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DIÁLOGO

MAGAZINE
GLOBAL
4 ediciones al año en 16 idiomas
6.3

La democracia india en guerra


consigo misma Nandini Sundar

El totalitarismo turco Cihan Tugal

El fin del lulismo


en Brasil Ruy Braga

Políticas laborales en la
Argentina neoliberal Rodolfo Elbert

La historia profunda de la
VOLUMEN 6 / NÚMERO 3 / SEPTIEMBRE 2016

derecha estadounidense
www.isa-sociology.org/global-dialogue/

Arlie Hochschild

Universidad y sociología
> El ascenso de la universidad corporativa en el
Reino Unido
> Las “guerras de la sociología” en Canadá
En memoria
> John Urry, 1946-2016
Columnas especiales
> Campañas estudiantiles contra la violencia sexual
DG

> La tercera vía de Mondragón


> Traduciendo Diálogo Global al rumano
> Editorial
Populismo del siglo XXI

ntre 2011 y 2014 Diálogo Global reportó con optimismo sobre

E los movimientos sociales que envolvieron al mundo – la primavera


árabe, Occupy, indignados, movimientos obreros, estudiantiles y
ambientalistas, y luchas contra la desposesión rural. Este opti-
mismo tuvo una corta vida, en la medida en que los movimientos sociales
dispararon cambios que llevaron a una ola de populismos reaccionarios y
regímenes autoritarios. Esta edición da cuenta de este resurgir de la dere-
cha: el análisis de Arlie Hochschild sobre el Trumpismo y el Tea Party en los
Estados Unidos, la indagación de Cihan Tuğal sobre el giro autoritario del
Nandini Sundar, destacada socióloga
régimen turco, las explicaciones de Ruy Braga sobre el golpe de estado de la
india de la violencia política y autora de The
derecha en Brasil, la disección que Rodolfo Elbert hace del giro neoliberal en Burning Forest, analiza la guerra en el estado
Argentina y el retrato de Nandini Sundar de la violencia contra el movimiento central de Chhattisgarh.
naxalita en India. Como hemos argumentado en ocasiones previas, estos
movimientos pueden entenderse en términos del análisis de Karl Polanyi
sobre el excesivo estiramiento del mercado. Específicamente, hoy en día el
gobierno del capital financiero ha llevado a la globalización de la precarie-
dad, dando pie a oscilaciones entre populismos de derecha y de izquierda,
que comparten el rechazo de la política parlamentaria.

Vemos también cómo opera la financiarización en nuestros sistemas uni-


versitarios. En esta edición, Huw Beynon analiza el gerencialismo disfuncio-
nal que se ha apoderado de las universidades británicas en su intento por
mantenerse económicamente a flote. Describe cómo el sistema de evalua- 2
Cihan Tuğal, sociólogo turco y autor de
ción de la “excelencia” en la investigación produce mediocridad, y cómo la
Passive Revolution: Absorbing the Islamic
dependencia de los aranceles ha convertido a los estudiantes en consu- Challenge to Capitalism, señala a Turquía
midores y a las universidades en agencias publicitarias, compitiendo para como modelo del totalitarismo del siglo XXI.
maximizar la “satisfacción” estudiantil. Queda abierta la pregunta sobre si el
modelo corporativo del Reino Unido se expandirá por el resto del mundo, o
si prevalecerá la moderación, tal como la describen Nail McLaughlin y An-
tony Puddephatt para el caso canadiense, aún cuando incluso allí el mundo
académico tuvo que capear el temporal de un primer ministro conservador.

Publicamos cuatro tributos a la vida y obra de John Urry, quien triste e ines-
peradamente falleció en marzo de este año. John Urry fue uno de los soció-
logos más prolíficos y originales del mundo, un pionero en muchísimas áreas:
desde la transformación del capitalismo hasta el significado del turismo, que
lo llevó a iniciar un programa de investigación sobre las movilidades sociales
Ruy Braga, reconocido comentarista de las
y geográficas; desde el calentamiento global a su más reciente e inquietante clases precarias de Brasil y del ascenso y
trabajo, Offshoring, abocado a la creciente economía del secreto que intensi- caída del Partido de los Trabajadores (PT),
fica las inequidades sociales y las violaciones a los derechos humanos. Pro- analiza la reciente crisis política brasileña.
bablemente se lo recordará como un pionero en una sociología del futuro que
se arriesga a pronosticar las catástrofes a las que nuestro planeta se dirige.

Presentamos otros tres artículos: sobre los movimientos estudiantiles que


florecen en Estados Unidos contra el acoso sexual, una defensa de la gran
cooperativa Mondragón contra sus críticos y, por último, el aporte del equipo
rumano de Diálogo Global a los desafíos de la traducción. Esperamos que
otros equipos nos escriban pronto sobre sus propias experiencias en la tra-
ducción de la sociología desde el inglés a los diferentes idiomas nacionales.

> Diálogo Global puede encontrarse en 16 idiomas en la


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gracias a una generosa donación de
> Las propuestas deben ser enviadas a
SAGE Publications.
burawoy@berkeley.edu

DG VOL. 6 / # 3 / SEPTIEMBRE 2016


> Comité > En esta edición
editorial
Editor: Michael Burawoy. Editorial: Populismo del siglo XXI 2
Editora asociada: Gay Seidman.
Editores jefe: Lola Busuttil, August Bagà. > EL ASCENSO DE LA DERECHA
Editores consultores: Una democracia en guerra consigo misma
Margaret Abraham, Markus Schulz, Sari Hanafi, Vineeta por Nandini Sundar, India 4
Sinha, Benjamín Tejerina, Rosemary Barbaret, Izabela El totalitarismo turco: ¿una tendencia más que una curiosidad cultural?
Barlinska, Dilek Cindoğlu, Filomin Gutierrez, John Holmwood, por Cihan Tuğal, EE.UU. 7
Guillermina Jasso, Kalpana Kannabiran, Marina Kurkchiyan,
Simon Mapadimeng, Abdul-mumin Sa’ad, Ayse Saktanber, El fin del lulismo y el golpe palaciego en Brasil
Celi Scalon, Sawako Shirahase, Grazyna Skapska, Evangelia por Ruy Braga, Brasil 11
Tastsoglou, Chin-Chun Yi, Elena Zdravomyslova.
Políticas laborales y el retorno del neoliberalismo en Argentina
Equipos regionales por Rodolfo Elbert, Argentina 15
Mundo árabe: La derecha estadounidense: su historia profunda
Sari Hanafi, Mounir Saidani. por Arlie Russell Hochschild, EE.UU. 18
Argentina:
Juan Ignacio Piovani, Pilar Pi Puig, Martín Urtasun.
> UNIVERSIDAD Y SOCIOLOGÍA
Brasil: El ascenso de la universidad corporativa en el Reino Unido
Gustavo Taniguti, Andreza Galli, Ângelo Martins Júnior,
por Huw Beynon, Reino Unido 22
Lucas Amaral, Benno Alves, Julio Davies.
India:
Las “guerras de la sociología” en Canadá
Ishwar Modi, Rashmi Jain, Jyoti Sidana, por Neil McLaughlin y Antony Puddephatt, Canadá 26
Pragya Sharma, Nidhi Bansal, Pankaj Bhatnagar.
Indonesia: > EN MEMORIA
Kamanto Sunarto, Hari Nugroho, Lucia Ratih Kusumadewi, Recordando a John Urry y su obra
Fina Itriyati, Indera Ratna Irawati Pattinasarany, Benedictus por Andrew Sayer, Reino Unido 29
Hari Juliawan, Mohamad Shohibuddin, Dominggus Elcid Li,
Antonius Ario Seto Hardjana. John Urry, sociólogo del futuro
por Scott Lash, Reino Unido 31
Irán: 3
Reyhaneh Javadi, Abdolkarim Bastani, Niayesh Dolati, John Urry: más que un sociólogo de los sociólogos
Mitra Daneshvar, Vahid Lenjanzade. por Bob Jessop, Reino Unido 33
Japón: Sobre proximidades y movilidades: conmemorando a John Urry
Satomi Yamamoto, Yutaro Shimokawa, Shinsa Kameo, por Mimi Sheller, EE.UU. 35
Yuki Nakano.
Kazajistán: > COLUMNAS ESPECIALES
Aigul Zabirova, Bayan Smagambet, Adil Rodionov, Gani Madi,
Almash Tlespayeva, Almas Rakhimbayev, Amangeldi Kurmetuly.
Campañas estudiantiles contra la violencia sexual
por Ana Vidu y Tinka Schubert, España 37
Polonia:
Jakub Barszczewski, Adrianna Drozdrowska, Krzysztof La tercera vía de Mondragón: respuesta a Sharryn Kasmir
Gubański, Justyna Kościńska, Kamil Lipiński, Mikołaj por Ignacio Santa Cruz Ayo y Eva Alonso, España 40
Mierzejewski, Karolina Mikołajewska-Zając, Adam Müller, Traduciendo Diálogo Global al rumano
Zofia Penza, Teresa Teleżyńska, Anna Wandzel, Justyna
por Costinel Anuța, Corina Brăgaru, Anca Mihai, Oana Negrea,
Zielińska, Jacek Zych.
Ion Daniel Popa y Diana Tihan, Rumania 43
Rumania:
Cosima Rughiniș, Corina Brăgaru, Costinel Anuța, Tatiana
Cojocari, Andrei Dobre, Alexandra Isbășoiu, Rodica Liseanu,
Mihai-Bogdan Marian, Anda-Olivia Marin, Ramona
Marinache, Anca Mihai, Oana-Elena Negrea, Ion Daniel Popa,
Diana Tihan, Elena Tudor, Cristian Constantin Vereș, Carmen
Voinea, Irina Zamfirescu.
Rusia:
Elena Zdravomyslova, Anna Kadnikova, Asja Voronkova,
Lyubov’ Chernyshova, Anastasija Golovneva.
Taiwán:
Jing-Mao Ho.
Turquía:
Gül Çorbacıoğlu, Irmak Evren.
Consultor de medios: Gustavo Taniguti.
Consultora editorial: Ana Villarreal.

DG VOL. 6 / # 3 / SEPTIEMBRE 2016


EL ASCENSO DE LA DERECHA

> Una democracia en


guerra consigo misma
por Nandini Sundar, Delhi School of Economics, India

Salwa Judum – justicieros apoyados por el gobierno.


Por un fotógrafo local desconocido.

Nandini Sundar es una reconocida socióloga de la violencia política. Ha dedicado más de 25 años a
estudiar Bastar, una zona de intensos conflictos en el estado de Chhattisgarh, en India central. Vivió
inicialmente allí mientras investigaba para su tesis doctoral, publicada bajo el título Subalterns and
Sovereigns: An Anthropological History of Bastar 1854-1996 [Subalternos y Soberanos: una histo-
ria antropológica de Bastar 1854-1996] (Oxford University Press, 1997). En su nuevo y largamente
esperado libro, The Burning Forest: India’s War in Bastar [El bosque en llamas: la guerra india en
Bastar] (Juggernaut Press, 2016), describe en qué se ha convertido esta zona de guerra y cómo ha
sido modelada por fuerzas políticas externas. Pero también da cuenta de su experiencia litigando en
la Corte Suprema, y de las distintas etapas que durante casi una década ha atravesado de un proceso
legal en búsqueda de una orden constitucional contra la justicia por mano propia y a favor de repa-
raciones para las víctimas de violaciones de los derechos humanos. A pesar de que ella y sus colegas
consiguieron una impresionante sentencia en 2011, el estado simplemente ignoró las decisiones
de la Corte y continuó su campaña de contrainsurgencia. The Burning Forest busca capturar esta
mezcla de fracaso institucional, impunidad estatal y resiliencia pública presentes en la democracia
india desde su formación.

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EL ASCENSO DE LA DERECHA

a democracia india despierta fuertes opiniones. locales empezaron a hacer sus propias demandas. Desde

L La posición dominante, sostenida por los polí-


ticos indios, los principales medios de comu-
nicación y las élites, argumenta que la India,
en tanto sociedad postcolonial, puede enorgullecerse de
contar con sufragio universal, federalismo, subordinación
principios de la década de 1980 los maoístas han esta-
blecido un virtual estado paralelo – distribuyen la tierra,
organizan grupos de trabajo colectivo, resuelven dispu-
tas, imponen impuestos a los contratistas y participan de
las minucias de las relaciones íntimas. En la medida que
del ejército al poder civil e independencia judicial. Los acti- los aldeanos participaron de la construcción del estado
vistas, por otro lado, tienden a ser más críticos: denuncian maoísta lo fueron moldeando con sus propias tradiciones
que la democracia india es una “farsa” y señalan las conti- culturales.
nuidades coloniales en las leyes de “emergencia” como el
Acta de Poderes Especiales para las Fuerzas Armadas del En junio de 2005 los gobiernos nacional y estatal crearon
Noroeste (AFSPA, por su sigla en inglés), que autoriza al una informe organización de justicia por mano propia llama-
ejército disparar a matar bajo meras sospechas. También da Salwa Judum (literalmente, “caza de purificación”) en el
denuncian las frecuentes ejecuciones extrajudiciales; las sur y el oeste de Bastar, a la que definieron como un “mo-
muertes de personas bajo custodia; las torturas, violacio- vimiento popular” espontáneo contra la violencia naxalita.
nes y desapariciones, así como las masacres organizadas Esta campaña fue facilitada por la subyacente configuración
contra minorías como sikhs (Delhi, 1984) y musulmanes de clase de la región: el racismo de los colonos hacia los
(Gujarat, 2002), vinculadas al partido gobernante. indígenas apoya y agrava la ofensiva modernizadora estatal,
basada en el desplazamiento de los pueblos indígenas para
Los estudios sobre la democracia india suelen provenir favorecer la minería y la industria. Los líderes de Salwa Ju-
de la ciencia política y se enfocan mayoritariamente en los dum han sido mayoritariamente inmigrantes no indígenas
partidos políticos, las elecciones, los marcos instituciona- o clientes de poderosos políticos, ya sea del gobernante
les y regímenes de desarrollo, adoptando en general un Partido Popular Indio (BJP, por sus siglas en inglés) o del
enfoque centrista. En The Burning Forest: India’s War in Partido del Congreso, quienes se sintieron amenazados por
Bastar, por el contrario, emprendo una indagación socio- los maoístas – considerados el mayor obstáculo a la minería
lógica de las campañas contrainsurgentes en curso contra y a los planes de inversión en la región.
lo que el gobierno llama “extremismo de izquierda”, y ex-
ploro qué nos revelan sobre la democracia india. Entre 2005 y 2007 los combatientes de Salwa Judum,
acompañados por las fuerzas de seguridad, quemaron ca- 5
La actual ofensiva india contra las guerrillas maoístas afi- sas, saquearon granos, ganado y dinero, violaron y mata-
liadas al Partido Comunista de la India (maoísta) – “naxa- ron aldeanos. Los maoístas respondieron con ataques a
litas”, como se las conoce popularmente – lleva ya una las fuerzas de seguridad. Alrededor de 50.000 aldeanos
década. Sin embargo, a diferencia de la primera etapa del fueron desplazados forzosamente hacia “campos de asis-
movimiento naxalita, que comenzó a fines de la década tencia”, mientras un número similar huyó a los estados
del sesenta y fue brutalmente aplastada en los setenta, vecinos o se internó en los bosques. Para los aldeanos
que atrajo la atención académica, sobre la fase actual sólo que fueron desplazados y divididos, éste fue el evento más
contamos con unos pocos libros detallados. Esto se debe traumático de sus vidas, y a pesar de que las personas
a las dificultades para investigar en un campo tan disputa- comenzaron a retornar gradualmente después del 2007,
do y sujeto a estricta seguridad, pero también responde a la situación sigue siendo turbulenta.
que el movimiento se concentra actualmente en pueblos
indígenas, o en castas y tribus registradas que habitan Oficialmente, 2.468 personas – civiles, fuerzas de segu-
áreas rurales o boscosas, a diferencia de la fase inicial, en ridad y cuadros maoístas – murieron en Chhattisgarh entre
la que contó también con simpatizantes de clase media, 2005 y 2016. El número real es casi con certeza más
urbanos y estudiantes. Hoy en día, la mayoría de las des- alto. La mayoría de las muertes ocurrieron en 2005-2007
cripciones del conflicto provienen, por un lado, de perio- y 2009-2011, durante la Operación Caza Verde, cuando
distas que han viajado con los maoístas y, por el otro, de el gobierno envió las “fuerzas centrales de policía armada”
informes de los think tanks de seguridad. (CAPF, por su sigla en inglés), que se encuentran un nivel
por debajo del ejército, junto con drones no tripulados,
A pesar de que el movimiento está diseminado por varios helicópteros y tanques antiminas.
estados, el epicentro de la guerra es una región densa-
mente boscosa y rica en minerales conocida como Bas- Siguiendo una práctica contrainsurgente convencional,
tar. La región, ubicada en el estado de Chhattisgarh en el gobierno reclutó los maoístas rendidos para la identi-
el centro de India – con 39.114 kilómetros cuadrados de ficación de sus camaradas, así como a jóvenes locales
extensión –, se encuentra habitada mayoritariamente por que pensaron que estaban simplemente aplicando para
adivasis o pueblos indígenas. Los maoístas llegaron inicial- trabajar como policías. Sin poder retornar a sus aldeas,
mente desde el estado vecino de Andhra Pradesh, inten- estos Oficiales Especiales de Policía (SPOs, por su sigla en
tando replegarse frente a la represión, pero los habitantes inglés) viven ahora en campos policiales, a pesar de ser

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EL ASCENSO DE LA DERECHA

despreciados por las fuerzas regulares de policía. Mien-


tras que parte del personal de seguridad aplica el gatillo
fácil y disfruta de matar porque sí, tanto por las medallas
como el dinero que recibe, otros, con impotencia, se sien-
ten involucrados en el conflicto. Por su parte, los políticos
y oficiales de alto rango de las fuerzas de seguridad se
muestran mayormente indiferentes ante la tragedia huma-
na de todas las partes.

Hoy en día Bastar es la zona más militarizada del país, con


campos de seguridad cercados de alambres de púas cada
cinco o diez kilómetros. Aunque se reconoce ampliamente
que las causas primarias del apoyo popular a los maoístas
son la explotación y la falta de salud y educación básica, los
Aldeanos caminando largas distancias para protestar contra Salwa
gastos gubernamentales en medidas de seguridad superan Judum. Por un fotógrafo local desconocido.
por amplio margen la inversión en bienestar social.

Dadas las similitudes con otras campañas contrainsur- con los maoístas y enmarcando el debate en torno de la
gentes, vale la pena preguntarse si hace alguna diferencia violencia estatal y guerrillera. Al mismo tiempo, la crecien-
que la campaña se lleve a cabo en una democracia, en te confianza de los activistas urbanos de derechos huma-
lugar de un régimen militar o colonial. ¿Cómo han reac- nos en las redes de internet acaba por ocultar cuestiones
cionado los diferentes actores e instituciones, desde los que son críticas en el terreno. En Chhattisgarh, la justicia
partidos políticos y las organizaciones de derechos huma- por mano propia apoyada por el estado fue acompañada
nos hasta los medios de comunicación y el poder judicial? por la promulgación de una ley antiterrorista indefinida. Su
utilización en el arresto de un reconocido doctor y activista
La política parlamentaria ha sido irrelevante en la guerra, por los derechos civiles provocó consternación en las re-
ya que los dos partidos dominantes, el del Congreso y el des de clase media, aunque la campaña por su liberación
BJP, colaboraron en su promoción. El Partido Comunista fue casi irrelevante para los ciudadanos indígenas, que si-
de la India en el parlamento local ha cumplido un rol des- guen siendo blancos de la violencia contrainsurgente sin 6
tacado, a pesar de la fuerte represión, pero no tiene mu- esperanza alguna de debido proceso.
cha influencia nacional. Instituciones estatutarias, como la
Comisión Nacional de Derechos Humanos, no sólo se han Mientras que las cortes locales han fracasado sistemáti-
mostrado desinteresadas, sino que han sido activamente camente, generando altas tasas de encarcelamiento entre
transigentes; mientras que las elecciones periódicas y las los aldeanos y sobrepoblación en las cárceles de Chhat-
instituciones de resarcimiento son vistas como legitimado- tisgarh, la Corte Suprema de la India ha desempeñado un
ras del estado, independientemente de que sean efectivas papel importante en el reconocimiento de las violaciones
o democráticas. masivas en Bastar. No obstante, las interminables demo-
ras y dilaciones, así como la capacidad del estado para
La India cuenta con medios libres y vigorosos. Sin em- ignorar las órdenes de la Corte, han hecho que su mensaje
bargo, las masivas violaciones a los derechos humanos en no se traduzca en justicia en el terreno. A pesar del claro
la contrainsurgencia no se han convertido en un tema de mandato al estado de Chhattisgarh, en 2011, de desman-
interés nacional. Esto se debe a los intereses económicos telar las organizaciones de justicia por mano propia como
de las corporaciones mediáticas y su preocupación por no Salwa Judum, dejar de reclutar locales para las operacio-
molestar al gobierno más allá de un cierto punto, pero nes contrainsurgentes, compensar a las víctimas del con-
también a que la contrainsurgencia se despliega en zonas flicto y castigar a los culpables, el estado simplemente ha
“remotas” alejadas de los centros urbanos y a la virtual persistido en sus violaciones, como si la Corte nunca se
inexistencia de reporteros indígenas o de castas bajas. hubiera pronunciado.
La atención mediática sobre Bastar ha atravesado ciclos,
desde un completo descuido hasta una cobertura relativa- Desde la llegada al poder del régimen Modi en 2014, va-
mente completa. Pero esto no ha llevado a que el gobier- rios elementos de Salwa Judum se han revitalizado; para
no rinda cuentas. Las diferencias estructurales entre los el BJP, el apoyo estatal a la justicia por mano propia es
medios en inglés y en hindi, estos últimos operando bajo la forma normal de hacer política en todo el país. Aun
restricciones económicas y políticas más severas, también así, los ciudadanos continúan creyendo y luchando por un
han afectado la cobertura. proyecto democrático, aunque la democracia realmente
existente deje mucho que desear.
Las organizaciones de derechos humanos han jugado un
papel central develando los abusos, negociando rehenes
Dirigir toda la correspondencia a Nandini Sundar <nandinisundar@yahoo.com>

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EL ASCENSO DE LA DERECHA

> El totalitarismo
turco,
¿una tendencia más que
una curiosidad cultural?
por Cihan Tugal, Universidad de California, Berkeley, EE.UU.

El trabajoso cese de hostilidades de 2013 entre las autoridades turcas y el Partido de los
Trabajadores del Kurdistán (PKK), fue violado por Ankara en el verano de 2015.

l fuerte giro autoritario de Turquía ha sorprendido liberal” fue alguna vez considerada el mayor logro de la hu-

E a muchos observadores: hace no mucho tiempo


el país era un celebrado ejemplo de liberalismo
que se destacaba en una región marcada por
turbulencias. Los analistas ahora buscan las causas de esta
transformación en la personalidad del presidente Erdoğan o
manidad, pero si “liberalismo” denota la apoteosis de la pro-
piedad individual y la libertad, lo que en nuestra era va codo
a codo con la (neo-)liberalización (privatización de la propie-
dad, reestructuración del estado de bienestar para asegu-
rar la autosuficiencia de los individuos, y financiarización),
en características excepcionales de la cultura turca. el caso turco muestra que liberalización y democratización
pueden seguir juntas sólo por un tiempo determinado, de-
Pero un análisis del éxito liberal mismo ofrece más pistas (y pendiendo de factores como la fuerza represiva e incorpo-
presagios para el Occidente democrático). La “democracia rativa del estado, así como de la capacidad civil y política.
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EL ASCENSO DE LA DERECHA

Las recientes experiencias turcas pueden contener ad- levantamiento urbano más masivo en la historia turca (la
vertencias para el resto del mundo. Alguna vez, los inte- Rebelión Gezi). Sin embargo, aunque millones de ciudada-
lectuales creyeron que los países menos desarrollados po- nos participaron, no pudieron crear una plataforma política
dían ver su propio futuro en la experiencia de las naciones común. Los líderes kurdos y de los trabajadores brindaron
más vigorosamente capitalistas. Después de la debacle sólo un apoyo limitado a las protestas Gezi, mientras que
de 1930, sin embargo, muchos sugirieron que lo contrario los principales grupos izquierdistas intentaron con poco
también podía ser cierto: a fin de cuentas los europeos entusiasmo, en el mejor de los casos, encauzar la revuelta
experimentaron lo que los nativos habían soportado du- en una dirección más política. Las tres fuerzas pagaron
rante la colonización. El empoderamiento de las masas y mucho en los años siguientes por su combinación de reti-
la propiedad/libertad individual se socavaron mutuamente cencia, confusión e incapacidad.
hasta un punto de inflexión en la historia (los años de
entreguerras). ¿Podrían estos dos amplios objetivos dina- En 2013, consternados por el cada vez más intenso
mitarse mutuamente otra vez? bombardeo islámico y autoritario del gobierno, muchos
liberales apoyaron la revuelta e intentaron, sin éxito, im-
> Un falso paraíso liberal pulsarla en una dirección liberal: la revuelta se mostró
incapaz de extender su agenda más allá del propósito
Turquía solía ser el país más secular y democrático en inicial de salvar de la destrucción el principal parque ur-
Medio Oriente. Su engañosa excepcionalidad se basaba bano de Turquía.
en la democratización del paquete “kemalista” por par-
te de partidos conservadores. Desde la década de 1950, > La mutación del liberalismo en totalitarismo
muchos partidos de centroderecha liberalizaron gradual-
mente el régimen nacionalista, corporativista y secularista A pesar del carácter fracturado de la revuelta, el go-
que Mustafá Kemal había construido en la primera mitad bierno se mantuvo apegado a su narrativa conspirativa y
del siglo XX. En la década de 2000, una nueva organiza- aplicó mano dura contra la rebelión. Más tarde, el partido
ción política, el Partido de la Justicia y el Desarrollo, socia- gobernante se volvió no sólo más autoritario, sino también
lizó aún más la agenda de centroderecha, combinando las más totalitario, movilizando sus bases contra las voces
tradiciones islamistas y conservadoras del país; un cambio opositoras.
que provocó entusiasmo popular e intelectual por las re-
formas neoliberales, que en la década de 1970 habían ¿Por qué ocurrió esta transformación? El liberalismo mul- 8
producido apatía o rotunda oposición en la región. tiplica los puntos de tensión social en lugar de contener-
los – en contraste con las tendencias del corporativismo.
Sin embargo, esta brillante y exitosa historia tenía un Formas de gobierno estructuralmente más fuertes pueden
lado más oscuro. La narrativa prevaleciente, que aún pre- contener, absorber y reprimir tensiones sin perturbar el li-
senta la liberalización de Turquía de la década de 2000 beralismo; estados débiles, por el contrario, están menos
como un “modelo”, soslaya la represión de grupos que de- equipados para manejar tensiones explosivas dentro de
safiaron al gobierno: alevíes, huelguistas, ambientalistas, los límites del liberalismo. Especialmente cuando los re-
izquierdistas y, ocasionalmente, los kurdos. Tanto el mun- gímenes enfrentan una fuerte oposición, las instituciones
do occidental como los liberales turcos eligieron restarle establecidas y la represión pueden no ser suficientes para
importancia a la agenda sectaria y cultural del Partido de controlar los movimientos de protesta. En tales contextos,
la Justicia y el Desarrollo, percibiendo la represión como las élites pueden recurrir a contra-movilizaciones, sentan-
un costo menor en relación con lo que el partido logró: do las bases para el totalitarismo – un sendero moldeado
altas tasas de crecimiento y marginación de las otrora no sólo por los llamados a la acción de la élite, sino tam-
dominantes fuerzas armadas kemalistas. La destrucción bién por la presencia de grupos políticos y civiles listos
ambiental, las muertes de trabajadores, los bajos sala- para responder.
rios, la despolitización, la desindicalización, el creciente
sectarismo sunita, la violencia patriarcal, y el desplaza- Dichas redes estaban ampliamente disponibles en el
miento urbano causado por esos logros (o que al menos Partido de la Justicia y el Desarrollo de Turquía: se habían
los acompañaron y reforzaron) recibieron poca atención. construido sobre la base de sus raíces en la movilización
islamista desde la década de 1960 hasta la de 1990. Des-
Durante los dos primeros mandatos del Partido de la pués de 2013, respondiendo a lo que percibió como ame-
Justicia y el Desarrollo, la liberalización política y económi- nazas crecientes, el régimen turco se desplazó desde lo que
ca produjo muchas injusticias y abrió espacios para pro- llamo “totalitarismo blando” hacia un “totalitarismo duro”,
testar contra ellas. En el verano de 2013, movimientos movilizándose en primer lugar contra alevíes, huelguistas,
urbanos y ambientales, que habían estado cocinándose ambientalistas y socialistas, y luego contra los liberales.
a fuego lento por debajo del radar, rompieron sus fron-
teras locales. Cuando espontáneamente se les unieron Irónicamente, la purga más fuerte post-2013 tuvo como
movilizaciones de mujeres, de alevíes y de laicos estalló el objetivo un grupo liberal islámico, el Movimiento de Gülen

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EL ASCENSO DE LA DERECHA

El fallido golpe militar del 16 de julio de


2016 en Turquía ha hecho el juego de
Erdoğan, conduciendo a una profundización
del autoritarismo.

– actor líder del totalitarismo blando, que había penetra- académico, ministro de relaciones exteriores y luego pri-
do una por una las instituciones, vaciándolas silenciosa- mer ministro, Ahmed Davutoğlu (“Cero problemas con los
mente de figuras del viejo régimen, alevíes e izquierdistas. vecinos” y “Profundidad estratégica”). Inicialmente, los
El grupo había manejado estas purgas discretamente, en levantamientos árabes parecieron propensos a blindar
claro contraste con las actuales expulsiones ampliamen- aún más los esfuerzos de Davutoğlu, pero fue purgado
te publicitadas y ceremonializadas. Había habido algunas en 2016. ¿Por qué? ¿Por la personalidad de Erdoğan?
peleas entre el Movimiento de Gülen y antiguos cuadros No realmente. Si el régimen hubiera podido capitalizar las
islamistas respecto de cómo repartir los botines del poder, primaveras árabes como había deseado, no habría nece-
pero esto no se fue de las manos hasta que las relaciones sitado abandonar la estrategia de poder blando. Como
de Erdoğan con Israel se tensionaron. Gülen (un clérigo muchos otros poderes capitalistas en expansión, el nexo
con lazos profundos con grupos lobistas estadounidenses gobierno-negocios en Turquía buscó incrementar su par-
y otros centros de poder occidentales) era ya receloso ticipación en los mercados externos. Pero a causa de la
del tono anti-israelí de Erdoğan. El punto de inflexión, sin agitación laboral, la fragmentación política, y finalmente
embargo, fue el intento de romper el bloqueo de Gaza las guerras civiles e intervenciones militares, Egipto, Libia
por parte de una asociación de caridad turca, respaldada y Siria – los mercados más viables para los capitalistas
por Erdoğan. Gülen dio una entrevista al Washington Post, turcos – ya no parecieron tan buenos para los negocios. 9
declarando la acción no-islámica por haber desafiado la Estos cuellos de botella geopolítico-socioeconómicos, jun-
autoridad. Después de esto, los dos componentes del “pri- to con un mercado mundial en contracción, restringieron
mer” régimen del Partido de la Justicia y el Desarrollo se la expansión de los negocios. El régimen tenía mucho me-
separaron gradualmente – lo que tuvo un costo significa- nos efectivo para distribuir entre su base – creando nuevos
tivo para el régimen dado que no tenía cuadros de alta problemas para la clase burguesa islámica previamente en
calidad para poblar las instituciones. Esto alentó el gusto y expansión y para sus programas de bienestar, que habían
la dependencia del régimen de las movilizaciones masivas comprado el consenso de los pobres urbanos. Con menos
y del fanatismo. recursos para obtener resultados económicos, el régimen
agudizó sus credenciales islámicas.
A este impulso nacional hacia el totalitarismo se añadió
una dinámica más regional, aunque también contingente: En Siria, los esfuerzos iniciales de Turquía para remover
los levantamientos árabes dieron esperanza a los hasta suavemente a Assad y abrir el camino a un gobierno islá-
entonces adormilados círculos islamistas de Turquía. Ex- mico más amigable con los negocios fueron sobrepasados
cepto por pequeños grupos de liberales en la derecha y por un esfuerzo sectario por construir un estado sunita a
radicales en la izquierda, los islamistas turcos siempre so- cualquier precio. Los errores de cálculo turcos contribuye-
ñaron con revivir el Imperio Otomano. Durante la década ron al nacimiento del Estado islámico, que primero pare-
precedente, los líderes del Partido de la Justicia y el Desa- ció ser un buen contrapeso contra los kurdos, pero luego
rrollo habían bajado el tono de su militancia gracias a una socavó la estabilidad, el turismo y las perspectivas de ne-
combinación de pragmatismo político y la expectativa de gocios incluso en el oeste y el sur de Turquía. Además, la
nuevos botines económicos y políticos, pero entre 2011 y percepción de cooperación entre yihadistas anti-Assad y la
2013, las hasta entonces apenas contenidas ambiciones única democracia islámica de Medio Oriente reforzaron las
imperiales del partido se fortalecieron y finalmente se sa- narrativas occidentales acerca de la incompatibilidad del
lieron de control. Islam con la democracia.

Los simpatizantes liberales y occidentales del Partido La secuela de estos eventos tiene implicaciones globa-
de la Justicia y el Desarrollo habían confiado en que las les. El aventurismo de Turquía ha destruido Siria, ha lleva-
inclinaciones imperiales de larga data podrían ser institu- do a una histórica oleada migratoria hacia Europa y, como
cionalizadas a través de una estrategia de “poder blando”, consecuencia de ello, a la ola más fuerte de movilización
un resultado prometido por las dos doctrinas del antiguo de derecha en el continente desde la guerra mundial. Aci-
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EL ASCENSO DE LA DERECHA

cateado en parte por los miedos al islamismo militante, ridización de los gobiernos sino también a la movilización
el ascenso de la derecha europea envió una clara señal de derecha. Este círculo vicioso procesual tiene, además,
a Turquía: la membresía plena en la Unión Europea ya no otros apuntalamientos globales-estructurales.
es una posibilidad. Esto se había vuelto claro después de
2006, pero su comprensión no afectó radicalmente la Los dos ciclos de liberalización más importantes de la
agenda del partido gobernante hasta la década de 2010, historia moderna tuvieron efectos a nivel global. En ambos
cuando la pérdida de esperanza en la adhesión europea se períodos, la desintegración fue/es tanto global como local.
combinó con las otras dinámicas para socavar la liberaliza- Luego de la década de 1920, el desarrollo del liberalis-
ción. En la medida que los árabes se alzaron con gritos de mo clásico llevó al liberalismo integrado en los Estados
libertad (un anhelo que las élites turcas esperaron poder Unidos y Europa Occidental, y a estados extremadamente
manipular en favor de sus ambiciones imperiales y de ne- represivos o totalitarismos de masas en el Este. Por cau-
gocios), los islamistas turcos perdieron su interés de larga sa de las debilitadas capacidades sociales y la creciente
data en cortejar a Europa. seguridización a lo largo del globo, el liberalismo integrado
parece cada vez menos probable luego del amenazador
> Cómo el camino de Turquía podría ser colapso actual.
repetido en cualquier lugar
A menos que intelectuales, políticos y activistas tengan éxi-
Aun cuando algunas de estas dinámicas son particulares to en construir una alternativa global fuerte, la movilización
de Turquía, las estructuras generales que están socavando de masas podría producir estados totalitarios más duraderos
el liberalismo a lo largo del globo podrían crear más casos en los próximos años, incluso en Occidente. Las experien-
como el de Turquía – especialmente dado que muchas de cias de Turquía son una advertencia para todos: las revo-
estas dinámicas implican interacciones entre (y dentro de) luciones fallidas conducen habitualmente a regímenes aún
regiones y naciones, así como interacciones entre proce- más monstruosos. Especialmente en el contexto presente,
sos nacionales y globales. Más importante, el fuerte giro si agendas sólidas y organizaciones políticas no cristalizan
mundial de derecha en los círculos islámicos ha conmo- después de nuevas versiones de Gezi, Occupy e Indignados,
cionado a todo el Occidente, incitando no sólo a la segu- los costos podrían ser muy altos para todos.

Dirigir toda la correspondencia a Cihan Tuğal <ctugal@berkeley.edu>


10

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EL ASCENSO DE LA DERECHA

> El fin del lulismo


y el golpe palaciego en Brasil
por Ruy Braga, Universidad de São Paulo, Brasil, miembro del Comité de Investigación de la
ISA sobre Movimientos obreros (RC44)

11

Golpe parlamentario en Brasil cuando la cámara baja votó a favor del


impeachment de la presidenta Rousseff.

n general, los análisis de este foco en la regulación política es pacificar los conflictos de clase, sino

E la actual crisis política y


económica brasileña en-
fatizan los “errores” en
las políticas económicas del gobier-
no que la presidenta Dilma Rousseff,
demasiado estrecho para iluminar la
complejidad de la crisis. Estas expli-
caciones tienden a ocultar los cam-
bios en la estructura de clases que
ocurrieron durante la era Lula (2002-
que los radicalizó.

> Ciclos de huelga

En el mundo del trabajo, el colapso


del Partido de los Trabajadores (PT), 2010) y subestiman el impacto de de cualquier armisticio entre clases
heredó de su predecesor, Luíz Inácio la crisis económica internacional. En dominantes y subalternas suele pro-
Lula da Silva. Aunque es verdad que realidad, este tipo de análisis fraca- ducirse por una ola de huelgas. De
algunas decisiones sobre políticas san a la hora de explicar cómo la re- acuerdo con los últimos datos del
federales interfirieron con las dinámi- lación entre regulación política y acu- Sistema de Seguimiento de Huelgas
cas de la puja distributiva en Brasil, mulación económica no sólo no logró del Departamento Intersindical de
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EL ASCENSO DE LA DERECHA

Estadísticas y Estudios Socioeconó- movimiento sindical, involucrando la creación de empleo. Los traba-
micos (SAG-DIEESE, por su sigla en una creciente movilización del pre- jadores afiliados a los sindicatos se
portugués), los trabajadores brasi- cariado urbano. beneficiaron del floreciente mercado
leños montaron una ola de huelgas laboral, logrando mejoras salariales
sin precedentes en 2013, llegando Si tenemos en cuenta su magni- y beneficios a través de la negocia-
a 2.050 huelgas, estableciendo así tud, este ciclo de luchas constituye ción colectiva.1
un récord histórico con un incre- quizás la explicación más subestima-
mento del 134% con relación al año da de la actual crisis política: a las Al menos hasta las elecciones pre-
anterior. De esta manera, el país clases dominantes simplemente no sidenciales de 2014 el PT combinó
revirtió el elevado descenso de las les sirve una burocracia sindical que políticas redistributivas, creación de
huelgas de las últimas dos décadas se ha mostrado incapaz de controlar trabajo formal y acceso popular al
y el movimiento sindical recuperó sus bases. Desde esta perspectiva, crédito, promoviendo una ligera des-
al menos parte de su fuerza políti- el único proyecto fiable para la clase concentración en la distribución del
ca. En muchas capitales de estado dominante es la restauración de la ingreso nacional. En un país famoso
las huelgas de trabajadores banca- acumulación capitalista a través de por sus inequidades sociales, este
rios se han vuelto rutina. Docentes, un ataque a los derechos de los tra- pequeño avance fue suficiente para
empleados públicos, trabajadores bajadores que profundice la despo- asegurar el consentimiento de las
metalúrgicos, obreros de la cons- sesión social. clases subalternas hacia las políticas
trucción, maquinistas ferroviarios, de regulación del lulismo.
choferes de autobuses y cobradores Tanto este ciclo de huelgas como
de pasajes también incrementaron las vicisitudes que enfrentan las cla- Al mismo tiempo, el gobierno del
su movilización sindical entre 2013 ses subalternas brasileñas en sus PT logró combinar los intereses de
y 2015. Del mismo modo, las huel- precarias formas de vida revelan los los burócratas sindicales, los líde-
gas de trabajadores del sector priva- límites y ambigüedades inherentes res de los movimientos sociales y la
do han aumentado significativamen- al proyecto lulista. Para comprender clase media intelectual, creando las
te desde 2012. las contradicciones de este proyec- bases para un consentimiento activo
to debemos analizar los límites de la hacia el lulismo, organizado alrede-
En 2013 las huelgas del sector pri- precaria hegemonía lograda por el PT dor del aparato estatal. Miles de sin-
vado representaron el 54% del total. durante los últimos trece años. dicalistas fueron absorbidos como 12
Una mención especial merece la ex- consejeros parlamentarios, en los
plosión de acciones sindicales en el > Hegemonía precaria ministerios o en las empresas esta-
sector de servicios, cuyos trabajado- tales, mientras que algunos burócra-
res semi-calificados o no calificados, En tanto modo de regulación del tas sindicales asumieron posiciones
en muchos casos tercerizados y mal conflicto de clases, el lulismo, como estratégicas en los directorios de im-
pagos, se encuentran sujetos a con- relación social hegemónica, se basó portantes fondos de pensión mane-
tratos precarios sin los derechos la- en la articulación de dos formas de jados por el estado como fondos de
borales convencionales. Además de consentimiento diferentes, pero a la inversión. Miembros y simpatizantes
los empleados bancarios, que reali- vez complementarias, que en con- del PT también fueron nominados
zaron ocho huelgas nacionales, los junto produjeron una década de re- en puestos gerenciales en tres de
trabajadores de otros sectores como lativa paz social en el país. Las cla- los principales bancos nacionales: el
turismo, limpieza, salud privada, se- ses subalternas brasileñas dieron su Banco Nacional del Desarrollo (BN-
guridad, educación, comunicación consentimiento pasivo a un proyecto DES), el Banco de Brasil y la Caixa
y transporte se mostraron especial- de gobierno impulsado por la buro- Econômica Federal.
mente activos. cracia sindical, que aseguró modes-
tas pero efectivas concesiones a los Por consiguiente, el sindicalismo
En general, la actividad sindical se trabajadores – durante un período de lulista no sólo se convirtió en un acti-
expandió por fuera de las categorías expansión económica. vo administrador del estado burgués,
laborales tradicionalmente asocia- sino en un actor clave en la direc-
das a la militancia obrera. Incluso El subproletariado semi-rural que ción de las inversiones capitalistas
en el sector público crecieron las se benefició del programa Bolsa Fa- en el país. Como este poder político
huelgas de trabajadores municipa- mília, pudo elevarse desde la pobre- y administrativo no implica la pro-
les, que tienden a ubicarse entre los za extrema hasta la línea de pobreza piedad del capital, la posición social
más precarizados de la administra- oficial. El precariado urbano también privilegiada de la burocracia sindical
ción estatal. En conjunto, tanto en fue seducido por los incrementos dependía del control del aparato po-
la esfera privada como en la pública del salario mínimo por encima de lítico. Y para reproducir este control,
la actividad huelguística se desplazó la tasa de inflación, así como por la tanto los intereses de sus históricos
“desde el centro a la periferia” del formalización del mercado laboral y aliados – los niveles medios de la

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EL ASCENSO DE LA DERECHA

burocracia y la pequeña burguesía


intelectual –, y de sus enemigos –
las capas hostiles de la burocracia
y los grupos sectarios con intereses
corporativos – debían ser acomoda-
dos dentro del aparato estatal.

A pesar de que esta estrategia fue


entorpecida por la aceptación de las
reglas antidemocráticas del juego
electoral brasileño por parte del go-
bierno del PT, incluyendo el intento
durante el primer gobierno de Lula de
comprar directamente el apoyo par-
lamentario, para 2014 la hegemonía
lulista había logrado un notable éxito
en reproducir tanto el consentimiento
pasivo de las masas como el activo
de los líderes de sindicatos y movi- El ex-presidente Lula y Dilma Rousseff, presidenta recientemente destituida, líderes del Partido
de los Trabajadores que gobernó Brasil por trece años.
mientos sociales.

> Las contradicciones del


lulismo Aunque ya estaba empezando a estilos de vida de la clase media. A
flaquear, el apoyo del proletariado su vez, el incremento del consumo
De todas formas, las contradiccio- precario le aseguró a Dilma Rousseff de masas ligado a los aumentos sa-
nes sociales, ya evidentes durante la la victoria en segunda vuelta en las lariales entre los hogares más pobres
expansión económica entre 2003 y elecciones presidenciales del 2014. significó una “invasión” de espacios
2014, presagiaban la actual crisis. Pero este apoyo se basaba en la previamente reservados por las cla-
Aunque el crecimiento de los salarios asunción de que el gobierno del PT ses medias tradicionales, como cen- 13
de los trabajadores formales fue im- mantendría el empleo formal (aun- tros comerciales o aeropuertos.
presionante, alrededor del 94% de los que poco calificado y mal pago). La
empleos creados durante la primera contracción cíclica producida por los Por último, el incremento de plazas
década del gobierno del PT se pagaba recortes en el gasto federal ha gene- en universidades privadas de baja
apenas 1,5 veces el salario mínimo rado un incremento del desempleo calidad para hijos de trabajadores in-
(aproximadamente unos 250 dólares tanto entre el precariado urbano tensificó la competencia por trabajos
mensuales) o menos. Para 2014, a como en la clase obrera organizada: anteriormente reservados a los hijos
medida que la economía se desace- de acuerdo con las últimas investi- de la clase media. Cuando el escán-
leraba, alrededor del 97,5% de los gaciones, la tasa de desempleo bra- dalo “Petrolão”, ligado a los retornos
nuevos trabajos era de esta categoría, sileña aumentó de 7,9% a 10,2% en y el lavado de dinero en la compa-
y ocupaban en su mayoría mujeres, los últimos doce meses. ñía estatal de petróleo Petrobras,
jóvenes y negros – es decir, los traba- se hizo público, la insatisfacción de
jadores tradicionalmente peor remu- Por otro lado, la clase media tra- la clase media explotó en una gran
nerados y más discriminados. dicional ha evolucionado hacia una ola de protesta, impulsada por una
agenda económica y política marca- agenda política reaccionaria.
Al mismo tiempo, año tras año los damente de derechas, incluyendo a
números de accidentes y muertes la- aquellos que habían mantenido una Por todo esto, el colapso del apoyo
borales se incrementaron, así como alianza con el PT y a la principal fede- parlamentario al gobierno de Rous-
las tasas de rotación laboral, indi- ración sindical, CUT, al menos hasta seff es sólo la cara más visible de
cando ambos patrones un deterioro el escándalo de compra de votos del una crisis orgánica cuyas raíces se
en la calidad del trabajo. Una crisis 2005 conocido como “Mensalão”. encuentran en la estructura social
económica cada vez más profunda y No es difícil imaginar por qué. El pro- de un país sumergido en una profun-
el cambio hacia una política de aus- greso en la formalización del empleo da recesión. El modelo de desarrollo
teridad durante el segundo gobierno doméstico aumentó los salarios de brasileño, basado en la creación de
de Dilma Rousseff, desde el 2014, mucamas, mientras que el recalenta- trabajos precarios y en la descon-
fortalecieron estas tendencias regre- do mercado laboral disparó el costo centración de la distribución del in-
sivas y llevaron a los obreros sindica- de los servicios en general – produ- greso, ya no consigue garantizar las
lizados a la huelga. ciendo un impacto inmediato en los ganancias corporativas, y mucho

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EL ASCENSO DE LA DERECHA

menos atraer el consentimiento de había seducido con sus promesas de pública a los bancos a expensas del
las clases subalternas. mantener el empleo, los programas gasto en educación, salud y progra-
sociales y los derechos laborales. mas sociales.
> El golpe palaciego La impopularidad resultante fue lue-
go avivada por el descontento de la Todavía más importante, las fuerzas
Enfrentados a una crisis interna- clase media con la reducción de las políticas conservadoras optaron por
cional cada vez más grave, los princi- inequidades entre clases sociales. derrocar el gobierno de Brasil no por
pales representantes de los negocios Cuando la operación Lava Jato de lo que Rousseff dio a los sectores po-
brasileños, liderados por los bancos la Policía Federal decidió focalizarse pulares, sino por lo que no pudo brin-
privados, comenzaron a demandar exclusivamente en los políticos del dar al empresariado: un ajuste fiscal
al gobierno federal la profundización PT involucrados en los esquemas de aún más radical que hubiera requeri-
de la austeridad. Para las grandes corrupción de Petrobras, los brasile- do cambiar la Constitución, reformar
compañías las políticas que intensifi- ños tomaron las calles pidiendo la la seguridad social y eliminar protec-
quen el ajuste recesivo, incrementen caída del gobierno. ciones laborales clave. Por otro lado,
el desempleo y contengan el actual los sindicatos, mayormente controla-
ciclo de huelgas parecen ser un paso Esta movilización llevó a los parti- dos por el PT, siguen involucrados en
necesario hacia el despliegue de una dos políticos derrotados en el 2014 un histórico ciclo de huelgas.
serie de reformas impopulares, como a embarcarse en un proceso de im-
los recortes en la seguridad social y peachment. Las negociaciones entre De este modo, Brasil se encuen-
los derechos laborales. el Partido de la Social Democracia tra actualmente en un punto muerto:
Brasileña (PSDB) y el Partido del el golpe ha encontrado una fuerte
Este proyecto se ha nutrido de la Movimiento Democrático Brasileño resistencia popular que promete in-
actual retirada del gobierno del PT. (PMDB) se intensificaron y conver- tensificarse, aún cuando las medidas
El ajuste fiscal aplicado al comien- gieron en el manifiesto político del regresivas tomadas por un gobierno
zo del segundo mandato de Dilma segundo, “Un puente hacia el futu- ilegítimo sean adoptadas por el Con-
Rousseff traicionó las expectativas ro”: fundamentalmente, una prome- greso, y un período de luchas sociales
de los 53 millones de votantes que sa de asegurar el pago de la deuda sin precedentes parece inevitable.

Dirigir toda la correspondencia a Ruy Braga 14


<ruy.braga@uol.com.br>

1
Sobre las actividades de estas tres fracciones de las
clases subalternas brasileñas en la década pasada
véase: André Singer, Os sentidos do lulismo: reforma
gradual e pacto conservador (San Pablo, Companhia
das Letras, 2012); Ruy Braga, A política do preca-
riado: do populismo à hegemonia lulista (San Pablo:
Boitempo, 2012) y Roberto Véras de Oliveira, Maria
Aparecida Bridi y Marcos Ferraz, O sindicalismo na
Era Lula: paradoxos, perspectivas e olhares (Belo Ho-
rizonte, Fino Traço, 2014).

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EL ASCENSO DE LA DERECHA

> Políticas
laborales y el retorno del neoliberalismo
en Argentina
por Rodolfo Elbert, CONICET y Universidad de Buenos Aires, Argentina y miembro del
Comité de Investigación de la ISA sobre Movimientos obreros (RC44)

15

l 22 de noviembre de 2015 los argentinos

E
Trabajadores protestan contra los despidos
en una empresa industrial del norte del eligieron a Mauricio Macri como presidente
Gran Buenos Aires.
Foto por Sebastián Lineros.
para el período 2015-2019 con un margen
de menos del tres por ciento. La victoria de
Macri por sobre el candidato peronista Daniel Scioli marcó
el fin de una larga década kirchnerista (2003-2015) luego
de un período de creciente intervención estatal en la eco-
nomía y limitada redistribución de la riqueza, un candidato
de centroderecha con un discurso anticorrupción gobierna
ahora la Argentina.
>>
DG VOL. 6 / # 3 / SEPTIEMBRE 2016
EL ASCENSO DE LA DERECHA

Las explicaciones de este triunfo se han centrado en la Pero el movimiento de trabajadores de base que emergió
movilización antipopulista de la clase media urbana y en el hacia finales de la década de 2000 era diferente: los sin-
estancamiento de la economía argentina, pero cualquier dicatos con inclinación de izquierda buscaron unificar las
explicación de la derrota necesita incluir también alguna luchas de trabajadores precarios y no precarios dentro del
discusión sobre la cambiante política de los trabajadores lugar de trabajo, para eliminar contratos precarios e incor-
industriales. Las semillas de la crisis del régimen kirchne- porar a todos los trabajadores con los mismos derechos.
rista se encuentran en su paradójica combinación de una
distribución progresiva de la riqueza y una persistente frag- ¿Qué hay detrás de este sorpresivo nuevo crecimien-
mentación de la clase trabajadora. A través de su alianza to del movimiento de trabajadores? Paradójicamente, la
con los Kirchner, la antigua burocracia sindical de Argen- política económica argentina post-neoliberal produjo una
tina ayudó a construir una ciudadanía industrial fragmen- ciudadanía industrial inusualmente fragmentada, sosteni-
tada, mientras los sindicatos de base de izquierda se mo- da por sindicatos burocráticos. Después de la desastro-
vilizaron en resistencia a las desigualdades persistentes. sa crisis económica y social de 2001-2002, la economía
Una vez que el estancamiento de la economía erosionó las comenzó a crecer mientras los precios de sus principales
bases de los programas de redistribución limitada del go- exportaciones empezaron a aumentar. En un contexto de
bierno, la fragmentación social que caracteriza lo que Ruy rápido crecimiento, el gobierno peronista pudo aumentar
Braga ha denominado “hegemonía precaria”, contribuyó los impuestos a las exportaciones agrícolas, estimular la
a la derrota electoral. La resistencia a la futura ofensiva creación de puestos de trabajo expandiendo el mercado
neoliberal necesita incluir los mismos sindicatos de base doméstico y apoyar los acuerdos de negociación colectiva
que combatieron la inseguridad económica durante el go- para los sindicatos reconocidos.
bierno kirchnerista.
Una drástica reducción del desempleo y el aumento
A finales de la década de 2000, mientras la mayoría del salario real, junto con incrementos de subsidios a los
de los países empezaban a emerger de la crisis finan- servicios públicos y nuevas políticas sociales dirigidas a
ciera de 2008, Argentina experimentó un tipo diferente los ciudadanos más pobres, resultaron en una expansión
de renacimiento: un nuevo movimiento, el “sindicalismo del consumo entre las clases populares. En términos de la
de base”, pareció augurar una sorpresiva revitalización estructura ocupacional, este patrón de crecimiento econó-
de los trabajadores diez años después de que la cri- mico aumentó el peso relativo de los trabajadores indus-
sis económica argentina de 2001-2002 hubiera pare- triales asalariados dentro de la fuerza laboral total. 16
cido señalar el fin del imponente movimiento sindical
del país. En un barrio pobre del norte del Gran Buenos Aún así, esta política redistributiva tuvo sus límites. El
Aires conocido como Los Tilos, por ejemplo, los vecinos capital siguió concentrándose crecientemente mientras
organizaron la ocupación de tierras para demandar me- la economía se expandía, y las grandes corporaciones
joras en infraestructura y vivienda, y para insistir en que nacionales e internacionales aumentaron su tasa de ga-
las compañías dejaran de contaminar un río cercano. A nancia. Los trabajadores, por otro lado, enfrentaron una
pesar de la proximidad del barrio a un área industrial, alta tasa de informalidad laboral y de precariedad en el
la mayoría de sus residentes estaban desempleados o empleo. De acuerdo con la Base de Datos Socioeco-
trabajaban en la “economía informal”. nómicos para América Latina y el Caribe (http://sedlac.
econo.unlp.edu.ar), hacia 2010 el 45,5% de la fuerza
Sorprendentemente, las protestas de Los Tilos en 2010 de trabajo activa en Argentina estaba conformada por
recibieron un fuerte apoyo de los sindicatos cercanos que empleos informales – una mejora respecto del pico de la
representaban al sector formal de los trabajadores, mayor- crisis económica de la década anterior, pero una fuente
mente empleados en las empresas industriales de la zona. significativa de inseguridad laboral y económica para los
Como parte de la revitalización del empleo, el activismo en hogares de bajos ingresos.
muchas empresas industriales del norte del Gran Buenos
Aires había sido liderado por sindicatos democráticos de En 2010, el gobierno de Cristina Kirchner aún estaba
base. Pero incluso entonces, la mayoría de los sindicatos buscando su camino de salida al colapso neoliberal de
nacionales eran aún conducidos por líderes burocráticos Argentina, combinando una limitada redistribución de la
tradicionales, aliados del gobierno kirchnerista que asu- riqueza con la persistente fragmentación de la clase tra-
mió en 2003. En general, estos sindicatos burocráticos bajadora. Pero en pocos años, la economía comenzó a ex-
persiguieron una estrategia de exclusión: raramente mos- perimentar el impacto directo de la crisis financiera global.
traron solidaridad con las luchas por la subsistencia de Los precios globales de los commodities se desplomaron
los pobres urbanos y generalmente permitieron que los y el gobierno se esforzó para mantener sus limitados pro-
empleadores contrataran trabajadores vulnerables bajo gramas redistributivos. En 2011, la élite política peronista
condiciones precarias, siempre que los trabajadores fijos abandonó su alianza con un segmento de los sindicatos
recibieran salarios más altos. burocráticos, rechazando las ambiciones políticas del se-

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EL ASCENSO DE LA DERECHA

cretario general de la CGT (Confederación General del Tra- No obstante, a pesar de la orientación claramente an-
bajo). La coalición económica y política que había surgido tiobrera del gobierno, los dirigentes sindicales nacionales
de la crisis una década antes comenzó a desvanecerse. parecen estar más interesados en preservar su poder ins-
titucional en los sindicatos – y más preocupados en evitar
Para 2014, la devaluación del peso argentino y las pre- juicios personales por corrupción – que en defender los
siones inflacionarias produjeron un aumento indiscutible derechos de los trabajadores.
de la pobreza y una disminución de los salarios reales. Con
la erosión de la precaria hegemonía del gobierno, el can- ¿Qué sucederá con el aún incipiente movimiento de
didato peronista Daniel Scioli perdió las elecciones presi- sindicatos de base que confrontó con la informalidad y
denciales de 2015 en manos del candidato de la derecha, la precariedad durante el período kirchnerista? ¿Es po-
Mauricio Macri. sible que una mayor parte de la clase trabajadora apoye
la estrategia de solidaridad con trabajadores informales y
Durante los primeros seis meses en ejercicio, la estrate- precarios en el futuro cercano? Es muy temprano aún para
gia de Macri puede ser bien definida como un intento de decidirlo, pero una mirada al pasado reciente puede ayu-
regresar al neoliberalismo. El gobierno impuso una serie dar. Hacia finales de la década de 2000, incluso en am-
de reformas promercado, incluyendo despidos masivos en bientes desfavorables de deterioro del empleo y sindicatos
agencias del estado y recortes de subsidios a servicios burocráticos, algunos de los sindicatos de base argentinos
públicos importantes, como los anteriormente otorgados a lograron forjar alianzas exitosas con diferentes fracciones
electricidad y abastecimiento de agua. La devaluación del de la clase trabajadora. Aunque estos sindicatos enfren-
peso significó que la mayoría de los salarios no pudieran taron grandes desafíos cuando intentaron ampliar la so-
seguir el ritmo de la inflación de los bienes de consumo lidaridad a nivel nacional, parece claro que la habilidad
ordinario, llevando (como en 2014) a un aumento drástico del movimiento obrero para confrontar el regreso neoli-
de la pobreza. Junto con nuevas y agresivas medidas an- beral dependerá de este tipo de estrategia. La alternativa
tilaborales, el gobierno recortó impuestos para las expor- parece ser la de dirigentes sindicales entusiasmados por
taciones agrícolas y mineras. El 29 de abril se realizó una acatar la nueva ronda de reformas promercado – algo que
protesta nacional contra los despidos, pero no ha habido sólo podría lograrse a expensas de un empobrecimiento
ninguna otra acción a nivel nacional desde entonces. cada vez mayor de los trabajadores argentinos.

Dirigir toda la correspondencia a Rodolfo Elbert <elbert.rodolfo@gmail.com> 17

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EL ASCENSO DE LA DERECHA

> La derecha
estadounidense:
su historia profunda
por Arlie Russell Hochschild, Universidad de California, Berkeley, EE.UU.

18

l igual que en Europa, In- que los demócratas. En 23 de los 50

A
Donald Trump en campaña.
dia, China o Rusia, la de- estados de la nación, ambas cámaras
recha política norteameri- y la gobernación están controladas por
cana está en movimiento. republicanos, mientras que el número
De algún modo, el giro cultural hacia correspondiente para los demócra-
la izquierda – un primer presidente tas es siete. Alrededor del veinte por
negro, una potencial presidenta, el ciento de los estadounidenses – 45
matrimonio igualitario – puede ocul- millones de personas – apoyan actual-
tar este crecimiento. Pero está ahí. mente un movimiento fuertemente
Durante las últimas décadas las vo- anti-impuestos como el Tea Party y, en
ces conservadoras se han vuelto más los últimos meses, el candidato repu-
fuertes: el canal de TV por cable más blicano a la presidencia, el populista y
popular, así como el programa radial nativista Donald Trump, obtuvo la ma-
de mayor audiencia se orientan fuer- yor cantidad de votos republicanos de
temente hacia la derecha. Ambas cá- la historia en las elecciones primarias.
maras del Congreso federal están en
manos de los republicanos, que tam- Lo que distingue a la derecha es-
bién controlan muchas más cámaras tadounidense de sus contrapartes en
legislativas y gobernaciones estatales otras latitudes es el odio al gobierno
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DG VOL. 6 / # 3 / SEPTIEMBRE 2016
EL ASCENSO DE LA DERECHA

federal. La derecha clama por recortes de Luisiana, jugué a las cartas y salí dices a ti mismo: hay que cerrar las
en los beneficios gubernamentales: el a pescar con ellos. Entrevisté en total fronteras a la compasión humana –
seguro de desempleo, Medicaid, las sesenta personas, cuarenta de ellas especialmente si entre ellos hubiera
ayudas financieras para la educación cristianas, blancas, mayores y partida- algunos que pueden causar daño.
superior, los comedores escolares y rias del Tea Party. Recolecté más de
mucho más. Prominentes líderes re- 4.600 páginas de entrevistas trans- Eres una persona compasiva. Pero
publicanos han pedido la completa criptas y notas de campo. se te está pidiendo que extiendas tu
eliminación de algunos departamen- solidaridad a todos aquellos que se
tos del gobierno federal – Educación, También se me ocurrió un méto- están colando en tus narices. Aunque
Energía, Comercio e Interior. En 2015, do. Primero escuché. Luego boceté tú también has sufrido mucho puedes
58 legisladores republicanos votaron una representación metafórica de su estar orgulloso de decir que no te has
a favor de la abolición del Servicio de experiencia, despojada de valoracio- quejado ni has pedido ayuda. Crees
Impuestos Internos. Algunos han lla- nes tanto como de hechos; un relato en los derechos equitativos, pero
mado incluso a eliminar todas las es- “como si” que llamo “historia profun- ¿qué hay de tus propios derechos?
cuelas públicas. da”. Creo que por debajo de nuestras ¿Acaso no cuentan? No es justo.
creencias políticas se encuentran
Las bases que apoyan a estos líde- este tipo de historias. En este caso, Luego ves a un presidente negro, cuyo
res sienten enojo y frustración frente se desarrolla así: segundo nombre es Hussein, saludan-
al gobierno. El gran interrogante que do a quienes se cuelan en la fila. Él
me llevó a iniciar un estudio etno- Estás parado pacientemente en el está de su lado, no del tuyo. Él es su
gráfico de cinco años en Luisiana – medio de una larga fila que sube una presidente, no el tuyo. ¿No es él tam-
parte del corazón de la derecha nor- colina, como en una peregrinación. bién un colado? ¿Cómo pudo el hijo
teamericana – fue ¿por qué? Cuando Quienes te rodean se te parecen – de una madre soltera en apuros pagar
empecé a hacer entrevistas para mi blancos, mayores, cristianos, predo- por Columbia y Harvard? Tal vez algo
libro Strangers in Their Own Land: minantemente varones. Justo sobre haya pasado en secreto. ¿No estarán
Anger and Mourning on the American la cumbre de la colina se encuentra el presidente y sus partidarios demó-
Right1 [Extraños en su propia tierra: el Sueño Americano, lo que todos en cratas utilizando tu dinero para ayu-
ira y duelo en la derecha estadouni- la fila quieren alcanzar. Entonces, darse a sí mismos? Quieres apagar la
dense], el desconcierto no hizo más ¡mira! ¡De repente ves personas cor- maquinaria – el gobierno federal – que 19
que crecer. Siendo el segundo estado tando camino delante de ti! A medida él y los demócratas utilizan para em-
más pobre, Luisiana tiene proporcio- que se cuelan, tú pareces ser des- pujarte al fondo de la fila.
nalmente más escuelas en crisis y plazado hacia atrás. ¿Cómo pueden
más residentes obesos y enfermos estar haciendo esto? ¿Quiénes son? Luego volví a mis entrevistados para
que casi cualquier otro estado del preguntarles si esta historia profunda
país. Por lo tanto, necesitaba – y reci- Muchos son negros. A través de pla- describía sus sentimientos. Aunque
bía – ayuda federal; 44 por ciento de nes federales de acción afirmativa, se algunos hicieran modificaciones aquí
su presupuesto provenía del gobierno les da preferencia en vacantes para y allí (“entonces nos cambiamos de
federal. Entonces, me pregunté: ¿por colleges y universidades, centros de fila...” o “es nuestro dinero el que
qué había tantos seguidores enfada- formación laboral, empleos, subsidios está regalando...”), todos aseguraron
dos del Tea Party? Y ¿cómo ese enojo y comedores gratuitos. Otros también que la historia era la suya. Uno me
– o cualquier otra emoción – subyace se van colando – mujeres engreídas dijo: “yo vivo tu metáfora”. Otro afir-
a la política? que buscan empleos tradicionalmente mó: “me leíste la mente”.
masculinos, inmigrantes, refugiados y
A diferencia de muchos otros analis- un creciente número de trabajadores ¿Qué ha ocurrido para que esta
tas que abordan estas cuestiones por del sector público cuyos altos salarios historia suene verdadera? En una pa-
fuera de la experiencia personal de se pagan con los dólares de tus im- labra, la pérdida del honor. Los par-
los individuos de derechas, yo quería puestos. ¿Cuándo acabará? tidarios del Tea Party que conocí ge-
comprender esta experiencia desde neralmente no eran pobres, aunque
adentro. Para ello asistí a encuentros Mientras esperas en esta fila deteni- muchos habían crecido en la pobreza
de Mujeres Republicanas del Suroeste da, se te pide que tengas pena por to- y habían visto amigos y familiares vol-
de Luisiana, a reuniones eclesiales y dos ellos. La gente se queja: racismo, ver a hundirse en ella. Pero la riqueza
giras durante las campañas políticas. discriminación, sexismo. Escuchas no era la única fuente de bienestar
Les pedí a las personas que me con- historias de negros oprimidos, muje- y honor. En tanto blancos cristianos
taran dónde habían nacido, asistido a res dominadas, inmigrantes extenua- y heterosexuales, muchos describían
la escuela o enterrado a sus padres. dos, gais que no se atreven a declarar sus miedos en términos de un declive
Exploré los anuarios de las escuelas su homosexualidad, refugiados deses- demográfico (“hay cada vez menos
secundarias de mis nuevos amigos perados. Pero en un cierto punto te personas como nosotros”, me dijo

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EL ASCENSO DE LA DERECHA

Donald Trump dirigiéndose a la multitud en


Phoenix sobre uno de sus temas favoritos –
inmigración.

una mujer), o de convertirse en una razón”). Los trabajadores aprenden un montón de gente diciendo pobre
minoría religiosa (“la gente ya no se a manejar sus sentimientos a través de mí, pobre de mí...” Otro dijo: “los
vincula con la iglesia”, “no puedes del entrenamiento y los supervisores demócratas obtienen algo del gobier-
decir Feliz Navidad, tienes que decir controlan qué tan bien lo hacen. Del no y nosotros no; estoy orgulloso de
Felices Vacaciones”). Algunos se sen- mismo modo, las ideologías políticas no tomar nada si no lo necesito. Pero
tían como una minoría cultural (“so- suponen reglas del sentir. Los líderes ellos quieren que nos sintamos agra-
mos los que llevamos una vida limpia, encauzan la compasión, la suspica- decidos por lo que ellos mismos ob-
gente que sigue las reglas, pero se cia, la culpa, la vergüenza, mientras tienen”. Y muchos asociaban la ayu-
nos ve como sexistas, homofóbicos, que locutores de radio y conductores da gubernamental con la deshonra,
racistas, ignorantes – todas etiquetas de noticieros difunden la palabra que y sentían un completo desprecio por
que los demócratas nos aplican”). comunidades electrónicas y locales los tramposos. “Conozco tipos que se
Si vuelven a sus amados hogares en monitorean a través de comentarios. anotaron como desempleados para
busca de honor, frecuentemente en la temporada de caza”. O “muchos 20
zonas rurales del Medio Oeste o del La derecha y la izquierda obedecen de los que están en ese campamento
Sur, algunos se sentían desdeñados a conjuntos de reglas del sentir cada de casas rodantes consiguieron ser
por “rednecks”. Detrás de la historia vez más divergentes. En general, la reconocidos como discapacitados
profunda, entonces, se encuentra izquierda apela a la compasión por afirmando que tenían convulsiones.
su pérdida de honor desde distintos los grupos menos privilegiados, en- Yo no sé cómo mantienen sus cabe-
frentes – una restricción de su honor. tendiéndolos como merecedores de zas en alto. Pero lo hacen, y el go-
la ayuda gubernamental, mientras bierno lo fomenta”. La mayoría de los
Una historia profunda describe do- que la derecha rechaza esta idea. La partidarios del Tea Party se resisten
lores (otros colándose enfrente tuyo), izquierda pide confianza en esta par- fuertemente a la idea de que alguien
culpas (un gobierno mal intenciona- te del gobierno, mientras la derecha pueda sentir compasión por quienes
do) y señala a salvadores (los polí- levanta sospechas y la denigra. La iz- se cuelan en la fila, gratitud ante el
ticos del Tea Party). También provee quierda vincula la percepción de ayu- gobierno, o alivio al recibir una “li-
un sistema de justificación emotiva, das gubernamentales con la dignidad mosna gubernamental”.
estableciendo cuánta compasión y los derechos, en tanto la derecha la
se debe a aquellos que esperan o considera vergonzosa. Pero no todos mis interlocutores
se cuelan en la fila, cuánta descon- estaban de acuerdo. En realidad, pa-
fianza se merece el gobierno o qué En la batalla cultural entre estos recía que dos facciones de mis entre-
tanto deberían avergonzarse sus be- dos códigos, los partidarios del Tea vistados escuchaban un final diferente
neficiarios. Este sistema se convier- Party que estudié se sentían domi- de la historia profunda. Los partidarios
te en la base de las reglas del sen- nados por las reglas del sentir de la tradicionales del Tea Party querían
tir2, que establecen lo que creemos izquierda, y lo deploraban amarga- eliminar tanto la práctica de hacer
que “deberíamos o no deberíamos” mente. “Ya hemos tenido suficiente trampa en la fila como las recom-
sentir, actualmente blanco de una corrección política” suele gritar Do- pensas gubernamentales por hacerlo.
acalorada batalla política. Explícita nald Trump, haciéndose eco de un Los seguidores de Donald Trump, en
o implícitamente, la mayoría de los sentimiento fuertemente arraigado cambio, querían mantener los bene-
empleos en servicios requieren que en la derecha. Un hombre me dijo: ficios gubernamentales removiendo
los trabajadores se atengan a ciertas “los demócratas quieren que nos sin- la vergüenza por recibirlos – pero res-
reglas del sentir (“está mal enojarse tamos apenados por los inmigrantes tringiendo estos beneficios, implícita-
con un cliente; él siempre tiene la y refugiados. Pero todo lo que veo es mente, a aquellos norteamericanos de
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DG VOL. 6 / # 3 / SEPTIEMBRE 2016
EL ASCENSO DE LA DERECHA

nacimiento, preferiblemente blancos. rios de la ayuda gubernamental son tiempo. Despegarse de la asistencia
Los pronunciamientos de Trump han mujeres, niños u hombres de color. social fue un marcador clave de es-
sido ambiguos y cambiantes, pero los Pero hay muchos hombres blancos tatus que distinguía los “verdaderos
comentaristas han notado que no ha pobres, casi pobres o temerosos de hombres” de quienes “realmente to-
llamado a hacer recortes en Medi- convertirse en pobres. Si un hombre caron fondo”. En mis entrevistas con
caid. En cambio, planea, según dice, así lo necesita, sugiere Trump, con- los partidarios de Trump en Luisiana,
reemplazar Obamacare, que otorga seguir un beneficio gubernamental este apoyo a los beneficios guberna-
cobertura a quienes no poseen un puede ser cosa de varones. De esta mentales no aparecía, al menos al
seguro de salud, con un nuevo pro- manera podrías pegar calcomanías principio. Pero al pedir su opinión so-
grama que será “espectacular”. La de armas en tu camioneta, generar bre una protección para la “gente co-
distribución que Trump hace de la peleas, ser macho, insinúa Trump, y mún”, un mecánico de autos señaló:
vergüenza también es significativa. al mismo tiempo solicitar un seguro “Trump no está en contra. Si utilizas
A pesar de haber denigrado al héroe de desempleo o cupones de alimen- los cupones de alimentos porque tie-
ex-prisionero de guerra John McCain, tos, libre de estigma. nes un empleo mal remunerado, no
a un periodista discapacitado, a una tienes por qué aceptar que te miren
mujer comentarista de Fox News, a Es importante señalar que muchos con desprecio”.
mexicanos indocumentados, a un de los varones blancos trabajadores
juez estadounidense de ascendencia de cuello azul que siguen a Trump Tácticamente, Trump absuelve a los
mexicana, a todos los musulmanes, deben enfrentar el mismo lúgubre hombres blancos de cuello azul de la
así como a todos sus adversarios re- destino económico que previamente vergüenza, pero no así a los extranje-
publicanos, nunca humilló a los be- afligió a los negros: empleos que des- ros o a los hombres no blancos. En
neficiarios de Medicaid o de cupones aparecen, bajos salarios, evidencia realidad, respondiendo a la historia
de alimentos. de desesperanza. Entre estos hom- profunda, Trump ha creado un movi-
bres hay más padres solteros que en miento muy parecido al populismo de
Pero con el fin de legitimar la asis- las fracciones más ricas de varones derechas anti-inmigrante, pero pro-
tencia social para los hombres blan- blancos, así como más divorciados, estado de bienestar, en crecimiento
cos, Trump tiene que masculinizar el más hijos y mayores penurias. Si en Gran Bretaña, Alemania, Francia,
acto de recibirla. Este puede ser el no están actualmente en Medicaid, Austria y buena parte de Europa del
secreto y la poderosa fuente de atrac- pueden estarlo en el futuro – por lo Este. Todos estos movimientos de de- 21
ción que genera Trump. Él aplaude que se enfrentan a la contradicción rechas están, creo, basados en varia-
hombres que pelean, portan armas, de necesitar la misma ayuda gu- ciones de la misma historia profunda,
se paran firmes y actúan como ma- bernamental que la derecha, y ellos los sentimientos que evoca y las fuer-
chos. La mayoría de los beneficia- mismos, han despreciado por largo tes creencias que la protegen.

Dirigir toda la correspondencia a Arlie Hochschild


<ahochsch@berkeley.edu>

1
Arlie Hochschild (2016) Strangers in Their Own
Land: Anger and Mourning on the American Right.
NuevaYork: New Press.

2
Véase Arlie Hochschild (1983) The Managed Heart:
the Commercialization of Human Feeling. Berkeley y
Los Angeles: The University of California Press.

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> El ascenso de la
universidad corporativa
en el Reino Unido
por Huw Beynon, Universidad de Cardiff, Reino Unido

Resumen de la presentación de 2014 ante el Marco de Excelencia de


la Investigación en el Reino Unido.

números de estudiantes se establecían a nivel nacional,


y cada universidad recibía financiamiento apropiado de
acuerdo con varias fórmulas. Era reconocido general-
mente como un sistema de “élite”: sólo el diez por ciento
asistía a la educación superior, mientras la mayoría de
los jóvenes adultos atravesaba un complejo sistema de
educación técnica y vocacional, capacitaciones y entre-
namiento laboral “en la práctica”.

Bajo el gobierno de Thatcher, sin embargo, la destruc-


ción del sector manufacturero británico dio pie para hablar
de un renacimiento a través de la “economía del conoci- 22
miento”. Esto llevó a que Blair hiciera hincapié en “educa-
ción, educación, educación” mientras argumentaba que
el 50 por ciento de los niños británicos debería ir a la
as universidades británicas están cambiando universidad. De esta forma, y a gran velocidad, las univer-

L de maneras tan fundamentales que no es fácil


predecir dónde terminará todo esto. Sin dudas,
trabajar y estudiar en una universidad aquí en
la actualidad es una experiencia muy diferente de lo que
hubiera sido tan sólo una década atrás. Stefan Collini ha
sidades se volvieron una parte clave de la estrategia eco-
nómica del gobierno – un cambio que quedó en evidencia
cuando la responsabilidad por la educación superior fue
transferida al Departamento de Comercio e Industria. Ac-
tualmente, esa responsabilidad recae en el Departamento
sostenido recientemente que “lo que aún llamamos uni- de Negocios, Innovación y Conocimiento, cuyo libro blanco
versidades están siendo remodeladas como centros de más reciente – El éxito como economía del conocimiento:
conocimiento aplicado y entrenamiento profesional subor- la enseñanza de excelencia, la movilidad social y la elec-
dinados a las ‘estrategias económicas’ de la sociedad” – ción del estudiante – revela cómo una idea alguna vez
una síntesis que evoca el mensaje de despedida de John utópica puede proveer la plataforma ideológica para un
Holmwood en 2014 como presidente de la Asociación Bri- cambio reaccionario.
tánica de Sociología. Holmwood concluyó que el sistema
universitario británico ahora “sirve a un capitalismo patri- Este movimiento estratégico fue facilitado por un cambio
monial renovado y sus cada vez mayores desigualdades”. en el financiamiento de las universidades británicas, que
Los efectos de estos cambios sobre la sociología como implicó el desplazamiento desde un sistema basado en
disciplina no son aún completamente claros, pero hay al- fondos del gobierno central hacia otro basado casi entera-
gunos signos preocupantes. mente en los aranceles estudiantiles. En 1998, el nuevo
gobierno laborista fijó un arancel de £3.000 por año; des-
> Financiamiento: de las subvenciones de entonces se han incrementado a £9.000 y se prevén
centrales a los aranceles estudiantiles mayores aumentos. Hay importantes variaciones en las
administraciones delegadas de Irlanda del Norte, Escocia
Históricamente – esto es, antes de los gobiernos de y Gales, pero en Inglaterra la educación superior se ha
Thatcher y Blair – las universidades británicas eran orga- expandido mediante la acumulación de deuda estudiantil,
nizaciones sin fines de lucro cuasi independientes. Los facilitada por un complejo sistema de préstamos.
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DG VOL. 6 / # 3 / SEPTIEMBRE 2016
El nuevo sistema de financiamiento ha sido un motor de Este proceso de evaluación se ha ido extendiendo en
cambio clave. Las universidades compiten entre ellas por sucesivas reediciones. En 2015, un cambio de nombre,
los estudiantes, con importantes consecuencias pedagó- Marco de Excelencia en la Investigación (REF, por su si-
gicas: en vez de ser vistos como alumnos o aprendices, los gla en inglés), implicó un cambio aún más radical – in-
estudiantes son ahora clientes. Quizá paradójicamente, la cluyendo nuevos esfuerzos para evaluar el “impacto” de
introducción de un “mercado” para estudiantes ha sido la investigación publicada y los “beneficios demostrables
acompañada de varias formas de vigilancia estatal. (logrados) para la economía y la sociedad en general”,
definidos en sentido amplio. Paneles de expertos “revi-
En 2005 el gobierno de Blair reemplazó un sistema de sarán la evidencia sustentada por indicadores adecuados
evaluación de calidad arduo (con el que se había intenta- y producirán una clasificación de sub-perfiles de impacto
do mejorar la enseñanza mediante visitas de inspección y para cada presentación”. Estos perfiles serán cataloga-
la imposición de procedimientos bastante estandarizados dos siguiendo una escala: desde “líder mundial” (4*),
para el dictado de clases) con una Encuesta Nacional de pasando por “excelente internacionalmente” (3*) y “re-
Estudiantes (NSS, por su sigla en inglés) – algo así como conocido internacionalmente” (2*) hasta “reconocido
una investigación de consumidores que relevaba y publi- nacionalmente” (1*).
caba las evaluaciones de los estudiantes sobre todos los
cursos y carreras. Estos datos (que incluyeron la propor- Con el paso del tiempo, dentro de las universidades
ción de estudiantes que recibían títulos de primera cla- el proceso de control externo sobre las estrategias de
se – first-class degrees) fueron rápidamente incorporados investigación se ha desplazado de la periferia al centro,
en tablas de posiciones con las “mejores” universidades, y palabras como “estrella” han adquirido centralidad en
compilados y publicados por los diarios nacionales. el discurso académico, junto con otras palabras fuertes
como “excelencia,” “robusto,” ”riguroso” y “transparen-
Actualmente el gobierno está planeando mejorar su sis- te” – construyendo una narrativa aparentemente indiscu-
tema de evaluación a través de una serie más compleja tible, que muchos sociólogos han aceptado aún cuando
de indagaciones que den cuenta del Marco de Excelencia deberían haber mostrado mayor sensatez. Dentro de esta
para la Enseñanza (TEF, por su sigla en inglés), que consi- forma de hablar, “Ref” ha aflorado como un nuevo y pode-
dera la retención estudiantil y el empleo de los graduados, roso sustantivo en los departamentos universitarios, junto
además de las evaluaciones de los estudiantes. A pesar con “Refable,” “Ref-ready” y otros del estilo.
de haberse comprobado que todas estas mediciones son 23
falibles, el gobierno planea construir un nuevo sistema de > La universidad corporativa
puntuación TEF sobre la base del cual “los aranceles po-
drían diferenciar crecientemente”. Estos cambios son parte de una poderosa estrategia
neoliberal que ha transformado el sector público inglés; los
> De la evaluación de la investigación a la cambios en la educación superior van en paralelo a las re-
excelencia en la investigación formas del servicio de salud, la recaudación de impuestos,
la policía y la educación en general. Las universidades, que
Bajo el “viejo” sistema de financiamiento, se esperaba compiten entre ellas por estudiantes – ahora su principal
que el personal universitario enseñara e investigara con fuente de ingresos – y por una posición en las varias tablas
una distribución nominal de 3:2 entre estas actividades. de clasificación, se comportan cada vez más como corpora-
Financiados públicamente y provistos de personal aca- ciones que persiguen ganancias en lugar de como organiza-
démico, los Consejos de Investigación disponían de fon- ciones sin fines de lucro.
dos adicionales para la investigación que se otorgaban a
través de un proceso competitivo. El gobierno de That- Los presidentes de las universidades ya no se ven a sí
cher, preocupado por las voces radicales y críticas en los mismos como primeros entre pares, sino como Directores
campus, insistió en renombrar el Consejo de Investiga- Ejecutivos – con salarios acordes y su propio esquema de
ción en Ciencias Sociales como Consejo de Investigación pensiones. Cuando el actual gobierno conservador quitó
Económica y Social (ESRC, por su sigla en inglés); con el el “tope” del número de estudiantes, la perspectiva de
tiempo esta organización se ha ido adaptando creciente- superávits potencialmente altos – las reservas en efectivo
mente a las necesidades económicas del Reino Unido. quedaron en £6,5 billones en 2011 – alentó a las univer-
Quizás aún más importante, se introdujo una revisión sidades británicas a seguir el ejemplo de Estados Unidos,
regular (nominalmente cada cinco años) de la actividad vendiendo bonos en los mercados para financiar enormes
de investigación de los departamentos universitarios: el inversiones en nuevos emprendimientos inmobiliarios.
Ejercicio de Evaluación de la Investigación comenzó más Muchos dentro de la élite directiva vieron estos nuevos
bien informalmente en la década de 1980, pero a partir edificios como representaciones simbólicas de su éxito.
de 1990 el desempeño quedó vinculado a la futura finan-
ciación de la investigación, rompiendo así con el antiguo En su búsqueda por más estudiantes (es decir “dinero”),
sistema basado en subsidios. las universidades, frustradas por las restricciones a las vi-

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DG VOL. 6 / # 3 / SEPTIEMBRE 2016
sas para estudiantes extranjeros, han emplazado enormes el puesto de “Decano Asociado a cargo del Feedback”,
campus en el extranjero, brindando a algunos de sus em- y algunos miembros del personal han sido identificados
pleados perspectivas de evolución de carrera difíciles de como “expertos en feedback”.
rechazar. Algunas operaciones han sido exitosas, otras no
tanto. A finales de 2015, la Universidad de Aberystwyth Esta actividad “apostadora” ha avanzado más en materia
gastó medio millón de libras en un campus en Mauricio de evaluación de la investigación. En 2014 muchas univer-
para estudiantes británicos e internacionales, esperando sidades abandonaron la costumbre de incluir todo el perso-
proveer “nuevas oportunidades para que los estudiantes nal en la Evaluación de Investigación, y en su lugar inclu-
accedan a una educación de calidad, a la que de otra yeron sólo el personal con un alto ranking de publicaciones
forma no tendrían acceso” – pero para 2016, sólo 40 y estudios de caso de impacto. Este resultado – que llevó
alumnos se habían inscrito en un campus construido para a algunas universidades a ser acusadas de hacer “tram-
alojar 2.000. Como comentó mordazmente un antiguo di- pa”– implicó varios procedimientos internos de evaluación
rectivo de universidad: “La operación es una locura. Sería que fueron muchas veces ingratos y rara vez colegiados. En
mejor que concentraran sus recursos en personal de alta la actualidad, en el ciclo que conduce al proceso de eva-
calidad y en atraer más estudiantes locales”. luación de la investigación 2020, muchas universidades ya
han establecido disposiciones para controlar las publicacio-
Todo esto habla de un sector que atraviesa cambios nes (“productos”, en lenguaje ref) a través de “Gerentes de
estresantes, con implicaciones reales para las vidas la- Impacto de la Investigación” que producen documentación
borales de los académicos. Estas nuevas universidades en un lenguaje retorcido y autorreferencial.
corporativas tienden a centralizarse aun más con cada
nuevo presidente que, en su determinación por lograr Las decisiones en estas áreas son tomadas invaria-
objetivos bajo las nuevas disposiciones, establece es- blemente por comités de alta jerarquía y son comuni-
tructuras verticales sustentadas por un número crecien- cadas por medio de didácticos emails o reuniones con-
te de personal administrativo. Surgen nuevas jerarquías sultivas generales. Refiriéndose a estos desarrollos, el
administrativas a la vez que “personal de apoyo” técnico Profesor Ben Martin, de la Universidad de Sussex, notó
y financiero, que antiguamente trabajaba en facultades, el aumento de “resentimiento, escepticismo y sombrío
departamentos y centros de investigación, ahora migra consentimiento”, una visión confirmada por la última
hacia alguna oficina central. Cada vez con más frecuen- encuesta del Times sobre la universidad como lugar de
cia la comunicación se realiza a través de correos elec- trabajo, que concluyó que mientras los académicos ge- 24
trónicos en lugar del contacto personal, y operaciones neralmente encontraban sus trabajos gratificantes, tres
que antes eran simples, incluso organizar una reunión cuartos de ellos estaban profundamente desilusionados
o reservar una sala, requieren entrenamiento y acceso con los planes futuros de sus universidades y con sus
a programas de computación. En la medida que la “mé- directivos. La encuesta también reveló que la mitad de
trica” se convierte en una herramienta esencial de ges- los académicos que respondieron estaban preocupa-
tión se refuerza la presión por la estandarización, que dos por despidos relacionados con las mediciones de
en muchas universidades se ha vinculado con nuevos desempeño. Tal vez resulte aún más perturbador que la
sistemas de gestión del desempeño. El pago por rendi- mitad de los respondientes dijeran creer que sus institu-
miento también parece estar en la agenda – así como, ciones han comprometido los estándares de ingreso en
más significativamente, el intento por pasar el personal su esfuerzo por competir por estudiantes y que, como
académico a nuevos contratos limitados exclusivamente individuos, se sienten bajo presión para otorgar califica-
a la enseñanza. ciones más altas.

Las patologías del exceso de burocracia y del “desplaza- En esta misma línea, Charles Turner, Profesor Asocia-
miento de objetivos” en estructuras gobernadas por reglas, do de Sociología en la Universidad de Warwick, ha listado
descritas hace tiempo por Alvin Gouldner, son ahora obvias recientemente los siguientes “problemas que realmente
en las universidades británicas, especialmente en los es- están matando a las universidades”: vastos recursos que
quemas de evaluación de la enseñanza y la investigación podrían gastarse en stocks para bibliotecas y que en cam-
– al punto de que ya muchas universidades advierten a los bio se destinan a nuevos edificios innecesarios y mal di-
estudiantes que sus evaluaciones negativas pueden afec- señados; expedición de títulos de primera y segunda clase
tar el valor en el mercado laboral de sus propias carreras. superior a estudiantes que 20 años atrás apenas hubiesen
La proporción de puntajes máximos es monitoreada, y los podido obtener uno de segunda clase inferior; uso de ad-
alumnos son alentados a ser flexibles y generosos en sus ministradores para tomar decisiones clave sobre cuestio-
evaluaciones. Habiendo notado que los estudiantes criti- nes de pedagogía; esfuerzos desesperados para hacer que
can regularmente los cursos por ofrecer poco “feedback”, algunos programas de grado parezcan profesionales cuan-
algunas universidades organizan sesiones especiales para do no lo son ni lo pueden ser; y la interminable marea de
explicar a los estudiantes qué es el “feedback” y cuándo lo publicaciones que nadie en su sano juicio querría leer – o
obtendrán. De hecho, algunas universidades han creado escribir (The Guardian, 1 de junio de 2016).

>>
DG VOL. 6 / # 3 / SEPTIEMBRE 2016
> El cambiante lugar de la sociología con las 62 presentaciones y los 1.302 investigadores bajo
el rótulo “política social.” Estos índices, que son la inver-
La sociología como carrera apareció bastante tarde en sa de los números en el terreno, reflejan cambios en las
las universidades británicas: a principios de la década de prioridades de investigación de algunos sociólogos hacia
1960 existían sólo tres centros viables. Subsecuentemen- áreas más aplicadas, y en las elecciones estratégicas de
te, un aumento rápido y notable tanto en el número de los comités universitarios centralizados. Como consecuen-
estudiantes como de departamentos colocó la sociología cia, el panel se vio obligado a informar que sólo era capaz
en una sólida posición dentro de las universidades. Este de ofrecer “una representación parcial de la disciplina.”
rápido aumento involucró un alto nivel de “apertura”, con
pocos intentos de establecer límites profesionales firmes El “impacto”, por supuesto, fue central en este ejerci-
en torno de la disciplina – una apertura que permitió al cio: dado que esta métrica alienta a los investigadores a
pensamiento sociológico penetrar en muchos campos di- trabajar con agencias externas, muchos académicos han
ferentes. Sin embargo, una consecuencia de esta apertura llegado a creer que el trabajo crítico será excluido o mal
ha sido la deriva de muchas especialidades hacia otros calificado. Aunque aún pueda haber algo de lugar para el
campos; buenos ejemplos son la “sociología del trabajo” y trabajo crítico (por ejemplo, con relación a cuestiones am-
la “sociología de la educación,” pilares de la disciplina en bientales), la medida de “impacto” en las ciencias sociales
el pasado, que hoy se enseñan en escuelas de negocios implica un fuerte sesgo en favor de cambios de política
y de educación. a pequeña escala, conduciendo las universidades a ani-
mar activamente a sus investigadores a ir sobre seguro.
La sociología ha cambiado en otras formas. Luego de El Consejo de Investigación (ESRC, por su sigla en inglés)
haber hecho avances radicales en el campo de la desvia- – él mismo objeto de un examen meticuloso por parte del
ción en las décadas de 1960 y 1970, esta especialidad gobierno – se ha orientado resueltamente hacia la con-
ha sido redefinida como criminología, un tema altamente centración de sus financiamientos en torno de grandes
demandado, que a menudo se enseña en contextos mul- subsidios para proyectos complejos que suelen involucrar
tidisciplinarios que incluyen políticas sociales y estudios equipos interuniversitarios. Esta política podría dejar los
legales. Salud y ambiente también son áreas en las que proyectos de menor escala cada vez más a la deriva.
la sociología ha sido capaz de desarrollar cursos aplicados
con alta demanda estudiantil. Estos cambios, junto con el Estos cambios se han desarrollado a lo largo de los
desplazamiento del núcleo de la disciplina hacia aproxi- últimos 30 años. Hoy, parecemos estar cerca de un pun- 25
maciones interpretativas y cuestiones de identidad, han to crítico, planteando preguntas acerca de la universidad
llevado a algunos a sugerir que el poder de las estructuras pública en sí misma como centro de compromiso crítico y
y de las restricciones materiales está siendo subestimado, científico. Las políticas actuales del gobierno parecen lle-
debilitando la capacidad de la sociología para responder var a la creación de nuevas universidades privadas y a una
coherentemente a los sucesos del presente. mayor intensificación de las presiones competitivas en un
sector educativo terciario ampliado.
Preguntas similares plantean las actuales agendas de
investigación de las universidades y el funcionamiento del Todo esto plantea preguntas difíciles tanto sobre el futu-
REF. La máquina demoledora del proceso de evaluación ro y el propósito de las universidades como sobre el lugar
y la necesidad de “cuatro productos de nivel 3*/4*” han de la sociología dentro de ellas. De manera significativa,
significado que los académicos opten cada vez más por los sociólogos han presentado una fuerte resistencia fren-
artículos de revista en lugar de monografías, y que acor- te a estos cambios, con John Holmwood como líder de un
ten el trabajo de campo para encajar en los requisitos del grupo que apunta a recuperar la universidad pública en
proceso de evaluación. Algunos académicos han ajustado el Reino Unido. Su propia agenda alternativa de políticas,
sus aspiraciones a este proceso, otros se están rindiendo. el Libro blanco alternativo de la Educación Superior, fue
Muchos se han referido a las consecuencias que esto tie- lanzada en junio en un importante encuentro en Londres.
ne para el trabajo etnográfico o para otras investigaciones Señala las amenazas planteadas a los estudiantes y a la
que requieren de contactos de largo plazo con las comu- investigación crítica por la penetración de proveedores con
nidades. En un plano más general, el “desempeño” de un fines de lucro en el sector de la educación superior, y con-
área particular en el REF puede reflejar y también afectar cluye con una cita de la Charta Magna Universitatum de
su posición y la forma en que es percibida dentro de cada 1988, firmada por 802 universidades de todo el mundo:
universidad. En este sentido, fue desconcertante notar el las universidades son “instituciones autónomas” que “de-
declive en el número de presentaciones con el rótulo “so- ben ser moral e intelectualmente independientes de toda
ciología” en el año 2014, con sólo 29 departamentos y autoridad política y poder económico” – un objetivo que se
704 investigadores (el mínimo histórico), en comparación vuelve más importante cuanto más retrocede.

Dirigir toda la correspondencia a Huw Beynon <beynonh@Cardiff.ac.uk>

DG VOL. 6 / # 3 / SEPTIEMBRE 2016


> Las “guerras de la sociología”
en Canadá
por Neil McLaughlin, Universidad de McMaster, Canadá, y Antony Puddephatt, Universidad
de Lakehead, Canadá

Broches que circularon luego de que el


Primer Ministro de Canadá, Stephen Harper,
declarara que no era tiempo de “perpetrar
sociología”. Se refería a la necesidad de
endurecerse frente a los terroristas en lugar
de estudiar las causas del terrorismo.

26
comienzos del siglo XXI, muchos académicos rie de respuestas críticas que lo cuestionaron sobre bases

A de larga trayectoria hicieron sonar la alarma


sobre el estado de la sociología canadiense.
Bruce Curtis y Lorna Weir sostuvieron que la
sociología canadiense anglófona sufría de un “débil sentido
de la sociología como oficio, con conocimientos y habilida-
normativas y empíricas.5 Si bien muchos de estos debates
ayudaron a contextualizar las realidades de la sociología ca-
nadiense, su tenor fue con frecuencia duro. En tanto los
sociólogos canadienses se están preparando para ser an-
fitriones del Congreso Mundial de la Asociación Internacio-
des distintivas, y vocación pública”; les preocupaba el futuro nal de Sociología (ISA) en Toronto, en 2018, reflexionamos
ante el inminente retiro de los sociólogos fundadores de la sobre algunas de las preocupaciones centrales que fueron
disciplina en Canadá.1 Robert Brym planteó preocupaciones planteadas, esperando poner en evidencia cuestiones que
sobre el descenso del número de miembros en la Asocia- pueden ser relevantes y útiles para otras sociologías nacio-
ción Canadiense de Sociología, así como inquietudes sobre nales, especialmente aquellas fuera de los Estados Unidos.
la salud general de la disciplina.2 Neil McLaughlin respondió
explorando algunos factores institucionales más amplios y Mucha de la preocupación sobre el estado de la socio-
advirtió sobre una “crisis en ciernes” en la sociología ca- logía canadiense se enfocó en el declive de la membresía
nadiense,3 esperando de este modo generar un momento y en la asistencia a los encuentros de nuestra asociación
reflexivo e iniciar un diálogo que pudiera promover estrate- nacional. Los encuentros de sociología canadiense en
gias institucionales más sabias y una visión intelectual más idioma inglés se realizan como parte de un Congreso de
amplia. La lluvia de respuestas a estos artículos, a menudo Ciencias Sociales y Humanidades, de carácter interdisci-
emocionales y polémicas, inició lo que llamamos las “gue- plinario, organizado en varias universidades alrededor del
rras de la sociología” en Canadá, que aún continúan fervo- país. Los encuentros de sociología canadiense sufrían de
rosamente una década después. baja asistencia, especialmente entre los principales aca-
démicos. ¿Era esto signo de un declive de la disciplina?
Pat O’Mally y Alan Hunt dieron algunos golpes iniciales, ar- Jean-Philippe Warren nos recordó que muchas otras aso-
gumentando que las preocupaciones de Curtis y Weir sobre ciaciones académicas nacionales e internacionales afron-
la debilidad de la disciplina eran equivalentes a una “caza taron descensos similares.6 Sobre base de la tesis de “jue-
de brujas”, que establecía estrictos estándares disciplinares go solitario” de Robert Putnam, sugirió que el ascenso de
para controlar a los sociólogos que se salieran de la raya.4 la tecnología de comunicación por internet habilitó la crea-
El artículo de McLaughlin sobre la “crisis” suscitó otra se- ción de redes académicas informales a lo largo de grandes

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DG VOL. 6 / # 3 / SEPTIEMBRE 2016
distancias geográficas, de modo tal que los académicos Por ser una disciplina relativamente nueva que sólo al-
podrían “sociologizar solos”, por fuera de los encuentros canzó su completa institucionalización en las décadas de
tradicionales organizados formalmente. 1960 y 1970, la sociología canadiense estuvo marcada
por un radicalismo de inspiración marxista, dado que las
Sin embargo, a principios de la década de 2000 había principales contrataciones de profesores tuvieron lugar du-
otros signos de debilidad, mientras la sociología continua- rante un período de conflicto social y político. Esta orien-
ba teniendo un bajo estatus tanto en la universidad como tación intensamente “crítica” de nuestra disciplina es do-
en la sociedad en general. Muchos de estos asuntos con- minante aún en el presente, y lleva a un gran compromiso
tinúan siendo importantes en la actualidad, y tal vez tam- político y con las políticas, para desagrado de los políticos
bién lo sean en otras sociologías nacionales, pero juegan conservadores. Por ejemplo, al rechazar los pedidos de
de una manera particular en Canadá, debido a nuestra más investigación sobre las causas del terrorismo con el
particular historia y nuestras diferentes relaciones con Es- fin de prevenirlo mejor, el ex Primer Ministro conservador
tados Unidos, Gran Bretaña y Francia. de Canadá, Stephen Harper, afirmó de manera infame que
“éste no es tiempo para hacer sociología”. Para los soció-
La preocupación frente a la hegemonía académica es- logos canadienses esta afirmación desafió el valor de la
tadounidense condujo a un movimiento de canadización investigación sociológica, lo que condujo a la Asociación
durante las décadas de 1970 y 1980, en la que los so- Canadiense de Sociología, en el año 2015, a vender ca-
ciólogos buscaron crear una sociología canadiense más misetas con la leyenda “Haz sociología” como una suerte
autónoma a través de un incremento de los contenidos de grito de guerra.
sobre Canadá y la contratación de profesionales formados
en el país. Sin embargo, este movimiento también inten- Este elemento crítico de larga data en la sociología cana-
sificó, indudablemente, los sentimientos negativos hacia diense creó un público receptivo para el llamado de Michael
la sociología estadounidense, incluyendo cierta pedantería Burawoy a una sociología pública.10 Varios sociólogos cana-
que nos permite tirar abajo a los Estados Unidos e ignorar dienses entraron en la conversación para apoyarlo, o para
nuestros propios defectos.7 reclamar que Burawoy no había ido suficientemente lejos
al presionar por una investigación orientada públicamen-
Aun así, hay razón para preocuparse por la debilidad te.11 Algunos canadienses rechazaron la idea misma de
de nuestro contenido nacional, un asunto que sin dudas sociología pública, enfatizando la importancia de un núcleo
también enfrentan los sociólogos en muchos otros paí- profesional. Scott Davis solicitó un “divorcio disciplinar” de 27
ses. Los sociólogos canadienses son cada vez más pro- una vez y para siempre, entre lo que él veía como verda-
pensos a recibir formación estadounidense y a apartarse deros científicos sociales, por un lado, y teóricos críticos
de modelos de referencia canadienses, como John Porter dogmáticos, por el otro.12 Las feministas canadienses argu-
o Wallace Clement, en favor de teóricos más conocidos mentaron que la propuesta de Burawoy dejaba de lado las
mundialmente.8 Lo que solía ser una tradición canadiense potenciales colaboraciones apoyadas por privados o por el
distintiva se está diluyendo crecientemente para convertir- estado que podrían ayudarnos a trabajar con el público para
se en otro participante más de la disciplina global (léase: resolver importantes problemas sociales.13
estadounidense y eurocéntrica).
Y de hecho, a medida que nos desplazamos desde la
Ralph Matthews ha hecho un esfuerzo por recuperar una agenda fuertemente conservadora del gobierno de Harper
tradición típicamente canadiense retomando la “teoría del hacia el liberalismo de Justin Trudeau, el potencial de una
crecimiento basado en exportaciones” [staples theory] mayor acción federal para enfrentar problemas públicos
de Harold Innis,9 un importante teórico pionero en el es- – especialmente aquellos que afectan a los pueblos origi-
tudio de la sociedad canadiense que argumentó que el narios – es evidente. Los sociólogos pueden esperar una
desarrollo geográfico de las ciudades de Canadá estuvo sociología pública robusta en Canadá, que permanezca en
fuertemente vinculado a las rutas de comercio de nuestra colaboración crítica y continuo diálogo con el estado.
economía de recursos naturales, lo que dio lugar a regio-
nes geográficas muy diferentes y con marcas culturales Mientras continúan en la actualidad las guerras de la
diversas. Ampliando este marco con nuevas preocupacio- sociología, las preocupaciones tempranas sobre el estatus
nes contemporáneas sobre la industria de combustibles de la disciplina siguen teniendo prominencia. William Ca-
fósiles, las protecciones para nuestro ambiente natural y rroll ha argumentado recientemente que junto con todas
los derechos de los pueblos originarios, podemos adquirir las otras ciencias sociales, la sociología debería dar paso
conocimiento sobre nuestra especificidad, como nación a un nexo transdisciplinario unido por el realismo crítico.14
y como tradición sociológica. Incluso aquello que podría El hecho de que este trabajo haya recibido el premio al
parecer “único” de Canadá también podría ser útil como mejor artículo del Canadian Review of Sociology en 2015
punto de comparación valioso para otros países que en- refleja corrientes culturales subyacentes, ya que muchos
frentan las mismas fuerzas globalizadoras que interactúan sociólogos en Canadá prefieren rechazar su identidad y
con cuestiones y contextos locales. compromisos disciplinarios.

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Esto plantea un serio obstáculo para aquellos que buscan acento en la descolonización y la reconciliación con las
formatos académicos relativamente abiertos, pero que no comunidades de los pueblos originarios abarca un número
están dispuestos a ceder ventajas disciplinarias. Muchos de cuestiones en las que los sociólogos públicos son im-
argumentarían que las mejores producciones académicas portantes y necesarios.
recientes echan por tierra las declamaciones populares que
aseguran que las disciplinas sólo actúan como silos inte- La Asociación Canadiense de Sociología espera recibir a
lectuales: en realidad, ellas comparten conocimiento con sociólogos de todo el mundo en el Congreso Mundial de la
una eficiencia destacable.15 De todos modos, la gastada ISA en Toronto, en 2018. Esperamos continuar el diálogo
retórica de las disciplinas como silos, cuya única función sobre cómo entender y reflexionar mejor sobre nuestras
sería “controlar” los intelectuales, muestra su carácter re- diversas sociologías nacionales, aprendiendo de las otras
trógrado.16 Y aunque las disciplinas puedan en efecto so- dentro de un contexto comparativo más amplio.
focar la producción de conocimiento, no podemos ignorar
la evidencia que sugiere que, a fin de cuentas, hacen mu- Dirigir toda la correspondencia a Neil McLaughlin <ngmclaughlin@gmail.com>
cho para potenciarla. Más que forzar una elección entre el
1
Curtis, B. y Weir, L. (2002) “The Succession Question in English Canadian Sociolo-
aislamiento disciplinar (lo cual es exagerado) y una total gy.” Society/Société, 26, 3.
transdisciplinariedad (lo cual es utópico), quizá sería mejor 2
Brym, R. (2003) “The Decline of the Canadian Sociology and Anthropology Associa-
trabajar entre estos dos ideales, reconociendo soluciones tion.” Canadian Journal of Sociology, 28(3): 411-416.
intermedias y evitando las desventajas de cada extremo.17 3
McLaughlin, N. (2005) “Canada’s Impossible Science: Historical and Institutional
Origins of the Coming Crisis in Anglo-Canadian Sociology.” Canadian Journal of So-
Mientras que las reflexiones sobre la disciplina pue- ciology, 30(1): 1-40.

den ser útiles, también pueden degenerar en argumentos 4


O’Malley, P. and Hunt, A. (2013) “Does Sociology Need to be Disciplined?” Society/
Société, 27(1).
retóricos y sesgados ideológicamente, distrayendo de la
5
tarea más importante de “hacer” una sociología empírica Véase volúmenes 30(4) y 31(1) del Canadian Journal of Sociology para los co-
mentarios principales sobre el artículo de McLaughlin acerca de la “crisis” y su
real. Sin embargo, un cuerpo académico nutre la textura respuesta (2005-06).
de la sociología canadiense de percepciones empíricas e 6
Warren, J-P (2006) “Sociologizing Alone? Is Anglo-Canadian Sociology really Facing
históricas. Rick Helmes-Hayes ha documentado reciente- a Crisis?” Canadian Journal of Sociology, 31(3): 91-105.
mente las raíces de la sociología canadiense dentro de la 7
Cormier, J. (2002) “Nationalism, Activism, and Canadian Sociology.” The American
teología de principios de siglo XX,18 y Bruce Curtis ha ido Sociologist, 33(1): 12-41.

aún más atrás, vinculando el desarrollo de la ciencia social 8


Warren, J-P (2014) “The end of National Sociological Traditions? The Fates of Socio- 28
logy in English Canada and French Quebec in a Globalized Field of Science.” Interna-
con la “construcción del estado” en el siglo XIX.19 Nue- tional Journal of Canadian Studies, 50: 87-108.
vos estudios cuantitativos documentan los patrones cam- 9
Matthews, R. (2014) “Committing Canadian Sociology: Developing a Canadian So-
biantes de nuestras prácticas de contratación domésticas ciology and a Sociology of Canada.” Canadian Review of Sociology, 51(2): 107-127.
y extranjeras, así como de nuestro trabajo,20 ilustrando 10
Burawoy, M. (2005) “2004 Presidential Address: For Public Sociology.” American
nuestra maravillosa diversidad epistemológica21 y los cam- Sociological Review, 70: 4-28.
bios en el tiempo de nuestras escuelas de pensamiento 11
Véase un número especial al respecto, editado por Rick Helmes-Hayes y Neil
teórico. Durante la década pasada parece haber habido McLaughlin (2009) “Public Sociology in Canada: Debates, Research, and Historical
Context.” Canadian Journal of Sociology, 34(3): 573-600.
una convergencia teórica en torno de la obra de Pierre
12
Bourdieu, un teórico e investigador que ayuda a tender Davies, S. (2009) “Drifting Apart? The Institutional Dynamics awaiting Public Socio-
logy in Canada.” Canadian Journal of Sociology, 34(3): 623-654.
puentes entre nuestras alas inglesa y francesa.22 Si mira-
13
Creese, G., McLaren, A. y Pulkingham, J. (2009) “Re-thinking Burawoy: Reflections
mos hacia el futuro, los debates fundados empíricamente from Canadian Feminist Sociology.” Canadian Journal of Sociology, 34(3): 601-622.
son bienvenidos como una “sociología de la sociología”, 14
Carroll, W. (2013)“Discipline, Field, Nexus: Re-visioning Sociology.” Canadian Re-
que conduce a formas de reflexividad institucional menos view of Sociology, 50(1): 1-26.
narcisistas y más fundadas empíricamente. 15
Jacobs, J. (2013) In Defense of Disciplines. Chicago, IL: University of Chicago Press.
16
Curtis, B. (2016) “The Missing Memory of Canadian Sociology: Reflexive Gover-
Si bien las “guerras de la sociología” canadienses han nment and the Social Science.” Canadian Review of Sociology, 53(2): 203-225.
sido polémicas e hirieron algunos egos, en general han 17
Puddephatt, A. y McLaughlin, N. (2015) “Critical Nexus or Pluralist Discipline? Ins-
sido constructivas. Los académicos consolidados han titutional Ambivalence and the Future of Canadian Sociology.” Canadian Review of
Sociology, 52(3): 310-332.
vuelto al redil, ayudando a socializar en una visión positiva
18
una nueva generación de sociólogos. La asistencia a nues- Helmes-Hayes, R. (2016) “Building the New Jerusalem in Canada’s Green and
Pleasant Land: The Social Gospel and the Roots of English-Language Academic So-
tros encuentros ha aumentado, estimulada por la creación ciology in Canada, 1889-1921.” Canadian Journal of Sociology, 41(1): 1-52.
de grupos de investigación inspirados, en parte, por la ISA. 19
Curtis, B. (2016), ibid.
Hay más sesiones en francés en nuestros encuentros, y 20
Warren, J-P (2014), ibid.
el editor del Canadian Review of Sociology, Dr. François
21
Véase Joseph Michalski, “The Epistemological Diversity of Canadian Sociology.”
Dépelteau, es francófono. La asociación puede jactarse Forthcoming in Canadian Journal of Sociology.
de una revitalizada sociología feminista, en gran parte ins- 22
Stokes, A. y McLevey, J. (2016) “From Porter to Bourdieu: The Evolving Specialist
pirada por Dorothy Smith y las feministas socialistas cana- Structure of English Canadian Sociology.” Canadian Review of Sociology, 53(2):
dienses. Además, una nueva agenda de investigación con 176-202.

DG VOL. 6 / # 3 / SEPTIEMBRE 2016


EN MEMORIA

> Recordando a
John Urry
y su obra
uando se ha conocido a al-

C guien por largo tiempo es di-


fícil separar a la persona de
su obra, y probablemente sea mejor
no intentarlo. John Urry colaboró con
la ciencia social no sólo publicando,
sino a través de su ejemplo, median-
te su forma de ser un académico.

Demostró que para ser un docente o


investigador efectivo no es necesario
dominar, o cultivar una imagen públi-
ca “sobresaliente” o un estilo de es- 29
critura complicado. Estaba totalmen-
te libre de preocupación o afectación
por el estatus; sus modos relajados y
amistosos escondían una mente agu-
da y crítica y un extraordinario gusto
por el trabajo. Estaba más interesa-
do en construir que en destruir; era
crítico sin ser jamás cruel: podía di-
sentir de una forma agradable y era
siempre directo, en sus escritos y con
los otros. Era particularmente bueno
alentando y atrayendo jóvenes inves-
tigadores tanto a unírsele en su viaje
intelectual como a tomar direcciones
nuevas propias.

John amaba aprender, tenía un evi-


dente placer intelectual en abrir la so-
ciología a nuevos temas y formas de
pensamiento – tanto fuese espacio,
tiempo, capitalismo desorganizado,
turismo, naturaleza, movilidad, cam-
John Urry. bio climático, o cosas más específi-
cas como las consecuencias sociales
de las impresiones 3D. No le intere-
saba la devoción por los fundadores
de la sociología, pero estaba abierto
a cualquier concepto teórico que ilu-
>>
DG VOL. 6 / # 3 / SEPTIEMBRE 2016
EN MEMORIA

minara los temas particulares que le uno de los que se comprometió con En sus últimos cinco años publicó
preocupaban, sin importar su origen. él de un modo abierto y fructífero, – ¡entre otras cosas! – tres libros que
Tenía ojo para los desarrollos sociales no dogmático. En ese entonces, la exploran un conjunto de problemas
que otros sociólogos, más atados a Conferencia de Economistas Socia- relacionados con el cambio climático,
las agendas convencionales, se per- listas (CSE, por su sigla en inglés) los recursos y la sociedad: Climate
dían – sea turismo, movilidad u “offs- proveía un foco para la discusión y Change and Society [Cambio climáti-
horing”. Para él, la teoría social debía la investigación radical de una amplia co y sociedad], Societies Beyond Oil
ser usada y mejorada a través de su gama de temas, con talleres regula- [Sociedades más allá del petróleo], y
aplicación a nuevos temas. res de fin de semana que atraían a Offshoring. Como señala Scott Lash,
investigadores y activistas de todo el John estuvo siempre particularmente
No puedo siquiera comenzar a ana- país. Fue en uno de estos – el Gru- interesado en el futuro social y, más
lizar la gama de sus contribuciones po CSE sobre Regionalismo – donde recientemente, ayudó a establecer el
en este corto escrito, por lo que sólo encontré a John por primera vez. El nuevo Instituto sobre Futuros Socia-
comentaré dos períodos – uno tem- “Grupo de Lancaster sobre Regiona- les en la Universidad de Lancaster.
prano en su carrera, el otro hacia el lismo” era uno de los varios grupos
final. Di con su trabajo por primera vez de investigación en el Reino Unido El cambio climático es sin duda el
a mediados de la década de 1970, que recurría a la teoría radical para desafío más grande que enfrenta la
cuando nuestros intereses en el rea- investigar qué es lo que estaba suce- sociedad humana. A pesar de que
lismo crítico, la economía política y la diendo en lugares particulares. Estos muchos volúmenes recientes sobre
teoría y espacio social coincidieron. “estudios de localidad” se llevaron a el futuro del capitalismo y de la so-
Como muchos otros provenientes de cabo en contraste con debates en ciedad escasamente mencionan el
la geografía humana, yo buscaba ca- curso sobre cómo estaba cambiando calentamiento global, John fue uno
minos para involucrarme con la teo- el capitalismo, muchos de los cuales de los primeros científicos sociales en
ría social. John venía en la dirección caracterizaban la nueva etapa como reconocer la importancia de los com-
contraria, haciendo propuestas a la “post-fordista”. Mientras que aho- bustibles fósiles en el desarrollo de la
geografía. Social Relations and Spa- ra podemos ver que esto último era modernidad y en reflexionar sobre las
tial Structures [Relaciones sociales y una distracción con respecto a desa- implicancias del cambio climático en
estructuras espaciales], de Gregory y rrollos más importantes de financia- la vida cotidiana. Mientras la mayoría
Urry, exploró las implicancias sociales rización y neoliberalismo, John y su de nosotros conduce su investigación 30
de este encuentro, y más adelante colega Scott Lash combinaron inves- mirando en el espejo retrovisor, es-
en su carrera – particularmente en tigación empírica y teórica para pro- tudiando el pasado, John también
su trabajo sobre localidades, movi- ducir visiones de conjunto diferentes miraba hacia adelante. Otros mundos
lidades y offshoring – John continuó y originales sobre las cambiantes – mejores o peores – son posibles, y
repensando la relación entre espacio caras del capitalismo en The End of como él demostró, los científicos so-
y sociedad. Organized Capitalism [El fin del capi- ciales pueden y deben sopesarlos y
talismo organizado] y Economies of evaluarlos. En estos tiempos peligro-
A fines de la década de 1970 y Signs and Space [publicado en cas- sos, es mi deseo que muchos más
principios de la de 1980, mucha de tellano con el título Economías de los sigan el ejemplo que él dejó.
la ciencia social británica se vio radi- signos y el espacio: sobre el capita-
calizada por el marxismo, y John fue lismo de la posorganización, 1998].

Andrew Sayer, Universidad de Lancaster, Reino Unido

DG VOL. 6 / # 3 / SEPTIEMBRE 2016


EN MEMORIA

> John Urry,


sociólogo del futuro
Encuentro de directores del Instituto sobre
Futuros Sociales, Lancaster, 2015.

ohn Urry, recientemente revoluciones, con su dimensión es- experiencia empírica cotidiana, sino 31

J fallecido, publicó alrededor


de veinte libros, muchos de
ellos muy influyentes, y fue
uno de los sociólogos más citados
del Reino Unido. Luego de graduar-
catológica, en algún sentido están
siempre en el futuro; Hobbes tiene
mucho que ver con el poder estatal.
Tal vez estas influencias – las revolu-
ciones y el estado – le dieron a John
que dirigían el cambio social y abrían
terreno para las relaciones sociales
del futuro.

The End of Organized Capitalism y


se de la Universidad de Cambridge, cierta sensibilidad hacia las realida- Economies of Signs and Space reci-
John hizo toda su carrera en la Uni- des del poder estatal. bieron buenas críticas y fueron muy
versidad de Lancaster, donde fuimos citados, influenciando a (y siendo in-
colegas entre 1977 y 1998. Juntos En 1975 John y Russel Keat escri- fluenciados por) David Harvey y Ma-
escribimos dos libros, The End of Or- bieron Social Theory as Science [La nuel Castells. The End of Organized
ganized Capitalism (1987) [El fin del teoría social como ciencia], un libro Capitalism discute la acumulación de
capitalismo organizado] y Economies que aborda la epistemología socioló- capital, pero argumenta que la nueva
of Signs and Space (1994) [publica- gica en el marco de un cierto “realis- fase del capitalismo ya no está gober-
do en castellano con el título Econo- mo”. Lo real no era lo que los agen- nada por la organización social e ins-
mías de los signos y el espacio: sobre tes sociales percibían sino profundas titucional, sino por la fragmentación
el capitalismo de la posorganización, estructuras que determinaban las social. John y yo llegamos a este ar-
1998]. Ambos libros le hablaban al relaciones sociales empíricas. Se gumento desde perspectivas en parte
futuro; en muchos sentidos, John fue trataba de un estructuralismo socio- diferentes.
un futurólogo. lógico influenciado por el marxismo
estructuralista de Louis Althusser de Yo arribé a la desorganización ca-
Como estudiantes de doctorado, la década de 1970. Pero mientras pitalista desde la perspectiva de la
John y Bob Jessop asistieron al se- el marxismo estructuralista siempre disolución de las negociaciones co-
minario que John Dunn dictaba en estaba determinado por la base eco- lectivas centralizadas (de sindicatos
Cambridge sobre las revoluciones, nómica, el de Urry era un conjunto y federaciones patronales). John en-
un seminario influenciado también mucho más amplio de estructuras tendía la fase post-1980 del capita-
por Quentin Skinner, tal vez el más sociales e incluía causas estructu- lismo más bien en términos de movi-
conocido estudioso de Hobbes. Las rales que no sólo determinaban la miento y flujo, así como de tiempo,

>>
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EN MEMORIA

ya no orientados hacia el pasado o Esto fue un antecedente de una so- de “pasivos” – un cambio que coin-
el presente, sino hacia el futuro. Así, ciología mucho más completa de los cidió con un marcado giro político de
el libro incluyó los capítulos de John flujos globales en la que John y yo tra- John hacia la izquierda. Yo siempre
sobre el tiempo y el movimiento turís- bajamos en Economies of Signs and había estado a la izquierda de John,
tico de las personas – un argumento Space. Castells ya había empezado pero desde 2010 él se convirtió en
que luego se desplegaría en un libro a señalar un cambio desde la socie- el más severo crítico del capitalismo,
entero, The Tourist Gaze [La mirada dad de estructuras hacia una nueva por ejemplo, en su reciente libro Offs-
del turista] que en cierto sentido fun- sociedad de “flujos” globalizada que horing. Recuerdo una conferencia del
dó la sociología del turismo. involucra toda una diversidad de flu- Consejo de Investigaciones del Rei-
jos: de capital, de movilidad laboral, no Unido realizada en Shanghái, en
A fines de la década de 1980 John de commodities y bienes, de conta- la que actué como copresentador, a
editó Social Relations and Spatial minación o “pasivos” ambientales, de la que fueron invitados sociólogos y
Structures [Relaciones sociales y información y comunicación. varios economistas. Estaba presen-
estructuras espaciales] con Derek te un eminente economista francés,
Gregory. La figura clave en este pro- John desarrolló esto en una “socio- más bien neoliberal e incluso escép-
yecto era Doreen Massey y su idea logía de las movilidades”, que se con- tico sobre el cambio climático, al que
de “restructuración”, incluyendo la virtió en una columna vertebral de su John, con ya casi 65 años, enfrentó
transformación de “cadenas de va- investigación y escritura desde fines con la pasión de un joven de 25.
lor”. Una cadena de valor podía ras- de la década de 1990 hasta el final.
trear el origen de un commodity, por Estaba particularmente interesado en John fue un sociólogo del futuro.
decir, materias primas de América cómo los seres humanos fluían de un Lo conocí cuando ambos teníamos
del Sur, seguir su transformación en lugar a otro, en el turismo. Pero cada cerca de 30 años; fuimos colegas los
fábricas de, por ejemplo, México, y uno de sus libros sobre movilidades siguientes 21 años y amigos cercanos
su mercadeo y distribución en Euro- también incluyó un capítulo convin- por siempre. Sylvia Walby, la compa-
pa o Estados Unidos. Estas cadenas cente, y de lectura obligatoria, sobre ñera de John durante todos aquellos
de valor se estaban “alargando”, co- “automovilidades”. En ellos podemos años, dijo que él me veía como una
nectando lugares cada vez más dis- ver el mundo desde el prisma de un suerte de inteligencia instintiva, cuyas
tantes en el tiempo y el espacio. Nos auto, entendido tecnológicamente. energías estaban siempre a punto de
daban ejemplos empíricos de lo que salirse de control. Le debo a John la 32
Giddens llamó “distanciamiento del John escribió una serie de libros deuda impagable de haber puesto
espacio-tiempo” y Harvey “compre- sobre el cambio climático, retornando algo de estructura en esta energía sal-
sión del espacio-tiempo”. al tema de las movilidades, o flujos, vaje. Lo extraño. Lo extrañaremos.

Scott Lash, Goldsmiths, Universidad de Londres, Reino Unido

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EN MEMORIA

> John Urry,


más que un sociólogo de
sociólogos
Conferencia sobre innovación baja en
carbono. Shenzhen, China, 2016.

a inesperada muerte de John Urry conmocionó y Directores del Grupo de Sociología (1989-92), involu-

L a familiares, amigos y colegas. Él y yo entabla-


mos un primer vínculo siendo estudiantes de
posgrado en la Universidad de Cambridge, entre
1967 y 1970. Compartíamos intereses y supervisores, y
de ahí en más interactuamos en la Conferencia de Econo-
crándose fuertemente en la defensa de las ciencias so-
ciales contra arremetidas similares; en 1999 colaboró en
la fundación de la Academia Nacional de Académicos,
Sociedades Académicas y Profesionales de las Ciencias
Sociales del Reino Unido (luego renombrada como Aca-
33

mistas Socialistas y en cónclaves sociológicos. Volvimos demia de Ciencias Sociales).


a ser colegas en 1990, cuando fui designado al frente de
una cátedra de sociología en la Universidad de Lancaster. En 1970, antes de completar su doctorado, John co-
menzó a enseñar sociología en Lancaster. Durante 46
John Urry obtuvo una doble titulación en Economía y años de servicio ininterrumpido contribuyó mucho a la
Política en el Christs’ College de Cambridge, donde fue sólida y a la vez flexible cultura de investigación del de-
supervisado, entre otros, por James Meade, un econo- partamento, a través de su propia obra y de la cons-
mista posteriormente reconocido con el Premio Nobel. trucción institucional en toda la universidad. Desde los
En esos años el trabajo de John Maynard Keynes todavía excitantes días de expansión del “vapor blanco de la re-
era tenido seriamente en cuenta en Cambridge y la eco- volución tecnológica” y de la influencia del pensamiento
nomía heterodoxa aún ocupaba un lugar en la economía de izquierda durante la década de 1970, las universi-
política. John se embarcó luego en un doctorado en la dades han cambiado muchísimo y las demandas hacia
Facultad de Economía y Política (en aquel momento no académicos y profesores se han incrementado enorme-
había una Facultad de Ciencias Sociales y Políticas en mente. Sin embargo, John siempre mantuvo su amor
Cambridge) con el tema de las carencias relativas y la por el aprendizaje, su curiosidad por el cambio social,
revolución, financiado por una beca del Consejo Británico su evidente placer al explorar nuevos temas y formas de
de Investigación en Ciencias Sociales. Esto fue antes de pensamiento – ya se tratara del poder, la teoría social,
que Sir Keith Joseph, el extremista Secretario de Esta- el espacio, el tiempo, lo local y lo regional, el capita-
do para la Educación y la Ciencia de la Sra. Thatcher, lismo desorganizado, el ocio y el turismo, la naturaleza
se resintiera por el menosprecio de los sociólogos hacia y el medio ambiente, el uso de la energía y el cambio
su teoría de los ciclos de privación cultural de la pobre- climático, el diseño urbano, las implicaciones sociales
za familiar, negara el carácter científico de la sociología de la impresión 3D y, más recientemente, los futuros
y propusiera rebautizar el consejo como Consejo de In- presentes y los futuros futuros. Muchos de estos intere-
vestigación Económica y Social. Algunos años más tarde ses convergieron en sus esfuerzos por fundar el Instituto
John se desempeñó como Presidente de los Profesores sobre Futuros Sociales de Lancaster.
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EN MEMORIA

En sus contribuciones a esta celebración de la vida de de redes personales y oportunas intervenciones en deba-
John, Scott Lash y Andrew Sayer describieron algunas de tes emergentes.
sus obras más inspiradoras. Mi favorita es Social Theory as
Science [La teoría social como ciencia], escrita en coau- John fue un “sociólogo de sociólogos” que conocía y
toría con Russell Keat (1975, reeditada en 2015), una respetaba el oficio pero también aspiraba a desarrollarlo.
obra rigurosa y comprensiva que consolidó su trayectoria Fue reconocido por sus innovaciones de punta tanto como
teórica hasta aquel momento e inspiró mi propio trabajo por su firme promoción y defensa de la disciplina frente
en la filosofía de las ciencias sociales. No obstante, siem- a las arremetidas de los políticos. Pero también fue un
pre interesado en estar al día con los cambiantes debates espíritu intelectual incansable – la antítesis de un profe-
teóricos y sustantivos, John realizaba lecturas variadas y sional de carrera que limita su interés a un único proyecto
las interrogaba por su valor intelectual agregado, los ha- sustantivo enmarcado en una perspectiva restringida de la
llazgos que podrían generar, las anomalías o novedades disciplina. Su curiosidad sin límites lo llevó a una vida en
que revelaban y hacia dónde podrían conducir. Sus inte- permanente movimiento, relacionando campos diversos y
reses abarcaban un amplio abanico, incluían vínculos con dando impulso a nuevas iniciativas de investigación y de-
las ciencias naturales y ambientales, y reflejaban el fuerte bates políticos. En efecto, John trabajó en las fronteras de
enfoque “post-disciplinar” característico del departamento los campos teóricos, empíricos y aplicados de las ciencias
de sociología de Lancaster. Esto fue clave en su habilidad sociales, reflejando las tendencias sociales y dando forma
para mediar entre disciplinas, paradigmas y comunidades a trabajos innovadores. Es impresionante lo mucho que
epistémicas, vincularse de forma democrática y no dog- consiguió: en su propia obra, en colaboración con otros,
mática con tantos investigadores y estudiantes, estimular- en el desarrollo de redes internacionales, en la dirección
los para que siguieran sus propios intereses y proyectos, de investigaciones, en el manejo de la interminable su-
ofrecerles ideas y perspectivas provenientes de su enorme cesión de evaluaciones y en la promoción de las ciencias
capital intelectual, que a su vez se renovaba y expandía a sociales. Igualmente sorprendente es que haya consegui-
través de estas interacciones. do todo esto sin perder nunca su forma de ser relajada,
generosa, accesible y bien humorada.
Hay muchas formas de convertirse en un sociólogo dis-
tinguido y perdurar como tal. John alcanzó la excelencia en John tuvo también una mente heroica: creía, como C.
la mayoría de ellas. Pero nunca buscó la fama por medio Wright Mills (autor del clásico La imaginación sociológica,
de la obsecuencia con el poder o sacrificando su integridad de 1959), que era más importante decir algo significativo 34
intelectual. Tenía una forma reconfortantemente “local” en corriendo el riesgo de estar equivocado que estar siempre
sus lealtades y compromisos críticos, y siempre brindaba en lo correcto, a costa de repetir una verdad trivial. En los
su apoyo entusiasta a estudiantes y colegas. Al mismo últimos años se había vuelto más activo como intelectual
tiempo, siguiendo con la distinción de Alvin Gouldner entre público, interviniendo en debates y tomando posición en
identidades organizacionales, era firmemente “cosmopo- cuestiones cruciales para el futuro de la humanidad y del
lita”, con una presencia intelectual de escala global. Sus planeta. Pero por sobre todo fue un gran colega y su in-
intereses y proyectos abarcaban los mundos naturales y fluencia sobrevivirá a través del trabajo y los debates de
sociales, y su influencia se extendía globalmente a través aquellos a quienes inspiró.

Bob Jessop, Universidad de Lancaster, Reino Unido

DG VOL. 6 / # 3 / SEPTIEMBRE 2016


EN MEMORIA

> Sobre
proximidades
y movilidades
Conmemorando a John Urry
Conferencia sobre “Ciudades del futuro:
¿inteligentes o felices?”, Lancaster, 2016.

35

l sociólogo británico John su pensamiento respecto al espacio y tes, llevamos a cabo la conferencia

E Urry falleció, lamentable-


mente, el pasado marzo,
justo cuando celebrába-
mos la publicación de nuestro artí-
culo escrito en coautoría “Mobilizing
la movilidad, y sobre su relación con
la sociología como una disciplina.

Me incorporé al Departamento de
Sociología de la Universidad de Lan-
inaugural Futuros de Movilidad Alter-
nativa; fundamos la revista Mobilities
junto con Kevin Hannam; coeditamos
un número especial de Environment
and Planning A sobre “materialidades
the New Mobilities Paradigm” [Movili- caster en 1998, en parte porque y movilidades”, y coeditamos Mobile
zando el nuevo paradigma de la mo- John estaba allí. Gracias a su habili- Technologies of the City [Tecnologías
vilidad] en la revista Applied Mobili- dad para crear un ambiente colabora- móviles de la ciudad]. En esta ava-
ties, en el cual evaluamos el impacto tivo y transdisciplinario exitoso, John lancha de trabajo fundacional hubo
del paradigma de la movilidad en las atrajo docenas de estudiantes de un fuerte énfasis en pensar a lo largo
ciencias sociales en la última década. posgrado, estudiantes posdoctora- de escalas espaciales, desdibujando
Estábamos también en medio de la les, investigadores invitados y nuevos las fronteras disciplinares, exploran-
escritura de un artículo conjunto para profesores al noroeste de Inglaterra. do materialidades y temporalidades,
Current Sociology sobre la relación Luego de trabajar juntos en varios ar- moviéndonos más allá de marcos na-
entre el “giro de las movilidades” y el tículos relacionados con la movilidad, cionales y societales “sedentarios”, y
“giro espacial”; me siento afortunada cofundamos el Centro de Investiga- explorando hasta qué punto las “mo-
de haber tenido la oportunidad de ha- ción sobre Movilidades en Lancaster vilidades” podrían proveer una visión
blar con John sobre los orígenes de en 2003; durante los años siguien- para un tipo diferente de ciencia so-
>>
DG VOL. 6 / # 3 / SEPTIEMBRE 2016
EN MEMORIA

cial: más abierta, más amplia, más dades capitalistas] fueron también ranza para una ciencia social crítica,
vital, en mayor sintonía con otros importantes contribuciones teóricas comprometida y post-disciplinaria.
campos. y sentaron las bases de su trabajo
futuro. Para mediados de la década A pesar de la aparente arrogancia
Estoy muy agradecida por nues- de 1990 las teorizaciones sobre los de anunciar algo como “nuevo para-
tra conversación reciente, en la cual espacios de “flujo” y “red” se volvie- digma”, John era personalmente muy
John rastreó los orígenes de su inte- ron especialmente significativas con humilde y modesto, por lo que jamás
rés por la movilidad, ubicándolos en la trilogía de Castell, de 1996, sobre proclamaba sus propios logros. La
el giro espacial en la teoría social, la sociedad red; y hacia el cambio de postura personal de John era comple-
comenzando con el libro de Lefebvre milenio “movilidad” había emergido tamente anti-elitista y anti-neoliberal,
de 1974, La production de l’espace como un término clave. Sociology Be- como se evidenciaba materialmente
[publicado en castellano con el título yond Societies [La sociología más allá en sus acciones cotidianas y simbó-
La producción del espacio, 2013], y de las sociedades], de Urry, ayudó a licamente en su siempre monocro-
en los debates británicos generados consolidar la atención puesta en las mático uniforme de trabajo: usual-
por otra gran pensadora que lamen- movilidades como un concepto cla- mente una camisa de algodón azul,
tablemente hemos también perdi- ve dentro de una emergente ciencia saco y pantalón azules, siempre con
do recientemente, Doreen Massey. social espacial, o “sociología móvil” el cuello abierto y sin corbata. Era
Su Spatial Divisions of Labour [Di- – un enfoque que se ha vuelto cre- un igualitarista de pies a cabeza, sin
visiones espaciales del trabajo], de cientemente influyente en los últimos paciencia para las pretensiones, las
1984, examinó los complejos y va- quince años, al menos fuera de los jerarquías o la búsqueda de estatus.
riados movimientos del capital dentro Estados Unidos. Recibía a estudiantes y visitantes de
y fuera del lugar y las consecuentes todo el mundo con una sonrisa con-
formas de sedimentación dentro de Este paso al énfasis sobre la mo- tagiosa, y siempre hacía lugar para
cada lugar. Este libro fue seguido en vilidad coincidió con la fundación de todos en la mesa.
1985 por Social Relations and Spa- las revistas Environment and Planning
tial Structures [Relaciones sociales y D: Society and Space y Theory, Cultu- John Urry creó un nuevo tipo de
estructuras espaciales], de Gregory re and Society, junto con Polity Press, sociología móvil: una que va más
y Urry, que aunó las contribuciones a comienzos de la década de 1980. allá de las disciplinas, habilita nue-
geográficas y sociológicas de Harvey, John describió estas publicaciones vos tipos de formación intelectual y 36
Giddens, Massey, Pred, Sayer, Sija y como parte de un esfuerzo por desa- le permite renovar su relevancia en
Thrift. Esta colección dio cuenta del rrollar una ciencia social y una teoría todo el mundo en la medida que se
cambio de John hacia lo que llamó social post-disciplinarias en respuesta ocupa de cuestiones públicas crucia-
“los ociosos movimientos de gente a los ataques del gobierno de Thatcher les – incluyendo su más reciente obra
dentro y fuera de los lugares”, desa- a las universidades y, especialmente, sobre cambio climático, extracción
rrollados más a fondo en The Tourist a los recortes en los programas univer- de recursos y economías oscuras. El
Gaze (1990) [La mirada del turista], sitarios de ciencias sociales. nuevo paradigma de la movilidad y
así como las múltiples movilidades el extenso cuerpo de trabajo de Urry
y sus consecuencias espaciales, John también describió su trabajo continúan marcando un contraste
discutidas en The End of Organized como opuesto a la ciencia social es- con respecto a las tradiciones cuan-
Capitalism (1987) [El fin del capi- tadounidense y al “empirismo británi- titativas y empiristas de las ciencias
talismo organizado] y Economies of co”. Desde mi perspectiva, los con- sociales británicas y norteamerica-
Signs and Space (1994) [publicado tornos anti-positivistas y críticos de la nas, al mismo tiempo que luchan
en castellano con el título Economía obra de John Urry ayudan a explicar contra las jerarquías de los departa-
de signo y espacio. Sobre el capita- la aparente reticencia de la Asocia- mentos académicos, los organismos
lismo de la posorganización, 1998]. ción Americana de Sociología, y de profesionales y la clausura discipli-
Los libros anteriores de John, Social muchos departamentos de sociología naria de la universidad neoliberal. La
Theory as Science (1975, con Russell tradicionales de los Estados Unidos, sociología haría bien en continuar los
Keat) [La teoría social como ciencia] a involucrarse con el nuevo paradig- cambios que él ha iniciado.
y The Anatomy of Capitalist Societies ma de la movilidad – un paradigma
(1981) [La anatomía de las socie- que considero como una luz de espe-

Mimi Sheller, Universidad Drexel, EE.UU.

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> Campañas
estudiantiles contra
la violencia sexual
por Ana Vidu, Universidad de Barcelona, miembro
del Comité de Investigación de la ISA sobre Economía
y Sociedad (RC02) y Tinka Schubert, Universidad
Loyola Andalucía, miembro del Comité de Investi-
gación de la ISA sobre Mujeres y Sociedad (RC32)1

37

Ilustración por Arbu.


ace tiempo que la Universidad de California

H en Berkeley ocupa un lugar central en los


debates sobre el acoso y los abusos sexua-
les en los campus, no por tener un número
inusual de incidentes, sino por la respuesta que les ha
dado. Desafortunadamente, se trata de un problema muy
extendido en la mayoría de las universidades. Entre las
muchas instituciones que enfrentan la cuestión, UC Ber-
keley es conocida por su extraordinaria movilización es-
tudiantil contra el acoso sexual, un movimiento que ha
comenzado a replicarse en otros campus.

>>
DG VOL. 6 / # 3 / SEPTIEMBRE 2016
UC Berkeley tiene una tradición pionera de protestas a renunciar en respuesta a denuncias de acoso sexual que
estudiantiles contra la violencia de género que le otorgan se remontaban muchos años atrás. Poco después, la Uni-
liderazgo en esta lucha. El tema fue planteado por primera versidad de California creó un comité para investigar los
vez a fines de la década de 1970, cuando estudiantes de procedimientos de la universidad ante los casos de profe-
sociología formaron Mujeres Organizadas Contra el Acoso sores que enfrentan cargos de abuso sexual.
Sexual (WOASH, por su sigla en inglés), un grupo de muje-
res que decidió actuar en representación de las trece de- La lucha contra la violencia sexual en los campus de las
nuncias de estudiantes contra un profesor de sociología. universidades estadounidenses involucra tanto el activis-
Por ser una de las primeras experiencias, ayudó a romper mo social como cambios legales. Las protestas de WOASH
el silencio sobre la violencia de género en la educación de 1979 fueron cruciales para crear el contexto, sentando
superior en los Estados Unidos y abrió nuevos espacios un precedente mediante la visibilización del tema y la pre-
para la lucha contra el acoso y los abusos sexuales en las sentación de denuncias contra los acosadores y contra las
universidades. universidades que los toleraban. Las manifestaciones ayu-
daron a cambiar la cultura de campus, elevando la con-
La denuncia federal de 1979 que WOASH presentó con- ciencia pública en todo el país y creando una cultura de
tra la universidad constituye una de las primeras instancias respeto y tolerancia cero ante el acoso sexual por parte de
en las que se utilizó el Artículo IX como marco legal contra cualquier miembro de la universidad. El abuso sexual en
los abusos sexuales en la academia. Pero WOASH no se los campus universitarios se reconoce actualmente como
detuvo allí. Dos años después creó las primeras guías de un problema para toda la comunidad – un cambio que per-
orientación para los estudiantes que ingresaban al cam- mite a los supervivientes acudir a mecanismos formales e
pus, con materiales diseñados para ayudarlos a identificar informales de contención.
el acoso sexual, resumen de las conductas que no serían
toleradas por la universidad e información para las vícti- El activismo estudiantil continúa desafiando y mejorando
mas sobre dónde procurar consejo o hacer denuncias en las políticas del campus de Berkeley – en una tradición
caso de una conducta inaceptable. que puede verse en funcionamiento, por ejemplo, en la
principal entrada del campus, donde los estudiantes pu-
Para la década de 1990, tanto el número de denuncias blicitan sus distintas preocupaciones sociales. Incluso en
como de políticas y recursos para los supervivientes, así el autobús a Berkeley se pueden escuchar conversaciones
como oficinas dedicadas a prevenir y solucionar los casos sobre el acoso sexual. En el campus suele verse los estu- 38
de acoso sexual en los campus, se habían incrementado diantes manifestándose, y cerca del edificio administrativo
significativamente. En 2003 se introdujo el “no significa puede encontrarse una “exhibición” de camisetas pinta-
no” en la Ley de Abuso Sexual Criminal, con el fin de es- das con diversas consignas contra la violencia de género.
tablecer el “consenso” como un prerrequisito para la ac- Las conferencias sobre abuso sexual son ahora una acti-
tividad sexual. vidad común en los campus, y los periódicos estudiantiles
publican las últimas noticas sobre violencia de género en
A principios del 2010, una nueva generación de estu- primera plana.
diantes activistas de todo el país declaró que las universi-
dades no se tomaban en serio las denuncias y por lo tanto En los Estados Unidos la campaña contra el acoso sexual
violaban el Artículo IX. Se presentaron denuncias contra se ha llevado a cabo en encuentros locales y nacionales,
las universidades estadounidenses, acusándolas de no así como a través de una asociación nacional dedicada
proteger adecuadamente al estudiantado contra la violen- a este esfuerzo. Una campaña notoria, fundada por su-
cia sexual. En 2013 la Legislatura del Estado de California pervivientes y activistas, levanta la consigna Terminemos
exigió a la UC Berkeley que revisara sus políticas sobre con las violaciones en los campus. Otras iniciativas son
acoso y abuso sexual; un año después las estudiantes pre- un programa de televisión de la UC Berkeley, A look into
sionaron a favor de una ley de consenso “Sí significa Sí” sexual assault [Un mirada sobre el abuso sexual]; un do-
para los campus universitarios, que requiere un acuerdo cumental titulado The Hunting Ground [El coto de caza]; o
afirmativo, consciente y voluntario para cualquier contacto libros y novelas como “Again and again” [Una y otra vez].
sexual, reconociendo que las víctimas no siempre pueden Dentro de la esfera política, el gobierno de los Estados
decir “no”. Unidos abrió un sitio web llamado “Not Alone, Together
Against Sexual Assault” [No estás sola/o, juntos contra el
En 2015 el activismo estudiantil se hizo más visible que abuso sexual] en la que se publican recursos, información,
nunca, creando un contexto de solidaridad y apoyo en toda legislación y datos útiles para escuelas, estudiantes y todo
la comunidad universitaria e impulsando a sus integrantes aquél interesado en la cuestión. La propia Casa Blanca y el
a actuar contra la violencia de género. Recientemente, la Consejo Nacional de Líderes de los Campus promovieron
presión social ejercida por el cuerpo docente y los miem- la campaña Depende de nosotros para concientizar, preve-
bros del departamento de astronomía persuadieron a un nir y responder ante los abusos sexuales, considerándolos
famoso profesor de Berkeley, candidato al Premio Nobel, un problema nacional. El gobierno llama a no quedarse al

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DG VOL. 6 / # 3 / SEPTIEMBRE 2016
margen, sino a comprometerse y ser parte de la solución. que se comprometen con esta lucha, pudiendo enfrentar
Depende de nosotros pretende generar un cambio cultural serias represalias si lo hacen. La red fue creada por los ac-
en torno al abuso sexual en los campus universitarios y tivistas y supervivientes de la primera denuncia presentada
proveer a cada víctima los recursos que amerita. contra un profesor universitario por acoso sexual. Teniendo
que hacer frente a la falta de respuestas institucionales,
Las acciones llevadas a cabo por estudiantes de Berke- decidieron movilizarse por su cuenta, contactar los medios
ley y de otras universidades estadounidenses no sólo han de comunicación y convertirse en una red de referencia
cambiado las respuestas institucionales frente al acoso para todas aquellas estudiantes y supervivientes del abuso
sexual, sino que han influenciado a movilizaciones estu- sexual universitario. La red ha sido reconocida como una
diantiles a nivel global. Como mencionamos, las fuertes “buena práctica” por parte del Ministerio de Sanidad, Ser-
redes de solidaridad entre supervivientes son clave en todo vicios Sociales e Igualdad de España.
el mundo y acelerarán el progreso de esta lucha. Por ejem-
plo, en España han surgido campañas estudiantiles en los El movimiento social y el activismo de estudiantes es-
últimos años, a pesar del silencio impuesto por las estruc- tadounidenses en torno a la violencia de género han ins-
turas feudales y las amenazas de represalias por parte de pirado estudiantes de los campus de España y de otras
los agresores. La Red Solidaria de Víctimas de Violencia de partes del mundo. Estos movimientos, apoyados por un
Género en las Universidades está impulsando actualmen- fuerte compromiso público, jugarán un rol fundamental en
te un fuerte movimiento en toda España. De todas formas, la construcción de las universidades que merecen las ge-
incluso en estos tiempos son muy pocos los profesores neraciones futuras.

Dirigir toda la correspondencia a Ana Vidu <ana.vidu@ub.edu>


y Tinka Schubert <tschubert@ub.edu>

1
La investigación para este artículo fue llevada a cabo durante una visita de Ana
Vidu a la Universidad de California, Berkeley, y de Tinka Schubert al Centro de
Estudios de la Universidad de la Ciudad de Nueva York.

39

DG VOL. 6 / # 3 / SEPTIEMBRE 2016


> La tercera vía
de Mondragón:
respuesta a Sharryn Kasmir
por Ignacio Santa Cruz Ayo, Universidad Autónoma de Barcelona, España, y Eva Alonso,
Universidad de Barcelona, España

C
omo investigadores abocados al estudio de
cooperativas, nos gustaría agradecer a Diálo-
go Global por abrir el debate y permitirnos res-
ponder la evaluación de Sharryn Kasmir sobre
la cooperativa Mondragón, publicada en Diálogo Global
6.1 (marzo de 2016).

Los comentaristas críticos de cooperativas como la


famosa Mondragón de España, suelen argumentar que
“enfrentadas a la competencia, las cooperativas devie- 40
nen empresas capitalistas, o fracasan”. Dado que Mon-
dragón claramente no está fracasando, muchas críticas,
incluyendo la de Kasmir, intentan poner en evidencia su
degeneración en una firma capitalista estándar con preca-
rias condiciones laborales. La crítica suele contar con dos
elementos: la proliferación de trabajadores temporales y la
expansión internacional de empresas subsidiarias no coo-
perativas. En este artículo ofrecemos algunas pruebas de
que, en vez de abandonar sus principios cooperativos, los
miembros de Mondragón ven estos desafíos como oportu-
nidades para fortalecer y ampliar su modelo. En nuestras
propias investigaciones identificamos una tercera vía para
el cooperativismo: el modelo de cooperativa competitiva
no capitalista.

Por más de 60 años la creación de empleos sustentables


y de calidad ha sido el objetivo central de Mondragón. Se-
Un mural en la ciudad de Mondragón. gún su informe anual de 2014, la empresa nuclea actual-
Foto por Christian Weber. mente unas 263 organizaciones, incluyendo 103 cooperati-
vas y 125 compañías productivas subsidiaras. En conjunto,
el grupo es responsable por 74.117 empleos. A lo largo de
toda su historia, Mondragón ha sido capaz de crear y man-
tener empleos incluso durante las recesiones económicas,
convirtiendo cada puesto, cuando fuese posible, en perma-
nente. Hoy en día la mayoría de los empleos no cooperati-
vos se encuentran en tres áreas: el sector de la distribución,
las subsidiarias industriales españolas y las internacionales.

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DG VOL. 6 / # 3 / SEPTIEMBRE 2016
El alcance global de las cooperativas Mondragón.

Mondragón apela a tres estrategias distintas para con- muestran un incremento en el porcentaje de trabajadores
vertir los trabajos temporarios en cooperativos. En el sector que se integran como miembros. Según Altuna (2008),
de distribución se utiliza el plan EMES (Estatuto Marco de en 2007 los miembros llegaban a un 29,5% de los em-
la Estructura Societaria). Eroski, el grupo de distribución pleados. Para 2012 los miembros conformaban cerca de
de Mondragón, adquirió otro grupo (Caprabo) y luego fu- 40,3% del total de la fuerza de trabajo.
sionó los supermercados de ambos. En 2009 la asamblea
general de Eroski aprobó el plan EMES, y otorgó a todos En 2003, el Octavo Congreso de Mondragón decidió que
los empleados la oportunidad de asociarse en cooperati- el principal objetivo del grupo sería expandir los valores
vas de trabajadores. A pesar de que este plan está todavía cooperativos, promoviendo la participación (en la adminis-
vigente, la cooperativa Eroski se encuentra en una situa- tración, la inversión y los beneficios) a través de la exten-
ción difícil: enfrenta enormes pérdidas y está en un proce- sión del Modelo Corporativo de Gestión de Mondragón a 41
so interno de restructuración para reducir y refinanciar la las subsidiarias internacionales. A pesar de ser un esfuer-
deuda acumulada. No es, por lo tanto, el mejor contexto zo bien intencionado, son muchos los obstáculos que se
para invitar trabajadores no cooperativistas a convertirse interponen en el camino. La conversión de estas compa-
en miembros. ñías al modelo de negocios cooperativo supone barreras
económicas, legales y culturales conocidas (Flecha y Ngai,
Una segunda estrategia consiste en la conversión de 2015). Por ejemplo, algunos marcos legales nacionales no
las subsidiarias industriales en cooperativas mixtas, per- reconocen los modelos cooperativos, muchos trabajado-
mitiendo a los trabajadores integrarse como miembros. Se res no cuentan con los recursos económicos para volverse
trata de una alternativa que sólo es factible en caso de que miembros y, en algunas subsidiarias, los trabajadores no
las compañías sean viables y que tanto los socios coope- comprenden el significado mismo de una cooperativa. La
rativos como los trabajadores de la subsidiaria estén de cultura de Mondragón surgió en el País Vasco hace sesen-
acuerdo con extender la membresía. Esto ha ocurrido en ta años y fue transmitida de generación en generación.
varios casos: la Maier Ferroplast Limitada, que pertenecía Transferir esta cultura a otro contexto no es sencillo. De
a la Sociedad Cooperativa Maier (2012); la cooperativa todos modos, se han alcanzado algunos éxitos. Por ejem-
Victorio Luzuriaga Usurbil (2004); Fit Automotive (2006) y plo, Ángel Errasti (2014) describe la integración de los re-
la cooperativa Victorio Luzuriaga Tafalla (2008). Estos no presentantes sindicales al Consejo Administrativo de una
son ejemplos inusuales ni aislados de cómo cooperativizar subsidiaria de Fagor Electrodomésticos en Polonia, lo que
subsidiarias industriales. implica un avance en la participación de los trabajadores
en la gestión de la compañía.
La tercera estrategia involucra las subsidiarias interna-
cionales fuera del País Vasco, que representan la supuesta Mondragón plantea numerosos y complejos interrogan-
degeneración del modelo cooperativo. El grupo ha creado tes sobre el rol de las cooperativas en la actual econo-
subsidiarias en el extranjero buscando mantener y expan- mía competitiva global. Sus cooperativas deben operar en
dir el empleo de las cooperativas madres. Desde este pun- un mundo competitivo por lo que, en ciertas ocasiones,
to de vista, esta estrategia ha sido exitosa, en la medida fracasar en la internacionalización podría poner en ries-
en que la internacionalización ha generado más empleos go la oportunidad de crear nuevos empleos en España y
de los que se mantuvieron en el país de origen. Al con- el extranjero. Aunque las empresas cooperativas son mi-
trario de lo que afirman algunos críticos, las estadísticas noría y las compañías capitalistas imponen las reglas del

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mercado, esto no implica que haya un único camino para su descendencia pueda tener acceso a empleos coopera-
sobrevivir en la economía globalizada. El grupo Mondra- tivos como los suyos, a la vez estables y de calidad. Este
gón ha logrado encarar la internacionalización de forma principio de creación de empleos sustentables y de calidad
innovadora. Cuando crea subsidiarias en el extranjero, la se transfiere también a las subsidiarias internacionales. En
prioridad de Mondragón ha sido mantener los empleos y este sentido, Luzurraga e Irizar (2012) muestran que ade-
preservar las cooperativas locales, en lugar de tercerizar la más de cumplir con las regulaciones locales y nacionales,
producción o desplazarla hacia el extranjero. las subsidiarias han mejorado las condiciones laborales,
por ejemplo, en salarios y oportunidades de capacitación.
Además, Mondragón ha sido exitosa en mantener mejores A pesar de no haber sido capaz de cambiar las dinámicas
condiciones laborales que otras cooperativas o compañías del capitalismo global, el movimiento cooperativo de Mon-
capitalistas. Incluso sus críticos reconocen esta contribu- dragón continúa su histórico esfuerzo por crear un mundo
ción, y es bien conocido el deseo de sus miembros para que mejor para los trabajadores y sus comunidades.

Dirigir toda la correspondencia a Ignacio Santa Cruz Ayo <Inaki.SantaCruz@uab.cat>


y Eva Alonso <eva.alonso@ub.edu>

Referencias
Altuna, L. (ed.) (2008) La experiencia cooperativa de Mondragón, una síntesis gene-
ral. Eskoriatza: Lanki–Huhezi, Mondragon Unibertsitatea.

Errasti, A. (2014) “Tensiones y oportunidades en las multinacionales coopitalistas


de Mondragón: El caso Fagor Electrodomésticos, Sdad. Coop.” Revesco: Revista de
Estudios Cooperativos, 113: 30-60.

Flecha, R. y Ngai, P. (2015) “The challenge for Mondragon: Searching for the coope-
rative values in times of internationalization.” Organization, 21 (5): 666-682.

Kasmir, S. (marzo 2016) “Las cooperativas Mondragon, éxitos y desafíos”. Diálogo


Global 6.1.

Luzarraga, J.M. e Irizar, I. (2012) “La estrategia de multilocalización internacional de


la Corporación Mondragón.” Ekonomiaz, 79: 114-145.

42

DG VOL. 6 / # 3 / SEPTIEMBRE 2016


> Traduciendo
Diálogo Global
al rumano
por Costinel Anuta, Corina Bragaru, Anca Mihai, Oana Negrea, Ion Daniel Popa y Diana
Tihan, Universidad de Bucarest, Rumania

43

El desafío de traducir Diálogo Global


al rumano.

E
ste artículo describe la génesis y estructura ral, y por las profesoras Cosima Rughiniș e Ileana-Cinziana
del equipo editorial rumano de Diálogo Glo- Surdu, quienes ayudaron al equipo a desarrollar su pro-
bal, centrándose en su desarrollo y proceso ceso de producción. Ileana guió el equipo en cada paso y
de trabajo, así como en algunas prácticas contribuyó enormemente a darle forma a sus operaciones
idiosincráticas del equipo. actuales.

El equipo editorial rumano fue iniciado por el profesor Luego de recibir las versiones en inglés de los artículos
Marian Preda, quien alentó a estudiantes de posgrado a de Diálogo Global, el equipo envía invitaciones a colegas
involucrarse en esto como parte de su formación docto- que ya han estado en el grupo editorial y a estudiantes
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DG VOL. 6 / # 3 / SEPTIEMBRE 2016
del programa de posgrado en sociología de la Universidad gía adecuada para conceptos relativamente nuevos como
de Bucarest. Entre los incentivos más convincentes para “trickle down” economy, que encontramos en uno de los
unirse al equipo cuenta la experiencia en la práctica de artículos del número 5.4. Estos desafíos provienen de la
habilidades sociológicas y lingüísticas para la lectura, el diferencia estructural entre el inglés (una lengua germá-
procesamiento y la traducción de cada artículo – con el nica) y el rumano (una lengua latina), dos idiomas que a
incentivo adicional de la membresía estudiantil en la ISA veces utilizan reglas de sintaxis y orden de palabras que
luego de haber colaborado en cinco números. entran en conflicto. Los calurosos debates sobre qué pa-
labras o frases serían la mejor traducción ofrecen buenas
Una vez que los borradores en inglés son subidos a oportunidades no sólo para refrescar nuestro inglés, sino
una carpeta de Dropbox, los artículos se traducen en las también para pulir el uso de nuestro propio idioma nativo.
siguientes dos semanas. Se le solicita a cada traductor A veces luchamos por encontrar frases en rumano para
que se ocupe de una cierta cantidad de páginas, gene- conceptos sociológicos que son bastante nuevos – un
ralmente entre cuatro y diez, dependiendo de la edición. debate que normalmente se resuelve cuando un volunta-
La tercera semana supone un proceso de revisión por pa- rio puede traer evidencia de que un sociólogo rumano ha
res en el cual cada miembro del equipo revisa un artículo utilizado una versión traducida de los términos en inglés.
previamente traducido por otro colega. Las versiones en Por lo tanto el desafío de la traducción nos ayuda de dos
inglés y en rumano de los artículos son permanentemente maneras: mejora nuestra competencia lingüística y forta-
comparadas, con el objeto de captar mejor el significado y lece al mismo tiempo nuestro conocimiento sociológico
estilo originales del texto. Durante la cuarta semana, otro general. Llegar a la fecha límite de las traducciones, mien-
miembro del equipo, implicado recientemente en el pro- tras aún debatimos cuestiones teóricas, es otro desafío
ceso, revisa cada artículo, buscando mantener compatibi- – especialmente dado que todos los miembros tienen que
lidad entre los artículos (por ejemplo, homogeneizando los cuadrar su trabajo en Diálogo Global dentro de sus agen-
estilos de citación de la revista; decidiendo qué sinónimo das académicas y profesionales.
queda mejor), y finalmente, el equipo corrige y edita los
artículos en rumano. Dada la gran variedad de temas cubiertos por la revista,
unirse a la familia de Diálogo Global requiere de conside-
Aun así, las cosas no siempre se desarrollan fluidamen- rable experimentación con varias culturas académicas y
te: cada uno de nosotros ha tenido que trabajar sobre locales. A lo largo del proceso de traducción, cada miem-
habilidades sociales, incluyendo la paciencia y la adapta- bro del equipo aporta su experticia para que cada número 44
bilidad. Uno de los desafíos más espinosos ha sido repro- de la versión rumana sea el fruto de una participación en-
ducir el significado del original inglés en un rumano fluido tusiasta, interés genuino y máxima dedicación.
y natural; a veces, hemos tenido que acuñar terminolo-

Dirigir toda la correspondencia a:


Costinel Anuța <costinel.anuta@gmail.com>
Corina Brăgaru <bragaru_corina@yahoo.com>
Anca Mihai <anca.mihai07@gmail.com>
Oana Negrea <oana.elena.negrea@gmail.com>
Ion Daniel Popa <iondanielpopa@yahoo.com>
Diana Tihan <tihandiana@yahoo.com>

DG VOL. 6 / # 3 / SEPTIEMBRE 2016

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