Está en la página 1de 32

GUÍA 4

Clima de aula y condiciones


para el aprendizaje

Orientaciones al Equipo de Liderazgo Educativo


para desarrollar reuniones de reflexión pedagógica docente
GUÍA 4

Clima de aula y condiciones


para el aprendizaje

Orientaciones al Equipo de Liderazgo Educativo


para desarrollar reuniones de reflexión pedagógica docente
Plan Apoyo Compartido
Ministerio de Educación
Índice

Carta al equipo de liderazgo educativo 5

Introducción 7

Marco de referencia: clima y convivencia escolar 9

Documentos para la motivación al tema 10

Documento 1
Creación de un clima apropiado para el aprendizaje en la sala de clase 10

Documento 2
El profesor como persona 15

Guía de trabajo para una reunión de reflexión pedagógica docente 18

Propósito 18

Metodología 18

Materiales necesarios para cada participante de la reunión 19

Desarrollo del taller 20


Orientaciones al Equipo de Liderazgo Educativo
para desarrollar reuniones de reflexión pedagógica docente

Estimado equipo de liderazgo educativo:

Esta Guía es parte del programa de trabajo de plan Apoyo Compartido, que busca fortalecer el proceso de enseñanza
aprendizaje en los establecimientos participantes.

A través de un conjunto de Guías destinadas al equipo de liderazgo educativo, se entrega material de trabajo y análisis
para orientar la realización de reuniones de reflexión pedagógica docente sistemáticas con las y los docentes1 de su
establecimiento. El objetivo de estas reuniones es favorecer y enriquecer el desarrollo profesional docente
mediante recursos técnico pedagógicos que permitan el intercambio, la reflexión y el trabajo colaborativo.
Cada Guía entrega insumos para una o más reuniones y el presente ejemplar se acompaña, además, de dos materiales
de apoyo:

• Orientaciones para la implementación de los programas pedagógicos de los niveles de transición (Mineduc. 2009)
destinado a las educadoras de párvulo de NT1 y NT2.

• Fomento de un clima de aula favorable para el aprendizaje (Mineduc. 2012) destinado a docentes de 1° a 4° Básico.

La presente Guía trata sobre prácticas y condiciones que favorecen un clima apto para el aprendizaje dentro
del aula. Para trabajar el tema se presentan, al inicio de esta Guía, dos documentos de profundización que buscan 5
fortalecer y motivar al equipo de liderazgo educativo en la preparación de la reunión técnica.

La reflexión pedagógica busca generar discusión en torno a las condiciones para el aprendizaje y un clima de aula
apropiado, además de propiciar un espacio de intercambio de experiencias personales que hayan dado buenos
resultados en la sala de clases para educadoras y docentes.

Considerando que el clima de aula es un tema trascendental para lograr una implementación efectiva del currículum,
se propone a los establecimientos involucrar a todo el equipo docente en el análisis y discusión de este tema, y dar
lugar a propuestas de mejoramiento concretas según los diferentes niveles y realidades del establecimiento. Esto
permitirá a los docentes y educadoras tener una visión compartida de los principales criterios que se consideran
fundamentales en el establecimiento para realizar una clase en un ambiente favorable para el aprendizaje.

Esperando que las orientaciones contenidas en esta y otras Guías sean de utilidad y ayuden a fortalecer a docentes
y educadoras en su tarea educativa, se despide afectuosamente,

Equipo plan Apoyo Compartido.

1 En este documento, se utilizan de manera inclusiva términos como “el alumno”, “el estudiante”, “el Sostenedor”, “el Director”, “el profesor”, “el
docente”, “la educadora”, “el asistente de la educación”, “el profesional de la educación” y sus respectivos plurales, así como otras palabras
equivalentes en el contexto educativo, se refieren a hombre y mujeres. Esta opción obedece a que no existe acuerdo universal respecto de
cómo evitar la discriminación de géneros en el idioma español, salvo usando “(o)/”, “(los), (las)”, u otras similares para referirse a ambos sexos
en conjunto, y ese tipo de fórmula supone una saturación gráfica que puede dificultar la comprensión de la lectura.
Orientaciones al Equipo de Liderazgo Educativo
para desarrollar reuniones de reflexión pedagógica docente

Introducción

La noción de clima de aula es una metáfora que nos sirve a todos para entender que se trata de un ambiente, de
una “atmósfera”, de un contexto determinado en el que inciden un conjunto de variables. Para ser más precisos en
la comprensión de la metáfora, el “clima de aula” se refiere más exactamente al conjunto de interacciones que
suceden dentro de la sala de clases, que tienen como actores centrales al sujeto docente y a los estudiantes en
torno al conocimiento (aprendizaje de contenidos curriculares). Esta interrelación está mediada o intermediada por
estrategias, acciones, materiales, formas de relación y contenidos específicos.

Analíticamente se puede identificar dos tipos de interrelaciones, aunque en la práctica cotidiana muchas veces se den
simultáneamente: la “relación pedagógica” y la “relación didáctica”. La primera, es la que se produce entre la persona
del docente y la persona del estudiante; es netamente un tipo de relación de carácter formativo, personalizador
e intersubjetivo. La segunda, es de otra naturaleza, es aquella en que docente y estudiante (ambos sujetos con
diferentes experiencias) se enfrentan a un objeto de estudio, expresado en un contenido curricular; es un tipo de
relación epistemológica, porque tiene que ver con el conocimiento, recordando que el contenido de la didáctica es
el conocimiento de disciplinas formalizadas. 7

El docente siempre está educando. Sin embargo, cuando se acerca a un estudiante y lo acoge como persona, cuando
lo escucha en sus preguntas e interrogantes, cuando demuestra genuina preocupación y cercanía con él, cuando le
expresa su confianza, etc., se establece allí un tipo de relación que no tiene que ver con un contenido o aprendizaje
disciplinario específico sino con la relación pedagógica o formativa. En cambio, cuando, los estudiantes están en
un trabajo de grupo y tienen una tarea o un problema por resolver, y el docente se acerca y les explica, les entrega
nueva información, nuevas analogías y ejemplos o hace esquemas explicativos de una materia, entonces establece
una relación didáctica, porque el objeto de estudio es un conocimiento disciplinario específico.

El clima de la clase va a depender de ambas dimensiones. Por una parte, del modo cómo el docente se relacione con
los estudiantes en términos de su preocupación personal por ellos, su capacidad de escucharlos de modo activo, de
comprenderlos desde sus singularidades y, correlativamente, si los estudiantes sienten que es justo y equitativo,
que es respetuoso en su trato, si es acogedor, si promueve espacios para que todos se expresen, si genera un espacio
de confianza.

Por otra parte, dependerá también de que las estrategias de enseñanza sean activas, dinámicas, adecuadas a las
edades de los estudiantes, que respondan a sus intereses, sean desafiantes, que los conceptos estén siendo explicados
con claridad y con un lenguaje adecuado, si el docente utiliza analogías, metáforas y ejemplos que ayuden a la
comprensión y, correlativamente, que los estudiantes sientan que es interesante lo que están aprendiendo, que los
problemas planteados los desafían a encontrar soluciones y respuestas, que son considerados en sus aportes en la
construcción del conocimiento.
Guía 4 Clima de aula y condiciones para el aprendizaje

La preocupación permanente de cada docente es cómo enseñar para que todos los estudiantes aprendan. Es decir,
que logren apropiarse de modo permanente (significativamente) de los contenidos propuestos en el currículum
nacional, expresados en los programas de estudio y desplegados en los textos escolares.

Sin embargo, no son pocos los que se encuentran con la realidad de que algunos de los estudiantes, aun de los
primeros cursos, tienden a distraerse, a no poner atención, son más inquietos que lo habitual; y otros, a veces, se
comportan de modo agresivo, responden con violencia, se desordenan de tal modo que el docente ocupa tiempo
destinado al aprendizaje para “re-centrarlos” o se le hace prácticamente imposible avanzar en su propósito de que
aprendan eficientemente.

La “clase2” –como llamamos habitualmente– es el espacio de interacción de cada docente con sus estudiantes en
torno a un “contenido o aprendizaje esperado”, más precisamente, un conocimiento legitimado o una oportunidad de
aprendizaje según lo establecido en el currículum. Esta interacción entre docente, estudiante y aprendizaje, es lo que
llamamos enseñanza escolar. La única y exclusiva finalidad de toda enseñanza es que quien está siendo enseñado,
aprenda. Si no hay aprendizaje, no se podría decir que hubo enseñanza.

Los estudios indican que una condición básica para lograr aprendizajes de calidad, es conformar un clima de trabajo
que permita a todos los estudiantes poner su potencial a disposición de los aprendizajes propuestos por el docente;
es decir, centrarlos en la tarea para que el esfuerzo desplegado por aquel rinda los mejores frutos. Sabemos que la
condición de estar centrado en la tarea es tremendamente compleja, porque en ella inciden múltiples factores de tipo
personal (características de los estudiantes), sociales (condiciones medioambientales o del entorno), institucionales
(modo de funcionamiento del establecimiento) y formativas (capacidad de los estudiantes de autogobernarse), entre
otras.
8
La presente Guía se refiere al momento de interacción. Este período se hace más fluido si el docente ha tenido la
posibilidad de reflexionar sobre aquello que va a enseñar, ha clarificado cuáles son las ideas centrales de la clase,
cuál es el aprendizaje central o nuclear, cómo va a organizar la clase y qué necesita para ello.

Así, la creación de un “clima” adecuado para la enseñanza, depende tanto de la claridad y consistencia de las normas
y del ambiente organizado de trabajo como de otros factores. Entre estos, aquellos que se refieren al modo cómo los
docentes se relacionan con los estudiantes y la percepción que estos tienen de su comportamiento: si son cercanos,
afectuosos, justos o equitativos, respetuosos de las diferencias, sin favoritismos hacia los más destacados, si otorgan
oportunidades para que todos se expresen, si saben manejar los conflictos dentro de la sala de clase, entre otros.
Cuando los estudiantes perciben estas condiciones en sus docentes y educadores, estos se valoran como personas,
logrando afianzarse y ser reconocidos como autoridad.

Por último, se entregarán estrategias y técnicas que ayudan o facilitan la creación de un ambiente adecuado
para la enseñanza, con resultados de aprendizaje constatables. Esta responsabilidad tiene como prerrequisito la
preparación de la enseñanza, lo que supone dominio de los contenidos a enseñar o aprendizajes esperados, claridad
de los procedimientos de cómo se enseña ese contenido (didáctica de la disciplina), pertinencia de las estrategias
y técnicas, tanto con el contenido como con las características del grupo de estudiantes.

2 En Educación Parvularia el concepto clase corresponde a una experiencia de aprendizaje.


Orientaciones al Equipo de Liderazgo Educativo
para desarrollar reuniones de reflexión pedagógica docente

Marco de referencia: clima y convivencia


escolar

La convivencia escolar es un aprendizaje. Se aprende a vivir con otros (con-vivir). Este aprendizaje se va obteniendo
en la familia, en el barrio, en la sociedad donde cada niño va transitando. Es uno de los imperativos de la educación
para el siglo XXI. La convivencia escolar tiene su base en el aprendizaje del ejercicio de la ciudadanía. Ninguna persona
puede transitar por la vida si no ha aprendido a convivir, puesto que eso supone poner en práctica el ejercicio de la
ciudadanía: respetar al otro en sus ideas, planteamientos y en sus diferencias; aprender a ser tolerante e inclusivo,
porque todos estamos dotados de derechos que emergen de la dignidad humana; aprender a ser solidarios, a apoyarnos
y ayudarnos unos a otros y unos con otros.

El clima es un indicador de la calidad de la formación en convivencia. El énfasis pedagógico debe estar puesto en enseñar
a convivir, en tanto esto significa educar en el respeto a todos, valorar a las personas en sus ideas y formas de expresión,
ser tolerantes e inclusivos, aprender a trabajar en grupos y compartir proyectos, a dialogar fundamentadamente, a
discutir e intercambiar ideas con otros, a disentir y aceptar que mis ideas pueden ser diferentes de las de otros, a
participar y actuar con otros, entre otras; todas relacionadas con la formación personal y social de los estudiantes.
9
Si bien las normas son fundamentales, más aún en un proceso formativo, porque ordenan el modo de conducirse y
establecen ámbitos de acción y límites, no constituyen la solución de todo. Las normas por sí solas no son suficientes,
ese esfuerzo deberá estar centrado en la formación de los estudiantes; en desarrollar y fortalecer la capacidad de
asumir responsablemente los principios y valores que orientan la convivencia social. Se trata de formar personas y
ciudadanos responsables que sepan actuar correctamente no por coacción o imposición sino por su libre determinación
orientada por principios y valores.
Guía 4 Clima de aula y condiciones para el aprendizaje

Documentos para la motivación al tema

A continuación se presentan dos documentos breves, que apuntan al sentido de lo planteado en la introducción. El
primero, Creación de un clima apropiado para el aprendizaje en la sala de clase, es una actualización y ampliación del
Marco para la Buena Enseñanza. El segundo, El profesor como persona, corresponde a una traducción del Capítulo 2
del libro Qualities of effective teachers (Las cualidades de los profesores efectivos) 3, de J. H. Stronge.

Este autor recopiló más de seiscientas investigaciones sobre el tema del profesor efectivo. Producto de este trabajo,
llegó a identificar un conjunto de características que se reiteraban en las diferentes investigaciones, y que permiten
definir a un profesor efectivo. Uno de los factores que sobresale y que resulta clave, es “El profesor como persona”.
Las investigaciones indican que un profesor es más efectivo no solamente cuando logra buenos resultados, sino
cuando además, logra que sus estudiantes crezcan como personas.

Documento 1
Creación de un clima apropiado para el
aprendizaje en la sala de clase
La creación de un clima de respeto, de equidad, de tolerancia, de solidaridad, entre otros, dentro de la sala de clases,
10
adquiere especial relevancia, porque las investigaciones realizadas en este campo indican que la calidad de los
aprendizajes depende, en gran medida, de componentes que van más allá de las prácticas de enseñanza mismas y
que también influyen aspectos sociales, afectivos y materiales.

En tal sentido, resultan claves aspectos como el entusiasmo del profesor por enseñar, las expectativas que tenga sobre
las posibilidades de aprender de sus estudiantes, el apoyo y la estimulación de las fortalezas antes que el acento en
las debilidades, la valoración de sus características e intereses, la acogida y consideración de sus preocupaciones
particulares, y el aprecio por su potencial intelectual y humano.

Asimismo, son importantes las interacciones que ocurren al interior del aula entre docente y estudiantes, y de
estos últimos entre sí. Es claro que los aprendizajes se ven favorecidos cuando ocurren en un clima de confianza, de
aceptación, de equidad y de respeto entre las personas.

Igualmente, cuando se establecen y mantienen normas constructivas de comportamiento, donde la sala de clases
se transforma en un espacio de aprendizaje organizado y enriquecido, que invita a indagar, a compartir y a aprender.

3 El libro está dividido en siete capítulos. Cada uno tiene relación con alguna de las características, que según el autor, hacen que un profesor
sea efectivo. Estas características son: Prerrequisitos para una Enseñanza Efectiva, El Profesor como Persona, Gestión y Organización de la
Sala de Clases, Organización de la Enseñanza, La Enseñanza, Monitoreo del Progreso y el Potencial de los Estudiantes. http://books.google.cl/
books?hl=es&lr=&id=0dZlQ1uSKBwC&oi=fnd&pg=PR7&dq=%E2%80%9CQualities+of+effective+teachers%E2%80%9D&ots=IGdX7Zzd0A&si
g=IcS-JRkppvSdrzjEOoNjI_CUSBU#v=onepage&q=%E2%80%9CQualities%20of%20effective%20teachers%E2%80%9D&f=false
Orientaciones al Equipo de Liderazgo Educativo
para desarrollar reuniones de reflexión pedagógica docente

En ese sentido, se deberán tener presentes a lo menos cuatro criterios básicos para mantener un clima adecuado:

I. Establecer un sistema de relaciones de aceptación, equidad, confianza, solidaridad y respeto.

II. Manifestar altas expectativas sobre las posibilidades de aprendizaje de cada estudiante.

III. Establecer y mantener normas consistentes de comportamiento dentro del aula.

IV. Construir un ambiente organizado de trabajo y disponer los espacios y los recursos en función de los aprendizajes.

I. Establecer un sistema de relaciones de aceptación, equidad,


confianza, solidaridad y respeto

La condición básica para crear un clima de respeto en la sala de clases está dada por la manera cómo el
docente se relaciona con sus estudiantes y el tipo de relación que estimula entre ellos.

Un buen clima de aula se caracteriza porque los estudiantes se sienten valorados y seguros; saben que serán
tratados con dignidad, que sus preguntas, opiniones y experiencias serán acogidas con interés y respeto. Este
tipo de relaciones entre docentes y estudiantes se caracteriza por un trato respetuoso y cordial, donde el
docente no olvida su rol de autoridad pedagógica, responsable del curso en que enseña, y los estudiantes
reconocen esa autoridad.

En un ambiente como el descrito, el docente escucha prudentemente a sus estudiantes y promueve que se
escuchen entre sí, tanto en conversaciones sobre sus experiencias y sentimientos, como en las referidas a
11
los contenidos de la clase; valora sus aportes, los comenta, los enriquece y abre espacios de intercambio con
el resto del curso.

Del mismo modo, demuestra con sus actitudes que las diferencias culturales, étnicas, de género, físicas o
socioeconómicas son consideradas como fortalezas, en cuanto permiten enriquecer las conversaciones,
conocimientos y experiencias del conjunto de estudiantes.

Algunas ideas que ayudan en este punto:

• El docente establece un clima de relaciones de respeto con sus estudiantes, cuando los escucha, comenta
positivamente sus aportes y los enriquece con sus comentarios.

• Favorece sistemáticamente las interacciones relacionadas con los aprendizajes, abriendo espacio para
preguntas, cuestionamientos, aportes, opiniones, comentarios de todo el grupo, no solo de los más
aventajados.

• Proporciona a todos sus estudiantes oportunidades de participación, considerando las diferencias personales,
culturales, étnicas y de género, y ofrece espacios para que realicen aportes que expresen esas diferencias.

• Promueve actitudes de compromiso y solidaridad entre estudiantes, demostrando capacidad para manejar
los conflictos, burlas y descalificaciones entre ellos, y contribuye a darles una adecuada resolución.

• Modela actitudes de comprensión, de ayuda y colaboración entre estudiantes, estimulando este tipo de
relaciones. Del mismo modo, favorece interacciones amistosas y gratificantes que facilitan el proceso de
enseñanza.
Guía 4 Clima de aula y condiciones para el aprendizaje

• Crea un clima de respeto por las diferencias de género, culturales, étnicas y socioeconómicas, promoviendo
sistemáticamente que respeten y valoren las diferencias individuales de sus compañeros.

• Maneja y resuelve los conflictos que ayudan a promover la aceptación de opiniones, los intereses diversos,
y reconoce las diferencias como elementos valiosos y enriquecedores de la convivencia.

II. Manifestar altas expectativas sobre las posibilidades de aprendizaje


de cada estudiante

Un aspecto crucial al interior de las salas de clase es la capacidad del profesor para despertar el interés por
el aprendizaje en sus estudiantes. Esto se relaciona estrechamente con su disposición a comprometerse con
los contenidos que enseña y, también, con lograr que se motiven y valoren lo que están aprendiendo.

Cuando un docente tiene altas expectativas sobre los aprendizajes, la sala de clases se distingue porque hay
un ambiente activo, en el que docentes y estudiantes se formulan preguntas; están interesados en indagar,
llegar a resultados y aprendizajes satisfactorios y en comunicar a otros sus hallazgos.

En un ambiente así, los estudiantes se sienten desafiados a aprender, apoyados por el docente, quien tiene
la convicción de que todos pueden aprender y esforzarse para lograrlo, no por imposición sino favoreciendo
el ejercicio de su autonomía.

De esta manera, no temen al ridículo cuando proponen ideas, preguntan u opinan sobre temas de su interés,
ya que saben que la clase es un espacio para aprender y cuestionarse, y que el docente se interesará por sus
12
aportes.

Los estudiantes se sienten seguros, porque el docente refuerza su compromiso con el logro de buenos resultados
y trabajos bien hechos; no enfatiza solamente la realización de la actividad o la tarea, sino también el sentido
y calidad de la misma, ofreciendo ayuda para que lo logren.

Algunas ideas que ayudan en este punto:

• El profesor diseña estrategias de enseñanza y situaciones de aprendizaje atractivas y adecuadas a la edad


e intereses de los estudiantes, dándoles el tiempo para que busquen y encuentren sus propias soluciones,
acordes con el objetivo de aprendizaje.

• Demuestra explícitamente interés por el aprendizaje, la indagación, la búsqueda y, también, satisfacción


cuando se llega a los resultados esperados. Genera un estilo de trabajo en que incorpora las preguntas, aportes
y experiencias de todos los estudiantes, no solo los de los más aventajados o con mejores rendimientos.

• Favorece el desarrollo de la autonomía de sus estudiantes en situaciones de aprendizaje, estimulando la


indagación, la formulación de opiniones y el hallazgo de soluciones propias, para beneficiar la capacidad
de tomar decisiones.

• Promueve en sus estudiantes el interés por el orden en la realización de sus trabajos, centrándose en la
calidad de la tarea e invirtiendo energía y esfuerzos por lograr buenos resultados.

• Promueve la utilización eficiente del tiempo en la realización de las actividades, en las conversaciones
sobre un tema relacionado con la clase o problemas relativos a los contenidos en estudio.
Orientaciones al Equipo de Liderazgo Educativo
para desarrollar reuniones de reflexión pedagógica docente

III. Establecer y mantener normas consistentes de comportamiento en


el aula

La enseñanza no se puede generar en un ambiente en el que el comportamiento de los estudiantes no permite


el trabajo coordinado y organizado. Cuando la clase es interesante, los estudiantes están comprometidos y
concentrados, por lo tanto, es menos probable que se distraigan y promuevan el desorden.

Complementariamente, se requiere establecer normas claras, concordadas entre docentes y estudiantes, que
orienten las interrelaciones y faciliten los aprendizajes. En este sentido, es importante explicitar los efectos y
las consecuencias para quienes traspasen los límites establecidos; estas transgresiones deben ser tratadas
con sentido formativo.

Las normas deben tener la flexibilidad suficiente como para adecuarse a las características de los estudiantes
y sus necesidades de aprendizaje. La flexibilidad no debe entenderse como despreocupación o laxitud, sino
claramente como una adecuación de criterios a las particularidades de cada estudiante.

Cualquiera sea la especificidad de las normas, es conveniente considerar ciertos criterios básicos, como
que estas sean claras, explícitas y comunes para todos, que sean adecuadas al nivel de desarrollo de los
estudiantes, que prevengan y eviten actitudes violentas o descalificatorias y, especialmente, que los estimulen
a monitorear su propio comportamiento.

Algunas ideas que ayudan en este punto:

• Establecer normas de comportamiento conocidas y comprensibles para todos los estudiantes. Si bien
los dos factores que más influyen en el clima de la clase son la preparación de su clase o experiencia 13

de aprendizaje y el modo de relacionarse con su curso, ayuda a esta finalidad establecer normas de
comportamiento claras y elaboradas entre el docente y sus estudiantes.

• Las normas deben ser congruentes con las necesidades de la enseñanza y la creación de una interrelación
armónica. Las normas son la expresión práctica de un principio o de un criterio. Es importante remitirse
al sentido de la norma y entender que operan en contextos de aplicación determinados. Allí el criterio
docente es clave.

• Las normas de convivencia deben abordarse formativamente. Para eso el docente invita a sus estudiantes
a analizar y reflexionar sobre las normas de convivencia para generar una comprensión compartida, y
propone monitorear su cumplimiento.

• Frente al quiebre de las normas de convivencia, el docente genera respuestas asertivas y efectivas. De
manera respetuosa, pero resuelta, aprovecha las transgresiones como instancias formativas y de aprendizaje
de las normas de convivencia.

IV. Construir un ambiente organizado de trabajo y disponer los espacios


y recursos en función de los aprendizajes

Las mejores estrategias de enseñanza son inútiles en un ambiente desestructurado. Por lo tanto, es relevante
desarrollar procedimientos claros y explícitos para que se genere un trabajo fluido y una utilización eficiente
del tiempo.

Las “rutinas” o estrategias que favorecen la autonomía de los estudiantes permiten la organización de las
diferentes actividades.
Guía 4 Clima de aula y condiciones para el aprendizaje

En una clase bien organizada, se pueden distinguir claramente las actividades de inicio, de desarrollo y de
cierre. Los estudiantes saben cómo trabajar o qué se espera de la clase y, también, qué se desea de ellos.
Ocupan su tiempo en actividades interesantes y relevantes.

Además, se ocupa poco tiempo en acciones que no son de enseñanza, como mantener la disciplina, explicar
repetidamente las instrucciones, llamar la atención, etc., porque una clase bien organizada es dinámica, hay
momentos de conversación, de interacción con los pares y con el docente, donde todos participan.

Algunas ideas que ayudan en este punto:

• El docente diseña la clase, considerando el tiempo que requiere cada actividad, sin ocupar tiempo en
acciones que no se relacionan con el aprendizaje; en el diseño contempla la organización de la clase y la
participación de sus estudiantes. Además, ellos entienden lo que se les propone, trabajan sin perder el
tiempo y conocen el aprendizaje esperado.

• El docente organiza la sala de clases acorde con las estrategias de enseñanza y con las actividades de
aprendizaje que utilizará. Aprovecha, cuando es pertinente, los espacios del entorno natural, social y
cultural de la escuela, así como los recursos de aprendizaje con que cuenta.

14
Orientaciones al Equipo de Liderazgo Educativo
para desarrollar reuniones de reflexión pedagógica docente

Documento 2
El profesor como persona4
James H. Stronge

“Solo quisiera escribirle una nota de agradecimiento por todo lo que ha hecho por mí en los últimos
dos años. Aprendí mucho y disfruté mucho haciéndolo. Me encantaron los laboratorios y cada cosa
que hicimos para que su clase fuera interesante. Usted hizo todo para que aprendiéramos sin siquiera
darnos cuenta de cuánto estábamos aprendiendo, pero cuando llegó el momento de demostrar lo que
sabíamos, dijimos, “¡Wau! ¡Realmente aprendimos todo! No solo nos enseñó acerca de las ciencias, nos
puso en escenarios reales, esto nos ayudó a prepararnos para la escuela secundaria y la universidad.
Pero fue aún más allá, usted llegó a transformarse en un amigo para mí. Eso puede asustar un poco,
pero realmente me ayudó a mirarme a mí mismo, y espero llegar a ser, al menos en parte, como usted.
Sentí que genuinamente se preocupaba por sus estudiantes y que disfrutaba sinceramente de su
trabajo... Gracias por ser un gran profesor y amigo. Sinceramente ha contribuido a la “genialidad” de
estos años. ¡Gracias 1.000 veces!”.

Carta de un estudiante a un profesor de Ciencias de la escuela secundaria con cuatro años de


experiencia en la enseñanza.

Mucha de la reciente investigación acerca de los profesores efectivos, se focaliza en la relación entre el comportamiento
docente y el logro de los estudiantes. Parte de la investigación, sin embargo, ha profundizado en las percepciones que 15
tienen los mismos interesados sobre la buena enseñanza, qué piensan estudiantes, administradores y los profesores
mismos respecto de qué hace ser un profesor efectivo. Algunos estudios sugieren que la instrucción y los procesos
de gestión son la clave para la efectividad, pero en muchas de las respuestas en entrevistas y encuestas acerca de la
enseñanza eficaz, enfatizan que las características de un docente efectivo tienen relación con los comportamientos
sociales y emocionales, más que con la práctica. Por otra parte, la influencia psicológica del profesor sobre los
estudiantes, ha sido relacionada con el rendimiento estudiantil en varios estudios sobre efectividad. En este capítulo
se explora lo que sabemos acerca de las características del profesor efectivo, y cómo se relacionan con la efectividad
y la percepción de la eficacia.

Cuidado y preocupación por los estudiantes

Los docentes efectivos se preocupan por sus estudiantes y lo demuestran de tal manera, que sus alumnos están
conscientes de ello, tal como lo vimos en el ejemplo al comienzo de este capítulo.

El cuidado es un término amplio, quizás tanto como la efectividad misma. Un estudio define el cuidado como un acto
de sacar lo mejor de cada estudiante a través del apoyo y el cariño. Obviamente, las características del cuidado van
más allá de conocer a los estudiantes; incluye cualidades como la paciencia, la confianza, la honestidad y fortaleza. Los
atributos específicos que muestra un docente cuidadoso son: saber escuchar, cordialidad, comprensión, conocimiento
de sus estudiantes en forma individual, cercanía, estímulo y, por sobre todo, amor a los niños.

4 Este texto es parte del Capítulo 2º del libro de James H. Stronge Qualities of effective teachers editado por la ASCD (Association for
Supervision and Curriculum Development) cuya segunda edición es de 2007. El original en http://www.ascd.org/publications/books/105156.
aspx
Guía 4 Clima de aula y condiciones para el aprendizaje

Saber escuchar

La práctica de los docentes efectivos está focalizada en un saber escuchar empático, para demostrar a los estudiantes
su preocupación no solo acerca de lo que les sucede en el aula, sino en general en sus vidas. Estos profesores inician
una comunicación bidireccional que denota confianza, tacto, honestidad, humildad y cuidado. En el acto de escuchar,
estos profesores realmente ponen atención y comprenden lo que los estudiantes dicen. Están dedicados a mejorar
la vida de sus estudiantes y demostrar su comprensión a través del cariño, la paciencia, la sencillez. Por otra parte,
la investigación indica que niños quieren ser nutridos con esas actitudes, y valoran a los docentes que son amables,
gentiles y alentadores. En particular, para los estudiantes, el cariño de un profesor es un signo de cuidado y un
importante elemento en la percepción de eficacia.

Comprensión

Los estudiantes tienen una alta valoración de los docentes cuando estos demuestran comprensión por sus
preocupaciones y preguntas. Consistentemente, las entrevistas con los estudiantes revelan que desean docentes
que escuchen sus argumentos y que los apoyen en la elaboración de sus problemas. Quieren docentes con los que
puedan mantener un mutuo respeto y estén dispuestos a hablar con ellos sobre sus vidas personales y experiencias.
A través de un adecuado modo de darse a conocer, los docentes pueden llegar a transformarse en seres humanos
a los ojos de los estudiantes. Estar a su disposición y tener una profunda comprensión de ellos, legitima al docente
como persona, cuando demuestra, además, una preocupación genuina y empática hacia ellos.

16
Conocer a los estudiantes

Los profesores eficaces y preocupados por sus estudiantes los conocen tanto formal como informalmente. Ellos
utilizan cada oportunidad, en la escuela y en la comunidad, para mantener las líneas de comunicación abiertas. Muchos
actores educativos enfatizan que los profesores efectivos conocen a sus estudiantes de forma individual; no solo
conocen el estilo de aprendizaje de cada uno y sus necesidades, sino que también comprenden su personalidad, lo que
les gusta y no les gusta, y las situaciones personales que pueden afectar su comportamiento y su rendimiento en la
escuela. Los docentes efectivos se preocupan de sus estudiantes, primero como personas y luego como estudiantes,
respetando a cada uno en forma individual.

El rol de la equidad y el respeto

Más allá de una demostración de cariño, un docente eficaz establece buenas relaciones y credibilidad con los
estudiantes, enfatizando, modelando y practicando la justicia y el respeto. El respeto y la equidad son identificados
como prerrequisitos de una enseñanza efectiva a los ojos de los estudiantes. De hecho, los estudiantes entrevistados
en relación con sus puntos de vista sobre los docentes eficaces, consistentemente dan cuenta de la importancia de
la equidad y el respeto en todos los niveles de escolaridad.

Los elementos de justicia y respeto se destacan en muchos estudios. Los estudiantes declaran que los docentes
efectivos responden al mal comportamiento en forma individual, más que haciendo responsable a toda la clase por
las acciones de un estudiante o un grupo pequeño de estudiantes. Esos docentes conocen y comprenden los hechos
antes de responder a cualquier situación disciplinaria; luego, indican a los estudiantes lo que específicamente hicieron
de manera equivocada. Además, les dicen lo que necesitan para hacer bien las cosas. Por otra parte, los estudiantes
esperan que los docentes los traten equitativamente –tanto cuando se comportan bien como cuando no lo hacen–,
para evitar manifestaciones de favoritismo.
Orientaciones al Equipo de Liderazgo Educativo
para desarrollar reuniones de reflexión pedagógica docente

Los docentes efectivos continuamente demuestran respeto y comprensión, junto con equidad, respecto por la etnia,
los antecedentes culturales y de género. La percepción de los estudiantes sobre los docentes efectivos, enfatiza la
imparcialidad en el trato equitativo con todos los estudiantes. Esperan, por ejemplo, que no permitan que el origen
étnico afecte su trato o sus expectativas frente a ellos.

Interacciones sociales con los estudiantes

Los docentes y los estudiantes ocupan mucho tiempo diario interactuando académicamente. Sin embargo, la
interacción social les da a los docentes la oportunidad para demostrar imparcialidad, cuidado y respeto, lo que ha
sido demostrado como un elemento importante en los docentes efectivos. La capacidad del docente de relacionarse
con los estudiantes para hacer conexiones positivas y afectuosas con ellos, desempeña un papel importante en el
cultivo de un ambiente de aprendizaje positivo y la promoción del rendimiento de ellos.

Los docentes efectivos usan una amplia variedad de estrategias para interactuar con los estudiantes. Sin embargo,
la base de estas interacciones va más allá de las cuatro paredes del aula. De hecho, los estudiantes revelan que los
docentes efectivos demuestran interés en la vida de los estudiantes más allá de la sala de clases. Asisten a eventos
deportivos, conciertos y otros programas especiales en que participan sus estudiantes y esto es valorado por ellos.
Además, los investigadores sostienen que las interacciones sociales constructivas entre docentes y alumnos no solo
contribuyen al aprendizaje y los logros, sino que también incrementan la autoestima de los estudiantes y fomentan
sus sentimientos de pertenencia a la clase y a la escuela.

Los docentes que son conscientes de su estilo de interactuar con sus estudiantes, son capaces de proporcionar un
ambiente de aprendizaje más favorable para todos ellos. A través de la interacción social con los estudiantes, los 17
docentes efectivos son capaces individual, realista y exitosamente de lograr cambios para que cada uno de ellos
llegue a tener éxito.
Guía 4 Clima de aula y condiciones para el aprendizaje

Guía de trabajo para una reunión


de reflexión pedagógica docente

Propósito

El propósito de esta reunión es reflexionar colectivamente, y adentrarnos en la comprensión de la complejidad que


implica la creación de un clima en la sala de clases, que sea favorable al logro de los aprendizajes, reconociendo
elementos y factores que inciden en el clima.

Metodología

La reunión puede realizarse en una o más sesiones de trabajo, según el tiempo disponible y el grado de profundidad
que el establecimiento considere necesario darle al tema. La primera actividad consiste en generar instancias de
intercambio y reflexión sobre las condiciones de la sala de clases que favorecen la enseñanza y el aprendizaje,
18 basándose en los dos textos incluidos en esta guía; la segunda actividad consiste en profundizar en torno a los tres
aspectos tratados en el documento de apoyo a docentes y educadores que será enviado al establecimiento junto
con esta guía; por último, la tercera actividad, consiste en trabajar problemáticas comunes que ocurren dentro de
la sala de clases y las posibles acciones para abordarlas.

Es importante que el establecimiento pueda entregar a toda la comunidad educativa una visión compartida en torno
a la importancia del clima dentro del aula y a las prácticas que permitirán colaborar con el logro de aprendizajes
significativos y permanentes en los estudiantes, generando así una cultura que facilite el aprendizaje.

1. Motive a su equipo docente en torno al tema a trabajar.

2. Divida al equipo docente en grupos de trabajo y explique que se realizarán tres momentos de reflexión o
actividades grupales que comparten el objetivo de trabajar los aspectos o condiciones que inciden en un clima
de aula apropiado para el aprendizaje.

3. Intégrese a la reflexión grupal de sus docentes.

4. Terminado el trabajo, un representante por grupo expone las principales conclusiones. En todas las actividades
sería conveniente dar espacio para preguntas y/o comentarios que ayuden a mejorar y/o complementar las
presentaciones.

5. Haga un cierre de la reunión, complementando las principales ideas y reflexiones surgidas con la importancia
de trabajar en equipo y entregar a los estudiantes una visión compartida como establecimiento en cuanto a las
conductas esperadas dentro de una sala de clases.
Orientaciones al Equipo de Liderazgo Educativo
para desarrollar reuniones de reflexión pedagógica docente

Materiales necesarios para cada participante de la reunión

• Fotocopia de los textos incluidos en la presente guía.

• Documento: Orientaciones para la implementación de los programas pedagógicos de los niveles de transición
(Mineduc, 2009).

• Documento: Fomento de un clima de aula favorable para el aprendizaje (Mineduc, 2012) destinado a docentes
de 1° a 4° Básico.

• Fotocopia del apartado Desarrollo del taller.

19
Guía 4 Clima de aula y condiciones para el aprendizaje

Desarrollo del taller

Destinar un momento a la lectura personal: Lectura y reflexión de textos

• Primer texto: Creación de un clima apropiado para el aprendizaje en la sala de clase (actualización y ampliación
del Marco para la buena enseñanza).

• Segundo texto: El profesor como persona (Capítulo 2 del libro Qualities of effective teachers de J.H. Stronge).

El propósito de este tiempo es dejar espacio para una lectura silenciosa y sin interrupciones, y adentrarse en el sentido
y la importancia que tiene la creación de un clima adecuado dentro de la sala de clases, y comprender que esto
depende de variables pedagógicas que tienen relación con el proceso formativo de los estudiantes y, también, con la
dimensión didáctica, es decir, con todo aquello que se refiere al proceso de enseñanza, la preparación, la interacción,
las estrategias elegidas, las actividades diseñadas, y el dominio de los contenidos por parte del docente, entre otras.

Algunas preguntas que pueden ayudar en el intercambio del trabajo en grupo:

Respecto del primer texto:

• Establecer un clima de relaciones de aceptación, equidad, confianza, solidaridad y respeto. ¿Cuál de las ideas
expuestas en el texto, considera usted que es la mejor lograda en su práctica? Seleccione sólo una de las ideas
y dé a conocer un ejemplo concreto, extraído de su experiencia docente, que evidencie y sirva de fundamento.

20

• Manifestar altas expectativas sobre las posibilidades de aprendizaje de todos los estudiantes. De acuerdo con
su experiencia y su práctica cotidiana, ¿cuál de las ideas que ayudan en este punto, es la que presenta mayores
dificultades para llevar a la práctica, de acuerdo con su experiencia? Explicite razones que tengan relación con
su desempeño profesional docente.
Orientaciones al Equipo de Liderazgo Educativo
para desarrollar reuniones de reflexión pedagógica docente

• Establecer y mantener normas consistentes de comportamiento en el aula. ¿Cuál es el protocolo o el modo


que usted utiliza o ha utilizado para establecer y hacer respetar las normas consensuadas con los alumnos? Dé
a conocer cómo lo hace y explicite al grupo la dimensión formativa de las normas trabajadas con algún curso.

21

• Construir un ambiente organizado de trabajo y disponer los espacios y recursos en función de los aprendizajes.
De acuerdo con su experiencia docente, ¿cuál o cuáles rutina(s) que usted ha puesto en práctica le han resultado
más efectivas? Dé a conocerlas y explique a su grupo las razones.
Guía 4 Clima de aula y condiciones para el aprendizaje

Respecto del segundo texto:

• El planteamiento central del autor, basado en múltiples investigaciones, es que uno de los factores gravitantes
en la efectividad (en términos de logros de los estudiantes), es el tipo de relación que se genera entre el o la
docente y los estudiantes, incluso, indica, que pueden ser más gravitantes que otros aspectos de la práctica.
¿Qué opinión le merece el planteamiento del autor? ¿Considera que efectivamente existirá una correlación
entre el modo de relación de los docentes con los estudiantes y sus logros de aprendizaje? ¿Tiene antecedentes
o conocimiento de alguna situación que pueda avalar lo planteado por el autor? Intercambie y discuta con el
grupo sus planteamientos.

22

Segundo momento: Lectura y reflexión de documentos de apoyo enviados


por el Mineduc

• Orientaciones para la implementación de los programas pedagógicos de los niveles de transición (Mineduc, 2009)
destinado a los y las educadoras de párvulo de NT1 y NT2.

• Fomento de un clima de aula favorable para el aprendizaje (Mineduc, 2012) destinado a docentes de 1° a 4° Básico.

El propósito de este momento es analizar mediante un trabajo técnico colaborativo tres aspectos organizacionales
específicos que influyen en un clima de aula favorable para el aprendizaje: la organización del espacio físico, la
creación de rutinas y la gestión efectiva del tiempo.

A continuación encontrará una lista de preguntas o aspectos claves que servirán de guía para la reflexión grupal.
Pida a un integrante del grupo que tome nota de las ideas generales que surjan en cada una de las preguntas. Luego,
en grupo, seleccionen las ideas centrales que consideran necesarias de compartir con el resto del equipo docente
sobre cada uno de estos aspectos.
Orientaciones al Equipo de Liderazgo Educativo
para desarrollar reuniones de reflexión pedagógica docente

Organización del espacio físico

¿Qué importancia podrían tener cada uno de estos aspectos en la generación de un ambiente propicio para el
aprendizaje?, ¿cómo podrían organizarse o disponerse de manera de ayudar o colaborar con el fomento de un buen
clima de aula?, ¿en qué momento de la clase es especialmente importante que el docente haga un adecuado uso
de ellos?

• Escritorio del docente.

• Organización de los escritorios de los alumnos.

• Desplazamiento del docente y de los alumnos dentro del aula.

• Diferentes espacios dentro de la sala.

• Materiales de los estudiantes.

• Materiales de los docentes.

• Diario mural y paredes en general.

• Biblioteca de aula.

Creación de normas y rutinas, o estrategias que favorecen la autonomía de los estudiantes


23
• ¿Qué es una rutina?

• ¿Para qué sirven las rutinas?

• ¿Cuáles son los pasos necesarios para enseñar e instalar rutinas en la sala de clases?

• ¿En qué minuto del año es conveniente crear rutinas?

• ¿Es importante la participación de los estudiantes en la creación de normas y rutinas?

• Dé un ejemplo de procedimiento usado en la construcción de normas y rutinas en conjunto con los estudiantes.

• ¿Cuál es el rol de el docente en el cumplimiento de las normas y rutinas establecidas?

• ¿Son importantes las consecuencias y efectos por no seguir las normas o rutinas establecidas?

• ¿Cuál es el rol que juega el equipo de liderazgo educativo del establecimiento en la creación de normas y rutinas?

Gestión efectiva del tiempo

• ¿Qué significa gestionar efectivamente el tiempo en la sala de clases?

• ¿Cómo puede afectar la gestión efectiva del tiempo en la mejora de los aprendizajes?

• ¿Cómo cree que se podría hacer una mejor gestión del tiempo en la sala de clases? Considere los momentos
previos a la clase y el momento de desarrollo de la clase.
Guía 4 Clima de aula y condiciones para el aprendizaje

• ¿Qué aspectos externos al aula influyen en la gestión efectiva del tiempo dentro de la sala de clases?

• Según su experiencia, ¿qué estrategias de enseñanza ayudan a gestionar el tiempo de la sala de clases en
forma efectiva?

Proponga sugerencias para utilizar mejor el tiempo en los siguientes momentos de la clase:

• Preparación previa de la clase.

• Transición entre una actividad y otra.

• Ausentismo del docente.

Tercer momento: Estudio de casos

Analizar y completar la tabla que se da, en cada uno de los casos o situaciones que se plantean.

Situación 1

Al alumno le gusta conversar cuando el docente está exponiendo. A veces, si se le pide que deje de hablar, lo hará,
pero solo para comenzar nuevamente unos minutos después.

24 Protocolo de actuación y medidas Otros adultos involucrados y sus


Acciones preventivas
pedagógicas responsabilidades
Orientaciones al Equipo de Liderazgo Educativo
para desarrollar reuniones de reflexión pedagógica docente

Situación 2

El docente ha explicado y modelado una rutina de despedida. Unos minutos antes del término del día da la señal que
indica el final de la clase. Un par de alumnos corren a la puerta y se forman. Otro par llega a hablar con el profesor.
Algunos se quedan en sus puestos conversando entre ellos. Básicamente el curso está ignorando la rutina.

Protocolo de actuación y medidas Otros adultos involucrados y sus


Acciones preventivas
pedagógicas responsabilidades

25
Guía 4 Clima de aula y condiciones para el aprendizaje

Situación 3

El alumno no trabaja en grupo, porque no es aceptado por los pares.

Protocolo de actuación y medidas Otros adultos involucrados y sus


Acciones preventivas
pedagógicas responsabilidades

26
Orientaciones al Equipo de Liderazgo Educativo
para desarrollar reuniones de reflexión pedagógica docente

Situación 4

Un alumno emite impulsivamente comentarios o respuestas.

Protocolo de actuación y medidas Otros adultos involucrados y sus


Acciones preventivas
pedagógicas responsabilidades

27

También podría gustarte