temperatura del metal base. La dilatación en el aporte es, en consecuencia, mayor que en la pieza base. Al enfriarse hasta la temperatura ambiente (equilibrio térmico), la contracción en el aporte será mayor que en la pieza base.
En un eje (cilindro) aparecerán esfuerzos térmicos
circunferenciales que sumados a esfuerzos por deformaciones (torsión, flexión y/o dilatación) comunes en los ejes, tenderán a producir fisuras axiales y en breve, consecuente fraccionamiento y desprendimiento del material aportado. Para nuestro caso, el material aportado es una masilla polimérica que se aplica a la temperatura ambiente, es decir en frio, al término de la reacción química la contracción es casi nula (menor que 0.025%), absolutamente despreciable; en consecuencia, no hay esfuerzos internos sean de origen térmicos o elásticos. El material aportado impacta con el material base formando una capa granular, no hay fusión (no es soldadura) con el material base, tampoco entre partículas metálicas aportadas porque al llegar a la superficie las afectó un gradiente negativo de temperatura. La cohesión del aporte no es metálica, es principalmente granular, mecánica: es una compactación por “impacto”, por tanto hay intersticios, es decir, el material no es continuo (quedan porosidades)
La polimerización es un proceso químico de
enlazamiento molecular cuyo resultado es un material muy cohesionado, compacto y continuo, con grandes fuerzas cohesivas internas en todas las direcciones. El material aportado es “anclado” al eje por la rosca o ranuras premaquinadas, esta fijación es mecánica y superficial
La adhesión (efecto químico) de Belzona a los
metales es muy alta y se hace máxima (197 Kg/cm2) en los aceros aleados e inoxidables. La adhesión es directamente proporcional al área, con la rosca se duplica esta área y se optimiza el anclaje. El metal o aleación aportado es casi siempre muy diferente a la pieza reparada, por tanto propiedades físicas importantes como elasticidad, coeficiente de dilatación térmica y módulo de compresión son en consecuencia completamente disímiles; por tanto, al aparecer los esfuerzos propios de un eje en operación, el comportamiento del anillo de material aportado será muy diferente al del cilindro macizo del eje. La dureza y rigidez del metalizado tienen como consecuencia la fragilidad, la fisuración/rotura y el desprendimiento consecuentes a las deformaciones y esfuerzos. Los polímeros Belzona han sido diseñados con las propiedades técnicas adecuadas para resolver problemas específicos de mantenimiento: elasticidad superior a la de los metales, resistencia a los esfuerzos, resistencia química y térmica. En caso necesario de solicitaciones mayores, pueden mejorarse estas propiedades con un simple postfraguado, proceso equivalente a un tratamiento térmico en los metales. La dureza (89 shore D) no es una propiedad determinante ni excluyente para el caso. Producto en pasta de dos componentes basado en la mezcla de una aleación de acero de silicio con polímeros y oligómeros reactivos de peso molecular alto. Una vez fraguado, el material es duradero y maquinable. FIN DE LA PRESENTACIÓN