: Sus leyes están expuestas en los Evangelios, particularmente en el Sermón del
Monte (Mateo caps. 5 a 7).
 Divina: Mat. 4.23-24: “Y recorrió Jesús toda Galilea, enseñando en las sinagogas de ellos, y
predicando el evangelio, y sanando toda enfermedad y toda dolencia del pueblo”.

Entre los milagros que hizo el Señor está la expulsión de demonios. Esa fue una manifestación de la
autoridad del Señor sobre Satanás.
Satanás es, pues, un enemigo vencido. Este es un anticipo de las bendiciones del Reino de Dios
futuro, en el cual Satanás estará atado durante mil años, pero que luego será juzgado en el lago de
fuego, para nunca más estar en el reino eterno del Señor.

5.7. El Reino estaba entre los hombres con gracia.

 Es para todos los hombres: “Venid a mi todos...” decía el Señor (Mat.11.28).
 Es para los necesitados: “Bienaventurados los pobres de espíritu... los que lloran.. los que
tienen hambre y sed de justicia...” (Mat.cap.5.3-12).

5.8. El Reino rechazado. Juan 1.11 es un anticipo: “A los suyo vino, y los suyos no le recibieron”.
 Los judíos rechazaron al Señor. La parábola de Mat.21.33-42 es un ejemplo:
 Dueño de la viña que plantó. Envió vez tras vez a sus siervos a buscar frutos. Los
golpearon y mataron. Finalmente dijo: Enviaré a mi hijo. Dijeron: Venid, matémosle y
apoderémonos de su heredad.. Le echaron fuera de la viña y le mataron .
O en Luc. 19.11-27. Un hombre noble fue a un país lejano a recibir un reino y volver.
 Sus conciudadanos dijeron, aborreciéndole: “No queremos que este reine sobre nosotros”.
 La Cruz fue el máximo rechazo para el Señor (Jn.19.15)
 Lo mismo hicieron con los apóstoles (Hch.13.46-48; 28.25-28).
 Los judíos incrédulos fueron, pues excluidos del reino: (Rom.11.15, 20, 25).

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 Desde entonces Dios llama a todos los hombres en todos los lugares, sin distinción de raza
o nacionalidad para que se sometan a la voluntad de su gobierno. (Comp. Mat.13.1;
Hch.13.46, 18.6).

6. El Reino en el futuro

Un sencillo esquema nos muestra la división entre dos épocas:

El Siglo Venidero

Segunda Venida
Este Siglo deReino
Cristo
Milenial
Este Siglo
Primera Segunda
Resurrección Resurrección
Para Vida Para condenación

El primer acontecimiento escatológico que inaugura “el siglo venidero” (“siglo”, como expresión de
era o edad) es la Segunda Venida de Cristo, la parousia (presencia) y la epiphaneia (manifestación
gloriosa) del Señor y su apokalupsis (revelación) al mundo.
Luego de la resurrección de los creyentes que durmieron en el Señor y el arrebatamiento de la
Iglesia, y de los acontecimientos en el cielo (el Tribunal de Cristo y las Bodas del Cordero) y en la tierra
(Grande Tribulación) el Señor vendrá a este mundo a desarrollar su Reino Milenial.
Pero, aún esa época de mil años de paz y justicia no es la consumación de Su gobierno absoluto
sobre los hombres. Porque Satanás será atado durante esos mil años (Apoc.20.2), al cabo de los cuales
será soltado y saldrá a engañar a las naciones y a reunirlos para una batalla contra el Señor y Su pueblo
(Apoc. 20.7-8). Los nombres Gog y Magog (Apoc.20.8) pueden ser nombres simbólicos que representan
a los enemigos de Cristo, provenientes de todo el mundo.
Dios consume con fuego a esas huestes y Satanás es lanzado al lago de fuego (Apoc. 20.9-10).
Luego se levanta el Gran Trono Blanco y el juicio final a los incrédulos de todos los tiempos
(Apoc.20.11-15).
Recién entonces Dios crea “cielos nuevos y tierra nueva” (Apoc. 21.1).
Hay, pues, dos etapas con relación al Reino futuro:

 un preludio: el reino milenial (Apoc. 20.1-6)

 una consumación final y eterna: cielos nuevos y tierra nueva (1 Cor. 15.24-28;
Apoc.caps.21 y 22).

7. El Evangelio del Reino

Sobre este particular aclara MacDonald que “mientras que existen diferencias entre las varias edades, hay una
cosa que jamás varía, y ésta es el evangelio. La salvación siempre ha sido, es en la actualidad, y siempre será, por
la fe en el Señor. Y la base de la salvación para cada edad es la obra acabada de Cristo en la Cruz del Calvario.”
A pesar de ello encontramos en el anuncio evangélico dirigido a Israel ciertas peculiaridades que lo distinguen
de lo proclamado hoy día.

El Evangelio del Reino fue anunciado a Israel

 Por Juan el Bautista, el heraldo del Rey – Mat.3.1-3

 Por el Señor – Mar.1.14-15
 Por los apóstoles – Hch. 2.30. La última mención a este evangelio está en Hch.8.12

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 Surge el Apóstol Pablo y comienza a predicar a los judíos. En Hch.18.6, debido a la

incredulidad de los judíos, les abandona y sigue su ministerio entre los gentiles.
 Así el anuncio del evangelio del reino queda suspendido y en el resto del Nuevo
Testamento encontramos expresiones como:
 El evangelio de Dios (Rom.1.1)
 El Evangelio de Cristo (Rom.15.19)
 El Evangelio de la gracia de Dios (Hch.20.24)
 El Evangelio de paz (Ef.6.15)
 Mi evangelio (Rom.2.16)
 Nuestro evangelio (2 Ts.2.14)
 Evangelio glorioso (1 Tim.1.11)
 Evangelio eterno (Apoc.14.6)

Son todas expresiones referidas al mismo mensaje: El evangelio de salvación (Ef.1.13), el mensaje
que ahora predica la Iglesia del Señor.
Israel ha desaparecido como centro del escenario. Ahora la Iglesia del Señor está compuesta por
judíos y gentiles. Pero cuando la Iglesia sea llevada al cielo, nuevamente Israel será el centro de
atención de los planes de Dios, primeramente para juicio y después para bendición.
El Evangelio del Reino volverá a proclamarse durante la Grande Tribulación y aquellos que lo
acepten, aceptarán la autoridad y soberanía de Cristo como su Rey.
Mat.24.14: “Y será predicado este evangelio del reino en todo el mundo, para testimonio a todas las
naciones, y entonces vendrá el fin”.

1. Quiénes lo predicarán. Los 144.000 escogidos, que actuarán como misioneros del pueblo de
Israel a todas las naciones. (Apoc. Cap.7.4-8)
2. Quiénes lo creerán. Judíos y gentiles (Apoc.7.9-14)
3. Cómo se creerá. Por la fe en el Cristo crucificado, y esperando su manifestación cuando El
venga con poder y grande gloria”.
Pero se creerá en medio de gran oposición (Apoc.7.16-17) y se requerirá mucha perseverancia y
paciencia para llegar a ser salvos. (Mat.24.13; Ap.14.18).

Este Evangelio será predicado también durante el Reino Milenial, para salvación a todos aquellos
que durante ese periodo sin igual para la humanidad, nazcan y tengan la oportunidad de ser salvos.

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